PROCESO DE TRABAJO CON MÓDULOS

1. REALIZAR BOCETOS

Para empezar a trabajar con un módulo geométrico es interesante partir de una
plantilla básica, por ejemplo en base a la forma del cuadrado, y explorar las
posibilidades de su estructura portadora, modular y proyectiva.

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A partir de esta estructura van surgiendo las formas, combinando las líneas diagonales
con las ortogonales.

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 2. PRUEBAS POSITIVO-NEGATIVO

Cuando identificamos un módulo que pueda resultar interesante, probamos su versión
en negativo, y comparamos si funciona bien en ambos casos.

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 3. PRUEBAS CON COLOR Y TEXTURA

Es interesante colorear el módulo y probar como funciona aplicándole distintas
texturas y cambiándolo de posición.

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4. PRUEBAS DE SUPERMÓDULO
Comprobar si el módulo funciona cuando lo repetimos en formato de 4 o 8 en formato
de supermódulo, también cambiando su posición o utilizando alguna retícula

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Una vez elegido el módulo más versátil, hacemos pruebas de color y texturas variando
su posición e incorporando diferentes variaciones cromáticas, de textura, etc.

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 5. PRUEBAS CON RETÍCULAS

Una vez seleccionado el módulo le aplicamos distintas retículas que pueden ser
de gradación, de desplazamiento, o de cambio de posición del módulo.

Retícula con degradado

Retícula con desplazamiento

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Retícula con degradado y cambios de posición, con fondo texturizado.

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Para el trabajo con formas orgánicas el proceso sería el mismo, pero partiendo de un
referente natural que puede ser una fotografía, que se va sintetizando hasta llegar a la
forma deseada que puede convertirse en módulo.

Síntesis en línea con repeticiones del módulo

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Versión en negativo con una disposición del módulo diferente

La misma disposición pero con prueba de color

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Utilizando una retícula más libre tiipo espiral

Utilizando otra versión del módulo sin sintetizar

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buscando una paleta de color

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