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CIUDADANÍA Y REFLEXIÓN ÉTICA

EXAMEN FINAL- ENSAYO

2022

Actualmente, al ser promulgada la ley 31494 el día 16 de junio del presente año, concediendo

el reconocimiento de legal del Comités de autodefensa y el desarrollo rural (CAD). La presente

organización de comités fue iniciada entre el año 1982, con la finalidad de combatir las

infiltraciones contrabandistas, y narcotraficantes que ocurrieron en Vraem. El consentimiento

de esta dicha ley establecida se añade en el Sistema Nacional de Seguridad Ciudadana. Cabe

destacar, que los comités, como las rondas campesinas, jugaron un papel importante en la lucha

contra Sendero Luminoso y el MRTA. Y siguen teniendo un papel importante para la seguridad

cuidadana. Sin embargo, al adquirir armas a grupos civiles para realizar sus funciones de lucha

contra la delincuencia y el crimen organizado superaría a los efectivos policiales e inclusive

que mafias del narcotráfico puedan donarles las armas y que los quieran usar como escudos. A

los que nos planteamos la siguiente interrogante. Ante ello, surge la siguiente interrogante,

¿estás de acuerdo con el reconocimiento legal de los comités de autodefensa y desarrollo rural?

Estamos en desacuerdo sobre la aprobación de la ley sobre los comités de autodefensa y

desarrollo rural. A continuación, defenderemos nuestra postura con los argumentos, Estado de

derecho, democracia y sus funciones, y concepto de ciudadanía en los siguientes párrafos.


En primer lugar, no consideramos adecuado la aceptación de la ley sobre los comités de

autodefensa y desarrollo rural, debido a que relaciona la no procreación de un Estado de

derecho, el cual se debe basar en el principio de legitimidad de los derechos de los ciudadanos.

Primeramente, la aprobación de este proyecto constituye un desaire a los grupos del

campesinado que de acuerdo a la constitución, el Estado tiene la prerrogativa de resguardar por

la seguridad social, según los autores Fernández y Zambrano(2010) afirman que “El sistema de

normas y leyes que rige al Estado, y que tiene como piedra angular a los derechos

fundamentales y su respeto irrestricto, define un determinado tipo de Estado de derecho; aquel

que se funda en la dignidad humana, reflejada en el funcionamiento de los derechos

fundamentales. (p. 244). En síntesis, el principio de Estado de derecho debe establecer un orden

basado en la ley y que, además debe ser combatible con el principio de los derechos

fundamentales. Adicionalmente, podemos hacer un énfasis en este caso a la ausencia del Estado

de derecho, ellos deben asumir la responsabilidad y protección de los derechos de estos pueblos

que están expuestos a las actividades ilegales garantizando el respeto de su integridad y

salvaguardando sus vidas. Por otro lado, la tercera capacidad que cumple el Estado de Derecho

según Fernández y Zambrano (2010), señala que “Es de regular la vida de las personas que

viven en ese territorio a partir de una serie de normas que permiten mantener el orden social.

Son dos parámetros de actuación estatal como es el de la obligación (deberes) y el otro, el de

las posibilidades de acción (derechos).” (p.225). Por lo expuesto, una de las funciones que debe

ejecutar el Estado es de acuerdo a la ley establecida es fomentar el bienestar social. Asimismo,

al reconocer esta ley va en contra de la constitucionalidad del país, con ello se estaría abriendo

paso a la violencia y desencadenando una serie de acciones que van contra los derechos del

ciudadano.
En segundo lugar, no estamos de acuerdo con el reconocimiento de la ley sobre los comités de

autodefensa y desarrollo rural, puesto que relaciona democracia y sus funciones al ignorar

totalmente la voz de los demás pueblos originarios que no se les ha brindado un derecho a

consulta. Relacionado a ello, la democracia es imprencideible en toda organización

sociocultural según el autor Linares (2017) menciona que “las personas discuten con pasión

sobre la justicia en diversas dimensiones, y no se ponen de acuerdo. Pese a todo, la sociedad

necesita tomar en cada caso una decisión colectiva vinculante, que vaya investida de autoridad

y legitimidad.” (p.3). En definitiva, las direcciones que realiza una organización determinada

deben estar en favor de la mayoría y ser plenamente consultadas. En esa misma línea, la

incorporación del paralelismo de los comités de autodefensa con la pretensión de estar

armamentados profundiza una defensa de intereses privados que termina vulnerando más aun la

integridad de los pueblos indígenas y comunidades campesinas causando conflictividad. Con

respecto, a las funciones de la democracia según Linares (2017) explica que “la democracia

representativa contemporánea, un sistema de gobierno en virtud del cual, también se nos dice,

todos los ciudadanos adultos tienen derecho, a participar en pie de igualdad, en la elección de

representantes políticos, en elecciones que son periódicas, competitivas, transparentes, libres, e

igualitarias (una persona, un voto).” (p.3). En ese sentido, ninguna persona puede permanecer

ajena a la problemática social en la que se encuentra, todos los ciudadanos deben ser participe

de la toma de decisiones. Agregando a lo anterior, los roles que enmarcan las comunidades

campesinas, comunidades nativas y rondas campesinas alteran la autonomía y libre

determinación de los derechos territoriales, y el respeto por los derechos culturales de los

demás.

En tercer lugar, consideramos en total desacuerdo la conformidad de la ley sobre las

comunidades de autodefensa y desarrollo rural, ya que asocia el concepto de ciudadanía al no


reflejarse en el pueblo indígena un respaldo por entidades de protección evidenciado en riesgo

el bienestar social. Relacionado a ello, frente a esta creciente situación de inseguridad y

agresión a los derechos fundamentales de las Comunidades Campesinas y Nativas, le

corresponde a la Policía Nacional garantizar y restablecer el orden interno, el significado de

ciudadanía según la autora Elizabeth Jelin (1997) indica que “Ser ciudadano y ciudadana

significa, más allá de las prácticas concretas tener, por un lado, el derecho de reclamar y por lo

tanto salir del plano subordinado.” (p.194). Por lo anteriormente citado, la ciudadanía implica

participar en la esfera pública, reclamar sobre las injusticias y al grave peligro que están

expuestos, exigiendo los cambios necesarios para que pueda formar parte en igualdad de

condiciones, sobre los procesos de toma de decisiones públicas. Además, se puede evidenciar

en un nuevo marco legal el funcionamiento de los CAD, reconociéndolos como

organizaciones que buscan apoyar a sus comunidades, cansados de ser víctimas de estos grupos

subversivos estableciendo ellos mismos, medidas que optarán para poder abordar ante esta

situación. Del mismo modo, se puede visualizar una falta de práctica a la ciudadanía por parte

del Estado. Con respecto a ello, según la investigadora Elizabeth Jelin (1997) expone que, “La

ciudadanía plantea la posibilidad de la igualdad social. “(p.193). De acuerdo a lo visto, una de

las características de la ciudadanía define el modo de pertenencia de los individuos a la

comunidad política, y la condición que reconoce el acceso del individuo a un espacio de

derechos compartidos de forma igualitaria por los ciudadanos en la esfera pública. Asimismo,

el Estado debe establecer esa relación entre instancias donde exista fortalecimiento de un

resguardo nacional donde no se genere casos de exclusión y sin que el individuo se sienta

desprotegido por el hecho de encontrarse en zonas más lejanas a lugares donde no se evidencie

protección del Gobierno. Por lo anteriormente mencionado, no consideramos adecuado la

aprobación de la ley sobre los comités de autodefensa y desarrollo rural.


En conclusión, no estamos de acuerdo con el reconocimiento de la ley sobre los comités de

autodefensa y desarrollo rural. En primer término, no se fomenta la procreación de un Estado

de derecho evidenciando acciones de inconstitucionalidad, el cual se debe basar en los derechos

fundamentales de los pueblos indígenas. En segundo término, la indiferencia mostrada por las

autoridades del Estado y las rondas campesinas constituye un apto contra la democracia por

parte de los demás pueblos indígenas, al no ser consultados ante una promulgación de ley son

excluidos sin ser partícipes en las decisiones públicas. Por último, relacionado a las nociones de

ciudadanía no se está ejerciendo este vínculo al manifestarse el riesgo sobre bienestar social en

el que está expuesto el pueblo indígena siendo desamparados por las entidades policiales. Por

consiguiente, recomendamos el derecho de reclamar sobre las injusticias y que el Gobierno

establezca mecanismo en base a nuevas políticas de para los aquellos que garantizan nuestra

seguridad deben ser más exigentes y con ello un mayor fortalecimiento del resguardo policial o

militar en zonas alejadas a la cuidad.

Fernández y Zambrano. (2010). El estado de derecho en la construcción de la ciudadanía.


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%20construccion%20de%20la%20ciudadania%20Fernandez%20Zambrano%20(1).pdf

Jelin, E. (1997). Igualdad y diferencia: dilemas de la ciudadanía de las mujeres en América


Latina. Instituto de Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Berlín.
file:///C:/Users/Lenovo/Downloads/S9_T1_Ciudadan%C3%ADa%20concepto%20(2).pdf

Linares, S. (2017). Democracia participativa epistémica. Editorial Marcial Pons, Ediciones


Jurídicas y Sociales. file:///C:/Users/Lenovo/Downloads/S14T1_Democracia%20concepto
%20e%20institucionalidad.pdf

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