Hijo de un cantero (Sofronisco) y una matrona (Fenáreta), durante su infancia recibió una educación griega tradicional en literatura, música y gimnasia. Antes de dedicarse por completo a la filosofía, trabajó como albañil y escultor junto a su padre e incluso sirvió como hoplita contra Esparta durante la guerra del Peloponeso.
«Solo sé que no sé nada» (Célebre cita con la que se
suele resumir el pensamiento del filósofo). La mayor parte de su vida la pasó en Atenas manteniendo debates públicos con sus conciudadanos haciendo uso de la mayéutica o, en otras palabras, guiando la búsqueda de la verdad y el conocimiento a través del continuo cuestionamiento a su interlocutor (método dialéctico que posteriormente se bautizaría como «método socrático» en su honor). El tema principal de su filosofía fue la justicia, el amor y la virtud, así como los efectos de la ignorancia en el mal y los vicios humanos. Sorprendentemente no dejó ningún tipo de legado escrito sobre sus ideas. Todo lo que se sabe sobre él es a través de las obras de Platón, Jenofonte y Aristófanes. Por desgracia para sus coetáneos y la filosofía en general, Sócrates sería condenado a muerte en el año 399 a. C. por negar a los dioses griegos, falleciendo a los 71 años de edad. Con y tras él se empezaría a forjar la filosofía griega y occidental, legado que continuarían las escuelas socráticas y la Academia platónica. El método socrático, también llamado debate socrático o método de Sócrates, es uno de los enfoques educativos más antiguos que persigue la enseñanza junto al desarrollo del pensamiento crítico.
Su principal característica es la eliminación de
pretensiones de certeza con el objetivo de animar a una comprensión más profunda de un tema en particular. Básicamente, hay que cuestionarlo todo sin dejar ninguna situación por investigar.
El método socrático debe su nombre a Sócrates, un
filósofo de la Antigua Grecia que nació en Atenas en el año 470 a. C..
Una de las características más conocidas de la
personalidad de Sócrates era la implicación de los demás en conversaciones que intentaban definir ideas generales complejas, como puede ser la idea de belleza, justicia, o amistad, a través de la discusión de sus ambigüedades y complejidades.
Durante sus conversaciones filosóficas, Sócrates ponía en
duda prácticamente cualquier enfoque sobre el tema tratado, aún cuándo tuviera relativamente un gran conocimiento sobre él. Este cambio de rol se conoce como ironía socrática y es clave en el ejercicio del método.
Aunque el método socrático puede ser utilizado de forma
efectiva para establecer conceptos, por ejemplo en enseñanza de matemáticas, es mucho más utilizado para estimular un crecimiento positivo del discurso humano. El método busca eliminar cualquier noción de una comprensión completa sobre un determinado tema para que se eliminen las barreras que impiden conseguir un nivel superior de comprensión, barreras que aparecen en la mente humana cuándo se siente que ya se sabe o domina un tema.
En el año 399 a. C., el filósofo griego Sócrates fue llevado
a juicio por la ciudad de Atenas, acusado de pervertir a sus jóvenes y alejarlos de los dioses. Se le dio a elegir entre renegar de sus ideas o ser condenado al suicidio por cicuta. Eligió la muerte.