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Copyright © 2014

Dr. H. Maurice Lednicky

Todos los derechos reservados.


Ninguna parte de este libro puede ser reproducida en
cualquier forma, excepto la inclusión de citas breves, sin
permiso por escrito del autor.

A menos que se indique de otra manera, las citas bíblicas


están tomadas de la versión Reina-Valera © 1960
Sociedades Bíblicas en América Latina; © renovado 1988
Sociedades Bíblicas Unidas. Utilizada con permiso.

Publicación y diseño provisto por:


Life Publishers International
1625 N. Robberson Ave.
Springfield, MO 65803
EE.UU

ISBN 978-0-7361-0506-4
Impreso en los Estados Unidos
ÍNDICE

PREFACIO

EL ENTENDIMIENTO DEL “LLAMADO” A PREDICAR

LA IMPORTANCIA DE PREDICAR EN LAS ESCRITURAS

EL OBJETIVO DE LA PREDICACIÓN EN EL N UEVO


TESTAMENTO

PREPARACIÓN PERSONAL PARA EL MINISTERIO

“PREDIQUE LA PALABRA”

¿C ÓMO PRESENTARÁ U STED EL MENSAJE?

LA ELECCIÓN DEL MÉTODO C ORRECTO PARA C ADA


MENSAJE

Sermón Basado en una Narración Bíblica


Sermón Temático
Sermón Textual
Sermón Expositivo

PREPARACIÓN DEL SERMÓN

MANTENGA UN R EGISTRO DE SU PREDICACIÓN

¡LA PREDICACIÓN: EL PRIVILEGIO DE TODA UNA VIDA!


PREFACIO

El mayor privilegio para cualquier hijo de Dios es ser


elegido como un “portavoz” del Dios Omnipotente. El apóstol
Pablo declaró:
“Doy gracias al que me fortaleció, a Cristo Jesús nuestro
Señor, porque me tuvo por fiel, poniéndome en el
ministerio.”
(1Timoteo 1:12)

Yo fui “llamado” para predicar a la edad de nueve años


en una pequeña clase de Escuela Dominical. El profesor, a
menudo con lágrimas en sus ojos, nos desafiaba a escuchar
la voz de Dios que revelaría el plan de Él. Más aun, él
explicaba que debemos siempre ser obedientes y sumisos a
lo que Dios había escogido para nosotros. Como el joven
Samuel en el Antiguo Testamento (1 Samuel 3), yo no
estaba seguro lo que significaba escuchar la voz de Dios.
No obstante, sé que realmente oí su voz, y nunca ha habido
duda alguna en mi corazón. Mi primer “intento” en la
predicación vino a la edad de trece años. ¡Hablé
aproximadamente por ocho minutos y dije todo que había
preparado, ¡tres veces! Desde que tenía dieciocho años, ha
sido mi gran alegría y honor el predicar la Palabra de Dios
en varios lugares por todo el mundo. ¡Doy gracias a Dios
por santos misericordiosos que estuvieron dispuestos a
escuchar y animarme a seguir adherido a la obediencia del
llamado de Dios!
Ahora, reflexiono en los más de sesenta años desde que
oí la voz de Dios en aquel pequeño y humilde cuarto, aquel
domingo por la mañana. Durante más de medio siglo, mi
único deseo ha sido el predicar la Palabra de Dios. A veces
fue a un grupo muy pequeño; en otras ocasiones ha sido a
grandes muchedumbres. El número de la audiencia no
importó. Ha sido un honor cumplir lo que Dios me ha llamado
a hacer.
Esperamos que el mensaje acerca de la predicación,
presentado en este libro, sea tanto retador así como
alentador. Retador, de modo que usted se esfuerce para
convertirse en la mejor expresión de su ser, por amor a
Jesús. Nunca deje de aprender. Absorba la Palabra de Dios
en su mente y corazón. Alentador, como un recordatorio de
que Dios siempre le capacitará para la ocasión. Permita que
el Espíritu Santo le inspire y energice con la Verdad Santa.
La Palabra de Dios cumplirá el objetivo propuesto por Dios,
dondequiera que Él le envíe.
“Usa bien la palabra de verdad”

Hermenéutica: Interpretación apropiada de las Escrituras


Homilética: Aplicación apropiada de las Escrituras
Tener un fundamento (hermenéutica) sin estructura
(homilética) es incompleto.
Tener una estructura (homilética) sin un fundamento
(hermenéutica) es imposible.
H. MAURICE LEDNICKY
CAPITULO 1

EL ENTENDIMENTO DEL “LLAMADO” A


PREDICAR

S egún las Escrituras cada creyente debe ser un


“testigo” de Cristo. Ningún creyente llenó del Espíritu
está eximido de hablar a otros acerca de su encuentro
personal con Cristo (Hechos 1:8; Colosenses 4:6; 1 Pedro
3:15). Sin embargo, hay una gran diferencia entre compartir
cotidianamente su fe en la provisión que Cristo hizo en la
Cruz y ser “llamado” a apacentar, alimentar, cuidar de la grey
de Dios, y ser ejemplo (1 Pedro 5:1-4).
Primero, examine detenidamente el Antiguo Testamento y
encontrará clara evidencia de que Dios mismo escogió a
sacerdotes (bajo el pacto mosaico) para el servicio o
ministerio tanto en el tabernáculo como más tarde en el
Templo. Aarón fue el primer Sumo Sacerdote y la tribu de
Leví fue elegida para desempeñar las responsabilidades
como sacerdotes y otros servicios relacionados con el
tabernáculo y el Templo (Levítico 8:30, capítulos 21-22).
Estos siervos muy especiales del Señor no sólo fueron
escogidos por el Señor mismo, sino que también se requirió
que ellos vivieran según normas diferentes y más elevadas
que los otros israelitas. El mismo hecho que los levitas no
tuvieron una herencia en la tierra prometida, como sucedió
con las otras Doce Tribus de Israel, y fueron instruidos a
vivir entre todas las tribus, indica que ellos fueron
“apartados” para el ministerio en cada región de la nación.

LOS PROFETAS DEL ANTIGUO TESTAMENTO


Igualmente, la mano del Omnipotente fue sobre los profetas
que fueron elegidos por Dios mismo para un ministerio
especial entre su pueblo, Israel.
En su mayor parte, estos profetas hablaron durante los
años del “reino” de Israel. Es decir el período de tiempo que
comenzó con Samuel y concluyó con Malaquías.
Específicamente, abarcaría los años desde la unción del rey
Saúl hasta el último rey de Judá, Sedequías, quién
gobernada en el momento que se produjo el cautiverio
babilonio. Hubo un total de 16 profetas que escribieron 17
libros en el Antiguo Testamento (Jeremías escribió 2 libros),
quiénes colectivamente sirvieron por un período de
aproximadamente 400 años (del 800 a.C. al 400 a.C.). Elías
y Eliseo fueron también profetas de divino poder e
importancia en la nación de Israel, pero ellos no escribieron
libros del Antiguo Testamento.
Quizás estamos más familiarizados con los 4 profetas
“mayores”: Isaías, Jeremías, Ezequiel y Daniel. Cada uno de
estos hombres fue llamado en un tiempo y lugar particular en
la historia de Israel.
Isaías. Conocido como el profeta Mesiánico, ya que él
habló más acerca de la venida de Cristo a la tierra que
cualquier otro profeta del Antiguo Testamento.
Posteriormente, Isaías es citado con más frecuencia en el
Nuevo Testamento que cualquier otro profeta del Antiguo
Testamento. Isaías, cuyo padre fue un hermano del rey
Usías, procedía de una familia acomodada e influyente de
Jerusalén. Esta parece ser una excepción, no porque Dios
tenga prejuicios en contra de los ricos, sino porque éstos
son a menudo autosuficientes y no se acercan lo bastante
para oír la voz del Señor.
El registro de Isaías 6:1-11 es uno de los más
dramáticos encuentros con Dios y respuesta al llamado, que
se halla en las Escrituras. Hay un modelo sencillo en el
llamado personal de Isaías a un ministerio profético, que a
menudo se reproduce en tiempos modernos.
Note la progresión de la revelación divina que condujo al
profeta a un compromiso total y la disposición de convertirse
en portavoz del Señor a la nación de Israel.

Jeremías. Conocido como el profeta llorón, ya que él vio


el abominable pecado de Jerusalén y el juicio inevitable de
Dios que pronto vendría, y se sintió abrumado.
Completamente diferente de Isaías, Jeremías era “un
muchacho del campo” que vino a la ciudad, y allí él fue
rechazado por los líderes religiosos, que sólo querían hablar
de paz y prosperidad. Una vez más, se evidencia drama en
el llamado directo de Jeremías para ser un portavoz de
Dios. Dios reveló su plan para Jeremías (1:5). No obstante,
como a menudo es el caso, Jeremías resistió el llamado y
dijo a Dios que él no estaba calificado (no era lo
suficientemente mayor o capacitado, etc.) para hablar de
parte de Dios (1:6-7). ¡Ahora Dios es tan enfático que dijo a
Jeremías que Él pondría las palabras en su boca (1:8-10)!
Ezequiel. Profetizó principalmente a los cautivos judíos
en Babilonia. En los primeros capítulos (1-3) de su libro, el
joven sacerdote en formación cuenta su visión, y el fuerte
lenguaje con que Dios le habló. Dios fue al punto de decir
que SI Ezequiel no entregaba su mensaje al pueblo de
corazón duro, Judá, él sería considerado como responsable
por Dios mismo (Ezequiel 3:16-27). Recuerde que el pueblo
de Judá había sido llevado en cautiverio a causa de acudir a
dioses falsos y adorar ídolos. Repetidamente, de hecho,
más de 60 veces, la expresión “conocerán que yo soy
Jehová…” es registrada en los mensajes que Ezequiel
proclamó a los judíos que sufrían en Babilonia las
consecuencias de su idolatría.
Daniel. Fue el profeta del Antiguo Testamento que tuvo
una posición única en los palacios de cinco reyes. Sin
embargo, debería considerarse que como un judío joven,
Daniel también fue llevado al cautiverio babilonio. Aunque el
plan de Dios para él era único, no debemos olvidar que
Daniel permaneció fiel al único Dios verdadero durante
grandes pruebas y persecución. La integridad de Daniel
para con Dios y con los hombres le ganó el derecho de que
su voz fuera oída tanto entre judíos como entre gentiles.
En términos de significado mundial, Daniel fue la voz más
clara entre los profetas del Antiguo Testamento acerca de
los acontecimientos del tiempo del fin. Sus escritos están
estrechamente vinculados con el libro del Nuevo Testamento
llamado Apocalipsis. Hasta este mismo día, algunas
profecías de Daniel que fueron pronunciadas hace más de
2000 años no se han cumplido todavía.

Como apartado, cada persona que es “llamada” por Dios


para ser uno de sus portavoces tiene un lugar único e
importante en el servicio. El tamaño de la audiencia,
popularidad, prominencia, o cualquier otro rasgo que pueda
ser considerado como “éxito” según los conceptos del mundo,
nunca debería producir orgullo o conducir al desaliento al
siervo del Dios altísimo. La herencia de familia, la posición
social o económica, ni el nivel de formación académica,
garantizan o impiden el llamado de Dios.
Usted, por sí solo, puede hacer lo que Dios le ha llamado a
hacer. En la medida del plan de Dios, ninguna persona tiene
mayor importancia que cualquiera de sus siervos obedientes.
Sea fiel en hacer lo que Dios le ha llamado a hacer. Eso, y
sólo eso, ¡es la base para su futura recompensa eterna!

Las decisiones de Dios no siempre pueden estar en


armonía con las perspectivas de los hombres. Al examinar
estos cuatro profetas, es claro que el trasfondo de cada uno
es único. Isaías procedía de una familia acomodada y
políticamente relacionada. Su padre era un hermano del rey
Usías. Jeremías venía de un pequeño pueblo ubicado
aproximadamente 20 kilómetros de distancia de Jerusalén.
Nada en las Escrituras parece indicar que él tenía cualquier
reconocimiento de pre-profeta o influencia. Ezequiel
procedía de una familia sacerdotal, y era un joven sacerdote
en formación cuando él fue llevado al cautiverio babilonio.
Daniel fue un joven académicamente brillante, que fue
seleccionado para aprender la lengua, cultura y artes de los
babilonios. A pesar de esta oportunidad política, Daniel no
permitió que su posición en el palacio sustituyera su
dedicación personal al Dios Omnipotente.

Un estudio rápido de los otros profetas del Antiguo


Testamento, revelará que se sabe muy poco o nada acerca
del trasfondo o las familias de muchos de éstos hombres
llamados por Dios. Unos cuantos entre ellos eran pastores o
granjeros, con un sacerdote ocasional o un descendiente de
algún previo rey de Judá. El caso es que Dios no tiene un
proceso de selección por el cual Él elimina a ciertas
personas que no tienen las credenciales que les permitirían
una posición de prestigio. En su sabiduría soberana, Dios
elige a quien Él quiere. Ninguno de nosotros fue escogido
debido a lo que podemos “ofrecer a Dios.” Antes bien, en su
infinito conocimiento previo, el Creador y Gobernador del
universo ve en lo que podríamos convertirnos si seguimos
obedientemente su dirección.

LOS DISCÍPULOS Y APÓSTOLES DEL NUEVO


TESTAMENTO
Jesús personalmente eligió los Doce para estar con Él. Él
fue su mentor, instruyéndolos para predicar las buenas
nuevas después de que Él ascendió de vuelta al Cielo.
“Venid en pos de mí, y os haré pescadores de hombres.”
(Mateo 4:19)

“No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a


vosotros.”
(Juan 15:16)
“Como me envió el Padre, así también yo os envío.”
(Juan 20:21)

“Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda


criatura.”
(Marcos 16:15)

“Pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros


el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en
toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra.”
(Hechos 1:8)

No puede haber duda acerca de la intención de nuestro


Señor. Él sabía que su tiempo en la tierra era limitado. Si
este mensaje de perdón, redención y restauración iba a ser
oído por la gente “en Jerusalén, en toda Judea, en
Samaria, y hasta lo último de la tierra.” (Hechos 1:8), sería
predicado por aquellos que Él había seleccionado. Este es
uno de los mandatos más prolíficos y directos de la Biblia.
Tuvo el propósito de derribar las barreras de (1) religión, (2)
cultura, (3) idioma, (4) etnicidad y (5) convicción política. En
resumen, Jesús murió de modo que todos pudieran ser
restaurados a la correcta relación con Dios a través de su
sacrificio. La verdad gloriosa de la reconciliación del hombre
con el Dios Creador debe ser el enfoque singular de
aquellos que Él ha ungido para llevar su mensaje.
La dramática conversión y “llamado” de Saulo de Tarso
(más tarde el apóstol Pablo) no deja lugar para la
especulación acerca del plan que Dios tenía para su vida
(Hechos 9:1-22). Éste, ahora convertido erudito judío, (1)
escribió casi la mitad del Nuevo Testamento, declarando lo
que el Espíritu Santo le había revelado, (2) fundó iglesias a
través de Asia y Europa, (3) estuvo en prisión en Roma, y
por último fue (4) martirizado por su fe. No hay orgullo o
arrogancia, sólo contentamiento en saber que en Cristo él
fue capaz de soportar cualquier situación o persecución por
causa de Cristo (Filipenses 4:10-13). El llamado era tan
intenso que todo lo demás perdía importancia en su
determinación de (firmemente) pelear la buena batalla,
(perseverar) para terminar la carrera, (y ser rotundamente)
fiel hasta la muerte (2 Timoteo 4:6-8).
Sólo un repaso ligero de la historia de la iglesia primitiva
revela que todos los apóstoles (excepto Juan) fueron
martirizados por su fe. Tal lealtad fue motivada por el amor al
Maestro, Jesús había invertido personalmente en sus vidas.
¡No podía haber vuelta atrás!
Al ir desde los tiempos posteriores a la época del Nuevo
Testamento, hasta el siglo veintiuno, Pablo enfatiza que
dones específicos de liderazgo espiritual han sido dados a la
iglesia. “Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros,
profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y
maestros, a fin de perfeccionar a los santos para la obra
del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo”
(Efesios 4:11-12). Con seguridad, el apóstol no dio una lista
por “rango” o posición oficial, antes bien por el ministerio o
servicio específico que sería proporcionado para cumplir la
Gran Comisión.
El llamado de Dios es un privilegio sagrado. Esto no
significa que uno predica hasta que aparezcan problemas o
haya una mejor posición a disposición. Ningún plan
alternativo debería ser elegido, en caso de que el ministerio
no resulte como se esperaba. Cuando era un joven
predicador oí que un conocido ministro decía: “Si usted
puede hacer otra cosa en lugar de predicar, usted debería
hacerla.” Al principio esto sonó un poco extraño, hasta poco
espiritual. Ahora, entiendo que él enfatizaba la seria
naturaleza del “llamado de Dios.” La predicación no es una
“profesión” que usted escoge basándose en su personalidad
o aptitud. Si el Dios Eterno le ha escogido para proclamar la
verdad eterna, nunca considere otro camino u opción.
“¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído?
¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo
oirán sin haber quien les predique? ¿Y cómo predicarán si
no fueren enviados? Como está escrito: !Cuán hermosos
son los pies de los que anuncian la paz, de los que
anuncian buenas nuevas!”
(Romanos 10:14-15)
CAPITULO 2

LA IMPORTANCIA DE PREDICAR EN LAS


ESCRITURAS

L as palabras griegas para predicar y enseñar son


usadas con frecuencia en las Escrituras del Nuevo
Testamento (enseñar, aproximadamente 100 veces;
predicar, aproximadamente 130 veces). Estas palabras
cuando se traducen correctamente indican el significado
tanto del contenido como del objetivo del mensaje. Un
detallado estudio del lenguaje parece indicar que la
predicación y la enseñanza fueron consideradas actividades
sinónimas en el registro del Nuevo Testamento. Es decir,
para que la predicación sea más eficaz, debe tener un obvio
componente de enseñanza incluido. Algunos eruditos
interpretan hoy el ministerio del “pastor” y “maestro” (Efesios
4:12) como uno, en lugar de abarcar dos ministerios
separados en la iglesia. Para encajar en nuestras mentes la
relación entre predicación y enseñanza, es provechoso
descartar totalmente la idea de estilo o método. Por ejemplo,
en el Sermón del Monte, Jesús se sentó y “enseñó” a la
multitud (Mateo 5:1). Aún así, Él “proclamaba” la verdad que
seguramente abarcó tanto predicación como enseñanza.
Cuando usted predica la Palabra, usted ofrece la instrucción
o conocimiento de la verdad eterna. Pablo lo dice
sucintamente:
“Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios.”
(Romanos 10:17)

El contenido es la Palabra de Dios, el objetivo es


conducir a las personas a la fe en Cristo.

EL EJEMPLO E INSTRUCCIÓN DE JESÚS


“Recorría Jesús todas las ciudades y aldeas, enseñando
en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del
reino.”
(Mateo 9:35)

“Cuando Jesús terminó de dar instrucciones a sus doce


discípulos, se fue de allí a enseñar y a predicar en las
ciudades de ellos.…”
(Mateo 11:1)

“Sucedió un día, que enseñando Jesús al pueblo en el


templo, y anunciando el evangelio…”
(Lucas 20:1)

Para más referencias véase: Mateo 4:17; Marcos 1:38-


39, 2:2, 6:12; Lucas 4:43, 9:6; Juan 7:37-38, 18:20-21
Mientras Jesús estaba todavía vivo en la tierra, Él
encargó a los Doce la misión de predicar (Mateo 10:1-42).
(Véase también: Marcos 6:7-13 y Lucas 9:1-6). A la hora de
su ascensión al cielo y la subsecuente investidura de poder
del Espíritu Santo, estos hombres no tenían duda en cuanto
a la tarea que Dios les había encomendado. Jesús les había
enseñado bien.
EL EJEMPLO E INSTRUCCIÓN DE PABLO
¿Cuál es el motivo de que recordamos mayormente la vida
del apóstol Pablo? Es muy probable que sea por los tres
viajes “misioneros” que él emprendió. El objetivo de estos
viajes fue predicar el evangelio de Cristo, y establecer una
iglesia del Nuevo Testamento en cada una de las variadas
regiones. Es muy evidente, por sus cartas de dirección e
instrucción, que éstos eran “nuevos convertidos”. Incluso en
forma escrita, Pablo estaba predicando y enseñando la
verdad divina. Recuerde que estas cartas fueron
recolectadas más tarde en lo que conocemos hoy como el
Nuevo Testamento. Toda esta información vino a estos
creyentes jóvenes como revelación divina por el Espíritu
Santo.
A medida que Pablo se hacía más viejo, y los efectos de
sus viajes, junto con la persecución brutal y encarcelamiento
que él soportó, comenzaron a erosionar su energía y
mostrarse en su cuerpo, él invirtió en personas más
jóvenes. Más notablemente, Timoteo era asesorado por el
hombre más anciano, y recibía instrucciones explícitas
acerca del ministerio. La declaración en tres palabras que
Pablo dio a su “hijo en la fe” ha sido usada en servicios de
ordenación durante siglos alrededor del mundo: “Que
prediques la palabra” (2 Timoteo 4:2). Sin embargo, debería
considerarse que incluida en esta carta final (2 Timoteo)
antes de su muerte, el gran apóstol enfatiza la urgencia de
guardar la “doctrina”. (Timoteo es ahora el pastor de la
iglesia en Efeso.) No era sólo que él predicara, sino que él
supiera lo que predicaba. Sí, Timoteo,
“Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado,... que
usa bien la palabra de verdad.”
(2 Timoteo 2:15)

“Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para


enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en
justicia,…”
(2 Timoteo 3:16)
CAPITULO 3

EL OBJETIVO DE LA PREDICACIÓN EN EL
NUEVO TESTAMENTO

EVANGELISMO: SALVACIÓN
Se piensa que Juan 3:16-17 es el versículo que resume la
Biblia entera.
“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a
su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se
pierda, mas tenga vida eterna. Porque no envió Dios a su
Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el
mundo sea salvo por él.”
Lucas concluye su relato de la vida y ministerio de Cristo
con este mensaje a los discípulos todavía confusos.
“Así está escrito, y así fue necesario que el Cristo
padeciese, y resucitase de los muertos al tercer día; y que
se predicase en su nombre el arrepentimiento y el perdón
de pecados en todas las naciones, comenzando desde
Jerusalén.”
(Lucas 24:46-47)

Poco después del día de Pentecostés, el apóstol Pedro


enérgicamente declaró que Cristo es el único camino a la
salvación.
“Este Jesús es la piedra reprobada por vosotros los
edificadores, la cual ha venido a ser cabeza del ángulo. Y
en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre
bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser
salvos.”
(Hechos 4:11-12) (énfasis el mío)

A través de los escritos de Pablo, usted puede sentir el


compromiso pleno y total de “predicar a Cristo y a éste
crucificado”. Pasajes tales como:
“Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder
de Dios para salvación a todo aquel que cree.”
(Romanos 1:16)

O, la apasionada declaración a la joven iglesia de


Corinto:
“Porque la palabra de la cruz es locura a los que se
pierden; pero a los que se salvan, esto es, a nosotros, es
poder de Dios.”
(1 Corintios 1:18)

Como puede uno no ser conmovido por las palabras de


Pablo acerca de la reconciliación:
“De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es;
las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas
nuevas... nos dio el ministerio de la reconciliación... Dios
estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo... Al que
no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que
nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él.”
(2 Corintios 5:17-21)
A través de la predicación de la Palabra, el Espíritu Santo
revelará a Cristo como el único y sólo camino para que el
hombre depravado, con un historial de pecado, pueda recibir
acceso personal a la presencia del Dios eternamente santo.
¡La gracia de Dios es realmente asombrosa!

El caso es que como portavoces del Omnipotente,


nuestro primer mensaje siempre debe ser las gloriosas
buenas nuevas del perdón de pecado, y restauración a la
correcta relación con Dios por la fe en Jesucristo (Romanos
5:1-2). Hay muchas lecciones que ser aprendidas en el
caminar cotidiano de la fe, pero el punto de inicio es siempre
un encuentro de crisis, directo y personal, ¡con la Palabra
viva! ¡El mensaje no es complicado, pero es profundo!
Nunca, pierda de vista la cruz en su predicación.

CRECIMIENTO ESPIRITUAL: SANTIFICACIÓN


Esta es más a menudo la tarea de aquellos llamados a ser
“pastores”, que deben conducir al pueblo de Dios al
crecimiento y madurez espiritual. Para cada creyente este
es un proceso de toda la vida. Nadie (incluyendo el pastor)
alcanza alguna vez la perfección absoluta durante esta
estadía terrenal. Día en día nos esforzamos contra los
ataques de Satanás cuyo objetivo es empujarnos de vuelta
en el asqueroso abismo de incredulidad, desobediencia y
abierto pecado.

Justificación: La “absolución formal” de nuestros pecados. En


ese momento de la salvación somos santificados
posicionalmente en Cristo Jesús. (Romanos 5:1-2)
Santificación: El proceso de “ser conformado” a la imagen de
Cristo Jesús. Esta sigue a la salvación, siendo santificados
cada vez más por la obra interna del Espíritu Santo. (2
Corintios 3:18)

Pablo claramente explica que esta es la responsabilidad


de los líderes espirituales (los dones que Cristo dio a Su
Iglesia)
“Y él mismo constituyó a unos... hasta que todos
lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo
de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de
la plenitud de Cristo; para que ya no seamos niños
fluctuantes... siguiendo la verdad en amor, crezcamos en
todo en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo.”
(Efesios 4:11-16)
Pedro amonesta a los creyentes para verse a sí mismos
a la luz de la santidad de Dios.
“Como hijos obedientes, no os conforméis a los deseos
que antes teníais estando en vuestra ignorancia; sino,
como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros
santos en toda vuestra manera de vivir; porque escrito
está: Sed santos, porque yo soy santo.”
(1 Pedro 1:14-16)

Más tarde, en su carta final antes de ser muerto, el último


comentario de Pedro reitera el significado de la vida santa
(santificada).
“Antes bien, creced en la gracia y el conocimiento de
nuestro Señor y Salvador Jesucristo.”
(2 Pedro 3:18)

Así como los niños deben ser a menudo enseñados


mediante

Ningún creyente será más fuerte o espiritualmente más


maduro que su
conocimiento y aplicación personal de la palabra de dios en la
vida diaria. Ayudar a que los seguidores de Cristo alcancen
nuevos niveles de entendimiento bíblico, y posteriormente
alentar el proceso continuo de asimilar la verdad en la vida
diaria es vital en el cumplimiento de la Gran Comisión. Jesús
dijo a sus discípulos que ganaran al perdido y luego lo
instruyeran para servirle. (Mateo 28:19-20)
¡Predicador, esta es su tarea! ¡Hágala bien!

la repetición —a veces mediante la disciplina, siempre en


amor, y con consecuencia en el ejemplo— así también
aquellos que son hijos de Dios debe crecer de la “leche” y
de la “carne” de la Palabra (1 Corintios 3:1-3).

VERDAD DOCTRINAL: SEGURIDAD


Doctrina—Una verdad que es enseñada a partir de un
sistema de principios desarrollado cuidadosamente, que son
subsecuentemente aceptados por los creyentes como
pautas de fe y práctica.
Apologetica—Defender (explicar) la doctrina (dogma, credo)
de la fe cristiana usando las Escrituras e ilustrar con
numerosas pruebas empíricas de la historia humana. En su
última oración por sus discípulos (y nosotros), nuestro
Señor oró:
“Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad.”
(Juan 17:17)

Sí que importa lo que las personas creen.


1. Recuerde, una verdad doctrinal no se extrae de un
solo versículo de las Escrituras, sino por lo que se
enseña en toda la Palabra de Dios.
2. Recuerde, el error doctrinal es a menudo el resultado
de seleccionar ciertos versículos sobre un tema dado,
que probablemente son tomados fuera del contexto
apropiado, para demostrar cierto punto.
3. Recuerde, que la verdad se encuentra al (1)
investigar en toda la Palabra de Dios, (2) entender el
contexto original de un pasaje, y (3) evaluar de que
manera muestra primeramente la glorificación de Dios
y la exaltación de Cristo.
Los avances tecnológicos modernos hacen posible que
enseñanzas absurdas se propaguen muy rápidamente
alrededor del mundo. Si la “carne” procura ser “santa”; es
decir los deseos carnales de la naturaleza pecaminosa
están siendo satisfechos bajo el disfraz de revelación
bíblica, el hombre de Dios debe evitar aceptar o abogar por
tal enseñanza. Tanto Pablo como Pedro dieron solemnes
advertencias acerca de “maestros falsos y profetas falsos”
que traen interrupción y confusión perjudicial en el cuerpo de
Cristo en los últimos días (véase Hechos 20:27-31 y 2
Pedro 2:1-22). A los “ministros jóvenes” de su día, Timoteo y
Tito, el apóstol Pablo menciona aproximadamente quince
veces la importancia de preservar la doctrina bíblica (véase
1 y 2 Timoteo y Tito).

El error doctrinal es a menudo el resultado de una


exageración de una verdad bíblica dada, antes que una
completa negación de las Escrituras.
Esta exageración de la verdad es muy probablemente el
resultado de un énfasis insuficiente de aquella misma verdad.
Cualquier “nueva revelación” debe ser cuidadosamente
evaluada a la luz brillante de toda la Escritura, antes de que
sea aceptada o proclamada como una verdad bíblica.
CAPITULO 4

PREPARACIÓN PERSONAL PARA EL


MINISTERIO: LA PREPARATION PRECEDE A
LA PRESENTACIÓN

L a preparación privada valida la presentación pública.


En resumen lo que usted hace en privado determinará
los resultados eternos de su ministerio público. No se las
puede separar.

¡Los hombres de Dios deben emerger de la oscuridad del


closet de la oración a las luces deslumbrantes de la
desesperada necesidad espiritual de la humanidad, y con
resolución declarar con certeza constante: “Así dice el
Señor!”

Tener una personalidad atractiva o convertirse en un


orador experto nunca substituirá el esperar en la presencia
de Dios, hasta que Él imprima a fuego un mensaje en su
corazón. Cada vez que usted se posiciona tras el púlpito,
sus fieles deberían tener la confianza plena de que lo que
usted dice procede directamente del corazón de Dios para
ellos.

EL “HOMBRE DE DIOS” ES TODAVÍA SÓLO UN


HOMBRE
Esto parece tan elemental, casi redundante. Sí, la gracia de
Dios llena mi vida. Sí, mis pecados pasados han sido
perdonados. No obstante, ninguno de nosotros es perfecto.
¡Incluso nuestro Señor Jesús fue con severidad tentado
después de ser bautizado en agua, y haber estado
ayunando y orando durante cuarenta días! (Mateo 4:1-11).
Jesús no estaba fuera de la “voluntad de Dios” cuando
experimentó esta tentación.

Aunque esta es la más detallada de las tentaciones de


Cristo, recuerde que Satanás sólo se alejó de Él para un
periodo de tiempo (Lucas 4:13). A fin de ser “uno de
nosotros”, nuestro Señor fue “tentado en todo según
nuestra semejanza, pero sin pecado” (Hebreos 4:15). En el
huerto de Getsemaní, sólo unas horas antes de la horrible
crucifixión, el “hombre” Jesús, que nunca había pecado o
desobedecido a su Padre, luchó con larealidad de lo que
estaba delante de Él. ¿Su oración? “Padre mío, si es
posible, pase de mí esta copa [de muerte].” Simplemente,
Jesús no quería sufrir esta muerte injusta. También
sabemos queÉl prosiguió esta intensa oración declarando:
“Pero no sea como yo quiero, sino como tú”. (Mateo 26:36-
46). Él ganó la batalla de la cruz en aquel altar de roca en el
huerto de Getsemaní, y fue directamente del lugar privado
de oración a las burlas de la vía dolorosa y la cruel
crucifixión.
El apóstol Pablo sabía que todo que él era procedía
directamente de la gracia de Dios en su vida.
“Porque yo soy el más pequeño de los apóstoles, que no
soy digno de ser llamado apóstol, porque perseguí a la
iglesia de Dios. Pero por la gracia de Dios soy lo que soy; y
su gracia no ha sido en vano para conmigo... pero no yo,
sino la gracia de Dios conmigo.”
(1 Corintios 15:9-10)

Debemos recordarnos constantemente que una vez que


hemos declarado nuestra posición como un “embajador” de
Cristo Jesús, Satanás y todas sus huestes soltarán todo el
arsenal del infierno contra nosotros. Este no es ningún
juego. Usted, la amenaza de invadir el territorio de las
tinieblas, se convierte en un blanco principal. No hay nada
que Satanás disfrute más que traer vergüenza sobre aquel
que proclama a Cristo como Hijo de Dios y único Redentor
del hombre (2 Timoteo 3:12).
“Así que, el que piensa estar firme, mire que no caiga. No
os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana;
pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo
que podéis resistir, sino que dará también juntamente con
la tentación la salida, para que podáis soportar.”
(1 Corintios 10:12-13)

¡Por la gracia de Dios somos “más que vencedores” en


Cristo Jesús (Romanos 8:37)!

RECONOZCA Y RESISTA TENTACIONES


PECAMINOSAS
Es cierto que Satanás es un impostor. Quizás dos de los
más frecuentes pecados entre los líderes espirituales,
externamente observables, están relacionados con el dinero
y la moral. Repetidamente, las Escrituras advierten de los
peligros de ser alcanzado en tales trampas.
Lamentablemente muchos de los ejemplos del Antiguo
Testamento son de aquellos elegidos para ser líderes
espirituales (p.ej., los hijos de Elí, 1 Samuel 2:22-36). La
estadística de aquellos que estuvieron una vez en el
ministerio, pero ya no están calificados como líderes
espirituales, verificará que la gran mayoría de aquellos
fueron culpables de deshonestidad financiera o impureza
moral.
Lea las cartas de Pablo a su “hijo en la fe”, Timoteo. El
consejo de Pablo al joven Timoteo es solemne, y
ciertamente aplicable a los líderes espirituales de hoy.
El deseo de poseer más cosas terrenales:
“Pero gran ganancia es la piedad acompañada de
contentamiento; Así que, teniendo sustento y abrigo,
estemos contentos con esto... porque raíz de todos los
males es el amor al dinero.”
(1 Timoteo 6:6-10)

La naturaleza destructiva de la impureza sexual


(fornicación, adulterio, incesto, homosexualidad):
“Ni participes en pecados ajenos. Consérvate puro.”
(1 Timoteo 5:22)
“Así que, si alguno se limpia de estas cosas, será
instrumento para honra, santificado, útil al Señor, y
dispuesto para toda buena obra. Huye también de las
pasiones juveniles.”
(2 Timoteo 2:21-22)

No se puede exagerar en cuanto a la severidad del daño


que resulta cuando un hombre de Dios cede a tal tentación.
No sólo hay pena, vergüenza, deshonra y angustia para el
ministro y su familia, sino también para el cuerpo de Cristo
como un todo. Da a los escépticos incrédulos aún otra
excusa para acumular vergüenza y burla sobre la causa de
Jesucristo. El Espíritu Santo es fiel al poner signos de
advertencia en nuestro camino, y mostrarnos que seguir en
aquella dirección nos acarreará seguramente desastre
personal y ministerial. Si caemos en tal flagrante pecado es
porque (1) no reconocemos francamente nuestra propia
debilidad humana, (2) no resistimos (adoptamos una
posición militar contra) el diablo, ni (3) nos apropiamos de la
gracia de Dios disponible para ayudarnos a vencer las
tentaciones.

FUERZAS DISUASORIAS SUTILES PARA UN


MINISTERIO EFICAZ
LA CARENCIA DE HUMILDAD Uno podría decir que el
orgullo tiene el mismo significado, que es ciertamente lo
opuesto de la humildad. Sin duda, desde la tentación en el
huerto de Edén hasta la futura aparición del Anticristo, el
orgullo ha estado en el corazón de las acciones
pecaminosas. Advertencia tras advertencia es dada en la
Escritura para evitar el orgullo, o arrepentirse rápidamente
de él, cuando esto encuentra alojando en el corazón. El
orgullo es el umbral al desastre espiritual.
“Antes del quebrantamiento es la soberbia.”
(Proverbios 16:18)

Permítame explicar la diferencia que veo entre el orgullo


y la carencia de humildad. Por definición, la humildad
consiste en considerarse uno mismo indigno. De este modo,
si alcanzo un punto donde me siento cómodo o contento con
la supuesta eficacia de cómo me “desempeño” en el
ministerio, podría no ser arrogante o egocéntrico, no
obstante no estoy entendiendo o reconociendo mi total
indignidad. Nunca, pierda de vista a Aquel que le ha llamado
y le ha permitido ser su siervo. Todo lo demás es accesorio,
y debe ser visto según la perspectiva de la grandeza de
nuestro Señor. Sin Cristo somos absolutamente nada, y
nuestra personalidad carismática o las habilidades oratorias
complacerán sólo a la carne.
Pablo habló a menudo de su sentido de indignidad de ser
mensajero del Señor. En Filipenses 3 aprendemos que él
tenía educación avanzada, era un fariseo que había ganado
gran respeto entre sus pares como un maestro experto de la
ley del Antiguo Testamento. Saulo (antes de que su nombre
fuera cambiado a Pablo) era un hombre de gran influencia
en la religión y cultura judía. La gente escuchaba lo que él
tenía que decir. Aún así, después de convertirse al Cristo
vivo, él declara que todo esto —su herencia, su formación,
su talento, su fidelidad a la tradición judía— es basura sin
valor, sólo para ser arrojada (Filipenses 3:4-11).
“Porque yo soy el más pequeño de los apóstoles.”
(1 Corintios 15:9)
“Ni estimo preciosa mi vida para mí mismo, con tal que
acabe mi carrera con gozo, y el ministerio que recibí del
Señor Jesús.”
(Hechos 20:22-24)

EL ABUSO DE AUTORIDAD Existe un viejo proverbio


que dice: “Si usted realmente quiere conocer el carácter de
una persona, asígnele una posición de autoridad.” Jesús
enseñó que los líderes genuinos son siervos, no “amos”. En
la Última Cena antes de que Jesús fuera a la cruz, en un
momentodramático Él tomó el lugar de un humilde esclavo y
lavó los pies de sus discípulos (Juan 13:4-16). Al coordinar
el orden de los acontecimientos registrados por los cuatro
escritores del Evangelio, muchos eruditos creen que en este
mismo momento los discípulos todavía discutían sobre
posición y prominencia en el reino restaurado de Israel
(Lucas 22:19-24). Este fue un poderoso momento de
enseñanza. Jesús enfatizó que los líderes espirituales
debían servir, una actitud que estaba en fuerte contradicción
con la filosofía de una cultura que buscaba más bien ser
servida. A propósito, no hay ningún registro de que estos
discípulos se enfrascaron de nuevo alguna vez en algún
debate sobre su importancia personal en posiciones de
liderazgo después del día de Pentecostés.
El siervo del Señor no debe “contender” (2 Timoteo 2:24)
por estar siempre en control de cada situación. Algunas
cosas son de tal insignificancia en el plan eterno que es
reprochable que el hombre de Dios se enrede en asuntos
triviales.

ENVIDIA DEL ÉXITO DE OTROS


El rey Saúl se volvió envidioso de David después de que
éste mató a Goliat. Cuando el ejército volvía a casa después
de esta gran victoria sobre los filisteos, las mujeres a lo
largo de la ruta del desfile cantaban:

Es mucho más fácil dolerse con otra persona que está


pasando por una situación difícil que alegrarse con una que
acaba de experimentar un gran logro.
¡Esta es la naturaleza humana, y debe ser clavada en la cruz!

“Saúl hirió a sus miles, y David a sus diez miles. Y se enojó


Saúl en gran manera... Y desde aquel día Saúl no miró con
buenos ojos a David.”
(1 Samuel 18:6-9)

Esta historia del Antiguo Testamento relata que el rey


Saúl intentó matar personalmente a David, y hasta envió a
sus mejores guerreros al desierto para encontrarlo y
matarlo. Él estaba consumido por este espíritu maligno de
envidia. Al final, el rey Saúl murió en deshonra y David se
convirtió en el rey de Israel.
Al hacer un repaso del ministerio de los cuatro profetas
mayores del Antiguo Testamento, usted recordará que tres
de ellos —Jeremías, Ezequiel y Daniel— son
contemporáneos. No hay ninguna indicación en la Biblia de
que alguno tuvo envidia del otro. Jeremías fue lanzado en
una cisterna y se hundió en el barro hasta sus axilas, pero
usted nunca lo oye refunfuñando sobre cuán injusta es su
situación mientras el joven Daniel vive en el palacio del rey.
Usted hace sacrificios profundos y dolorosos por causa
de la obra del Señor, y pareciera que no hay casi ningún
resultado visible. Usted ora fervientemente, y sus oraciones
nunca parecen ir más allá del techo. Y la lista puede seguir.
Sin embargo, hay otro hermano que cualquier cosa que
emprende tiene un éxito abrumador. La gente siempre
recalca sus nuevos logros. Usted sabe que usted trabaja
con tanto empeño como él hace. Él debe tener a alguien
influyente para ayudarle a avanzar, o seguramente él transa
el mensaje para tener más seguidores. Si usted se
obsesiona con el reconocimiento o posición de otras
personas, esto minará su mente y espíritu. Por decir lo
menos, su eficacia en el cumplimiento del plan de Dios para
su vida será disminuida. Antes de que usted permita que esa
actitud de envidia invada sus pensamientos, recuerde la
cruel e injusta envidia que fue mostrada hacia nuestro
Señor. Aquellos que deberían haberle dado la bienvenida y
haber apoyado su ministerio estaban empeñados en matar a
nuestro Señor.
EL MIEDO AL FRACASO. El decir: “No puedo hacer
esto”, en referencia a lo que Dios nos ha llamado a hacer
es, por lo menos, una expresión de carencia de confianza
en la sabiduría soberana del Omnipotente. A menudo
hablamos sobre cómo Pedro comenzó a hundirse cuando él
vio las olas del mar alrededor suyo. Seguramente,
concluimos, esta fue “carencia de fe” de su parte. Pero,
¡recuerde que Pedro salió realmente del barco! Él respondió
a la invitación del Señor, mientras los otros discípulos
permanecían agazapados en el barco, aterrorizados por lo
que pasaba alrededor de ellos. (Mateo 14:22-33; Marcos
6:45-52: Juan 6:15-21)
Hay una diferencia importante entre actuar en fe y ser
presumido. Las decisiones absurdas, carentes de la
dirección del Espíritu, han creado muchos desastres. Que,
por su parte, han desarrollado un temor paralizante que
impide avanzar. El líder espiritual debe primero oír la voz de
Dios, responder en consecuencia y con responsabilidad, y
luego encomendar solemnemente los futuros resultados en
las manos del Señor.
El ejército del Señor no marcha simplemente en un lugar,
estamos avanzando en el territorio del enemigo,
destruyendo sus fortalezas, y levantando el estandarte de la
Cruz manchado de sangre.
“Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.”
(Filipenses 4:13)

La duda cuestiona si Dios puede… El temor cuestiona si Dios


hará
¡Una dice que Dios es incapaz… El otro dice que Dios es
reacio
El temor hace que el ministro diga “no puedo…” porque él
cree que “Dios no va a…”

LA OPINIÓN DE LOS DEMÁS. Todos nosotros


necesitamos consejo y asesoría de los espiritualmente más
maduros. El hecho es que hasta el más inteligente no
siempre tendrá todas las respuestas correctas. Dios usará
a otros para reforzar nuestrasmanos en nuestro servicio a
Él, como Aarón y Hur sostuvieron las manos de Moisés
durante la batalla con los amalecitas en Refidim (Éxodo
17:8-16). En palabras sencillas, como líderes espirituales
debemos estar rodeados por personas fieles que comparten
la visión que Dios nos ha dado. Nunca adopte una actitud
antagónica hacia ellas. Sus oraciones, presencia y
compañerismo son vitales para el avance de la causa de
Jesucristo en cualquier lugar del mundo.
Habiendo dicho esto, la reflexión de esta sección está
relacionada con exactamente el escenario opuesto. La
gente que constantemente critica, reprocha, y chismea
sobre quiénes somos y lo que intentamos hacer para el
Reino, puede llevarnos muy rápidamente a un punto de
desesperación y desaliento. Las tendencias naturales son
dos: (1) Contraatacar para defendernos, o (2) huir
abandonando la misión. Sin embargo, ceder a cualquiera de
estos criterios es dañino para nosotros como personas, al
mismo tiempo que trae confusión al Cuerpo de Cristo.
Pablo aconseja a Timoteo:
“Pero desecha las cuestiones necias e insensatas,
sabiendo que engendran contiendas. Porque el siervo del
Señor no debe ser contencioso, sino amable para con
todos, apto para enseñar, sufrido.”
(2 Timoteo 2:23-24)

Para aquel elegido para liderar al pueblo de Dios, es


absolutamente obligatorio ser introspectivamente honesto.
Cuando la crítica es lanzada como una flecha encendida al
corazón, deberíamos evaluar muy cuidadosamente la
veracidad de tales comentarios. Si ellos son correctos, y
nosotros hemos fallado en llevar a cabo el plan de Dios en
alguna forma, se debería hacer todo esfuerzo por rectificar
la situación tan rápidamente como sea posible. En otras
palabras, no debieran ser nuestros propios fracasos o
inmadurez espiritual los que causan comentarios mordaces
(1 Pedro 4:12-16). Sin embargo, cuando usted ha
determinado pía y sinceramente que la crítica no es válida,
por la gracia de Dios debería ser descartada.
¡Pacíficamente y con gozo proceda con la obra del Señor!
Después de declarar a los creyentes en Corinto que él tiene
“este tesoro [la salvación en Cristo] en vasos de barro”,
Pablo define las presiones de la vida ministerial y la
respuesta que es hecha posible por el poder de Cristo que
vive en nosotros.
“Estamos atribulados en todo, mas no angustiados; en
apuros, mas no desesperados; perseguidos, mas no
desamparados; derribados, pero no destruidos.”
(2 Corintios 4:7-9)

Dos veces en este capítulo, Pablo proclama que él nunca


“desmayará” (2 Corintios 4:1, 16) en este viaje a la
eternidad. Jesús describió la seriedad del discipulado
comprometido en sencillos términos agrícolas:
“Ninguno que poniendo su mano en el arado mira hacia
atrás, es apto para el reino de Dios.”
(Lucas 9:62)

Jesús, voluntariamente (1) dejó su lugar de exaltación a


la mano derecha del Padre; (2) se humilló a sí mismo para
vivir en un cuerpo humano, (3) restringió su propia deidad,
(4) fue a la cruz por nuestros pecados, y (5) hizo posible que
nosotros accediéramos a una relación de paz y restaurada
con Dios el Padre. ¿Podría lo alguien alguna vez pensara o
dijera sobre nosotros, o en contra nuestra como discípulos
elegidos por Dios, disminuir o negar el amor que tenemos
por nuestro Señor? Es imposible “pagar” por nuestra
salvación, pero no es mucho pedir el que guardemos
nuestros corazones y pensamientos
“Pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda
atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la
meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en
Cristo Jesús.”
(Filipenses 3:13-14)

RESENTIMIENTO POR LOS SACRIFICIOS


PERSONALES Giezi, el criado del profeta Eliseo, no podía
concebir que Naamán volviera a Siria con todos los
“regalos” que él había tratado de entregar a Eliseo, después
de ser sanado de la lepra (2 Reyes 5:20-27). Gieziera joven.
Él vio una oportunidad rápida y fácil de apropiarse de
algunas “cosas agradables”. En aquel momento, la tentación
por un mejor estilo de vida lo venció. Además de la avaricia
que se arrastraba en su corazón, es completamente posible
que Giezi hubiera estado viviendo una vida muy modesta
con el profeta. Sin duda, él vio que otros disfrutaban de una
vida más cómoda. Con el tiempo, el resentimiento puede
haber estado agazapado en algún oscuro rincón de su
corazón. “Merezco más que esto.” “Trabajo tan duro como
otros y vean todo lo que ellos tienen.” “Dios no ha sido justo
conmigo.” Sin cesar las voces demoníacas del infierno
atormentan su mente. Entonces como todo pecado
“escondido”, en el momento preciso atacará como una
serpiente venenosa escondida profundamente en la hierba.

¡Usted nunca estará contento con el lugar al que ha sido


llamado a servir en el ministerio, mientras usted considere el
sacrificio como sacrificio!

Colega en el servicio a Dios, recuerde que su


recompensa noviene de las cosas perecederas de esta
tierra como plata y oro. Éstos no son nuestros verdaderos
tesoros. No sólo ellos pasarán, sino que ellos no pueden ser
llevados a la eternidad (Mateo 6:19-21). De hecho, las
posesiones terrenales parecerán baratas e imperfectas una
vez que entremos en las puertas de perla, y caminemos en
las eternas calles de oro. ¡La recompensa más gloriosa por
el servicio!
“Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre
mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor.”
(Mateo 25:21)
CAPITULO 5

“PREDIQUE LA PALABRA”

L a Palabra de Dios es la base de la verdad eterna

1:19-21)
La Palabra es INSPIRADA (2 Timoteo:15-16; 2 Pedro

La Palabra es INFALIBLE (Salmo 119:89; Mateo 24:35)


La Palabra es ETERNA (Isaías 40:8; Mateo 5:18)
La proclamación de la Palabra de Dios, desde Génesis
hasta Apocalipsis, tiene el propósito de revelar a su
creación el carácter y la naturaleza de Dios. A medida que
usted estudia la Palabra, se da cuenta de que a través de
cada parte de la historia del hombre, Dios revela cada vez
más acerca de sí mismo y el eterno plan de redención que
se reveló en el Señor Jesucristo. Como Pablo dice:
“De manera que la ley ha sido nuestro ayo, para llevarnos
a Cristo.”
(Gálatas 3:24)

Y Juan asevera:
“Pero la gracia y la verdad vinieron por medio de
Jesucristo.”
(Juan 1:17)
El poder dinámico de la Palabra es que abarca cada
aspecto de la existencia del ser humano (Hebreos 4:12).
Por lo general se acepta que hay tres componentes en la
toma de decisiones por parte del ser humano: Intelecto,
emociones y voluntad.
La Palabra DESAFÍA EL INTELECTO
La Palabra CARGA LAS EMOCIONES
La Palabra CAMBIA LA VOLUNTAD

El tema último de la predicación bíblica es la provisión


sacrificial y sustitutiva de Cristo por toda la humanidad, para
que ésta sea restaurada a una relación de amor con el Padre
celestial.
El Antiguo Testamento proféticamente anticipa.
El Nuevo Testamento proposicionalmente proclama.

CONSIDERE EL CUADRO MÁS AMPLIO DE LAS


ESCRITURAS
Las Escrituras, tanto el Antiguo como el Nuevo Testamento,
son verbalmente inspiradas por Dios, la revelación de Dios a
los hombres, la infalible y autoritativa regla de fe y conducta.
(2 Timoteo 3:15-17; 2 Pedro 1:21)
La Biblia fue escrita en un período de 1600 años, por
más de 40 autores diferentes:
El plan de Dios es revelado progresivamente en las
Escrituras
Génesis: Carácter y naturaleza de Dios
(primeros 2500 años de historia)
Éxodo—Malaquías. La ley de Moisés
Evangelios: Cristo como el Hijo del Hombre y el
Hijo de Dios
Hechos: El derramamiento del Espíritu, la
iglesia del Nuevo Testamento
Romanos—Judas: Ministerio a la iglesia sobre
la tierra
Apocalipsis: La revelación final y completa de
Dios
Las Escrituras revelan a Dios a los hombres con los
siguientes atributos:
Omnipotente—Todopoderoso
Omnisciente—Poseedor de toda la sabiduría y
conocimiento
Omnipresente—Su presencia está en todas
partes
Se declara que Dios en relación con su creación moral
es:
Amor
Santidad
Verdad
La iglesia del siglo veintiuno es parte de la iglesia del Nuevo
Testamento que comenzó en pentecostés.
La iglesia del Nuevo Testamento comenzó con el
derramamiento del Espíritu Santo prometido por Cristo… y
continúa hoy con el Espíritu Santo obrando colectivamente en
el cuerpo de creyentes e individualmente en cada creyente.
El Bautismo en el Espíritu Santo (Hechos 2:4), los dones del
Espíritu (1 Corintios 12:4-11), el fruto del Espíritu (Gálatas
5:22-23) deben ser expresado y evidenciados en la iglesia del
Nuevo Testamento de esta generación.
De ser posible, tenga una buena traducción de la Biblia
en su idioma, con una concordancia (una lista alfabética de
palabras y pasajes de las Escrituras donde cada palabra
puede ser encontrada), y notas de estudio.

ENTIENDA EL CONTEXTO DEL PASAJE


Esto requiere un poco de estudio e investigación; sin
embargo, éste será muy beneficioso en la preparación del
sermón por parte del predicador. Para entender
suficientemente el contexto de un libro o pasaje dado de la
Escritura, usted debería ser capaz de contestar las
siguientes preguntas:

1. ¿Quién es el autor de este libro?


2. ¿Cuándo fue escrito? (es decir durante los años de
Reino de Israel, era de la Iglesia del Nuevo
Testamento, etc.)
3. ¿Cuáles eran las circunstancias cuando el libro fue
escrito? (es decir Pablo en prisión, Israel en
cautiverio en Babilonia, etc.)
4. ¿A quién fue escrito? (es decir el pueblo de Israel,
una iglesia local en el Nuevo Testamento, etc.)
5. ¿Cuál es el mensaje general del libro o pasaje? (es
decir juicio por el pecado, acontecimientos futuros,
etc.)
6. ¿Cuál es el tema principal del libro?
7. ¿Cuáles son los rasgos únicos de este libro? (es
decir estilo en el cual fue escrito, etc.)

Con toda probabilidad usted no incluirá todos, o siquiera


la mayor parte, de esta información cuando usted predique
el sermón. Sin embargo, al proporcionar algunos aspectos
de la situación original, los oyentes serán capaces de
entender más fácilmente la intención del escritor. Esto
también ayudará al predicador a conectar el pasaje con
tiempos o acontecimientos y costumbres culturales actuales
cuando haga la aplicación.

Los ministros del Evangelio no consideran que el estudio serio


de la palabra es una tarea o deber pesado.
Aquellos que son eficaces en el púlpito reconocen que la
investigación de la Palabra es un privilegio de toda la vida,
que resulta en la revelación del Espíritu Santo de la verdad,
incomprensible para la mente humana.

MANTENGA INTEGRIDAD BÍBLICA


¡Dios es serio en cuanto a la integridad de su propia
Palabra!
“Para siempre, oh Jehová, permanece tu palabra en los
cielos.”
(Salmo 119:89 )

“La hierba se seca, y la flor se marchita, porque el viento


de Jehová sopló en ella; ciertamente como hierba es el
pueblo.”
(Isaías 40:7)
“Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la
tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la ley, hasta que
todo se haya cumplido. De manera que cualquiera que
quebrante uno de estos mandamientos muy pequeños, y
así enseñe a los hombres, muy pequeño será llamado en
el reino de los cielos; mas cualquiera que los haga y los
enseñe, éste será llamado grande en el reino de los
cielos.”
(Mateo 5:18-19)

¡Dios dice lo que él quiere decir, y quiere decir lo que él dice!


“Yo testifico a todo aquel que oye las palabras de la
profecía de este libro: Si alguno añadiere a estas cosas,
Dios traerá sobre él las plagas que están escritas en este
libro. Y si alguno quitare de las palabras del libro de esta
profecía, Dios quitará su parte del libro de la vida, y de la
santa ciudad y de las cosas que están escritas en este
libro.”
(Apocalipsis 22:18-19) El hombre de Dios, no se pone a la
moda con la “revelación” popular más reciente. Algunos
maestros pueden ser capaces de atraer gran número de
personas, pero después el paisaje es ensuciado con
espíritus heridos y buscadores desilusionados. Explotar a la
gente por cualquier razón es malo, pero pervertir la Palabra
de Dios para alcanzar ganancia personal y ambición egoísta
nunca es pasada por alto por el Omnipotente. Recuerde, Él
no compartirá su propia gloria con nadie. Antes de que usted
predique algo que usted oyó que otro ministro decía,
asegúrese absolutamente que puede ser verificado por la
Palabra de Dios. Pablo da un consejo sabio.
“Examinadlo todo; retened lo bueno.”
(1 Tesalonicenses 5:21)

CONFÍE EN LA UNCIÓN DEL ESPÍRITU SANTO


La palabra “unción” es principalmente una palabra del
Antiguo Testamento, que en el hebreo tiene el sentido de
bendecir para un oficio o ministerio (es decir, Aarón como
Sumo Sacerdote, David para convertirse en rey, etc.).
Literalmente, significa “friega” o “embetunar”. Aunque en el
Antiguo Testamento ésta era una práctica concreta con un
especial aceite de unción, era también un gesto simbólico
del llamado, aprobación, e investidura de poder de Dios para
una persona.

Dios no necesita que ningún hombre lo “defienda”. Su palabra


es verdadera y nunca fallará. Por consiguiente, el predicador
nunca debería hacer “promesas” que son diferentes o que no
aparecen como promesas en la Palabra de Dios.
Ya que los caminos o pensamientos de Dios son más
elevados que los nuestros, la sabiduría humana es incapaz de
entender o explicar la sabiduría o acciones del Dios eterno
(Romanos 11:33; 1 Corintios 2:1-9)
Jesús lee del profeta Isaías (61:1-3) al comienzo de su
ministerio terrenal, y declaró que la “unción” de Dios para el
ministerio estaba sobre Él (Lucas 6:16-21). No había ningún
frasco de aceite vertido sobre la cabeza de nuestro Señor,
pero este anuncio público fue validado repetidamente
durante los siguientes tres años a través de su predicación,
enseñanza, sanidad de enfermos y muchos otros milagros.
Jesús, en alguna manera, limitó su propia deidad mientras
estaba en la carne, y realizó estas poderosas obras en el
poder del Espíritu Santo. Nuestro Señor dijo a sus
discípulos:
“De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras
que yo hago, él las hará también; y aun mayores hará,
porque yo voy al Padre.”
(Juan 14:12)
En el contexto de este pasaje, Cristo decía a los
discípulos que dejaría pronto este mundo, pero que Él
enviaría el Espíritu Santo para ungirles e investirles de
poder. Simplemente, sería el poder del Espíritu Santo que los
investiría para cumplir su obra. Él de nuevo confirmó esto
después de su resurrección, diciéndolos que fueran a
Jerusalén.
“He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre
vosotros; pero quedaos vosotros en la ciudad de
Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde lo
alto.”
(Lucas 24:49; Hechos 1:8)

El desafío para los siervos de Dios hoy que responden al


llamado de Dios, y sienten su aprobación, es reconocer y
recibir la investidura de poder del Espíritu Santo. Aunque es
siempre apropiado esforzarse por la excelencia en nuestro
servicio al Señor, es sólo por el poder de la unción del
Espíritu Santo en nuestras vidas que somos capaces de
ministrar en el ámbito sobrenatural. ¿Recuerda usted la
historia de los siete hijos de Esceva que trataron de expulsar
demonios, sin el poder del Espíritu Santo (Hechos 19:13-
17)? ¡Todos los siete fueron dominados por un hombre lleno
de espíritus malignos! Es una buena lección para nosotros
que recordar. Satanás nunca quiere abandonar cualquiera
parte de su “territorio” (Juan 12:31, 14:30; 2 Corintios 4:4; el
Efesios 2:2) y soltará las fuerzas del Infierno para
levantarse contra el ministro del Evangelio. ¡Jesús venció al
diablo en la tentación del desierto con la Palabra de Dios,
tres versículos del libro de Deuteronomio! De los desafíos
queSatanás dio a Cristo, el mayor fue que Él se postrara y
adorara a Satanás. Si Cristo así lo hacía, entonces Satanás
le daría
“Toda esta potestad, y la gloria de ellos; porque a mí me ha
sido entregada, y a quien quiero la doy. Si tú postrado me
adorares.”
(Lucas 4:5-7)

Satanás ofrecía a Cristo un modo “más fácil” de


gobernar sobre la tierra. ¡Literalmente, el padre de mentiras
decía a Cristo que Él no tenía que ir a la cruz!
¿Cómo vencemos hoy tales ataques? ¡¡Mediante la
unción del Espíritu Santo sobre nuestras vidas!! Esto es
cierto tanto cuando estemos tras el púlpito o fuera de él.
CAPITULO 6

¿CÓMO PRESENTARÁ USTED EL


MENSAJE?

PREDIQUE LO QUE USTED HA EXPERIMENTADO PE


RSONALMENTE
Es imposible predicar o enseñar sobre la vida de fe en
Cristo si usted no ha experimentado personalmente la
salvación. ¿Puede usted animar a otros a ser llenos del
bautismo en el Espíritu Santo como se enseña en Hechos
2:4, si usted nunca ha tenido esta poderosa experiencia?
¿Qué acerca de los milagros o la liberación? ¿Ha usted
orado una oración de fe y puede atestiguar la intervención
divina en alguna circunstancia que estaba más allá de los
recursos humanos? ¡Predicador, manténgase cerca de
Cristo! ¡Permanezca lleno del Espíritu Santo! Dios quiere
usarle como SU vaso elegido para el avance del plan eterno
de redención.

PREDIQUE CON PASIÓN Y COMPASIÓN


PASIÓN.
Emoción intensa que poderosamente afecta a otro;
creencia constante en una proposición.
Esta podría ser definida como la convicción que controla
la vida de alguien, de la cual no puede transar. Es una
creencia sostenida tan fuertemente que hasta la amenaza
de muerte no logrará una retractación. Una opinión (lo que
pienso) acerca de un tema dado puede ser cambiada. Una
convicción (que reemplaza el argumento o la lógica) está
integrada en la fibra misma del carácter, y rechaza ser
influida por la opinión cultural.
Pablo estuvo “dispuesto no sólo a ser atado, mas aun a
morir en Jerusalén por el nombre del Señor Jesús”
(Hechos 21:13).
La predicación debe ser persuasiva. El predicador debe
creer, sin ninguna reserva, cada palabra que él predica. Él
debe predicar de una manera tal que no puede haber ningún
cuestionamiento sobre su compromiso con la autoridad de la
Palabra de Dios.
COMPASIÓN.
Emoción intensa por el que sufre, dolor por los
demás; empatía profunda
Los Evangelios representan a Cristo como un hombre de
gran compasión. Una observación frecuente de los
escritores es que Jesús fue “movido a compasión”, en
cuanto a las multitudes, la gente confusa de Israel, los
enfermos y aquejados, los pobres, aquellos luchando con
situaciones de crisis, y aquellos marginados por la sociedad
(véase varios pasajes en Mateo, Marcos y Lucas).
Es fácil volverse insensible al dolor y sufrimiento que
comúnmente se ve en derredor nuestro. Peor aún, es
volverse crítico y cínico. Un hombre dijo: “Si usted está
enojado y complaciente de que la gente debería ir al infierno,
usted no debería predicar sobre ello.”
La gente no se interesa en cuánto usted sabe, ¡hasta que
ellos saben cuánto usted se interesa!

¿De vez en cuando me han preguntado: “Cuál es el


consejo más importante que usted daría a un ministro
joven?” Para mí, la respuesta es simple. Ame a las
personas. Si usted tiene un corazón lleno de compasión, las
personas desearán que usted las ministre. A propósito, el
ministro (siervo) se gana el respeto de las personas por la
manera en que las trata cuando él no está en el púlpito.
¡Ellos escucharán a sus sermones porque ellos han visto su
corazón!

LA PREPARACIÓN ANTICIPADA ES IMPORTANTE


Hay ocasiones cuando pueden pedirle a usted predicar con
aviso previo de sólo unos minutos. Y, por supuesto, el
Espíritu Santo le dirigirá a la parte de la Palabra de Dios que
es necesaria por aquella audiencia en particular. Por lo
tanto, en nuestros corazones debemos estar listos siempre
para compartir la verdad. Sin embargo, sobre todo para el
pastor que está tras el mismo púlpito semana tras semana,
predicando o enseñando a la misma congregación, él debe
invertir tiempo considerable en la preparación del mensaje.
Esta práctica es muy valiosa, tanto para el pastor como para
los miembros de la iglesia.

El Espíritu Santo conoce “de antemano” quiénes


estarán en la congregación el día que usted predicará.
¡¡Él no se sorprende por aquellos que están presentes
el domingo por la mañana!!
La preparación “de antemano” previene la repetición
de ciertas verdades bíblicas (tan importante como
ellas puedan ser) y excluir otras verdades doctrinales
igualmente importantes. ¡Saber lo que usted predicó el
domingo pasado o el mes pasado es muy importante
para el predicador pentecostal (evangelio pleno)!
La preparación “de antemano” provee tiempo para que
el predicador (1) entienda el contexto del pasaje, (2)
investigue para clarificar del sentido del texto, (3)
coordine otras Escrituras para confirmar, explicar, y
ampliar la verdad que debe ser presentada, y (4)
absorba la verdad de este mensaje en su propio
espíritu.
La preparación “de antemano” se presta a la
predicación de una “serie” (varios mensajes
consecutivos) sobre un asunto dado. Por ejemplo:
Lecciones de la vida de rey David, o el libro de
Santiago (sobre la vida de cristiana práctica), o los
acontecimientos de la Pasión de Cristo, o el Sermón
del monte. La lista para tal serie de predicaciones es
interminable; sin embargo, para que sea eficaz y
significativa, debe haber una cuidadosa preparación,
acompañada de oración.
Los adoradores vendrán a la casa de Dios esperando
recibir compenetración de la Palabra de Dios, cuando
saben que usted se ha preparado “de antemano” para
estar de pie tras el púlpito, y con valor santo declara:
“Así dice el Señor.”

ENTIENDA LA MADUREZ ESPIRITUAL DE LA AUDIENC


IA
Jesús habló a las multitudes (inexpertas en la Ley Rabínica)
en términos muy sencillos. Él a menudo usó parábolas para
ilustrar una verdad espiritual. Aún así, por otra parte, Él
reveló otro nivel de entendimiento con sus discípulos. Para
los líderes religiosos judíos, Jesús fue a menudo muy directo
en censurarlos por su comportamiento, como la búsqueda
de reconocimiento e influencia personal, antes que desear
mostrar el amor de Dios al pueblo.
El apóstol Pedro instruye a los líderes espirituales a que
sean amables y compasivos “al apacentar la grey” de la
siguiente manera: “cuidar”, “nutrir”, “proteger”, y “dirigir” (1
Pedro 5:1-4).Quizás Pedro recordó la analogía que Jesús
hizo acerca de Él como “el Buen Pastor” y “sus ovejas”
(Juan 10:1-18).
El Espíritu Santo es muy fiel en revelar las necesidades
espirituales de su congregación al pastor dedicado. El
crecimiento es vital en la vida de cada creyente. Recién
nacidos, se vuelven bebés; quiénes, por su parte, se vuelven
niños, y luego adolescentes. El proceso sigue hasta que
estos bebés se vuelvan adultos maduros y responsables. Si
la Palabra de Dios es predicada con claridad, de una
manera espiritual similar, habrá desarrollo espiritual continuo
en la comunidad de fe.
Hay sólo dos opciones en la experiencia cristiana:
Usted crece o usted muere…
¡Usted no puede permanecer igual!
CAPITULO 7

LA ELECCIÓN DEL MÉTODO CORRECTO


PARA CADA MENSAJE

MUCHOS ESTILOS EN LA PRESENTACIÓN DEL SERM


ÓN
Dios usa personalidades individuales para llevar a cabo su
obra. Considere la particular personalidad de los profetas
Elías y Eliseo. Uno de ellos era varón curtido al aire libre, el
otro un agricultor manso. Ciertamente la diferencia en las
personalidades de Pedro y Pablo es obvia. Uno de ellos era
un pescador convertido, el otro un erudito de la ley rabínica
convertido. También, uno puede ver cómo Bernabé (“hijo de
consolación”) fue usado para ayudar en el desarrollo de
creyentes más jóvenes (incluyendo Pablo y Juan Marcos).
Especialmente en el Nuevo Testamento, una descripción
rápida de los escritores (un total de 8) revelará claramente
que cada uno tenía un “estilo” único al escribir. Todos ellos
fueron inspirados por el Espíritu Santo. El Espíritu no anuló
su personalidad; antes bien, Él lo ungió y usó para la gloria
de Dios.
Dios no le llamó a usted para imitar el estilo de otro
predicador. Durante años he observado a algunos
predicadores jóvenes que quisieron predicar como un
predicador famoso. Ellos modificarían su propia voz para
que sonara como la de otra persona, trataban de usar
gestos similares, y hasta repetir frases que eran con
frecuencia usadas por el ministro conocido. No resulta bien.
Dios le eligió a usted y Él le equipará y ungirá su
personalidad. Dios le envía a usted con un mensaje de la
eternidad. Permita que Él use su particular personalidad en
la entrega de la Palabra.

USE VARIEDAD PARA COMUNICAR MÁS CON EFICAC


IA
En las siguientes páginas, he descrito cuatro formas
conocidas de presentar el sermón. Ellas serán definidas con
ejemplos de aquel estilo particular de enfocar la predicación.
Cualquier “estilo” o “bosquejo” de sermón es sólo un
instrumento para ayudar en la entrega del mensaje, de una
manera que pueda ser recordada por los oyentes. No hay
nada sagrado en cuanto a si el mensaje es breve o extenso,
o si usted ha escrito “notas” cuando se ubica tras el púlpito.
Es valioso usar una variedad de estilos y enfoques a la
presentación del sermón. Esto mantendrá interesada a la
congregación y permitirá que usted evite la repetición. Aquí
hay una lista con sugerencias que podrían ser quizás
incluidas de vez en cuando.
USE UN SERMÓN ILUSTRADO. Use personas para “actuar” el
sermón (p.ej., Jesús que lava los pies de los discípulos o la
Cena del Señor). Use algunos objetos como trasfondo para
realzar el contexto del sermón (es decir un bote con redes
de pesca para enfatizar el llamado a los discípulos a seguir
a Cristo). Vístase como el personaje de la Biblia que usted
presenta (p.ej., Pablo en cadenas o en prisión). La lista es
ilimitada. Permita que el Espíritu Santo use su creatividad.
USE ILUSTRACIONES APROPIADAS.
Un acontecimiento de la vida
real que puede ser aplicado a las vidas de los fieles. Si usted
usa la historia de algún miembro de la congregación,
asegúrese de obtener permiso de contar la historia en
público. Una ilustración de la vida personal del predicador
puede ser muy eficaz; sin embargo, debe ser presentada de
tal manera que no suene pedante (p.ej., jactarse de logros,
etc.).
USE HUMOR DE VEZ EN CUANDO. Esto ayudará a mantener el
interés o atención de los oyentes. El mejor humor es sobre
usted mismo, algo extraño o ridículo que le sucedió o que
usted hizo. Nunca haga de otra persona (que está presente
o es conocida por los oyentes) el objeto irónico de su humor.
USE GRÁFICOS Y TECNOLOGÍA.
(si dispone de ellas) Es
provechoso el uso de presentaciones gráficas por
computación o un vídeo corto para dar una exposición visual
del tema. El programa Power Point es muy útil en la
proyección de Escrituras y los puntos de énfasis del sermón.
Muchos recursos provechosos están disponibles
gratuitamente a aquellos que tienen acceso a la Internet y
otras formas de medios sociales.
PROVEA A LOS FIELES DE UN BOSQUEJO IMPRESO.(si es posible)
Esto permitirá que los oyentes sigan juntos la progresión de
sermón, al mismo tiempo les da un instrumento de estudio
para futura referencia. Algunos fieles usan las notas del
sermón de la mañana del domingo como una guía para
grupos en casas durante la semana. El grado de detalles
contenidos en las notas es determinado por el ministro.
Algunos prefieren un bosquejo muy detallado (como los que
aparecen en este libro); mientras que otros usan una hoja
con espacios en blanco, de modo que los puntos claves
sean anotados por los fieles cuando el sermón está siendo
predicado. Aun otros proporcionan sólo el tema principal y
los subtemas del mensaje.
HAGA QUE LOS OYENTES FORMULEN PREGUNTAS. Esto se puede
hacer al final del sermón, verbalmente o por escrito. Esto no
sólo clarificará ciertas áreas de la verdad para el que hace
la pregunta y la congregación, sino también le ayudará a (1)
entender las preocupaciones o intereses de las personas, y
(2) a desarrollar un modelo de predicación que sea más
entendible.
¡SEA USTED MISMO! ¡Recuerde, Dios le ha llamado! Usted es
único y no debería avergonzarse de que usted no se
parezca a otra persona. Dios le ha puesto dónde usted está
para el cumplimiento de su propósito, ¡tanto en usted como a
través suyo!

1SERMÓN BASADO EN UNA NARRACIÓN BÍBLICA


A las personas les gusta oír historias, sobre todo cuando
ellas pueden “identificarse” personalmente con los detalles.
Por supuesto,nuestro Señor era un comunicador maestro. Él
relataba historias muy a menudo. Hablando en general, nos
referimos a las historias en su enseñanza como parábolas.
Muchos eruditos sugieren que hay treinta y seis diferentes
parábolas en los Evangelios.
Una parábola es una historia que se refiere a algo
comúnmente entendido por la audiencia, al cual el orador
aplicará una verdad que no es fácilmente entendida. Por
ejemplo, durante el tiempo de Cristo, la gran mayoría de
aquella cultura se apoyaba en un estilo de vida agrícola. Por
consiguiente, Jesús habló de semillas, tipos de suelo y
cosechas. Él habló de ovejas y pastores, de aves y flores,
cosas comunes que estas personas reconocerían muy bien.

Por lo general, la intención de una parábola es enfatizar una


verdad principal. Aunque se puede extraer más de una lección
de una parábola, el predicador debería ser cuidadoso de no
intentar desarrollar una “doctrina” de una parte de una
parábola. La verdad doctrinal debe ser apoyada por la
enseñanza total de las Escrituras.

El aspecto más importante de este estilo de predicación


es asegurarse de que la “historia” (o parábola) tiene una
aplicación espiritual que es confirmada por las Escrituras.
No debería suponerse que “contar a una historia” requiere
menos preparación espiritual y práctica que cualquier otro
estilo de presentación del sermón. El resultado final deseado
debe siempre exaltar a Cristo Jesús.
El Antiguo Testamento está lleno de narrativas, así como
los Evangelios y el libro de Hechos en el Nuevo Testamento.
Sin embargo, desde el libro de Romanos hasta Apocalipsis
no hay ninguna “historia”. Por consiguiente, el predicador
que usa este método de predicación a menudo considerará
el Antiguo Testamento como el punto de referencia inicial.
Como un ejemplo, considere la historia del fracaso de
Israel en Jericó, su primera batalla al entrar en la Tierra
Prometida (Josué 5:13-6:27). ¿Qué lecciones se pueden
aprender de esta narrativa bíblica, y en forma legítima
aplicarlas a nuestra vida hoy?
¡DE UNA CIUDAD FORTIFICADA A UN MONTÓN DE ROCAS! (JOSUÉ 5-6)
1. La obediencia es requerida para la victoria
2. La confirmación del plan de Dios para su pueblo Israel
3. El aseguramiento para Josué de que Dios lo había
elegido para conducir a Israel
4. El pecado o mal debe ser completamente destruido

Cualquiera de estas verdades (y quizás otras) podría ser


seleccionada usando esta historia como la “historia” bíblica
en un sermón. Una vez más, la aplicación debe conducir a
los oyentes a un mejor entendimiento del plan eterno de
Dios, revelado plenamente en Cristo Jesús.
Otra historia bíblica es la derrota de los madianitas por
parte de Gedeón y trescientos hombres (Jueces 6-7). ¿Qué
verdades se revelan en el registro del Antiguo Testamento?
TRESCIENTOS HOMBRES EN BATALLA SIN ARMAS ( JUECES 6-7)
1. La desobediencia siempre acarrea el juicio de Dios
2. La confianza en sí mismo (orgullo) nunca puede
derrotar al enemigo
3. Las preguntas sinceras no enfadan a Dios
4. Se requiere fe en cada situación de la vida
5. La preparación para la batalla espiritual requiere
diligencia constante
6. La intervención divina no se apoya en métodos
humanos

¡La gente debería recordar la verdad (aplicación), no


sólo la historia!
La Palabra de Dios contiene material de predicación
para toda una vida. El hombre de Dios no debe esperar
hasta el último minuto para preparar el mensaje. El
cumplimiento del llamado sagrado debe ser su prioridad.
Temprano en la historia de la iglesia del Nuevo Testamento
los apóstoles tuvieron que tomar una decisión sobre su
tarea principal: “Nosotros persistiremos en la oración y en el
ministerio de la palabra” (Hechos 6:4).

EL SIGUIENTE ES UN EJEMPLO DE BOSQUEJO DE U


N SERMÓN BASADO EN UNA NARRACIÓN BÍBLICA
TÍTULO: EL TESTIMONIO SENCILLO DE UNA
PEQUEÑA CRIADA
TEXTO: 2 Reyes 5:2-3
TEMA: Vivir nuestra fe bajo circunstancias difíciles
siempre proporcionará oportunidades para
testificar de Cristo
INTRODUCCIÓN:
Estos versículos contienen todo lo que sabemos acerca de
esta “joven”. Ella era “una cautiva de la tierra de Israel” y
servía como una criada “a la mujer de Naamán”. El relato en
el Antiguo Testamento de la sanidad de Naamán es bien
conocido. (Jesús se refirió a la sanidad de Naamán en
Lucas 4:27.) Él es descrito en la Escritura como “general”
del ejército sirio, un “hombre valeroso” a quien el rey de Siria
tenía “en alta estima”. Sin embargo, sufría de lepra (una
contagiosa enfermedad a la piel, a menudo usada en la
Biblia como un “tipo” para indicar el daño o contaminación
del pecado).
Lo que normalmente se recuerda sobre esta historia es que
Eliseo el profeta le dijo: “Vé y lávate siete veces en el
Jordán, y tu carne se te restaurará, y serás limpio”, y cómo
Naamán reaccionó furiosamente a la instrucción del profeta.
Sin embargo, después estuvo dispuesto a hacer lo que
Eliseo le había instruido, y fue totalmente limpio de la lepra.
Sin embargo, a menudo pasamos por alto a la persona que
Dios usó para causar este milagro, una pequeña criada
extranjera que compartió su fe y confianza en el poder de
Dios para sanar. Ella no tenía una posición prominente;
como una cautiva, y ciertamente ninguna influencia política.
Uno podría fácilmente suponer que su vida tenía poco valor
o sentido, pero hoy, casi 3000 años más tarde, todavía
hablamos de su influencia.
Quizás algunos aquí se identifican con su situación,
“atrapados” en sus circunstancias, sin esperanza alguna de
alivio. Pero no se desespere, ¡ya que Dios puede usar su
vida dónde usted se encuentra!
I. La posición en la vida no es impedimento para la
expresión de fe
A. Dios ha elegido tanto a gobernantes así como a
criados; tanto a ricos como a pobres; tanto a
educados como a poco educados; tanto a varones
como a mujeres; tanto a jóvenes como a ancianos,
para compartir el mensaje de redención en Cristo.
B. Cada uno de nosotros tiene la oportunidad de influir
sobre otros de forma única en nuestra esfera de
relaciones.
1. El mensaje no es cultural, pero debe ser
contextualizado, no transado ante la influencia de
cultura (Jesús usó ejemplos de la agricultura, p.ej.,
“semilla-sembrador”)
2. La experiencia personal es un testimonio
irrefutable. Referencia: El hombre nacido ciego
(Lea: Juan 9:24-25, 28-34).
3. Familia siempre primera prioridad
C. La vida que ha sido transformada (conocida por ser
diferente del estilo de vida anterior) habla
dramáticamente a cada segmento de la sociedad.
Referencia: La mujer junto al pozo en Samaria, Juan
4:39
D. Considere su posición como una oportunidad divina
1. Para representarle a Él (2 Corintios 5:20)
2. Para invertir en algo más grande que sus “propios”
deseos
II. La integridad de carácter proporciona una oportunidad
para testificar
A. La influencia no está determinada por la posición
1. La influencia está basada en “el respeto ganado”
(Consecuencia más Tiempo = Respeto)
2. La persona cuya palabra puede ser confiable,
honesta. Jesús: “Pero sea vuestro hablar: Sí, sí;
no, no; porque lo que es más de esto, de mal
procede” (Mateo 5:37) (Véase; Santiago 5:12)
B. Pautas bíblicas para “empleados” “Y todo lo que
hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y
no para los hombres” (Colosenses 3:23)
1. No sea perezoso, trabaje consecuente y
diligentemente. “El alma del perezoso desea, y
nada alcanza; mas el alma de los diligentes será
prosperada” (Proverbios 13:4)
2. No sea obstinado, lo hace difícil para el empleador.
“Siervos, obedeced en todo a vuestros amos
terrenales, no sirviendo al ojo” (Colosenses 3:22)
3. No sea deshonesto, con el tiempo u otras cosas.
“sino con corazón sincero, temiendo a Dios”
(Colosenses 3:22)
C. Desarrolle buenas relaciones, sepa cómo “llevarse
bien” con los demás
1. Sabiduría de palabras “Manzana de oro con
figuras de plata es la palabra dicha como
conviene” (Proverbios 25:11)
a. Cuándo hablar (el momento y lugar apropiado)
b. Qué hablar (alentador, constructivo)
c. Cómo hablar (discretamente, amablemente,
etc.)
2. No sea un “sabihondo” “Y si alguno se imagina
que sabe algo, aún no sabe nada como debe
saberlo” (1 Corintios 8:2)
3. No sea “el campeón de cada causa” “El que
pasando se deja llevar de la ira en pleito ajeno,
es como el que toma al perro por las orejas”
(Proverbios 26:17)
D. No condene a otros “alardeando” su “experiencia”
“Estad siempre preparados para presentar defensa
con mansedumbre y reverencia ante todo el que os
demande razón de la esperanza que hay en
vosotros” (1 Pedro 3:15-16)
1. Lo que somos es sólo por la gracia de Dios
2. Revele el gozo del perdón, antes que la
condenación del juicio
III. Maneras de expresar su testimonio
A. A través de un ejemplo diario de una vida que refleja a
Cristo. “Manteniendo buena vuestra manera de vivir
entre los gentiles; para que en lo que murmuran de
vosotros como de malhechores, glorifiquen a Dios en
el día de la visitación, al considerar vuestras buenas
obra” (1 Pedro 2:12)
1. “Predicar” sin “practicar” es la peor forma “de
hipocresía”
2. No todos mostrarán respeto por usted, ya que
ellos son condenado por el testimonio de una vida
piadosa (Juan 3:18-20)
B. “Ofreciendo amistad” a personas marginadas por la
sociedad. Jesús fue cr iticado como “amigo de
publicanos y de pecadores” (Mateo 11:19)
1. No las evite
2. No le hable “despreciativamente” (severamente) a
ellas
3. No las “repruebe” ante otras personas
C. Ayudando a otros en tiempos de crisis
1. Ayudar de modos significativos (Referencia: El
Buen Samaritano, Lucas 10:30-37)
2. Ofrecer palabras de consuelo y seguridad (sobre
todo, si usted ha tenido una experiencia similar)
D. Sirviendo sin esperar reconocimiento
1. Iniciativa personal, no esperado o requerido
2. “Alábete el extraño, y no tu propia boca”
(Proverbios 27:2)
E. Manteniendo una actitud correcta en medio de la
adversidad
1. Ante la crítica o abuso por su fe (Juan 15:18-19)
2. Al expresar confianza en la sabiduría soberana de
Dios
CONCLUSIÓN:
Dios nos ha “puesto” donde estamos para cumplir un
propósito divino.
Cada día debemos ser sensibles a las oportunidades que él
produzca para nosotros.
Esto puede ser sólo unas pocas palabras, un acto
espontáneo de bondad, compartir una experiencia personal

¡¡Para alguien su vida marcará una diferencia!!

2 SERMÓN TEMÁTICO: TEMA RELEVANTE CON


REFERENCIAS BÍBLICAS
El sermón “temático” es quizás el más popular y se usa con
más frecuencia. Simplemente, se presenta un tema principal
en el mensaje, apoyado con varios pasajes de las
Escrituras, tomados de variadas partes de la Palabra de
Dios, que amplifican y clarifican este tema particular. Este
enfoque es particularmente valioso en la presentación de
una serie de mensajes (varios mensajes consecutivos)
acerca de un tema relacionado. Como un ejemplo:

Preparación para el milagro


Orando por el milagro (Hechos 12:5, 12-17; Santiago
5:17-18)
Preparándose para el milagro (Éxodo 12:3-11; 40-42)
Participando en el milagro (1 Corintios 12:12-27;
Colosenses 3)
Proclamando el milagro (Marcos 15:18-20)
Perpetuando el milagro (Salmo 78:5-7; Mateo 28:18-20)

La Biblia es un libro muy práctico, que da instrucción


acerca de muchos aspectos de la vida diaria de un creyente
(p.ej., relaciones con la familia, con amigos, con empleados,
hasta con enemigos; como ser un buen administrador de
sus finanzas; fe durante circunstancias difíciles, etc.).

EL SIGUIENTE ES UN EJEMPLO DE UN SERMÓN TEM


ÁTICO
(Note los componentes del bosquejo)
TÍTULO: ¿UN TRONO O UNA TOALLA?
TEXTO: JUAN 13:3-17
TEMA: Ser un siervo de los demás es un principio
bíblico que cada creyente debería desear y
alcanzar
INTRODUCCIÓN:
El relato acerca del lavamiento de pies, por parte de Jesús a
sus discípulos, está registrado sólo en el Evangelio de Juan.
El acontecimiento ocurre sólo unas horas antes de que
Cristo fuera traicionado por Judas, cuando los discípulos
estaban reunidos para la cena de la Pascua de los judíos.
Sin darse cuenta todavía del significado de este momento,
los Doce todavía discutían sobre quién sería el “mayor” en
el Reino (Compárese el tiempo de Lucas 22:24-30 con el
texto del pasaje). A fin de ilustrar gráficamente el mensaje
que Él deseaba que ellos aprendieran, Jesús adoptó la
posición de un criado de casa de bajo rango y lavó sus pies.
Esta era una cortesía común ofrecida a los invitados al
llegar a la casa de una persona con criados, ya que los
caminos eran polvorientos y los zapatos que ellos usaban
eran sandalias. Esto fue más que un acto simbólico. ¡Sus
pies estaban realmente sucios!
Hay varias lecciones que tienen gran significado en este
acontecimiento:
1. Esto fue privado no público. Es decir, esto no fue
hecho a la vista de todos. No había ninguna
“influencia” o elogio que ganar al lavar los pies de una
persona.
2. Esto fue personal. Sólo podría ser hecho una persona
a la vez; esta no fue una actividad de “grupo”. En
otras palabras, este fue un acto intencional de
servicio hacia personas individuales.
3. La diferencia que Jesús hizo fue que esta era una
acción “desde un superior a un inferior”, antes que el
modelo normal en que el menor sirve al mayor. Esta
fue una dramática excepción a la norma practicada
por los líderes en la mayor parte de las culturas del
mundo. Tal comportamiento habría sido considerado
degradante, vergonzoso o totalmente inaceptable.
4. La lección que Jesús enseñó a sus seguidores fue
que tal disposición de servir a otros, incluía a sus
pares; es decir a su “iguales”. Este también era un
concepto nuevo para aquellos que deseaban tener
posiciones de prominencia. Si se considera el
registro bíblico, no hay ningunas referencias
posteriores a disputas entre los discípulos acerca de
sus posiciones.
I. Todos son iguales en la cruz
A. El cristianismo no cambia automáticamente el papel
en la vida; lo que cambia es la relación
1. Pablo escribe a Filemón acerca de Onésimo (“útil”)
a. Un esclavo fugitivo, que había robado a su
maestro (Filemón 18)
b. Convertido bajo el ministerio de Pablo en Roma
(Filemón 10)
c. Pablo apela a Filemón para que lo reciba de
vuelta y lo perdone (Filemón 17)
d. Aceptarlo como un “hermano”. “No ya como
esclavo, sino como más que esclavo, como
hermano amado, mayormente para mí, pero
cuánto más para ti, tanto en la carne como en
el Señor” (Filemón 1:16)
2. “Siervos, obedeced a vuestros amos terrenales
con temor y temblor, con sencillez de vuestro
corazón, como a Cristo” (Efesios 6:5) “Y
vosotros, amos, haced con ellos lo mismo,
dejando las amenazas, sabiendo que el Señor de
ellos y vuestro está en los cielos, y que para él no
hay acepción de personas” (Efesios 6:9)
B. No hay acepción de personas en el amor de Dios
“Porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús”
(Gálatas 3:28) (Note la diferencia de Gálatas 3:26-
29)
Judío o gentil (religioso o pagano)
Esclavo o libre (sin o con derechos personales)
Varón o mujer (más o menos “estatus”)
C. Ninguno es “bastante bueno” para merecer la gracia
de Dios. Ninguno “demasiado malo” para recibir la
gracia de Dios
II. Ser un siervo es un asalto directo al orgullo
A. Según la norma del “mundo”, el “líder” es servido por
aquellos de menor importancia o posición
1. Pedro al principio rechazó que Cristo lavara sus
pies (Juan 13:8)
2. Jesús enseñó: “Porque el Hijo del Hombre no
vino para ser servido, sino para servir, y para dar
su vida en rescate por muchos” (Marcos 10:45)
3. Orgullo por ser disminuido en la opinión de otros
4. Orgullo por motivación incomprendida
B. Según la norma del “mundo”, los “pares” deben
competir entre sí
1. Los discípulos erróneamente supusieron su valor
por sobre sus pares
2. Jesús enseñó: “Pues si yo, el Señor y el Maestro,
he lavado vuestros pies, vosotros también debéis
lavaros los pies los unos a los otros. Porque
ejemplo os he dado, para que como yo os he
hecho, vosotros también hagáis” (Juan 13:14-15)
3. Orgullo por posición igualitaria, no ser un siervo de
aquellos en la misma posición
4. Orgullo por motivación impropia de estar por sobre
los demás
C. El orgullo debe ser “clavado en la cruz” y la actitud
que imita a Cristo en su humildad nos conducirá a ser
siervos de los demás. “El Hijo del Hombre no vino
para ser servido, sino para servir” (Mateo 20:28)
III. Expresiones prácticas de servicio como seguidores de
Cristo
A. Servir sinceramente—(palabra latina, “sin cera”,
significa puro) “Y todo lo que hagáis, hacedlo de
corazón, como para el Señor y no para los hombres”
(Colosenses 3:23) No para buscar e reconocimiento
o aprobación del hombre, sino para la gloria de Dios
B. Servir espontáneamente—Parábola “del Buen
Samaritano” (Lucas 10:30-37) Él “vino cerca de él, y
viéndole, fue movido a misericordia y acercándose,
vendó sus heridas, echándoles aceite y vino; y
poniéndole en su cabalgadura, lo llevó al mesón, y
cuidó de él.” Al otro día dio dinero al posadero para
que cuidara del herido hasta su regreso.
C. Servir sensiblemente—“Así que, según tengamos
oportunidad, hagamos bien a todos, y mayormente
a los de la familia de la fe.” (Gálatas 6:10)
1. Ser guiado por el Espíritu para ser consciente de
las “necesidades” de otros
2. Incluso la más pequeña de las obras (“cualquiera
que dé a uno de estos pequeñitos un vaso de
agua fría solamente”) será recompensada.
(Mateo 10:42)
D. Servir compasivamente—“Sobrellevad los unos las
cargas de los otros, y cumplid así la ley de Cristo”
(Gálatas 6:2)
1. En tiempos de emergencia o crisis
2. Para aliviar temores y preocupaciones de los
menos maduros en Cristo
E. Servir secretamente —
1. La demostración pública del servicio niega la
recompensa eterna (Lea: Mateo 6:1-18)
2. Trate de servir sin que otros (incluyendo a la
persona que se sirve) sepan quién fue el “siervo”
F. Servir sacrificialmente —
1. Pablo cuenta de sus muchos “sacrificios” (Lea: 2
Corintios 6:3-13)
2. El servicio realizado por siervos piadosos no se
considera sacrificio (Lea: Mateo 25:31-40 “En
cuanto lo hicisteis a uno de estos…”)
G. Servir dedicadamente —
1. “Porque nosotros que vivimos, siempre estamos
entregados a muerte por causa de Jesús” (Lea: 2
Corintios 4:5-18)
2. “Nosotros somos insensatos por amor de Cristo”
(Lea: 1 Corintios 4:10-13)
CONCLUSIÓN:
¿Qué busca usted alcanzar? ¿Un trono o una toalla?

3 SERMÓN TEXTUAL: TEMA ESCOGIDO DE LAS


PALABRAS DEL TEXTO
Un sermón “textual” puede ser fácilmente identificado pues
toma el tema principal y los “subtemas” directamente de la
Escritura. Como un ejemplo, en la carta final de Pablo a
Timoteo el apóstol alienta al pastor joven a la resistencia en
su caminar de fe. Él usa tres ejemplos para enfatizar este
mensaje. Ellos lógicamente forman “los puntos principales”
“o subtemas” para un contorno textual.
Resistencia decidida (2 Timoteo 2:1-6)
I. Lealtad de un soldado (Versículos 3-4)
II. Disciplina de un atleta (Versículos 5)
III. Determinación de un agricultor (versículo 6)
Otro ejemplo podría ser tomado de las palabras de
nuestro Señor mientras Él enseñaba sobre nuestra actitud
hacia aquellos que son considerados nuestros “enemigos”.
Ame a sus enemigos (Lucas 6:27-28)
II. Haga bien a aquellos que le aborrecen (versículo 27)
III. Bendiga aquellos que le blasfeman (versículo 28)
IV. Ore por aquellos que le hacen daño (verso 28)
NOTA:Jesús inmediatamente hizo una aplicación de cómo
mostrar que usted ama a sus enemigos (Lea: Lucas 6:29-
30).

EL SIGUIENTE ES UN EJEMPLO DE UN SERMÓN TEX


TUAL:
Ya que éste es tomado de las Bienaventuranzas, uno
también podría escoger hacer de estas “una serie” de ocho
sermones, cada mensaje se concentraría en sólo una de
cada bienaventuranza.
Nota: Se usan otras Escrituras para enfatizar o confirmar la
verdad del texto del pasaje. Al citar varios pasajes, se logran
varias cosas positivas: (1) evidencia de que esta verdad es
enseñada a través de la Palabra; (2) provee referencias
para un estudio en profundidad por parte de los miembros de
la congregación; y (3) permite que el pastor tenga
ilustraciones bíblicas para explicar más claramente el
mensaje.
TÍTULO: OCHO MANERAS DE SER
BENAVENTURADOS
TEXTO: Mateo 5:1-12
TEMA: Las bendiciones de Dios comienzan
cuando el espíritu del hombre reconoce y se
rinde al plan redentor ofrecido por Dios,
para la realización del hombre en esta vida.
INTRODUCCIÓN:
El contenido del Evangelio de Mateo fue escrito
principalmente a receptores judíos. Considerado como un
“puente” natural entre el Antiguo y el Nuevo Testamento,
este primer Evangelio enfatiza el ministerio de enseñanza de
Cristo. Mateo no intentó arreglar el material en un orden
cronológico, antes bien escribió en forma temática.
(Referencia: Las parábolas del reino, Capítulo 13; o el
discurso profético capítulos 24, 25) los eruditos localizan
esta enseñanza, el Sermón del Monte, después de que
Cristo había escogido a los 12 discípulos, y durante su
ministerio en Galilea, el período relativamente breve de su
popularidad.
Las Bienaventuranzas, como a menudo se denomina a este
pasaje, tratan de los principios fundamentales para la
recepción y disfrute de las bendiciones de Dios. La palabra
“bienaventurado” —feliz, digno de ser envidiado y
espiritualmente próspero, con alegría de la vida y
satisfacción del favor de Dios, sin tener en cuenta sus
condiciones externas— habla de una calidad de vida que es
tanto poco común de conseguir como imposible fuera del
ámbito del espíritu. Todas estas promesas de Cristo
parecen contradicciones, ya que ellas son tan opuestas a
cómo la mente natural piensa.
I. ¿Quién piensa usted que es?
“Pobre en Espíritu y rico en eternidad”
A. La palabra raíz es “mendigo”, implica vivir de la
misericordia de otros, sin recursos personales
B. La desesperación del desaliento, “sin Cristo… sin
esperanza” (Efesios 2:12)
C. La verdad acerca de todos nosotros “Y él os dio vida
a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros
delitos y pecados éramos por naturaleza hijos de
ira” (Efesios 2:1-3)
D. Reconocimiento de la dignidad de Cristo “Y sabéis
que él [Jesús] apareció para quitar nuestros
pecados, y no hay pecado en él” (1 Juan 3:5)
(Véase también: 2 Corintios 5:21; 1 Pedro 3:18) “Y
cantaban un nuevo cántico, diciendo: Digno eres de
tomar el libro y de abrir sus sellos; porque tú fuiste
inmolado, y con tu sangre nos has redimido para
Dios, de todo linaje y lengua y pueblo y nación”
(Apocalipsis 5:1-14, en el cielo)
E. El absurdo de arrogarse autodeterminación
1. No “necesito” a Dios, autosuficiencia (Lucas
12:16-21)
2. No “quiero” a Dios, autosatisfacción (Romanos
1:21-22)
3. Rendimiento de cuentas final ante Dios (Romanos
14:12; 1 Pedro 4:4-5)
II. ¡Usted tiene que entristecerse! “Aflíjase para ser
consolado”
A. Posea debilidad personal
1. David suplica a Dios por su pecado (Salmo 51)
2. Pedro “lloró” después de negar a Cristo 3 veces
(Marcos 14:66-72)
3. El pecado no debe ser tomado a la ligera
B. Llore por lo que aflige a Dios
1. Rechazo de su amor por parte de su creación
(Jeremías 2:13, 31-32)
2. Desobediencia de sus mandamientos (Mateo
23:37)
3. Injusticia, sufrimiento (Mateo 9:36)
III. La mansedumbre no es debilidad “los mansos heredan la
tierra”
A. Implica “templanza disciplinada”, lo opuesto de
obstinación hacia Dios y rencor hacia los hombres
B. Humildad delante de Dios, aceptar sin resistencia
1. Habacuc no entendió los métodos de Dios, pero
esperó por su respuesta (Habacuc 1-3)
2. “El aguijón de Pablo en la carne” trajo alegría
porque el poder de Cristo reposaba sobre él (2
Corintios 12:6-10)
3. Moisés era un hombre “manso” (Números 12:3)
No se defendió contra Aarón y María
C. Es lo opuesto de seguridad en sí mismo
1. Cristo era “manso y humilde del corazón” (Mateo
11:29; 1 Pedro 2:23)
2. El rey David rechazó matar al rey Saúl (1 Samuel
24 y 26) o defenderse contra Absalom (2 Samuel
15-19)
3. Pablo dijo: “Alejandro el calderero me ha causado
muchos males; el Señor le pague conforme a sus
hechos” (2 Timoteo 4:14)
IV. ¿Cómo está su apetito? “Hambre y sed de justicia serán
saciadas”
A. Base para la vida espiritual
1. Su presencia (Éxodo 33:14; Salmo 34:18; 145:18)
2. La Palabra (Salmo 119:130)
3. Comunión con Cristo (1 Juan 1:3; 2:28)
4. Compañerismo del Espíritu (Juan 14:17, 26)
B. El deseo de “justicia” es tanto inicial como continuo; la
progresión desde el deseo de ser perdonado Cristo
hasta el deseo de ser conformado a la imagen de Él.
(2 Corintios 3:18; 2 Pedro 1:4)
Las cuatro primeras Bienaventuranzas hablan de la obra
interna del Espíritu, mientras que las cuatro segundas
identifican evidencias externas de la obra del Espíritu.
V. ¡Vaya con calma, podría ser usted! “A los misericordioso
se les mostrará misericordia”
A. La piedad es una característica de dios Él mismo
(Salmo 103:17; Lamentaciones 3:22-23; Efesios 2:4;
Tito 3:5) Misericordia, dios no nos da lo que
merecemos
B. La piedad es un principio de vida para los creyentes
1. Abraham mostró misericordia a sobrino (Génesis
13)
2. José mostró misericordia a sus hermanos
(Génesis 45 y 50)
3. Moisés mostró misericordia a Aarón y María
(Números 12)
4. El rey David mostró misericordia al rey Saúl (1
Samuel 24)
5. Jesús mostró misericordia a aquellos que lo
crucificaron (Lucas 23:34)
C. La misericordia rechaza el “juicio” personal hacia
otros (Mateo 7:1-5)
1. No significa pasar por alto el pecado
2. El juzgar habla de determinar la pena por el mal
hecho (a menudo dura)
3. La piedad no define la motivación del otro (dé “el
beneficio de la duda”)
D. La misericordia es una actitud que se refleja en la
bondad hacia otros que son diferentes a nosotros o
que discrepan de nosotros
VI. Nada que esconder “Los puros de corazón ven a Dios”
A. Tres componentes para andar con Dios
1. Conocimiento en su cabeza, entendimiento de la
Palabra
2. Labor en sus manos, servicio al Señor y su iglesia
3. Relación en su corazón, pureza delante de Dios y
de los hombres
B. La ceremonia externa o las obras en si son
inadecuadas
1. Dios dijo a Samuel: “Porque Jehová no mira lo
que mira el hombre; pues el hombre mira lo que
está delante de sus ojos, pero Jehová mira el
corazón” (1 Samuel 16:7)
2. La oración de David: “He aquí, tú amas la verdad
en lo íntimo, y en lo secreto me has hecho
comprender sabiduría” (Salmo 51:6)
C. Un corazón puro está libre de la astucia (engaño,
duplicidad) e hipocresía
1. Jesús condenó a los líderes religiosos, no por sus
obras, sino por su hipocresía (Lea: Mateo 23)
2. Vergüenza y desgracia caen sobre la causa de
Cristo por la influencia negativa de “corazones
impuros”
D. ¡Un corazón puro no tiene nada que esconder!
1. ¡Lo que usted dice siempre será lo mismo! (No
tienen que recordar lo que usted dijo, si esto es
verdad)
2. ¡Lo que usted hace será sin temor!
VII. Acordar un cese al fuego no es paz. “Pacificadores,
hijos de Dios”
A. “Hacedores y mantenedores de paz” (Paráfrasis)
B. ¡Nadie está en paz con el mundo si no está en paz
consigo mismo!
C. La iniciativa debe estar con el Hijo de Dios. “Si es
posible, en cuanto dependa de vosotros, estad en
paz con todos los hombres” (Romanos 12:18)
D. La paz es más que ausencia de conflicto (hostilidad)
1. Hogar (1 Pedro 3:1-7; Efesios 5:21-6:4)
2. Casa de Dios (Efesios 4:1-4; 2 Corintios 13:11)
E. El mantenimiento de la paz requiere diligencia
constante y buena voluntad para hacer ajustes o
cambios “Ciertamente la soberbia concebirá
contienda” (Proverbios 13:10)
VIII. Usted sabe que está en el camino correcto.
“Perseguido por causa de la justicia, reino de los cielos”
A. Esta es persecución “inmerecida”
1. “Por causa de la justicia”
2. “Digan toda clase de mal contra vosotros,
mintiendo” (por seguir a Cristo)
B. La persecución es una “bendición disfrazada” para los
creyentes
1. Reconozca su dependencia de Cristo
2. Manténgase en humildad
3. Gane en fe y crecimiento en madurez espiritual
C. ¡Recompensa eterna reservada! “Herederos de Dios
y coherederos con Cristo, si es que padecemos
juntamente con él, para que juntamente con él
seamos glorificados. Pues tengo por cierto que las
aflicciones del tiempo presente no son comparables
con la gloria venidera que en nosotros ha de
manifestarse” (Romanos 8:17-18) “Amados, no os
sorprendáis del fuego de prueba que os ha
sobrevenido, como si alguna cosa extraña os
aconteciese, sino gozaos por cuanto sois
participantes de los padecimientos de Cristo, para
que también en la revelación de su gloria os gocéis
con gran alegría…” (1 Pedro 4:12-13)
LECCIONES PRÁCTICAS:

1. Omisión muy obvia: Jesús no mencionó “posesiones”


terrenales en esta lista de maneras de ser feliz y
realizado en esta vida.
2. La realización del hombre debe comenzar con la vida
espiritual, luego procederá a la mente y cuerpo físico.
3. Si su “actitud” hacia Dios es la correcta, de forma
natural se producirá la que es correcta para con los
demás.
4. El deseo del ser humano debe ser de tener una
correcta relación con Dios, entonces, y sólo
entonces, fluirá la plenitud de sus bendiciones.

4 SERMÓN EXPOSITIVO: TEMA ESCOGIDO A PARTIR


DE UN PASAJE DE CIERTA EXTENSIÓN
Para muchos eruditos y maestros de la Biblia, el sermón
“expositivo” es el estilo más eficaz de predicación, sobre
todo para el pastor. En efecto, éste asegurará que “todo el
consejo de Dios” sea presentado de una manera
sistemática. Por definición, el sermón expositivo tomará un
pasaje de cierta extensión, seleccionará el tema total de
aquellos versículos, y encontrará los “subtemas” dentro del
pasaje. A diferencia del sermón temático, que incluye
versículos de varias partes de las Escrituras además del
texto base, este sermón se concentra casi exclusivamente
en la exposición de un segmento de las Escrituras. La clave
de un sermón expositivo eficaz es que en primer lugar se
debe identificar un tema principal, y cuidadosamente
concentrarse en ese pensamiento. En la mayor parte de los
pasajes se puede identificar fácilmente más de un tema. ¡Es
una evidencia de disciplina para el predicador el abstenerse
de saltar de tema en tema en un solo sermón!
El presentar la Palabra “versículo por versículo” es un
buen método de enseñanza donde hay oportunidad de
interacción (p.ej., discusiones de grupo pequeño en casas,
clases de escuela dominical, etc.). Sin embargo, en un
servicio de iglesia regular, donde el tiempo es a menudo
limitado y el nivel del entendimiento espiritual y la madurez
del auditorio pueden variar considerablemente, demasiada
información sin concentrarse en un tema específico puede
ser aplastante o confusa para aquellos que son menos
entendidos en la Palabra.

EL SIGUIENTE ES UN EJEMPLO DE SERMÓN EXPOSI


TIVO
Mientras usted examina el bosquejo más abajo, note lo
siguiente:
1. Hay un tema principal: La liberación de Dios en medio
de circunstancias difíciles.
2. Los seis subtemas son tomados directamente del
pasaje escogido, y en forma progresiva nos
conducen a la conclusión de que Dios intervendrá en
nuestro favor.
3. La aplicación explica y aplica el pasaje bíblico a la
vida contemporánea. Dios será nuestro liberador
durante las luchas intensas que enfrentamos.
TÍTULO: EL VALLE DE LA BENDICIÓN
TEXTO: 2 Crónicas 20:1-30
TEMA: Incluso en los tiempos difíciles de la vida, Dios
se revelará y traerá liberación
INTRODUCCIÓN:
Josafat, el cuarto rey de Judá, se había hecho fuerte, y era
muy respetado por los reyes y naciones vecinas (2 Crónicas
18:1). Sin embargo, un grupo de tres naciones formó una
alianza contra él. Cuando Josafat oyó de este enorme
ejército que se aproximaba, él inmediatamente convocó a
toda la gente de Judá a un solemne ayuno. Al final, Dios les
dio una gran victoria, sin necesidad siquiera de salir a la
batalla. Este es un registro poderoso de la intervención de
Dios en las vidas de aquellos que son su pueblo, cuando
ellos enfrentan peligros (pruebas). Como un memorial
conmemorativo de esta gran y extraña victoria, ellos
llamaron al lugar el valle de la bendición (beraca).
I. Proclamación (versículos 5-9)
“Eres tú Dios en los cielos”
“Tienes dominio sobre todos los reinos de las
naciones”
“Está en tu mano tal fuerza y poder, que no hay quien
te resista”
II. Petición (versículos 10-12)
“En nosotros no hay fuerza contra tan grande
multitud”
“No sabemos que hacer”
“A ti volvemos nuestros ojos”
III. Promesa (versículos 13-17)
“No temáis ni os amedrentéis”
“No temáis ni desmayéis”
“Porque no es vuestra la guerra, sino de Dios”
“Estad quietos, y ved la salvación de Jehová con
vosotros”
“Jehová estará con vosotros”
IV. Alabanza (versículos 20-23)
“Puso a algunos que cantasen y alabasen a
Jehová… mientras salía la gente armada”
(Casi 20 kilómetros de Jerusalén, se requiere de fe)
“Comenzaron a entonar cantos de alabanza”
“Glorificad a Jehová, porque su misericordia es para
siempre”
V. Botín (versículos 24-26)
“Muchas riquezas, así vestidos como alhajas
preciosas, que tomaron para sí”
“Tres días estuvieron recogiendo el botín, porque era
mucho”
(Tales bendiciones materiales no eran la
preocupación principal, se añadió éstas debido a la fe
y obediencia del pueblo)
VI. Paz (versículos 27-31)
“Volvieron para regresar a Jerusalén gozosos”
“Vinieron a Jerusalén con salterios, arpas, y
trompetas”
“A la casa de Jehová”
“El pavor de Dios cayó sobre todos los reinos de
aquella tierra”
“El reino de Josafat tuvo paz; porque su Dios le dio
paz de todas partes”

EL VALLE DE BENDICIÓN
A. El valle a menudo simboliza “prueba” en las Escrituras
Salmo 23:4 “Valle de sombra de muerte”, “No temeré
mal alguno, porque tú estarás conmigo”
Salmo 84:6 “Valle de lágrimas” “Atravesando el valle
de lágrimas lo cambian en fuente, cuando la lluvia
llena los estanques”
Josué 7:24-26; Oseas 2:15 “Valle de Acor [problema]”
“Y le daré sus viñas desde allí, y el valle de Acor por
puerta de esperanza”
1. Si hay montañas… habrá también valles … Las
montañas son para bendición; los valles para
crecimiento
2. No hay milagro sin una crisis
3. Los valles aumentan la dependencia en el Señor
a. Para cambiar circunstancias imposibles
b. Para proporcionar gracia durante la circunstancia
4. Los valles muestran el asombroso poder de Dios para
hacer lo humanamente imposible (2 Crónicas 16:7;
Salmo 62:11; Salmo 89:10,13; Salmo 106:8)
B. La batalla viene a la hora de la renovación espiritual (2
Crónicas 19)
C. Ataque inmerecido del enemigo (verso 10)
1. Los ataques satánicos vienen sin provocación
a. Ejemplo de Job (Job 1 y 2)
b. Persecución de creyentes en la iglesia del NT El
tema en 1 Pedro es “Victoria en el sufrimiento”
(Pablo y Pedro advierten a los creyentes acerca
de la persecución)
c. Guerra espiritual con las fuerzas de las “tinieblas”
(2 Corintios 10:3-5; Efesios 6:10-18; 2 Corintios
12:7-10)
2. Satanás se deleita en “desafiar” la fe (Génesis 3:4, 5;
Job 1, 2; Cristo fue tentado, Mateo 4:1-11)
D. Modelo de fe —La fe se desarrolla en la adversidad
1. Convocar al pueblo a un ayuno
2. Esperar en el Señor
3. Oír la Palabra del Señor (profeta)
4. Postrarse y adorar a Dios
5. Levantarse y alabar al Señor
E. Suena como una paradoja: Bendición en un valle
1. “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las
cosas les ayudan a bien, esto es, a los que
conforme a su propósito son llamados” (Romanos
8:28)
2. Dios usa dificultades para reforzar nuestra fe
(Santiago 1:2-4)
3. En el valle, aprendemos nuestras debilidades
4. En el valle, descubrimos una nueva profundidad de
comunión con Dios (Salmos 42:5-11; 43:5; 2
Corintios 12:9)
5. Nos volvemos más conformados a SU imagen (2
Corintios 4:16-18)
6. Somos capaces de animar o ayudar a otros en
circunstancias similares (2 Corintios 1:3-6)
CONCLUSIÓN:
Cuando usted ha cruzado a salvo al otro lado del valle, usted
mirará hacia atrás y verá todo lo que Dios ha hecho. ¡Su
valle se ha convertido en una gran bendición!

El caminar por fe nunca se convertirá en el caminar por vista.


Sostenga firmemente la mano del Maestro. Él ha viajado ya
por este camino antes.
CAPITULO 8

PREPARACIÓN DEL SERMÓN

A hora, llega el momento de desarrollar el bosquejo del


sermón. ¡Recuerde, este es sólo un instrumento para
ayudarle! Puede ser posible cortar un árbol grande con un
cuchillo, pero un hacha aguda hará el trabajo mucho más
rápido.

Sus habilidades de predicación continuarán mejorando a


medida que usted permita que el Espíritu Santo unja su
mente. Ya que el Espíritu Santo es Dios, Él puede dirigir sus
pensamientos por medio de la oración, estudio y preparación
del sermón. Además, Él también conoce el futuro.
La preparación “anticipada” para el ministerio del púlpito no
niega la obra del Espíritu Santo en dirigir su pensamiento,
tampoco esto disminuirá la unción en la presentación.
¡Antes de que usted alguna vez comience a buscar al Señor
para un mensaje, Él es consciente ya de quiénes estarán
entre los fieles en aquella ocasión, y cuales las necesidades
espirituales de ellos!

El objetivo del bosquejo no es restringir o confinar; antes


bien, es simplemente una guía que le ayudará a mantener el
curso. Como una carretera éste le conducirá en la dirección
que usted quiere ir. Si usted abandona la carretera para
tomar un atajo, usted puede entrar en la dirección incorrecta
y por último encontrarse donde usted no planeaba estar.
Mientras más usted prepara bosquejos de sermón, más
cómodo usted comienza a sentirse en la utilización de ellos
para ayudarle en la comunicación de sus pensamientos.
Aunque no es obligación hacerlo, algunos predicadores
preparan un manuscrito completo (escribir el sermón palabra
por palabra), aprenda el contenido a medida que el Señor se
lo ha dado, y luego consulte a éste sólo en momentos
específicos al estar tras el púlpito. El caso es que cada
persona debe encontrar lo que es cómodo para ella. Pero,
como veremos, hay valor enorme en tener el material de
sermón organizado y en forma escrita.

La unción del Espíritu Santo no se mide por el volumen de la


voz del predicador, ni por la rapidez con la cual él habla;
antes bien por el contenido del mensaje que exalta a Cristo y
trae gloria a Dios.

ORGANICE SUS PENSAMIENTOS: TEMA,


SUBTEMAS, ETC.
Una vez que usted ha sido dirigido por el Espíritu Santo a un
pasaje específico del la Escritura, es importante comenzar a
organizar sus pensamientos. ¿Cuál es el tema del mensaje?
¿Cuál es el estilo de este sermón particular (es decir
temático, textual o expositivo)? ¿Qué subtemas deseo
presentar? ¿Están ellos en el pasaje escogido texto, o
busco otras Escrituras para iluminar estas verdades?
¿Progresa lógicamente el bosquejo de un punto al siguiente
en una manera tal que arribará a una conclusión?Éstos no
son preguntas difíciles, si usted se disciplina para establecer
claramente lo que usted quiere decir, su predicación será
poderosa y eficaz.

El eficaz ministerio del púlpito no vuelve confusa una verdad


sencilla
El ministerio eficaz del púlpito hará que la verdad difícil sea
fácil de entender
Los grandes predicadores iluminará de tal manera a los
oyentes que ellos se preguntarán ¡por qué no entendían esta
verdad bíblica antes!

Al tener sus pensamientos bien organizados.


1. El predicador evitará la repetición innecesaria del
mismo material en su sermón.
2. El predicador reducirá el uso repetido de palabras o
frases que no contribuyen expresamente al contenido
del mensaje (p.ej., “Puede alguien decir amén”, etc.).
3. El predicador progresará desde la Introducción hasta
la conclusión del mensaje en una manera sistemática
que puede ser fácilmente recordada por los oyentes.

¡ANÓTELO!
Esta guía para preparar su bosquejo del sermón es sencilla,
aún así permitirá que usted tenga un modelo lógico que
seguir cuando comience a desarrollar con oración cada
mensaje.
Título: El tema del mensaje debería ser declarado en
pocas palabras, antes que en una oración completa. Éste
debería capturar la imaginación del auditorio, entonces ellos
estarán interesados en oír el contenido del sermón.

Pasaje de las Escrituras (referencia bíblica, capítulo,


versículos)

Propósito del mensaje: Esta será una declaración breve


(por lo general una oración descriptiva) que explica la verdad
que se enfatizará. A menudo llamado declaración de
“preposición”, ya que esta propone la conclusión que será
alcanzada por el mensaje.

Introducción: Cada introducción será única, variando de


mensaje en mensaje. Algunas ideas que pueden ser
incluidas son:
Relate el contexto del pasaje
Cuente una historia de la Biblia o identifique los
principales personajes del pasaje
Desarrolle una “parábola” (historia hipotética)
Use una ilustración de acontecimientos actuales que
ayudan como transición al “cuerpo” del sermón.
Use tecnología audiovisual, mostrando un vídeo o
testimonio breve para resaltar el tema del mensaje
Cuerpo del sermón: Divisiones principales o subtemas
Hasta este punto, usted ha estado preparando a los fieles
para lo que usted va a decirles. Ahora, en el “cuerpo” del
sermón usted explica la verdad bíblica, exponiendo con
mayor detalle cada aspecto de esta verdad. Otra vez, estos
“subtemas” (divisiones o puntos) deberían fluir de una
manera lógica. Cada uno apoyándose en el subtema previo
y todos avanzando hacia la conclusión deseada. El cuerpo
del mensaje debería ser considerado cuidadosamente y en
oración. El predicador no debe brincar de acá para allá entre
ideas, ya sea mediante la repetición inútil de lo que ha sido
presentado ya, o inyectar pensamientos que estarán
contenidos en una sección posterior del mensaje. Recuerde,
el bosquejo debe impedir que el orador añada material no
relacionado que dejara al auditorio confuso o, al menos,
incierto de lo que el sermón se proponía comunicar.

Resuma (brevemente) el propósito. Este debería ser un


resumen muy breve del mensaje, no más de dos o tres
oraciones, con el cuidadoso énfasis en el tema original. Este
vinculará los varios subtemas para la congregación. Ahora,
ellos tienen el “paquete entero” para llevarlo con ellos a sus
casas para estudio, oración, meditación adicional.

Hay básicamente dos clases de invitaciones al altar (llamado


a una respuesta pública al mensaje)
Una que requiere acción inmediata. Incluido en esta estaría el
llamado al arrepentimiento y salvación, oración por los
enfermos, buscar la llenura del Espíritu Santo, liberación de
hábitos pecaminosos, y cosas semejantes.
La otra requiere un compromiso de toda la vida. Incluido en
esta invitación estaría la invitación a obedecer el llamado de
Dios al servicio, desarrollar buenas relaciones de familia con
el cónyuge y los hijos, ser un buen administrador de los
recursos financieros, y cosas semejantes.
Es siempre importante invitar a la congregación a una
respuesta pública al mensaje. Si ellos abandonan la iglesia sin
esperar personalmente en la presencia de Dios, muy pronto
otras actividades demandarán su atención y la convicción del
Espíritu Santo se disipará.

Conclusión. Usted ha estado diciendo los fieles Lo que


ellos deberían hacer; ahora, usted debe explicarles cómo
ellos deben hacerlo. Esta es la aplicación. Usted ha
presentado lo que la Palabra dice, pero para el mensaje sea
realmente significativo los creyentes deben entender la
acción requerida para asimilar la Palabra en su vida
cotidiana.

Invitación (salvación, bautismo, sanidad, etc.) La


“invitación” siempre debería ser en oración planeada, y en
coordinación con el mensaje. Por supuesto, el Espíritu Santo
le dirigirá. De vez en cuando Él dirigirá al líder espiritual a
través de una manifestación sobrenatural de alguno de los
dones del Espíritu. Esto no puede haber sido incluido en su
planificación. Sin embargo, como el Espíritu ha ungido su
planificación, preparación, presentación, Él también ungirá la
invitación al altar.
CAPITULO 9

MANTENGA UN REGISTRO DE SU
PREDICACIÓN

POR ASUNTO
Si usted sirve como un pastor…

Es importante saber lo que usted ha predicado, de modo


que usted no repita el mismo mensaje con el mismo texto
dentro de un breve período del tiempo.

Es importante saber lo que usted ha predicado, de modo


que usted no se convierta en un pastor monotemático,
predicando repetidamente acerca del mismo tema (es decir
el diezmo, bautismo de agua, segunda venida de Cristo, etc.)
excluyendo otras verdades bíblicas significativas. Los
creyentes deberían crecer en su caminar de fe, y para esto
ellos deben ser “alimentados” con una dieta equilibrada de
toda la Palabra de Dios.
Es importante saber lo que usted ha predicado para su
propio desarrollo y crecimiento personal como ministro del
evangelio. El siervo de Dios nunca debe volverse
complaciente o estar “satisfecho” por su propio nivel de
entendimiento bíblico. ¡El Espíritu Santo revelará nuevas
comprensiones de la Palabra a medida que usted estudia y
ora!!

POR FECHA,
UBICACIÓN, Y OCASIÓN (EL DOMINGO POR LA MAÑA
NA, ETC .)
Durante años yo mantuve un cuaderno con una lista de la
información acerca de cada mensaje. Hoy, si usted tiene el
acceso a un ordenador, es completamente fácil entrar al
sistema con regularidad para acceder a la información o
datos. Como un ejemplo: usted puede desear considerar el
sencillo formulario presentado más abajo o desarrollar uno
que satisfará mejor sus necesidades.
También, Usted Puede Considerar Provechoso Guardar una
Lista Similar Para:

Bautismos de agua

Ceremonias de matrimonio

Dedicaciones de bebé

Funerales

Otras ocasiones especiales

CONVERVE LAS NOTAS PARA FUTURA REFERENCIA


Es importante saber lo que usted ya ha predicado para
futura referencia. Es decir usted puede desear repasar el
estudio o investigación anterior de las Escrituras en un
sujeto dado. A medida que usted compila su biblioteca de
bosquejos de sermón, ellos le ayudarán en la preparación
para el ministerio futuro. Por ejemplo, el mensaje de
salvación por la fe en Cristo es fundamental para todo el
cristianismo. Por consiguiente, a medida que el Espíritu le
dirige, usted llamará con frecuencia a pecadores a aceptar
a Jesús. Aunque el tema pueda ser el mismo, el mensaje en
sí mismo será diferente. Sin embargo, usted ha compilado
ya varias referencias bíblicas en su archivo de notas. Al
referirse a estos bosquejos o notas usted puede encontrar
una cantidad significativa de información que puede ser
integrada en otro sermón.
¿Cuán extensas deberían ser sus notas o bosquejos de
sermón? Esto, por supuesto, está determinado por su
preferencia personal. Como una guía general, usted debería
escribir lo suficiente de modo que cuándo usted repase las
notas de nuevo, ¡usted recuerde lo que dijo en ese sermón
unas semanas o meses antes!
Si usted tiene acceso a un computador u otro dispositivo
electrónico, encontrará muy provechoso el tener los
bosquejo o notas en un “archivo de sermones.” La
información puede ser localizada rápidamente, y se tiene
acceso fácil si usted lo archiva por asunto (p.ej., Salvación,
Segunda Venida, Vida Cristiana Práctica, Bautismo en el
Espíritu Santo, Sanidad Divina, etc.).
CAPITULO 10

¡LA PREDICACIÓN, EL PRIVILEGIO DE TODA


UNA VIDA!

¿Sellamó?
ha preguntado alguna vez usted por qué Dios le
¿Ha pensado alguna vez que hay tantos otros
que tienen mayor capacidad o cualificaciones que usted?
¿Consideró alguna vez que de los más de siete billones de
personas que ahora viven en esta tierra Dios le eligió como
a usted como su embajador? Yo he sido bendito y
privilegiado de ser uno de sus “portavoces” durante más de
medio siglo. Aun después de todos estos años, todavía
estoy asombrado (y agradecido) de que Dios haya
favorecido tanto mi vida.
Nunca concluya que la suya es una vida de carga
abrumadora y dificultades permanentes. El ministerio no es
simplemente un deber que hay que cumplir por miedo de las
consecuencias. Sí, hay desafíos y tiempos de crisis que
hacen que nosotros acudamos a nuestro Padre en
desesperación. Sin embargo, aquellas luchas profundas
permiten que su mente medite sobre lo que Jesús hizo por
nosotros, mediante su muerte sustitutiva por nuestros
pecados.
“Porque esta leve tribulación momentánea produce en
nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de
gloria; no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las
que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales,
pero las que no se ven son eternas.”
(2 Corintios 4:7-18)

Es el mayor privilegio en el mundo el ser uno de sus


seguidores. Y, tener la seguridad y paz de la salvación
eterna es un “gozo inefable y glorioso” (1 Pedro 1:8).
Entonces, como uno de sus discípulos elegidos de esta
generación, las expresiones de nuestro amor por el Maestro
a través de un servicio sumiso no pueden ser igualadas por
ningún placer o recompensa terrenal.
“Corramos con paciencia la carrera que tenemos por
delante, puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador
de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la
cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra
del trono de Dios”
(Hebreos 12:1-2)

¿Permitirá usted que el Espíritu confirme o reafirme el


llamado especial de Dios en su vida en este momento?
Espere en su presencia, como lo ha hecho usted en muchas
ocasiones anteriores. Escuche ese “silbo apacible y
delicado” (1 Reyes 19:12) que ofrece palabras de seguridad
y dirección. Usted no verá, conocerá, o siquiera entenderá
totalmente todo lo que Dios tiene para su futuro. Sólo confíe
en Él. Vale la pena el viaje de obediencia fiel a aquella
“visión celestial” (Hechos 26:19).
¡Predicador, levante la Cruz de Jesucristo!
¡Predique la Palabra!
¡Sea fiel a su llamado!
¡Jesús edifica a su Iglesia, tal como él lo prometió!
¡Nuestro Señor volverá, muy pronto!
MI LLAMADO PERSONAL:

MI COMPROMISO PERSONAL:

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