MÚSICA:

Los adultos en cierto punto dejan su lugar de referentes de autoridad y

de interlocutores válidos para los adolescentes.

La publicidad ejemplifica los ideales de la época, lo que se ponen valor,

a qué es lo que se quiere hacer, lugar de completud o promesa ilusoria ligada a
la posesión de un objeto.

El sujeto al consumir puede adaptarse y encubrir la angustia, el

desamparo y la fragilidad, no dando lugar a la elaboración psíquica de las
vivencias.

Hay una dificultad para simbolizar las propias experiencias, lo que

produce un incremento del aislamiento y un quiebre de los lazos con los
demás.

Frente a las dificultades y dolores de la vida, el sujeto usa calmantes a

los que clasifica como distractores o satisfacciones sustitutivas.

La música entonces es un espacio que habilita la distancia

generacional, posibilitando el crecimiento del joven y permitiendo la apertura a
nuevas identificaciones-

La canción, la letra, le presta palabra ayudándole a decir, a nombrar,

aquello que sorprende desde lo corporal y desde los vínculos con los otros.

El sujeto, en la repetición de un tema encuentra un soporte para poder

decir algo que no podría ser dicho de otro modo, un espacio transicional para la
elaboración de ansiedades.

La música es un objeto disponible para ser transformado por el sujeto,

en un recurso posibilitador de subjetividad.

La música brinda palabras para bordear lo propio, lo que no podría ser

dicho si no es por su mediación, es un recurso posibilitador del movimiento del
deseo.

SEXTING

Gana el mercado o los medios de comunicación gracias al declive de las

instituciones o debilitamiento de las referencias. Se desdibuja la autoridad y
deja de haber un límite que restrinja al sujeto.

El sentimiento amoroso queda reducido a la sexualidad y el cuerpo se

expone al mercado, convirtiéndose en una mercancía.

El sujeto se produce a sí mismo para volverse deseable para los demás.

A su vez el mercado ofrece dietas, gimnasios, cirugías, para que el sujeto se
pueda exhibir ante los demás.
 Autoerotismo: la satisfacción del sujeto reside solamente en la acción de
sacarse fotos y verse y ser visto en ellas. El otro queda excluido a una mirada.

Como en la pornografía, el sujeto queda ubicado como una cosa a ser

mirada, se reduce a una parte de su cuerpo.

La tecnología permite que el cuerpo quede protegido ya que está fuera

de la relación, el sujeto ilusiona con que puede controlarlo (las imágenes se
pueden editar o elegir los mejores ángulos, etc.).

La comunicación se realiza sin equívocos, sin angustia, pérdida y sin

cuerpo.

BULLYING

Es abuso de poder entre iguales.

Los involucrados son:

 El agresor: puede actuar solo o en grupo

 La víctima: está aislada y fuera del grupo o incluido de manera
degradante.
 Los compañeros espectadores: pretenden no verse perjudicados,
aunque de igual manera quedan involucrados. Muchos observan
sin intervenir y otros se suman a las agresiones.
 Los adultos: suelen ignorar lo que sucede, o lo minimizan, o
también incentivan a la víctima a “aprender a defenderse”

Agruparse es un intento de superar el malestar. Los individuos se

unifican en torno a un ideal. Pero pueden surgir rivalidades, envidia o celos;

En los seres humanos hay una inclinación hacia la agresión, la hostilidad

que perturba la convivencia.

Varias personas se unen a partir de un rasgo compartido y se reconocen

a partir de ese rasgo que los diferencia de los demás que quedan afuera. La
diferencia se convierte en el motivo para actuar con agresión contra un Otro
que es un extraño.

Un sujeto en masa se puede comportar como quien se encuentra bajo

hipnosis. Se puede producir una parálisis resultante de la influencia ejercida por
otra persona a quien se lo considera omnipotente.

El sujeto encuentra el punto débil del otro: el intervalo donde se aloja el

deseo que se ofrece a la localización del sujeto.

VIOLENCIA Y AGRESIÓN EN INTERNET

 En internet no está presente la autoridad del adulto, por lo que no hay
una demarcación de los límites o una imposibilidad de ciertas formas de
relacionarse con el otro. No hay un orden o estructura, se vacía la autoridad.

Sin una autoridad que regule los lazos sociales, las masas buscan el
sometimiento. La diferencia instaura la desigualdad y justifica la agresión.

Internet permite la capacidad de anular al otro, de desconectarse de él.

No hay un compromiso con el otro. El concepto de lazo social se desdibuja y de
forma, se rompe el vínculo, el otro no existe, se anula la empatía.

El hostigador necesita del otro, de la víctima, para ubicarse y encontrar

su identificación. Hay una tentación para usarlo, humillarlo.

Los adolescentes usan la agresión para comunicarse con otros, usan

insultos para interpelar al otro, se establece un diálogo de ofensas, comentarios
humillantes.

La necesidad de agredir al otro forma parte de una estructura social.

El comunicarse a través de la agresión es una regla. Se busca la

aprobación de los padres porque si no se victimario, se es víctima

En Internet hay una desmaterialización del cuerpo, los medios crean un

espacio en el cual la falta de contacto humano socava el sentido de las
diferencias significativas entre los sujetos.

El otro se hace virtual, por lo tanto es posible anularlo por completo.

Hay una despersonalización en la comunicación, se generan

estereotipos o simplificaciones de las personas, que quedan reducidos a
rasgos unidimensionales.