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I

lrl- COMIENZO

--i

l'¡rr¡rrl Wooclhouse, §ella, inteligente y rica;,con una familia


,,,,¡noclacla y un buetr c'.trácter, parecía reunir en su persona
l,,s rnejores dones de la existencia; y h¿bía vivido cerca de
r «'intiúrn años sin que casi nad¿ Ia afligiera o la enojase.
Iira la menor de las clos hijas de un padre muy cariñoso e
irr«lr.rlgente y,como conseclrencia de l¿ bt«:cla de su hermana,
,lcscle muy joven había tenido que hacer de arna de cas¿. I lacía
1'rr ciemasiado tiernpo que su madre había
muerto para que ella
('onselvase algo más que un confuso recuerdo de sus caricias,
y lrabía ocupaclo su lugar una institutriz, mu)er de gran cora*
zón, que se había hecho querer casi como una madre.
La señorita Thylor había estado clieciséis años con la fami-
lia del señor Woodhouse, más como amiga que como institu-
triz,v muy encariñada con las clos hijas, pero sobre todo con
Emma. La intimidad que había entre ellas era más de herma-
. nas que de otra cosa. Aun antes de que la señorita lhylor cesa-
ra erl sus funciones nominales de institutriz, la blandur¿ de su
carácter raras veces le permitía imponer una prohibición; y
entonces, hacía ya tiempo que había desaparecido la sombra
cle su autoriclad, habían seguido viviendo juntas como amigas,
muy uniclas Ia una a 1á otra, y Emma haciendo siempre lo que
quería; teniendo en grxn estima el criterio de la señorita Thy-
1or, pero rigiénclose fundamentalmente por el suyo propio.
Lo cierto era que los verdacleros peligros cle la situación
rl

de Emma eran, de una parte, que en todo podía hacer su


voluntad, y de otra, que era propensa a tener una iclea de-

rrlli 25

I
r,rlsix(l() llrcn¡ <lc sí ¡lrisrl;1, csl:rs (.1';1, r:rs (r(,s-\,(.,(rr.ii¡s
á (r .( , i ¡rr\ t('t'lc cll lxf l's(»ltlt, ( ,i«'t'tlllllclltc la crcación de una nove*
ame,azaba, ,rezcl,rrse co, sus ,ruclllls r.rllirlrrrlcs.
{ si, crrr i¡ r.rr.:unclttc crrr¡licz,lt clt cl IItOmentO en que el aUtOr traZa
bargo, por el momento el peligro era ral] imperceptible
qu. , rrrr l;r llluma o teclea sus primeras palabras. La mayoría de
en modo alguno podían considerarse como
inconvenientes I',', ('s('r'itores efectúa algún trabajo preliminar, aunque solo
suyos.
Llegó la contrariedad , ,r ilrctltalmente. Muchos preparan el terreno cuidadosa-
pequeña contrarieclad_, sin
-una
que ello la turbara e' absoruto ,rr,lrtc durante Semanas o meses, haCiendo diagramas del
de un modo demasiacro.ririlrl",
la señorita Taylor se casó. .rr p,rrrncnto, recopilando biografias de personajes, llenando

!,, ( ¡irderno con ideas, escenarios, situaciones, bromas tpara


Cada escritor
JANE AusrEN, Entnta (iBr6), 'r:,rrlos durante el proceso de composición.
traducción de Carlos pujol !r,'n('su propia manera de trabajar. HenryJames tomó, pará
t l r|polio de Poynton, notas casi tan largas y casi tan intere-
I'.srrr t's lrr Iristr¡r'i:r r,rís tristc rlrrc jrmás
he oído. Habíamos .urr(rs como Ia noveia en sí. Muriel Spark, por 10 que sé,
Ir';rt:rrlr,,r 1,,s,,\slrlr't.¡rll,t,t (l.t.lllltc ItLlcvc
tcmporadas en la ,,,,'rlit:r el concepto de cada nueva novela y no toma papel y
''¡r¡'l'r'1,1. N,rr¡ll.irr( (), l,r':,r irrri,ritrrrrr... (), más bien, había- i ,¡,rz hasta que ha Compuesto mentalmente una prirnera fra-
,trr.. ,r.,¡lr.trirl, r,¡¡ r.ll,,,t r¡¡r,rs r.t.l;tt.i<¡llcs
frll flexibles y tan , ',r t isf-actoria.
r,r't¡,r1.1.. t .,,1 ,.t¡rl,.lr11, l,rtr llrli¡t¡:ts(.()1,()llfSdeU..ngrrrrtaal"
l,r¡, ¡r,r ,,rlr,l,r,l,,,¡r l,r nr:ul() (lu(. l'¿ra el lector, sin embargo, la novela empieza siempre
I)r.()tcgc. Mi rlrr¡jerfyocono_ , r ¡n ('st primera frase (que puede no ser, claro está, la prime-
r *rrr,..,rl ,.r¡,it.r, ,,\:;lll,rr.rrllrrlr
y rt srr scltrlr¡ tocloloti"r-, qr"
r .. ¡r, ,,,rl,lt. , ,,r,r.t.r. ;r rrll¡rric,, , r lr.uSe que el novelista escribió en su primera versión ciel
I)cr-(), l)()r otrit pxrte, ,.o sabíamos
¡r.r,l,¡ t., :rlrs,lrrt. rr(.cr.(.rr rlc cll,s. ,, rt()). Y luego la siguiente, y ia siguiente"...Q1i,l1do termina
Se ü¿tx, creo yo, de una si_
trrr.irl, t¡rrc s<il. crs posible co, i,gleses, sobre quie,es, , I ,.Ornienzo de una novela es otra pregunta difícil dé con-
inclu_
so en cl dí¿ de hoy,_cuando me paro e
dilucidar lo que sé cle r,',t:u'. ¿Es el primer pámafo, las primeras pocas páginas o ei
estlt triste historia, descubro que vivía en
la más ig_ ¡rilrrrcr Czpítulo? Sea cual fuere la deflnición que uno dé,re[
,orancia' ÉIasta hace seis meses no había pisado "o*pl"t, , rilrienzo de una llovela es un umbral, qüe separa el mundo
,rrrrJn l,g.ll- '
terra' y) ciertamente) nunca habí¿ soncreado ,, ,rl rlue habitamos del mundo que ei novelista ha imagina-
ras profundidídes
de un-corazón inglés. No había pasado
.i" ,o, aspectos más ,1,,. l)ehería, pues, como suele decirse, <<arrastrarnos>>'
superficiales.
Iiso no es tarea fácil. Todavía no nos hemos farniliariza-
,1,, cotl el tono de voz del autor, su vocabulario, sus hábitos
FoRD MADox FoRD, El buen soldado (tgr 5), ,rrrrrícticos. A1 principio leemos un libro despacio y dubita-
traducción cleJosé Luis López Mu¡tz rrrr¡¡ente. 'lenemos mucha información nueva que absor-
lr|r'y rccordar: los nombres de los personajes, sus relaciones
,1.. rrllnirlacl y consaneuinidad, los detalles contextuales de
_¿Cuándo empieza una novela? La pregu¡rN cs r,:rsi l:rrr ¿ifícil r('nrl)o V lufl'rrr..., sitr los cuales l¿ historia no puede seguirse.
de co,testar como la cle cuírrrl. rr) ('1,r, i,, Ilr¡¡lr:rr() totlo t'sr.r'slilcrz«¡? La rnayoría de los lecto-
s(, \:rlrlr.rÍ lrr ¡rrrnrr

, (t
4 rcs cst¿in clispucst.s u c«¡,cedcr al
él ¿utor er be,efici. crc r , ,,rlrr:rl)rt tlccitlil si ilrlr il cllsilrsc y con quién' Ernma goza
duda al rnenos por unas pocas páginas,
? antes de decidir vr¡r ,,r.r lil¡e rtad ¡loco habituai a ese respecto' puesto que es
ver a cÍuzar el umbral en sentido contrario.
con los especímenes mostrados aquí
sin embargr,, , ',('lr()r'.t cle su casa>>, una circunstancia que favorece su
nuesffa vacilación ser.,¡ ., r,r¡,,¡¡¡¡i1¡, especiahnente teniendo en cuenta que ha sido
probablemente mínima o inexistente. ya
ra primera frast .l,r,.rrl;r l)oruna i,stitutriz que le dio el afecto de una ma-
nos <<engancha» en cada caso.
iri. l)r't'o no (se nos da a entender) la disciplina que una
El comienzo dera novera deJane Austen
es crásico: rúci ,¡¡,ir lr t' habría imPuesto.
do, mesurado, objetivo, con irnplicaciones
irónica, o.,rlt., l,s0 está irnplícito aún más claramente en el tercer pá-
bajo el eleganre gpante d. ter.Lpelo
del bastante interesante, em-
quri . r rl,,;
[)cro al mismo tiempo, cosa
caída.r."rJto.-¡Con
sutileza la prirnera frase prepara la el discurso' al
r, h"ioínar L. ,,,.',,,,,',,, a oír la voz de la propia Emma en
que vamos a presenciar es Ia historia
de cenicienta ar revés: ,¡rr',nro tiempo que la juiciosa y objetiva voz del narrador'
c'r vcz. tlc ,., Ircr,íra irfr-rrvarr¡racra __el tipo de t
arorr* qr. I r rrrtirnirlad que había entre ellas era más de hermanas
rr n t t'r-ior-nr cn t c hrr l rí:r
ru r.rl írlo Jrl illtagjnaciói
de
rlt'stlt. Ot-,y,¡¡//¡¡ )t l)t.(,1/tir.¡o l.vtsttt il,ltn:fictrt par.k_Jane
Austen, i,i, rlr: otrs cosa>>, <.habían seguido viviendo juntas como
destinada a ,!,,r,1;rs>>... En esas frases nos parece oír la clescripción que
tl irull;lr, l,nurr:l
I rr r,r lrl misrna Emma, bastante satisfecha de sí misma, de su
( \,r,,,,,,,,,li :i I illi:;lJl[,,::ir,:;:,1x*i;
(r,(' (', l;r ¡r.irrrt'r':r li';rst' sc. tlcs.r-ilrc ,, I rr iril.r con su instirutriz, relación que Ie permitía hacer
su belleza, h)rrbome, tie_ ,il,ilr1)re lo que queríarr. La estr-uctura irónica de la conclu-
fr(" I)()1.()lxrsi.iri, rr ,. tór-1,i,«l rrlís
convencional como se_ ,,,,l ,l"l pátr:afo, ttteniendo en gran estima el criterio de la
l'r'tttti-r)r/, ., rrutiz a,drrigiro;
'¡ c¡r-rizás se nos quiere dar
a , rrrritA Thylor, pero rigiéndose fundamentalmente por el
t'rtc'rlc. quc rray en Emma u^a Iirerza de
voluntad rnascu_ rr1, ¡rl'opiorr, equilibra simétricamente dos informaciones
line. La sizuiente palabra,cleaer. (.rinteligente»
o <.listarr), de_ ¡, ,,. , l.sde un punto
de vista lógico resultan incornpatibles, e
signa_ la i'teligencia con cierta
ambigri"edad, y; q;"; veces ,,rilr('r así el defecto en e1 carácter de Emma que es explíci-
se aplica peyorativamente, c.mo cuando se
riice..demasiacl0 r rrrrt.llLe expresarlo por el narrador en el cuarto párrato. con
h¡ta Rala_zu propio bienrr). ..Rica,
está cargada de connora_ i , lrotla de la señorita Taylor empieza el relato propiamente
ciones bíbiicas y proverbiales sobre
ros peñgro, ,,o.rt., ¿. ,l,r lro: privacla de la compañía y det maduro consejo de la
la riqaeza. En suma,
los tres adjetivos, ,urr""l"grr,,.rrr.r_,,. ,¡rr,' l'rrc su instirutriz, Emma la sustituye por una joven pro-
combinados, indican er carácte.
engrnoso de la aparente rr 1,i1l,¡, [{arriet, que fomenta su vanidad y en vista de cuyo
forruna de Emrna' ,oas haber vivido
<<cerca de veindún años rrr.rlrirn<tnio Emnra empieza a intrigar, con desastrosos re-
sin que casi nada la afligiera o Ia
enojaserr, le ., r I t:rtl<ls.
despertar' con casi rreintiún años, "rp..",rr.rdo
es creciq en ei umbrar de
lo que en esa éOoc"a la
asurnir ia respo,sabilidad11 mayoría cle e,la,j, l" .r,rr..rir,,ra.
cle su ,ro¡rirr inicial rlc l'¡ lror.,ela de Ford A4adox I'ord es
jer cll la socic«]¿ttl llurgLresr, 'irr:r, .1 r):r.:r ,r)i,rrr- Lr f rilrrOsrr fl-ilsc
,1",.,,,,,',,.n./()!, (i,,1 ,.ry,1,, 1¡¡ 1,q1¡ un t('('¡l's9 llltq't'ltttt(' l)ill'tl lls('ll'tll':ll'S(l llr lrtetlCión del leCtOr:

,, l)
rl t'ltgltittl' Algurltls dc
I rr '. "llt ,'tlllr;tt'grl, rlt' rx'tlltllllll('llt()
prácticamente llos agarra por cl cucllo pare 0lrligrr|ll()s :r son rápida-
4 , .rllrrrlls sttscitrttlos pot' t'l llt'ilttcr lliirrafb
,rur^, el umbral. Pero casi de inmediato algo oscuro c intli infilrrnación de que quien
.., ,!r, , x¡rlicrttlos --'n"tiitt''''c la
{a recto, típicamente moderno, una especie de angustia frentt' por ejemplo-'
,..l,l r r... rr. u.rcricrrro-.ftr" vive e' Europa,
,.rn porible descubrimiento, impregna la narración' ¿Quién y la hipocresía
i', r,r .l crótlito que merece su testimonio
es esa persona que nos habla? Habla en inglés y sin embarg<r temas cruciales de esa
,i,.rr(':r tlc los o,'o' ft"ot';t' serán
no es inglés. Hace por 1o menos nueve años que conoce a lrr narrador'
i.i . rr rrr, l:l rnás t,i't" jamás oída por el
parejainglesa que parece protagonizat ,rla historia más ris-
,.rr, , p"*t de 1o cual asegura no haber ttsabido nada" de los
ingleses hasta el mismo momento de la narración. ..He oídorr, otras maneras de empezar
una
I1.r1, rrrtrtralmente, muchas
1, p.imera frase, implica que la historia que el narrador este libro tendrán ocasión
"r,* ::¡¡rrlrr y los lecto"' qo" hojeen
va a contar no es la suya propia, pero casi inmediatamente he elegido el pri-
parti- .t¡ \'r'r' nlgunas de ellas, porque a menudo
r-ros «lir 11 ctttcltdcr c'¡ue el n:rrrador, y quizás su mujer, otros
.i,. r llril'l'ilfo de una o de un cuento para ilustrar
r.i¡¡rr.o¡ cn cllrr. lil ll¡rnrclr)r Conoce a los Ashburnham ínti- "o-"1' (eso me ahorra tener que re'
..,,,,*', ,,,s clel arte de ia ficción
¡¡¡¡(,¡t¡ y:r l:r v(,,¿ tto srtl¡c, lratla de ellOs. ESaS cOntradiccio- *i'ás la pena indicar aquí la
n(.\ \otr l':rt'iollrrlizrrrlrts ('()ttlo ull cf'ccto del CaráCter ingléS, de
=¡*rrr ,'l argumen;';;;; "ale
r;t tlc posibiiidades'
l;r ,lis¡r,rrirllrl t.lrtr-c :rllrric:ncia y realidad en el comporta- =.rrr
una larga descripción' la
I Itra novela puede efi-rpezarcon
nrit.lrro rlc lrr cl:rsc lnctliu iuglesa;de modo que este principio va a ser el principal escena-
l, I ¡r;risrrje naturai o urbano que
..slrozrr un tclnil sirt-ril¿rr al de Entmd, aunque las premOnicio- de cine llaman mise-en'
:i,, ,l(' Ll historia,lo que los críticos
ncs (lLlc deja en el aire suenan más trágicas qtle cómicas. La de Egdon Heath aI
,,irlr'; l)or .¡.*pio, 1¿ sombría pintura
palaltra repite hacia el final del párrafo y se deja
<<triste>> se
the iatia' (El regreso dei
indíge-
, ¡ ¡rrr('r'r7.o d" fn' n'iT t of
.r., o,ru palabra clave, <,corazófi" (dos de los personajes qot E' M' Forster hace de Chan-
.,.r ) rlt" l'homas U'^'"ly,oí'
sufren supuestamente del corazón; todos ellos tienen vidas propia de una guía
,tr,r¡,r'c, en una ;;t; "itgu"t"' urbana'
emocionales desordenadas), en la penúitima frase' ta lnd'ia§pt19191a pugde
usé la metáfora de un guante para describir el estilo de
,i, \ rititrs, ,l ..*i:;;; i-Fnto¡t'a 'f'In
pu'ñado de
como
, rrrf rr'z,1rr en medio de una conversación'
las obras tan especiales de hy
Jane Austen, un estilo que afirma su
autoridad, entre otras
,,,,/,',, rlc Eveiyn W';h, o
cosas, renunciando a las metáforas (ya que la metáfora es un sorprendente
r rrrrtl)toll-Burnett' Puede comenzar con una
tropo esencialmente poético, en el polo opuesto ala razóty t""do't (Her-
r ( )| )t'csen,r.ion la "Llamadnre-Isn§ael"
el sentido común). Esa misma metáfora del guante se da ñ;ilt de mangas a la
¡
',
,¡r,,tt MclV llle, Moby Dick)' o con
ciertamente en el primer párrafo de El buen soldado, aunque <<["'] 1o prirnero que
,, rrlit'itit't literaria á" 1' "'tobiografía:
con un senddo diferente. Aquí significa un comportamiento t-'u"1 tl dot'dt nací y cómo
fue mi
cortés en sociedad,los rnodales en apariencia relajados, pero ¡rr'lrrlrlc.re,t" ;;;tt eso antes
! ., 1, r( r'( )s1r i,'ttá'cit, y qué
hacian mis padres y :"9"
siempre bajo control, que suelen asociarse con la riqueza v t" basura aio David Copperfield'
el refina¡riento (un ..buen>> zuante, sc cs¡rt't'ilit'rt), cotl tttl '1, r( rr('t'rlrc ,, "ti, i 'ntln

JI
j(,
t
"a
l)cr'() r)() tcng() glul:rs rlc lllctcnnc c¡r t.,rl, t.sr t,. (lil ,ryrrtt
dii, c'nt'rc t:l cctttcno, de J. D. Salinger). un n.vclista puctlr
I , lr.rlrf :r, r'r()s lt'rrt' ¡l« »' tn (tiltto(liu.s uictt.¡ tlc circunvalación
. , 'r,'lrrr ll c'ustillo tlc I l«rwtll y ll.nvirons'r. El fragmento
/ empezar con una reflexión filosófica: ..El pasado es url pr¡r,,
i,,, l.rltrr cottcluyc cl lilrro: ..un camino solo al fin amado
extranjero: allá hacen las cosas de otra manera>>, co*. :!i¡rrlrrir rr lo larg«r debr, volviendo así otra vezal comienzo,
L. P. Hartley en Tlte go-betuseen (El alcahuete), o poner rrr , ,,,,,,, ,'l irtr{r.ril, que circula en el medio natural del río al mar,
personaje en apuros desde la primerísima frase: ..ño hací,, !, I rr;rr' ;r I:t nube, de la nube a la lluvia y de la lluvia al río, y
ni tres horas que había llegado a Brighton cuando Flale sup., ++rrrlrr.rr conlo la infinita producción de sentido que propor-
que querían asesinarle>, (Graham Greene, Brighton, parqtrr, , inr¡r l¡l lcctura de ficciones.
§ de atv'acci0nes). Mrchas novelas se inician .o, ,.r, historia
marco que explica cómo fue descubierta la historia princi-
§) pal, o narra cómo es contada a un público ficticio . p.i Et ,u
h,
razón de las tinieblas de conrad un narrador anónimo
muestrir
a Marlow reiatando sus experiencias en el congo
a un círcu
lo de amigos sentados en el puente de una yola .n el estuari,
clcl 'l'rírncsis (<.Y tambié, este
-empiezaMarlow- debirr
scr rn.ro rlc l,s lugares más siniestros de la tierrarr) . otnt
ztttt'/rl lc tur:r'tt cle FIenryJarnes consiste en un relato auto
lri.gráfic. escrito por una mujer ya falrecida, el cual es ieíckr
cn voz alta a los invitados un fin de semana en el campo,
qu(,
se han estado contando unos a otros, para entretenerse, his-
torias de fantasmas, hasta llegar a esta última que supera c.
horror a todas las anteriores... Kingsley Amis .-pi.r, ,,,
historia de fantasm as El hombre aetzre con un ingenioso pas
tiche de una guía gastronómica: ..Apenns h, s.rplrado la sor
presa de encontrar un auténtico mesón a menos de
4o mill¡s
de Londres a B de ia autopista Mr-, crrrrdá uno s(,
-y
encuentra maravillándose por la calidad de los gSrisos, ,r,
menos auténticamente ingieses...>>. si una noclte de inuicttt,,
un uiaje,o de Itaio calvino empieza: «Está usted a punto
tlt,
empezar a leer la nueva novela de Italo calvino, silna.nod,,
de inaierao an uiajero>. Finnegans wake de
James Joyce c.«r
mienza en rnedio de una frase: ..Río que discurre, Áás ,ril,,
de Adam and Eve, desde el recodo cle la oríil, rr Ia enscr,r,r,,

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