OFRENDA

LUCAS 5

Cuántas veces nos hemos sentimos desesperanzados cuando a nuestras vidas

llegan situaciones que nos distraen y quitamos nuestra mirada de Jesús. Es así
como sacamos a Jesús de nuestras barcas, para guardar nuestras redes o
sueños y nos estancarnos en la playa de nuestras propias vidas:

El pesar y la frustración que Simón y sus compañeros estaban confrontando

eran justificados. Se encontraban desvelados, agotados, desesperanzados, en
fin experimentaban un día de fracaso o derrota. Más, sin embargo el Señor
Jesús conocía la situación de todos ellos. Y aun así al sentarse en la barca de
Simón Pedro es vez de compadecerse de ellos, les da un aconsejo con carácter
de mandato ¡Boga mar adentro!

El sentido del llamado de Jesús para Simón Pedro era muy claro: sal y empuja la
barca a las profundidades del mar, no te quedes en la orilla. Pero para Simón
Bogar mar adentro, en ese momento era un sin sentido. Recordemos que Simón
era un pescador experimentado. Habían pasado toda la noche de pesca sin ningún
resultado. El pescador experimentado sabe que la pesca productiva se produce
en horas de la noche – madrugada.

Salir en la condición en que estaban agotados, desanimados, temerosos, con

sueño, etc. representaba riesgos salir nuevamente al mar. No se sentían en
condiciones de enfrentar posibles tempestades, depredadores, mal tiempo u
otro posible contratiempo de la naturaleza.

Simón reconocía en su ser que Jesús era un maestro de la palabra de Dios y que
incluso podía ser un ungido de Él. Pero no le atribuía experiencia como pescador,
y por esto estaba lleno de dudas. Aun así, Simón decide obedecer al llamado del
Maestro y boga mar adentro para echar sus redes. Claramente podemos ver que
Simón fue obediente y sobre todas las circunstancias confió en Jesús.

Bogar mar adentro, en el sentido literal significa remar con empuje para mover
la barca a las profundidades, más en el sentido espiritual ¿Qué significado tiene
esta expresión? ¿Cuál es el mensaje que Jesús nos quiso dar? Después de un día
malo Jesús nos dice ¡Confía todo estará bien!
  No te quedes en la orilla, ¡yo haré la obra!
 Necesitamos esforzarnos y seguir adelante con Él y en Él
 Es preciso mantener la fe
 Reconocer que el Señor está por encima de nuestras razones

Este verso nos enseña que el Señor siempre nos ve, Él sabe cuáles son nuestras
necesidades, nuestros temores, Él sabe cuándo nos hemos alejado de la
comunión con su palabra. Y nos dice una vez más: ve, echa nuevamente las redes
y pesca, pero ahora en mi nombre.

Si lo hacemos de la misma forma que lo hizo Simón, nuestra confianza será

recompensada en abundancia de bendiciones. Las bendiciones Dios siempre
sobrepasaran nuestras expectativas