Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
• ¿Por qué es importante incluir la perspectiva de género como un determinante social de la salud?
• ¿Qué elementos se deben considerar para la detección de las distintas manifestaciones de la violencia de género contra las mujeres en el
curso de vida?
• ¿Cuáles son los factores de riesgo para mujeres que viven o han vivido violencia de género en contexto de pareja o ex pareja?
• ¿Qué manifestaciones adopta la violencia de género contra las mujeres?
• ¿Cómo realizar las acciones de apoyo frente a casos de violencia contra las mujeres?
• ¿Cómo realizar la acogida de mujeres una vez que se ha detectado que viven violencia de género?
• ¿Cómo realizar las acciones de apoyo hacia las mujeres cuando se ha detectado un caso de violencia de género contra las mujeres?
• ¿Cómo llevar a cabo acciones de seguimiento y rescate?
• ¿Dónde, cómo y cuándo hacer una derivación?
• ¿Cómo promover prácticas de autocuidado, cuidado de equipos (o cuidado mutuo) y el cuidado institucional de las personas que trabajan con
casos de violencia contra las mujeres?
• ¿En qué ámbitos pueden aplicarse medidas para la prevención de la violencia contra las mujeres?
• ¿Cómo abordar la violencia de pareja o ex pareja, cuando la víctima/sobreviviente es una funcionar en el servicio público?
Los determinantes sociales, por su parte, son definidos como aquellas condiciones sociales en las
cuales se desarrolla la vida de las personas y que afectan el estado de salud de la población en
distinto grado, de acuerdo a diversos factores, generando inequidades1.
El género intersecta la mayoría de los otros determinantes de salud, por ejemplo, raza/
color, edad, clase social, orientación sexual e identidad de género, origen territorial, creencia
religiosa, etc., e impacta diferencialmente a mujeres y hombres, de acuerdo con la construcción
sociocultural dominante. Este ordenamiento social, produce efectos concretos en las vidas de
mujeres y hombres, pero impactan severamente en las oportunidades de desarrollo, acceso a
bienes y recursos, y en definitiva, en las condiciones de bienestar de las mujeres y las niñas.
Estas inequidades y desigualdades se expresan en el ámbito de salud como barreras en el acceso
a la atención y a los recursos, la calidad de la atención, el financiamiento y la participación en la
producción y en las decisiones de salud, y puede incidir limitando las oportunidades de gozar de
un estado de salud pleno en los ámbitos psicosociales.
Para hacer visibles las desigualdades, avanzar hacia la equidad y ampliar el enfoque de género
con implicancias para las políticas de salud se hace necesario:
1) Asegurar sistemas de información desagregados por sexo y género2.
2) Elaborar documentación que permita monitorear las desigualdades de género en salud; y
3) Específicamente en violencia se requiere, reconocer la violencia contra las mujeres y
niñas como un problema de salud pública y asignar los recursos humanos y financieros
para responder a las necesidades de promoción, prevención, atención, reparación,
empoderamiento e inserción laboral de las mujeres afectadas por la violencia, aspectos todos
necesarios para lograr las distintas autonomías que buscamos obtengan las mujeres a lo largo
del curso de vida.
1 Marin, Fabiola & Jadue, Liliana. (2005). Determinantes Sociales de la Salud en Chile. En la Perspectiva de la Equidad. Primera Edición.
Disponible en https://www.researchgate.net/publication/331984362_Determinantes_Sociales_de_la_Salud_en_Chile_En_
la_Perspectiva_de_la_Equidad
2 De acuerdo al estándar internacional de registro de información HL7 de género, este define 7 formas de identificación de la
información para la categoría de género: femenino, masculino, trans femenino, trans masculino, no binario, no responde y no quiere
dar su identidad.
3 Suicidio inducido: suicidio a consecuencia de la violencia de género recibida de manera sostenida y sistemática por parte de la mujer.
4 Marin, Fabiola & Jadue, Liliana. (2005).
5 Colegio Médico de Chile A. G. (2018). Manual del I Curso de formación de Género y Salud (Primera edición). Comisión de Género y
Salud del Colegio Médico de Chile.
6 Provoste, P. (2007). Violencia contra la mujer en la pareja: respuestas de la salud pública en Santiago de Chile. Cepal. Serie mujer y
desarrollo.
Fuente: Solar O, Irwin A. A conceptual framework for action on the social determinants of health. Social Determinants of Health
Discussion Paper 2 (Policy and Practice) WHO pp. 48.2007.
A la luz del enfoque de género, se pueden examinar las desigualdades de género en los distintos
ámbitos propuestos por este modelo, con el propósito de identificar las distintas problemáticas de
salud que se expresan diferencialmente para hombres y mujeres.
Así, por ejemplo, desde un punto de vista sanitario, la mortalidad masculina se presenta mayoritaria-
mente asociada a enfermedades como la tuberculosis, VIH/SIDA, cirrosis hepática, enfermedades
isquémicas del corazón, accidentes de tránsito, suicidio, entre otras, las que más que estar
determinadas a partir de la constitución biológica, se encuentran asociadas a estilos de vida vinculados
a los mandatos y prácticas culturales propios de la masculinidad hegemónica9 . Por otro lado, la mayor
prevalencia en mujeres de sintomatología depresiva, tampoco se encuentra determinada por la
constitución biológica de las mujeres, sino que evidencia nuevamente una diferencia de género en la
salud.
De esta manera, la incorporación de herramientas de análisis desde el enfoque de género ofrece
elementos relevantes para mejorar la actuación del personal sanitario con el propósito de disponer de
respuestas diferenciadas para hombres y mujeres, que sean pertinentes, oportunas y que apunten a
disminuir brechas de acceso al goce de la salud en condiciones de equidad.
La Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la
Mujer, “Convención Belem do Pará”, en su artículo 5 señala que: “toda mujer podrá ejercer libre y
plenamente sus derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales y contará con la total
protección de esos derechos consagrados en los instrumentos regionales e internacionales sobre
derechos humanos. A partir de ello, los Estados Parte, reconocen que la violencia contra la mujer impide
y anula el ejercicio de esos derechos” (1994).
En este sentido, la misma Convención señala la importancia del seguimiento y monitoreo de
indicadores para medir el cumplimiento de los compromisos sustraídos10. Entre otros, señala la
responsabilidad de los/as funcionarios/as públicos/as de contar con herramientas para la pesquisa,
orientación, acogida e implementación de acciones para la erradicación de la violencia de género.
Asimismo, señala la importancia de realizar acciones para la promoción de los derechos de las mujeres,
que posibiliten el ejercicio pleno de sus autonomías: física, económica y social-política. A partir de lo
9 Colegio Médico de Chile A. G. (2018). Manual del I Curso de formación de Género y Salud (Primera edición). Comisión de Género y
Salud del Colegio Médico de Chile.
10 Mecanismo de Seguimiento de la Convención de Belém do Pará – MESECVI-. (2015). Guía práctica para la aplicación del sistema
de indicadores de progreso para la medición de la implementación de la Convención de Belem do Pará. Washington, DC: Comisión
Interamericana de Mujeres (CIM). Disponible en: http://www.oas.org/es/mesecvi/docs/Guia_Indicadores_BDP_ESP.pdf
11 Con ‘psicosocioeducativo’nos referirnos al enfoque de intervención que reconoce la implicación de las dimensiones sociales
y los aspectos individuales en el abordaje de la violencia contra las mujeres, así como la necesidad de desarrollar estrategias de
afrontamiento desde los ámbitos individual y comunitario para su abordaje. En este sentido, la intervención psicosocioeducativa
abarca 3 elementos: 1. el impacto individual de la violencia en la historia de vida de la mujer y su entorno cercano; 2. los factores
sociales implicados identificando factores de riesgo y de protección ; y 3. lo educativo, que apunta a la co- construcción (construcción
conjunta) para el aprendizaje de nuevas herramientas para hacer frente a la violencia, a través de espacios reflexivos entre mujeres y
con los equipos de intervención directa. Esta definición ha sido elaborada por la Unidad Nacional en Violencia Contra las Mujeres del
SernamEG.
12 El Sector Salud no brinda servicios en la línea de la reparación propiamente tal, y este es un rol que cumplen instancias
intersectoriales que requieren de una mirada psico-socio-jurídica especializada. No obstante, toda atención entregada a las mujeres
por funcionarios /as de este sector, aporta en este continuo.
En sintonía con lo anterior, los Estados Miembros de la Organización Panamericana de la Salud (OPS),
aprobaron por unanimidad la Estrategia y plan de acción sobre el fortalecimiento del sistema de
salud13 para abordar la violencia contra la mujer, entre los años 2015-2025, durante el 54.o Consejo
Directivo y la 67.a sesión del Comité Regional para las Américas de la Organización Mundial de la Salud
(OMS), en octubre del 2015.
En dicha estrategia se adopta un enfoque de salud pública frente al problema de la violencia contra
las mujeres y se ofrece una hoja de ruta para que los sistemas de salud puedan sumarse a un esfuerzo
multisectorial a fin de prevenir y responder a este tipo de violencia en las Américas. Más de 100
representantes de gobiernos, organizaciones de la sociedad civil, instituciones académicas, organizacio-
nes multilaterales y organismos de las Naciones Unidas participaron en la elaboración de esta estrategia
y plan de acción y expresaron su compromiso de apoyar su ejecución, junto al reconocimiento de
que la violencia contra la mujer es un problema de salud pública y de derechos humanos. Con ello se
han comprometido a asegurar que sus sistemas de salud cumplan su responsabilidad de prevenir y
responder a este tipo de violencia.
De acuerdo a las líneas estratégicas del plan de acción sobre el fortalecimiento del sistema de salud
para abordar la violencia contra la mujer de la OPS, los sistemas de salud deberían ser proactivos en la
interacción y la coordinación con las otras instituciones que deben actuar en protección y apoyo de las
mujeres, como las policías, sector justicia, los servicios sociales, educación, los mecanismos de igualdad
de género14 o de empoderamiento de la mujer y considerar también la protección infantil, dado que
la exposición a la que se enfrentan los/as niños/as cuando sus madres son violentadas/agredidas está
asociado a una gama de consecuencias negativas, entre ellas un mayor riesgo de vivir violencia en la
edad adulta. Por lo tanto, todas las coordinaciones deben requerir de los esfuerzos de todos/as los/as
funcionarios/as públicos para articular los mecanismos que permitan coordinar, de manera segura y
ética, los servicios para las mujeres y los niños y niñas expuestos a situaciones de violencia.
13 OPS (2015). Estrategia y plan de acción sobre el fortalecimiento del sistema de salud para abordar la violencia contra la mujer.
(Primera edición). OPS.
14 Los mecanismos nacionales para la igualdad de género o de adelanto de la mujer son los organismos centrales de coordinación
de políticas de los gobiernos, en el caso de Chile el Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género (MMEG), en coordinación con el
Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género (SernamEG). El homólogo a Mecanismos al interior de las instituciones refiere
a la creación e instalación de Comités, Comisiones, Programas, etc. que materializan las acciones a través de la implementación y
ejecución de Programas, proyectos, dispositivos territoriales, que operacionalizan la tarea de transverzalizar el enfoque de género
en las políticas públicas, tanto en su diseño como en su implementación. En: ONU Mujeres. (2016). Los Mecanismos Nacionales y
Regionales de las Mujeres en América Latina y el Caribe Hispano. Oficina regional de ONU Mujeres para las Américas y el Caribe,
Panamá.
Este Modelo de Abordaje Integral de la Violencia contra las Mujeres y Niñas, se desarrolla desde
SernamEG, con el objetivo de prevenir, erradicar y sancionar la violencia contra las mujeres y con el
sentido estratégico de promover las autonomías de las mismas y una vida libre de violencias para todas
las mujeres sin distinción, mediante la implementación de dos Programas:
1. Programa Prevención de Violencia contra las Mujeres, y
2. Programa Atención, Protección y Reparación (APR) de Violencia contra las Mujeres.
Para poder comprender mayormente los elementos que desarrollaremos en este módulo, creemos
necesario comenzar por explicar ambos Programas de la Unidad VCM de SernamEG, ya que más
adelante veremos las derivaciones que se deben realizar a los distintos dispositivos de atención, según
la detección de cada caso15.
1. PROGRAMAS IMPLEMENTADOS POR LA UNIDAD EN VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES,
SERNAMEG
1.1. Programa de Prevención de Violencia contra las Mujeres
Desde el 2015, se incorporó a la oferta programática de la Unidad en Violencia contra las Mujeres de
SernamEG la primera versión del Programa de Formación de Monitoras y Monitores Comunitarios de
Prevención de Violencia contra las Mujeres. La iniciativa se enmarcó en el Plan Nacional de Acción
contra la Violencia hacia las Mujeres 2014-2018. La novedad de este programa es que es el primero en
la historia del Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género cuyo objetivo central y principal es la
prevención primaria de la violencia contra las mujeres, por medio de la capacitación de agentes sociales
estratégicos, como miembros de juntas vecinales, dirigentes estudiantiles y sindicales, profesores,
integrantes de organizaciones voluntarias y sociales, profesionales de la salud, entre otros.
Actualmente, el objetivo general del Programa reformulado es “Contribuir a fortalecer el rol preventivo
en materia de prevención en violencia de género en jóvenes hombres, mujeres y personas de
identidades sexuales y de género diversa, de 14 a 29 años y agentes estratégicos que trabajan con
jóvenes”. Además, en el aspecto territorial, el programa está presente en las 16 regiones del país y tiene
cobertura en 206 comunas aproximadamente.
15 Oferta Programática detallada por regiones, la encuentran disponible en el siguiente link: https://www.sernameg.gob.cl/?page_
id=29
El programa cuenta con un micrositio que contiene material de apoyo para las sensibilizaciones y
capacitaciones, y trabaja con una Caja de Herramientas compuesta por una batería de 21 temas
de contenidos, que buscan visibilizar, identificar, cuestionar, reflexionar y erradicar la violencia en
los distintos espacios, contextos y manifestaciones contra todas las mujeres.
1.2. Programa Atención, Protección y Reparación (APR) de Violencia contra las Mujeres
El objetivo general del Programa APR es disminuir el daño psicosocial en mujeres víctimas de
violencia de género, siendo los criterios para el acceso de las mujeres a las atenciones en estos
dispositivos de atención: el nivel de riesgo en que se encuentra la mujer, el tipo de manifestación
de la violencia vivida y las necesidades de atención o ayuda que la mujer requiere. En su conjunto,
los dispositivos de atención constituyen el Sistema Nacional de Respuesta de la Red VCM
SernamEG, siendo una trama fundamental de la respuesta del Estado al fenómeno de la violencia
contra las mujeres.
Para efectos de derivaciones a los dispositivos de atención, cabe mencionar que no existe
proceso de postulación a ninguno de los dispositivos de atención, dado que todas las mujeres que
viven o han vivido una situación de violencia de género en contexto de pareja o ex pareja, trata de
personas y violencia sexual, u hombres que han ejercido violencia de pareja o ex pareja, pueden
acceder a atención. Esta sea por demanda espontánea y/o derivación desde alguna institución de
la red, considerando siempre la voluntad de las personas a participar de la intervención brindada
en los dispositivos. Se destaca que la intervención con hombres que ejercen violencia de pareja
o ex pareja, debe entenderse como una estrategia de SernamEG que refuerza las acciones de
prevención, protección y reparación hacia las mujeres que viven o han vivido violencia de género.
Dada la magnitud del problema, es que el tratamiento de los casos de violencia contra las
mujeres tiene una lógica diferenciada, que responde a la derivación directa, además de
establecer acciones de seguimiento y acompañamiento, las que deben realizarse de manera
rápida y oportuna en la medida en que se detectan las situaciones de violencia que viven las
mujeres.
Los servicios provistos desde este componente se entregan a través de dos modalidades de ejecución
directa: intervención individual y/o grupal, a lo largo de las distintas fases que contempla el flujo de
intervención.
Las mujeres pueden hacer ingreso al dispositivo, únicamente por derivación institucional a través
de alguna de las Policías, a través de Tribunales, o desde el Ministerio Público. Tanto Tribunales como
Ministerio Público cuentan con números telefónicos de contacto tanto de las Casas de Acogida como
de las/os profesionales VCM Regionales de SernamEG.
Asimismo, la derivación puede operar desde algún otro dispositivo SernamEG, lo que será coordinado
a través de la Dirección Regional respectiva, formalizando la solicitud de ingreso que gestione de
forma presencial o telefónica, a través de correo electrónico.
Hay que hacer presente que cada ingreso debe ser previamente evaluado por la Unidad Técnica del
SernamEG Regional, a fin de garantizar que las mujeres cumplan con el perfil de ingreso al dispositivo.
En este caso, el dispositivo del SernamEG que efectúe la derivación active la red de protección (policías,
URAVIT, Tribunales o Fiscalía) y si la evaluación arroja como resultado riesgo alto o vital, se debe
coordinar con la Dirección Regional, para efectuar el ingreso de la mujer.
Requisitos de participación: El componente considera la participación de mujeres chilenas,
extranjeras, de origen afrodescendiente y/o pueblos originarios, mayores de 18 años afectadas por
violencia de pareja o expareja, así también las mujeres extranjeras que se encuentren residiendo o en
tránsito por el territorio chileno y sean vulneradas por una o más manifestaciones de violencia.
Para el ingreso de mujeres al dispositivo residencial Casa de Acogida, se debe evaluar por parte del
equipo técnico, que las mujeres que ingresan no presenten alguna de las siguientes situaciones:
• Consumo problemático de drogas o alcohol que no se encuentre en tratamiento. Como en
muchas ocasiones esta situación no se devela al ingreso de la mujer a la Casa y es URAVIT quien
efectúa la derivación para el ingreso de la mujer, debe coordinarse con dicha institución a fin de
garantizar su cooperación con el propósito de apoyar el respectivo tratamiento o derivación a red
especializada en el tratamiento de consumo problemático de drogas.
• Sintomatología asociada a algún trastorno de salud mental grave, siempre y cuando implique
una amenaza/riesgo para su integridad física y/o psicológica o la de otras personas al interior
de la Casa, requiriendo de atención especializada. Como en muchas ocasiones esta situación
no se devela al ingreso de la mujer a la Casa y sea URAVIT quien efectúa la derivación para el
Una vez que las mujeres han ingresado a la Casa de Acogida para mujeres vulneradas por la
trata y/o migrantes en situación de explotación, una de las primeras medidas de protección
a realizar por el equipo, será co-construir con la mujer su Plan de Seguridad, el que debe
ser transversal a todas las etapas de su intervención, y permitirá aportar en la protección
requerida mientras se encuentra en el dispositivo; el objetivo de este es identificar la
existencia de factores, estrategias y recursos protectores, basadas en los factores de riesgo
identificados, para tomar decisiones respecto a su protección, apoyos de seguridad y medidas
de protección y cautelares disponibles.
Evaluación Técnica Interdisciplinaria: En esta subfase se evaluará la pertinencia del ingreso
de las mujeres a la Casa en función de la gravedad de la violencia19 y el riesgo, que debe ser
grave/vital20, despejando si corresponde o no a un caso de trata de personas en cualquiera de
las formas y/o de mujeres migrantes en situación de explotación.
El ingreso como tal se configura a las dos semanas posteriores al pre-ingreso, a través de
la firma de “Manual de Convivencia” y encuadre psicosocial sobre el funcionamiento de la
Casa. Asimismo, se espera en este período identificar necesidades urgentes y profundizar la
evaluación del nivel de riesgo psicosocial de las mujeres y sus hijos/as.
Una vez ingresada se interviene a la mujer y sus hijos/as en el ámbito psicológico, social y
jurídico, ya sea en modalidad individual o grupal, esta última de carácter socioeducativo.
Requisitos de participación: de acuerdo a los criterios de ingreso a la Casa de Acogida para
mujeres vulneradas por la trata de personas y/o migrantes en situación de explotación:
1. Ser mujer
2. Mayor de 18 años de edad
3. Haber vivido violencia producto del delito de trata o ser una migrante en situación de
explotación.
21 La Casa de Acogida es concebida como espacio de residencia voluntario, por tanto, bajo ninguna circunstancia el equipo o
cualquier otra institución podrá obligar a una mujer a ingresar o permanecer en ella.
22 Trastornos psicóticos, Trastorno antisocial, Trastorno o rasgo de tipo psicopático, Trastorno bipolar no compensado y Trastorno de
la personalidad límite.
23 En este caso, se deberá evaluar con la Dirección Regional de SernamEG la posibilidad de ingreso a otra residencia, según
antecedentes anteriores.
24 Cualquier excepción debe ser autorizada por la Dirección Regional de SernamEG, previa consulta técnica al Nivel Nacional. Se ha
de tener presente que los criterios antes mencionados, aluden a: Riesgo Grave o Vital y condición de vulnerabilidad grave producto
de la situación de trata o explotación.
Población Objetivo: Mujeres de 18 años y más, que viven o hayan vivido una o más de las
siguientes manifestaciones/expresiones de violencia de género:
Modelo de Atención: El Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género, cuenta con el Servicio
de Atención Telefónica y Telemática especializada en violencia contra las mujeres (SATT), con el
objetivo fundamental de poner a disposición de toda la ciudadanía a nivel nacional, especialmente
a mujeres que se encuentren en riesgo por vivir o haber vivido algún tipo de violencia, un medio de
comunicación idóneo y gratuito para recibir orientación e información de la red institucional tanto
pública como privada en el afrontamiento de la violencia de género contra las mujeres.
25 Informe mundial sobre la violencia y la salud: resumen. Washington, D.C., Organización Panamericana de la Salud, Oficina Regional
para las Américas de la Organización Mundial de la Salud, 2002.
26 A. Morrison y M. B. Orlando. “Impacto Socio Económico de la Violencia Doméstica contra la Mujer en Chile y Nicaragua”. BID,
Washington, DC, 1997
29 Hoy en día no existe la reparación propiamente, como categoría de prestación comotal en Salud. Si existe la atención psicológica
a víctimas en el programa de salud mental de atención primaria y de especialidad cuando hay alguna enfermedad mental asociada.
30 Plan de Gobierno Apruebo dignidad 2022-2026, página 206.
31 Sernam-Domos (2010). Estimación del Costo de la Violencia Contra las Mujeres en Chile en el Contexto Intrafamiliar.
32 Minsal, (2020). Orientaciones para el abordaje de la violencia de género detectadas en atenciones de salud, en el contexto de la
pandemia por COVID-19. Subsecretaría de Salud Pública.
Este documento fue elaborado por Minsal a través de la Oficina de Género y contó con la colaboración de la Unidad Violencia Contra
las Mujeres del SernamEG y de la División de Atención a Víctimas y Testigos (DAVT) del Ministerio Público, y fue luego distribuido al
Ministerio y a las Secretarías Regionales Ministeriales del Minsal vía Oficio Número 2734 de fecha 13.07.2020.
33 Ver factores de Riesgo asociados a la perpetración de la violencia contra la mujer de la OPS (Anexo A) y los Principios
orientadores de la estrategia y plan de acción sobre el fortalecimiento del sistema de salud para abordar la violencia contra
la mujer (Anexo B), disponible en: https://www.paho.org/chi/index.php?option=com_content&view=article&id=683:estrate-
gia-y-plan-de-accia3n-sobre-violencia-contra-la-mujer&Itemid=1005
A continuación, se presenta una descripción de los principales elementos a considerar para la detección
de violencia de género contra las mujeres, los que podrían ser pesquisados por funcionarios y funcionarias
públicos/as en las distintas atenciones por afecciones de salud.
1.3. ELEMENTOS PARA LA DETECCIÓN DE VIOLENCIA EN EL POLOLEO
Se ha mencionado en los módulos anteriores, que los estereotipos de género obedecen a desigualdades
de poder entre hombre y mujeres, y se aprenden desde edades tempranas a través de la socialización de
género. Esto incide en la instalación de los primeros patrones socioculturales, que establecen y desarrollan
los y las jóvenes, en las primeras relaciones sexo-afectivas. Gran parte de estos estereotipos y roles se
estructuran a partir del modelo de amor romántico, constituyendo un factor de riesgo para la presentación
de situaciones de violencia de género en esas primeras relaciones de pololeo, y que pueden convertirse en
la antesala de futuras relaciones de pareja donde se acepta y/o naturaliza la ocurrencia de la violencia de
género.
En 2016 se dio a conocer un sondeo de opinión elaborado por el Instituto Nacional de la Juventud34, que
aunque no mide victimización por esta manifestación de violencia de género, constituye un aporte para
comprender el contexto de la violencia en el pololeo en nuestra sociedad.
Si bien sabemos que la principal causa de violencia contra las mujeres y las niñas son los estereotipos de
género binario, entre las principales “causas de violencia en el pololeo” que señalan las y los jóvenes que
respondieron este sondeo, el 49% mencionó los celos, el 40% el machismo y el 37% el alcohol y drogas.
Respecto de la percepción de acciones que se consideran violentas, un 92% considera nada aceptable35
presionar a la pareja a tener relaciones sexuales, y un 28% considera nada aceptable que uno de los/as
dos participantes de la relación cambie su comportamiento para evitar peleas. En la misma línea, un 86%
considera nada aceptable revisar el celular de la pareja a escondidas, y un 69% considera nada aceptable
dar las contraseñas del e-mail o Facebook como prueba de amor y confianza. Asimismo, el 64% de las
y los encuestados se manifiestan de acuerdo con que las Redes Sociales fomentan o promueven alguna
forma de violencia en la pareja, mencionando además los programas de farándula (54%) y las teleseries
(50%) como programas que incitan la violencia. El 78% señala su acuerdo con que si una persona presencia
violencia entre sus padres, es muy probable que ejerza violencia en sus relaciones de pareja. Por último, el
87% se manifiesta en desacuerdo con que en ocasiones las mujeres tienen actitudes que justifican actos de
violencia por parte de su pareja.
34 INJUV (2016). Sondeo N°4 Violencia en el Pololeo, Jóvenes entre 15 y 29 años. Santiago: Instituto Nacional de la Juventud.
35 Nada aceptable es la categoría de respuesta que utiliza el sondeo referido.
36 Amores Tempranos, violencia en los pololeos en adolescentes y jóvenes en Chile, Fundación Instituto de la mujer, 2019.
Disponible en: https://insmujer.cl/wp-content/uploads/2019/05/Amores-Tempranos_VF-1.pdf
37 Esta información es parte de la Caja de Herramientas del Programa Prevención de Violencia contra las Mujeres 2021-2022.
38 En Diciembre del 2020, se promulga la Ley que crea el Servicio Nacional de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia,
que llevará como nombre Mejor Niñez y reemplazará al Servicio Nacional de Menores (Sename) en materia de protección. Más
información en: https://www.bcn.cl/leyfacil/recurso/servicio-nacional-de-proteccion-especializada-a-la-ninez-y-adolescencia.
39 Ministerio de Salud. (2016). Norma General Técnica para Atención a Víctimas de Violencia Sexual (Primera edición.)
Disponible, http://www.repositoriodigital.minsal.cl/handle/2015/825
40 Complementariamente, se sugiere realizar una derivación asistida, esto es derivar formalmente a la mujer a la institución que
pueda brindarle apoyo en su caso y no sólo referenciarla entregándole los datos para que ella acuda; este tipo de acompañamiento
puede hacer una diferencia en el acercamiento que tenga la mujer con dicha institución, para realizar el proceso de intervención que
requiera.
41 Para mayor información ver Norma General Técnica para la Atención de Víctimas de Violencia Sexual (2016). Santiago, Chile.
Disponible en: : http://www.repositoriodigital.minsal.cl/handle/2015/825
Por otra parte, el acoso sexual callejero se entiende como “prácticas de connotación sexual
ejercidas por una persona desconocida, en espacios públicos como la calle, el transporte o
espacios semi públicos (mall, universidad, plazas, etc.); que suelen generar malestar en la víctima.
Estas acciones son unidireccionales, es decir, no son consentidas por la víctima y quien acosa
no tiene interés en entablar una comunicación real con la persona agredida” 47 . Según los datos
disponibles por el Observatorio Contra el Acoso Callejero (OCAC Chile), el acoso sexual callejero
ocurre aproximadamente a partir de los 12 años, a lo largo de la vida de las mujeres, y de manera
46 MINEDUC (2016). PROTOCOLOS CONTRA EL ACOSO SEXUAL EN EDUCACIÓN SUPERIOR. Sugerencias para su elaboración. Santiago:
Unidad de Equidad de Género, Subsecretaría de Educación, Ministerio de Educación. Disponible en: https://www.mineduc.cl/
wp-content/uploads/sites/19/2017/09/Procolos-contra-el-acoso-sexual-en-ESUP.pdf
47 Observatorio Contra el Acoso Callejero (OCAC Chile). Disponible en: https://www.ocac.cl/que-es/
Finalmente, recordar que el acoso sexual es una dimensión de la violencia sexual y, que en
ocasiones los hechos de acoso sexual son constitutivos de otros delitos como amenazas, abuso
sexual, violación por ejemplo. Por ello, en esos ámbitos donde no se encuentre regulado el
acoso sexual legal y penalmente, por ejemplo en el ámbito educativo, o donde está regulado
legalmente, pero no penalmente, como en lo laboral, igualmente, para el caso que los hechos
configuren otro delito, debe activarse la vía judicial penal. Es importante, también señalar sin
perjuicios de las sanciones administrativas por estos actos, es relevante se consideren en los
Protocolos de las instituciones, orientaciones sobre cómo reconocer estas situaciones y cómo
orientar la denuncia, para el caso en que los hechos además sean constitutivos de un delito:
ya que, además de la sanción administrativa, como lo puede ser la suspensión en el cargo,
desvinculación, multa u otra, podría existir una sanción penal.
52 https://www.ocac.cl/wp-content/uploads/2020/07/Informe-encuesta-OCAC-2020.-Radiograf%C3%ADa-del-acoso-se-
xual-en-Chile.pdf
56 Colectiva contra la Violencia Ginecológica y Obstétrica (2020). Primera encuesta nacional de violencia ginecológica y obstétrica.
Síntesis de resultados. Valparaíso, Chile. Disponible en: https://lajugueramagazine.cl/wp-content/uploads/2020/09/Resultados-Gin-
Obs-2019-2020_julio.pdf
57 Disponible en: https://issuu.com/corporacionmiles/docs/cuarto_informe?fbclid=IwAR28Lv7aZ2WCpNFch3l9aMuA3A04k9F-
9qZLLyBuWh0_GFuIkiusF3cL4z3s
58 SernamEG. (2019). Guía de Trabajo para personas facilitadoras. Programa mujer, sexualidad y maternidad.
59 Cuadro elaborado a partir de los textos de Bellón, S. (2015). La violencia obstétrica desde los aportes de la crítica feminista y la
biopolítica y Violencia Obstétrica. Un Enfoque de Derechos Humanos (2015). D.F: Grupo de Información en Reproducción Elegida.
60 Este dispositivo de atención es parte de la red SernamEG, entrega apoyo psicosocial y jurídico.
61 Disponible en: http://tratadepersonas.subinterior.gov.cl/media/2015/07/MITP-Protocolo-Intersectorial-de-Atenci%-
C3%B3n-de-V%C3%ADctimas-de-Trata-de-Personas.pdf
62 Cuadro elaborado en base a Manual sobre la Investigación del Delito de Trata de Personas, Guía de Autoaprendizaje (UNODC,
2010) y Manual para la detección de víctimas de Trata orientado a autoridades migratorias (OIM, 2011).
63 Nueva Ley de Femicidio Nº 21.212/2020, artículo 390 Nº 4 del Código Penal. Disponible en: https://www.bcn.cl/leychile/
navegar?idNorma=1143040
64 Romero Lozada, A. et al. (2016). Violencia basada en género. Marco conceptual para las políticas públicas y la Acción del
Estado. Ministerio de la Mujer y poblaciones Vulnerables. Disponible en: https://www.mimp.gob.pe/files/direcciones/dgcvg/
mimp-marco-conceptual-violencia-basada-en-genero.pdf
• Por otro lado, también puede ejercer la acción civil 65 de no discriminación arbitraria,
contemplada en la Ley N° 20.609, que Establece Medidas contra la Discriminación,
(denominada Ley Zamudio).
• El/la afectado/a frente a una acción u omisión discriminatoria puede acudir al Tribunal de
Letras o Civil correspondiente al domicilio del/la afectado/a o del o la responsable de la
acción u omisión discriminatoria, dentro del plazo de 90 días corridos desde la ocurrencia de
acción u omisión discriminatoria, o desde que el/la afectado/a tomó conocimiento de ella. El
plazo máximo para ejercer esta acción es de 1 año desde la ocurrencia de la acción u omisión
discriminatoria o desde que el/la afectado/a tomó conocimiento de ella.
• El objetivo de esta acción es dejar sin efecto el acto discriminatorio, o que éste no se reitere
o que se realice el acto omitido, así como asegurar la protección del/la afectada/o. Además,
el Tribunal puede aplicar una sanción pecuniaria consistente en multa de 5 a 50 UTM, a
beneficio fiscal, que deberán pagar las personas directamente responsables del acto u
omisión discriminatoria.
• ● Si el acto discriminatorio además importó un delito, se podrán hacer las denuncias
correspondientes en Carabineros de Chile, PDI, Fiscalía y Tribunales Penales.
65 Acción civil refiere a la capacidad que se otorga a través de esta Ley, de alguna acción para hacer valer el derecho por la no
discriminación.
66 OMS. Tema de salud., Violencia contra los niños. Maltrato Infantil disponible en: https://www.who.int/health-topics/
violence-against-children#tab=tab_2
67 Decreto 830 que promulga convención sobre los derechos del niño; disponible en: https://www.bcn.cl/leychile/navegar?idNorma=15824
68 Defensoría de la Niñez. Informe Anual 2020, Derechos humanos de Niños, Niñas y Adolescentes en chile. Disponible en: https://
www.defensorianinez.cl/wp-content/uploads/2019/03/OG20.pdf
Existen diferentes tipos de maltrato infantil, que pueden distinguirse de la siguiente manera:
Maltrato físico: Toda agresión que puede o no tener como resultado una lesión física, producto
de un castigo único o repetido, con magnitudes y características variables.
Maltrato emocional o psicológico: Se trata del hostigamiento verbal habitual por medio de
insultos, críticas, descréditos, ridiculizaciones, así como la indiferencia y el rechazo explícito
o implícito. También incluye el aislamiento, aterrorizar a los/as niños/as, ignorarles y el estar
expuestos/as a violencia entre los/as adultos/as.
Negligencia o Abandono: Existe negligencia cuando los/as responsables del cuidado y de la
educación de los/las niños, niñas y adolescentes no atienden o no satisfacen sus necesidades
básicas, sean éstas físicas, sociales, psicológicas y/o intelectuales.
Abuso sexual: Cualquier clase de práctica sexual con un/a niño, niña o adolescente, por parte
de un/a familiar o cuidador/a. Puede abarcar desde la exhibición de genitales hasta la violación.
Se ha definido también como toda forma de actividad sexual entre un/a adulto/a y un/a niño,
niña o adolescente. Se incluye en este maltrato la explotación sexual comercial de niños, niñas y
adolescentes.
Explotación sexual Infantil: Recordar que en el caso de los/as niños, niñas y adolescentes, no
procede hablar de trabajo sexual o comercio sexual, ya que en caso de ellos, siempre que se
obtenga de ellos un acto sexual a cambio de un pago u otra prestación, corresponde hablar de
“explotación sexual infantil” y es un acto ilegal y sancionado penalmente y donde tanto la figura
del proxeneta, como del “cliente” son sancionadas penalmente69. Además, los/as NNA pueden ser
víctimas de trata de personas con fines de explotación sexual, laboral u otra.
72 Cuadro tomado del texto de Larraín, Soledad y Valdebenito, Lorena (2007). El maltrato deja huella. Manual para la detección y
orientación de la Violencia Intrafamiliar”. Santiago: UNICEF, Programa Puente, FOSIS.
73 En la Ley Nº 20.427 (del 2010), se modificó la Ley 20.066 de Violencia Intrafamiliar, para incluir a los/as adultos/as mayores como
víctimas de violencia; estableciendo que también habrá violencia intrafamiliar cuando se maltrate a un/a adulto/a mayor que se
encuentre bajo el cuidado o dependencia de cualquiera de los/as integrantes del grupo familiar, sin importar su parentesco o grado
de parentesco. Disponible en: https://www.bcn.cl/leychile/navegar?idNorma=1011723
74 Identificación y Tipificación del Maltrato al Adulto Mayor, en Chile (SENAMA, 2005, p. 3).
75 Éstos se han construido en base a los siguientes documentos: El PROTOCOLO DE INTERVENCIÓN PARA LA ATENCIÓN, ORIENTACIÓN
Y DERIVACIÓN DE PERSONAS VÍCTIMAS DE VIOLENCIA FAMILIAR”, de la Provincia de Misiones en Argentina, con fondos de la UNICEF
(2008); el MANUAL DE APOYO TÉCNICO PARA LAS ACCIONES DE SALUD EN VIOLENCIA INTRAFAMILIAR (MINSAL, 2010); Identificación
y Tipificación del Maltrato al Adulto Mayor, en Chile (SENAMA, 2005); y la Guía de Prevención del Maltrato a las Personas Mayores
(SENAMA, 2012).
76 OMS (2002). Informe sobre la Salud en el Mundo. Disponible en: http://www.who.int/whr/2002/en/whr02_es.pdf?ua=1
SESIÓN 14
En este contexto, son comunes en el relato de la mujer frases como las siguientes:
• “Estaba caminando por mi casa, me resbalé y me pegué” (mujer con fracturas múltiples).
• “¿Estas marcas de mordedura?...Pero es que a mi perro le gusta morderme” (mujer con
cicatrices de mordeduras en las manos y que no corresponden a un animal).
• “Las quemaduras en el brazo fueron de tonta porque se me cayó el agua hirviendo” o “La
plancha se volvió loca y se me cayó encima del brazo, no sé cómo” (mujer con quemaduras en
distintas partes del cuerpo).
• “Es que no me acuerdo bien cómo me pegué…pero me debo haber pegado con algo
caminando” (mujer con hematomas en las piernas).
• “A mí siempre me salen moretones, tengo una enfermedad me dijo el doctor…que yo era una
persona que siempre le iban a salir moretones” (mujer con hematoma en el ojo).
• “Los síntomas de aborto deben ser porque mi familia no me deja tranquila, no me deja que yo
viva mi vida” (mujer que fue golpeada durante el embarazo).
La OMS no recomienda la detección universal de violencia a todas las mujeres que acuden a centros de
salud, sino más bien, que los/as funcionarios/as de salud activen los protocolos correspondientes cuando
se sospeche de manera fundada que la consulta en salud de las mujeres, guarda relación con lesiones o
trastornos que podrían estar relacionados con la violencia.79
79 OPS. (2016). Atención de salud para las mujeres que han sufrido violencia de pareja o violencia sexual. Manual clínico. Disponible
en: https://www.paho.org/es/documentos/manual-clinico-atencion-salud-para-mujeres-que-han-sufrido-violencia-pareja-violencia
Fuente: Cuadro extraído de OPS. (2016). Atención de salud para las mujeres que han sufrido violencia de pareja o violencia sexual. Manual clínico.
80 OPS. (2016). Atención de salud para las mujeres que han sufrido violencia de pareja o violencia sexual.
Antes de seguir, te invitamos a ver el siguiente video, que da cuenta de las formas en que se
manifiesta la violencia de pareja en la vida cotidiana.
81 Diseñado por la Unidad en Violencia contra la Mujer del Servicio Nacional de la Mujer (SERNAM, 2013).
82 Diseñado por el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH, 2014). Disponible en:
https://bibliotecadigital.indh.cl/handle/123456789/637
83 Mayor información en: https://www.ipn.mx/genero/
84 Imágenes tomadas de Capacitación Intersectorial en la Pauta Unificada de Evaluación Inicial de
Riesgo en Mujeres Víctimas de Violencia Intrafamiliar en Contexto de Pareja y Protocolo de Protección
Inmediata a Salas de Familia de Carabineros de Chile (2016) y complementada desde el Modelo de
Duluth y la Rueda del Poder.
3.1. FACTORES DE RIESGO EN MUJERES QUE VIVEN O HAN VIVIDO VIOLENCIA DE GÉNERO EN CONTEXTO DE PAREJA Y EX PAREJA86
86 Centro de Prensa OMS (2017) Violencia Contra la Mujer. Violencia de pareja y violencia sexual contra la mujer. Disponible en http://www.who.int/mediacentre/factsheets/fs239/es/.
3.2. FACTORES DE RIESGO PRESENTES EN QUIEN EJERCE VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES
EN CONTEXTO DE PAREJA O EX PAREJA.
Para entender el problema de la violencia contra las mujeres, es importante también conocer
factores de riesgo asociado a las personas que ejercen violencia en contexto de pareja, que
como en el caso de las mujeres que son o han sido víctimas de violencia de pareja, consideran
elementos del contexto familiar, social, cultural, económico y comunitario, además de
características individuales y relacionales87, tal como hemos visto hasta ahora.
87 Centro de Prensa OMS (2017). Violencia Contra la Mujer. Violencia de pareja y violencia sexual contra la mujer. Disponible en:
http://www.who.int/mediacentre/factsheets/fs239/es/
SESIÓN 15
1. EVALUACIÓN DE RIESGO
La evaluación de riesgo constituye un desafío esencial para los/as funcionarios/as públicos/as
que interactúan con la mujer que vive o ha vivido violencia de pareja o ex pareja.
Su objetivo principal es evaluar la situación de riesgo en que se encuentra la mujer que
solicita apoyo, identificando si se está frente a una situación de riesgo grave o vital, y se
pueda en consecuencia, actuar con la celeridad requerida.
88 Morales, Nancy y Gallo, Nancy (2014). PROTOCOLO DE VALORACIÓN DEL RIESGO DE VIOLENCIA MORTAL CONTRA MUJERES
POR PARTE DE SU PAREJA O EXPAREJA. Medellín: Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses. Disponible en:
https://mujeresantioquia.gov.co/sites/default/files/valoracion_del_riesgo.pdf
89 Álvarez, Mariángeles; Sánchez, Ana María y Bojó, Pepa (2016). Manual de Atención Psicológica a Víctimas de Maltrato Machista.
País Vasco: Colegio Oficial de la Psicología de Gipuzkoa. Disponible en: https://www.cop.es/GT/Manual.pdf
http://onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1111/j.1553-2712.2009.00457.x/full
Fuente: Cuadro extraído de OPS. (2016). Atención de salud para las mujeres que han sufrido violencia de pareja o
violencia sexual. Manual clínico.
Además, se deben considerar otros factores de riesgo asociados a la persona que ejerce violencia,
como el consumo de alcohol y/o drogas, la presencia de patologías de salud mental, intentos de
suicidio, condenas previas por la Ley 20.066 de VIF, el que haya incurrido en desacato de medidas
cautelares, o si presenta antecedentes delictivos relacionados con atentados contra otras
personas.
90 Esta iniciativa obedece a un trabajo mancomunado de articulación interinstitucional, que se insertó en el Plan Nacional de
Acción contra la Violencia hacia las Mujeres 2014-2018, y su operativa sigue vigente.
91 La empatía es la capacidad de experimentar los estados emocionales de otros/as, pudiendo comprender los procesos mentales
de otras personas como también pudiendo experimentar los sentimientos que éstas expresan. En Moya-Albiol, L.; Herrero, N. y Bernal,
C. (2010). Bases neuronales de la empatía. Revista de Neurología, 50 (02):89-100. Disponible en: https://www.researchgate.net/
publication/331115679_Bases_neuronales_de_la_empatia
92 CESC – U de Chile (2011). Guía de Asistencia Integrada Violencia de Género en Contexto Doméstico. Santiago: Centro de
Estudios en Seguridad Ciudadana Instituto de Asuntos Públicos de la Universidad de Chile. Disponible en: https://www.cesc.uchile.cl/
publicaciones/manual_violencia_genero.pdf
Sugerencias para la correcta realización de atención de acogida, y recomendaciones para la entrega de orientación
e información para mujeres que viven violencia por razones género
93 Se sugiere revisar recomendaciones de la OMS para funcionarios/as de salud respecto al papel que ocupan en el abordaje de las necesidades psicosociales y de salud de las mujeres que han sufrido
violencia. Disponible en: https://iris.paho.org/bitstream/123456789/34408/1/CSP29-INF-3-e.pdf
94 Tabla adaptada a partir de la Guía de Asistencia Integrada Violencia de Género en Contexto Doméstico (CESC – U de Chile, 2011).
Sugerencias para la correcta realización de atención de acogida, y recomendaciones para la entrega de orientación
e información para mujeres que viven violencia por razones género
La entrevista de acogida debe ser realizada por un/a solo/a profesional, para evitar la
emergencia de distintos discursos en la intervención y que la persona afectada se sienta
“intimidada o desconfiada”. Es importante crear una atmósfera de confianza y respeto que
permita a la víctima sentirse en condiciones de contar lo que le ha ocurrido
(Arón, et. al. 2001)95.
95 Arón et. al. (2001). Manual para la atención de mujeres víctimas de violencia intrafamiliar. Santiago: Galdoc.
96 Para mayor información y ejemplos de preguntas se sugiere revisar MINSAL (2010). Manual de Apoyo Técnico para las Acciones
de Salud en Violencia Intrafamiliar. Santiago: Unidad de Salud Mental – Ministerio de Salud. Disponible en: https://cesfamsi.files.
wordpress.com/2010/05/matpasvi.pdf
97 Definición tomada del video “El fenómeno de la victimización secundaria en el abuso sexual infantil” del equipo de psicólogos/
as Fortalecer Chile, disponible en: http://www.youtube.com/watch?v=NtZaK-Jo8Qs; y de la División de Atención a Víctimas y Testigos,
Fiscalía Nacional. Orientaciones para la Prevención de la Victimización secundaria y la Protección de Identidad de las víctimas y
Testigos con medios de Comunicación Social. Santiago de Chile, 2005.
No se debe perder de vista que la primera acogida o primer apoyo es una intervención en sí
misma, por lo tanto su éxito, permitirá generar un mayor grado de adherencia en la intervención
posterior. Así también, será una instancia facilitadora para pesquisar otros factores de riesgo que
pudiesen emerger en el relato de la mujer.
A continuación se indican ejemplos de consignas adecuadas para guiar la conversación con una
mujer que solicita ayuda, así como ejemplos de consignas inadecuadas, que deben evitarse al
momento de entrevistarse con la mujer:
5.2. ENCUADRAR LA DENUNCIA COMO DERECHO Y COMO POSIBILIDAD PARA LAS MUJERES
La denuncia es un derecho de la mujer que vive o ha vivido violencia, constituyendo una acción
de protección para sí misma. En esta línea, es fundamental promover que las mujeres se perciban
a sí mismas como personas con derecho a recibir justicia, atención y reparación y consideren la
denuncia como una herramienta que el Estado provee a su favor para recibir justicia y protección.
Junto con lo anterior, también se debe tener en cuenta que muchas mujeres temen hacer uso de
este derecho, ya sea porque:
• Temen por su seguridad o la de sus hijos/as.
• Sienten vergüenza.
• Minimizan la violencia que viven.
• No han recibido suficiente acogida por parte de su entorno cercano.
• No han recibido una respuesta favorable de los/as funcionarios/as del sistema de
protección del Estado.
Por lo anterior, es importante tener presente que no es recomendable presionar a una mujer que
busca apoyo para que realice una denuncia frente a los hechos de violencia que vive. No obstante
ello, en todos los casos se debe indicar que es un derecho, y proporcionar toda la información
disponible para orientarla en caso que desee realizarla.
98 Según Ley 19.696 que establece el Código Procesal Penal, en su Artículo 175. Disponible en: https://www.bcn.cl/leychile/navegar?idNorma=176595
99 Hope Center (2010). Un Plan de Seguridad para la mujer maltratada [En Línea]. Faribault: Alianza Latina Nacional para Erradicar la
Violencia Doméstica. Disponible en: http://hopecentermn.org/wp-content/uploads/2010/12/Safety-Plan-Spanish.pdf
Fuente: Cuadro extraído de OPS. (2016). Manual clínico Atención de salud para las mujeres que han sufrido
violencia de pareja o violencia sexual.
100 Medina Johnson, Diana Dulf, Alexandra Sidor. Manual de formación RESPONSE para la detección de la violencia de género en los servicios de salud para la mujer; Proyecto RESPONSE, 2017
Cuadro de elaboración propia de Unidad VCM, SernamEG, en base a Manual Clínico (OPS,
2016.)
PROGRAMAS E INSTITUCIONES
Es fundamental para derivar oportuna y adecuadamente, que los/as distintos/as profesionales y/
o técnicos/as se interioricen en el mapa de recursos y oportunidades, es decir, en los programas
o instituciones que colaboran y pueden prestar ayuda en el territorio donde trabajan o vive la
mujer y según la pertinencia y especialización de cada institución o área dentro de ella.
El siguiente cuadro resume las instituciones del Estado que intervienen en la atención de
víctimas de violencia contra las mujeres a los cuales es posible recurrir.
101 Alamo, M. Acirón, R. Iriondo, N. (2020). Guía de Salud Mental con Perspectiva de Género. (1° edición.). Atelsam
102 OPS. (2013). Hoja Informativa: Comprender y abordar la violencia contra las mujeres. Violencia infligida por la pareja. Edición en
español.
Los factores sociales y culturales afectan a las mujeres de una manera distinta y en este caso, a partir de las consecuencias en su salud mental por
la violencia vivida, muchas veces estigmatizadas por presentar una enfermedad del área de la psiquiatría.
Por lo tanto, es necesario reconocer las creencias, aprendizajes y subjetividad de las mujeres para comprender las propias explicaciones y
estrategias que ha empleado para sobrevivir a las situaciones de violencia.
Son muchas más mujeres las que consultan por patologías en salud mental que los hombres ,y en específico, respecto a la violencia son
estigmatizadas y se les brinda poca credibilidad cuando sufren o dan luces de vivir algún tipo de violencia o abuso, más aún en la esfera sexual;
sabemos que muchas de ellas demoran mucho tiempo en develar situaciones como estas y se enfrentan con su propio estigma, asumiendo como
propios prejuicios sociales respecto a la veracidad de haber sufrido violencia sexual, desembocando en una percepción negativa de sí mismas y
haciéndose merecedoras de dicha discriminación103.
Algunas consideraciones al momento de enfrentarse con un relato de violencia104:
103 Alamo, M. Acirón, R. Iriondo, N. (2020). Guía de Salud Mental con Perspectiva de Género. (1° edición.). Atelsam
104 Op. Cit.
Escuchar de manera atenta no es fácil y debemos estar alertas a los bloqueos que pueden
presentarse en la conversación de parte del entrevistador/a, si pasamos a realizar alguna de
estas acciones: ordenar, dirigir o imponer; advertir o amenazar; dar consejos, hacer sugerencias
o proporcionar soluciones; persuadir con lógica, argumentar o sermonear; moralizar, predicar o
decir a las mujeres lo que “deberían” hacer; discrepar, juzgar, criticar o culpar; acordar, aprobar o
alabar; humillar, ridiculizar o calificar; interpretar o analizar; tranquilizar, simpatizar o consolar;
interrogar o sondear; revocar, distraer, complacer o cambiar de tema105.
105 Medina Johnson, Diana Dulf, Alexandra Sidor. Manual de formación RESPONSE para la detección de la violencia de género en los
servicios de salud para la mujer; Proyecto RESPONSE, 2017
El estudio del año 2020, señala que el abordaje de la política pública en materia de VCM se
posiciona desde una concepción jurídica, circunscribiendo la oferta estatal en VCM a los delitos
sancionados por la legislación vigente, los cuales comprenden la Violencia Intrafamiliar, el delito
de Femicidio y la Violencia Sexual. En este sentido, los servicios estatales en violencia de género
contra las mujeres se orientan principalmente a iniciar y continuar procesos judiciales, lo cual
se ha transformado en un obstáculo para el abordaje de la VCM con un enfoque integral por
parte del Estado. Esto último, teniendo en consideración la subrepresentación del número de
denuncias respecto del total de mujeres que viven o han vivido violencia de género, además de la
invisibilización de otros tipos y expresiones de VGCM que desbordan los cuerpos legales vigentes.
En lo que respecta a la decisión sobre romper el silencio en las mujeres sobrevivientes de VCM
y buscar ayuda en la oferta estatal, se torna fundamental la existencia de redes afectivas que
instan a la mujer a pedir ayuda. Entre los factores mayormente mencionados en el relato de las
mujeres se encuentran:
1. La existencia de hijos/as, hijastros/as o nietos/as
2. Consejo de familiares
3. Sus propias reflexiones y deseos
4. Apoyo psicológico o psiquiátrico que buscó por su cuenta
5. Campañas del MMyEG, o SernamEG
6. Consejo de amigas o amigos
Respecto del tiempo que las sobrevivientes participantes del estudio demoraron en tomar la
decisión de denunciar, en un 53,3% fue de más de 5 años, en un 26,7% fue entre 1 a 5 años, y en
un 20,0% fue de menos de un año.
Las y los funcionarios públicos que formaron parte del estudio, señalan que las mujeres
sobrevivientes que ingresan a la RCI son, en su generalidad, mujeres que realizan labores de
cuidado no remunerado o en situación de vulnerabilidad económica, residentes de zonas urbanas,
que demoraron años en tomar la decisión de romper el silencio. En menor medida, atienden
a mujeres ligadas al trabajo sexual, que han sufrido Trata de personas, que presentan alguna
situación de discapacidad, o que pertenecen a Pueblos Indígenas.
Entre los principales factores obstaculizan la continuidad de la RCI en las mujeres sobrevivientes
de VCM, encontramos:
• Malas prácticas de acogida en primera instancia por parte de funcionarios/as de
Carabineros: Naturalización de la violencia, deslegitimación de los relatos, que los casos no se
ajusten a las descripciones legales de la violencia contra la mujer (no tener marcas físicas, no
haber sido agredida por un familiar, entre otras).
“Porque yo una vez le pregunté a un Carabinero, porque le dije que yo sufría maltrato y todas
esas cosas, y prácticamente me dijo que tenía que tener moretones y que si no estaban [Las
marcas físicas de la violencia] no era violencia. Y eso fue también lo que me desanimó a mí,
porque dije ¿Qué tengo que hacer, tener heridas en todo el cuerpo para que sí me crean?
porque si les digo no me van a creer” . Relato Sobreviviente, Estudio RCI año 2020.
• Alta demanda en la red de servicios (listas de espera) especialmente en dispositivos
SernamEG. “Si antes era malo, ahora es un colapso total. De veinte casos que tenían a la
semana por profesional [SernamEG], ahora han llegado a 180, 150 casos por profesional y que
además los tienen que ver por teléfono; y que además las mujeres no tienen teléfono porque
el hombre les rompió los teléfonos. Pero además de todo eso, es imposible, matemáticamente
no te da el tiempo, entonces ¿Qué están haciendo? No pueden, no pueden las profesionales”.
Relato Especialista, Estudio RCI año 2020.
• Ausencia de información sobre los pasos a seguir, especialmente de parte de tribunales a
las sobrevivientes. “Como que no te dicen en qué va el juicio, no sabes cuándo van a volver,
qué fue lo que finalmente pasó, en qué condiciones está esta persona [El agresor], si se
mantienen o no las medidas de protección, como el alejamiento, hay muy poca claridad
respecto de eso”. Relato Sobreviviente, Estudio RCI año 2020.
• Obligación legal de contar con representación de una abogada/o ante tribunales y aportar
pruebas de habitualidad en causas VIF. “El proceso [Judicial] es lento, cuando uno denuncia
debemos esperar, si no tengo dinero para un abogado el Estado me deja sola, asistiendo a mis
audiencias sola y eso causa que la otra parte sea favorecida” . Relato Sobreviviente, Estudio
RCI año 2020.
Por otro lado, los hallazgos del estudio también profundizan en la falta de capacitación y
sensibilización en VCM de los funcionarios que participan en la RCI, lo cual se refleja en la falta de
especialización en la materia, una alta rotación de trabajadoras/es, y la falta de estandarización y
protocolización para la gestión de casos de VCM.
Sumado a lo anterior, el estudio hace hincapié en que la oferta estatal en VCM no fomenta la
detección temprana de casos, no existiendo un instrumento interinstitucional que permita
establecer alertas tempranas, ni la institucionalización de acciones de seguimiento efectivo de
casos. Ello se torna especialmente relevante, considerando que el establecimiento de alertas
tempranas podría incidir significativamente en las situaciones de VCM que viven las mujeres.
En base a los hallazgos expuestos, entre las principales recomendaciones del Estudio RCI 2020 se
encuentran:
• Avanzar hacia un sistema interinstitucional de alerta temprana en materia de violencia de
género.
• Incorporar en la red de servicios estatales la participación activa y sistemática de las
sobrevivientes, tanto en el diseño de programas como en su ejecución.
• Desarrollar un sistema permanente de medición de calidad de los servicios estatales
ofertados en materia de violencia de género que incluya la percepción de las beneficiarias.
• Garantizar la disponibilidad presupuestaria para el óptimo funcionamiento de la red de
servicios estatales en violencia de género, considerando la flexibilidad como elemento
central.
• Integrar a los hombres en la estrategia de prevención de la violencia de género contra la
mujer.
• Mejorar las condiciones de trabajo de las y los profesionales que se desempeñan en la red de
servicios estatales de violencia de género.
Las distintas ediciones de la Guía de Apoyo SOY MIGRANTE, TENGO DERECHOS (Consulado General
del Perú en Santiago, OIM y la Fundación Instituto de la Mujer, 2018). Disponible: https://chile.iom.
int/es/gu%C3%ADa-soy-migrante-tengo-derechos
Acceso a la Justicia
De esta forma, dependiendo de la situación de cada mujer, sus necesidades de atención y articulación
intersectorial implicarán, entre otros:
• Atención en Salud Física (constatación de lesiones) y sexológicas, tratamientos de profilaxis y de
anticoncepción de emergencia
• Peritaje sexológico forense, psicológicos o físicos, según y cuando correspondan.
• Apoyo Psicosocial (en los ámbitos de violencia, daño y riesgo)
• Atención Psiquiátrica (trastornos y medicación)
• Acceso a Recursos Sociales y redes de apoyo comunitarias o red de servicios sociales y otros (para
lograr, por ejemplo, autonomía económica)
• Reparación Especializada, especialmente en lo psicológico y social.
Por otro lado, el concepto de supraviviente deviene del de viviente , propuesto por el psiquiatra y
terapeuta familiar Jorge Barudy (1999) donde uno de los objetivos finales de un proceso de terapia
reparatoria en violencia sexual sería visualizar la experiencia de vulneración no como un hecho aislado
e individual, sino como parte de un continuo de violencia, la cual es estructural. Esta comprensión
permite que las personas que han sido violentadas sexualmente, especialmente mujeres, comiencen a
tomar un rol activo en su comunidad como agentes de cambio, promoviendo la develación y denuncia
de estos delitos, de tal forma de incentivar y apoyar a otras mujeres a romper el silenciamiento
característico de la violencia sexual.
Esto lo vemos hoy en Chile y en el mundo, con los miles de testimonios de mujeres que vivieron acoso
sexual en sus universidades o con el movimiento mundial #MeToo , en castellano #YoTambién , que ha
implicado su contraparte de apoyo #YoSíTeCreo especialmente después del vergonzoso veredicto del
caso español La Manada.
No obstante, todas las mujeres que han vivido violencia por razones de género (en
los distintos espacios y contextos), en el entendido que han sufrido violencia sobre
sus cuerpos, ya sea de tipo física, psicológica, económica/patrimonial y también
simbólica, son víctimas de violencia sexual, en el sentido político, sobre o en
control o desprecio de sus cuerpos; y por ende, también víctimas/sobrevivientes/
supravivientes de ésta.
A continuación te invitamos a ver el siguiente video, que ejemplifica la experiencia en procesos
reparatorios con mujeres, y el paso de éstas de víctimas/sobrevivientes/supravivientes de otros
países del continente.
108 Realizado y adaptado en base al cuadro que informa las respuestas en la red de asistencia a víctimas de violencia presentado
en la Guía de Asistencia Integrada Violencia de Género en Contexto Doméstico (CESC – U de Chile, 2011, p. 75).
PDI
X X X X
CAVI/UVI
CAVD
X X X
CASA DE ACOGIDA(SERNAMEG)
X X
CVS *(SERNAMEG)
X X X
CESFAM
X X X X
COSAM
X X X X
SALA DE URGENCIA
X X X X
CARABINEROS
X X
MEJOR NIÑEZ
X X X X
TRIBUNALES DE FAMILIA
TRIBUNALES PENALES
TRIBUNALES CIVILES LABORALES/LETRAS
SENAMA
X X X X
PDI
CAVI/UVI
CAVD
X
CASA DE ACOGIDA(SERNAMEG)
X X X X
CVS *(SERNAMEG)
X X
CESFAM
X X X
COSAM
X X X
SALA DE URGENCIA
X X
CARABINEROS
MEJOR NIÑEZ
X X X X X
TRIBUNALES PENALES
X
CAVAS (PDI)
X X
PDI
CAVI/UVI
CAVD
X X X
CASA DE ACOGIDA(SERNAMEG)
X X
CVS *(SERNAMEG)
X X X
CESFAM
COSAM
SALA DE URGENCIA
CARABINEROS
MEJOR NIÑEZ
X X X X
TRIBUNALES PENALES
X
SENAMA
*Centros de Atención y Reparación para Mujeres Víctimas/Sobrevivientes de Violencia Sexual, SernamEG
Recuerda que frente a la violencia contra las mujeres nuestra actitud activa,
empática y acogedora, independiente de la función que desempeñemos,
favorece los procesos de atención, protección, reparación, acceso a la
justicia y prevención de la violencia, y disminuye la impunidad de quienes
ejercen violencia y el riesgo de las mujeres, niñas y adolescentes vulneradas
en el derecho a una vida libre de violencia.
SESIÓN 16
109 Freudemberger, H. (1974). Staff Burnout. Journal of Social Issues 30(1), 159-166.
- Álvarez, E. y Fernández, L. (1991). El Síndrome de Burnout o el desgaste profesional (I): Revisión de estudios. Revista de la
Asociación Española de Neuropsiquiatría (39), 257-265.
110 Arón, Ana María y Llanos, María Teresa (2004). Cuidar a los que cuidan: Desgaste profesional y cuidado de los equipos que
trabajan con violencia. Sistemas Familiares (1-2), año 20, 5 – 15. Disponible en: http://www.buentrato.cl/pdf/est_inv/desgas/dpa_
aron2.pdf
111 Arón, Ana María y Llanos, María Teresa (2004). Cuidar a los que cuidan: Desgaste profesional y cuidado de los equipos que
trabajan con violencia. Sistemas Familiares (1-2), año 20, 5 – 15. Disponible en: http://www.buentrato.cl/pdf/est_inv/desgas/dpa_
aron2.pdf
Por otra parte, se ha de considerar que en muchas ocasiones, las mujeres que han vivido violencia,
cualquiera sea esta, suelen adoptar una conducta de adherencia dependiente y demandante
hacia quienes tienen a su cargo su atención médica, psicológica, legal o social. Por lo tanto,
quienes trabajan con dicho perfil de población se vuelven más vulnerables dada su tarea en
apoyo y acompañamiento constante.
Cabe mencionar, además, que estas temáticas impactan también a los equipos de trabajo,
erosionándolos con graves consecuencias para la supervivencia de los equipos, para sus
integrantes y por supuesto, para las consultantes o usuarias de estos.
Al no contar con modelos explicativos sobre estos fenómenos, la tendencia habitual de los
equipos es atribuir los problemas a déficits personales, tanto propios como de los demás
integrantes del grupo de profesionales, lo que genera dinámicas muy destructivas al interior
de los equipos. Poder reflexionar acerca de lo que les ocurre a quienes trabajan con víctimas y
agresores, permite tomar distancia de estos fenómenos, darles nombre y por lo tanto, abrir la
posibilidad de ponerlos en perspectiva, y desarrollar estrategias que permitan retomar el control
sobre lo que ocurre con los equipos y sus integrantes (Arón y Llanos, 2004). Cuidar a los que
cuidan: desgaste profesional y cuidado de los equipos que trabajan con violencia).
Los funcionarios/as de salud se enfrentan de manera constante con historias de violencia
hacia las mujeres, muchas de ellas vivenciadas como experiencias traumáticas y transmitidas
con esa intensidad, generando en los/as profesionales que escuchan altos niveles de estrés,
por la demanda de ayuda y asistencia y por verse expuestos/as de manera constante a estas
experiencias angustiantes, dolorosas, o incluso por escuchar malas experiencias anteriores al
haber solicitado ayuda.
La exposición constante a aquello, sin tener todos los conocimientos, herramientas, o un equipo
y red de soporte para el abordaje de estas situaciones deja indefensos/as a los/as profesionales, y
sin una forma adecuada de responder. Es por esto que instancias de capacitación y generación de
conocimiento, como lo es este mismo Curso, es ya una herramienta en sí misma para los equipos
de salud que trabajan con temáticas de violencia contra las mujeres.
112 La expresión trauma vicario se refiere a la transformación, en sentido negativo, que se da en el mundo interior del/de la profesional a resultas de su exposición reiterada al dolor y al sufrimiento de
las víctimas supervivientes. (McCann y Perlman,1990) en AIDOS (2019).
113 AIDOS - Italian Association for Women in Development. (2019). Violencia sexual y de género, Guía de recursos para formadores y formadoras. (1°edición.)
114 Op. Cit.
115 Maslach, Christina (1982). Burnout: The cost of caring. Englewoods Cliffs. New Jersey: Prentice - Hall.
116 Respecto a esta fase, es importante no confundirla con el cuadro psiquiátrico del mismo nombre.
Implica acciones de responsabilidad individual de cada persona dentro del equipo. Especialistas en esta problemática
recomiendan algunos métodos para promoverlo, tales como:
• Implicarse en actividades externas al trabajo no vinculadas con violencia de género contra la mujer.
• Intensificar y revalorizar las relaciones personales y familiares.
• Planificar y desarrollar actividades de ocio y tiempo libre.
• Generar y respetar espacios personales que resultan placenteros y satisfactorios (“hacer lo que me gusta”)
Autocuidado o
cuidado personal • Tener tiempo y espacio para el juego y la recreación.
• No saltarse períodos de vacaciones.
• Desarrollar actividad física y al aire libre.
• Realizar exámenes integrales de salud (física, sexual, dental, etc.).
• No contaminar los espacios del entorno personal y familiar con las historias de violencia.
• Realizar una psicoterapia focalizada en el problema para prevenir la cronificación del síndrome y trabajar la propia
biografía en relación a la temática de atención.
Considera el aporte de todo el equipo para propiciar un clima de buen trato, cuidado, sentido del humor,
Mutuo cuidado
compañerismo y solidaridad, generando distintos espacios colaborativos de contención, acogida, escucha y apoyo
dentro del equipo
recíproco.
Refiere a acciones de responsabilidad institucional, que deben orientarse en base a los siguientes 3 aspectos:
1. Procesar y elaborar las tensiones propias de la atención de personas que están involucradas en situaciones de
violencia (tales como supervisiones, espacios en las reuniones para la descompresión emocional del equipo en
relación a la tarea de atención; así como para expresar y autoexplorar las propias resonancias en relación a los
Cuidado de efectos de las historias de violencia escuchadas).
equipos
2. Procesar y elaborar las tensiones propias e inherentes de los conflictos laborales que se dan en los vínculos entre
los y las profesionales y técnicos/as del equipo, y en sus dinámicas de interacción.
3. Procesar las tensiones propias del espacio institucional, las condiciones laborales en término de contrato,
protección social y diversas demandas hacia la institución y viceversa.
117 Al respecto, cursos on line gratuitos como los dictados en formato Abiertos por la Universidad de Chile (tales como el de
“Interculturalidad, migración y racismos”) son altamente recomendados; así como los gestionados con actores/as locales con
conocimientos interculturales e interseccionales, ya sea de la sociedad civil, centros de estudios o academia más pertinente
localmente.
119 Naciones Unidas (2006). Estudio a fondo sobre todas las formas de violencia contra la mujer. Informe del Secretario General,
Asamblea General, A/61/122/Add.1, 6 de julio. Disponible en: https://www.acnur.org/fileadmin/Documentos/BDL/2016/10742.pdf
Dada la importancia de las medidas en el ámbito de la prevención de la violencia contra las mujeres, debido a su impacto, que aunque a largo
plazo, sustentan un cambio profundo y sociocultural, a continuación se recuerda las principales modalidades de la prevención (vistas en Módulo 2,
al ser parte fundamental del Modelo de Abordaje Integral de la Violencia contra las Mujeres y las Niñas) y los principios orientadores de buenas
prácticas en la materia121.
120 El siguiente cuadro se ha realizado en base a Naciones Unidas (2006, pp. 112-117).
121 Los siguientes párrafos han sido tomados del documento: CEPAL (2015). “Módulo N°7: Uso de los resultados de la medición de violencia contra las mujeres en normas y políticas públicas para
erradicarla”. En Curso VCM: La Medición de la Violencia contra las Mujeres en América Latina y el Caribe.
Como vimos en el Módulo 2, las estrategias de prevención incluyen modificar patrones socioculturales, económicos
y políticos para prevenir la violencia; crear contextos institucionales seguros y modificar las prácticas organizaciona-
les a nivel público y privado; conformar redes de actores/as sociales y político-institucionales, con la participación de
jóvenes, hombres y niños; fomentar la movilización comunitaria; identificar los problemas asociados a la violencia contra
las mujeres (alcohol, drogas, porte de armas y otros); instaurar programas de intervención temprana dirigidos a niños y
niñas; poner en marcha iniciativas vinculadas con el programa de Ciudades y Comunidades Seguras; establecer entornos
educacionales seguros; implementar iniciativas que promuevan la “crianza positiva y no violenta”; y producir información
específica para el monitoreo, evaluación y retroalimentación de las políticas en violencia contra las mujeres y las niñas
(CEPAL, 2014, p. 62).
122
122 CEPAL (2014). Informe anual 2013-2014. El enfrentamiento de la violencia contra las mujeres en América Latina y el Caribe . Santiago de Chile: Observatorio de Igualdad de Género de América
Latina y el Caribe (OIG) y Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL). Disponible en: https://www.cepal.org/es/publicaciones/observatorio-de-igualdad-de-genero-de-america-lati-
na-y-el-caribe-oig-informe-anual-1
Como se desprende de los párrafos anteriores, ello no es posible sin una coordinación
intersectorial eficaz entre los distintos ministerios, servicios y organismos responsables de
las políticas públicas, programas y proyectos psicosocioeducativos y jurídicos en contra de la
violencia contra las mujeres y las niñas en nuestro país, así como de la producción de información
específica para su monitoreo y evaluación.
Desde el Programa de Prevención en Violencia contra las Mujeres, de la Unidad VCM de
SernamEG, los esfuerzos están enfocados en la población juvenil, ya que es en este grupo etario
que se establecen y refuerzan los estereotipos y roles de género, que justifican y perpetúan la
violencia contra las mujeres.
Para ello, el abordaje que se realiza es desde metodologías participativas para instalar la
reflexión, el cuestionamiento y, finalmente, el cambio socio-cultural. A partir de una Caja
de Herramientas que contiene 21 temáticas distintas sobre violencia contra las mujeres, se
implementan charlas y talleres de capacitación, en los cuales se abordan las causas de cada
violencia, sus definiciones, manifestaciones e intersecciones y se incentiva la reflexión. Por
ejemplo, para abordar la violencia en contexto de pareja, además de los tipos y manifestacio-
nes, se revisa el amor romántico como una de las principales causas de esta violencia contra
las mujeres. Desmitificando distintos mitos mediante los que se impone y reproduce el amor
romántico, marcando las pautas en la mayoría de las relaciones sexo-afectivas, tales como:
“el amor todo lo puede”, “el amor es encontrar tu media naranja”, “quien que te completa”, “tu
alma gemela”, “el amor es únicamente heterosexual, su único fin es el matrimonio y formar una
familia con hijos/as”, “el amor duele”, “sin amor no hay pasión”, “el amor es para siempre”, entre
otros. Todos estos mitos que sostienen las relaciones de pareja, hacen que las personas sigamos
creyendo que debemos mantenernos en relaciones dañinas y violentas, permitiendo distintos
tipos de violencias.
De esta manera, el Programa de Prevención en VCM, apunta a que las personas puedan visibilizar
e identificar estas causas, comprendan su importancia y puedan cambiarlas, para transformar
la sociedad patriarcal. Para lograr este objetivo, las personas que participan de las capacitacio-
nes del Programa, deben realizar una actividad de réplica, que consiste en un producto personal
e innovador como por ejemplo: un afiche, una obra de teatro, reel en Instagram, un tik tok, una
infografía, una publicación en Facebook, etc. Lo importante es que desde lo aprendido en la
capacitación, pueda elaborar una creación que llegue a su comunidad (colegio, universidad,
123 ONU Mujeres. (2020) Noticias: Violencia contra las mujeres; la pandemia en la sombra.
D isponible en: https://www.unwomen.org/es/news/in-focus/in-focus-gender-equality-in-covid-19-response/
violence-against-women-during-covid-19?gclid=Cj0KCQjwssyJBhDXARIsAK98ITR9xfX4DrjWvseJm0SA1YDwKEHYdxJfpQsl2IgVn-
Ljc8HTPTIVm4zcaAjIdEALw
cuarentena, salvo aquellos que por su naturaleza hace imposible su ejecución. Además, su
Servicio de Atención Telefónico y Telemático (SATT), ha ampliado su canal Fono 1455 para
orientación e información en forma telefónica y sus opciones silenciosas, cuando la mujer no
puede hablar, a través de un chatweb y WhatsApp.
La Unidad Violencia Contra las Mujeres del Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género
en conjunto con el Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género, han elaborado un Plan de
Contingencia a nivel nacional, el cual ha tenido como objetivo velar por la continuidad de la
atención, protección y reparación de mujeres víctimas de violencia, como asimismo proteger
a los/as funcionarios/as que operan dichos servicios e implementar una fuerte difusión y
comunicación de todos los canales de ayuda con el objeto de llegar a todas las mujeres de
nuestro país que puedan o estén es riesgo de vivir violencia.
Estas medidas son:
Para acceder al Servicio se debe discar desde cualquier teléfono de manera gratuita el número
1455, de uso exclusivo de SernamEG.
Como respuesta institucional frente a la Crisis Sanitaria por Covid-19 en esta línea de atención
se puede mencionar lo siguiente:
i. Reforzamiento y aumento de los/as profesionales que atienden la línea #1455 para turnos
diurnos y nocturnos.
ii. Se realiza coordinación y supervisión para asegurar la atención y orientación 24/7 de los/as
ciudadanos/as que se comunican al 1455.
iii. Se mantiene activa comunicación sobre los protocolos establecidos ante la contingencia,
frente a las distintas situaciones que van ocurriendo.
iv. Actualización diaria de la oferta programática del Servicio Nacional de la Mujer y la
Equidad de Género respecto a modalidad de atención, números de contacto y emergencias,
ante eventuales derivaciones de llamados.
II. Servicio de Atención Whatsapp de Orientación en VCM.
Se trata de un servicio de atención telemática, a través de la aplicación WhatsApp, de manera de
cubrir la necesidad de orientación a la comunidad respecto de situaciones de violencia contra la
mujer, vividas ya sea de manera personal, o bien por una tercera persona. Funciona a través del
fono +569 9700 7000. Cualquier persona pueda acceder a orientación e información respecto
a situaciones de violencia contra las mujeres en el contexto de pareja o ex pareja, violencia
sexual y mujeres vulneradas por el delito de trata de personas, siendo siempre atendida/o por
un/a Técnico/a o Profesional de atención capacitado/a especialmente en materias de violencia
de género, de acuerdo a los scripts desarrollados por SernamEG y bajo su dirección y supervisión
técnica. Esta línea, contempla un sistema de traducción que permite la comunicación con
personas que hablan lenguas originarias o idiomas extranjeros.
Por otro lado, corresponde a una iniciativa para llegar a más mujeres en contexto de la situación
de confinamiento, ya que opera a través de una red social y también les permite comunicarse de
una manera silenciosa. Al igual que el Fono #1455, funciona los 365 días del año, las 24 horas del
día y los 7 días de la semana como un canal de comunicación para orientación e información y
fue lanzado con fecha 28 de abril de 2020.
Gestión de plataformas y canales informativos del Servicio Nacional de la Mujer (no son los
únicos)
• Difusión en plataformas digitales del Servicio (Twitter/Fcbk/ Instagram/Página Web)
Se realizó a través de piezas gráficas creadas para la contingencia, insistiendo:
1. Llamado al Fono Orientación 1455, con atención 24/7 y con refuerzo especial durante
estos días de emergencia sanitaria.
2. Incentivando visitar el sitio web para obtener información sobre la Oferta Programática
del Servicio.
3. Usar las redes sociales de SernamEG como vías de comunicación para las mujeres.
4. Recalcar la forma de atención de las OIRS de las 16 Direcciones Regionales.
5. Mensajes por el Buen Trato Familiar en Cuarentena.
La difusión de estás láminas de información para la ciudadanía comenzó el 18 de marzo 2020, en las redes nacionales de SernamEG (Fcbk/ Twitter/
Instagram) y en las redes sociales regionales del Servicio (16 Facebook/ 15 Twitter), alcanzando a esa fecha más de 40 mil visualizaciones.
Para cada una de estas temáticas se crearon gráficas con tips y recomendaciones, las que
comenzaron a ser difundidas a partir del 25 de marzo 2020, alcanzando más de 150 mil
visualizaciones.
Finalmente, destacar que los Programas de la Unidad en Violencia contra las Mujeres de
SernamEG continuaron ejecutándose de manera continua y que desde nuestro Servicio se han
desplegado todos los esfuerzos para poder seguir implementando nuevas modalidades y canales
de atención, para poder llegar con nuestra oferta programática a todas las mujeres de nuestro
país.