INTRODUCCIÓN A LA HISTORIA DE LA IGLESIA:

1. El contexto grecorromano.
2. El contexto judío.
3. El contexto de la vida de Jesús.
4. La iglesia primitiva.

“Aquel que no conoce su historia está condenado a repetirla”, esta frase se atribuye en
primera instancia a Napoleón Bonaparte, pero también se dice que quien inició con esta
evaluación del pasado, presente y futuro fue el filósofo español Jorge Agustín Nicolás Ruiz
de Santayana cuando dijo: “Aquellos que no recuerdan el pasado están condenados a
repetirlo”

“Mirar al pasado con gratitud, vivir el presente con pasión y abrazar el

futuro con esperanza”

¿Porque Dios consideró que era el momento adecuado para encarnarse?

¿Porque entonces y no antes o después? ¿Cómo era el mundo entonces y
que tan preparado estaba para recibir al Hijo de Dios? En esta clase
veremos las respuestas a estos interrogantes y conoceremos como era el
mundo pagano y judío de esa época, época en la que Dios quizo hacerse
hombre. Mucho se habla actualmente de los “Semina Verbi” o “las semillas
del Verbo”, según la conocida expresión de San Justino. El Dios verdadero,
el Dios que se reveló al pueblo de Israel como en una cascada eligió al
mundo greco-romano, con su cultura y sus leyes, para irse revelando poco a
poco hasta llegada la “plenitud de los tiempos” (Gál 4,4). Fueron esas
“semillas del Verbo” que los Apóstoles y especialmente San Pablo,
utilizaron para predicar a partir de las verdades diseminadas a lo largo de
los siglos entre los mejores de los pueblos paganos.

¿Cómo estaba el tiempo a la Venida de Jesucristo?

El pueblo de Israel era el pueblo principal, como estaba el pueblo antes de

la venida de Cristo. Para ello tenemos que situarnos en el S. I en Belén de
Judea (una pequeña aldea de la provincia romana que había pedido
voluntariamente al imperio Romano).
La pregunta viene porque el Señor ha querido encarnarse en ese tiempo y
justo en Belén, en el libro prólogo de la Historia de la Salvación, hace un
análisis en el territorio donde va a nacer Cristo. A los judíos se le manifestó
de una manera directa, pero de manera gradual; pero el mismo pueblo lo
rechazo, "Vino a su casa, y los suyos no la recibieron. Pero a todos los que
la recibieron les dio poder de hacerse hijos de Dios, a los que creen en su
nombre" (Jn 1,11-12). Es por ello que a la sinagoga en los primeros siglos
de la Iglesia se les represento con los ojos tapados, como no queriendo ver
la llegada del Mesías, el pueblo de Israel que era un pueblo elegido paso a
ser un pueblo perseguido. Ya no será el pueblo elegido el que va a recibir la
revelación completa sino que se ira ahora a los paganos, ellos si
escucharán. Es por ello que la Salvación es ya universal, de ello nace el
termino católicos, la palabra católico (derivada del latín tardío catholicus,
del adjetivo griego καθολικό ς, katholikos, que significa «universal»)
proviene del adjetivo griego καθό λου (katholou), que significa «en
conjunto», «de acuerdo con el todo» o «en general», y es una combinación
de las palabras griegas κατά que significa «sobre» y ὅλος que significa
«todo». El primer uso registrado de «católico» proviene de la «Carta a los
esmirniotas» de Ignacio de Antioquía (c. 110 d.C.)1
El mundo donde se encarnó Cristo , vivía bajo el imperio de Roma , el cual
estaba divido en tres, bajo un Triunvirato luego de la muerte de Julio
César. Se dividió el imperio en tres gobernantes: Octavio, Lépido y Marco
Antonio , en un principio fue muy bien gobernado, pero paso de ser un
triunvirato a una diarquía en el año 32 A.C Marco Antonio y Octavio van a
definir el destino del pueblo luego de la batalla de Axion.

el imperio fue creando lo que se conoce como la Pax Romana, finalmente

los territorios conquistados se van a organizar muy pacíficamente, pero
respetando la diversidad de culturas, y también la diversidad de religiones,
no hay alguien más respetuoso de la cultura local y de la religión local
como roma, no por una cuestión de tolerancia, sino porque era una cuestión
meramente política de esta manera para llevar un orden interno, como es el
caso de Palestina.

1
John Meyendorff, Catholicity and the Church, St “El primer uso del término «Iglesia católica»
(significando literalmente «Iglesia universal») fue realizado por el padre de la Iglesia Ignacio de
Antioquía en su «Carta a los esmirniotas» (c. 110 d. C.). 1 También se atribuye a Ignacio de
Antioquía el primer uso registrado del término «cristianismo» (Χριστιανισμός) en 100 d. C”
Pero quien gesto toda esta Pax Romana fue el emperador Octavio Augusto
el gran emperador que duró muchos años a la cabeza de roma todo periodo
pacífico trajo un superávit económico tanto fue así que el imperio comenzó
a crecer incluso demográficamente es por esto que el emperador va a
mandar a hacer un censo en todo el imperio conocido para ver qué cantidad
de población había y qué necesidades había a lo largo de todo el ancho del
imperio romano este es el censo que quizás que leemos en el evangelio de
san Lucas tiene que ir a la ciudad de belén por un censo que había dictado
al emperador y tienen que ir a la de la casa paterna que para poder ser
censados . Para ello tenían que caminar 170 kilómetros para llegar por eso
dice que estuvieron varios días de caminata incluso de ida como de vuelta
cuando vieron el niño cuando tenía 12 años aproximadamente. Este censo
va a determinar entre otras cosas la cantidad de pobres que había el imperio
romano y el emperador va a decidir por la gran cantidad de superávit que
existía por la paz va a decidir rebajar a un denario de oro a cada indigente.

Es el orden del Imperio que va a permitir la proliferación de la

evangelización, gracias a la tolerancia a las religiones, los caminos y sobre
todo la integridad de una lengua en común. Por ello cuando Cristo es
crucificado se escribe en tres lenguas hebreas, griego y latín. Pero el
lenguaje oficial en todo el imperio era el griego Koiné, por 26 de los 27
libro del antiguo testamento fueron escritos en griego.

CÉSAR AGUSTO, PONTIFEX MAXIMUS OCTAVIANUS

AUGUSTUS

Senado romano cuando encuentra que este hombre fabuloso no solamente

por sus dotes de estratega de políticos sino también por su personalidad el
nombre realmente lo que llamamos prudence un hombre realmente
prudente en su gobierno su gobierno decide entonces el senado romano
otorgarle un título que era normal entre los romanos que era el título de
vivus divino el senador romano tenía a veces esa facultad de conceder el
título de divino como de sacro a una persona tanto en vida como después
de muerto.

Tan grande era el éxito de Augusto que el Senado, como decíamos, quiso
concederle este título. Augusto, recatado y circunspecto como era, se negó
tres veces a pesar de que la literatura romana contemporánea comenzaba a
forjarle una “doble naturaleza” al considerar su obra como un don de la
divinidad.

Hay un episodio, sin embargo, que es digno de ser narrado y que se

encuentra en una antiquísima tradición reportada tanto por Lactancio (240
d.C.) como por el libro Mirabilia Urbis Romae que recopila las tradiciones
de Roma:

“En el tiempo del emperador Octavio viendo los senadores tanta

prosperidad y paz y que todo el mundo le era tributario, le dijeron: ‘Te
queremos adorar porque en ti está la divinidad; si esto no fuese así, no te
sería todo propicio’. Pero él se opuso”.

El emperador se oponía a la “divinización” por lo que, para tener mayor

certeza de su decisión, pensó consultar a la sibila de Tibur.

Las sibilas eran en la Antigüedad grecolatina mujeres excepcionales, que

dotadas del don de profecía, eran consultadas en las grandes dificultades
públicas recomendando soluciones, acompañadas de ceremonias religiosas
y expiaciones colectivas. Italia conoció dos sibilas ubicadas en su territorio:
la de Cumas en el golfo de Nápoles y la de Tibur (hoy Tívoli, a unos 40
km. de Roma) a quien Augusto consultará. Como las más famosas eran
doce, con el tiempo serán emparejadas con los 12 profetas menores como
anunciadoras del Mesías en el mundo pagano (es por eso figuran en
numerosas iglesias, como, por ejemplo, en la misma Capilla Sixtina).

Dirigiéndose entonces a Tívoli, Augusto narró a la sibila el deseo de los

senadores. Tomándose unos días de riguroso ayuno e invocando a los
dioses, al cabo de tres días la sibila se dirigió hacia Augusto y le narró algo
maravilloso:

“Emperador, esto es lo que ocurrirá: del cielo vendrá un rey para los
siglos futuros, aunque hecho hombre, para juzgar al mundo. De
improviso el cielo se abrió y un esplendor grandísimo inundó todo. Se vio
en el cielo una virgen bellísima con los pies sobre un altar con un niño
entre los brazos. (Augusto) se maravilló en extremo y escuchó una voz
que decía: ‘Esta es el ara del hijo de Dios’. Entonces prosternándose en
tierra lo adoró. Luego contó esta visión a los senadores que mucho se
maravillaron. Esta visión ocurrió en la habitación del emperador
Augusto, donde ahora está la iglesia de Santa María en el Capitolio. Por
esta razón, la iglesia de Santa María se denominó Ara del cielo”.