Instituto Tecnológico de Tuxtepec

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SEGUIMIENTOSEMANALDELALECTURA

ALUMNO: Montalvo Uscanga Justin NO. DE CONTROL:_20350526_

CARRERA: ING. Electromecanica
SEMESTRE:_6 GRUPO:_A_ FACILITADOR: Jorge luis Espinoza Hernandez
TÍTULO DEL LIBRO: Lo que la universidad no enseña
AUTOR: _Iñigo Garcia Ureta EDITORIAL:

Fecha de inicio de la lectura : 25 de marzo del 2023 Fecha de la conclusión: 5 de abril del 2023

FACILITADOR: Jorjge Luis EspinozaHernandez

EN CLASE O EN CASA: En casa DÍA7 de abril del 2023
PÁGINAS LEÍDAS. Desde: inicie en la pagina 56 Hasta pagina del numero 69
RESUMEN

Se llama Beatrix Kiddo, pero todos la conocen como La Novia.No es la primera vez que la dan por muerta, pero en esta ocasión la han enterrado viva.Por
fortuna tiene una navaja barbera y se las arregla para cortar la cuerda que le ata las manos.Ahora sólo le queda salir de ahí antes de que se le acabe el
aire, algo de lo que ni tú ni yo seríamos capaces sin ayuda.Pero ella lo hará, porque tuvo un gran maestro: Pai Mei, un chino cruel con moño, cejas
pobladas de canas y una perilla blanca que le llegaba casi al ombligo.adiestró en la «técnica de los cinco puntos de presión para hacer explotar un
corazón».El «golpe corto»: el arte de romper una tabla golpeándola a menos de diez centímetros de distancia.Para lograr que La Novia dominase dicho
golpe, Pai Mei se comportó como un auténtico cerdo: la atizaba con un palo, la obligaba a acarrear cubos de agua por un tramo de escalones
especialmente empinado y, cuando ella —con los nudillos hechos trizas de tanto estamparlos contra la madera— no lograba empuñar los palillos para
comer el arroz del cuenco que tenía delante, él le arrojaba la comida al suelo.Ella no sólo sufrió en sus carnes: por la noche la despertaban las pesadillas
en las que golpeaba una tabla con la mano sin lograr quebrarla.La Novia —nada más y nada menos que Uma Thurman en Kill Bill 2, de Quentin
En las siguientes páginas veremos que incluso en dichas circunstancias nos toca mover el culo.Hoy la palabra prodigio sirve para designar a quien
domina una disciplina desde niño, o al que despunta en un campo determinado.Así, Mozart fue un niño prodigio que tocaba varios instrumentos como
un virtuoso y componía obras musicales, del mismo modo que Lionel Messi es un prodigio del fútbol, pues mete goles allá donde parece imposible colar
el balón.Sin embargo, en su origen latino, la palabra prodigium definía un suceso extraño que excede los límites regulares de la naturaleza.
Hay un proverbio tibetano que reza: «Incluso cuando fracasas nueve veces en algo es porque te has esforzado nueve veces en algo».Este religioso les
recordaba que, además de la fe, necesitarían esforzarse para alcanzar sus metas.Y esforzarse en este caso significa responsabilizarse por hacer lo que
toca.español «A Dios rogando y con el mazo dando» describe a la perfección: el destino sólo ayuda a quienes mueven el culo por cumplir con lo que está
en sus manos hacer.Eso es algo que siempre tuvo muy claro nuestro siguiente invitado.A pesar de cumplir con todos los estereotipos de lo que
entendemos por un internado británico (escudo, tradiciones, uniforme.), Harrow no se parece en nada a Hogwarts, el internado de Harry Potter.El 29 de
octubre de 1941 un antiguo alumno acudió a hacer una visita.Escuchó las viejas canciones que cantaron los escolares y pronunció unas palabras.Aquel
antiguo alumno era entonces primer ministro, y su país estaba en guerra.Y, aunque destacó en Esgrima e Historia, su expediente académico dejó
bastante que desear ya desde el primer día, en que dejó en blanco el examen de admisión en la asignatura de Latín y le enviaron a la clase para alumnos
poco aventajados.una carrera profesional irregular, con altibajos en las décadas de los años veinte y treinta del siglo pasado.Antes de ser nombrado
primer ministro fue soldado, escritor y corresponsal de guerra.Como escritor acabó recibiendo el premio Nobel de Literatura en 1953, pero no se le
recuerda por sus libros.Como soldado luchó en Sudán, aunque también se vio envuelto en otras contiendas, como la segunda guerra de los bóers, en
Sudáfrica, donde fue apresado y logró escapar.Como político cambió de partido, ganó y perdió elecciones, y tomó algunas decisiones equivocadas, como
el desembarco de Galípoli durante la Primera Guerra Mundial, que acabó siendo una auténtica carnicería.A principios de la década de los treinta del siglo
pasado, su figura despertaba desconfianza.Se le veía como alguien carente de buen juicio y estabilidad, se le imaginaba impaciente, sin disciplina, con
métodos de guerra de guerrillas.Se le consideraba también dotado de una gran inteligencia, alguien que se rodeaba con excesiva frecuencia de otros
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FACILITADOR: Jorjge Luis EspinozaHernandez

EN CLASE O EN CASA: En casa DÍA: 7 de abril del 2023
PÁGINAS LEÍDAS. Desde: inicie en la pagina 73 Hasta pagina del numero 82
RESUMEN
El cine nos ofrece un gran número de citas sobre la práctica política. Por ejemplo, un personaje de "La caza del Octubre Rojo" que dice: "Mira, soy político, lo
que significa que hago trampa y miento". Vale, pero además de alcantarillado, alcantarillado, educación, vino, orden público, irrigación. , caminos y baños
públicos, ¿qué hicieron los romanos por nosotros?" O un comediante nominado a Hombre del Año que comenta: "Los políticos son como pañales. Deben
cambiarse con frecuencia y por las mismas razones. O la respuesta que dio el congresista Charlie Wilson durante la guerra, cuando se le preguntó por qué el
Congreso de Estados Unidos dice una cosa y hace lo contrario: "Bueno, más que nada por tradición". O mi favorita, la cita que termina La escopeta nacional: "Y
no eran felices, y no comían perdices, porque donde hay curas es imposible un final feliz". Si nos preguntaran por el carácter moral de estos oradores, todos
diríamos que son completamente cínicos, y las citas en sí mismas son perfectos ejercicios de cinismo. Porque si queremos dar un paso más y explicar por qué
estos personajes nos parecen cínicos, o por qué estas citas son un claro ejemplo de cinismo, llevaría mucho tiempo encontrar una respuesta sólida y
convincente. Hablar de cinismo y cinismo sin ambigüedades es tan difícil como explicar qué es el amor, el arte o la poesía. El problema de las definiciones es
que siempre vemos una pluma: crees que tienes una idea clara y precisa, pero solo tienes que intentar ponerla en palabras, y esas -palabras- te agrandan siete
suéteres. , y ahora una idea tan clara y precisa, tiene una camiseta extra por todas partes. Por eso nos pone nerviosos hablar en público porque sospechamos
que alguien podría cuestionar si realmente sabemos lo que acabamos de decir. Puede que no sea reconfortante, pero también les sucede a los profesionales.
Ellos, más que nadie, tiran frases aquí y allá que nos dejan tan confundidos como antes. Así, en frases como "amar es nunca disculparse", "el arte es ante todo
un estado de ánimo" y "la poesía eres tú", podríamos sustituir "amor" por "odio", "arte". " con "ridículo". "y
Cuando hablamos de cinismo y cinismo, sucede exactamente lo mismo. CÍNICO CONTRA EL CINISMO
Todos creemos tener una idea bastante clara de lo que es ser un cínico. Tres escritores lo definieron así: "Cínico, s.: un desgraciado cuya mala vista le hace ver
las cosas como son, y no como deberían ser". "Un cínico es un hombre que conoce el valor de todo y no valora nada". "Un cínico es un hombre que
inmediatamente busca un ataúd cuando huele flores".
La primera definición pertenece a una persona que también afirmó lo siguiente: "Un egoísta es una persona que piensa más en sí misma que en mí". Otro que
también decía: "Pesimista es el que, eligiendo entre dos males, elige los dos". Tercero a alguien que agregó esto: "Nadie se interpuso en el camino
subestimando la inteligencia de las masas". A primera vista, los tres parecen completamente cínicos, ¿no? Aunque cualquiera que lea atentamente sus obras -
son Ambrose Bierce, Oscar Wilde y Henry Louis Mencken- encontrará que más
Bueno, eran tres escritores con un bien definido sentido del bien y del mal que en realidad se disfrazaron de lobos para ocultar su lado moralista. De hecho, el
propósito de este capítulo no es hablar de nada, sino tratar de averiguar qué tipo de cinismo debe sentir el enemigo. Así que empezamos por eliminar a los
cínicos y nos enfocamos en el cinismo mismo para evitarlo, porque evitamos morir de hambre. Porque el cinismo, como el hambre, puede atacar a cualquiera
sin excepción. Y porque el cinismo, como el hambre, tiene cura. La definición del diccionario de la Real Academia de España dice:
La doctrina de los cínicos (pertenece a la escuela de los discípulos de Sócrates). Según esta definición, el cinismo es 1) atreverse a mentir a sabiendas y 2)
hacer y decir cosas vergonzosas y reprobables. Uno de los desafíos a los que no soy inmune es tratar de decir las cosas con la menor cantidad de palabras
posible. Mientras que, como vimos antes, pee es un comando para definir algo
día y no tendrá un gran impacto, no quiero dejar pasar la oportunidad de hacer mi modesta contribución al estudio del cinismo. Así que ofrezco mi propia
propuesta de definición, porque en el peor de los casos siempre puedo argumentar que fue al menos breve. Eso sí, no estamos hablando de especificidad. Lo
que no es lo mismo que ser gracioso no es lo mismo que ser gracioso. Todos, sin excepción. Uno de los muchos aspectos de la vida brilla con particular
intensidad en cada uno de nosotros. Nos sonríe con los ojos y el mundo parece mejor. Creerse especial puede parecer trivial, pero lo más común es que se
actúe en consecuencia. Digámoslo de nuevo, para que no quede duda: no importa cuán especial sea alguien que se crea especial, siempre llegará un
momento en que actuará en consecuencia. Se permiten licencias y se arroga derechos exclusivos, no a otros mortales. No hace falta ser adivino para ver que
las cosas siempre se complican. Porque cualquiera que se cree especial se convence de que todos los demás son estúpidos... Usamos expresiones como
"tenemos mucho" o "somos tan engreídos" todos los días. es por algo Hemos estado allí antes. OBAMA Y EL CINISMO
En 2008, en plena carrera por la Casa Blanca, Barack Obama era el político que más interesaba al electorado estadounidense: no era hijo de nadie, no tenía un
nombre bien establecido, no era blanco, tenía abrazó las nuevas tecnologías -nunca se le vio sin su BlackBerry- y pareció saber sembrar esperanza en un país en
crisis.