Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
La respiración diafragmática mejora los niveles de oxígeno circulante, reduce la fatiga cuando
se está realizando deporte y disminuye los niveles de estrés y ansiedad, tal vez su ventaja más
conocida.
Incorporar una técnica de respiración diafragmática eficiente, que podamos usar en varios
contextos, al inicio puede llevar un poco de esfuerzo y concentración, como todo aprendizaje.
Acostado, en la cama o en una superficie plana, colocar una almohada debajo de las
rodillas. Asegurar que la cabeza, el cuello y la columna están en una línea recta.
Hacer una pausa para sentir cómo respiras en ese momento, para ser consciente de tu
cuerpo.
Colocar una mano en la zona superior del pecho y otra en el abdomen, justo con el
dedo meñique encima del ombligo. Esto permitirá controlar los movimientos.
Inspira lentamente por la nariz, de forma que la mano en tu abdomen sienta la presión
de este al elevarse. La mano en el pecho debe permanecer sin moverse (o casi).
Procura repetir al menos 10 veces estos pasos, con una frecuencia de 3 a 4 veces al
día.