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Soy Persona

ENCUENTROS CON CRISTO

6 años
SEGUNDA PARTE
PREPARACIÓN

Para que el encuentro dé el mejor fruto se debe preparar muy bien. Se debe preparar al equipo
que lo va a dirigir y al grupo.

1. Preparación del equipo director

Los que forman el equipo se deben preparar espiritualmente; van a comunicar a Dios, van a influir
en los niños, deben tomar conciencia de esto y de la importancia de no hablar sólo con palabras,
sino con toda su vida.

Las personas que integran el equipo son:

El Organizador
Es el responsable de hablar con la maestra, de preparar al grupo: orientarlo y entusiasmarlo.
El consigue la casa de ejercicios o el lugar donde va a ser el encuentro. En el lugar donde
va a ser el encuentro debe haber: 1) Capilla; 2) un salón para que escriban y dibujen los niños a ser
posible con mesitas y sillitas; 3) otro salón más amplio para formar los dos círculos concéntricos: el
de las sillas para los papás y el interior con las sillitas para los niños; 4) lugar para preparar las
escenificaciones por equipos.
El organizador hace la circular a los papás, donde los invita y los orienta sobre el
encuentro.
El busca y motiva a las madrinas, una para cada equipo. A ser posible, que no sean
mamás de los niños del grupo, para que las mamás puedan asistir a las reuniones de padres.
Se encarga de que la maestra asista.
El debe revisar todo lo que se necesita, y es el responsable de que esté todo listo el día del
encuentro.
Se pone de acuerdo con el director y con el sacerdote.
Es responsable de que el trabajo posterior se continúe.

El Director
Debe conocer el encuentro y los detalles. Conviene que asista antes a uno bien llevado y que lea
con cuidado este folleto.
Debe leer el análisis de los chicos y saber cómo hablarles, preguntarles y tratarlos.
De su conocimiento de los niños y de su manera de tratarlos va a depender mucho el
fruto.
Conviene que lea el folleto sobre la pedagogía de los encuentros.
Debe ir dirigiendo con intervenciones claras, breves, oportunas. El grupo debe sentirlo
amigable y seguro. Debe mantener el orden que puede llevarse a esta edad con firmeza, pero con
paciencia y bondad.
El director es el que da el ambiente del encuentro. Este ambiente debe ser agradable, de
confianza, de cercanía con Dios y de orden.
Si un grupo dirige, en el grupo debe haber una cabeza y los niños deben saber quién es.
Conviene que el director conozca el encuentro como para no necesitar tener el manual en
la mano.

El sacerdote
A los niños les gusta que un sacerdote dirija el encuentro, y es preferible si conoce bien el
encuentro, se sabe adaptar a estos niños y puede estar todo el tiempo.
Si no puede asistir a todo el encuentro, conviene que el organizador o el director le
explique bien cómo es, para que la misa armonice con toda la experiencia. Esta misa puede ser
para los niños un bello recuerdo, si se adapta a 6 años.

Las madrinas
En general es de mejor que haya madrinas; a los padrinos les es más difícil trabajar en serio con
estos niños.
Es mejor que las madrinas no sean mamás de los niños.
Conviene que el organizador seleccione a las madrinas y las prepare.
Las madrinas deben conocer un poco el encuentro y saber lo que harán. En el horario
están marcadas sus actividades. Ellas se van encargar de que el equipo trabaje bien. Están con su
equipo, lo animan, lo ordenan en sus grupos; no en las reuniones generales.
Las madrinas deben ir preparadas a una convivencia continua con sus niños; no deben
dejarlos para conversar con otras señoras.
Conviene que los que van a dirigir el encuentro conozcan el objetivo y el engranaje de
ideas que está al final de esta segunda parte.

2. Preparación del Grupo

Es importante preparar al grupo, motivarlo a un encuentro con Dios, para saber qué nos quiere
comunicar y cómo quiere que nos portemos.
Conviene que vayan uniendo el encuentro con lo que se les da en clase de formación
religiosa.
Conviene hacer un cartel que anuncie el encuentro y decirles que va a estar muy bonito.
Sugerencia de circular

Estimados padres de familia:

Gracias a Dios vamos a tener el encuentro con Cristo para el grupo donde está su hijo(a).
Los objetivos del encuentro van a ser:

 Que los niños vivan una experiencia muy especial del encuentro con Dios, con sus papás y
con ellos mismos.
 Que tomen mayor conciencia de ser personas, de su crecimiento como personas y del
trato que como tales deben darse.
 Que sus papás conozcan este camino de formación para que lo valoren y apoyen.
 Que juntos podamos ver con más claridad líneas de formación y así nos apoyemos
mutuamente.

Queremos tener este encuentro pensado para niños con sus papás con el mayor número de
niños del grupo. Sabemos que es una molestia el venir toda la mañana, pero sabemos también del
buen fruto que se logra no solo en los niños, sino en sus papás también. Por esto pedimos su
asistencia.
Como este encuentro es para niños y papás, si un niño viene solo se va a sentir mal. Por esto
pedimos que lo acompañen. En caso de que no puedan hacerlo envíen un representante, como su
abuelita o tía. Pero es mucho mejor que vengan sus dos papás.

El encuentro será de 5 horas, de…. A…. Será en…. Lo dirigirá…. Les rogamos sean puntuales.

Que los niños traigan lápiz colores, borrador y ustedes su pluma.


Agradecemos que traigan a su hijo(a) al encuentro. Va a ser muy importante para su
formación personal, social y cristiana. Va a ser de influencia en el futuro del grupo. Nos apenaría
mucho no verlos acá.

El Organizador La Maestra

Nota: Se puede añadir algún motivo especial en ese colegio, se puede indicar si se pide algo de
dinero y para qué. El dinero que se pide a los niños es aparte y no se debe pedir a los papás, pues
se trata que lo ahorren los niños.
Reunión previa

Esta reunión se debe hacer unos días antes del encuentro.


En esta reunión se les explica a qué van al encuentro y se les hace ver que no es un día de
campo.
Se les motiva a que pidan a sus papás que asistan al encuentro y que pidan por ellos por la
familia, para que el encuentro sea una gracia para su hogar.
Para este encuentro no se forman equipos. Sólo se necesita para las escenificaciones y allá
se forman en el momento que salen a prepararlas.
Tampoco a esta edad conviene ponerles gafete con su nombre, pues muchos se
suelen estar distrayendo con él.
En lo que hay que insistir es en que quieran vivir una experiencia muy importante para
aprender más sobre sí mismos y ser mejores con los demás.
No se trata sólo de entusiasmarlos a ir al encuentro, sino de enfocarlos a una experiencia
de importancia.

Lo que se debe llevar

Cada uno debe llevar:

Colores, lápiz y lo necesario para dibujar, si la maestra no va a llevar para todos.


La ayuda, es una alcancía para una familia pobre.
Ese dinero no lo deben pedir a sus papás, sino lo deben sacar de su alcancía, o lo deben
ahorrar de lo que les dan para gastar.
El organizador debe insistir a la maestra que lo importante no es que sea mucho dinero,
sino que sea dinero que los niños pensaban gastarse. Tiene que ser una ayuda educativa.
Esta ayuda es muy importante, va a ser la limosna en la misa; va a servir para que la
maestra del grupo se ponga en contacto con una familia muy pobre y les vaya contando a los niños
los problemas que tiene y cómo le pueden ir ayudando.
Esto puede ser de gran provecho para formar la sensibilidad de los niños. Ellos son
concretos, para ellos la idea de ayudar a los pobres tiene fuerza, pero más si los pobres son
llamados por su nombre y si sus problemas son presentados por la maestra que fue a la casa de
una familia pobre, los conoció y ahora está interesada en ayudar, apoyada por el grupo.
Esta ayuda va a ser puente entre la sensibilidad de los niños que sienten los sufrimientos
de las personas, y los sufrimientos reales. Va a unir el deseo de ayudar con la ayuda real; va aunir
la ayuda con la caridad cristiana y la renuncia personal.
Va a ser causa de que la maestra sea una persona más en contacto con los más pobres y
pueda formar mejor la sensibilidad social de los niños.
Como esto ha resultado bien lo voy a poner en las próximas ediciones de todos los niños
de primaria.
El organizador debe llevar:
1. Papel. Se necesitan dos mitades de una hoja tamaño máquina para cada niño y una hoja
para cada papá.
Si en donde va a ser el encuentro no hay mesas para que los papás escriban la carta al
niño, conviene llevar tablitas, libros o algo para que se apoyen.

2. Para la misa se necesita:


 Una cesta o charola para recoger los sobres con la limosna, si no llevan la alcancía.
 Un arbolito que crezca mucho y no lentamente, será el símbolo del grupo, (si el grupo es
de preprimaria, mejor dejarlo para primero).
 Un niño Dios, no pequeñito, sino grande y lindo. En lugar de la comunión lo van a ir
recibiendo en los brazos.
 Una medalla bonita de la virgen para cada niño. Se les regala.
 Que la maestra haya visitado una familia muy pobre, para que antes del ofertorio cuente a
los niños de su visita y de la familia. Esa narración es importante en la misa.

3. Una carta de todos los niños a sus papás. La va a ir escribiendo la maestra con las
aportaciones de todos. Es una sola de todo el grupo.
4. Algo de comer y beber para media mañana. Esto es regalo de sus papás.

Es mejor con ropa sencilla, no uniformados.


En este encuentro no hay banderas ni diplomas.
El organizador debe invitar a los papás a participar con sus hijos, pues este encuentro es
de niños con papás. Creo que si ninguno de los dos papás puede venir, es penoso para el niño
asistir solo, cuando los compañeros van con sus papás. Por esto es mejor no admitir niños sin
uno de sus papás, o un representante de sus papás como su abuelita o tía.
Es muy importante que asista su maestra; si no puede asistir, es mejor cambiar el
encuentro a una fecha en que pueda.
En la circular debe quedar claro el lugar y el tiempo: de 8 a 1 p.m. Si se prevé falta de
puntualidad, citarlos 15 minutos antes. En los lugares donde las labores se inician más
temprano, se adelanta todo media hora.
Conviene invitar madrinas (una para cada equipo) y conviene que no sean mamás de los
niños de ese salón, para que puedan estar en reuniones de papás mientras los equipos
trabajan con su madrina. Si no hay madrinas, se invita a sus propias mamás. Una para cada 6.

Guardería

Como a este encuentro conviene que asistan los dos papás, algunos no tienen donde dejar a sus
otros niños más chicos o más grandes y suelen llevarlos al encuentro, lo cual daña algo la
experiencia, pues los más chicos juegan, lloran y desconcentran al grupo, y los más grandes
quieren participar o se muestran aburridos, pues no son tomados en cuenta. Por esto conviene
organizar una guardería. Chicas de secundaria se pueden encargar del cuidar y divertir a los niños,
en una parte del colegio donde no distraigan al grupo. Deben saber que van a encargarse de
juegos, dibujos, etc., para tener todo preparado.
Si se ve conveniente se anuncia la guardería en la circular y se pide que digan cuántos
niños van a traer, para que las chicas encargadas se preparen.

3. Objetivo y engranaje de ideas


Quienes van a dirigir este encuentro deben tener claro el objetivo y el sencillo proceso.

Objetivo

El objetivo de este encuentro es facilitar a los niños un acercamiento a Dios, una mejor toma de
conciencia de sus ser de personas y del trato que como tales se deben dar.
A este encuentro asisten sus papás para que apoyen a los niños en el encuentro y
después.
A muchos papás este encuentro les ayuda a entender y tratar mejor a sus niños.
A esta edad muchos niños suelen iniciar la primaria. Por esto conviene que los papás del
grupo se conozcan y conversen, sobre cómo tratar a sus hijos como personas, para ir educándolos
mejor. Este encuentro puede facilitar el que los papás se sigan reuniendo una o dos veces al año
para reflexionar juntos sobre la educación de sus niños.

Engranaje de ideas

Al llegar dibujan para que luego comprendan mejor que Dios también pensó cómo nos iba a hacer
y quiso hacernos muy bien.
En la reunión con los papás, mientras los niños dibujan, se les explica todo el encuentro
para que lo sigan con más interés.
En la primera reunión en la capilla, los niños deben comprender que Dios pensó hacer
todo bien. Pero a nosotros quiso hacernos mejor que todo lo demás: pensó en hacernos como él:
pensó hacernos personas. Como personas somos distintos de los animales porque pensamos y
amamos como personas, y porque podemos ser creativos, servirnos unos a otros y así ser felices.
La porra o barra resume todo esto y lo fija en la mente de los niños.
En la primera reunión en círculos concéntricos, los niños deben ver que las plantas
necesitan riego y los animales alimento para crecer, y que ellos, como personas, necesitan para
crecer: conocimientos, pensar y ser creativos. Para esto van a la escuela. Además necesitan recibir
amor de sus padres y dar amor, en especial a sus padres.
Las cosas que les trajeron sus padres para comer confirman lo anterior.
En la segunda reunión en círculos concéntricos, los niños deben ver que las personas que
quieren crecer como personas se deben tratar como tales. Esto lo van a confirmar con las
escenificaciones que además graban las ideas.
El mensaje adornado que escriben los niños y la pequeña carta que escriben los papás
confirman el amor que hay entre los niños y sus papás.
En la misa los niños piden perdón por no haberse portado como personas, como hijos de
Dios.
Le ofrecen a Dios crecer como personas, para esto ofrecen su arbolito.
Ofrecen la limosna y su sacrificio personal para darla; con ella ayudarán a las personas
necesitadas, nuestros hermanos. Así se pone un objetivo concreto a la natural compasión e
intento de efectividad. Se incorpora a la maestra, figura muy importante para los niños, en el
proceso de formar personas con sensibilidad social. Los niños ven que ser buenos cristianos, ir a
misa, escuchar la palabra de Dios y recibirlo, está unido con la caridad que intenta ser efectiva.
La devoción a Jesús y al devoción a maría quedan integradas en estas líneas.
Con la bendición del sacerdote al niño y a sus papás se integra más todo en la unión
familiar.
El trabajo posterior de los padres y maestra es necesario para que la semilla del encuentro
de desarrolle.

TERCERA PARTE
REALIZACION DEL ENCUENTRO

Horario

8:00 llegada
Dibujos de los niños*
Reunión de los papás

8:30 Acto inicial en la capilla


9:00 Doble circulo concéntrico
9:30 Descanso
10:00 Doble circulo concéntrico
10:30 Preparación de escenificaciones*
Reunión de papás

11:00 Escenificaciones*
11:25 Cartas*
11:40 Misa
1:00 Salida

Este horario no se debe poner en público. Se debe adaptar a cada lugar conservando la
duración de las actividades. Los (*) indican las cuatro actividades en que las madrinas trabajan con
su equipo.
Cuando hay reunión conviene iniciar con la oración en la que el director dice:
“Vamos a Trabajar” y el grupo contesta: “Por Cristo y en Cristo”.
Conviene también que griten la porra o barra.
Las siguientes páginas van a explicar la actividad.
8:00 Llegada
En la circular hay que precisar que el encuentro se inicia a las 8 a.m.; que ojalá llegue un poco
antes. No conviene citar a las 7, por que los puntuales pierden el tiempo esperando y los niños se
alocan un poco. Es mejor que vayan llegando y se les va poniendo a dibujar, aunque algunos
tengan poco tiempo para hacerlo.
Antes de que llegue el grupo se deben preparar las mesas y las sillas en el lugar donde va
a reunirse el grupo. No se debe dejar este detalle para cuando lleguen los niños, pues es malo
iniciar con la confusión del movimiento de las mesas y las sillas y con la consiguiente pérdida de
tiempo y paz.
En las mesas deben estar las hojas cortadas por la mitad, media hoja para cada niño, los
colores, lápices y borradores.
A la hora se reúne a los niños, aunque sean pocos, se les saluda, si es posible se les dice
algo que les haga reír un poco, se les dan sugerencias para sus dibujos y se les pone a dibujar. Los
que van llegando se van integrando.
En este momento basta que esté con todos los niños en un salón una madrina que los
mantenga dibujando.
La maestra debe estar en la reunión con los papás
A los niños se les pide que se pongan a dibujar lo que quieran, que lo traten de hacer muy
bien, pus lo van a mostrar en la capilla a las 8:30. Se les puede dar varias sugerencias para que
tengan más deseo de dibujar.

Reunión con los papás

En otro salón debe haber un círculo de sillas para la reunión con los papás. Este círculo lo debe
tener ya listo el organizador antes de las 8:00, hora en que llegan los papás.
En cuanto se ubican los niños en su salón, el director se reúne con los papás que hayan
llegado para:

1. Darles un saludo, agradecerles su presencia y decirles que sabemos que aunque es una
molestia venir de mañana a un encuentro con sus niños valdrá la pena.
2. Decirles que se pretende realizar un encuentro cada año con los niños para formarlos para
formarlos personas para amar y servir con espíritu cristiano.
Los encuentros pretenden responder a las necesidades y despertares que van teniendo los
chicos en su proceso evolutivo, conviene mucho conocer estos despertares para ir
sembrando la buena semilla en el tiempo oportuno.
3. Se les da el objetivo de este encuentro y se les explica cada paso para que vean su sentido
y aprecien el todo, sencillo, pero importante y hermoso.
4. Se les explican los ovejitos de los encuentros de primaria para que vean cómo van a ir
dando como una columna vertebral de objetivos. Deben ver también el proceso de estas
experiencias para los adolescentes. Esto no hay que explicarlo, sólo decir que el proceso
va a cubrir todo el tiempo de colegio.
5. Se les explica por qué se pide en este encuentro la presencia de los papás.
 Que conozcan esta línea de formación por la que van a entrar sus niños y tengan
experiencia directa.
 Que den su opinión sobre en qué hay que insistir en la formación de los niños como
personas, para un mejor acuerdo entre padres y educadores.
 Que se conozcan más todos los papás del grupo, conozcan algo de sus ideas sobre la
educación, y de ser posible se siembre una semilla de solidaridad, indispensable para una
pedagogía de la solidaridad.
 Que nos sigan apoyando cuando hayan encuentros con su motivación, cartas,
colaboración como asesores y consolidación del fruto.
 Que se vitalicen espiritualmente al contacto con sus niños y sientan más responsabilidad
como educadores.
Es conveniente advertirles que el encuentro va a ser importante para los niños, y que todos
debemos hacerlo con seriedad, pues el ver niños tan pequeños nos puede provocar cierto espíritu
de broma.

8:30 Acto inicial en la capilla

Los niños deben tener sus lugares delante de los papás, deben estar en sus sillas o en sus bancas
que serán sólo para ellos. Las madrinas se colocan atrás de los niños. Estos sólo deben llevar su
dibujo.
Al llegar se les indica rezar un padrenuestro. Para asegurar su atención se les puede decir
que levanten la mano los que saben rezar el padrenuestro. Se les felicita y se reza.
Luego se les va pidiendo que digan que dibujaron. Conviene hacer grupos, por ejemplo:
¿Quiénes dibujaron campos, montañas, mares o nubes?¿Quiénes dibujaron el sol?¿Quiénes
dibujaron casas?¿Quiénes dibujaron árboles y flores?¿Quiénes dibujaron personas?
Ellos van levantando las manos. Ya que se hacen estas preguntas se les pide que muestren
sus dibujos.
Primero los muestran al que dirige. Luego la fila de más atrás se vuelve hacia los papás y
muestran sus dibujos, se les aplaude, luego se sientan y los muestra la penúltima y así las
siguientes.
Luego se pide a las madrinas que recojan los dibujos del equipo esto para que no tengan
los papeles en la mano.
Luego vienen las dos preguntas que hacen el nexo entre los dibujos y el tema: ¿Pensaron
que iba a dibujar? ¿Lo quisieron hacer bonito? Los niños dicen que sí.

Dios crea el mundo

¿Creen ustedes que Dios pensó lo que iban hacer? ¿Creen que lo quiso hacer bien? Dios hizo el sol,
el mundo con sus mares…sus campos y montañas…el aire y las nubes… Hizo los árboles, las frutas
y las flores… Hizo los animales, los perritos y los pájaros.
Conviene hacerles reír y ver que bien hechas están las cosas haciéndoles preguntas donde
se vean que mal estarían las cosas de otro modo. Por ejemplo que la tierra no girara, que
estuviéramos muy cerca del sol, que el aire fuera café o el agua espesa.
Dios fue viendo las cosas que hizo estaban bien hechas.
Esta parte debe ser breve, pues la siguiente parte es más importante.

Dios crea al hombre

Dios vio que su creación estaba bien hecha, pero lo que quería hacer más bien que todo lo demás,
¿Qué creen que era? Muy bien, el hombre.
Al hombre lo quiso hacer muy bien y Dios pensó: lo voy hacer mejor que las plantas.
Imaginen que nos hubiera hecho como plantas…Lo voy a hacer mejor que los animales, imaginen
que fuéramos como animales…
Dios crea al hombre como El: persona
Dios dijo los voy hacer como Yo, los voy a hacer personas.
¿Qué diferencia hay entre un burro y una persona? Algunos suelen fijarse en las patas,
orejas. Etc., hasta que las personas tienen mente.
Muy bien Dios nos hizo como él, porque nos dio una mente para pensar, y también nos dio
un corazón para amar. Para poder conocerlo a él y amarlo. ¿Han visto a un perro haciendo
oración? ¿Podrán hablar o ir al colegio los gatos? ¿Pueden ir a casarse los burros a la Iglesia?
Sólo nosotros somos personas como Dios, sólo nosotros podemos pensar y amar
como humanos.

Debemos crecer como personas


 Debemos desarrollar nuestra mente aprendiendo y pensando, siendo creativos
(inventando). Por eso vamos a la escuela.
 Debemos desarrollar nuestro corazón recibiendo amor y dando amor.
Aquí conviene hacerlos decir recibiendo amor y dando amor. Al decir recibiendo amor se
apunta con los dedos al propio pecho y al decir dando amor se abren las manos en señal de
apertura. Esto se va diciendo la primera vez con voz natural, luego más y luego más fuerte. Luego
más bajo y más bajo y que casi no se oiga.
Mientras más pensemos y amemos, más nos parecemos a Dios, más desarrollaremos
nuestras semillas de Dios que él sembró en nuestro interior.

Debemos servir a los demás


Nosotros, que somos como el, debemos pensar en los demás, amarlos y porque los amamos,
servirlos.
Imaginen a una mamá que les dice a sus hijos que los quiere mucho, pero que no les hace
de comer…ni les lava la ropa…ni los pone en el colegio…ni hace nada por ellos. ¿Los quiere?
Parece que no los quiere, aunque les diga que sí, pues el amor se ve más en lo que haces
que en lo que dices.
Dios, que nos quiere mucho, nos dio muchas cosas y nos ayuda mucho. Si nosotros
queremos ser personas como él, tenemos que amar y servir a los demás.

Dios quiere que seamos felices

Dios quiere que seamos felices pensando no sólo en nosotros mismos, sino en los demás, amando
a los demás.
Dios se puso muy contento de haber hecho todo y de que todo eso fuera bueno para
nosotros. Nosotros también vamos a ir creciendo alegres, si vamos aprendiendo a querer servir a
los demás. ¿Comprendieron todo? Muy bien.

Porra o barra

Ahora les voy a enseñar una porra o barra para que no olviden lo que les expliqué. Esta porra se
grita como en el estadio.

Dios-me –hizo-como-él
Persona-me-hizo-él
Pienso, -amo,-ser –viré
Alegre –yo-creceré.

Hay que ir golpeando con la voz cada línea, haciendo un como golpe de voz en la palabra o
par de palabras donde marcan los guiones. Estos golpes se subrayan con movimientos de los
puños que como que golpean de arriba para abajo a la altura de la cintura.
En serviré se bajan los brazos como en actitud de obediencia.
En la última línea, se levantan las manos abiertas y se mueven de derecha a izquierda.
El golpe de voz al finalizar cada línea es más marcado.
Al finalizar la porra, se les dice que vamos a terminar nuestro encuentro en la capilla para
invitar a la virgen maría a nuestro encuentro.
Como la queremos invitar no solo a nuestro encuentro, sino a que se quede en nuestro
corazón, al final de la misa le vamos a dar a cada uno una medalla de la Virgen María, para que
esté cerca de su corazón y les ayude a ser buenos, sino uno nos e porta bien, si le pedimos orden y
no nos obedece, no le daremos la medalla al fin de la misa. (Esto hay que evitarlo, es para facilitar
el control).
Se les muestran las medallas y se reza el Avemaría.
Al terminar van saliendo por bancas o por equipos rumbo al salón. Allí debe estar el doble
círculo concéntrico. La silla del director y la de los niños al interior.

9:00 Reunión en el doble círculo concéntrico

Al llegar gritan la porra y luego cantan una canción que ya sepan y que ojalá lleven preparada.
En esta reunión vamos a dar un paso adelante; ya vimos que Dios nos hizo como él, que
nos hizo personas, nos dio mente para pensar, corazón para amar y manos para servir. Así vamos a
ser felices y dar felicidad a otros.
Ustedes eran hace 6 años unos bebés y dentro de 10 años ya van a ser unos muchachos
altos y fuertes, ustedes están creciendo.
Los arboles crecen, pero si no los riegan se van secando. Los cachorritos crecen, pero si no
los alimentan se mueren. Ustedes para crecer en su cuerpo necesitan alimento; pero para crecer
como personas, también necesitan alimento en su mente y en su corazón.
Sus papás que crezcan en su cuerpo, por eso los alimentan, quieren que crezcan en su
mente, por eso los pusieron en el colegio, para que aprendan. Por eso les dan amor y quieren que
ustedes den amor, para que su corazón sea más grande para amar.
Todo esto se debe ir haciendo ver a base de preguntas claras, breves, concatenadas, para
que los niños, al fin, tengan todo claro y como salido de ellos.
Como lo que más hace crecer a las personas como personas es recibir y dar amor, en
especial a sus papás.

1. Se pregunta a los niños cuándo y cómo han sentido que sus papás les han dado amor. Hay
que centrarlos para que digan casos concretos. Si el director ve que dejan una veta de
respuestas las puede señalar: ¿Cómo han recibido amor cuando están enfermos? ¿Cuándo
están en tiempo de clases y cuándo están en tiempo de vacaciones? ¿Cuándo hacen algo
mal?
Los niños deben decir las cosas; el director solo debe hacerlos hablar, hacerlos entender
que hablaron bien para que sientan confianza y todos se animen a decir lo que les va
llegando a su mente. El director no debe responder lo que les pregunta a los niños; pero si
puede reflejar lo dicho por algunos para que se oiga más claro y quede subrayado algo que
tiene especial fuerza. Estos reflejos deben ser muy breves.

2. Una vez que los niños han terminado, se les dice que vamos a escuchar como los papás les
muestran su cariño que hacen porque los aman. Van a decirnos lo que ustedes no dijeron.
Deben fijarse bien lo que dicen sus papás, pues ustedes no se habían fijado y es una pena
no darse cuenta de que alguien nos está mostrando afecto.
Los papás que quieran van diciendo cómo les muestra afecto a sus hijos, que hacen
porque los quieren. El director va facilitando las intervenciones. Si lo ve necesario les
simplifica lo dicho por los papás.
A los se les puede decir que recibir amor y no darse cuenta que se lo están dando es ser
muy bobo. Al ir diciendo los papás se les dice que no se habían dado cuenta y se van
midiendo con la mano el grado de la bobería. Al fin se les dice que se den cuenta para
bajar ese grado de ser bobos.

3. Al terminar esto se hace la segunda pregunta a los niños: ¿Cómo les muestran afecto a sus
papás, que hacen para que sepan ellos que los quieren?
4. Al terminar se pregunta a los papás: ¿Cómo les gusta que sus niños les muestren que los
quieren? A las mamás les gusta decir en qué saben ayudar a sus niñas en la cocina.

El director, si lo ve conveniente, después de cada una de estas cuatro preguntas puede ir


haciendo una pequeña síntesis.
Al terminar, al terminar se anuncia a los niños que los papás les han traído algo para
comer y beber a media mañana, para mostrar que los quieren mucho y celebrar que niños y
papás se quieren mucho.

9:30 Descanso

Un poco antes de terminar la reflexión, conviene que algunas personas preparen lo que se va a
dar a los niños, para que al salir no tengan que esperar.
Unos cinco, minutos, antes de las 10 se va llamando a los niños para que se formen y
entren al salón para iniciar la hora.

10:00 Doble círculo concéntrico

El objetivo de esta segunda reunión es ver que las personas que quieren crecer como personas
se tienen que tratar con amor, como Dios quiere. Vamos a ver como se tratan las personas
que se tratan como personas. Ustedes lo van a ir diciendo.
El director tiene que ir apuntando en columna las actitudes que digan los niños. Ellos van
expresando, al principio con dificultad sus ideas. El director les dice la palabra conveniente
para concretizar las ideas de los niños.
Ya que éstos terminan, se preguntan a los papás a ver si quieren añadir algunas actitudes
que no hayan dicho los niños y que vean que las deben tener muy en cuenta a su edad.

La lista suele contener estas actitudes:

 Respeto
 No pelear, ceder
 Perdonar
 Amabilidad
 Compartir lo suyo
 Ayudar
 Invitarse
 Cumplir

Ya que está la lista se comunica que cada equipo va escenificar una. Pueden mostrar lo
malo y lo bueno, o sólo lo bueno. La madrina o padrino va a ir narrando todo lo que va a ir
pasando y el equipo lo va a ir actuando. Lo van a ensayar muchas veces hasta que les salga muy
bien. Van a tener un poco más de 20 minutos para inventar la pantomima y ensayarla. Cada
equipo puede ir al sitio donde estén bien para trabajar. Conviene que la madrina escriba lo que va
a decir, aunque prefiera no leerlo. Las escenificaciones se presentarán a los papás.
Ya que en tienden todo lo que va a pasar se pide a las madrinas o padrinos que escojan
cual escenificación prefieren. Van a presentar una. El director va a ir anotando en la lista que
equipo quiere cada actitud. Si un equipo escoge una, ya no la puede escoger otro. El director
anota el número del equipo junto a la actitud y el equipo puede salir. Ahora se hacen los equipos
saliendo de 5, 6 o 7 en cada uno.

10:30 Reunión con los papás

Ya que salen los equipos, se inicia la reunión con los papás que siguen en sus sitios. Esta reunión es
mientras los niños preparan su escenificación.
El director muestra su satisfacción al ver cómo los niños ya comprenden que son personas,
imágenes de Dios y que deben tratarse como personas.
Como padres de familia y como educadores, queremos formar personas para el amor y la
libertad. Esto, sobre todo, se logra con el trato diario con los niños. Ahora vamos a escuchar lo que
los padres aquí presentes ven conveniente que se debe tener en cuenta para ir formando a los
niños como personas.
Los papás que quieran pueden ir hablando sobre lo que han visto positivo o negativo, o
sobre lo que han leído. El director va dando la palabra y si lo ve conveniente completa brevemente
la idea. Esta reunión es sólo de 20-25 minutos así que debe ser ágil. Se deben evitar las
intervenciones largas. El que más se debe cuidar de esto es el director.
Esta reunión suele resultar muy interesante y provechosas por las aportaciones y el
conocimiento y acercamiento de los papás.
Conviene que esta reunión la dirija el director del encuentro si tiene la seguridad.
Ojala tenga formación pedagógica, experiencia educativa y cierto ascendiente con los papás. Se
puede pedir al director de la primaria que lo haga. Hay que explicarle que no es una conferencia,
sino breves comentarios sobre lo que dicen los papás y que sólo cuenta con 20 o 25 minutos.

A los papás también se les pide que no hagan intervenciones largas, pues se va a tener
una lluvia de ideas y hay tiempo muy limitado.
Los papás van interviniendo. El director destaca, da importancia y si es necesario sintetiza.
Suele insistir en darles tiempo, atención y respeto a los niños. En considerarlos como
personas capaces de pensar y decidir y no tratarlos como paquetes o títeres. En la importancia de
darles seguridad y en lo negativo de quitarla mostrando que nos desilusionan y que no podemos
confiar en ellos.
Insisten en el ejemplo y la consecuencia entre lo que decimos y vivimos; en la importancia
de determinados valores y en la cercanía y dialogo.
Suelen hablar de la importancia de acercarlos a Dios y darles una visión positiva de Dios y
de nuestra relación con El.
No suelen insistir tanto en la formación de la libertad, del sentido social y de las actitudes
cristianas frente a los pobres.
Casi nunca mencionan la pedagogía de la decisión, de la solidaridad y de la expresión y en
formarles en el sentido del bien común.
Aunque los papás en la vida de todos los días les piden obediencia y algunos hablan dando
órdenes. Casi no hablan de hacerlos niños obedientes. En este punto conviene hacerles ver que
más importantes que hacerlos obedientes es ir formándolos para que sepan decidir y ser libre y los
peligros de lo contrario.
Algunos insisten en la atención a los sentimientos, en el sentido de pertenencia, casi no he
oído que se interesen en la pertenencia a la iglesia o al país.
Hay que saber cómo está la primaria para insistir en lo que va bien y atacar vicios que
suelen darse como las burlas, las faltas de respeto y la critica que tanto molesta a muchos.
Conviene que la maestra, no lo asista, sino que sea la secretaria de la reunión y luego
sintetice, haga que se multiplique y llegue a todos los papás.

10:55 Escenificaciones

Al terminar la reunión con los papás, que no se debe alargar hasta terminar el tema, se pide a los
papás que ayuden, si así conviene, a colocar las sillitas en el semicírculo para las escenificaciones y
atrás las sillas. Conviene que haya una mesita por si algún equipo necesita en su escena. Mientras,
alguien llama a los niños que entran formados.
Se les pide que griten la porra o barra, que digan la oración “Vamos a trabajar por Cristo y
en Cristo”, y luego se les anuncia que van a ir pasando primero el equipo, luego el 2, etc.
Pasa el equipo 1. La madrina presenta el tema y, si quiere. El director puede repetir el
tema para subrayar. Tiene que haber silencio para iniciar. Al terminar un equipo se pasa al
siguiente sin que se pregunte nada al grupo.
Al terminar todos los equipos, el director pasa su silla al lugar que hizo de escenario y
pregunta a los niños que aprendieron de las escenificaciones. Ellos responden. Esto es muy breve,
unos dos minutos. Dicen lo mismo que acaban de escenificar, pero se les queda más.

11:20 Cartas

Al terminar las escenificaciones y su pequeña reflexión se anuncia a los niños y a los papás que
habrá una misa. En ella, a la hora de la paz, los papás le van a leer una pequeña carta a su hijo que
van a escribir ahora.
En este momento se lee la carta que la maestra escribió con las ideas de los niños. Puede ir
diciendo quien dijo cada cosa.
Los niños van a escribir a sus papás un mensaje a ver que les dicen en él a sus papás en
este encuentro y lo van a adornar con dibujos. Vamos a ver ¿Qué les pueden decir a sus papás?
Ellos dan algunas sugerencias.
Luego se les piden sugerencias para los adornos: corazoncitos, florecitas, etcétera.
Cada equipo sale con su madrina o padrino, y todos los equipos van a su lugar de reunión.
Los papás se quedan en el salón. Se les dan hojas. Si no hay mesas, conviene tener prevenidas
unas tablitas o libros y dárselos para que sobre ellos escriban.

11:35 Misa

Hay que preparar la misa mientras los papás escriben y los niños hacen su mensaje adornado con
flores o corazones, etc., dibujados.
Para que los niños participen lo más posible en la misa, conviene poner una mesa de poco
más de un metro de largo como altar y acercar las bancas o las sillas en forma de C en círculos
concéntricos, para que el grupo quede muy cerca del sacerdote. Deben quedar huecos entre ellos,
para que los niños puedan llegar al altar y volver con facilidad.
En la mesa-altar se pone todo lo necesario para la misa. En el altar grande, atrás se colocan
el Niño Dios y las medallas de la Virgen en un platito para repartirlas fácilmente. A la entrada se
pone el árbol símbolo del grupo que se ofrecerá en el momento de las ofrendas.
Como el árbol va a dar hojas así ustedes darán actos buenos.
Conviene hace participar a los niños. Pueden cantar, pedir perdón por algunas de sus
faltas, dar gracias en el prefacio, etcétera.

En el ofertorio se ofrece el árbol, símbolo del grupo. El grupo, otro día, va a ir con su
maestra y vana sembrar el árbol. Ese árbol va a ir creciendo. Cuando ustedes estén en tercero ya
habrá crecido un poco; cuando estén en quinto más; cuando salgan de la secundaria, ya será más
grande y cuando salgan del colegio ya será un gran árbol. Cuando ya sean abuelitos el árbol estará
muy grande y ustedes al verlo se acordaran que lo sembraron pequeño.
En el ofertorio, también, antes de ofrecer su limosna los niños pueden decir qué iban a
comprar con ese dinero. Se les puede explicar en ese momento para quiénes va a ser el dinero y
que cuando uno quiere ser bueno, debe ver a Cristo en los pobres y ayudarlo en ellos con oración,
y ayuda material que supone sacrificio. No basta rezar. Tenemos que intentar remediar en otros
los sufrimientos que podamos. Hacer esto es crecer como persona para amar.
Ustedes no se deben dejar ganar por el árbol. Como él va a crecer, ustedes también deben
crecer; no solo en su cuerpo, sino como personas; deben crecer en conocimientos, deben crecer
en compasión por los que sufren, de modo que tengan un corazón grande para amar, que reciba
mucho amor y que de mucho amor.
Es muy bueno antes de iniciar, explicar a los niños que el sacerdote se va a poner
la túnica porque va a ocupar el lugar de Jesús y así se vestía Jesús y se va a poner la estola porque
va a ser las manos de la Iglesia. Es mejor que no use la casulla.

Conviene invitar a los niños a participar con el sacerdote en la anáfora haciendo los
mismos ademanes que él.
Después de la consagración conviene hacerlos conscientes de que tienen lo que más
agrada al Eterno Padre: a su Hijo y que se lo vamos a ofrecer al Padre y al dárselo podemos
atrevernos a pedir por la unidad, nuestra Iglesia, nuestro difuntos y por las personas vivas que
queremos pedir.

En el momento de la paz, las madrinas dan a los niños los mensajes adornados que les
recogieron antes de la misa. Durante la misa no los deben tener en la mano. Al ir a dar la paz dan
su hoja a los papás y ellos les leen su pequeña carta, en el lugar de sus papás, en voz baja. Los
papás conservan las 2 cartas.

En lugar de la comunión se le da al Niño Dios. Es importante que ellos lo tomen en sus


brazos, no sólo que se les dé a besar. Al recibirlo en sus brazos, lo miran con cariño y le dicen algo
en su corazón; luego, si quieren le dan un beso.
El niño Jesús se los va a ir dando su maestra para significar que ella quiere comunicarles,
no sólo los conocimientos del colegio, sino a Dios. Ustedes lo van a recibir, las niñas se van a sentir
la Virgen María cuando tuvo en sus brazos al niño Jesús y los niños se van a sentir que son San
José.
Esto se hace sin apresurar a ningún niño, más bien pidiendo que lo hagan con calma y
devoción. Mientras se da la comunión a los papás.
Antes de la bendición se pide a todos los papás que se coloquen junto a los muros de la
capilla, ya que están, se pide a los niños que vayan con sus papás. Luego se les explica que el
sacerdote los va a bendecir. Pero que hoy queremos que los papás digan qué bendiciones quieren
para sus hijos. Esas que ellos digan son las que vamos a ir implorando a que Dios les conceda.
Jesús bendecía a los niños imponiéndoles las manos en su cabeza para significar que les
pasaba a su buen espíritu. Como el sacerdote ocupa el lugar de Jesús va a ir pasando a imponerles
las manos. Antes de imponérselas a cada niño va a preguntar a sus papás. ¿Qué quieres para tu
niño? Cada mamá y papá dice. Si no se oye bien el sacerdote repite en voz alta. Le impone las
manos.

La maestra va a ir atrás dando a cada uno su medallita. Dice a cada niño en voz baja: que
tu madre del cielo te proteja, u otra breve frase.
A todos les daremos la misma medalla para significar que todos son hijos de la
misma madre, que se tienen que tratar bien como buenos hermanos; que ella estará en el corazón
de todos y los protegerá a todos.
El sacerdote va pasando frente a cada niño.
Al final vuelve al altar y pregunta desde allí si alguno quiere pedir una bendición para sus
papás. Algunos lo suelen hacer. Esto no conviene hacerlo mientras los papás van diciendo, pues
muchos niños dudan, se angustian y todo se hace más lento.

Después de la bendición se puede decir que quien quiera decir algo lo haga, allí mismo de
pie.
Puede al final plantarse el arbolito. El hoyo ya debe estar hecho y todo preparado para
plantarlo.

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