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SEGUNDA SERIE
4
Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires
Rector
Cr. Roberto Tassara
Secretaria Académica
Prof. Mabel Pacheco
Tandil ∙ 2013
Lens Fernández, José Luis
La capacitación de las distintas culturas organizacionales, la mejora con-
tinua y la gestión del conocimiento / José Luis Lens Fernández y Cecilia Di
Marco. - 1a ed. - Tandil : Universidad Nacional del Centro de la Provincia de
Buenos Aires, 2013.
420 p. ; 24x17 cm.
ISBN 978-950-658-313-2
© 2013 - UNCPBA
Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires
Secretaría Académica. Consejo Editorial
Pinto 399, 2° piso, Tandil (7000), Provincia de Buenos Aires
Tel./Fax: 0249 4422000 int. 198
e-mail: c-editor@rec.unicen.edu.ar
web site: www.unicen.edu.ar
Diseño de Tapa
D. G. Luisa Demarco
Arte de Tapa
La Nubecita
Corrección
Lic. Ramiro Tomé
Diseño Interior y Composición
D. G. Luisa Demarco
Coordinación Editorial
D. G. Luisa Demarco
Presentación 6
CAPÍTULO I
Capacitación, globalización y mundo del trabajo 13
Los diferentes significados del concepto de capacitación 13
Globalización y mundo del trabajo 6
Los conceptos de trabajo, educación y capacitación 21
CAPÍTULO II
La capacitación en el marco de las diferentes culturas
organizacionales 26
Cómo los profesionales de la educación debemos aprender a asumir las
contradicciones 26
El concepto de “cultura organizacional” 27
La capacitación en el marco de las diferentes culturas
organizacionales 30
CAPÍTULO III
La gestión del cambio como marco de la capacitación en las
organizaciones 40
El cambio planificado en las organizaciones 40
CAPÍTULO IV
La gestión del conocimiento como marco para la generación
y administración de los conocimientos en la empresa 77
Qué es la gestión del conocimiento (GC). Los temas fundamentales
para la implementación de un sistema de GC en la organización 77
Estrategias e instrumentos para la implementación de la gestión del
conocimiento en las organizaciones 85
10 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
mentos que, en tanto tales, dependen de los objetivos en el marco de los cuales
se usen. Un martillo –instrumento tecnológico muy básico, pero tecnología al
fin– puede usarse para clavar clavos, pero también para golpear en la cabeza
a una persona. Por lo tanto, el valor y efectividad de las TICs dependerá com-
pletamente del marco de valores y objetivos que orienten su utilización en las
organizaciones.
Más allá de estas consideraciones importantes, que deberemos tener muy
en cuenta, las TICs han impactado integralmente en el Management y, por lo
tanto, en la capacitación organizacional. Esto es lo que veremos a lo largo del
Capítulo V.
Hasta aquí desarrollamos una serie de temas y aspectos clave para compren-
der el papel y significado de la formación organizacional:
• Los fundamentos teórico-ideológicos de los conceptos, y sus relaciones,
de capacitación, globalización y mundo del trabajo.
• Los marcos de significación básicos para entender a la capacitación en
tanto factor interviniente en la transformación y evolución de las organi-
zaciones: 1) El cambio planificado, 2) El concepto de mejora continua, 3)
La gestión del conocimiento y 4) El papel de las TICs en la gestión de la
capacitación.
Con todos estos conocimientos, recursos e instrumentos abordaremos un
tema central en esta obra:
“Cómo diseñar, elaborar, implementar y evaluar los proyectos y programas de capaci-
tación en las organizaciones tomando, en este caso, como modelo a las corporativas”
tores de la instancia educativa. No hay duda de que quienes no se definen respecto del marco
de valores y objetivos sociales, económicos y políticos establecidos, ayudan al mantenimiento
del statu quo.
22 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
3 Aunque es preciso recordar que los poderosos países que promueven esta libertad de
circulación de mercancías, por ejemplo los Estados Unidos, luego son fuertemente proteccio-
nistas hacia adentro de sus fronteras. Además, preferentemente promueven e imponen esta
libertad de comercio en aquellas regiones de países débiles frente a la competencia industrial
y comercial mundial. Por otro lado, la libre circulación de las personas se ve paradojalmente
contradicha por la guerra a la inmigración que estos países centrales vienen protagonizando
desde hace tiempo (nos referimos a los países de la UE, los Estados Unidos, Canadá, etc.).
24 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
Además, como ocurre en Europa y países como la Argentina con una tradi-
ción sindical relativamente fuerte, el hecho de que el trabajador forme parte,
no sólo del mercado de trabajo nacional, sino internacional, implica que debe
competir con la fuerza de trabajo, por ejemplo, tailandesa, malaya o china, esto
es, residentes de países en donde los salarios representan montos muy inferio-
res a los vigentes en los países más desarrollados económicamente o con una
tradición sindical más firme y arraigada. Por lo tanto, en estas últimas regiones
los obreros con bajas calificaciones se ven obligados a aceptar niveles salariales
reducidos, a los efectos de competir y poder insertarse en el mercado laboral.
Como sostiene el profesor Gösta Esping-Andersen (1998), otro factor que
coadyuva a una visión pesimista respecto del mundo del trabajo en el marco
del proceso de globalización, radicaría en la aparente necesidad, fundada en los
dogmas del modelo neoliberal que se ha impuesto en el mundo, de una desre-
gulación de la economía, especialmente en el mercado de trabajo. La flexibili-
zación de la normativa jurídico-legal con relación a los estatutos o convenios
que regían la actividad laboral conduce inevitablemente a un menor grado de
protección y “fluidez”, esto es, a una superior capacidad de ajustarse, en forma
simultánea a una liberalización del componente retributivo salarial.
Pero la gran encrucijada, siguiendo a Gösta Esping-Andersen, que plantea
el proceso de globalización, no consistiría en la emergencia de un “futuro sin
trabajo”, sino que el problema principal nos remitiría a un porvenir en el cual
prevalecerían ciertos tipos de empleos más cualificados, con la cual la auténtica
crisis estaría en el surgimiento de graves consecuencias para los trabajadores
con menores niveles de calificación laboral.
En la actual coyuntura marcada por un proceso de transnacionalización eco-
nómica progresiva, el irresistible poder de los mercados se explica por la subor-
dinación de los gobiernos a la estructura financiera mundializada, a partir de la
cual el capital digita y controla al trabajo.
rece como un medio neutro, como un bien en sí mismo que, por lo tanto, al igual
que el trabajo dignifica al hombre, más allá de cualquier otra consideración. De
ahí que cada vez que nos refiramos a la capacitación, deberíamos plantearnos y
explicitar qué entendemos por dicho concepto.
La concepción de que los puestos de trabajo constituyen bienes dignificado-
res es falsa y encubridora de las dinámicas reales que operan en las relaciones
sociales concretas. De la misma manera, que es falsa la concepción de que la
educación y la capacitación constituyen instrumentos neutros que permiten el
acceso a los puestos de trabajo y por lo tanto son bienes cuya posesión dignifica
en la medida que nos permiten participar de la riqueza social disponible.
Afirmar, por ejemplo, desde una perspectiva educativa o capacitadora que el
mercado enseña, o que el mercado manda, o que debemos prestar oídos a las
señales del mercado, no hace más que confirmar la pretensión ocultadora de las
reales enseñanzas o señales de un mercado que generalmente son alienadoras
para las masas de trabajadores y el conjunto de los sectores populares, tanto
urbanos cuanto rurales.
La simple enunciación de una formación en abstracto no hace más que re-
forzar los supuestos que estamos criticando. Por lo tanto, los diseños de es-
trategias de formación y capacitación deben partir del carácter que poseen o
deben poseer los trabajos para los que se quiere formar a los sujetos. Asumir los
procesos educativos y de capacitación a ciegas, esto es, sin indagar críticamen-
te sobre la naturaleza de los procesos reales de trabajo, sería para nosotros una
práctica regresiva y peligrosa, ya que estaría legitimando la situación actual del
mercado laboral, la que, como sabemos, es ampliamente desfavorable para las
masas de trabajadores y los sectores populares.
Respecto de la formación laboral en general, que se enmarca en los sectores
público y el privado, es importante reflexionar sobre la formación profesional
desde el ámbito de las políticas educativas públicas. Se debería concebir esta ac-
tividad como una tarea orientada a superar las condiciones extremas en las que
se encuentran los sectores populares, respondiendo ineludiblemente al interro-
gante acerca de la naturaleza de los procesos reales de trabajo y tomar posición
respecto de ellos para transformarlos, para lo cual es preciso elaborar políticas
de formación profesional acordes a los diagnósticos realizados. No obstante, es
cierto que para que esto último alcance a obtener cierta perspectiva realista y
viable, deberíamos encontrarnos en una situación de organización y poder po-
pulares mucho mejor que la que en realidad existe en estos momentos.
Finalmente, es importante destacar que si bien el trabajo puede constituirse
–en verdad, debería constituirse– en un espacio de auténtica realización huma-
na, puede también convertirse en su contrario, esto es, en un ámbito de alie-
Capacitación, globalización y mundo del trabajo 29
Más allá del impacto producido por los efectos de las continuas y cada vez
más aceleradas innovaciones científico-tecnológicas en los campos de la pro-
ducción, así como en las áreas de organización y gestión, el mundo del trabajo
experimentó mutaciones radicales. Podemos comprobar la existencia de los si-
guientes fenómenos:
• se manifiesta una tendencia indeclinable a una disminución del nivel de
empleo en el ámbito internacional;
• la automatización y robotización reemplazó fuerza de trabajo en la esfera
productiva, desplazando numerosas actividades y aumentando proporcio-
nalmente la creación de ocupaciones hacia el sector servicios, fenómeno
este último llamado de “tercerización”;
• a pesar del aumento de las ocupaciones en el sector servicios, los niveles
de empleo han caído en términos absolutos y proliferan en extensas zonas
del planeta tasas muy elevadas de desocupación y subempleo;
• además, el proceso anteriormente descrito está acompañado por una se-
vera “precarización” de las condiciones laborales y una creciente segmen-
tación de las clases trabajadoras, lo cual tiene como consecuencia una gra-
dual fragmentación de los estratos sociales inferiores, junto con una caída
generalizada de los ingresos.
Conceptos como el de “pleno empleo” o debates sobre la conveniencia o
no de abrir las economías nacionales, ya han sido definitivamente clausurados.
Por otra parte, ha aparecido toda una nueva serie de conceptos que intentan
explicar nuevos fenómenos que han surgido en el marco del proceso de globa-
lización, tales como:
• precarización e informalización del trabajo
• flexibilización laboral
• contratos-basura
• desrregulación de los mercados de trabajo
• segmentación social y exclusión social
• estandarización y desestandarización del trabajo
30 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
una de las mejores estrategias para generar empleo y bajar los índices de des-
ocupación. Incluso renombrados economistas de la City 4 recomiendan volver a
los “contratos basura”.
Por otro lado, la desrregulación y la flexibilización implican la eliminación o
reducción de los llamados “salarios indirectos”, esto es, toda la inversión que
tiene que ver con la protección de los trabajadores: seguros, indemnizaciones,
salud, educación, capacitación, vacaciones, etc. Desrregular y flexibilizar es di-
rectamente “desproteger” a los trabajadores.
4 Se denomina City al ámbito del microcentro de la ciudad de Buenos Aires, porque allí
es donde están los organismos desde los que se toman las principales decisiones en materia
económica.
LA CAPACITACIÓN EN EL MARCO
DE LAS DIFERENTES CULTURAS ORGANIZACIONALES
1 Este subcapítulo tiene como fuente especial el texto de: LENS, J. L. (2008) La gestión:
una herramienta de transformación en la Administración Pública. Buenos Aires: Editorial
Santillana. (En prensa).
Ver 37
“núcleo”, en el que habitan esas presunciones, que son las que realmente pue-
den explicar los comportamientos organizativos, y la “periferia”, que es donde
se observan las manifestaciones superficiales de la cultura.
Para (José Antonio Garmendia, 1990) la noción de cultura corporativa nace
de la intersección de la teoría antropológico-funcionalista de la “cultura” -la or-
ganización se percibe como el principio básico para la consecución de objetivos-
y de una concepción relativista y dialéctica de la propia organización -concebida
de forma flexible y adaptativa-, intersección a partir de la cual surgen las tres
concepciones de la cultura de la empresa que nos apunta este autor:
• La cultura como cristalización del entorno.
• La cultura como diseño estratégico interno.
• La cultura como autoimagen de la organización.
En el primer caso la cultura es subsidiaria del entorno, el cual se constituye
como el primer factor de influencia sobre la organización. Así, factores como el
entorno institucional o el entramado sociopolítico y normativo de las empresas
tendrían un mayor peso que otros hechos, más genuinamente empresariales,
como pueden ser ciertas características tecnológicas o estructurales.
La cultura puede ser también un instrumento de gestión. El conocido aforis-
mo anglosajón “management by cultura” destaca justamente esa potencialidad
que tiene la cultura para adaptar, de manera contingente y flexible, la organiza-
ción de una empresa a las tareas y actividades que desarrolla
En el tercer caso, la cultura se entiende como la “autoimagen”o percepción
global que el personal de una compañía tiene de ésta. Esa autoimagen iden-
tificada con la cultura corporativa resume los significados, símbolos y valores
compartidos por la organización, y cuanto mayor sea ese consenso, más fuerte
será la cultura. Es razonable pensar que mientras más positiva sea la autoima-
gen mejores serán los resultados empresariales y la capacidad de proyectar esa
percepción positiva al exterior de la compañía.
Para (Charles Handy y Roger Harrison, 1992) la cultura es una suerte de
“ideología corporativa” que se expresa a partir del modo en que cada organi-
zación gestiona un conjunto de factores que pueden ser agrupados en cuatro
variables generales:
• Sus formas de pensamiento y aprendizaje.
• Las relaciones de poder dentro de la organización.
• Las formas de influencia y cambio.
• Los instrumentos de motivación y recompensa.
44 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
Es muy difícil pensar a la capacitación fuera del marco del “cambio planifica-
do” y la “mejora continua”, que son los dos motores que impulsan a las organi-
zaciones hacia adelante, que orientan y promueven su evolución.
Pero debemos ser cuidadosos, ya que los cambios y/o mejoras no requieren
automáticamente capacitación, sino que su necesidad surgirá siempre del desa-
rrollo de buenos y adecuados diagnósticos y auditorías.
En estos diagnósticos y auditorías, en las cuales aparecerán los problemas,
disfuncionalidades y demandas de cambio y de mejora, en todas las áreas y ni-
veles de la organización y su personal, dispondremos de dos tipos de soluciones
para su superación. Las acciones no formativas y las acciones formativas. Y los
consultores y capacitadores deberemos ser muy hábiles y cuidados para encon-
trarlas y diferenciarles muy bien.
Entre los mayores desafíos que enfrentamos en este tercer milenio, uno de
los más peligrosos y apasionantes es el del “cambio”. La globalización social, po-
lítica, económica, tecnológica y ecológica, implica un reto inédito para la huma-
nidad actual, ya que nunca antes los cambios sociales, tecnológicos y culturales
ocurrieron de una manera tan vertiginosa y generando tanta incertidumbre.
Las transformaciones ocurridas después de la caída del Muro de Berlín y
la desaparición de la Unión Soviética y, con ello, de la Guerra fría, fueron he-
chos inéditos. El aceleramiento incesante del avance tecnológico, la explosión
de mercados súper competitivos, la crisis del mercado laboral, el aumento de la
pobreza y la degradación ambiental, y otros fenómenos colaterales, hacen que
el desafío del cambio sea hoy uno de los más importantes que deben enfrentar
las organizaciones de todo tipo en el planeta. En este contexto, extraordina-
48 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
Porque sólo el movimiento es real, en tanto que el reposo no es más que una abstracción.
Roger Garaudy interpretando a Hegel
Los desafíos que enfrentamos en este siglo son diferentes de los que dejamos
atrás. Los peligros e incertidumbres actuales son mayores que los de antaño. La
globalización social y económica a partir de la caída del Muro de Berlín, el acele-
ramiento del avance tecnológico, la explosión de mercados ultracompetitivos, la
crisis del mercado laboral, el aumento de la pobreza y la degradación ambiental,
La gestión del cambio como marco de la capacitación en las organizaciones 51
así como otras consecuencias, hacen que el desafío del cambio sea hoy uno de
los más importantes que deban enfrentar las organizaciones.
Podríamos sintetizar así las fuerzas que impulsan el cambio en la actualidad:
¿Por qué nos centramos aquí en las empresas cuando nuestro análisis abarca
a todas las organizaciones, es decir, a las públicas y sin fines de lucro? Sencilla-
mente, porque son las organizaciones más dinámicas y con objetivos más defi-
nidos, aunque, por cierto, debamos ser críticos de los mismos. Las empresas se
mueven en pos de la rentabilidad económica, lo cual en la realidad que vivimos
–más allá de la problemática de la Responsabilidad Social Empresarial, que las
empresas están asumiendo de diferentes formas- está causando serios proble-
mas sociales y medioambientales que, lamentablemente, no podemos desarro-
llar en este libro. Por otro lado, las organizaciones empresariales son las que han
acusado con más realismo y crudeza el impacto del cambio y, en ese sentido,
marcan la agenda para las otras organizaciones, aunque las culturas sean dife-
rentes. Por eso nos centramos en las empresas, aunque debamos ser críticos del
papel que hoy están representando en el mundo.
52 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
Los escenarios actuales implican múltiples desafíos que las empresas deben
tener en cuenta.
1 El concepto de “recursos humanos” es propio del Management y, por cierto, es criticable, ya
que reduce a las personas a “recursos”, cuando, sabemos que las personas son mucho más que
recursos, son finen en sí mismos, como decía el filósofo Emanuel Kant. No obstante, por razo-
nes prácticas vamos a usar el concepto porque ya está instalado en el glosario empresarial.
La gestión del cambio como marco de la capacitación en las organizaciones 53
Los empleados, como hemos señalado, serán cada vez más movedizos, au-
tónomos e independientes, esto es, mucho menos leales que en los escenarios
pasados. El contrato, más bien psicológico, que la empresa establecía sobre la
base de la seguridad del empleado, ya no es más sustentable, porque la incerti-
dumbre, la inestabilidad y el cambio constante se convirtieron en datos conna-
turales del mercado y de las empresas actuales.
Los sujetos optarán por la búsqueda de su empleabilidad y capacidad para
adaptarse a las realidades del mercado, porque se sentirán asfixiados por los
contratos largos y las cláusulas demasiado estrictas. Sin duda, el valor del apren-
dizaje y el crecimiento personal se está convirtiendo en una variable clave de los
ejecutivos de la nueva economía globalizada.
Cada vez más, los servicios van ganando valor respecto de los productos.
La desmaterialización progresiva de las economías es un fenómeno típico de
esta época. De ahí la revalorización de lo intangible y la reasignación de valor
de los productos a partir de los servicios que los envuelven. Cada día que
pasa, el éxito de un producto es más el resultado del servicio con el que se
entrega, que del producto en sí mismo. Un ejemplo evidente de esto que de-
cimos está en los soportes de atención personalizada y en medios virtuales de
las instituciones financieras y los bancos. La Internet ha posibilitado el negocio
electrónico (e-business), con el que las entidades comenzaron a diferenciarse
por el soporte de servicio que les brindan a sus clientes. Si el servicio que so-
porta el producto es deficiente, la respuesta de los clientes y usuarios es cada
más contundente: el cliente elige otro producto que se encuentre asociado a
un servicio mejor.
El imperio de los clientes, está haciendo que los conceptos de “público”, “opi-
nión pública” y “mercado” sean cada día menos operativos para las empresas
y el análisis de Management. De ahí que las formas clásicas de segmentación
de los públicos deben reconsiderarse y tender hacia nuevos enfoques de micro-
segmentación, porque deberán dar respuestas a las necesidades de productos y
servicios cada vez más personalizados y de empresas que buscan relaciones de
largo plazo con personas que desean ser reconocidas como tales.
La gestión del cambio como marco de la capacitación en las organizaciones 55
Los proyectos de cambio, lejos de ser una moda, son hoy una necesidad acu-
ciante de las empresas. Las organizaciones que no sean capaces de seguir la
evolución de los cambios, dicen los gurúes del Management, quedarán irreme-
diablemente a la zaga y, finalmente, desaparecerán.
Dada su importancia, veamos, entonces, cuáles son los disparadores (drivers)
específicos que generan e impulsan los proyectos de cambio y de qué tipo son
los que promueven Identificamos, por lo menos, los siguientes disparadores:
BI (Business Intelligence)
La tercerización (outsourcing)
Es bastante frecuente, y cada vez parece que lo será más, que las grandes
empresas se concentren en los aspectos centrales del negocio (core business),
dejando en manos de terceras empresas las operaciones de los sectores o áreas
de soporte.
Este proceso de tercerización requiere planificar cuidadosamente el traspa-
so de la operación de determinados procesos de la compañía a un tercero con
capacidad para realizarlo mejor y más barato. Esto tiene un beneficio adicional
para la empresa contratante del servicio: la empresa contratada para realizar
el servicio será la que tendrá la responsabilidad de realizar las inversiones de
actualización y modernización que se requieran en el futuro.
En la década de los ochenta, (Michael Porter, 1980), uno de los más reco-
nocidos gurúes del “pensamiento estratégico”, en su libro Competitive Strategy
señaló las tres estrategias genéricas clave de las empresas:
1. El liderazgo en costos
2. La diferenciación
3. La segmentación
optimismo tecnológico y productivista y, por lo tanto, en una filosofía del trabajo centrada,
más que en el bienestar y crecimiento de los trabajadores y la idea de trabajo decente, en
la mejora continua de la productividad aplicando intensivamente las tecnologías y teniendo
como objetivo supremo la competitividad, los beneficios económicos y el posicionamiento en
el mercado. Es evidente, que esta filosofía productivista se proyecta en la línea del taylorismo-
fordismo, del que hemos hablado en los primero capítulos de esta obra. Pero este análisis lo
debemos dejar para otro oportunidad.
4 La filosofía Toyota de producción incluye al Kaizen. Peo el Kaizen no es toda su filosofía.
Esta filosofía implica el desarrollo de una forma organizativa de la producción y una gestión de
la mano de obra que logran el involucramiento individual de todos los trabajadores. El método
organizativo incluye: kanban, trabajo en células, polivalencia, polifuncionalidad, just in time,
tercerización, poha-yoke, andon, kaizen, sugerencias, 0 stock, etc. El modo de gestión de la
mano de obra parte del empleo de por vida y los ascensos a lo largo de la carrera.
66 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
Este concepto filosófico, elemento del acervo cultural del Japón, se lo lleva a
la práctica y no sólo tiene por objeto que tanto la compañía como las personas
que trabajan en ella se encuentren bien hoy, sino que la empresa es impulsada
con herramientas organizativas para buscar siempre mejores resultados.
En esta filosofía se parte de la idea de que el tiempo es el mejor indicador
aislado de competitividad, ya que actúa en grado óptimo al reconocer y eliminar
desperdicios en la empresa, sea en procesos productivos ya existentes o en fase
de proyecto, de productos nuevos, del mantenimiento de máquinas o incluso de
procedimientos administrativos.
Esta metodología trae consigo resultados concretos, tanto cualitativos como
cuantitativos, en un lapso relativamente corto y a un bajo costo (por lo tanto,
aumenta el beneficio) apoyado en la sinergia que genera el trabajo en equipo,
de una estructura formada para alcanzar las metas establecidas por la dirección
de la compañía.
Kaoru Ishikawa fue quien retomó este concepto para definir de qué manera
la mejora continua o Kaizen, se puede aplicar a los procesos, siempre y cuando
se conozcan todas las variables del proceso.
Kaizen es lo opuesto a la complacencia. Se trata de un sistema enfocado a la
mejora continua de toda la organización y sus componentes, de manera armó-
nica y proactiva.
El Kaizen surgió en el Japón como resultado de las imperiosas necesidades
de superarse a sí misma para alcanzar a las potencias industriales de occidente
y así ganar el sustento para una gran población que vive en un país de escaso
tamaño y pocos recursos naturales.
Por cierto que éste no es un sólo un problema de Japón, sino que el mundo en
su conjunto tiene la necesidad imperiosa de mejorar día a día. La polución am-
biental, el continuo incremento de la población a nivel mundial y el agotamiento
de los recursos no renovables, hacen necesaria la búsqueda de soluciones, que
sólo podrán ser alcanzadas mediante la mejora continua en el uso de los recur-
sos, en un planeta acostumbrado al derroche y el despilfarro.
La pobreza y las hambrunas no tienen su razón de ser más que por la falta de
ética y el amor desmedido al poder de los gobernantes y líderes mundiales, pues
no es necesario utilizar costosas tecnologías, ni sistemas complejos de adminis-
tración para implementar métodos que permitan mejorar de forma continua los
niveles de eficiencia y efectividad en el uso de los recursos.
Si a lo anterior le agregamos los profundos cambios que están aconteciendo
a nivel mundial con las caídas de todas las barreras comerciales, tanto legales
y políticas, como físicas, producto de las modificaciones políticas, culturales y
tecnológicas, nos encontramos hoy con economías totalmente globalizadas. El
La gestión del cambio como marco de la capacitación en las organizaciones 67
entorno tanto para las grandes empresas, como para las medianas y pequeñas,
y sea cual sea su tipo de actividad está cambiando a un ritmo muy veloz. Den-
tro de este marco, empresas e individuos deben adaptarse a los nuevos retos,
“capacitándose” y poniéndose al día con los cambios tecnológicos y adoptando
una nueva y actualizada visión del comercio y del mundo.
Dentro de esa nueva visión, hay otros objetivos a lograr, como por ejemplo: la
necesidad de satisfacer plenamente a los consumidores y usuarios de productos
y servicios, la creatividad puesta al servicio de la innovación, y el producir bienes
de óptima calidad y al coste que fija el mercado.
Pero estos objetivos no son algo que pueda lograrse fácilmente, ya que, por
un lado se requiere concientización y esfuerzo constante para lograrlos y, por
otro lado, se necesita de una disciplina y ética de trabajo que lleven a empresas,
líderes y trabajadores a superarse día a día en la búsqueda de nuevos y mejores
niveles de desempeño que los mantengan en capacidad de competir.
No tomar conciencia de estos cambios y necesidades puede ser fatal para
todos aquellos que no lo comprendan y entiendan debidamente. Enormes con-
tingentes de personas luchan diariamente para subsistir en el mundo y, para
ello, intentan vender mejores y más económicos productos y servicios. Para
lograrlo utilizan todos los medios a su alcance. Si un guerrero para sobrevivir se
entrena diariamente tratando de mejorar, porque en ello le va la vida; de igual
forma empresas e individuos deben entrenarse y mejorar día tras días, pues en
ello también está depositado su supervivencia. Lograr alimentarse, vestirse, cu-
rarse y tener un techo no es algo que nadie regala, los que ya lo han entendido
así están plenamente en carrera, muchos aún no lo han comprendido.
Por eso, el Kaizen, según se sostiene desde la perspectiva del Management,
no sólo debe ser comprendido por los empresarios y trabajadores, sino también
por los gobernantes, educadores, estudiantes y formadores de opinión. El Es-
tado no sólo debe mejorarse así mismo, sino que además debe fomentar y ca-
pacitar a sus ciudadanos para lograr la mejora continua como única alternativa
posible en un mundo en el que cada vez hay menos alternativas.
El Kaizen en acción 5
Pero ¿cómo hacer posible la mejora continua? Es necesario poner en marcha
seis procesos fundamentales:
5 En realidad el kaizen es una más de las tecnologías blandas del proceso productivo japo-
nés. Es la generación de grupos de calidad que pueden estar formados por trabajadores de
una sección, de varias secciones, que puede incluir a personal de las tercerizadas y que se
juntan desde el principio del año, le colocan un nombre de fantasía al grupo. Se forman varios
68 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
grupos en la empresa, que compiten entre sí y a fin de año presentan sus proyectos de mejora.
Los líderes del grupo que gana pueden presentar el proyecto en la reunión anual de los kaizen
en Japón. Generalmente dedican tiempo extra o en las casas a preparar sus respectivos pro-
yectos. En verdad, para ser más exactos, el kaizen es parte de la calidad total, donde también
está el sistema de sugerencias, el poha-yoke, el andon, etc. El trabajo justo a tiempo es otra
tecnología aparte, lo mismo sucede con el mantenimiento
La gestión del cambio como marco de la capacitación en las organizaciones 69
• almacenes elevados;
• plazos excesivos;
• retrasos;
• falta de agilidad, de rapidez de reacción;
• emplazamiento inadecuado de los equipos, recorridos demasiados largos;
• tiempo excesivo en los cambios de herramientas;
• proveedores no fiables (plazos, calidad);
• averías;
• problemas de calidad;
• montones de desechos, desorden;
• errores, faltas de piezas;
• despilfarros (hombres, tiempo, materiales, equipos, locales).
Estas falencias son el producto de:
• La distribución inadecuada de las máquinas y los recorridos demasiados
largos.
• La duración de los cambios de herramienta.
• Las averías.
• Los problemas de calidad.
• Las dificultades con los suministradores.
De tal forma podemos decir que las causas principales que provocan la baja
performance en las empresas son:
• Situación inapropiada de las máquinas y longitud de los trayectos
• Duración de los cambios de herramientas
• Fiabilidad insuficiente de los equipos
• Falta de calidad suficiente
• Dificultades debidas a los proveedores
La gestión del cambio como marco de la capacitación en las organizaciones 73
Por lo tanto la práctica del Just in Time es uno de los principales caminos
para la superación de tales problemas.
d) Despliegue de políticas
El despliegue de la política se refiere al proceso de introducir las políticas
del Kaizen en toda la organización, desde el nivel más alto hasta el más bajo.
La dirección debe establecer objetivos claros y precisos que sirvan de guía a
cada persona y asegurar de esta forma el liderazgo para todas las actividades
kaizen dirigidas hacia el logro de los objetivos. La alta gerencia debe idear una
estrategia a largo plazo, detallada en estrategias de mediano plazo y estrategias
anuales. La alta gerencia debe contar con un plan para desplegar la estrategia,
pasarla hacia abajo por los niveles subsecuentes de gerencia hasta llegar a la
zona de producción. Como la estrategia cae en cascada hacia las categorías
inferiores, el plan debe incluir acciones y actividades cada vez más específicas.
e) Sistema de sugerencias
El sistema de sugerencias funciona como una parte del Kaizen orientada a
individuos, haciendo énfasis en los beneficios de elevar el estado de ánimo me-
diante la participación positiva de los empleados. Los gerentes y supervisores
deben inspirar y motivar a su personal a suministrar sugerencias, sin importar lo
pequeña que sean. La meta primaria de este sistema es desarrollar empleados
con mentalidad kaizen y autodisciplinados.
Pero para que tengan éxito, los sistemas y programas de sugerencias necesi-
tan venderse internamente. Eventos especiales, publicidad, boletines internos
y periódicos, juntamente con folletos promocionales precisos y vigorosos, son
los ingredientes para mantener el sistema vivo y en buen funcionamiento. No
hay que esperar que los sistemas sigan trabajando sin mantenimiento, revisión y
nueva inspiración. Cumplidos estos ingredientes, los programas de sugerencias
son un sistema muy valioso para cosechar ideas innovadoras.
La alta administración debe implantar un plan bien diseñado para asegurar
que el sistema de sugerencias sea dinámico. En las organizaciones japonesas los
principales temas de sugerencias son en orden de importancia:
• Mejoramientos en el trabajo propio.
• Ahorros en energía, material y otros recursos.
• Mejoramientos en el entorno de trabajo.
• Mejoramientos en las máquinas y procesos.
• Mejoramientos en artefactos y herramientas.
• Mejoramientos en el trabajo de oficina.
• Mejoramientos en la calidad del producto.
La gestión del cambio como marco de la capacitación en las organizaciones 75
• El reconocimiento a todos los niveles de que nadie conoce mejor una ta-
rea, un trabajo o un proceso que aquel que lo realiza cotidianamente.
• El respeto al individuo, a su inteligencia y a su libertad.
• La potenciación de las capacidades individuales a través del trabajo en
grupo.
• La referencia a temas relacionados con el trabajo.
En tanto que el concepto occidental del control de calidad hace hincapié en
que el éxito del control de la calidad depende en gran medida de los gerentes
e ingenieros, los japoneses agregaron la idea de que los trabajadores del núcleo
básico también podrían desempeñar un papel importante para mejorar la cali-
dad y la productividad. Los japoneses ampliaron el concepto para crear lo que
se denomina control total de calidad o círculos de control de calidad, en los que
participan los trabajadores de las líneas de producción y los empleados que tra-
bajan fuera de la fábrica tales como los diseñadores de productos, el personal
de mercadeo y ventas, y el personal de investigación y desarrollo. La idea sub-
yacente en todo esto es que no es posible lograr el control de calidad en toda la
empresa sin la participación de los obreros de fábrica.
El gran objetivo del Kaizen es, haciendo uso de los procesos antes mencio-
nados, lograr lo óptimo en materia de calidad, costos y entrega (QCD, quali-
ty, cost, delivery). Calidad no sólo hace referencia a los productos o servicios
terminados, sino también a la calidad de los procesos que se relacionan con
dichos productos o servicios. Costo se refiere al costo total, que incluye dise-
ño, producción, venta y suministro de productos o servicios. Entrega significa
despachar a tiempo el volumen solicitado. De tal forma cuando se cumplen las
tres condiciones de calidad, costo y entrega, los clientes están plenamente sa-
tisfechos (satisfacción total del cliente).
Las 5 S
6 PREA significa: “Planificar – Realizar – Evaluar – Actual”, en tanto que EREA es: “Es-
tandarizar–Realizar–Evaluar–Actuar”.
La gestión del cambio como marco de la capacitación en las organizaciones 79
1. Seiri:
Diferenciar entre los elementos necesarios de aquellos que no lo son. Implica
separar lo necesario de lo innecesario y eliminar o erradicar del gemba esto últi-
mo. Debe establecerse un tope sobre el número de ítems necesarios. En gemba
puede encontrarse toda clase de objetos. Una mirada minuciosa revela que en el
trabajo diario sólo se necesita un número pequeño de éstos; muchos otros ob-
jetos no se utilizarán nunca o sólo se necesitarán en un futuro distante. El gem-
ba está lleno de máquinas sin uso, cribas, troqueles y herramientas, productos
defectuosos, trabajo en proceso, materias primas, suministros y partes, ana-
queles, contenedores, escritorios, bancos de trabajo, archivos de documentos,
carretas, estantes, tarimas y otros ítems. Un método práctico y fácil consiste en
retirar cualquier cosa que no se vaya a utilizar en los próximos 30 días.
2. Seiton:
Disponer de manera ordenada todos los elementos que quedan después del
seiri. El seiton lleva a clasificar los ítems por uso y disponerlos como correspon-
de para minimizar el tiempo de búsqueda y el esfuerzo. Para hacer esto, cada
ítem debe tener una ubicación, un nombre y un volumen designados. Debe es-
pecificarse no sólo la ubicación, sino también el número máximo de ítems que
se permite en el gemba.
3. Seiso:
Limpiar el entorno de trabajo, incluidas máquinas y herramientas, lo mismo
que pisos, paredes y otras áreas del lugar de trabajo. Seiso también significa ve-
rificar. Un operador que limpia una máquina puede descubrir muchos defectos
de funcionamiento. Cuando la máquina está cubierta de aceite, hollín y polvo,
es difícil identificar cualquier problema que se pueda estar formando. Sin em-
bargo, mientras se limpia la máquina podemos detectar con facilidad una fuga
de aceite, una grieta que se está formando en la cubierta, o tuercas y tornillos
flojos. Una vez reconocidos estos problemas, pueden solucionarse con facili-
dad. Se dice que la mayor parte de las averías en las máquinas comienzan con
vibraciones (debido a tuercas y tornillos flojos), con la introducción de partículas
extrañas como polvo, o con una lubricación o engrase inadecuados. Por esta
razón, seiso constituye una gran experiencia de aprendizaje para los operado-
res, ya que pueden hacer muchos descubrimientos útiles mientas limpian las
máquinas.
4. Seiketsu:
Mantener la limpieza de la persona por medio de uso de ropa de trabajo ade-
cuada, lentes, guantes y zapatos de seguridad, así como mantener un entorno
80 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
Conclusiones
Existe una extensa lista de empresas japonesas que han invadido con pro-
ductos de alta calidad los mercados mundiales, lo que nos debe hacer tomar
conciencia no sólo de la importancia industrial de Japón, sino por, principalmen-
te, de que los conceptos y métodos que constituyen el Kaizen han permitido no
sólo a estas empresas, las cuales son las más conocidas por los consumidores,
sino además a muchas más compañías proveedoras de insumos y máquinas in-
dustriales, estar entre las más competitivas del mundo. Esto no es producto de
la casualidad, sino de la causalidad, consecuencia, esta última, de una férrea
disciplina y de profundos enfoques estratégicos, en los cuales, por orden de im-
portancia, se destacan:
La educación–capacitación;
La mejora continua en los procesos y
La administración participativa.
Como hemos señalado al principio del capítulo, hemos desarrollado dos mar-
cos clave para entender el carácter interviniente de la capacitación en las orga-
nizaciones y aplicarla, en tanto una de las posibles soluciones, para abordar los
problemas, disfuncionalidades y mejora que requieren las mismas. Ahora abor-
daremos, otro tema básico, también íntimamente relacionado a la formación en
las organizaciones: “la gestión del conocimiento”.
LA GESTIÓN DEL CONOCIMIENTO COMO MARCO
PARA LA GENERACIÓN Y ADMINISTRACIÓN
DE LOS CONOCIMIENTOS EN LA EMPRESA
Información:
Se trata de datos, que pueden ser más o menos veraces, más o menos críti-
cos, estar mejor o peor elaborados y ser más o menos ricos. Lo que hay que ver
es que en sí mismos no conforman conocimientos, sino informaciones y datos
que deben ser interpretados, resignificados y actualizados funcionalmente por
las personas y la organización.
Conocimientos:
LOS BENEFICIOS DE LA GC
1 Fuentes: Suresh; Wiig, 1997; Davenport y Prusack, 1998; Drucker, 1993, Rivero, 2002,
OECD, 2003.
90 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
Los principales ítems del resultado del proceso puede observase en la siguien-
te tabla:
Comunicación Eficiencia
Mejorar la comunicación. Reducir el tiempo para la resolución de
problemas.
Acelerar la comunicación. Disminuir el tiempo para la elaboración y
presentación de propuestas.
Opiniones del personal más visibles. Acelerar los resultados.
La gestión del conocimiento como marco para la generación y administración... 91
El principio push-pull
conocimientos técnicos. Por último, todos los empleados han de tener acceso a
Intranet. La organización ha de cumplir con su obligación de aportar informa-
ción y los usuarios han de responder de un modo autorresponsable a su obliga-
ción de recoger informaciones.
Sólo una vez formulados los objetivos concretos, se pueden poner en marcha
las medidas orientadas al logro de los mismos y su correspondiente valoración.
En las publicaciones especializadas se suele abordar superficialmente este
tema y en la práctica se suele ignorar por completo.
En la mayoría de los casos existe un desconocimiento de cómo se han de
formular los objetivos de conocimiento y cómo se ha de supervisar su logro.
En lo que sigue veremos este tema.
Hoy en día todavía hay pocas empresas donde se lleve a cabo una formulación
de objetivos en el área de la gestión del conocimiento. Y en la mayoría de los
casos, cuando se formulan los objetivos empresariales se suele olvidar la compo-
nente del conocimiento tanto a nivel normativo, operativo como estratégico.
los programas estratégicos. En este caso se trata de objetivos que están muy
arraigados en las actividades cotidianas de las empresas, p.ej., la realización
de workshops para el perfeccionamiento de los empleados en el área de ges-
tión del conocimiento. Es decir, se trata concretamente de la implementa-
ción de los objetivos estratégicos y operativos. Los objetivos del conocimiento
operativos:
• Garantizan la implementación de la gestión del conocimiento a nivel
operativo,
• Traducen los objetivos de conocimiento normativos y estratégicos en me-
tas concretas.
El diagnóstico organizacional
Mapas de conocimiento
Inventarios de conocimientos
Inventario y Desarrollo y
Modelación Implementación
análisis control
Integración en los
Procesos Clasificación Responsabilidades
procesos empresariales
98 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
Portadores de
Estructuración Comunicación Actualización
conocimientos
Existencias de
Visualización Distribución Evaluación
conocimientos
Puesta en juego
Cultura organizacional
La gestión del conocimiento no es una finalidad en si, sino que está dirigida a
crear una organización basada en el aprendizaje y en el conocimiento, y que a
través de su potencial de conocimientos y aprendizaje y la capacidad de innova-
ción que se deriva de ello, pueda competir en el mercado.
Sobre la base de este trasfondo, el conocimiento, el aprendizaje y la innova-
ción son elementos que han de estar arraigados en el ideal de la organización.
Para ello es necesario una cultura organizacional que sea compatible con este
ideal, es decir, que apoye y no entorpezca el conocimiento y el aprendizaje.
Como consecuencia de la enorme importancia que tiene el trabajo en equi-
po, la transmisión de informaciones, el compartir conocimiento y el intercambio
de experiencias para la gestión del conocimiento, la cultura de la comunicación
100 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
En los últimos tiempos, cada vez aparece con más frecuencia en el mundo
científico y en la práctica real el concepto de comunidad en relación con el tema
de gestión del conocimiento.
Pero cuando hablamos de comunidades, nos damos cuenta de que existen
muchas definiciones diferentes. Así tenemos, p.ej., comunidades de aprendi-
zaje, comunidades de aprendizaje distributivo y comunidades de prácticas. La
diversidad de conceptos ya es en sí un indicador de la riqueza de facetas que
acompaña al enfoque de comunidades.
Si queremos desarrollar un procedimiento concreto para la creación e insta-
lación de comunidades, es importante comenzar por un análisis y una definición
exacta de los diferentes tipos de comunidades y determinar sus afinidades y
diferencias.
Actualmente cada vez son más las empresas que buscan nuevas plataformas
para el intercambio de conocimientos, ya que todo parece indicar que las formas
tradicionales de intercambio de conocimientos no son suficientes para satisfacer
la demanda de la sociedad del conocimiento. Los cuatro factores que expone-
mos a continuación describen algunas de las razones de estos desarrollos:
La gestión del conocimiento como marco para la generación y administración... 101
Recopilar las mejoras prácticas (es decir, las prácticas exitosas) desarrolla-
das en las diferentes áreas de la organización es un extraordinario recurso para
aprovechar una fuente de conocimientos muy valiosa e importante.
En todo proyecto, las experiencias que realizan los participantes pueden ser
de gran interés para futuros proyectos con temas similares. Pero hay muy pocas
empresas que lleven a cabo una sistematización de este tipo de experiencias.
Y no es nada extraño que el mismo problema se esté discutiendo dos veces en
diferentes departamentos.
Este problema se aborda a través de la documentación de lecciones
aprendidas.
La gestión del conocimiento como marco para la generación y administración... 103
• Tienen que ser significantes y han de tener una repercusión real sobre una
acción.
• Han de ser correctas a nivel técnico y práctico.
Modelo sociocultural
Se trata de modalidades centradas en el desarrollo de una cultura organiza-
cional adecuada para el desarrollo de procesos de gestión del conocimiento.
Intentan promover cambios de actitudes, fomentar confianza, estimular la
creatividad, sensibilizar y concienciar sobre la importancia y el valor del cono-
cimiento, promover la comunicación y la colaboración entre los miembros de la
organización, etc.
Modelo tecnológico
Se trata de instancias en las que se destaca el desarrollo y la utilización de
sistemas (por ejemplo: intranets, sistemas expertos, sistemas de información,
páginas y portales web, etc.) y herramientas tecnológicas (por ejemplo: mo-
tores de búsqueda, herramientas multimedia y de toma de decisiones) para la
gestión del conocimiento.
La gestión del conocimiento como marco para la generación y administración... 105
IMPLANTACIÓN DE UN SISTEMA DE GC
Aunque los factores que, en función del contexto particular, pueden deter-
minar el éxito de un proceso de GC son muchos y variados, Davenport (1997,
1998) identifica nueve factores clave e interrelacionados como posibles condi-
cionantes del éxito de un proyecto de GC:
Del mismo modo que hemos enumerado y comentado los principales facto-
res que nos pueden conducir al éxito en el diseño y desarrollo de nuestro mode-
lo para la creación y gestión del conocimiento, en este punto nos dedicaremos
a mostrar las principales limitaciones y dificultades con las que nos podemos
encontrar durante la implementación de nuestro proyecto para la GC. Seguida-
mente señalaremos los principales condicionantes y obstáculos para lograr una
gestión del conocimiento exitosa:
2. Falta de planificación:
108 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
3. Responsabilidad difusa:
Las iniciativas en GC pueden verse abocadas al fracaso si no se clarifican
y se establecen una serie de responsabilidades de las personas encargadas
del proceso. Es recomendable la existencia de un equipo de GC dedica-
do especialmente al diseño, al desarrollo y a la evaluación del proceso de
GC.
4. Diseño y ejecución a la medida de los contextos:
Los proyectos de GC no son genéricos, sino que deben diseñarse y ejecu-
tarse a la medida y en función de las características de la organización (va-
lores y objetivos, estructura, sistema relacional y funciones organizativas).
5. Confusión conceptual:
Muchas organizaciones tienden a confundir la gestión de la información
con la gestión del conocimiento y utilizan tecnología (por ejemplo: intra-
nets) potencialmente válida para procesos de GC, como simples almace-
nes de documentos de la organización.
6. Falta de una cultura adecuada:
La ausencia de una cultura adecuada para la GC nos conducirá irreme-
diablemente al fracaso en nuestro empeño. En ocasiones, la existencia de
una cultura inadecuada nos puede llevar incluso a considerar la palabra co-
nocimiento como un tabú y, por lo tanto, cualquier referencia a acciones
relacionadas con el “conocimiento” deberán realizarse utilizando eufemis-
mos como mejores prácticas, estudios comparativos, etc.
Hemos desarrollado dos marcos clave para entender y aplicar la capacita-
ción en las organizaciones. Ahora abordaremos un tema también importante,
como lo es el papel y la incorporación de las nuevas tecnologías a la capacita-
ción organizacional.
EL APORTE DE LAS TICs
A LA CAPACITACIÓN ORGANIZACIONAL
Es indudable que las TICs han significado un aporte valioso para las organiza-
ciones, y lo han sido en todos los aspectos de su gestión. Tanto es así, que hoy
es impensable una administración organizacional sin las nuevas tecnologías.
No obstante, sería un error entender a las TICS como fines en sí mismos,
es decir, comprenderlas como fuerzas transformadoras per se. Las nuevas
tecnologías, como toda tecnología en todos los tiempos y contextos, son ins-
trumentos que, en tanto tales, dependen de los objetivos en el marco de los
cuales se usen. Por lo tanto, el valor y efectividad de las TICs dependerá com-
pletamente del marco de valores y objetivos que orienten su utilización en las
organizaciones.
Más allá de estas consideraciones importantes, que deberemos tener muy
en cuenta, las TICs han impactado integralmente en el Management y, por lo
tanto, en la capacitación organizacional. Esto es lo que veremos a lo largo de
este capítulo.
Aquí hay varias cuestiones que debemos revisar y distinciones que debemos
tener claras. En principio, debemos distinguir por lo menos dos formas de utili-
zar la computadora en los procesos de enseñanza-aprendizaje:
1. La denominada “instrucción “con” computadora”
2. La educación en línea “a través” de la computadora
Por eso, cuando hablamos del uso de las computadoras en la educación, es
muy importante distinguir entre dos tipos de interacción:
• Interacción del usuario-alumno con la computadora. Quien aprende, sólo
interactúa con la computadora (ejercicios estructurados, autoevaluaciones
y evaluaciones sobre la base de elección de respuestas preelaboradas tipo
múltiple choice, ejercicios de memorización, etc.). Hablamos, entonces,
de interacción “con” la computadora. La computadora aparece aquí como
el fin de la interacción. Técnicamente este modelo se denomina “instruc-
ción con computadora”.
La gestión del conocimiento como marco para la generación y administración... 111
Modelo autoinstructivo
los supuestos y valores en los que se enmarca la teoría y la práctica del Mana-
gement, es decir, la cultura del Management.
Siguiendo esta línea podemos decir que el modelo autoinstructivo se basa
en programaciones objetivas, mediciones cuantitativas y evaluaciones del tipo
verdadero-falso, multiple choice y otras variaciones por el estilo, que tienen
un doble significado en el Management, ya que permiten comprobar de forma
rápida y efectiva la asimilación de los contenidos por parte de los alumnos, a la
vez que facilitan notablemente la tarea de los profesores y tutores.
Los alumnos pueden evaluar continuamente sus progresos, mientras los pro-
fesores pueden comprobar si consiguieron sus objetivos. La ecuación costos-
beneficios, fundamental en el Management, se verificaría por ambos lados. Por
una parte, mediante la consecución del aprendizaje necesario de los alumnos,
de cara el mejoramiento de su rendimiento en los diferentes puestos de trabajo
en la organización, lo cual tiene un significado productivo que puede ser medi-
do. Por otra parte, el diseño, elaboración y dictado de los cursos también enca-
jaría en la ecuación, ya que el carácter programado de los cursos (consultoría
y evaluaciones programadas) sumado a las posibilidades de sistematización y
automatización de las consultorías y evaluaciones que poseen las plataformas
de formación en línea, permiten una programación y un control del costo de los
cursos, sobre todo en lo que hace a la labor y tiempo de los docentes, la parte
más cara de la formación.
En el marco de la ecuación costos-beneficios es lógico que se privilegie como
interacción básica la de alumno-curso (alumno-materiales didácticos). La visión
pedagógico-didáctica está centrada en que el alumno pueda instruirse por sí
mismo interactuando con el material didáctico preparado para tal fin. Por eso se
habla de autoinstrucción. Esto no quita que puedan existir tutores y determina-
dos apoyos logísticos a los cursos, pero cumpliendo un papel secundario.
En el modelo autoinstructivo el alumno aprende fundamentalmente a partir
de su contacto con los materiales didácticos, más que con los profesores y tu-
tores. Por lo tanto, se trata de un proceso estructurado básicamente a partir
de dichos materiales. Los objetivos, los contenidos y las evaluaciones del curso
dirigen el proceso de formación de los alumnos, por lo tanto estos últimos no
están estimulados a desarrollar procesos de redescubrimiento y reinvención,
sino de seguimiento de las trayectorias pedagógico-didácticas establecidas para
ellos por los planificadores de los cursos.
Naturalmente, se trata de un modelo de enseñanza-aprendizaje basado en
premisas más de tipo conductistas que constructivistas. Por eso, que el alumno
esté invitado a aprender por sí mismo a partir de su interacción con los mate-
riales didácticos, no quiere decir que se trate de un proceso formativo centrado
114 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
4 Aquí también existe una confusión, ya que se denomina “educación centrada en el alum-
no”, a un simple proceso de autoinstrucción a partir de materiales didácticos altamente
estructurados. Desde un enfoque constructivista sería todo lo contrario, ya que estas pla-
nificaciones autoinstructivas estructuradas no dejan mucho margen para los procesos de re-
descubimiento y re-invención de los alumnos, es decir, para que estos últimos desarrollen un
verdadero movimiento propio de búsqueda e investigación.
La gestión del conocimiento como marco para la generación y administración... 115
Modelo colaborativo
5 Con “incorporación funcional” de las NTIC, nos referimos al nivel de integración de las
nuevas tecnologías a la vida cotidiana y a las funciones laborales de los usuarios.
La gestión del conocimiento como marco para la generación y administración... 119
Dedicación docente
• Vencer una serie de resistencias al cambio, sobre todo las provenientes del
peso histórico de la cultura escolar tradicional, y las que tienen que ver con
124 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
Autoformación
Trabajo grupal
¿Cuáles son las barreras que pueden obstaculizar la implementación del e-learning?
prácticamente mantiene a los usuarios fuera de servicio la mayor parte del día,
o con un servicio extraordinariamente lento e inoperante.
En cuanto al problema en el nivel de los usuarios particulares, también es
importante la preocupación por la tecnología. Estar actualizado tecnológica-
mente (hardware y software) es un requisito fundamental para la utilización de
la red y, naturalmente, aprovechar el e-learning.
Pero las barreras más complejas y difíciles de superar son las culturales y
educativas. Se puede contar con la más avanzada tecnología y, sin embargo, no
usarla o usarla en un porcentaje muy pobre de sus posibilidades. Es por eso que
una de las mayores preocupaciones de los gobiernos y las empresas, a la hora
de proyectar la difusión de la educación y capacitación virtuales, se encuentra
en la difusión de la incorporación de la población a la cultura digital. Cuantos
más usuarios funcionales existan de las nuevas tecnologías y medios virtuales,
mayores serán las posibilidades del e-learning.
Por eso decimos que la asunción, adopción e incorporación de la cultura di-
gital a la vida integral de las personas e instituciones en las sociedades, es una
conditio sine qua non para la difusión y utilización de los medios virtuales en la
educación y la capacitación.
Lo que hay que tomar en cuenta en el diseño, elaboración e implementación de
proyectos y programas de e-learning
Existen una serie de requisitos que los diseñadores, programadores y coor-
dinadores de proyectos y programas de e-learning deben tener en cuenta para
que su tarea tenga un verdadero éxito. Algunos de estos requisitos son más
obvios y elementales, mientras otros son más sofisticados. No obstante, todos
deben ser tenidos en cuenta.
Adecuación tecnológica
Este es un requisito de sentido común: que el hardware y el software de los
usuarios sea compatible con los requerimientos del programa o curso de elear-
ning que se les está entregando. Esta es una de las primeras cuestiones que es
preciso observar. Podemos haber diseñado y elaborado el mejor y más comple-
to curso de –learning, pero todo será inútil si los usuarios a los que está dirigido
no poseen el nivel de tecnología (hardware y software) que requiere.
Capacidad para operar con los programas de software que los proyectos
y cursos de e-learning requieren
Bueno, los usuarios poseen una tecnología compatible que la que requieren
los programas o cursos de e-learning. ¿Esto es suficiente? Es evidente que no,
ya que los usuarios pueden no contar con los programas de software requeri-
dos, e, incluso, contando con ellos, no saber utilizarlos y operarlos.
Esto quiere decir que los propios cursos de e-learning dirigidos a los usuarios
deben contener las instrucciones necesarias para que estos últimos cuenten con
los programas de software requeridos y sepan utilizarlos en el marco de las
necesidades del curso.
Por eso, es necesario especificar muy bien estas necesidades en la planifica-
ción y oferta de los programas y cursos de e-learning.
En síntesis, este conjunto de requisitos de “adecuación tecnológica” tienen
más que ver con el sentido común que con cuestiones de tipo cultural y educa-
tivo, como las que veremos en el próximo grupo de condicionantes. Es por eso
que estas necesidades nos obligan, a la hora de diseñar, elaborar e implementar
programas y cursos de e-learning, a conocer las disponibilidades tecnológicas de
los destinatarios de nuestras ofertas educativas.
7 Por “usuarios funcionales” entendemos aquellas personas (o instituciones) que han in-
corporado el uso de las nuevas tecnologías a su vida cotidiana y laboral de una forma más
o menos relevante; en relación a los usuarios eventuales u ocasionales, que usan de manera
intermitente y no integral estos recursos.
130 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
learning serán mayores, con seguridad, que las que pudieran aparecer en los
alfabetizados.
Es posible comprobar que la mayoría de los que niegan e impugnan el e-lear-
ning, apelando a diversas razones, se compone de personas débilmente alfabe-
tizadas en la cultura digital. Cuanto mayor es el nivel de alfabetización, mayor
parece ser el grado de aceptación de esta novedosa modalidad educativa.
También lo mitos tejidos sobre el e-learning tienen más cabida y arraigo en
las personas débilmente alfabetizadas en la cultura digital.
El peso de la tradición de la cultura escolar tradicional y los mitos tejidos sobre
el e-learning
La cultura escolar tradicional tiene un peso muy fuerte en el imaginario del
mundo docente y académico, así como en el grueso de la ciudadanía. Esto hace
que mucha gente del mundo académico y vinculada con él, así como importan-
tes grupos sociales, miren con recelos y prejuicios a esta modalidad educativa.
Justamente, el potente desarrollo que está adquiriendo el e-learning en el
mundo corporativo tiene que ver, sin duda, con el hecho de que este ámbito
está al margen de los prejuicios escolaricistas y academicistas provenientes del
peso de la cultura escolar tradicional.
¿Cómo vencer estas limitaciones, recelos y prejuicios en contra del e-lear-
ning? En verdad, no es tarea fácil. Se requieren tiempo y esfuerzos de difusión
y desmitificación. Sobre todo, comprender que la tecnología no es un fin en sí
mismo. Y que, por lo tanto, el e-learning no es sólo tecnología de punta, sino
que su valor agregado principal proviene de la capacidad y competencia que
poseamos para que esa tecnología rinda los mayores y mejores frutos en su
aplicación a las tareas de educación, formación y capacitación.
La clave está en lograr que las nuevas tecnologías, desarrolladas e imple-
mentadas por profesionales competentes (informáticos, especialistas en multi-
media, académicos, psicólogos, pedagogos, expertos en rr.hh., etc.), se pongan
completamente al servicio del mejoramiento de la calidad de la educación, la
formación y la capacitación de los recursos humanos.
E-learning puro
Para mostrar el aporte del e-learning a las empresas nada mejor que los
ejemplos. Veamos una experiencia de e-learning en el relato de un gestor de
capacitación de una empresa multinacional europea:
132 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
Comprender con claridad qué enseñanzas y aprendizajes pueden ser desarrollados vía e-learning y cuáles no.
Establecer con claridad cuáles son los contextos y situaciones en las que el e-learning hace la diferencia
respecto de otras modalidades de enseñanza-aprendizaje.
Saber complementar con eficacia la utilización de esta modalidad formativa con las demás que se
desarrollan en las organizaciones.
Del e-learning puro, pasando por el blended, hacia una aplicación formativa sis-
témica e integral
Tradicionalmente, el Blended e-learning se define como una modalidad educ
ativa mixta, es decir, que combina instancias presenciales con instancias de e-
learning.
¿Por qué surgió el Blended e-learning? Podríamos dar una explicación susten-
tada en los siguientes hechos:
La gestión del conocimiento como marco para la generación y administración... 135
8 También es sabido, que existen algunos trabajos y tareas manuales propiamente dichas
que pueden optimizarse mediante el aprendizaje a través de simulaciones y simuladores.
138 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
E-LEARNING
⇓ ⇓
E-learning genérico (sobre la base de recursos E-learning con sistemas y artefactos de simula-
textuales y gráficos) ción y simuladores
⇓ ⇓
Conocimientos teóricos, básicos y fundantes
de los desempeños.
Saberes de desempeño (aprender haciendo/
Enseñanza y aprendizaje de conocimientos
learning by doing)
teóricos, conceptuales, valorativos actitudina-
les, conductuales y procesuales.
⇓
Tareas y trabajos con un alto grado de ejercicio
Aprendizaje en los puestos de trabajo con la
colaboración y mentoría de expertos ⇒ manual, que requieren mucha práctica con-
creta y experiencia.
⇓
• El personal y los grupos involucrados en la organización están dispersos
geográficamente.
• Se pretende bajar los costos de traslados, alquiler de salones, contratación
de expertos, etc,
• Se busca que los funcionarios, empleados y operarios puedan optimizar al
máximo el rendimiento de sus tiempos para la capacitación.
• Se pretende optimizar la calidad y el valor didáctico de los contenidos
instruccionales
• Se busca contar con un aprendizaje de alta interactividad comunicativa.
• Se quiere hacer de la capacitación un recurso de calidad, muy flexible y
aprovechable en todo momento.
Conclusiones y sugerencias
⇓
La aplicación de las soluciones e-learning debe realizarse a partir de conside-
rar las diferentes situaciones, contextos y características de la organización y
su personal involucrado.
Por eso, la optimización en el uso de este recurso dependerá de la calidad del
diagnóstico organizacional y situacional que se realice de cara a su aplicación
en la empresa.
Introducción
Además, e-Learning:
El e-Learning, más que una moda es una solución que, en las organizaciones,
se puede orientar a:
• El desarrollo de la Formación.
• El desarrollo de la Cultura Organizacional.
• Su utilización como recurso en los ciclos de Gestión del Cambio y la opti-
mización de la cadena de valor de la organización.
• Promover la Gestión del Conocimiento.
Es cierto que su utilidad se potencia en la medida en que los empresarios y
directivos le otorgan importancia a cada una de las acciones señaladas. En este
sentido, les sugerimos que se formulen e intenten responder a preguntas como
las siguientes:
• ¿Cómo podemos desarrollar y optimizar la formación del personal y los
integrantes (clientes y proveedores) de la cadena de valor de la empresa
mediante e-Learning?
• ¿Cómo podemos mediante e-Learning promover y desarrollar la cultura
organizacional?
• ¿Qué papel puede cumplir e-Learning en los diferentes proyectos y pro-
gramas de cambio encarados en la organización?
• ¿Cómo podemos mejorar el flujo de la información y comunicación en la
empresa mediante e-Learning?
3. Gestión de Contenidos.
4. Gestión de Comunicación.
5. Gestión de Evaluación.
Tengamos en cuenta que sin la incentivación, motivación y participación de
la gente, la implantación de este recurso en la organización corre el riesgo de
fracasar.
1. Gestión de Implicación y Motivación de la Gente
Aquí lo primero es formar a un responsable y/o equipo de gente dispuesta a
promover la implantación de e-Learning en la compañía. Dicho responsable y/o
equipo, deberá procurar que el personal conozca:
• Las ventajas de la formación y la Gestión del Conocimiento en la mo-
dalidad e-Learning.
• Sus posibilidades de crecimiento personal y profesional utilizando este
recurso.
• La enorme flexibilidad espacio-temporal de esta modalidad de ense-
ñanza-aprendizaje.
• Las posibilidades que ofrece para gestionar el conocimiento de una
forma totalmente inédita en la organización, así como desarrollar se-
minarios y cursos de capacitación de una manera totalmente nueva y
efectiva.
• Las posibilidades de desarrollar planes de carrera.
• En fin, todo aquello que permita estimular y motivar a la gente para que
se abra al cambio.
El e-Learning implica asumir la necesidad del cambio, por eso la implicación
de la gente es primordial en este proceso. Asimismo, los empresarios y directivos
deben saber que, sin la incentivación, motivación y participación de la gente, la
implantación de este recurso en la organización corre serio riesgo de fracasar.
2. Gestión de la Tecnología
Aquí los empresarios y directivos también deben reflexionar sobre una serie
de cuestiones importantes:
• En e-Learning, como en muchas otras cuestiones en las que interviene,
la tecnología no es un fin en sí mismo, sino un medio.
• Lo que hace la diferencia, en cuanto a la calidad educativa de esta mo-
dalidad, siguen siendo la pedagogía, la didáctica y, fundamentalmente,
La gestión del conocimiento como marco para la generación y administración... 149
4. Gestión de la Comunicación
Este es otro de los factores clave de e-Learning. De acuerdo a la estrategia
diseñada, mediante e-Learning los Empresarios y Directivos deben saber que
disponen de una rica gama de posibilidades de comunicación interactiva, siem-
pre con la máxima flexibilidad espacio-temporal, como vimos, la más notable
ventaja de e-Learning. Tenemos así:
Recursos asincrónicos de comunicación (en tiempo diferido):
• Contenidos online (las 24 horas del día, los 7 días de la semana).
• Correo electrónico (tutorías reactivas y proactivas).
• Foro (distintos tipos de foros y comunidades de intercambio y aprendizaje).
• Cartelera (mensajes en el LMS).
Recursos sincrónicos de comunicación (en tiempo real): Comunicación ins-
tantánea entre usuarios del LMS (intercambio entre usuarios activos conecta-
dos al LMS).
• Chat de texto, de audio y video (todo tipo de intercambio en tiempo real,
clases en el medio virtual).
• Videoconferencia (conferencias, presentación de productos, servicios a
clientes y proveedores, clases en el medio virtual).
• Pizarra electrónica compartida (complemento de las presentaciones, con-
ferencias y clases en el medio virtual).
• Trabajo compartido (sistema para el trabajo de grupos colaborativos onli-
ne sobre diferentes tipos de proyectos, programas y documentos).
• Con estos recursos es posible realizar diferentes acciones de formación
y promoción con distintos públicos, tales como clientes internos, clientes
externos y proveedores.
5. Gestión de Evaluación
CONCLUSIONES FINALES
Como hemos podido comprobar a lo largo del artículo, los recursos y posi-
bilidades de e-Learning son múltiples, y tanto su uso como su máximo rendi-
miento dependen de la estrategia de implantación que se diseñe. Pero lo que los
Directivos de empresas, Responsables de Recursos Humanos y Consultores
deben saber es que:
• Los costos de consultoría para la implantación de e-Learning son total-
mente accesibles.
• También los diferentes recursos tecnológicos están al alcance de todo tipo
de empresas.
• Que estos recursos no requieren ser comprados, sino que pueden incor-
porarse bajo la forma de alquiler de servicios, de acuerdo a las necesidades
de cada empresa.
La gestión del conocimiento como marco para la generación y administración... 153
1. Usted tiene que saber que la contratación del servicio, (LMS o recurso
tecnológico parcial de e-Learning), siempre debe realizarse en el marco
de la estrategia de aplicación elaborada a medida de la organización.
2. Sin una estrategia clara de para qué y cómo se va usar e-Learning, no es
conveniente que realice ningún tipo de contratación de servicios o alquiler.
Por eso, es indispensable una consultoría de e-Learning, la que puede rea-
lizarse: a) Por personal propio de la compañía, debiendo estar convenien-
temente capacitado para hacerlo, b) Por personal externo a la compañía,
es decir, una consultoría contratada.
3. Tenga siempre presente que la tecnología por sí sola no es e-Learning, sino
que e-Learning de excelencia se consigue modelando a la tecnología con
criterios pedagógicos y didácticos de calidad.
4. No se deje impresionar por las ofertas espectaculares y sofisticadas que,
por lo general, implican grandes inversiones. Lo que requiere básicamente
e-Learning es una tecnología pensada desde criterios pedagógicos de ex-
celencia, segura y con una atención en línea eficiente y de calidad. Y esta
tecnología no requiere, en absoluto, de grandes inversiones.
5. Tenga en cuenta que no es necesario implantar e-Learning de una forma
absoluta en la compañía. Se puede empezar por programas pilotos, e inclu-
so, combinar la capacitación presencial tradicional con e-Learning (Blen-
ded Learning). Asimismo, se puede implantar e implementar e-Learning
en compañías que carecen de sitio web.
6. No haga inversiones importantes en e-Learning sin monitorear conve-
nientemente los programas piloto, o los primeros programas o cursos que
desarrolle. Sólo después de una concienzuda evaluación, es posible tener
una idea correcta del rendimiento de este recurso en su compañía. Luego,
puede comenzar a elaborar un plan de paulatina incorporación del recurso
en su organización.
154 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
Hasta aquí hemos desarrollado una serie de temas y aspectos clave para
comprender el papel y significado de la formación organizacional:
¿CUÁLES SON LOS SUPUESTOS BÁSICOS QUE HAY QUE CONOCER PARA PLANIFICAR,
ELABORAR E IMPLEMENTAR UN PROYECTO, PROGRAMA O INSTANCIA
DE CAPACITACIÓN EN LA ORGANIZACIÓN?
⇑ ⇑
Enfoque de competencias a partir de atributos Enfoque de competencias a partir de atributos
de las tareas. de las personas.
Enfoque de rasgos de
Enfoque de competencias
personalidad
Planteamiento Se definen las características (rasgos Se estudian los comportamientos obser-
básico subyacentes) que deben tener las perso- vables de las personas que realizan su
nas para ocupar un puesto de trabajo trabajo con eficacia y se define el puesto
determinado. en función de dichos comportamientos.
Distintas personas atribuyen rasgos di-
ferentes a una misma conducta.
En consecuencia con lo anterior, es difi-
cíl predecir rasgos específicos asocia-
dos a un puesto de trabajo y definirlos
objetivamente.
No predicen el comportamiento en el
trabajo, ya que se basan en la evaluación
Inconvenientes
de una variable (rasgo de personalidad)
para hacer predicciones sobre el rendi-
miento de las personas en otra (realiza-
ción de las tareas propias de su trabajo).
Las pruebas de evaluación (principal-
mente test) por lo general no se relacio-
nan con las tareas que han de realizar las
personas en el trabajo.
Al centrasre en los comportamientos
observables y no en rasgos subyacentes
de las personas, se facilita el empleo de
conceptos más objetivos, operativos y
compartidos en la organización.
En consecuencia con lo anterior, es más fá-
Ventajas
cil establecer los perfiles de exigencias del
puesto y definir objetivamente los com-
portamientos observables requeridos.
Se facilita la comparación entre el perfil
de exigencias del puesto y el perfil de
competencias de las personas.
⇓
b) Análisis de dichas competencias laborales, según su tipo (de gestión
operativa o de gestión valorativa)
⇓
c) Identificación de las competencias actuales del personal de la organiza-
ción
⇓
d) Detección de las necesidades de capacitación existentes ene l personal
de la organización
⇓
e) Formulación de los objetivos de aprendizaje
⇓ ⇑
Diseño y elaboración de los proyectos y programas de capacitación en la empresa.
3 El concepto de “facilitador” no debe confundirnos, ya que no quiere decir que el proceso
formativo esté exento de conducción, sino que el papel del formador no es el de quien pres-
cribe y determina desde afuera el proceso de aprendizaje del capacitando, sino un guía que
Los conocimientos, supuestos y herramientas básicas
de la capacitación... 173
motiva, promueve y supervisa que los capacitandos sean los motores y gestores de su propio
aprendizaje.
174 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
Educación
Instrucción
6 Debemos tener en cuenta que el carácter instruccional de los programas también se de-
fine a partir de otras variables importantes relacionadas con los tipos de tareas y procesos
que se deben conocer y operar. Cuando las tareas y procesos son los que imponen el ritmo
a los trabajadores, los aprendizajes son necesariamente instructivos. En este caso, los capa-
citandos deben acomodar estrictamente su proceso de aprendizaje a las características de la
cuestión o tema que se imparte en el programa o curso.
Los conocimientos, supuestos y herramientas básicas
de la capacitación... 181
Veamos ahora una tabla en la que aparecen las principales diferencias gene-
rales entre “educación” e “instrucción”:
Pero no buscamos confrontar a ambos procesos, ya que los dos son necesa-
rios. Aunque, desde una visión filosófico-política es más importante el “apren-
der a ser” que el “aprender a hacer”, ambos procesos son imprescindibles para
adaptarnos activamente a la moderna Sociedad del Conocimiento.
La Educación nos enseña a preguntarnos “por qué“ hacemos las cosas, mien-
tras que la Instrucción nos enseña a preguntarnos “cómo” hacemos las cosas.
El “por qué” es fundamental, pero el “cómo también lo es.
Veamos ahora, para una más completa comprensión de los procesos educa-
tivos e instructivos, el siguiente cuadro comparativo:
Educación Instrucción
Conduce en forma vertical rectiva.
Conduce en forma horizontal
Conduce en forma rígida un proceso
proactiva.
que obliga a un aprendizaje coactivo
Facilita el aprendizaje autónomo de
por parte de los capacitandos.
Papel del formador los capacitandos.
Induce procesos de interactividad
Favorece una interactivad libre y la
forzosa en la instancia formativa.
autonomía decisional de los
No favorece la autonomía decisional
capacitandos.
de los capacitandos.
Deseos de aprender, alta motiva- Escasos deseos de aprender, poca
Prerrequisitos de los
ción, buena competencia gnoseoló- motivación, pobre competencia
capacitandos
gica y lectora. gnoseológica y lectora.
182 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
Tipo de competencias
Competencias de gestión valorativa. Competencia de gestión operativa.
asociadas
Instruir, enseñar a instrumentar y
Sensibilidad, concienciar.
operar.
Valores, principios culturales y
Objetivos de Procesos instrumentales vinculados
filosóficos, competencias valorati-
aprendizaje a la tecnología, proceso administra-
vas y organizacionales, procesos de
tivos y operativos, competencias
conducción y liderazgo, etc.
operativas, etc.
Planificación estratégica, cambio Manipulación y operación de
Temas a enseñar y organizacional, liderazgo, producti- máquinas e instrumentos tecnológi-
aprender vidad, marketing, negociación, cos. Diferentes tipos de procesos
planes de negocio, etc. productivos y administrativos, etc.
Ciencias sociales y organizacionales. Procesos instrumentales
Tipo de contenidos Discurso valorativo, cultural y tecnológicos.
filosófico. Manuales operativos e instructivos.
Tutorías, coaching y mentorías en el
puesto de trabajo, coloquios,
Técnicas y métodos de entrevistas, investigación participa- Programas y cursos de capacitación,
enseñanza-aprendizaje tiva, grupos de discusión, charlas guía experta en el puesto de trabajo.
debate, exposiciones-debate,
programas y cursos de capacitación.
Tipo de conducción Conducción facilitadora sobre Conducción coactiva externa sobre
educativa capacitandos proactivos capacitadnos reactivos
Enfoque pedagógico
Constructivismo Conductismo
asociado
Sobre la base de recursos textuales y Sobre la base recursos multimedia y
Tipo de e-learning gráficos. simulación.
a utilizar Principalmente en la modalidad Principalmente en la modalidad
Blended e-learning. e-learning puro.
Área de desempeño /
Papel o función del Puestos gerenciales altos y medios / Supervisión y núcleo operativo /
capacitando en la Gerentes, jefes, supervisores. Supervisores, empleados, operarios.
empresa
Básicamente cuantitativa y
Cualitativa a cargo de tutores,
automática, sobre la base de test y
mentores y expertos.
Modelo de evaluación pruebas cerradas.
Evaluación de potencialidad y
Evaluación de desempeño en el
desempeño.
puesto de trabajo.
Es importante decir algunas cosas sobre esta tabla. Primero que entre edu-
cación e instrucción existen posiciones intermedias, matices que es preciso con-
siderar. No obstante, la claridad sobre los conceptos es lo que nos dará la posibi-
Los conocimientos, supuestos y herramientas básicas
de la capacitación... 183
Una orientación constructivista del enfoque formativo, nos señala los si-
guientes supuestos para una gestión de capacitación de los rr.hh:
“El conocimiento no se trasmite, sino que se construye”:
Aquí existe un supuesto muy fuerte: “son los propios capacitados quienes
aprenden, a partir de moverse por sí mismos, es decir, con un impulso propio. El
filósofo chino Confucio, quien enseñaba antes de que se creara el concepto de
constructivismo, decía: “No enseño a quien no tiene deseos de aprender”. Esto
quiere decir que son los propios capacitandos quienes deben construir los nue-
vos conocimientos a partir de la guía facilitadora de los expertos y mentores, el
material didáctico y los profesores-tutores. Sin una muy activa participación de
los capacitandos no habrá un verdadero aprendizaje.
Los nuevos conocimientos y competencias se construyen a partir de los sa-
beres y experiencias previas de los capacitandos:
Este proceso requiere de los capacitandos:
Aprendizaje significativo:
La realidad es que las personas tienen que aprender una serie de cosas y
adquirir una serie de competencias, sin estar demasiado motivadas y sin un ver-
dadero interés por hacerlo.
En estos casos el proceso educativo, que siempre requiere conducción, aun
en las instancias constructivistas, adquiere una fuerte dirección externa.
Si el supuesto es que la motivación y el interés de los capacitandos es bajo,
entonces, la interacción ya no será natural, sino que deberá ser inducida o for-
zada. Por lo tanto, deberemos introducir elementos conductistas en el diseño y
elaboración de los programas y cursos.
Los supuestos para la aplicación de un enfoque conductista en el diseño y
elaboración de los programas y cursos son los siguientes:
• Cuando los capacitandos no consideran valiosos los conocimientos que se
le presentan, por lo tanto no están dispuestos a realizar un gran esfuerzo
para estudiarlos y, además:
- No están motivados para aprender.
- No disponen de tiempo para aprender.
- No disponen de energía para aprender.
• Cuando la materia a enseñar es de carácter instructivo, es decir, que pro-
mueve competencias de gestión operativa, esto es, de competencias como
atributos de las tareas.
En estos casos, la clave está en la elaboración de programas y cursos de ca-
pacitación que pongan en juego una premisa conductista fundamental:
• Si el capacitando no interactúa con el programa o curso, no podrá avan-
zar en el mismo, por lo tanto, para avanzar en él deberá necesariamente
interactuar.
Como hemos señalado, existen algunos recursos para que los capacitandos
puedan avanzar interactuando con el curso. Principalmente se trata de “obli-
gar” a que los capacitandos interactúen con el programa o curso. Esta interac-
ción forzosa, se puede introducir a partir de los siguientes elementos:
• En cursos en la modalidad e-learning (multimedia preferentemente), se
trata de elaborar un plan de navegación para el curso, en el que los ca-
pacitando, si quieren avanzar en él, deben cumplir con todas las tareas y
pasos solicitados .
• Tanto en cursos del tipo e-learning puro, blended e-learning o presencia-
les, se trata de exigir la superación de autoevaluaciones y evaluaciones
Los conocimientos, supuestos y herramientas básicas
de la capacitación... 189
⇓
Validación de los conceptos
Validación de los conceptos, fundamentalmente mediante test y autoevaluaciones de diferentes
tipos.
⇓
Integración de los conceptos
Integración de los conceptos, mediante su aplicación a casos prácticos.
⇓ ⇓
Procesos centralmente educativos. Procesos principalmente instructivos.
Para reflexionar:
Problema,
disfuncionallidad,
tendencia regresiva o
merma de rendimientos.
⇒ Necesidad de
capacitación. ⇒ Necesidad de una acción
formativa.
⇓
Demanda de
capacitación.
⇓
Proyecto o programa de
capacitación. ⇐ Diseño de una acción
formativa.
Demandas funcionales
Auditorías y diagnóstico orientados
a la formulación de soluciones... 197
Demandas organizacionales
Existen una serie de motivos que pueden dar lugar a proyectos y programas
de cambio organizacional en las empresas:
⇓ Requieren
Cambio e intercamboi del personal en sus puestos de trabajo en la misma sección. Personas que
hacían un trabajo pasan a realizar otro en la misma sección (movilidad horizontal)
Marketing externo (p. e. difusión de nuevos productos y/o servicios en distribuidores y clientes).
200 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
⇓ Requieren
Requeridas por reconversiones tencológicos, así como por reformas estratégicas, proyectos y progra-
mas de cambio y mejora continua en las organizaciones.
⇓
Competencias requeridas en la organización
Auditorías y diagnóstico orientados
a la formulación de soluciones... 203
⇑
Diagnóstico de contrastación ⇒ Necesidades de capacitación
⇓ ⇓
Competencias poseídas por el personal Objetivos de aprendizaje
De las demandas de capacitación a los objetivos de aprendizaje
No obstante, son muchas las empresas que saben que hay que capacitar,
pero no conocen el cómo, el cuándo y el con qué.
Otras veces, se detectan deficiencias de desempeño, pero no se las relacio-
nan adecuadamente con las competencias.
Por eso, es necesario que intervengan los responsables de la gestión de capa-
citación en la empresa ofreciendo los caminos y soluciones más adecuadas.
Aspectos a considerar para encarar la fase de diagnóstico de las demandas
A continuación presentamos algunos aspectos que se deben considerar de
modo general para abordar la fase de diagnóstico.
Al establecer el origen de la demanda:
• ¿Con qué materias o necesidades se relaciona la demanda?
• ¿Cuál es su relación entre las contrapartes (empleados -gerentes) en el
origen de la demanda?
206 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
Los recursos:
Auditorías y diagnóstico orientados
a la formulación de soluciones... 207
Anteproyecto
Negociación vertical
⇒
Datos para la reformulación
Proyecto final
Negociación horizontal del proyecto
⇓
Estos resultados nos permiten caracterizar la acción de formación
⇓
• Tipo de acción de formación a diseñar e implementar
• Alcance y dimensiones del programa
• Destinatarios del programa
• Perfiles de los destinatarios del programa
• Tipos de competencias a desarrollar en los destinatarios
• Recursos humanos y tecnológicos a emplear
• Costos estimativos del programa
• Aplicación de e-learning a realizar
• Resultados esperados del programa
• Planificación del programa con sus respectivas subprogramas y fases (si
los tuviera)
⇓
La interpretación de estos datos nos permite contar con los ejes direccionadores
para desarrollar la planificación integral de la acción de formación establecida.
Las preguntas que sustancian y que deben ser respondidas en este apartado
son las siguientes:
• ¿Qué áreas de la empresa abarca la acción de formación?
• ¿Qué importancia estratégica se le atribuye desde la dirección de la empresa?
• ¿Qué evaluación de costos se ha hecho de la acción de formación o programa?
• ¿Cuánta gente (coordinadores, capacitadores y capacitandos) y durante
cuánto tiempo estará afectada a la acción de formación o programa?
Auditorías y diagnóstico orientados
a la formulación de soluciones... 211
Objetivos de aprendizaje:
Otro ejemplo, lograr que se produzca una efectiva alineación de los emplea-
dos con la misión y objetivos de la empresa.
Es evidente, que estas diferencias llevarán a la necesidad de considerar dos
tipos de evaluación diferentes. La de los “objetivos de la acción de formación
o programa”, que se resolverán dentro del propio programa, y la de los “resul-
tados de la acción de formación o programa”, que se evaluarán en el marco de
una consideración más amplia, que podría plantearse a partir de las siguientes
preguntas:
• ¿Se alcanzaron los objetivos estratégico-políticos y económico financieros?
• ¿Los destinatarios quedaron conformes con la formación que se les brindó?
• ¿Qué impacto global tuvo en la organización la formación realizada?
• ¿Qué impacto tuvo la formación, hacia el interior de la organización, en la
imagen de la empresa?
• ¿Qué impacto tuvo la formación, hacia el exterior de la organización, en la
imagen de la empresa?
A partir de estos interrogantes se pueden elaborar una serie de cuestionarios
de consulta, destinados a las personas o grupos que nos pueden brindar la infor-
mación que necesitamos.
Es evidente que toda esta información también nos será de gran utilidad a la
hora de evaluar la necesidad de elaborar programas o cursos de capacitación en
la empresa.
⇒
Competencias de gestión valorativa.
Comunicación y cultura organizacional Todas las áreas y el personal de la empresa,
según los casos.
⇒
Gerencia media, supervisión y núcleo
Capacitación específica operativo. Competencias de gestión
valorativa y operativa, según los casos.
Alta dirección, áreas gerenciales y
operativas, según los casos.
220 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
⇓ ⇓
Necesidades de la organización a partir de
Problemas, conflictos y disfuncionalidades en
proyetcos y programas de cambio y planes de
las diferentes áreas de la organización.
negocio.
⇑ ⇑
Tarea del análisis organizacional diagnóstico: Tarea del análisis organizacional diagnóstico:
descubrir y explicitar demandas funcionales descubrir y explicitar demandas
de capacitación. organizacionales de capacitación.
⇓
Análisis de las demandas para determinar:
Tipo de problema
Área involucrada
Personal involucrado
Perfiles de los capacitandos, localización, tiempo de que disponen para la capacitación, etc.
Tipos de competencias requeridos
Tipos de competencias a optimizar o generar en los capacitandos
⇓
Determinación del tipo de acción de formación a desarrollar de acuerdo a los datos obtenidos.
Veamos ahora de qué manera procederemos para diseñar las diferentes accio-
nes de formación a partir de los datos obtenidos y procesados en el diagnóstico.
La elaboración de la instancia concreta de capacitación 221
Razones por las cuales eligió tal o cual instancia externa de formación
CAPACITACIÓN ESPECÍFICA
Una vez que los resultados del diagnóstico nos señalaron la conveniencia de
realizar un programa o cursos de “capacitación específica”, es preciso elaborar
un anteproyecto, a ser presentado a la dirección de la empresa y los demás ac-
tores involucrados (destinatarios, personal general de la organización, etc.) para
su negociación y acuerdo de consenso con los mismos.
De esta negociación y acuerdo de consenso surgirá el proyecto final a ser
diseñado, elaborado e implementado por los gestores de capacitación de la or-
ganización. Esta tarea se realiza a partir de los siguientes momentos:
• Elaboración del anteproyecto del programa o curso, que elevaremos a la
dirección de la empresa y los demás actores involucrados.
• Elaboración del proyecto final del programa o curso.
La base para elaborar ambos documentos (anteproyecto y proyecto) se en-
cuentra, como puede observarse en el gráfico siguiente, en las negociaciones
desarrolladas entre los distintos actores y en la interpretación y triangulación de
los datos obtenidos en el diagnóstico realizado en la organización.
La elaboración de la instancia concreta de capacitación 225
⇓
Estos resultados nos permitirán caracterizar el programa o curso de capacitación
⇓
Tipo de programa o curso a diseñar e implementar
Modalidad educativa más conveniente (presencial, e-learning o
blended e-learning)
Alcance y dimensiones del programa o curso
Destinatarios del programa o curso
Perfiles socio-profesionales-educativos de lso destinatarios
Localización de los destinatarios
COnocimiento y/o competencias a desarrollar en lso destinatarios
Recursos humanos y tecnológicos a emplear
Costos estimativos del programa o cursos
REsultados esperados del programa o curso
Planificación del programa o curso
⇓
A partir de la intepretación de estos datos elaboramos los ejes direccionadores para:
⇓
Elaborar el diseño instruccional del programa o curso.
Formular los objeticos de aprendizaje del programa o curso.
Seleccioanr y(o elaborar los contenidos temáticos.
Plantear el método de enseñanza-aprendizaje que mejor responda
a las variables del programa o curso.
Seleccionar y/o elaborar la metodología de evaluación.
Llegamos aquí a un punto que es clave. El desafío es claro. Tenemos todos los
datos, ¿y ahora? ¿cómo diseñamos y elaboramos la instancia de capacitación?
A partir de la interpretación de los datos deberemos ir tomando un conjunto
de decisiones en una secuencia de momentos:
226 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
Esta es una cuestión clave en toda instancia de formación. ¿Quiénes son los
destinatarios? Esto es uno de los primeros temas en que tienen que pensar los
responsables de recursos humanos, formadores e instructores.
Los objetivos de aprendizaje, los contenidos y los métodos de enseñanza-
aprendizaje de la instancia de capacitación, variarán de acuerdo a las caracte-
rísticas de sus destinatarios.
Esto amerita un diagnóstico mínimo de sus perfiles sociales, profesionales y
educativos.
Quienes diseñen, elaboren e implementen las instancias de capacitación de-
berán conocerlos bien, porque de lo contrario perderán una de las principales
guías orientadoras para el diseño, elaboración e implementación de las instan-
cias formativas.
Este tema guarda relación directa con la modalidad educativa a elegir, que
puede ser presencial, e-learning o blended e-learning.
Si los destinatarios están dispersos geográficamente, estamos en una situa-
ción que nos señala la oportunidad de utilizar una modalidad e-learning, ya que
los desplazamientos , viáticos y estadías son muy honerosos. Y no sólo para
personas que viven en otro países, sino también para las que viven en un mismo
país que, como la Argentina, tiene un vasto y extenso territorio.
La necesidad de flexibilidad temporal también será un criterio para inclinarlos
por el e-learning o el blended e-learning.
Aquellos agentes organizacionales que, por sus tareas, no disponen de horas
libres en el día, apreciarán enormemente el e-learning, ya que su flexibilidad, en
lo que hace al tiempo, es total. Con el e-learning se pueden capacitar los 365
días del año, las 24 horas del día. Pueden administrar sus tiempos como más les
convenga.
Es cierto que no existe una fórmula matemática que nos permita establecer
este importante dato. No obstante, podemos plantear algunos criterios básicos
a partir de:
• Establecer, sobre la base de estándares y la reflexión sobre experiencias
bien delimitadas y estimadas, los tiempos necesarios de aprendizaje para
optimizar o adquirir, por parte de los destinatarios, la capacidad de desem-
peñar determinadas competencias, funciones y tareas en la organización.
• Saber que, una vez determinado el tiempo de duración de dichos apren-
dizajes, podremos calcular la duración que tendrá la implementación de
cada uno de los módulos y unidades didácticas del programa o curso.
• Tener en cuenta las competencias y experiencias previas de los destina-
tarios, pues de estos datos también dependerá el tiempo que necesitarán
para aprender determinadas competencias y funciones.
• Tener en cuenta las características del diseño formativo, principalmente
las estrategias de enseñanza-aprendizaje con que contamos.
Mediante la obtención de los requerimientos y datos descriptos, y su inter-
pretación y triangulación, podremos establecer, con una buena aproximación,
la duración que deberán tener los programas y cursos de capacitación.
Finalmente, la interpretación y triangulación criteriosa de todos estos datos
(nos referimos al listado general) nos proporcionará los ejes para la elaboración
del anteproyecto que elevaremos a la dirección de la empresa.
Sobre la base de estos datos se elabora el informe del Proyecto final del Pro-
grama. Lógicamente, este es un informe preparatorio de la etapa de diseño y
elaboración del programa o curso propiamente dicho. Por eso, este informe se
completará totalmente después de diseñado y elaborado el programa o curso
en cuestión. Recién en ese momento estará completo el organigrama del curso,
para ser presentado y distribuido al personal o destinatarios correspondientes.
Los contenidos
2 El término “cursante modelo” está inspirado en el concepto de “lector modelo” de Um-
berto Eco. Por “cursante modelo”, entendemos, entonces, una persona que posee los ele-
mentos, informaciones, conocimientos y competencias que se requieren para actualizar ade-
cuada y eficazmente el curso del que es destinatario. Si carece de alguna de las condiciones
señaladas, ya no podemos decir que es un “cursante modelo” de dicho curso. En este último
caso, los responsables del curso deben tener clara conciencia de ese hecho, a los efectos de
adecuar pedagógica y didácticamente el curso a ese tipo de destinatario.
La elaboración de la instancia concreta de capacitación 235
Métodos de enseñanza-aprendizaje
La evaluación
Tipos y nivel de comprobación Sirve para comprobar el nivel Sirv para comprender la
de la profundiad de los de competencia de los alumnos capacidad de síntesis y
aprendizajes logrados pro los para el análisis y retención de la comprensión profunda de ieas
alumnos información, sobre todo del y conceptos.
tipo instruccional, procesual, Es completamente aplicable
metodológica y sistomica. para comprobar el nivel de
Es poco conveniente para competencia de los alumnos
evaluar la capacidad de síntesis para construir y elbaorar en
y comprensión profunda de forma escrita respuestas,
ideas y conceptos. informes y monografías.
No sirve para comprobar el
nivel de competencia de los
alumnos para construir y
elaborar en forma escrita
respuestas e informes
Es evidente que este cuadro también puede ser aplicado, salvando las dife-
rencias entre las dos modalidades educativas, en la formación presencial.
Los métodos de evaluación también deberán tener en cuenta las caracte-
rísticas de los temas tratados. No utilizaremos las mismas técnicas y métodos
para evaluar temas y contenidos de tipo instruccional y procesual que (enseñar
y aprender a hacer) que temas y contenidos vinculados a lo humano y lo social
(enseñar y aprender a ser).
Finalmente, la evaluación también deberá tener en cuenta los perfiles socio-
educativos y profesionales de los capacitandos. Por ejemplo, el nivel de motiva-
ción e interés por aprender de los capacitandos deberá ser tenido en cuenta por
los capacitadores a la hora de elaborar las evaluaciones. Por ejemplo, tendremos
que ser más cuidadosos en la comprobación de los aprendizajes logrados, con
los capacitandos de más bajo nivel de motivación e interés, que con aquellos
más motivados e interesados. Con estos últimos podremos apuntar a una eva-
luación más rica y sustanciosa.
Bueno, después de todo lo navegado hemos llagado a puerto, es decir, a un
momento crucial de la consultorìa y capacitación en las organizaciones:
• La implementaciòn y evaluación de las instancias de capacitación.
Se trata del último capítulo de la obra, en la que abordamos:
• Los conocimientos, herramientas y recursos clave para la implementación
de las instancias presencial de capacitación.
• Las clases magistrales, tradicionales y dialógicas.
238 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
2 A los que deseen ahondar y profundizar en esta cuestión les recomendamos la lectura del
Capítulo III de Pedagogía del Oprimido.
La implementación y evaluación de las instancias de capacitación 241
Sabemos que una de las características más notorias de los contenidos esco-
lares es su esterilidad, dicho esto en el más pleno sentido del concepto, porque
242 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
¡¡¡¡¡RECORDEMOS!!!!:
Antes de explicar un tema, “problematicemos” dicho tema. Estamos segu-
ros que este métodos mejorará la motivación, el interés y el compromiso de los
capacitandos con la instancia de formación que les estamos proponiendo.
3 A los efectos de una mayor clarificación de su crítica, no queda duda de que Freire se
refiere a educadoras y educadores “puramente” bancarios. Porque no debemos pensar que
en la realidad existen educadores absolutamente bancarios, como tampoco existen absolu-
tamente no bancarios. Por eso, es necesario hablar de “rasgos” bancarios, que pueden estar
más acentuados en unos educadores que en otros. Por más educadores dialógicos que fué-
ramos es imposible que en el sistema educativo tradicional pudiéramos desempeñarnos sin
manifestar algún rasgo bancario, ya que trabajamos en una cultura que, como la escolar, tiene
una matriz autoritaria. En estas circunstancias las contradicciones son inevitables. Por eso,
la superación del bancarismo educativo requiere, indudablemente, de un proceso paralelo de
democratización de la escuela.
244 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
4 En el año 1985, como integrante del Comité Ejecutivo de la III Asamblea Mundial de
La implementación y evaluación de las instancias de capacitación 245
Educación de Adultos, Desarrollo y Paz, que se realizó en el Hotel Bauen de Buenos Aires,
tuve la suerte y el placer de conocer y trabajar con Paulo Freire en varios aspectos de su
organización.
246 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
Los docentes dialógicos también debemos saber favorecer los debates, de tal
manera que los alumnos puedan discutir los temas que les interesen, tratando de
establecer por qué las personas perciben los problemas de manera diferente.
Lo importante es no censurar la forma en que algunos alumnos plantean el
problema a diferencia de otros, sino por el contrario intentan explicar por qué,
248 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
Para ser realmente coherentes con los presupuestos de una educación verda-
deramente dialógica debemos realizar una crítica respecto de las exposiciones
y docentes magistrales. La idea es ayudar a que los docentes adquiramos he-
rramientas para superar esta forma de exponer nuestros temas y dar nuestras
clases, optimizando, así, nuestras competencias como formadores realmente
dialógicos.
Pero, ¿qué son las exposiciones magistrales 6? Son básicamente explicativas y
prescriptivas y se pueden caracterizar a partir de sus supuestos y objetivos.
Supuestos:
Objetivos:
Son muchos los docentes magistrales a los que se les podría aplicar lo que
Max Weber, con gran criterio, decía: “Se puede ser un teórico brillante y, a la vez,
un profesor abominablemente deficiente”.
Esto tipo de docentes:
• Desarrollan y explican sus temas sin prácticamente importarles que ocu-
rre dentro de los alumnos que los escuchan en forma pasiva. En verdad,
no están preocupados por si entienden o no entienden; si se movilizan o no
se movilizan. Su actitud fomenta claramente la pasividad del alumnado.
• El dictado de sus temas es de tipo prescriptivo, ya que no están abiertos a
la crítica de su auditorio, sino sólo ocupados en que incorporen mecánica-
mente todo lo que les trasmiten de forma vertical.
• Luego, en las evaluaciones, exigirán que sus alumnos les respondan lo que
ellos han expuesto, sin admitir ningún tipo de discrepancia conceptual y/o
teórica.
• Salvo que corroboren sus opiniones y puntos de vista sobre los temas, las
preguntas del auditorio de alumnos los fastidian e incomodan.
• Por lo tanto, mediante sus exposiciones verticales practican una pedago-
gía de la respuesta y no de la pregunta. De ahí que la retroalimentación
(feed back) no tenga ningún significado para ellos.
• No están preocupados por el lenguaje usado en sus exposiciones, ya que
no les interesan sus alumnos. No existe inquietud respecto de si es com-
plejo, entendible, etc., ya que parten del supuesto de que los alumnos son
los que tienen que elevarse hasta ellos, cuando en realidad son ellos los que
deberían buscar la forma de comunicarse efectivamente con sus alum-
nos.
• Cuando explicitan conceptos complejos, no se preocupan por proporcio-
nar ejemplos ilustrativos que los aclaren, ya que no tienen preocupacio-
nes pedagógico-didácticas, sino que sólo les importa su exposición teórica
montados en la soberbia de los que todo lo saben.
• Por eso, su temple de ánimo y actitud básica la podríamos denominar:
“soberbia del saber”. Los docentes son los que saben y los alumnos no
saben nada.
• Preparan sus exposiciones en función de mostrar su saber, más que de
promover la movilización por aprender de sus alumnos.
252 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
Pero los docentes tenemos que saber que nuestros alumnos no son vasos a
llenar, sino llamas a ser avivadas!!! Nuestro papel no es ser agua que llena, sino
oxígeno que alienta!!!
Los capacitadores no deberíamos eludir estas preguntas:
• ¿Cuánto de docentes magistrales tenemos?
Si nuestra preocupación es realmente sentida es seguro que encontraremos
herramientas para intentar lograrlo. En lo que sigue desarrollamos algunas.
Objetivos:
Objetivos
• Lograr que los alumnos sean los que construyen, por sí mismo, los
conocimientos.
• Elaborar e implementar las metodologías que permitan lograr en el desa-
rrollo de las clases el objetivo anterior.
256 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
Estos docentes:
• Planifican, elaboran e implementan sus exposiciones tomando en cuenta
los saberes y expectativas previas de sus alumnos y a partir del principio:
primero problematizar y después explicar.
• Desarrollan y explican sus temas preocupados por lo que ocurre dentro de
sus alumnos. Por eso, están atentos a sus actitudes y gestos. Sus rostros,
sus ojos, sus posiciones serán reveladoras de lo que está ocurriendo en
ellos.
• En su exposición estimulan las preguntas de sus alumnos, por eso, cuan-
do advierten síntomas de incomprensión de los temas desarrollados, no
tienen problema de interrumpir su exposición y realizar preguntas para
movilizarlos.
• Valorizan altamente la retroalimentación (feed back), por eso alientan las
preguntas de sus alumnos, ya que les permiten un mayor conocimiento
de lo que saben y no saben, de lo que entienden y no entienden. Por eso,
más que incomodarlos y fastidiarles, agradecen las preguntas. Practican,
realmente, una pedagogía de la pregunta.
• Se preocupan por contextualizar los temas que exponen, en un marco de
realidades conocidas por sus alumnos, a los efectos de intentar superar
cualquier tipo de extrañamiento en ellos.
• Preparan sus exposiciones elaborando ejemplos concretos para ilustrar
los temas, conceptos e ideas que suponen pueden resultar abstractas y/o
complejas para sus alumnos.
• Exponen en un lenguaje que, sin desnaturalizar el significado de los con-
ceptos e ideas desarrollados, extiende un puente pedagógico-didáctico
entre los temas y los alumnos.
• Aceptan totalmente la crítica de sus alumnos, pero atendiendo y cuidan-
do que se la exponga con fundamento. De la misma manera, se permiten
criticar a sus alumnos.
• Su actitud básica es de diálogo, sin por eso renunciar a la conducción de la
instancia educativa.
• Su máxima preocupación es lograr que sus alumnos se movilicen y adquie-
ran deseos de aprender.
• Por eso, preparan sus exposiciones pensando en cómo lograr que los
alumnos se movilicen y aprendan por sí mismos, más que por mostrar su
saber.
La implementación y evaluación de las instancias de capacitación 257
Si es en verdad sabio, no os invita a entrar a la casa de su sabiduría, sino que más bien os
conduce al umbral de vuestro propio espíritu.
El astrónomo puede hablaros de su comprensión del espacio, pero no puede daros su com-
prensión”.
El músico puede cantaros con el ritmo que reside en todo espacio, pero no puede daros el
oído que retiene el ritmo ni la voz que le da eco. Y aquél que es versado en la ciencia de los
números, puede hablar de las relaciones del peso y la medida, pero no puede conduciros
hasta allá.
Porque la visión de un hombre no presta sus alas a otro hombre.
Y así como cada uno de vosotros está sólo en el conocimiento de Dios, así debe cada uno de
vosotros estar solo en su conocimiento de Dios y en su entendimiento de la tierra”.
(Poema del libro “El Profeta”, de Khalil Gibran)
7 Pero esto, que parecería ser algo relativamente sencillo de conseguir, es muy difícil de lo-
grar en el seno de las instituciones y las aulas del sistema educativo tradicional. Y lo es, porque
no sólo están bancarizados los profesores, sino que también lo están los alumnos. La cultura
del sistema educativo tradicional tiene un enorme poder de reproducción y actualización y es
extraordinariamente resistente a los cambios.
260 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
contenidos. Es necesario mostrarles por qué les debería interesar a ellos. Porque
¿cómo motivarlos para que se interesen por los diferentes temas, si no comenza-
mos por mostrarles la importancia que los mismos pueden tener para ellos?
Vincular los temas que estamos desarrollando –sean del tipo que sean- con
la realidad en que vivimos y viven los participantes tiene una importancia pe-
dagógica que es crucial. Esto no quiere decir reducir los problemas o quitarle
su especificidad histórica, sino mostrar los puntos comunes –que siempre los
hay- que unen ambas realidades. La clave está en la motivación. En la medida
en que tendamos puentes didácticos tendremos más posibilidades de motivar e
interesar a nuestros capacitandos.
VIII. Elabore y exponga ejemplos aclaratorios de los conceptos que suponga muy abstractos
y/o complejos para los participantes
Recuerde siempre que es usted quien conduce la clase, aunque debe hacerlo
democráticamente, esto es, sin ningún tipo de actitudes autoritarias. Por ello,
no olvide poner siempre en juego la delicada tensión entre libertad y autoridad.
XIII. No nos olvidemos nunca que nuestra tarea es ayudar a pensar en forma autónoma a
nuestros alumnos
XIV. Permita que los participantes también relaten sus problemas, expectativas e intereses
en la instancia de formación
De la misma forma también cuéntele cosas suyas a los alumnos y hágalo con
humor y optimismo. Esto será útil para que comiencen a tenerle confianza. Eso
sí, que sus comentarios, anécdotas y confesiones no suplanten a la clase.
A manera de síntesis
El tema de la evaluación daría para escribir un libro específico, pero aquí nos
detendremos sólo en algunos aspectos fundamentales de la misma.
En principio, debemos señalar que la “evaluación” es un ejercicio de poder
de quien la implementa 8. En las instituciones educativas esto se ve todos los
Si tratamos de describirlas un poco más se puede decir que en el acto de evaluación, el que
es evaluado expone un parte de su identidad a la mirada del otro mientras que el evaluador
dispone del derecho, más exactamente del poder, de cuestionar, de considerar como objeto
aun cuando sea un discurso, una parte de la identidad del agente evaluado. Entonces en estas
condiciones las relaciones de evaluación son relaciones fuertes en términos de poder. Esto
explica la importancia de los fenómenos de poder en todas las instituciones de educación y
de formación cuando hay momentos de evaluación. (Jean Marie Barbier (1999) Prácticas de
Formación. Evaluación y Análisis. Buenos Aires. Facultad de Filosofía y Letras -UBA-. Edi-
ciones Novedades Educativas. Página 53.
La multiplicidad de los ac
La implementación y evaluación de las instancias de capacitación 267
9 La multiplicidad de los actos de evaluación, en las instituciones escolares, puede tener
como efecto que las personas evaluadas interioricen los criterios y los objetivos en función de
los cuales han sido evaluados. Es lo que llamamos, por ejemplo, “efectos de burocratización
en las administraciones”. Lo más importante no es el servicio al usuario sino responder a los
criterios según los cuales la jerarquía va a juzgarme. El usuario no tiene ninguna importancia.
En la escolarización es como una conducta especulativa, el alumno estudia para recibirse. Es
el efecto de un dispositivo de evaluación sobre las ideologías, los valores y que después actúa
también sobre los comportamientos. Idem (56-57).
268 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
¿Qué evaluar?
• Cómo podríamos saber lo que ocurre dentro de los participantes, esto es,
si aprenden o no aprenden, cuáles son sus dificultades y obstáculos para
aprender, si no conseguimos una verdadera comunicación en un marco de
confianza y respeto mutuos?
• ¿Cómo podríamos colaborar efectivamente en el proceso de aprendizaje
de los capacitandos si no tenemos la información necesaria para hacerlo?
Un proceso realmente democrático y al servicio de sociedades auténtica-
mente democráticas no puede basarse en la práctica de evaluaciones verticalis-
tas y autoritarias.
Para evaluar adecuadamente, esto es, a partir de asumir la esencia correc-
tiva y progresiva de la evaluación, es necesario poseer información, sobre todo
de lo que pasa en los participantes, en su proceso interno de aprendizaje.
¿Cuánta información y de qué calidad podremos rescatar de los participantes
en un marco pedagógico autoritario y en el que, consecuentemente, no existe
apertura, ni diálogo ni la confianza mutua necesaria para que se abran auténti-
cos canales de comunicación entre capacitadores y capacitandos?
La generación de las mejores condiciones para llevar adelante un proceso
de enseñanza-aprendizaje dialógico y, consecuentemente, evaluaciones de ese
tipo, requiere de los docentes:
• Saber abrir el diálogo manteniendo el equilibrio entre libertad y libertinaje.
En este sentido es tan criticable el docente autoritario como el permisivo.
Ambos extremos terminan siendo antidemocráticos.
• Buscar por todos los medios la apertura de canales de comunicación y
promover que ésta fluya en todas las instancias.
• Cultivar la pedagogía de la pregunta estimulándola en todo momento.
• Buscar, de diversas formas y con distintos medios, la generación de ins-
tancias de retroalimentación bidireccional (alumnos-docente/docente-
alumnos)
luar sin entregar retroalimentación (feed back) a los alumnos. Aquí también su
inconsciente cultural traiciona a los docentes del sistema, porque si el objetivo
de la evaluación es acreditar una nota o sancionar a los alumnos por no haber
estudiado, es totalmente lógico que no se les devuelva nada. Pero si no se les
devuelve nada no sólo se aborta el aprendizaje, sino que se los desanima de la
peor forma.
No hay nada más frustrante para un alumno que una evaluación en la que
no se le devuelve nada más que correcciones sin comentarios y una nota. Es
la típica evaluación credencialista, sin comentarios, sin observaciones, sin pro-
puestas, sin apoyo, sin aliento alguno para los alumnos. Nada más que algunos
mal, bien, regular y una nota final. Esto señala un lamentable desempeño de
los docentes. Incluso en la educación superior es común encontrar este tipo de
evaluación, sin devoluciones, sin retroalimentación. También en las instancias
de formación y capacitación en ámbitos no formales no pocas veces sucede lo
mismo.
Si somos conscientes de que la evaluación es un momento esencial del pro-
ceso de enseñanza-aprendizaje, es totalmente incoherente que, luego, la reali-
cemos sin devoluciones y retroalimentación a los alumnos.
La retroalimentación es indispensable en sus dos direcciones, de los alumnos
a los docentes y de los docentes a los alumnos.
Herramientas de evaluación
Pero nada mejor que el desarrollo del proceso de evaluación para caracteri-
zarlas y comprender cómo se pueden utilizar estas herramientas.
El proceso de evaluación
2) Recabar las percepciones y representaciones de los distintos actores respecto del progra-
ma, tanto en sus resultados (lo que creen que aprendieron) cuanto en sus efectos ( cómo lo
utilizaron en el área o la unidad de trabajo) Esta función se puede subdividir en dos:
La implementación y evaluación de las instancias de capacitación 275
4) Elaborar los informes que permitan elevar la gestión de capacitación a la Alta Gerencia.
Estos informes deberían, al menos, incluir información relativa a:
• El funcionamiento de la organización (unidad de trabajo que solicitó la capacitación)
• Los flujos de información (relacionados con le clima organizacional y que afectaron
la acción de capacitación) e indicar un punto de partida para nuevas acciones de
capacitación.
Estándares de desempeño
También creemos que puede resultar interesante confrontar los datos obte-
nidos en los diagnósticos de demandas y necesidades de capacitación, con las
informaciones que luego se obtengan de la evaluación del impacto de las accio-
nes de formación en la cadena de valor de la empresa.
Identificar los
Tiempo de Niveles de
beneficios
evaluación evaluación
intangibles
Propósitos de la evaluación
Nivel 5: ROI: mide los beneficios económicos del programa en relación a sus
costos.
Instrumentos de evaluación
• La experimental
• La operacional
el efecto de otras variables en los resultados, que son ajenas a los procesos de
capacitación.
Obviamente, la idea es comparar los desempeños del grupo capacitado con
los del grupo de control, es decir, el no capacitado.
Como es fácil inferir, esta metodología tiene algunos inconvenientes. El prin-
cipal, es que no se puede implementa una estrategia global de capacitación.
Otro inconveniente, es que son pocas las empresas que aceptan modelos de in-
vestigación en su interior. En cuanto a sus ventajas, la principal es su alto grado
de validez y confiabilidad.
La orientación metodológica operacional, por su parte, considera aspectos
propios de la gestión organizacional en el marco dinámico de funcionamiento
de la empresa. Se trata de determinar, en forma integral, los logros de los pro-
gramas de capacitación en la empresa.
Esta orientación metodológica se asocia con el conocido modelo de Kirk-
patrick, que hemos señalado más arriba. El modelo de Kirkpatrick que, como
vimos, detalla cuatro niveles de evaluación, plantea lo siguiente:
Preguntas estratégicas
Preguntas metodológicas
Para calcular el retorno sobre la inversión, la clave es convertir los datos con-
seguidos en la evaluación en valores monetarios y compararlos con los costos del
programa. Esto exige ponerle un valor a cada dato, en relación con el programa.
Si bien se trata de una tarea compleja, ya que no todos los datos son fácil-
mente convertibles en valores monetarios, es posible aplicar una serie de es-
trategias para convertir datos en valores monetarios. La estrategia específica,
La implementación y evaluación de las instancias de capacitación 289
normalmente se selecciona a partir de los tipos de datos con que se cuenta, así
como del contexto de aplicación.
Debemos saber que los llamados Datos de Rendimiento y los Costos de
Calidad, son valores que usualmente están disponibles en la mayoría de las
organizaciones.
Para los programas donde se ahorra el tiempo del empleado, se usan los
sueldos del participante y los beneficios por el valor del tiempo. Dado que hay
una variedad de enfoques en los programas de mejoramiento de tiempo para la
culminación de procesos, o en las actividades diarias, el valor del tiempo es un
problema importante.
Las estrategias se basan fundamentalmente en el establecimiento de “valo-
res específicos por mejoramiento” y “valores por medidas de rendimiento”.
Algunas empresas cuentan con Costos Históricos, lo cual seguramente les
facilitará las tareas a la hora de convertir el mejoramiento de las competencias
y rendimientos en estimaciones monetarias.
La estimación de los valores de mejoramiento y de rendimiento puede ser
realizada por:
• Alta Gerencia
• Expertos y Asesores internos
• Expertos y Asesores externos
• Supervisores
• Participantes
Durante el análisis, la idea es hacer todos los esfuerzos posibles para conver-
tir a todos los datos en valores monetarios. No obstante, esto muchas veces no
es posible, ya que puede aparecer un componente de subjetividad e inexactitud
imposible de manejar, perdiendo credibilidad en el proceso los valores resultan-
tes. La idea es, entonces, realizar un listado de los beneficios intangibles con la
explicación detallada de su importancia y valor estimado.
Una vez estimados los beneficios tangibles e intangibles, tratando de expre-
sarlos en valores monetarios, el retorno sobre la inversión se calcula a partir de
la división entre el total del beneficio del programa y sus costos.
El retorno sobre la inversión es calculado dividiendo el valor de los beneficios
netos por los costos del programa. Los beneficios netos son los beneficios del
programa menos los costos. En formula RO I, sería así:
ROI(%) = Valor neto de Beneficios /Costos del Programa por 100
10 El concepto de “e-learning” proviene del ámbito del Management y significa “aprendiza-
je electrónico” o “aprendizaje a través de medios virtuales”.
La implementación y evaluación de las instancias de capacitación 293
a la vez, es peligroso que los empresarios y economistas sean los que terminen
definiendo en forma excluyente el e-learning.
Que el e-learning quede prisionero de una visión con pocas preocupacio-
nes científicas y pedagógico-didácticas y que se circunscriba excluyentemente,
aunque no neguemos su importancia, a la cuestión de la productividad como
base de la rentabilidad económica, es realmente preocupante. Y esto es, en
gran medida, lo que ha ocurrido. Por eso, si queremos responder realmente a la
pregunta: ¿qué es el e-learning?, deberemos prepararnos a una reflexión amplia
y sostenida, en la que se ven involucrados muchos factores y condicionantes.
Y lo primero en esta propuesta es evitar quedar prisioneros de la visión del e-
learning que se promueve desde el Management. Con lo que no queremos decir
que debamos desechar esta visión, sino sólo tomar conciencia de que no está
elaborada desde un enfoque científico-teórico de la pedagogía y la didáctica y,
por lo tanto, adolecerá de simplificaciones, reducciones y parcialidades.
Por ejemplo, la comparación, y a veces, hasta el enfrentamiento, entre la
modalidad de la educación tradicional presencial y la modalidad e-learning, ca-
rece de asidero desde un enfoque teórico realmente científico. Aunque pue-
de tenerlo desde una perspectiva económica, en la que se pretende promover
comercialmente una modalidad educativa novedosa basada en la innovación
tecnológica.
Pero la educación en red no puede reducirse a innovación tecnológica, si así
lo hiciéramos cometeríamos un grave error. Asimismo, la educación presencial
y la educación en red son, como hemos fundamentado a lo largo de estos capí-
tulos, dos modalidades totalmente complementarias.
Para abrirnos a una comprensión rica y adecuada de la potencialidad y no-
vedades que introduce el e-learning, debemos intentar comprender primero el
verdadero impacto social, educativo, cultural, económico y político de las nue-
vas tecnologías de la información y comunicación (NTICs).
Pasados más de quince años desde que las NTICs comenzaron a hacerse no-
tar, ya podemos dar cuenta de la magnitud de los cambios producidos en el plane-
ta. La sociedad que empezamos llamando postindustrial se ha convertido en so-
ciedad informacional. Tal como ha descrito y documentado ampliamente Manuel
Castells (1998) en su trilogía sobre la era de la información. Y esta transformación
no sólo responde a la revolución tecnológica, sino también a la interacción de ésta
con los procesos de reestructuración del estatismo y del capitalismo, y con el
florecimiento de movimientos sociales y culturales como el antiautoritarismo, la
defensa de los derechos humanos, el feminismo y el ecologismo.
De esta manera, ha surgido un nuevo modelo de estructura social dominan-
te, denominada por el propio Castells como sociedad red, caracterizado por una
294 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
Esta última tarea conforma algo así como la segunda apertura hacia el e-lear-
ning, esto es, la incorporación e integración de la cultura digital a la educación.
Pero esta incorporación también tiene problemas y exigencias, ya que nos
reclama una reflexión amplia y sostenida respecto de las formas de integración
más apropiadas de las NTICs a la educación. Sobre todo, es preciso comenzar
por el análisis crítico del fracaso de la integración realizada por el modelo edu-
cativo tradicional escolar.
El paradigma cultural de la educación tradicional es tan fuerte que no tardó
en devorarse a las NTICs, las que terminaron siendo escolarizadas. Todo el
impacto inédito y renovador de las NTICs, así como su potencial innovador,
perdieron casi toda su eficacia en el marco de una educación tradicionalmente
autoritaria y cerrada, con programaciones rígidas y docentes con grandes dé-
ficits formativos. De esta manera, el papel de la NTICs en la educación quedó
realmente opacado.
Por eso decimos que el meollo de esta cuestión está, a nuestro entender, en
las concepciones pedagógico-didácticas que coloquemos en la base de las inter-
pretaciones que hagamos tanto de la educación tradicional presencial cuanto
de la educación en red.
Si por ejemplo, adoptamos en forma general una perspectiva teórica cons-
tructivista e intentamos ser coherentes con ella, enseguida veremos que las
contraposiciones entre la educación presencial y en red, en la que se manifies-
tan ventajas y desventajas de ambas modalidades, pierde todo sentido. Una
modalidad no es mejor que la otra, ni tampoco una puede reemplazar a la otra.
Más que plantear contraposiciones y diferencias comerciales y publicitarias en-
tre modalidades educativas, lo interesante es considerar, como un aporte im-
portante, el potencial innovador de la educación en red.
Una teoría del e-learning, en tanto modalidad educativa, debe edificarse y
sostenerse en una determinada teoría del conocimiento. Por eso, la respuesta a
las preguntas: ¿qué es conocer? y ¿cómo se conoce?, es esencial para plantear-
nos y desarrollar este análisis.
Los educadores con una cierta apertura crítica saben que la educación tradi-
cional se funda en una concepción transmisiva y mecanicista del conocimiento,
en donde el profesor es quien prescribe y determina unilateralmente la casi to-
talidad de las acciones pedagógicas, a la vez que está culturalmente consagrado
como el principal depositario de los saberes y conocimientos.
Si esta es la situación, se impone la pregunta: ¿cómo es posible que la escuela
tradicional pueda incorporar eficazmente la educación en red? Porque si hay
algo que caracteriza a la Red es el descentramiento y la deslocalización de los
saberes y conocimientos. Se trata de una estructura abierta de informaciones y
296 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
conocimientos. Por eso decimos que para una buena iniciación en el e-learning
no es suficiente con que los educadores aprendan a utilizar los recursos de la
red, sino que es necesario que se planteen, a la vez, la necesidad de su desade-
cuación a la cultura escolar tradicional. Pero si esto último no sucede en forma
paralela a su integración en la cultura digital, el peligro es que los recursos de
la red pierdan gran parte de su eficacia en el marco de las prácticas educativas
escolaricistas tradicionales.
Dime cuáles son tus supuestos gnoseológicos y pedagógicos y te diré de qué
manera puedes valorizar los recursos educativos de la red. Paulo Freire decía
que la principal virtud de educadores y educadoras es la de la “coherencia”, el
permanente intento de ser coherentes. Hagamos ahora un breve ejercicio de
coherencia:
1. Partimos de una teoría del aprendizaje basada en una perspectiva cogniti-
va social, constructivista y dialógico.
2. Al asumir e intentar ser coherentes con un enfoque socio-constructivista-
dialógico somos concientes a la vez de que nos situamos en las antípodas
de la educación escolar tradicional, que Paulo Freire calificó de “bancaria”,
precisamente por los supuestos gnoseológicos de los que parte.
3. Es cierto que se puede realizar educación bancaria en red, pero de ser así
desaprovecharíamos gran parte de la extraordinaria potencialidad de los
recursos comunicativos e interactivos presentes en la red.
4. La educación en red, como hemos señalado, presenta características que
la hacen, como vimos, afín a una perspectiva pedagógica constructivista.
Por esa razón la educación en red, en tanto modelo pedagógico, así como
el enfoque educativo constructivista, se pueden constituir como propues-
tas críticas respecto de la educación tradicional bancaria.
5. El desafío para los educadores y educadoras inmersos en la cultura escolar
tradicional bancaria es, entonces, doble:
siempre es preciso considerar y analizar las condiciones existentes, así como las
formas de adecuar los recursos de que disponemos a dichas condiciones.
A modo de ejemplo, pensemos en cómo se valorizan las tecnologías de la
educación a distancia cuando debemos impartir formación o educación a po-
blaciones dispersas geográficamente. Y cuánto mayor es su valor cuando dispo-
nemos de tecnologías comunicacionales interactivas, como el correo en la web,
la videoconferencia, el aula virtual sincrónica, el chat, los foros, etc. También
existe una valorización pedagógico-didáctica de la tecnología cuando usamos
el correo en la web o los foros en los campus educativos como una consultoría
complementaria con nuestros alumnos.
Esta disponibilidad del correo nos ayuda a mantener abierta el aula tradicio-
nal que, como sabemos, se cierra entre clase y clase. Si pensamos en diferentes
situaciones, seguramente descubriremos más oportunidades de valorización
pedagógico-didáctica de las nuevas tecnologías (NTICs). En los capítulos que
siguen tendremos oportunidad de ver otros ejemplos.
Con esto queremos resaltar la importancia fundamental de los educadores y
de la pedagogía en el diseño, elaboración y puesta en práctica de las diferentes
instancias de formación y educación en la modalidad e-learning. Será importan-
te entonces tener en cuenta los siguientes aspectos:
• La experiencia y formación de los docentes y capacitadores
• Los supuestos gnoseológicos y pedagógicos
Sin duda, estos aspectos serán fundamentales para una adecuada valoriza-
ción pedagógico-didáctica del e-learning.
Asimismo, es bueno saber que el e-learning no tiene un valor absoluto, ya
que su verdadera eficacia dependerá de:
• Quienes lo usen
• Cómo lo usen
• Desde dónde lo usen
• Para qué lo usen
• Con quiénes los usen
• En qué contextos y situaciones lo usen
Por eso, las comparaciones descontextualizadas respecto de las ventajas y
desventajas del e-learning, en verdad tienen poco sentido. Como hemos di-
cho, hablar de ventajas y desventajas del e-learning es caer en un errado lugar
errado, en un discurso agotado que parte de planteos erróneos que revelan una
pobre comprensión de la cuestión pedagógico-didáctica.
La implementación y evaluación de las instancias de capacitación 299
Abiertos
Transparentes
Descentralizados
Las redes son espacios donde circulan una enorme cantidad de informacio-
nes y conocimientos que no responden a un centro o centros de saber. Se trata
de informaciones y saberes que pueden considerarse deslocalizados, aunque
por cierto esto no evite la existencia de discursos dominantes en las redes.
La implementación y evaluación de las instancias de capacitación 301
No autoritarios
timos del supuesto, con todas sus consecuencias sociales, gnoseológicas y pe-
dagógicas, de la idea de que el conocimiento se “construye”, y no, como ocurre
en la educación tradicional, que se piensa y obra como si pudiera ser transmitido
y almacenado por los alumnos (concepción bancaria de la educación).
Dialógico, porque la construcción de un conocimiento verdaderamente rico,
con auténtico contenido humano y social y que promueva un planeta sustenta-
ble, sólo puede surgir de instancias educativas y formativas dialógicas, es decir,
sustantivamente democráticas. Mostremos que estos dos componentes son in-
dispensables para construir un modelo pedagógico de calidad. Pero ¿cuáles son
los supuestos teórico-operativos de este modelo?:
Partimos del supuesto de la existencia de cinco dimensiones de la educación:
1) El carácter axiológico de la educación y los valores que señalamos; 2) El ca-
rácter dialógico de la educación; 3) El carácter político de la educación, es decir,
la politicidad de la educación; 4) El carácter gnoseológico de la educación y 5) El
carácter metodológico, que debe ser entendido en el marco de las otras cuatro
dimensiones.
Los valores que adoptemos son esenciales, ya que de ellos dependerán los
objetivos y tipo de educación que promoveremos. Por eso, los proyectos, pro-
gramas e instancias educativas y formativas –incluidas las instruccionales y
técnicas- estarán fundadas en los valores sociales, humanos y ecológicos que
hemos señalado.
Ahora bien, si el diálogo es el fundamento de una educación realmente de-
mocrática y democratizadora, la apertura de canales comunicativos será fun-
damental y, para ello, es imprescindible tener un conocimiento de los perfiles de
los educandos (lugar de residencia, ocupación, nivel educativo formal, conoci-
mientos previos de los temas de la instancia educativa o formativa, expectativas
respecto de la instancia educativa, formativa o de capacitación, etc.)
Por su parte, la comunicación educativa será, obviamente, dialógica, es decir
no unidireccional, menos aún de tipo bancario. Será una comunicación sustan-
tivamente democrática y mutuamente respetuosa entre docentes y alumnos,
capacitadores y capacitandos. Por eso, saber escuchar, de ambas partes –do-
centes y alumnos, capacitadores y capacitandos- será fundamental.
El docente o el capacitador conducirá la instancia educativa (destacamos su
rol de liderazgo) de una forma sustantivamente democrática, esto es, con auto-
ridad pero sin ningún rasgo de autoritarismo.
Siendo la apertura de canales de comunicación un tema clave en una
educación dialógica, promover la cantidad y calidad de la retroalimentación
(feed back) entre docentes y alumnos y capacitadores y capacitandos, será
esencial.
La implementación y evaluación de las instancias de capacitación 307
El profesor-tutor debe:
-Invitar a presentarse a sus alumnos en el foro, los que habrán respondido al
cuestionario previo de preguntas elaboradas con la idea de conocer sus lugares
de procedencia, profesión, ocupación, interés por el tema de la instancia educa-
tiva, expectativas respecto de esta última, etc. Esta presentación cumple una
doble función: 1) La socialización de los participantes del curso y 2) La aporta-
ción de un conjunto de datos necesarios para el profesor-tutor desde el punto
de vista pedagógico-didáctico.
foros, en una tarea de tutoría proactiva como la que proponemos aquí, consiste
principalmente en “provocar”:
• Deseos de aprender
• Curiosidad
• Motivación por descubrir
• Deseos de investigar
• La pregunta
• Deseos de leer
• La actitud crítica
• El aprendizaje entre pares
Uno de los primeros aspectos que debemos destacar de los foros es que se
trata de una herramienta en red que posibilita una comunicación interactiva
pero asincrónica. Y la comunicación asincrónica tiene ventajas y limitaciones.
Ahora bien, la idea es aprovechar pedagógica y didácticamente las ventajas en
el marco de aquellas situaciones educativas y formativas favorables al uso de
estas herramientas. Por eso, por ahora nos centraremos en el análisis de sus
ventajas, para luego mostrar sus limitaciones.
Pero, ¿cuáles son las ventajas pedagógico-didácticas de los foros:
- La asincronía, respecto de la instancia educativa sincrónica (clases presen-
ciales, chat o aula virtual sincrónica), les permite tanto a los alumnos cuanto a
los profesores un tiempo mayor para la elaboración de los juicios, las afirmacio-
nes, las preguntas y las respuestas.
Los mensajes deben ser cortos y concisos. Si el mensaje tiene que ser nece-
sariamente largo, debe contar con un resumen en pantalla y luego un archivo
adjunto para descargar o imprimir.
Cada mensaje tiene que incluir una idea, así como algún ejemplo de la misma.
Por eso, si hay dos ideas, debería haber dos mensajes distintos.
Los mensajes tiene que estar presentados de tal manera que resulten fáciles
de leer. Por ejemplo:
• no utilizando letra muy pequeña
• no usando espaciado doble
• no usando solamente mayúsculas
• justificando el texto
Las comunicaciones en red son algo así como “hablar con los dedos”, en lu-
gar de una escritura formal. Por eso, los mensajes breves y espontáneos, sobre
La implementación y evaluación de las instancias de capacitación 321
todo los que se envían a través del chat, no tienen que preocuparnos demasiado
respecto de la tipografía y la ortografía. Mientras los textos resulten legibles, lo
que importa es el flujo de ideas. Aquí, la semántica debe dominar sobre la sin-
taxis. Mientras el contenido sea claro, los problemas de gramática y ortografía
se pueden soslayar. No obstante, los mensajes, ejercicios, trabajos prácticos y
monografías que se presenten en red tienen que estar correctamente escritos,
corregidos y formateados.
Si los mensajes son largos, los participantes tiene que tener cuidado de usar
una ortografía, una gramática y un formato correctos. De lo contrario, pueden
surgir problemas de comprensión. Los mensajes llenos de problemas gramati-
cales y con una sintaxis confusa resultan ser una barrera para la comprensión
de los demás.
Los límites de la comunicación educativa asincrónica interactiva en la red a
través de los foros
La educación asincrónica en red, que se realiza básicamente a través de los
foros, si bien tiene ventajas también tiene sus límites. Son, precisamente, los lí-
mites de la palabra escrita y comunicada en tiempo diferido. Estos límites son:
La evaluación
El sentido de la evaluación
Y estas preguntas las deben meditar y resolver cada uno de los profesores y
profesoras en sus contextos de desempeño.
¿Qué evaluar?
12 Estas variantes pueden verse en la plataforma Moodle. Son siete u ocho tipos de evalua-
ción, pero todas se basan en la selección de respuestas previamente elaboradoras.
326 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
13 Por “calidad” aquí entendemos mayores posibilidades de los dispositivos para desarrollar
una educación de signo constructivista y dialógica. Y hablamos en sentido potencial, ya que la
calidad final de las instancias educativas que se pueden realizar con estos dispositivos depen-
derá, en última instancia, de la competencia de los educadores y capacitadores que los usen.
332 La capacitación en el marco de las distintas culturas organizacionales...
6) Prepare sus clases elaborando ejemplos concretos para ilustrar los temas,
ideas y conceptos que usted supone pueden resultar abstractos y/o com-
plejos para sus alumnos.
7) Utilice materiales didácticos de apoyo de la más variada índole –ya que el
software se lo permite- para ampliar conceptual y pedagógicamente su
exposición. Preste especial atención a la correspondencia de los conteni-
dos de su exposición con los de los materiales didácticos.
8) Exponga en un lenguaje que, sin desnaturalizar el significado de los con-
ceptos e ideas desarrollados, extienda un puente pedagógico-didáctico
entre los temas y sus alumnos.
9) Acepte la crítica de sus alumnos, pero atendiendo y cuidando que se la
exponga con fundamento.
10) Que su actitud básica sea siempre de diálogo, sin por eso renunciar a la
conducción de la instancia educativa.
11) Su máxima preocupación debe ser lograr que sus alumnos adquieran de-
seos de aprender. Por eso, le sugerimos preparar sus clases pensando en
cómo lograr que los alumnos y capacitandos se movilicen y aprendan por
sí mismos.
La evaluación
Cómo lograr tutorías proactivas de calidad en el marco del modelo pedagógico propuesto
¿Cuáles son las sugerencias básicas para una buena tutoría online?
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