Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Introducción:
(Predica: Deposita tu confianza y seguridad en Dios) Agobiado por la sed, llegó un
ciervo a un manantial. Después de beber, vio su reflejo en el agua. Al contemplar su
hermosa cornamenta, se sintió orgulloso, pero quedó descontento por sus piernas
débiles y delgadas. Y de pronto apareció un león que comenzó a perseguirle.
Echó a correr y le ganó gran distancia, pues la fuerza de los ciervos está en sus
piernas. Mientras el campo fue plano, el ciervo guardó la distancia que le salvaba; pero
al entrar en el bosque sus cuernos se engancharon a las ramas y, fue atrapado por el
león.
A punto de morir, el ciervo dijo para sí mismo: “pobre de mí, mis pies, que pensaba me
traicionaban, eran los que me salvaban, y mis cuernos, en los que ponía toda mi
confianza, son los que me condenan”. A veces confiamos demasiado en nosotros
mismos, o en otros, pero en el Señor podemos confiar totalmente, por eso deposita tu
confianza en Dios...
"Cuando terminó de hablar, dijo a sus discípulos: Boga mar adentro, y echad vuestras
redes para pescar. Respondiendo Simón, le dijo: Maestro, toda la noche hemos estado
trabajando, y nada hemos pescado".
Comentario: Debemos tener en cuenta que Pedro había crecido a orillas del Lago de
Genesaret (llamado también mar de galilea), aprendió el oficio de pescador y conocía
muy bien este lago.
Debemos también destacar que estaban pescando de noche ¿por qué? Porque de
noche los peces se acercan a la superficie, pero en esa mañana no tenían nada. Creo
que Pedro (como cualquiera de nosotros) pudo haber pensaba muchas cosas, como,
por ejemplo:
Estos son momentos donde nuestra fe en Dios es probada, pero aquel que cree en las
promesas del Señor persevera y espera en Dios, él ha prometido que no dejará en
vergüenza a todo aquel que en él crea, por eso deposita tu confianza en Dios, él todo
lo hace bien.
Como podemos ver al terminar la enseñanza el Señor Jesús le dijo: “boga mar
adentro”, parafraseando: “no te quedes aquí, vamos nuevamente…” ¿Cuál era la
diferencia, si de allá venían? Era la misma barca, el mismo lago, las mismas redes, los
mismos pescadores, la diferencia era que ahora Jesús estaba con ellos en la barca, y
cuando él está cosas maravillosas y sobrenaturales suceden.
A. El poder de Dios impacta el corazón del hombre, produciendo un cambio profundo.
Lucas 5:8-10a.
"Viendo esto Simón Pedro, cayó de rodillas ante Jesús, diciendo: Apártate de mí,
Señor, porque soy hombre pecador. porque por la pesca que habían hecho, el temor
se había apoderado de él, y de todos los que estaban con él. y asimismo de Jacobo y
Juan, hijos de Zebedeo, que eran compañeros de Simón".
Sin embargo un día el Señor Jesús llegó y la vida de Pedro fue radicalmente
transformada y recibe de Jesús el diseño de Dios para su vida: y le dice en otras
palabras: “Pedro hasta aquí ha llegado este periodo de tu vida, éste ciclo se ha
cerrado y comienzas uno nuevo, un nuevo tiempo, desde ahora serás pescador de
hombres” y recibe la más grande profesión, el más grande oficio, el mismo del Señor
Jesús.
Comentario 2: Como podemos ver Pedro pasó de de las redes a la predicación, de
los peces a los hombres, de lo poco a las multitudes, del conocimiento teológico a la
realidad del Espíritu Santo, del anonimato a ser el líder del avivamiento en la ciudad de
Jerusalén (Hablamos de la fiesta de Pentecostés según el libro de los Hechos 2).
La Biblia nos enseña que Pedro llegó a ser un poderoso apóstol en las manos del
Señor, “del vulgo y sin letras” a ser el escritor de dos epístolas de la Biblia: 1ª y 2ª de
Pedro. Es lo que Dios hace cuando nos disponemos en sus manos.
La biblia también nos enseña que José, hijo de Jacob, un día soñó y era de Dios su
sueño, sus hermanos quisieron matarlo, fue esclavo, luego estuvo en la cárcel, pero
no dejó de soñar y finalmente Dios se glorificó en su sueño, porque Dios es
todopoderoso. Por todas estas cosas, deposita tu confianza en Dios, él todo lo hace
bien.