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Ave María Purísima..

Intenciones para la Santa Misa. (Hoja de Anotación)


Entrada:
Hermanos y hermanas: en la vida hay dos clases de frutos: los frutos dulces de
la amistad, la fidelidad, el amor, y los frutos amargos de la indigencia, el
egoísmo, la traición.
Este vigésimo séptimo domingo durante el año la liturgia nos muestra la
decepción de Dios: el espera que demos buenos frutos para corresponder a su
amor y no siempre lo obtiene. Por eso, hoy, Dios nos interpela con acentos de
amor doloridos.
Este mes celebramos el DOMUND (Domingo Mundial de las Misiones) con el
lema: ¨Aquí estoy, envíame¨ la imposibilidad de reunirnos como iglesia para
celebrar la eucaristía nos ha hecho compartir la condición de muchas
comunidades cristianas que no pueden celebrar la misa cada domingo. En este
contexto, la pregunta que Dios hace: “A quien voy a enviar” se renueva y espera
nuestra respuesta generosa y convencida: “Aquí estoy envíame”
Dios continúa buscando a quien enviar al mundo y a cada pueblo para
testimoniar su amor, su salvación del pecado y la muerte, su liberación del mal.
En esta jornada los invitamos a unirse con sus oraciones. Sacrificios y de manera
muy especial con su ofrenda económica, aportando así a la iglesia universal
para que Jesús sea anunciado en todos los rincones de la tierra.
Con espíritu alegre participemos de esta celebración
(Entrada del lema del DOMUND) (3 minutos aprox)
Canto de entrada.
(Entrada del Cura Párroco y sus acompañantes)
Liturgia de la palabra
Lecturas;
Primera lectura; el señor se lamenta porque el pueblo que tanto ama y ha
cuidado no produce buenos frutos.
Salmo; participemos de esta oración aclamando: la viña del Señor es su pueblo.
Segunda lectura: San Pablo describe con amplitud los frutos que se esperan del
cristiano.
Evangelio: los profetas y Jesus nos trajeron el proyecto de Dios. Nos acecha el
riesgo de rechazar ese proyecto.

Oración de los fieles


A cada invocación respondemos: Ñandejara Ore rendu
Por el Santo Padre Francisco y por los Obispos para que animen y acompañen
con paternal cercanía al Pueblo de Dios y este pueda vivir su fe y su compromiso
cristiano a través de comunidades vivas y misioneras. Oremos
Por los misioneros que anuncian el evangelio en tierras lejanas. Para que la
fuerza de Jesús. La oración y solidaridad de los hermanos los acompañen y los
fortalezcan siempre. Oremos
Por los niños y jóvenes para que abran su corazón a la llamada que Dios les
hace, sean generosos en responder y surjan más vocaciones misioneras que
necesita la iglesia y el mundo de hoy. Oremos.
Por todas las personas que sufren las consecuencias de esta pandemia: los que
han perdido sus empleos y salarios, los que no tienen hogar y comida, para que
nuestra oración, acogida y caridad los acompañe. Oremos
Por todos los que participamos en esta eucaristia, para que la invitación a salir
de nosotros mismos por amor de Dios y del prójimo se presente como una
oportunidad para compartir, servir e interceder por quienes lo necesitan:
oremos.
Por nuestros seres queridos Difuntos…(ver lista)… Oremos

Liturgia eucarística.
Ofrenda.
Cristo estuvo presente en su palabra, los estará también en su Eucaristía, por
eso, junto al pan y el vino presentemos los esfuerzos y sacrificios que hacemos
trabajando por el reino.
Comunión
Hermanos, Cristo es la piedra fundamental de nuestra fe. En El buscamos la
fortaleza para producir frutos de amor. Con alegría vayamos a recibir el pan de
vida.

Rito de Conclusión
Queridos amigos: alegres porque el señor nos eligió para dar frutos abundantes
nos retiramos cantando.

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