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TEMA: LA NOVELA DESDE 1975 A NUESTROS DÍAS.

TENDENCIAS, AUTORES Y OBRAS


REPRESENTATIVAS.
1.INTRODUCCIÓN:
El principal acontecimiento histórico que marca este período en España es la muerte del
dictador Francisco Franco en 1975. Con la muerte de Franco se produce la llamada
transición a la democracia. La repercusión de estos acontecimientos políticos en la vida
literaria española es evidentes: desaparición de la censura, recuperación de los autores
exiliados, apertura hacia la literatura extranjera -europea, norteamericana y
latinoamericana, fundamentalmente-, impulso a la creación literaria en lenguas
españolas distintas al español, generosa política de subvenciones oficiales a autores,
multiplicación de premios, certámenes literarios y ferias del libro. En cuanto al género
que nos ocupa, con la llegada de la democracia, la novela se hace más fácil y accesible
de manera que se comienza a extender y a popularizar como el género más importante
del final del siglo XX y principios del s. XXI.
2. CARACTERÍSTICAS GENERALES:
Presentamos a continuación los aspectos más significativos de la novela española en los
últimos cuarenta y cinco años:
1) El carácter aglutinador. Acoge prácticamente todas las tendencias, modalidades,
discursos, temas, experiencias y preocupaciones personales. Comienzan a surgir nuevos
subgéneros dentro de la novela con la finalidad de ampliar el panorama literario. Así,
encontramos desde finales de los años setenta novelas policíacas, novela negra, de
intriga, de ciencia ficción, de aventuras, histórica, etc.
2) La individualidad. Cada novelista elegirá la orientación que le resulte más adecuada
para encontrar un estilo propio con el que expresar su mundo personal y su particular
visión de la realidad.
3) En las últimas décadas del s. XX conviven autores de la posguerra (Miguel Delibes,
Ana María Matute, por ejemplo) con autores pertenecientes a generaciones
posteriores: Arturo Pérez Reverte, Antonio Muñoz Molina, Juan José Millás, Javier
Marías, Carlos Ruiz Zafón, etc.
4) En las décadas anteriores apenas hay presencia de las mujeres en la literatura
española (exceptuando algunos nombres como Carmen Martín Gaite, ella publica
precisamente El cuarto de atrás en 1978 y Carmen Laforet). Afortunadamente en la
actualidad son muchas las novelistas que cosechan gran éxito con sus obras: Almudena
Grandes, Elvira Lindo Rosa Montero, Maruja Torres, Clara Sánchez, María Dueñas.
Destacamos así un éxito editorial, Dolores Redondo, autora de la Trilogía de Baztán (El
guardían entre el centeno, Legado de los huesos, Ofrenda a la tormenta) sus obras han
sido traducidas a treinta y dos idiomas y se han hecho adaptaciones cinematográficas.
5) El mercado impone su peso a la literatura, de manera que se comienza a publicar con
la finalidad de vender una gran cantidad de obras. Los autores se popularizan como
creadores y recreadores de opinión en los distintos medios de comunicación (prensa,
radio y televisión). El término inglés best seller se asienta entre nuestros autores como
sinónimo de calidad y triunfo.
6) En los últimos veinte años ha crecido espectacularmente el número de publicaciones
a causa de la gran cantidad de premios literarios que existen actualmente y del comercio
que las editoriales han instaurado a través de grandes cadenas de distribución, como la
Fnac, La Casa del Libro. Destaquemos también la sonada irrupción de la librería de
Amazon a finales de 2011. En cuanto a la edición, destaquemos el camino emprendido
por el e- book, cuyo despegue puede significar un replanteamiento de la distribución
de libros.
3. PRINCIPALES TENDENCIAS, OBRAS Y AUTORES:

Agotado el experimentalismo, la novela recupera el placer de contar historias; la


narrativa diseña tramas bien construidas y crea ambientes y personajes muy sólidos,
recordamos la labor de Eduardo Mendoza en este sentido con la publicación de La
verdad sobre el caso Savolta precisamente en 1975. La novela resulta así más accesible.

Estas novelas del Realismo renovado ponen al descubierto los atributos del hombre de
hoy, la confusión del hombre moderno obligado a reflexionar sobre la realidad que le
rodea, a buscarle un sentido porque ha perdido la fe en aquellos valores que
garantizaban y explicaban el mundo.

No resulta fácil discernir en la nueva narrativa unas corrientes o escuelas definidas; sí es


posible, no obstante, identificar ciertas tendencias temáticas. Las más relevantes son
estas:
1. Novela policíaca y de intriga. Este subgénero resurge con especial fuerza. Son
novelas en las que se plantea un caso, un enigma, aparece la figura del
investigador y en las que las fronteras entre el bien y el mal a veces se diluyen.
Entre sus cultivadores destacan Manuel Vázquez Montalbán, autor de una serie
protagonizada por el detective privado Pepe Carvalho. A esta tendencia
pertenecen también algunas novelas de Antonio Muñoz Molina: El invierno en
Lisboa, Beltenebros, o Plenilunio. En los últimos años destacamos la serie escrita
por Lorenzo Silva y protagonizada por la pareja de la guardia civil Chamorro y
Bevilaqua. No podemos acabar este apartado sin mencionar algunos éxitos
editoriales, La sombra del viento de Carlos Ruiz Zafón (también su continuación
El juego del ángel) y la Trilogía de Baztán de Dolores Redondo, de la que ya
hemos hablado anteriormente, su última novela es La cara norte del corazón.
Quizá uno de los autores más populares de este género en la actualidad sea Juan
Gómez Jurado con La reina roja, La loba negra, el éxito de estas novelas ha
traspasado nuestras fronteras.

2. Novela histórica. Es el género que más vende en España y se basa en la


recreación histórica del pasado .Se pueden citar como ejemplos El hereje (1998),
de Miguel Delibes, así como la saga protagonizada por el capitán Alatriste, de
Arturo Pérez-Reverte, ambientada en el Siglo de Oro, recientemente ha
publicado Sidi, que tiene al Cid como protagonista; Son frecuentes las novelas
históricas contextualizadas en épocas cercanas, especialmente en la Guerra Civil,
como Soldados de Salamina (2001), de Javier Cercas; La voz dormida (2002), de
Dulce Chacón, o los relatos breves que componen Los girasoles ciegos de Alberto
Méndez. En su mayoría estas obras ambientadas en la guerra o en la posguerra
quieren recuperar la memoria y dar voz a quien no la tuvieron en aquellas
épocas.

3. Novela lírica. El valor esencial es la calidad técnica con que está escrita, el
objetivo es la búsqueda de la perfección formal y se deja en un segundo plano la
trama: La lluvia amarilla, de Julio Llamazares
4. Novela de testimonio: estas novelas se ambientan en momentos de la historia
reciente de España; se aprecia en ellas el compromiso de autor a la hora de
analizar y criticar determinadas conductas de la sociedad española actual.
Destacamos al valenciano Rafael Chirbes con Crematorio, novela que aborda la
corrupción. Fernando Aramburu con Patria, donde muestra las heridas en la
sociedad vasca del terrorismo de ETA. Para terminar, dos mujeres, Almudena
Grandes con Los besos en el pan, en la que analiza las consecuencias de la crisis
económica o Rosa Montero, autora que suele profundizar en sus novelas en la
naturaleza femenina.

5. Novela de la reflexión íntima. Este tipo de narrativa se centra en la búsqueda


personal y la reflexión sobre la propia existencia, la prosa es compleja y muchas
disgrsiones filosóficas o existenciales. Obras representativas de esta tendencia
son Mortal y rosa (1975), de Francisco Umbral, sentida reflexión sobre la muerte
escrita con brillante estilo. Destacamos también a dos autores fundamentales;
Javier Marías que es el autor español con más prestigio internacional y firma
candidato al Nobel, algunas de sus obras son Corazón tan blanco o Mañana en la
batalla piensa en mí. Por otro lado estaría Juan José Millás, que amplía los límites
de la realidad haciendo que lo fantástico forme parte de esta e indaga
magistralmente en la psicología de los personajes, algunos de sus títulos son El
desorden de tu nombre, La vida era esto, El mundo y La vida a ratos, su última
novela. En este apartado podría entrar la exitosa Ordesa de Manuel Vilas.

6. Metanovela. En estas novelas se cuenta una historia pero también cómo se está
contando la historia. Uno de los recursos habituales que usan los novelistas es la
invención de un personaje escritor- o profesor de Literatura o perteneciente al
mundo editorial- que indaga y dialoga sobre temas literarios, sobre cómo se debe
escribir una novela. Algunos ejemplos: Juegos de la edad tardía de Luis Landero;
Papel mojado, de Juan José Millás; Mala gente que camina de Benjamín Prado.
En este género podríamos ubicar El cuarto de atrás.

7. Novela generacional. Este tipo de narrativa estuvo de moda durante los años
noventa, su interés temático se centró en la representación de la conducta de los
entonces jóvenes adolescentes, sus salidas nocturnas en las grandes ciudades, el
uso y abuso de drogas, del sexo, del alcohol y de la música rock. Son obras
representativas de esta tendencia: Historias del Kronen (1994), de José Ángel
Mañas, que inauguró esta tendencia, Ray Loriga con Héroes, Lucía Etxebarría en
Amor, curiosidad, sexo, Prozac y dudas o Belén Copegui con Deseo de ser punk.

En la actualidad hay numerosos autores que dirigen sus novelas a un público


juvenil, destacamos autores como Lorenzo Silva, Jose Serra i Ferrer, Laura
Gallego, Care Santos, etc.

8. Novela gráfica: heredera del cómic y de los álbumes de historias, desarrolla una
historia extensa y compleja y recurre a las técnicas propias de la narrativa en
común. Destacamos a Paco Roca con Arrugas.
LA NARRATIVA NOVECENTISTA O GENERACIÓN DEL 14 (pág.68)

Se conoce así a los autores nacidos a finales del s. XIX que suceden a la generación del 98 y
alcanzan su plenitud literaria en la segunda década del siglo XX.

]
- Autores liberales.
- Intelectuales universitarios
- Europeístas
- Reformistas
- Defensores del ARTE PURO y MINORITARIO

Cultivan preferentemente el ensayo donde destacan: Ortega y Gasset, Eugenio D´Ors,


Gregorio Marañón, R. Gómez de la Serna.

RAMÓN PÉREZ DE AYALA (pág.69)

Autor de novelas intelectuales: lo importante de estas novelas no es la trama sino las


reflexiones diversas (filosóficas, literarias, estéticas...) que las acercan al ensayo.
Predomina el tono reflexivo, la ironía y en cuanto a la técnica, el perspectivismo (contraste
de varios puntos de vista)

Obras:
- A.M.D.G: caricatura de un colegio de jesuitas.
- Belarmino y Apolino: protagonizada por dos zapateros que representan la doble visión
de la realidad : la del que actúa y la del que contempla.
- Luna de miel, luna de hiel ← solo esta .

- Tigre Juan y El curandero de su honra.

GABRIEL MIRÓ (pág.69)

Autor de “novelas líricas”, esteticistas que enlazan con el modernismo, gracias a la


sensorialidad de sus descripciones (sinestesia, musicalidad, plasticidad, etc.)

- Las cerezas del cementerio


- Nuestro Padre San Daniel.
- El obispo leproso: se centra en la represión de la Iglesia y los clérigos.

RAMÓN GÓMEZ DE LA SERNA (pág. 70)

Original e inclasificable ( el “Ramonismo”)

Autor de las greguerías “atrevimiento de definir lo indefinible”, resultado de unir amor y


metáforas. Ei :[ mirada es una nube sonriente dulce
y
Sus novelas son experimentales, defiende la introducción en la novela de lo inverosímil y
fantasmagórico, reflexiona en ellas sobre el propio género, y dignifica en El torero
Caracho (1926) o La Nardo la estética de la materia folletinesca.
- El doctor inverosímil.
- La viuda blanca y negra
- El incongruente
LA NOVELA HACIA 1927 (pág. 70)

Junto a los poetas del grupo del 27, destacan también novelistas, que pueden clasificarse en
dos grupos:

- Seguidores de la novela deshumanizada de Ortega y Gasset


Rosa Chacel (Barrio Maravillas), Max Aub, Francisco Ayala
- Los que plantean una novela social. Son características comunes de este grupo el
compromiso sociopolítico, la estética realista, temas sociales y políticos (la guerra
de Marruecos, la mina, el medio rural...)
Luisa Carnés, Ramón J. Sender (Imán, Crónica del alba, Réquiem por un campesino
español)

Todos culminan su obra en el exilio.


LA NOVELA DESDE 1939 HASTA LOS AÑOS 70: TENDENCIAS, AUTORES Y OBRAS
REPRESENTATIVAS.

La Guerra Civil marca completamente la actividad cultural de la posguerra. La literatura se


ve condicionada por la ideología, y la novela no es una excepción. Los autores exponen su
punto de vista en las novelas a la vez que pretenden ser originales y experimentar con
nuevas técnicas narrativas. Además, nacen nuevas editoriales y colecciones, lo cual, unido
al incremento de las traducciones, contribuye al desarrollo pleno de la novela.

1. AÑOS CUARENTA: → 2 tipos /


De esta década la•mejores muestras de novela llegan de los novelistas del exilio y un grupo
de autores que permanecen en España y que sometidos a la censura del régimen describen
la realidad de un país devastado.
Junto a ellos también habrá novelistas afines al régimen que escriben novelas de exaltación
patriótica y propaganda ideológica.

1.1. NOVELISTAS EN EL EXILIO:

Muchos novelistas continúan su labor en el exilio. Recogemos tres aspectos que aparecen
prácticamente en todos ellos:

- El recuerdo de España y de la guerra civil.


- La presencia de los nuevos lugares donde tienen que vivir.
- La reflexión sobre los temas que afectan a la existencia del hombre.

Destacamos a cuatro autores:


- Ramón J. Sender: se encuadra en la novela realista y social, la mayoría de sus obras se centran
en España y en la guerra civil. Destacamos la serie Crónica del alba y Réquiem por un campesino
andaluz.
- Max Aub: escritor comprometido con los desfavorecidos. Sus obras se agrupan en las seis
novelas sobre la guerra civil El laberinto mágico.
- Rosa Chacel: en sus novelas impregna el rigor estético. La sinrazón.
- Francisco Ayala: refleja una visión amarga y pesimista de la realidad y critica con fuerza los
regímenes opresores: Muertes de perro.

1.2. LA NOVELA EXISTENCIAL Y TREMENDISTA

En 1942 se publica dos obras fundamentales de nuestra literatura: La familia de Pascual


Duarte de Camilo José Cela y Nada de Carmen Laforet. La primer de ellas se suele encuadrar
dentro del tremendismo y la segunda del existencialismo.

Tremendismo y existencialismo son dos caras de la misma moneda, la literatura desarraigada


de los años cuarenta.

De estas dos novelas podrían extraerse una serie de rasgos comunes que serán frecuentes en
esta novela de los años cuarenta:
- El reflejo amargo de la vida cotidiana, desde un enfoque existencial; en el caso del
tremendismo no se ocultan los aspectos más sórdidos y desagradables de la vida.
- Los temas más frecuentes serán la soledad, la inadaptación, la frustración o la muerte, casi
- La presencia de personajes marginales, desarraigados y angustiados. Nos encontramos por lo
tanto ante protagonistas individuales. Son seres oprimidos o indecisos, a veces violentos,
conscientes de su situación vital. Se les coloca en situaciones límites que les conducen a la
violencia, la rutina o el aislamiento. Así se observa el vacío y monotonía de sus vidas.
- Transposición del malestar social a la esfera de lo personal.
- Predomina el narrador en primera persona. El autor intenta infundir sus pensamientos y sus
sentimientos en los personajes. Por eso, es frecuente la utilización del monólogo

Camilo José Cela (1916-2002)


Personaje exhibicionista y polémico, gozó de una gran popularidad desde la publicación de su
primera novela. Es el último premio nobel español, recibió el galardón en 1989.
En la novela se presentan las memorias de un campesino condenado a muerte, Pascual Duarte,
que en la cárcel, en primera persona narra su vida. Esta obra es heredera de la novela picaresca
y del naturalismo decimonónico.

Pascual Duarte nos cuenta que es un campesino extremeño, inmerso en un ambiente miserable y que ha
llevado una existencia en un continuo sufrimiento: una infancia sórdida, unos padres monstruosos, una
hermana que se prostituye y un hermanito anormal que muere a los diez años; luego, dos matrimonios
desgraciados y la muerte de su hijo, peleas, una primera estancia en prisión; finalmente se ve obligado a
cometer una serie de crímenes horrendos entre ellos los de su propia madre. La novela ilustra el pesimismo
existencial de su autor y la concepción del hombre como una criatura arrastrada por la doble presión de
la herencia biológica y del medio social.

https://www.youtube.com/watch?v=9alSneQQ6KY
(Video sobre Camilo José Cela)

https://www.youtube.com/watch?v=eFc_gchpWLc
https://www.youtube.com/watch?v=mutRmjdeTZo
(Videos sobre La familia de Pascual Duarte)

Carmen Laforet (1921-2004)


Nacida en Barcelona y criada en Canarias regresa a su ciudad natal para cursar estudios
universitarios, hecho que le inspiró su novela Nada. Con esta novela ganó la primera edición del
Premio Nadal con tan solo veintitrés años, lo que la hizo muy popular y creo unas expectativas
sobre ella que pesarían en su obra posterior.
En esta novela se presentaba a Andrea, una muchacha que había ido a estudiar a Barcelona,
donde vive con unos familiares en un ambiente de mezquindad, de histeria, de ilusiones
fracasadas, de vacío. Es una descripción de la irrespirable realidad cotidiana, recogida con un
estilo desnudo y un tono desesperadamente triste.

El resto de las novelas de la década no tienen gran calidad, aunque cabe señalar que en estos
años comienzan a publicar Gonzalo Torrente Ballester y Miguel Delibes que se inicia con La
sombra del ciprés es alargada. Ambos autores alcanzan la popularidad en años posteriores.

2. LA NOVELA DE LOS AÑOS CINCUENTA:

En los años cincuenta la novela renace gracias a un grupo de escritores que junto a los
novelistas de loa años cuarenta ya estudiados, desarrollan un tipo de narrativa diferente,
donde prevalece la denuncia social.
A grandes rasgo estas son las características de la novela de esta década:
1. Refleja la realidad española (el campo, la ciudad o el mundo obrero) como
instrumento de denuncia de las injusticias sociales.
2. Los temas principales son: lo cotidiano, la soledad e incomunicación, y la visión
crítica del pensamiento y la cultura de la época.
3. Sencillez en el lenguaje y en la estructura del relato.
4. Abundancia de diálogos, sobre todo en estilo directo, en los que se intenta
reflejar “habla viva.”
5. Concentra la acción en pocos escenarios y en un corto espacio de tiempo.
6. Uso de un personaje colectivo, pero también el personaje representativo de una
determinada clase social.
7. Objetivismo narrativo (se narran conductas, el autor no juzga a sus personajes)

Dos obras sintetizan a la perfección esta tendencia narrativa:

La Colmena, (1951) de Camilo José Cela

La novela presenta un ir y venir de personajes sus vidas transcurre paralelas o


entrecruzadas (como en una colmena) gracias a un hábil montaje del autor. Estas vidas
presentadas así, representan la vida durante dos días en el Madrid de 1943. La novela
responde al modelo de “novela abierta”, no sabemos qué será de los personajes más allá
de la última página. Todo queda inconcluso. Y así, la incertidumbre es el elemento
decisivo tanto de la estructura como de aquellas vidas.

https://www.youtube.com/watch?v=n2qxxel9OKE

El Jarama (1956) de Rafael Sánchez Ferlosio.


Es el relato de 16 horas de una tarde de domingo de 11 amigos que van de excursión al
río Jarama. Al final de la tarde, una de las chicas del grupo muere ahogada. Esta novela
es de un realismo llevado a sus últimas consecuencias. Los diálogos son puramente
magnetofónicos y el narrador es puramente objetivo. De los personajes sólo sabemos lo
que nos dicen, nada sabemos ni de sus pasados ni de lo que va a pasar con ellos después
de la acción del libro. Muestran la falta de ilusiones, el aburrimiento vital y la pobreza
mental de una gran parte de la juventud española del momento. Es el retrato de una
juventud víctima de las circunstancias vitales que les ha tocado vivir. El habla ramplona
y vulgar de los personajes contrasta con la belleza de las descripciones que efectúa el
narrador en las partes no dialogadas del libro.

Antes de concluir este apartado nos gustaría detenernos en varias figuras destacadas en
estos años:

- Miguel Delibes: auto fundamental de nuestra literatura, autor de obras como El camino
o Diario de un cazador. Sus obras surgen de la observación de la realidad, de la relación
y oposición entre los habitantes del campo castellano y las clases medias urbanas.

- Gonzalo Torrente Ballester con una trilogía de realista que analiza la sociedad gallega
de preguerra: Los gozos y las sombras
- Ana María Matute: en su obra refleja un mundo conflictivo enmarcado en la guerra,
con débiles y pobres como víctimas de las injusticias, visto todo desde una mirada
infantil.

-Carmen Martín Gaite: cultivó el ensayo, el cuento, la novela y la crítica literaria. En sus
novelas profundiza en el análisis de la condición femenina y en la importancia de la
memoria. En su producción destaca Entre visillos.

3. LA NOVELA DE LOS AÑOS 60

El agotamiento de la fórmula realista, el descubrimiento de la novela hispanoamericana


que se estaba escribiendo por aquellas fechas ( Mario Vargas Llosa, Gabriel García
Márquez, Julio Cortázar), y la influencia de los grandes renovadores de la novela
universal contemporáneas, son los factores que favorecieron la decisiva modernización
de la novela española durante los años sesenta.

De este modo, a partir de la publicación en 1962 de Tiempos de silencio de Martín


Santos, se generaliza entre los novelistas españoles el uso de una serie de recursos
técnicos y expresivos de carácter experimental:

- Escasa presencia de la acción y en ocasiones, desaparición del argumento.

- Perspectivismo: los acontecimientos se presentan desde el punto de vista de varios


personajes. Se incorpora el uso de la segunda persona narrativa (“TÚ” narrativo),
monólogos interiores caóticos, mezcla de estilo directo e indirecto.

- El espacio y el tiempo se rompen a veces caprichosamente mediante retrospecciones


o anticipaciones de elementos argumentales.

- La división tradicional en capítulos se sustituye, con frecuencia por secuencias,


distribuidas aparentemente de forma caprichosa.

- Renovación estilística y tratamiento innovador del lenguaje (uso de diferentes


registros, se incorporan elementos ajenos a lo narrado (informes, textos periodísticos,
etc.), empleo de juegos tipográficos (ausencia de puntuación, distintos tipos de letras,
etc), descripciones con abundancia de metáforas, etc.

- Requieren un lector activo.

Como ya hemos mencionado anteriormente la novela más importante de esta década


es Tiempo de silencio (1962). Supuso marcó un cambio de rumbo en la novela española
posterior a la Guerra Civil.

En esta novela se narra la sórdida odisea que vive un joven médico dedicado a la
investigación del cáncer. Lo importante no es la historia sino cómo se cuenta, ya que
introduce muchas de las técnicas narrativas mencionadas anteriormente, por ejemplo
aparecen bastantes monólogos interiores en los que el lector tiene que descubrir quién
habla.

Su autor fue el psiquiatra Luis Martín Santos (1924-1964), prematuramente fallecido


cuando había alcanzado la madurez profesional y creativa. Tiempo de silencio fue su
única novela completa.

Argumento
Pedro investiga sobre el cáncer en un laboratorio de Madrid. Un gitano llamado el Muecas le
proporciona ratones para sus experimentos. El Muecas pide ayuda a Pedro durante un aborto
que se le está practicando a su hija Florita. La hija del Muecas está embarazada de su propio
padre. La hija del Muecas muere y Cartucho, su novio, que considera a Pedro culpable de la
muerte de Florita, mata a la novia de Pedro. Lo importante no es la historia sino cómo se cuenta.
Hay una gran descoordinación entre la narración y el lenguaje. Se usa un lenguaje hiperculto
para describir ambientes pobres. La obra consta de 63 secuencias.

A esta nueva etapa narrativa inaugurada por esta novela, se irán incorporando autores
que pertenecen a generaciones distintas:

- Algunos autores que ya comenzaron en los años cuarenta como Torrente Ballester
(publica La saga/fuga de JB huyendo del realismo) o Miguel Delibes que publica en esta
década Cinco horas con Mario en ella Delibes hace un magnífico retrato de la sociedad
de posguerra y de la mentalidad de la mujer en aquella época; en la obra, Carmen, su
protagonista, mantiene un soliloquio con su difunto marido, un catedrático de instituto
de una ciudad provinciana. Es una novela, representada con muchísimo éxito en teatro
desde su publicación,

- Otros autores de la “generación de medio siglo” como Juan Benet (Volverás a Región),
Juan Goytisolo ( Señas de identidad) o Juan Marsé (Últimas tarde con Teresa).....

4. LA NOVELA DE AÑOS SETENTA

Durante los primeros años de la década de los setenta hay autores que siguen cultivando
la novela experimental e intelectual que tiene su origen principal en Tiempo de silencio,
de Luis Martín Santos. Aparecen así, las primeras obras de los escritores de la generación
del 68. Cultivan una novela minoritaria y culturalista, hermética y experimental, cuya
preocupación es el lenguaje. Son novelas en las que se produce un claro alejamiento del
realismo.

Esta experimentación narrativa se va moderando y se produce una reflexión serena


sobre el arte de la novela y, sin olvidar las técnicas actuales, los escritores de esta
década se esfuerzan en recuperar la narrativa de intriga y otros elementos clásicos del
relato.
En esta evolución intervienen autores como:

- Manuel Vázquez Montalbán, cultivador del género policiaco (Los mares del sur)
- Francisco Umbral, autor difícilmente clasificable en una tendencia, sus obras
están llenas de humor, crítica, poesía, ternura...(Mortal y rosa)

- Eduardo Mendoza; autor clave porque con la publicación de La verdad sobre el


caso Savolta en 1975 demuestra que es posible recuperar uno personajes y un
argumento definidos, sin olvidar la nuevas técnicas narrativas.

VÍDEO RESUMEN DEL TEMA


https://www.youtube.com/watch?v=--YXWUXZ8KU
Novela 1975 a nuestros días.

Características: citar 5: Censura fuera, Recuperación exiliados, se lee y se impulsa la literatura latinoamericana, multiplicación premios
y ferias del libro

6 aspectos: Carácter aglutinador, individualidad, Autores posguerra+generaciones nuevas, presencia mujeres (Martin Gaite, Laforet,
Dolores Redondo Baztán), Mercado en la Literatura y los premios literarios impulsan la creación (hablar de Fnac, Amazon, e-Book…).

Tendencias (son 8): Se recupera el placer por contar historias. Eduardo Mendoza en 1975-> La verdad sobre el caso Savolta

Novela policíaca: Antonio Muñoz Molina (Úbeda, El invierno en Lisboa, Plenilunio), Carlos Ruiz Zafón (La sombra del viento) y
Dolores Redondo (Trilogía de Baztán). Gómez Jurado (La Reina Roja y La Loba Negra)

Histórica: Miguel Delibes (El Hereje). Arturo Pérez-Reverte (Sidi), Alberto Méndez (Los Girasoles Ciegos), Dulce Chacón (La Voz
Dormida).

Lírica: Julio Llamzares (La Lluvia Amarilla).

Testimonio: Fernando Aramburu (ETA, HBO), Almudena Granes (Los Besos en el pan).

Reflexión Íntima: Francisco Umbral (Mortal y rosa), Juan José Millas (La vida a ratos). Manuel Vilas (Ordesa).

Metanovela: Escribir la propia novela. Juan José Millás (Papel Mojado), Benjamín Prado (Mala gente que camina). Carmen
Martín Gaite
[Cuarto de atrás) .

Generacional: Ray Loriga (Héroes), Lucía Etxebarría (Amor, curiosidad, sexo, Prozac y dudas), Belén Copegui (Deseo de ser punk).
Actualidad-> Laura Gallego, Care Santos.

Gráfica: Paco Roca (Arrugas).

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