Universidad Monteávila

Opinión Pública y Comunicación Política

Ensayo Corte III. 28/05/2021
Génesis Álvarez Rojas

Tiranías y dictaduras: enemigos de la democracia venezolana

El país venezolano ha contado con sistemas políticos que

neutralizan el desarrollo de la democracia, siendo estos sistemas
tiránicos y dictatoriales que hacían difícil la libre
participación de los ciudadanos en los asuntos políticos. El
estudio de este tema permitirá concluir que la democracia
venezolana fue inhabilitada temporalmente por poderes
autoritarios.
Este ensayo estudia diferentes momentos de la historia
venezolana en los que un régimen se ha hecho con un poder total no
limitado atentando contra la democracia. Se comenzará con la
tiranía de Juan Vicente Gómez por ser la más larga, la siguiente
sección abordará la dictadura de Marcos Pérez Jiménez y se
finalizará con una breve teoría de que actualmente Venezuela
atraviesa otro sistema dictatorial con el régimen de Nicolás
Maduro.

1. Gomecismo tiránico (1908-1935)

Cipriano Castro, siendo Presidente de Venezuela, viajó a

Alemania para someterse a un tratamiento médico el 24 de noviembre
de 1908, dando paso a un movimiento por hacerse con el poder de la
dirigencia del país. (Franceschi, 2018, p. 13 y 14). Se dejó a
Juan Vicente Gómez como Presidente Encargado, lo que fue una
oportunidad para preparar un Golpe de Estado y obtener el poder
total del Gobierno el 19 de diciembre de este mismo año (Domínguez
& Franceschi, 2010, p. 269).
Este mismo día, Juan Vicente Gómez controló los cuarteles de
Caracas con sus seguidores, arrestando a los funcionarios
castristas, justificando sus actos con un telegrama que decía «la
culebra se mata por la cabeza», interpretándose como un plan
organizado para su asesinato (Domínguez & Franceschi, 2010, p.
269). Manifestaciones de estudiantes, periodistas y grupos
populares saquearon y provocaron incendios en el periódico
castrista «El Constitucional» (Franceschi, 2018, p. 15).
La revista «Alborada» fue desarrollada por un grupo de
jóvenes, entre los que estaba Rómulo Gallegos, en la que
denunciaban la llegada al poder de Juan Vicente Gómez como la
continuación de una tiranía que ya llevaba una década y que sin
saberlo en ese momento, sí se trataba de una más larga y dolorosa
(Franceschi, 2018, p. 23 y 24).
Se legalizó el Golpe de Estado del 19 de diciembre reformando
la Constitución (Domínguez & Franceschi, 2010, p. 270) lo que
reforzó las bases político-legales de este nuevo régimen
gomecista, convirtiendo a Juan Vicente Gómez en Presidente
Provisional hasta que se anunció la reforma que estableció una
reducción de los períodos constitucionales de 6 años a 4 años y el
nombramiento de Gómez como el Presidente Constitucional
(Franceschi, 2018, p. 26 y 27).
Para el segundo período de Gobierno de Juan Vicente Gómez, a
pesar de ser nombrado como Presidente Constitucional, se mantuvo
como «Comandante en Jefe del Ejército Nacional», dejando como
títere a Victorino Márquez Bustillos. Su posición en el ejército
lo fortaleció lo suficiente como para aniquilar la legalidad,
libertad, legitimidad y autonomía (Domínguez & Franceschi, 2010,
p. 272 y 273).
Sofocar la libertad, las iniciativas, las aspiraciones
legítimas, azotar en las cárceles a presos acusados sólo de opinar
y atentar contra la autonomía municipal y la independencia de los
tribunales son algunas de las razones por las que Luciano Mendible
llamó tirano a Juan Vicente Gómez (Mendible, 1941, p. 52 y 53).
Su tercera presidencia que comenzó en 1922 reformó la
Constitución para que sus hermanos ocuparan la Vicepresidencia y
unificando el cargo de «Comandante en Jefe del Ejército Nacional»
con el de Presidente de la República (Domínguez & Franceschi,
2010, p. 282 y 283).
En este período presidencial se desataron protestas en 1928
iniciadas por jóvenes estudiantes contra la tiranía de Juan
Vicente Gómez, siendo encerrados en el Cuartel de El Cuño. Según
Caballero, alguno de estos estudiantes eran Jóvito Villalba y
Rómulo Betancourt (Caballero, 1998, p. 62).
Durante este régimen se censuraba fuertemente la prensa, por
lo que asuntos como estos en los que se apresaban jóvenes que
manifestaban su opinión, era muy poco difundido, así que era poco
sabido (Caballero, 1998, p. 65). Además, en este escenario la
sociedad era «no solamente analfabeta, sino además con miedo de
opinar y hasta de recibir la más simple información» (Caballero,
1998, p. 66).
Las acciones de estos jóvenes durante su revelación ante la
tiranía, es decir, la lucha unificada de la población contra la
pérdida de las capacidades ciudadanas, supondrían una de las bases
de la formación de la democracia más adelante (Caballero, 1998, p.
67). Este principio lo mencionaría Chaplin (1940) en su película
«El Gran Dictador» diciendo: «En nombre de la democracia,
utilicemos ese poder actuando todos unidos. Luchemos por un mundo
nuevo».

2. Perezjimenismo dictatorial (1953-1958)

De acuerdo con el documental « Tiempos de Dictadura, tiempos de

Marcos Pérez Jiménez» de Carlos Oteyza, después de que Rómulo
Gallegos sea electo en las primeras elecciones en las que todos
los venezolanos participaron, la discordia entre los sectores
políticos provocó que el alto mando militar causara el
encarcelamiento y el exilio de Gallegos y su gabinete en 1948
(Oteyza, 2012).
Los militares tomaron el control del país y no hubo ni una
protesta por parte de la población, conformándose la Junta Militar
integrada por los tenientes coroneles Carlos Delgado-Chalbaud,
Luis Felipe Llovera Páez y Marcos Pérez Jiménez (Oteyza, 2012).
Las razones que justificaron el golpe fueron el «sectarismo del
partido Acción Democrática, el ejercicio abusivo del poder y el
incumplimiento de las exigencias que el alto mando militar había
presentado» (Domínguez & Franceschi, 2010, p. 326).
Una fuerte censura de prensa por parte del régimen controló
los medios de comunicación (Oteyza, 2012), suspendiéndose entre
los más destacados el diario El Nacional y Tribuna Popular en 1950
(Domínguez & Franceschi, 2010, p. 328). Además, «las cárceles
comenzaron a repletarse de presos políticos» (Domínguez &
Franceschi, 2010, p. 328) habiendo «más de diez mil presos
políticos, sometidos a torturas y otras arbitrariedades»
(Domínguez & Franceschi, 2010, p. 329).
En el asesinato de Carlos Delgado-Chalbaud se ha señalado que
se vieron implicados «miembros del mismo gobierno» (Domínguez &
Franceschi, 2010, p. 328) y fue luego de esto, según el documental
« Tiempos de Dictadura, tiempos de Marcos Pérez Jiménez» de Carlos
Oteyza, que sucede el fraude electoral en el que Marcos Pérez
Jiménez se hace Presidente Constitucional de la República a pesar
de haber ganado U.R.D y Copei (Oteyza, 2012).
Con la Décima Conferencia Interamericana en 1954 la dictadura
de Marcos Pérez Jiménez logra legitimarse en el campo
internacional, ya que en plena Guerra Fría, se normaliza la
instauración de dictaduras militares con la finalidad de detener
la expansión comunista en la región (Oteyza, 2012). Y es a partir
de este año que se «arremetió contra todo vestigio democrático»
(Domínguez & Franceschi, 2010, p. 332).
A partir de 1954 se arremetió encarcelando a numerosos
venezolanos, asesinando a defensores de la democracia y
estableciendo la Semana de la Patria para controlar al pueblo
según Domínguez y Franceschi (Domínguez & Franceschi, 2010, p.
332), en dicha semana los empleados públicos estaban obligados a
desfilar (Oteyza, 2012).
Aunque a finales del año de 1957 debían llevarse a cabo
elecciones presidenciales, de acuerdo a la Constitución según el
documental « Tiempos de Dictadura, tiempos de Marcos Pérez Jiménez»
de Carlos Oteyza (Oteyza, 2012), Marcos Pérez Jiménez llevó a cabo
un plebiscito «para prolongar su mandato» (Caballero, 1998, p.
133).
Para este momento ya el Partido Comunista traía entre manos un
plan en el que buscaba unificar «todas las fuerzas civiles que se
oponían a la dictadura» (Caballero, 1998, p. 136), aliándose
primeramente con U.R.D para constituir la Junta Patriótica
(Caballero, 1998, p. 136).
En 1957 la Junta Patriótica dio paso a sus acciones cuando
«hizo circular en Caracas más de 200.000 volantes incitando al
pueblo a fortalecer la unidad en la rebelión contra Pérez Jiménez»
(Domínguez & Franceschi, 2010, p. 334), así explotando protestas
por parte de los estudiantes de la UCV, situación que quebró el
terror que había en la sociedad en relación a atreverse a
protestar (Caballero, 1998, p. 137).
Así como transmitió Chaplin (1940) en su película «El Gran
Dictador» diciendo en el discurso final: «En nombre de la
democracia, debemos unirnos todos», los partidos más grandes en el
país, cada uno con proyectos propios, logran acordar un programa
común para tener como resultado el Pacto de Punto Fijo, que de
acuerdo con Caballero será bien visto durante el primer quinquenio
(Caballero, 1998, p. 141).

3. Maduro y la dictadura (2021)

Vivanco en la página de la organización de derechos humanos no

gubernamental Human Rights Watch escribió que « la degradación de
la democracia y los derechos humanos en Venezuela es tal que
Nicolás Maduro ha optado por abandonar incluso su fachada
democrática» (Vivanco, 2017).
De acuerdo al medio de comunicación estadounidense CNN,
Nicolás Maduro Moros se convierte en Vicepresidente del Gobierno
de Hugo Chávez en 2012, Presidente Interino en 2013 tras el
fallecimiento de este último y Presidente Constitucional este
mismo año (CNN, 2019).
Según Vicanco, la prensa está sujeta a un acoso cada vez
mayor, siendo un país que detiene y expulsa periodistas
extranjeros, eliminando cada medio de comunicación independiente.
Vivanco también dice que la represión también se ve sobre los
ciudadanos, ya que son detenidos por manifestar y son numerosas
las denuncias por «todo tipo de abusos, incluyendo golpizas»
(Vivanco, 2017).
Rodríguez en la página del centro de estudios jurídicos y
sociales de Colombia, expresó que politólogos como Adam Przeworski
sostienen que «el componente definitorio de una democracias son
las elecciones libres y limpias, que permitan la alternación en el
poder» (Rodríguez, 2017) y la Asamblea Constituyente del 4 de
agosto de 2017 «no fue definida mediante voto abierto» (Rodríguez,
2017).
Así como Juan Vicente Gómez llenó las cárceles de acusados
sólo de opinar, según Mendible en su libro 30 años de lucha
(Mendible, 1941, p. 52 y 53) y como Marcos Pérez Jiménez llenó las
cárceles de presos políticos hasta más de diez mil (Domínguez &
Franceschi, 2010, p. 328-329), Nicolás Maduro Moros condenó a
Leopoldo López a 14 años de prisión, junto con casi 200 presos
políticos según Vivanco para la página de Human Rights Watch
(Vivanco, 2017).
En Venezuela se han presentado a lo largo de la historia del
país y las señales apuntan a que a día de hoy hay presencia de un
sistema político que frena la democracia, censurando la prensa y
encarcelando a aquellos que se manifiestan para participar en los
asuntos políticos. Juan Vicente Gómez, Marcos Pérez Jiménez y de
acuerdo a las señales Nicolás Maduro Moro han presentado
dictaduras y tiranías en el país, contrarrestando el desarrollo de
una democracia.
 Referencias Bibliográficas

 Caballero. M. (1998). Las crisis de la Venezuela contemporánea

(1903-1992). Venezuela, Caracas.
 Cañas, V. (Productora), Oteyza, C. (Director). (1912). Tiempos
de dictadura, tiempos de Marcos Pérez Jiménez. Venezuela.
 Chaplin, Ch. (Productor), Chaplin, Ch. (Director). (1940). El
Gran Dictador. Estados Unidos.
 CNN. (04/03/2019). La vida y carrera de Nicolás Maduro, en
datos [artículo]. CNN Español.
https://cnnespanol.cnn.com/2019/03/04/la-vida-y-carrera-de-
nicolas-maduro-en-datos/
 Domínguez, F. & Franceschi, N. (2010). Historia General de
Venezuela. Venezuela, Caracas.
 Franceschi, N. (2018). El Gobierno de Juan Vicente Gómez
(1908-1914). Venezuela, Caracas.
 Mendible, L. (1941). 30 años de lucha. Documentos para la vida
pública del Dr. Luciano Mendible 1908-1940. Venezuela,
Caracas.
 Rodríguez, C. (04/08/2017). Por qué Venezuela es una Dictadura
[artículo]. Dejusticia. https://www.dejusticia.org/column/por-
que-venezuela-es-una-dictadura/
 Vivanco, J. (15/05/2017). La Dictadura de Maduro [artículo].
Human Rights Watch. https://www.hrw.org/es/news/2017/05/15/la-
dictadura-de-maduro