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Cuando Iloa empezó a preguntar

Primera parte:
Hace muchos años, en una Isla lejana, habitaba un pueblo denominado Manatu que se
encontraba al mando del Rey Harald.
Dicho rey, llevaba una vida feliz, tranquila y se sentía orgulloso de la isla que lideraba. Solía decir
habitualmente:
“Mi vida es hermosa. La isla en la que vivo es paradisíaca Los Manatu, son notables
pescadores que comparten su pesca con todos”
Un hábito muy tradicional en la isla, era repartir el agua entre sus habitantes. Una tarde, Iloa,
una pequeña niña curiosa le preguntó a su madre:
-¿Por qué todos los días el Rey Harald nos da agua?
Y la mamá le respondió:
-Porque si no nos provee el agua, no podríamos sobrevivir. No podemos beber el agua del
mar y solo él sabe dónde está el agua potable.
No conforme con la respuesta, Iloa continuó preguntando:
-¿No podría ponerla en un gran tanque para que cada uno saque de allí lo que necesite?
La mamá le respondió que eso no era posible, ya que es el propio rey quien reparte el agua con el
fin de asegurarse que todos reciban la cantidad que él desea.
-¿Qué él desea? Preguntó Iloa desconcertada
-No todos reciben la misma cantidad de agua, expresó su madre; sus amigos pueden llenar
dos vasijas por día, los pescadores reciben una vasija de agua diaria, los enfermos reciben
media y los ancianos una cuarta vasija.
Iloa no comprendía cómo se podía vivir con tan poca agua al día, sin embargo, era lo que el rey
había estipulado, y por muy injusto que fuese nada se podía hacer.
Esa tarde, había quedado dándole vueltas al asunto sin llegar a obtener alguna respuesta que le
resultara convincente. Al momento de la cena, vuelve a interrogar a su mamá sobre por qué no
pueden ir los propios aldeanos a buscar el agua, siendo la respuesta de la madre más
desconcertante aún:
-No podemos ir a buscarla por la simple razón de que nadie sabe dónde está el agua. Solo
el rey lo sabe, por eso es el rey, él mismo se denominó así y nada podemos hacer porque sin agua no
podemos vivir.
A lo que Iloa inmediatamente contestó: -¿Cómo que nadie sabe dónde está el agua? ¿Nunca nadie
ha podido encontrar dónde está el pozo del que saca agua el rey?
La madre sonrió al ver a su hija tan preocupada por tratar de que el abastecimiento del agua fuera
más igualitario, y le respondió:
-Muchos ya lo han buscado, pues se conoce que el pozo está a 2.5kms de distancia de la
bandera del rey.
E inmediatamente Iloa siguió indagando -¿Pero con ese dato, lo encontraron?

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