Cataruzza:

Cap. 2: “Los gobiernos radicales”

Entre 1916 y 1930, se sucedieron 3 gobiernos radicales, el último de ellos interrumpido
por un golpe de Estado. Durante estos años los grupos conservadores (ya sin tener el
poder político en sus manos debido a la Ley Sáenz Peña) y los radicales bajo el mando
de Hipólito Yrigoyen entraron en constante conflicto hasta que se sucedió el Golpe
Militar de 1930 y que tuvo como presidente a Uriburu.
Yrigoyen y la presidencia:
El 12 de octubre de 1916, apoyado por un gran número popular, Yrigoyen asumió la
presidencia dando pie a 14 años durante los cuales la Ley de 1912 rigió todos los
comicios en Argentina. Fue un período en el que la Unión Cívica Radical fue el
principal eje político en cuanto a elecciones. En 1922, sucedió a Yrigoyen Marcelo T.
de Alvear. En 1928, Yrigoyen volvió a la presidencia. La presencia de Diputados
radicales fue alta. El período tuvo su cierre en 1930 con Uriburu quien encabezó un
golpe militar y de estado con el apoyo de las FF. AA, la oposición al radicalismo, la
prensa y sectores de la opinión pública. Con este acontecimiento se clausuró la
experiencia democrática más larga en la Argentina del siglo XX hasta 1983.
Desde 1916, el radicalismo se hallaba dividido dentro de las provincias y con la llegada
al gobierno, esas divisiones se hicieron más fuertes. Se produjeron en las provincias
conflictos internos; se trataba de pujas entre facciones por la administración o por el
reconocimiento de los organismos del partido.
Los conservadores y los Socialistas eran los grandes opositores al Radicalismo. Los
radicalistas crearon ciertas imágenes sobre sí mismos y de sus adversarios. Así, los
demás partidos eran pensados desde el gobierno como agrupaciones efímeras que sólo
perseguían intereses sectoriales, parciales y mezquinos. El Radicalismo en cambio, era
concebido como la expresión de la Nación cuya principal fuerza era el Pueblo. Su
programa de gobierno era la Constitución Nacional. Los conservadores los calificaban
de “incapaces”. La oposición no tenía pudor en enfrentarse de manera armada.
Ante el conflicto de la Primera Guerra Mundial, el gobierno radical mantuvo su
neutralidad mientras que, la oposición en su mayoría reclamaba ponerse a favor de
Francia, Inglaterra, Italia, la Rusa Zarista y en 1917, de EE.UU. Estados Unidos
presionó para que Argentina rompiese los lazos con sus enemigos bélicos. La guerra
impactó en la economía local, hubo una baja en el comercio internacional y las
exportaciones e importaciones disminuyeron, los salarios reales bajaron y ya, finalizada
la guerra, se produjo una recuperación parcial de la actividad económica que se frenó
hasta 1920-21. La inflación complicó la situación.
Frente a los conflictos obreros, Yrigoyen tenía su postura: se negó a reprimir. Para los
opositores esto representaba una debilidad frente al desorden social. La huelga en Bs As
de los trabajadores de la fábrica de Vasena fue la más amplia de todas.
Medidas de T. Alvear:
Segundo gobierno de Yrigoyen:
Ganó elecciones con gran éxito electoral. Pero, la caída de Wall Street en 1929 dejó
impacto en Argentina: los fondos fiscales bajaron, el gasto del estado disminuyó, hubo
baja en los sueldos y comenzó un proceso inflacionario. En 1929, el conflicto político se
intensificó y el oficialismo recurrió a las intervenciones para reducir a la oposición,
enfrentamientos callejeros, violencia estatal, un intento fallido contra Yrigoyen por un
anarquista y movilizaciones contra el gobierno. Hubo denuncias de fraude y presión por
parte de los interventores y la policía en las elecciones de Diputados Nacionales.
Los apoyos al golpe fueron: conservadores, nacionalistas, civiles y oficiales.