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Introducción al Síndrome de Brown

El síndrome de Brown, es un tipo de estrabismo restrictivo caracterizado por una limitación


de la elevación en aducción, debido a una restricción mecánica a nivel del complejo
tendón/tróclea. La teoría etiopatogénica más reciente defiende la existencia de una
restricción del movimiento libre del tendón a través de la tróclea, de naturaleza congénita o
adquirida. Su incidencia es de 1/400-450 casos de estrabismo, y un 10-24% de los
estrabismos verticales. En el 10% es bilateral. El diagnóstico se basa en: elevación
deficiente en aducción, menos marcada en la línea media y mínima o ausente en
abducción; acción del oblicuo mayor ipsilateral no afectada o hiperacción mínima;
divergencia en la supraversión-patrón en V; y test de ducción forzada positivo. Puede
asociarse: downshoot en aducción, alargamiento de la hendidura palpebral en aducción,
posición viciosa de la cabeza e hipotropía en posición primaria (más raro). La evolución
tiende a ser favorable con el paso de los años. En los casos congénitos la mayoría de los
casos se queda sin indicación quirúrgica. El tratamiento quirúrgico está indicado cuando hay
hipotropía superior a 10 λ o tortícolis significativo (adelgazamiento del oblicuo mayor).

El síntoma más común del síndrome de Brown es el movimiento hacia arriba limitado del
ojo afectado. Esto puede causar dificultad con tareas como leer, conducir o mirar hacia
arriba. En algunos casos, el ojo afectado también puede parecer que se vuelve hacia afuera
o se cruza.
Otros síntomas pueden incluir visión doble, dolor o malestar en los ojos y dolores de
cabeza. Estos síntomas pueden variar según la gravedad de la afección y si uno o ambos
ojos están afectados.
El diagnóstico del síndrome de Brown generalmente implica un examen ocular completo y
una revisión del historial médico del paciente. El examen de la vista puede incluir pruebas
para medir el movimiento de los ojos, la agudeza visual y la percepción de profundidad.
En algunos casos, se pueden usar pruebas de diagnóstico por la imagen, como una
resonancia magnética o una tomografía computarizada, para evaluar las estructuras del ojo
y los tejidos circundantes. Un diagnóstico de síndrome de Brown también puede requerir
una consulta con un especialista en oftalmología pediátrica.
No existe una cura para el síndrome de Brown, pero existen varias opciones de
tratamiento disponibles para controlar los síntomas. En los casos leves, puede que no sea
necesario ningún tratamiento y la afección puede mejorar por sí sola con el tiempo.
En casos más severos, el tratamiento puede incluir cirugía para liberar el tendón restringido
o reposicionar los músculos que controlan el movimiento de los ojos. Otros tratamientos
pueden incluir el uso de prismas o anteojos especiales para ayudar a corregir la visión doble
o mejorar la alineación visual.

El pronóstico del síndrome de Brown varía según la gravedad de la afección y la edad a la


que se diagnostica. En algunos casos, la afección puede mejorar por sí sola sin tratamiento.
Sin embargo, en casos más graves, puede ser necesario un tratamiento a largo plazo para
tratar los síntomas. Con el tratamiento y la gestión adecuados, la mayoría de las personas
con síndrome de Brown pueden llevar una vida normal y saludable.

El síndrome de Brown es una condición rara que afecta el movimiento del ojo. Si bien no
existe una cura, existen varios tratamientos efectivos disponibles para controlar los
síntomas y mejorar la calidad de vida.

El síndrome de Brown es una afección ocular rara en la que se restringe el movimiento del
ojo, especialmente cuando se mira hacia arriba. Lleva el nombre del oftalmólogo Harold W.
Brown, quien lo describió por primera vez en 1950.

El síndrome de Brown ocurre cuando el tendón del oblicuo superior, un músculo que
controla el movimiento del ojo, está demasiado tenso o engrosado, lo que dificulta que el ojo
se mueva hacia arriba. Esto puede causar visión doble, una sensación de presión detrás del
ojo o párpado caído.

El síndrome de Brown puede ser congénito (presente al nacer) o adquirido más tarde en la
vida debido a un traumatismo, inflamación u otras afecciones subyacentes, como trastornos
de la tiroides. El tratamiento puede incluir cirugía, parches para los ojos u otras terapias
para mejorar el movimiento del ojo y aliviar los síntomas. El pronóstico para las personas
con síndrome de Brown varía según la gravedad de la afección y la causa subyacente.

Existen dos tipos de síndrome de Brown:

1) Congénitos:

: • Anomalía del oblicuo superior.

• Alteración o anomalía en la inserción del tendón del oblicuo superior.

• Anomalía en la vaina del oblicuo superior.


• Patología intratroclear que impide un deslizamiento normal del tendón por ella.

2. Adquiridos:

• Inflamación del tendón.

• Traumatismos en órbita. En los casos congénitos, normalmente son los padres de los
niños los que acostumbran a percatarse de una desviación que no siempre saben explicar,
ya que los niños no suelen manifestar queja alguna, no solo por su edad sino también por
los mecanismos de adaptación y supresión que generan.

Por contra, en los casos adquiridos, es el propio paciente quien se queja de diplopia e
incluso de dolor en la zona de mirada afectada. Una manera simple que nos puede ayudar
en consulta para saber si estamos ante un caso congénito o adquirido, es practicar un
suave masaje con el pulgar en la zona que se aprecia en la foto junto a este texto (figura 1) .
Si tras unos minutos de masaje, el ojo afectado es capaz de superar su límite de elevación,
es probable que nos encontremos ante un Síndrome de Brown adquirido por inflamación, en
cuyo caso el tratamiento sería infiltración local de corticoides

figura 1 !!

El tratamiento del síndrome de Brown depende de la causa y la gravedad de los síntomas.


En casos leves, el tratamiento puede no ser necesario. Sin embargo, en casos más graves,
los tratamientos pueden incluir:

1. Terapia de parche: En algunos casos, usar un parche en el ojo afectado puede


ayudar a fortalecer los músculos que controlan el movimiento del ojo y mejorar los
síntomas.
2. Terapia visual: Un terapeuta visual puede enseñar ejercicios oculares específicos
para mejorar la coordinación y la fuerza del ojo.
3. Cirugía: La cirugía puede ser necesaria si otros tratamientos no han mejorado los
síntomas o si la causa del síndrome de Brown es una anomalía estructural. La
cirugía generalmente implica aflojar o ajustar el músculo superior oblicuo para
mejorar el movimiento del ojo.

El pronóstico para las personas con síndrome de Brown varía dependiendo de la gravedad
del caso y la causa subyacente. Con el tratamiento adecuado, muchos casos de síndrome
de Brown mejoran significativamente o se resuelven por completo.

En este caso, ante la no existencia de tortícolis ni desviación en posición


primaria de mirada, ni prescripción de corrección óptica, se optó por no
tratar y observar en un año porque no se debe realizar cirugia antes de
los 6 años ya que en caso de haber una cirugia se debilitara el musculo
OS o se alargara el musculo o tendon

Ante un Síndrome de Brown solo se debe plantear una intervención


quirúrgica en caso de que el paciente muestre una alteración que lo
justifique, ya que no se debe destruir con cirugía la binocularidad
conseguida en posición primaria de mirada. Tales alteraciones podrían ser
la presencia de desviación vertical en posición primaria de mirada o la
existencia de tortícolis.
El objetivo que persiguen las diferentes técnicas quirúrgicas es facilitar el
paso del oblicuo superior por la tróclea. En ocasiones se produce una
resolución espontánea; suele ocurrir tras repetidos intentos del paciente
por realizar el movimiento de elevación y elevaciónadducción
terapia de parche

La terapia de parche es una técnica utilizada en el tratamiento de ciertos trastornos


oculares, como el estrabismo y el síndrome de Brown. Consiste en cubrir el ojo más fuerte
con un parche para estimular la función visual del ojo más débil.

En el caso del síndrome de Brown, el parche se coloca en el ojo afectado para forzar el uso
del músculo inferior oblicuo, lo que puede ayudar a mejorar la elevación del ojo y reducir la
diplopía. El uso del parche puede ser combinado con terapia visual para mejorar la
coordinación y la fuerza del ojo afectado.

La duración y la frecuencia de la terapia de parche dependerán de la gravedad del síndrome


de Brown y la respuesta del paciente al tratamiento. Es importante seguir las
recomendaciones del oftalmólogo para asegurar una recuperación efectiva y evitar
complicaciones.

El síndrome de Brown intermitente es una forma menos común del síndrome de Brown,
en la cual los síntomas pueden aparecer y desaparecer en ciertos momentos. En algunos
casos, la limitación de la elevación del ojo y la diplopía solo se presentan en ciertas
posiciones de mirada hacia arriba, mientras que en otras posiciones la visión es normal.

La causa subyacente del síndrome de Brown intermitente puede ser similar a la forma
adquirida del síndrome de Brown, como la presencia de un quiste o una inflamación en la
órbita. El tratamiento del síndrome de Brown intermitente dependerá de la causa
subyacente y de la gravedad de los síntomas. En algunos casos, el tratamiento puede ser
quirúrgico para corregir la limitación de la elevación del ojo y la diplopía, mientras que en
otros casos se puede recomendar la terapia de parche y la terapia visual para mejorar la
coordinación y la fuerza del ojo afectado.

Es importante buscar atención médica si se experimenta una limitación en la elevación del


ojo o la diplopía, ya que estos síntomas pueden ser indicativos de una afección ocular
subyacente más grave que requiere tratamiento adecuado.

El síndrome de Brown bilateral es una condición rara en la que ambos ojos están
afectados por una limitación de la elevación debido a la anomalía en la inserción del
músculo superioroblicuo. Esta condición puede ser congénita o adquirida y puede tener una
variedad de causas, como trauma ocular, enfermedades sistémicas, tumores orbitarios y
cirugía ocular previa.

Los síntomas del síndrome de Brown bilateral son similares a los del síndrome de Brown
unilateral, con limitación de la elevación en ambos ojos y posible diplopía en ciertas
posiciones de la mirada hacia arriba. El tratamiento del síndrome de Brown bilateral también
es similar al del síndrome de Brown unilateral y puede incluir terapia de parche, terapia
visual y/o cirugía.

La cirugía para el síndrome de Brown bilateral es más compleja y requiere una evaluación
exhaustiva de la anatomía ocular y la causa subyacente de la limitación de la elevación en
ambos ojos. Es posible que se necesiten múltiples procedimientos quirúrgicos para corregir
la limitación en ambos ojos y lograr un resultado satisfactorio.

En general, el pronóstico para el síndrome de Brown bilateral depende de la causa


subyacente y la gravedad de la limitación de la elevación en ambos ojos. Con el tratamiento
adecuado, muchos pacientes pueden tener una mejora significativa en sus síntomas y
calidad de vida.

El síndrome de Brown es una condición oftalmológica en la que hay una limitación de la


elevación del ojo afectado. La fisiopatología del síndrome de Brown se relaciona con la
anatomía y el funcionamiento de los músculos extraoculares del ojo, en particular del
músculo oblicuo superior.

El músculo oblicuo superior es uno de los seis músculos extraoculares que controlan los
movimientos oculares y está situado en la parte superior del globo ocular. La inserción del
músculo oblicuo superior en el globo ocular se encuentra en una posición más anterior y
nasal que las inserciones de los otros músculos extraoculares. En el síndrome de Brown,
esta inserción anormal del músculo oblicuo superior puede causar una restricción de la
elevación del ojo afectado.

Esta limitación de la elevación se debe a que la inserción anómala del músculo oblicuo
superior crea un efecto de palanca que impide que el ojo afectado se eleve por encima de
cierto punto. Como resultado, los pacientes con síndrome de Brown pueden experimentar
diplopía en ciertas posiciones de la mirada hacia arriba.

La fisiopatología del síndrome de Brown puede ser congénita o adquirida. En casos


congénitos, se cree que la anomalía de la inserción del músculo oblicuo superior se debe a
un desarrollo anormal durante la gestación. En casos adquiridos, la inserción anormal del
músculo oblicuo superior puede ser el resultado de trauma ocular, enfermedades
sistémicas, tumores orbitarios o cirugía ocular previa.

En resumen, la fisiopatología del síndrome de Brown se relaciona con la inserción anormal


del músculo oblicuo superior en el globo ocular, lo que resulta en una limitación de la
elevación y posibles síntomas de diplopía en ciertas posiciones de la mirada hacia arriba.

El síndrome de Brown es una condición oftalmológica en la que hay una limitación de la


elevación del ojo afectado. Las características clínicas del síndrome de Brown pueden
variar según la gravedad de la limitación de la elevación y la causa subyacente de la
condición. Algunas de las características clínicas comunes del síndrome de Brown incluyen:

● Limitación de la elevación: la limitación de la elevación es el síntoma principal del


síndrome de Brown. Los pacientes pueden tener dificultad para elevar el ojo
afectado por encima de cierto punto, lo que puede afectar la visión y causar
síntomas de diplopía en ciertas posiciones de la mirada hacia arriba.
● Diplopía: la diplopía, o visión doble, es un síntoma común del síndrome de Brown.
Los pacientes pueden experimentar diplopía en ciertas posiciones de la mirada hacia
arriba debido a la limitación de la elevación del ojo afectado.
● Dolor de cabeza: algunos pacientes pueden experimentar dolor de cabeza debido al
esfuerzo visual para tratar de evitar la diplopía.
● Estrabismo: el estrabismo, o desalineación de los ojos, puede ser un síntoma del
síndrome de Brown. El ojo afectado puede desviarse hacia abajo en relación con el
otro ojo debido a la limitación de la elevación.
● Anomalías en la posición del ojo: en algunos casos, la limitación de la elevación del
ojo afectado puede causar una posición anómala del ojo, como una hendidura
palpebral más estrecha o un aumento de la distancia entre la córnea y la ceja.
● Causas subyacentes: el síndrome de Brown puede tener una variedad de causas
subyacentes, como anomalías congénitas de los músculos extraoculares,
traumatismo ocular, enfermedades sistémicas, tumores orbitarios y cirugía ocular
previa.

El "downshoot" o "downshoots" es un síntoma adicional que puede presentarse en algunos


pacientes con síndrome de Brown. Se refiere a una elevación involuntaria del ojo afectado
durante la aducción (mirar hacia la nariz) o durante la elevación del ojo contralateral. Esto
significa que cuando el ojo afectado se mueve hacia la nariz o hacia arriba, el ojo también
puede moverse hacia abajo de manera involuntaria.

Este síntoma se debe a la contractura del músculo elevador de la pálpebra superior, que
también está involucrado en el movimiento de aducción del ojo. El downshoot no siempre
está presente en pacientes con síndrome de Brown, pero cuando ocurre, puede afectar la
función visual y aumentar la diplopía.

Es importante destacar que el downshoot no es específico del síndrome de Brown y puede


estar presente en otros trastornos oculares, como el síndrome de Duane y el síndrome de
Marcus Gunn. Por lo tanto, es necesario realizar una evaluación oftalmológica completa
para confirmar el diagnóstico y determinar el mejor plan de tratamiento

En resumen, las características clínicas del síndrome de Brown incluyen limitación de la


elevación, diplopía, dolor de cabeza, estrabismo, anomalías en la posición del ojo y posibles
causas subyacentes. Si un paciente presenta estos síntomas, es importante buscar
atención médica para una evaluación y posible tratamiento del síndrome de Brown.

El síndrome de Brown se caracteriza por la limitación de la elevación del ojo afectado y una
diplopía horizontal o diagonal en la mirada hacia arriba y hacia abajo. Algunas de las
características clínicas más comunes del síndrome de Brown incluyen:

● Limitación de la elevación del ojo afectado: El ojo afectado no puede elevarse


completamente en la mirada hacia arriba debido a la contractura del músculo
elevador de la pálpebra superior o la debilidad del músculo oblicuo superior.
● Diplopía horizontal o diagonal: La diplopía se produce cuando los dos ojos no
pueden fusionar las imágenes correctamente y se ven dos imágenes separadas. En
el síndrome de Brown, la diplopía se produce en la mirada hacia arriba y hacia abajo
y puede ser horizontal o diagonal.
● Head tilt: El paciente puede adoptar una postura de inclinación de la cabeza para
evitar la diplopía y mejorar la visión binocular.
● Ausencia de ptosis: A diferencia de otros trastornos de la elevación del ojo, como el
síndrome de Duane o el síndrome de Marcus Gunn, el síndrome de Brown no causa
ptosis (caída de la pálpebra superior).
● Comienzo temprano: El síndrome de Brown a menudo se presenta en la infancia o la
adolescencia, aunque puede presentarse en la edad adulta.
● Asociación con otras afecciones oculares: En algunos casos, el síndrome de Brown
puede estar asociado con otras afecciones oculares, como la miopía o la hipertropía.

Es importante destacar que cada caso de síndrome de Brown es único y que las
características clínicas pueden variar de un paciente a otro. Si se sospecha de síndrome de
Brown, se debe realizar una evaluación oftalmológica completa para confirmar el
diagnóstico y determinar el mejor plan de tratamiento.

El síndrome de Brown puede ser difícil de diagnosticar y puede confundirse con otras
condiciones oftalmológicas. Es importante realizar un diagnóstico diferencial para
descartar otras causas de limitación de la elevación y diplopía. Algunas de las condiciones
que se deben considerar en el diagnóstico diferencial del síndrome de Brown incluyen:

● Parálisis del nervio oculomotor: la parálisis del nervio oculomotor puede causar una
limitación de la elevación similar a la del síndrome de Brown. Sin embargo, en la
parálisis del nervio oculomotor, hay una afectación de otros músculos oculares, lo
que puede ayudar a distinguirlo del síndrome de Brown.
● Síndrome de Duane: el síndrome de Duane es una condición congénita en la que
hay una limitación de la elevación y/o la aducción del ojo afectado. A diferencia del
síndrome de Brown, el síndrome de Duane afecta la aducción del ojo.
● Estrabismo congénito: el estrabismo congénito puede causar una desalineación de
los ojos similar al síndrome de Brown. Sin embargo, en el estrabismo congénito, la
limitación de la elevación no está presente.
● Miastenia gravis: la miastenia gravis es una enfermedad autoinmunitaria que puede
causar debilidad muscular. Puede afectar los músculos oculares y causar una
limitación de la elevación similar al síndrome de Brown.
● Enfermedad de Graves: la enfermedad de Graves es una enfermedad
autoinmunitaria que puede causar protrusión de los globos oculares, debilidad
muscular y diplopía. La diplopía puede ser similar a la del síndrome de Brown, pero
la protrusión de los globos oculares y otros síntomas ayudarán a distinguirla del
síndrome de Brown.

En resumen, el diagnóstico diferencial del síndrome de Brown debe incluir la parálisis del
nervio oculomotor, el síndrome de Duane, el estrabismo congénito, la miastenia gravis y la
enfermedad de Graves. Un examen oftalmológico completo y pruebas adicionales pueden
ser necesarios para diferenciar estas condiciones y llegar a un diagnóstico preciso.

El tratamiento quirúrgico del síndrome de Brown puede ser considerado en casos en los que
la limitación de la elevación y la diplopía son persistentes y afectan significativamente la
calidad de vida del paciente, a pesar de la terapia no quirúrgica. El objetivo de la cirugía es
mejorar la función del músculo afectado y reducir la diplopía.

Existen diferentes técnicas quirúrgicas que se pueden utilizar para el tratamiento del
síndrome de Brown, dependiendo del tipo y la gravedad del caso. Algunas de las técnicas
quirúrgicas que se pueden utilizar incluyen:

● Recesión del músculo elevador de la pálpebra superior: Esta técnica quirúrgica se


realiza para reducir la fuerza del músculo elevador de la pálpebra superior y permitir
una mayor elevación del ojo afectado.
● Tenotomía del músculo elevador de la pálpebra superior: Esta técnica quirúrgica
implica cortar el músculo elevador de la pálpebra superior para reducir su fuerza y
permitir una mayor elevación del ojo.
● Resección del músculo oblicuo inferior: Esta técnica quirúrgica se realiza para
reducir la acción del músculo oblicuo inferior y permitir una mayor elevación del ojo.
● Recesión o resección de músculos extraoculares: Esta es una de las técnicas
quirúrgicas más comunes para tratar el síndrome de Brown. La cirugía implica la
modificación de la longitud o posición de los músculos oculares afectados para
mejorar la alineación ocular y reducir la desviación vertical.
● Fijación del músculo recto superior: Esta técnica quirúrgica se utiliza en casos de
hipertropía congénita que no responde a otras formas de tratamiento. En este
procedimiento, el músculo recto superior se fija a la esclera del ojo para reducir la
desviación vertical.
● Recesión del oblicuo inferior: En algunos casos de síndrome de Brown, la cirugía de
recesión del oblicuo inferior puede ser útil para corregir la hipertropía. En este
procedimiento, se recorta el músculo oblicuo inferior para reducir la desviación
vertical.
● Inyección de toxina botulínica: La inyección de toxina botulínica puede ser útil en
algunos casos de síndrome de Brown intermitente. La toxina botulínica se utiliza
para debilitar temporalmente el músculo afectado y mejorar la alineación ocular.

La mioescleropexia es un procedimiento quirúrgico que se utiliza para tratar la hipertropía


(desviación vertical hacia arriba) en el síndrome de Brown y otras afecciones relacionadas
con los músculos oculares.

En la mioescleropexia, se utiliza una técnica de sutura para fijar el músculo recto superior a
la esclera del ojo. Esta fijación se realiza en un punto específico a lo largo del músculo, que
se determina durante la cirugía según la cantidad de corrección vertical necesaria.

1. Recesión o resección de músculos extraoculares: Esta técnica consiste en el


acortamiento o alargamiento del músculo que causa la hipertropía. Se puede realizar
en el músculo recto superior o en el oblicuo inferior, dependiendo de la gravedad del
síndrome de Brown.
2. Mioescleropexia: En esta técnica se fija el músculo recto superior a la esclera del ojo
en un punto específico a lo largo del músculo, para corregir la hipertropía.
3. Tenotomía: En esta técnica se corta el tendón del músculo que causa la hipertropía,
para permitir que el músculo se relaje y reduzca la elevación del ojo.
4. Tenectomía: Esta técnica es similar a la tenotomía, pero se corta una porción del
músculo en lugar del tendón.
5. Fijación de tejido de la conjuntiva: En esta técnica se utiliza un parche de tejido de la
conjuntiva para fijar el músculo recto superior en una posición más baja, para
corregir la hipertropía.

Es importante destacar que cada caso de síndrome de Brown es único y que el tratamiento
quirúrgico debe ser personalizado para cada paciente. El cirujano oftalmólogo evaluará
cuidadosamente el caso y discutirá las diferentes opciones de tratamiento con el paciente
antes de tomar una decisión sobre la técnica quirúrgica más adecuada.

Los exámenes diferenciales del síndrome de Brown son aquellos que se realizan para
descartar otros trastornos oculares que pueden presentar síntomas similares al síndrome de
Brown. Algunos de los exámenes que se pueden realizar incluyen:
● Evaluación de la elevación ocular: Se realiza para determinar el grado de limitación
de la elevación del ojo afectado. En el síndrome de Brown, el ojo afectado no puede
elevarse completamente en la mirada hacia arriba debido a la contractura del
músculo elevador de la pálpebra superior o la debilidad del músculo oblicuo superior.
● Evaluación de la diplopía: Se realiza para determinar la presencia, el tipo y la
dirección de la diplopía. En el síndrome de Brown, la diplopía se produce en la
mirada hacia arriba y hacia abajo y puede ser horizontal o diagonal.
● Evaluación de la motilidad ocular: Se realiza para evaluar la capacidad de los
músculos oculares para mover los ojos en diferentes direcciones. En el síndrome de
Brown, se puede observar una limitación en la elevación del ojo afectado y una
debilidad en el músculo oblicuo superior.
● Prueba de Hess-Lancaster: Se utiliza para evaluar la función de los músculos rectos
y oblicuos en la elevación y la depresión del ojo. En el síndrome de Brown, se puede
observar una debilidad en el músculo oblicuo superior durante la elevación del ojo
afectado.
● Evaluación de la posición de la cabeza: En algunos casos de síndrome de Brown, el
paciente puede adoptar una postura de inclinación de la cabeza para evitar la
diplopía y mejorar la visión binocular.
● Evaluación de otras afecciones oculares: Se pueden realizar otros exámenes
oftalmológicos para descartar otras afecciones oculares que pueden presentar
síntomas similares al síndrome de Brown, como el síndrome de Duane, el síndrome
de Marcus Gunn y la parálisis del nervio oculomotor.

El Prisma Covert Test es una prueba que se utiliza para evaluar la presencia de una
hipertropía (desviación vertical) en el ojo afectado en el síndrome de Brown. Durante la
prueba, se coloca un prisma vertical en el ojo opuesto al ojo afectado, lo que obliga al ojo
afectado a desviar hacia arriba para mantener la visión binocular.

En el caso del síndrome de Brown, se espera que el ojo afectado no pueda elevarse
completamente en la mirada hacia arriba debido a la contractura del músculo elevador de la
pálpebra superior o la debilidad del músculo oblicuo superior. Si el Prisma Covert Test se
realiza en un paciente con síndrome de Brown, se observará que el ojo afectado no puede
superar la línea horizontal, lo que indica una limitación en la elevación del ojo afectado.

Por lo tanto, en el Prisma Covert Test, se espera encontrar una hipertropía del ojo afectado
en el síndrome de Brown, lo que significa una elevación limitada del ojo afectado en la
mirada hacia arriba.
El estudio sensoriomotor del síndrome de Brown tiene como objetivo evaluar la función de
los músculos extraoculares y su coordinación, así como la función del sistema nervioso en
el control de los movimientos oculares.

Los resultados del estudio sensoriomotor en el síndrome de Brown pueden variar según la
gravedad y la causa subyacente del síndrome. Algunos hallazgos comunes pueden incluir:

● Limitación en la elevación del ojo afectado en la mirada hacia arriba.


● Hipertropía (desviación vertical) del ojo afectado.
● Debilidad del músculo oblicuo superior o contractura del músculo elevador de la
pálpebra superior.
● Alteraciones en la coordinación de los movimientos oculares.
● Anomalías en la lectura de letras y números en la prueba de agudeza visual.
● Alteraciones en la fusión de imágenes y la percepción de profundidad en la prueba
de estereopsis.

En general, el estudio sensoriomotor es útil para evaluar la función de los músculos


extraoculares y su coordinación en el síndrome de Brown, lo que puede ayudar en el
diagnóstico y tratamiento de la enfermedad

La etiología exacta del síndrome de Brown aún no está completamente comprendida. Se


cree que la causa subyacente es una disfunción en el mecanismo de la fijación ocular, que
puede ser causada por diversas anomalías en los músculos oculares o en las estructuras
asociadas.

Algunas de las posibles causas incluyen:

● Hipertrofia o cicatrización del músculo elevador del párpado superior.


● Hipertrofia del músculo recto superior.
● Fusión anormal del recto superior con la fascia de la pared orbitaria.
● Anomalías congénitas en la inserción muscular, como la inserción anómala del recto
superior en la esclera.
● Trauma o lesiones oculares.

El tratamiento ortóptico puede ser útil en el manejo del síndrome de Brown,


especialmente en casos leves a moderados. El objetivo principal del tratamiento ortóptico es
mejorar la fusión binocular y reducir la desviación vertical en la mirada hacia arriba.

El tratamiento ortóptico puede incluir ejercicios de fusión binocular, prismas y terapia de


oclusión. Los ejercicios de fusión binocular se centran en mejorar la capacidad del cerebro
para fusionar las imágenes de ambos ojos y pueden incluir el uso de estereogramas o
juegos de doble visión.

Los prismas pueden ser útiles para corregir la desviación vertical de la mirada hacia arriba.
Los prismas se colocan en las gafas del paciente y desvían la luz para que la imagen
aparezca en la posición correcta en la retina. La magnitud y la dirección del prisma
necesario dependen de la magnitud y dirección de la desviación vertical.

La terapia de oclusión también puede ser útil en algunos casos para mejorar la fusión
binocular. Esto implica tapar uno de los ojos del paciente durante ciertos períodos de tiempo
para fomentar la capacidad del cerebro para fusionar imágenes.

El tratamiento para el Síndrome de Brown depende de su etiología y gravedad, pero


algunos de los posibles tratamientos son:

1. Observación y seguimiento: Si el síndrome de Brown es leve y no afecta


significativamente la visión, puede ser suficiente hacer un seguimiento regular con
un oftalmólogo.
2. Prismas: Si la desviación es pequeña, se puede corregir temporalmente con el uso
de prismas en las gafas.
3. Terapia ortóptica: La terapia ortóptica puede ayudar a mejorar la motilidad ocular, la
coordinación binocular y la amplitud de fusión.
4. Cirugía: Si el síndrome de Brown es severo o no responde a otros tratamientos, se
puede considerar la cirugía para corregir la posición de los músculos oculares.
5. Inyección de toxina botulínica: En algunos casos, la inyección de toxina botulínica en
el músculo oblicuo superior puede mejorar los síntomas del síndrome de Brown

Caso clínico de síndrome de Brown:

Historia clínica: Paciente femenino de 35 años de edad, con antecedentes de estrabismo


desde la infancia, consulta por diplopía en la mirada hacia arriba, especialmente cuando lee
o mira hacia arriba durante un tiempo prolongado. La paciente informa que ha notado este
problema durante los últimos 6 meses y que ha afectado su capacidad para realizar su
trabajo y actividades diarias. La paciente ha sido evaluada previamente por otros
oftalmólogos, pero no ha recibido un diagnóstico claro.

Examen oftalmológico: En la evaluación oftalmológica, la paciente presenta una desviación


vertical en la mirada hacia arriba en ambos ojos, más prominente en el ojo izquierdo. La
agudeza visual en ambos ojos es de 20/20, y la refracción es +1.00 esférica en ambos ojos.
El examen de motilidad ocular revela una restricción en la elevación en ambos ojos, más
notable en el ojo izquierdo. No hay evidencia de nistagmo.

El examen de prismas muestra una desviación vertical hipertropía de 10 dioptrías en el ojo


izquierdo en la mirada hacia arriba, que aumenta en la posición primaria de mirada. La
prueba de Maddox revela una desviación vertical mayor en el ojo izquierdo en la mirada
hacia arriba. El examen de estereopsis muestra una capacidad normal para fusionar
imágenes en ambos ojos.

El examen de resonancia magnética (MRI) muestra una hipoplasia del músculo oblicuo
superior izquierdo, lo que sugiere la presencia de síndrome de Brown.

Diagnóstico: Síndrome de Brown bilateral.

Tratamiento: El paciente fue remitido a un oftalmólogo especializado en el síndrome de


Brown para una evaluación y tratamiento más detallados. Se consideró el tratamiento
quirúrgico, pero como la paciente tenía una restricción significativa en la elevación en
ambos ojos, se decidió realizar una terapia de parche y ejercicios de fusión binocular para
mejorar la función sensorial de ambos ojos. Se le prescribió un parche oclusivo para el ojo
izquierdo durante 4 horas al día durante 4 semanas, y se inició una terapia de ejercicios de
fusión binocular con pruebas de estereopsis en un programa de terapia visual.

Seguimiento: La paciente mostró una mejora significativa en la capacidad de fusión


binocular después de 4 semanas de terapia de parche y ejercicios de fusión binocular, con
una reducción en la desviación vertical en la mirada hacia arriba en ambos ojos. En el
examen de prismas, la desviación vertical hipertropía disminuyó a 5 dioptrías en el ojo
izquierdo en la mirada hacia arriba. La paciente continuó con la terapia visual y parche
durante otras 4 semanas y se programó una nueva evaluación oftalmológica de
seguimiento.

A continuación, se presenta un caso clínico del síndrome de Brown con resultados de


diferentes pruebas oftalmológicas:

Paciente de 8 años de edad, sexo femenino, remitida por el pediatra por presentar
desviación de ojo izquierdo que aumenta con la mirada hacia abajo.

Agudeza visual: OD: 20/20 OI: 20/20

Punto próximo de convergencia: 4 cm


Reflejo pupilar: normal en ambas pupilas

Motilidad: OD: Movimientos oculares extrínsecos completos y simétricos OI: Limitación de la


elevación y aducción

Cover test: Desviación vertical del ojo izquierdo que aumenta en la mirada hacia abajo,
aumenta la desviación en el ojo izquierdo al cubrir el ojo derecho.

Estereopsis: 80 segundos de arco

Test de Hirschberg: Desviación vertical del ojo izquierdo.

Amplitud de fusión: 15 dioptrías de prisma base out.

Prisma cover test: Desviación vertical del ojo izquierdo.

En la exploración oftalmológica, se observó una limitación de la elevación y aducción en el


ojo izquierdo con desviación vertical aumentada en la mirada hacia abajo y en el prisma
cover test. El resto de la exploración ocular fue normal.

Con base en los hallazgos clínicos, se diagnosticó un síndrome de Brown en el ojo


izquierdo. Se indicó tratamiento con terapia de parche y se programó cirugía de corrección
de la limitación de la elevación y aducción en el ojo izquierdo.

Anamnesis: Paciente de 8 años con estrabismo en el ojo izquierdo y limitación en la


elevación de ese mismo ojo.

Agudeza visual: 20/20 en ambos ojos.

Punto próximo de convergencia: 3 cm.

Reflejo pupilar: normal en ambos ojos.

Motilidad: limitación en la elevación del ojo izquierdo.

Cover test para lejos y cerca: esoforia intermitente a distancia y esoforia constante a cerca
en el ojo izquierdo.

Estereopsis: 40 segundos de arco.

Test de Hirschberg: 20 prismas de esotropía en el ojo izquierdo.

Amplitud de fusión para lejos y cerca: 10 dioptrías de base externa en ambos ojos.
Filtro rojo: prueba de Bagolini negativa.

Prisma cover test: 15 prismas de esotropía en el ojo izquierdo.

Basado en los resultados, se llega al diagnóstico de síndrome de Brown en el ojo izquierdo.

Paciente femenina de 34 años acude a la consulta por presentar diplopía y dolor ocular en
el ojo izquierdo. En la anamnesis refiere que los síntomas se iniciaron hace una semana,
después de haber sufrido un golpe en la cabeza durante un partido de fútbol. No tiene
antecedentes médicos relevantes.

En la exploración oftalmológica se observa una limitación de la elevación del ojo izquierdo,


que empeora en la aducción y disminuye al girar la cabeza hacia la derecha.

El movimiento vertical del ojo derecho es normal.

La agudeza visual es de 20/20 en ambos ojos.

El punto próximo de convergencia es de 5 cm.

El reflejo pupilar es normal.

La motilidad ocular en el ojo derecho es normal, pero en el ojo izquierdo se observa una
limitación de la elevación y la aducción.

El cover test para lejos y cerca no muestra desviación ocular. La estereopsis es normal.

El test de Hirschberg muestra una desviación del ojo izquierdo de 10 dioptrías.

La amplitud de fusión para lejos es de 20 dioptrías y para cerca de 12 dioptrías.

En el filtro rojo se observa una desviación del ojo izquierdo en elevación.

El prisma cover test muestra una hipotropía del ojo izquierdo de 10 dioptrías.

Se realiza una resonancia magnética que muestra una lesión en el nervio troclear izquierdo.

El diagnóstico es síndrome de Brown y se decide tratamiento quirúrgico con miectomía del


oblicuo superior izquierdo.

Después de la cirugía, la paciente presenta una mejoría de los síntomas y la exploración


oftalmológica muestra una motilidad ocular normal en ambos ojos
Anamnesis: Paciente femenina de 12 años, con antecedentes familiares de estrabismo
en su padre. La paciente presenta dificultad para la lectura y fatiga ocular. No presenta
antecedentes médicos relevantes.

Examen oftalmológico:

Agudeza visual: 20/20 en ambos ojos con corrección.

Punto próximo de convergencia: 5 cm.

Reflejo pupilar: simétrico y reactivo.

Motilidad: limitación de la elevación en aducción en ambos ojos, mayor en el ojo izquierdo.


Cover test para lejos: exotropía de 12 prismas en el ojo izquierdo en posición primaria de
mirada, ortoforia con supresión del ojo izquierdo en la mirada hacia la izquierda y diplopía
en la mirada hacia la derecha.

Cover test para cerca: exotropía de 16 prismas en el ojo izquierdo en posición primaria de
mirada, ortoforia con supresión del ojo izquierdo en la mirada hacia la izquierda y diplopía
en la mirada hacia la derecha.

Estereopsis: 60 segundos de arco con prueba de Titmus.

Test de Hirschberg: desviación de 10 prismas hacia fuera en el ojo izquierdo.

Amplitud de fusión para lejos: 25 prismas de base-out.

Amplitud de fusión para cerca: 20 prismas de base-out.

Filtro rojo: sin desviación ocular aparente.

Prisma cover test: exotropía de 10 prismas en el ojo izquierdo en posición primaria de


mirada.

Diagnóstico: Síndrome de Brown con exotropía intermitente en el ojo izquierdo.

Tratamiento: Se decidió realizar una corrección óptica completa y terapia ortóptica. Se


prescribieron lentes con corrección para hipermetropía y astigmatismo, y se indicó a la
paciente un programa de ejercicios ortópticos que incluye ejercicios de convergencia,
seguimiento y fusión. Después de 6 meses de tratamiento, se observó una mejoría
significativa en la motilidad y una reducción en la desviación ocular, con una exotropía de 4
prismas en el ojo izquierdo en posición primaria de mirada en el cover test para lejos y
ortoforia en el cover test para cerca. Se recomendó continuar con el tratamiento ortóptico y
se realizará una evaluación periódica para monitorear la progresión del tratamiento.

Paciente masculino de 45 años de edad se presenta a consulta con queja de diplopía en


posición de mirada hacia arriba. El paciente informa que la diplopía se produce desde hace
6 meses y ha ido empeorando con el tiempo. No refiere antecedentes médicos relevantes ni
consumo de medicamentos.

En la exploración oftalmológica se observa una desviación hipertropica del ojo derecho en la


posición primaria de la mirada. Al realizar el test de hirschberg, se observa una desviación
vertical de 8 dioptrías prismáticas hacia el ojo derecho en posición primaria de la mirada. El
examen de la motilidad ocular extraocular muestra limitación de la elevación del ojo derecho
en la posición de la mirada hacia arriba.

La agudeza visual es de 20/20 en ambos ojos y no se encuentra alteración del reflejo


pupilar ni de la estereopsis.

El punto próximo de convergencia se encuentra a 8 cm de la nariz y la amplitud de fusión es


de 12 dioptrías prismáticas para lejos y de 6 dioptrías prismáticas para cerca.

El filtro rojo se encuentra dentro de los parámetros normales y el prisma cover test muestra
un endotropia intermitente en el ojo derecho en la posición primaria de la mirada.

Con base en los hallazgos clínicos, se diagnostica al paciente con síndrome de Brown. Se
discute con el paciente las opciones de tratamiento, y se decide llevar a cabo una cirugía
para corregir la limitación en la elevación del ojo derecho.

Se realiza una miectomía del músculo elevador del ojo derecho con buena mejoría en la
elevación del ojo y desaparición de la diplopía en la posición de mirada hacia arriba. En el
seguimiento a 6 meses, el paciente se encuentra asintomático y se observa alineación
ocular normal en todas las posiciones de la mirada.

Caso clínico del Síndrome de Brown:

Paciente masculino de 6 años de edad, sin antecedentes de enfermedades oculares, que


se presenta en la consulta oftalmológica con una limitación en la elevación del ojo derecho y
diplopía (visión doble) en posición de mirada hacia arriba. Se realizó un examen ocular
completo y se identificó una elevación limitada del ojo derecho, especialmente en la
posición de mirada hacia arriba.

Se diagnosticó al paciente con síndrome de Brown congénito, ya que no se identificaron


antecedentes de traumatismo o infección ocular. Se sugirió un enfoque conservador de
tratamiento que incluyó el uso de parche ocular en el ojo afectado, terapia visual y
seguimiento clínico.

Después de 6 meses de tratamiento, el paciente informó una mejoría significativa en la


elevación del ojo derecho y la diplopía en la posición de mirada hacia arriba había
desaparecido. El parche ocular se eliminó y se recomendó continuar con la terapia visual
para fortalecer los músculos del ojo.

En el seguimiento a largo plazo, el paciente continuó mejorando y no se requirió ninguna


intervención quirúrgica. El diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado del síndrome de
Brown fueron esenciales para prevenir complicaciones oculares a largo plazo y mejorar la
calidad de vida del paciente.

A continuación se presenta un caso clínico del síndrome de Brown con los exámenes
pertinentes:

Paciente femenina de 25 años de edad, con antecedentes de enfermedad de Graves que


había sido tratada con éxito con medicamentos. Se presentó en la consulta oftalmológica
quejándose de visión doble en posición de mirada hacia arriba en el ojo izquierdo. No se
reportaron antecedentes de trauma ocular o enfermedades oculares previas.

Se realizó un examen ocular completo que incluyó una evaluación de la agudeza visual, la
motilidad ocular, la posición de la cabeza y la presencia de diplopía. Se identificó una
limitación en la elevación del ojo izquierdo y diplopía en la posición de mirada hacia arriba
en ese ojo. Se realizó una prueba de Hess para evaluar la función del músculo superior
oblicuo, y se encontró una restricción en la elevación del ojo izquierdo.

Se realizó una resonancia magnética (RM) de la órbita para evaluar la posible presencia de
anomalías estructurales o tumores en el ojo. La RM mostró una alteración en la inserción
del músculo superior oblicuo en el ojo izquierdo, lo que confirmó el diagnóstico de síndrome
de Brown adquirido.

Se inició un tratamiento con terapia de parche en el ojo afectado y se recomendó la terapia


visual para mejorar la coordinación y la fuerza del ojo. Después de un mes de tratamiento,
el paciente informó una mejoría significativa en la elevación del ojo izquierdo y la diplopía
había desaparecido. El examen ocular completo posterior confirmó la mejoría.

En conclusión, este caso ilustra la importancia de realizar un examen ocular completo,


incluyendo una evaluación de la función del músculo superior oblicuo y una RM de la órbita
en pacientes con síntomas de diplopía y limitación en la elevación del ojo. El diagnóstico
temprano y el tratamiento adecuado del síndrome de Brown adquirido pueden mejorar
significativamente la calidad de vida del paciente.

Paciente de 28 años, sexo femenino, sin antecedentes patológicos relevantes. Consulta


por presentar diplopía en la posición primaria de la mirada, que empeora en la mirada hacia
abajo y adentro. La paciente relata que este problema ha venido presentándose desde hace
varios años y se ha vuelto más frecuente e intenso en las últimas semanas.

Examen oftalmológico:

● Agudeza visual: 20/20 en ambos ojos


● Punto próximo de convergencia: a 10 cm
● Reflejo pupilar: simétrico y reactivo a la luz
● Motilidad: limitación en la elevación del ojo izquierdo en la mirada hacia abajo
● Cover test: desviación hipertropía del ojo izquierdo en la mirada hacia abajo y
adentro
● Estereopsis: presente
● Test de Hirschberg: desviación del ojo izquierdo en la mirada hacia abajo y adentro
● Amplitud de fusión: reducida para la mirada hacia abajo y adentro
● Filtro rojo: evidencia de torsión ocular del ojo izquierdo
● Prisma cover test: hipertropía del ojo izquierdo en la mirada hacia abajo y adentro
corregida con un prisma de 10 dioptrías base arriba en el ojo izquierdo

Diagnóstico: síndrome de Brown bilateral con mayor afectación en el ojo izquierdo.

Tratamiento: se decide realizar una miotomía del músculo recto inferior del ojo izquierdo. La
paciente presenta una mejoría significativa de la diplopía postoperatoria y se prescribe
terapia ortóptica para mejorar la amplitud de fusión y la motilidad ocular. En el seguimiento a
largo plazo, se observa una corrección completa de la diplopía y la torsión ocular.

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