4° grado del Rito Scozzese (Maestro Segreto)

Uno de los símbolos más importantes del 4 er grado del Rito Escocés (Maestro Secreto) es la urna con
la llave rota.
El Maestro Secreto representa al primer Guardián del umbral, puesto en defensa del conocimiento
simbólico de la gran pirámide ascensional del Rito. Él se pone sobre la división entre la masonería azul
de los Pequeños Misterios y la Masonería Mística filosófica de los Grandes Misterios.
Pero volviendo a la simbología del grado, la urna representa el elemento corporal y la clave rota la
imposibilidad de acceder a esta urna para entrar y reconectar con la chispa divina del Verbo ′′ creador ".
La clave está rota, porque ya no somos capaces de comunicarnos con nuestra profunda interioridad,
donde bajo el inconsciente personal y el inconsciente colectivo, ambos experimentos, se esconde la
Fuente de la Omnisciencia o Saber Absoluto o mejor aún la Información Absoluta que regula toda la
Manifestación. Varios pueden ser las interpretaciones de esta llave rota que los iniciados tenemos la
tarea de recomponer para recrear ese puente entre humano y divino. Yo pero he descrito otra que no
encontraréis en ningún libro. La llave está rota porque la rompimos nosotros, olvidando su uso propio y
queriendo abrir la urna con la única fuerza de la racionalidad. Y está claro que en este caso la llave se
rompe. En efecto, el pensamiento racional o lunar inferior es medida (por ′′ ratio ′′ es decir, ración
porción medida) y lo que puede medirse es necesariamente limitado y necesariamente no puede utilizar
lo absoluto y, por tanto, Incomensurable. Ahora curiosamente en este punto se me viene a la mente una
hermosa parábola Sufi titulada ′′ El Alquimista ". Quien no la conozca si la lee o se lea la novela
homónima de Paulo Coelho. Es curioso y paradójico como Coelho, rompiendo un poco una historia
espiritual Sufi, no cubierta por derechos de autor, porque perteneciente a la sabiduría tradicional de un
filón espiritual islámico, ha creado un verdadero bestseller que está en los Guinness de los primates de
ventas de todos los tiempos. A veces incluso sin gran talento, (no es el caso de Coelho), rompiendo algo
ya existente, se puede lograr un éxito enorme mediante el uso de una forma divulgativa. Es paradójico
pero seguimos adelante. Por qué se me ocurrió la historia del Alquimista? Tal vez alguien me llame
hereje aquí, pero trataré de explicarles mi intuición. Conocerse a fondo sin la distorsión de todo el polvo
que se ha depositado en nuestro espejo es obra ardua difícil y a veces casi imposible. Desgregar la
piedra para sacar a relucir el diamante cúbico que siempre ha estado allí es obra muy sencilla y
complicada al mismo tiempo porque o se hace realidad en el aquí y ahora, es decir, en repetirse el
instante presente o nunca se cumple. Quiero decir que si diseñamos una realización del diamante cúbico
en el tiempo, razonando en términos de pasado y futuro con una voluntad teleológica, nunca lo
lograremos. Hay que ver en el instante presente que esa piedra bruta es en realidad solo una ilusión de la
mente que nos hace ver el diamante cúbico como una piedra para desbastar. Y esto o se ve en el aquí y
ahora o nunca lo entenderá. Por eso siempre he considerado solo preparatorias para este salto de visión
todas las vías húmedas, incluyendo la propia masonería.
Volviendo a la llave aquí también la nuestra se rompió porque la usamos mal y también recompuesta
seguiremos partiéndola hasta que aprendamos a usarla. El Maestro Secreto, entonces sabe que dentro de
sí tiene el Verbo pero olvidó cómo atraerlo. Y la llave no puede funcionar hasta que haya vacío nuestra
conciencia de todo contenido. Solo entonces estaremos desnudos ante la verdad y lo que nos había
parecido hasta entonces una piedra bruta refulgará el esplendor del diamante cúbico o piedra negra
(Kaaba) como lo llaman los Sufi. Me parece hermosa esta imagen de los místicos Sufi porque la negrita
de la piedra, que representa el Absoluto, es insondable por la Razón pero puede sentirse por la totalidad
de nuestro Ser purificado, porque consustancial a la piedra misma. En ese punto, la memoria psicológica
experimental creada por racionalidad para orientarse en un mundo infinito ya no sirve para nada. Se ve
la ilusoriedad y si tenemos la gracia subimos al plano de la omnisciencia. Si uno es omnisciente, qué
hace con la memoria? Es el famoso proceso de indiación o transmutación del Adán Primordial en Dios.
En este punto se ha superado el abraso y desde el centro de la cruz simbólica se asciende a su rama
vertical abandonando la horizontalidad. Pero volviendo a la llave y a la historia del Alquimista, ocurre a
veces que se enfrenta a individuos que sin querer abren con su llave (todos somos Uno) nuestra urna
poniéndonos frente a nuestra desnudez. Se trata del amor hacia otra persona, que reflejándonos
perfectamente, nos pone de frente durante un tiempo más o menos largo a nuestra verdadera esencia. En
ese momento no podemos hacer más que amar y todo nuestro sistema egoísta se derrumba ante la
potencia de ese sentimiento que dantescamente hablando ′′ mueve el sol y las otras estrellas ". Este amor
terreno que simbólicamente deberíamos donar nuestras herramientas de trabajo (i guantes), porque en
ese momento tenemos las manos puras, es decir, actuamos desde el Se profundo sin interferencia de las
instancias egoicas, puede iluminarnos a una nueva visión y darnos por fin las indicaciones de cómo usar
nuestra preciosa llave y conocernos finalmente en nuestros primeros abismos insondables Allí donde
yace puro y limpio, como agua de fuente, el Amor Incondicional que es nuestra verdadera y auténtica
esencia.

Luis Bondani