EXAMEN DE FILOSOFÍA

5. ¿Existe Dios?

La creencia en un Dios único y personal se denomina teísmo. Según esto, Dios es el creador del
universo e interactúa en él.
El teísmo hay que distinguirlo del politeísmo, consistente en la creencia de múltiples dioses.
Lo contrario al teísmo es el ateísmo, que consiste en negar que Dios exista.
El agnosticismo considera que la existencia de Dios no es demostrable.

Otras concepciones diferentes de Dios:

— Deísmo: afirmaba que Dios ha creado el universo,
pero negaba que pudiera interactuar con él.
— Panteísmo: identificar el universo o naturaleza con Dios. Se opone a la creencia en un Dios personal
y por eso se consideró una concepción que conducía al ateísmo.

Fanatismo religioso: actitud desmedida en defensa de las propias creencias religiosas. Para el fanático,
el mundo se divide creyentes e infieles.

5.1 Argumentos sobre la existencia de Dios

En su crítica de la razón pura, Kant estudió los argumentos que habían usado estos autores y concluyó
que todos ellos contenían falacias. Kant consideró que se habían dado tres tipos argumentos para
explicar la existencia de Dios:

— Argumento ontológico

Ideado por san Anselmo en la Edad Media y defendido por Descartes y Leibniz. El argumento
ontológico parte de la definición de Dios para concluir necesariamente con su existencia.
Si se supone que Dios no existe, Anselmo razona que no sería «el ser mayor que el cual nada puede
pensarse». La existencia contribuye a que un ser sea más perfecto.
Si tengo la idea de Dios, pero no incluyo su existencia, entonces no se trata del ser más perfecto. Por
tanto, Dios existe.
Según Kant, no hay contradicción entre pensar en un ser perfecto y considerar que no existe.

— Argumento del diseño

Considera que la complejidad de los seres vivos y su adaptación al medio en el que viven es una
prueba de la existencia de Dios. Los órganos de los seres vivos cumplen una finalidad, por lo que
parece lógico considerar que han sido diseñados por un ser inteligente. Para Kant, era un
razonamiento inválido porque la noción de causa sólo puede aplicarse al mundo de los fenómenos y de
la sensibilidad. Por tanto, aplicar el concepto de causa a seres espirituales como Dios que, por
definición, trascienden la realidad, es incorrecto.

La teoría darwinista de la selección natural es capaz de explicar el diseño y las complejidades de los
seres vivos mediante un mecanismo como la selección natural.
— Argumento cosmológico

Para que exista cualquier cosa contingente tiene que existir un ser necesario. Para Kant, en este caso
se comete de nuevo un abuso del principio de causalidad.

5.2 La apuesta de Pascal

Pascal escribió lo siguiente: “Dios de Abraham, de Isaac, de Jacob. No de los filósofos ni de los sabios”.
Con esta afirmación, Pascal rechazaba todas las reflexiones nacidas en el terreno de la filosofía y que
pretendían demostrar la existencia de Dios.

Sin embargo, Pascal ideó un razonamiento para justificar la necesidad de creer en Dios. Se conoce
como la apuesta de Pascal, y consiste en tener en cuenta que solo hay dos alternativas: creer o no creer
en Dios.

Por tanto, Pascal razona que es preferible creer en Dios porque de este modo se tiene ocasión de
ganarlo todo o de no perder nada. Y si no se cree, puede uno llegar a perderlo todo.

5.3 El ateísmo contemporáneo

En la época contemporánea, aparecieron filósofos que se declararon ateos.

Feuerbach invirtió los términos habituales de la teología según los cuales el hombre había sido una
creación de Dios y afirmó que, por el contrario, Dios era una creación humana y que la idea de infinito
nace de las cosas finitas. Para él, la religión tiene un origen psicológico fruto del sufrimiento de los
seres humanos.

Marx la religión era el opio del pueblo, una práctica que sirve a los intereses de la clase dominante
y que por ello tiende a adormecer, crea conformismo, impide que las personas reclamen justicia y que
sean conscientes de sus derechos.

Nietzsche proclamó que «Dios ha muerto.

Freud la religión era fruto de la frustración y no era más que una neurosis colectiva.

Siglo XX filósofos como Sartre se declararon ateos.

Actualidad existen científicos y filósofos como Dennett, Dawkins o Weinberg, que critican
racionalmente la religión por considerar que se trata de un conjunto de creencias carentes de razones.
También tratan de probar que detrás de muchas declaraciones de guerra o actos violentos se
encuentra la religión.