TEMA 12. ESTRUCTURA Y COMPOSICIÓN DE LA TIERRA.

1. Origen y formación de las estrellas.

Las gigantescas nubes de hidrógeno y helio que formaban parte del universo temprano comenzaron a girar
sobre sí mismas, formando las primeras galaxias. Éstas se agrupan formando grupos, y éstos a su vez en
cúmulos. Nuestra galaxia (La Vía Láctea) pertenece al Grupo Local, junto con Andrómeda y la Galaxia del
Triángulo. Estas se encuentran dentro del Supercúmulo de Virgo.

2. Origen y formación del Sistema Solar.

Dentro de nuestra galaxia, al igual que en el resto, se encuentran nubes de gas y polvo interestelar
(Nebulosas), cuyo colapso gravitatorio provoca la formación de las estrellas, los objetos más característicos
y difundidos del Universo. Si la masa de la estrella en formación supera un valor mínimo, la compresión
generada por la energía gravitatoria favorecerá que en su núcleo se alcancen varios millones de grados, y
por lo tanto tendrá lugar la fusión del hidrógeno. La estrella, por lo tanto, comenzará a brillar.
Una vez comenzaron las reacciones de fusión nuclear, la nube de gas y polvo que rodeaban al naciente Sol
comenzaron a girar cada vez más rápido, fruto del aumento de temperatura; del mismo modo que un
patinador gira más rápido su se encoge los brazos.
Como consecuencia, se formó un disco aplanado en el que se fueron desgajando los anillos del disco
protoplanetario, quedando el Sol en el centro.

3. Formación del planeta Tierra.

Nuestro planeta se formó por acreción gravitatoria, es decir, por el choque de
partículas cada vez mayores presentes en el disco protoplanetario. Esta acreción
planetesimal continuó durante millones de años.
Como consecuencia del choque de partículas y de la desintegración de elementos radioactivos, gran parte
de nuestro planeta se fundió.
Debido a la fusión del planeta, los elementos más pesados se dirigieron hacia el centro (Fe, Ni y S),
formando el núcleo, quedando los más ligeros en las capas externas de la Tierra (Si, etc.) formando el
manto.
Por último, las capas externas, al estar en contacto con el espacio, se fueron
enfriando, formando la corteza, quedando “almacenado” en el interior
terrestre el calor residual de sus orígenes, el cual es responsable, junto con la
desintegración de elementos radioactivos, del calor presente en el interior
terrestre.

4. Origen de las corrientes convectivas.

Las capas más cercanas al centro de la Tierra quedaron sometidas a presiones muy elevadas (3,6 millones
de atmósferas), lo que condicionó que, pese a encontrarse a temperaturas muy elevadas (6.000 ºC aprox.),
permaneciese en estado sólido.
Sin embargo, a medida que la distancia al centro aumentaba, la presión perdía valor. Como consecuencia,
se generó una segunda capa compuesta de los mismos materiales (Fe, Ni y S), pero en un estado líquido.
Así es como surgió el núcleo interno sólido, rodeado por el núcleo externo líquido.

Debido a las diferencias de temperatura entre las zonas más cercanas al centro y las más alejadas del
núcleo externo líquido, se comenzaron a suceder los siguientes fenómenos:
 Los materiales más profundos, al calentarse y perder densidad, ascienden.
 Los más alejados y en zonas más frías, se vuelven más pesados, descendiendo.
Esto genera las corrientes convectivas, las cuales, como veremos, también se generan siguiendo la misma
explicación en el manto.

5. Origen del campo magnético. Teoría de la dinamo.

Esta teoría parte de varios aspectos clave que se dan en la Tierra:
 Núcleo metálico.
 Movimientos de convección del núcleo externo con
respecto al interno (ambos metálicos).
 Efecto Coriolis, que provoca la formación de corrientes
convectivas helicoidales que se alinean con el eje de
rotación.
Pues bien, la energía cinética generada en las corrientes
convectivas anteriores, aplicada sobre compuestos
ferromagnéticos, genera un campo electromagnético. Se ha
transformado así la energía cinética en energía electromagnética.

Como puede observarse, las líneas del campo magnético

van desde el polo norte magnético hacia el polo sur
magnético.
Además, estas no coinciden con los polos geográficos, por
lo que se puede decir que, en la actualidad, estamos ante
una situación de inversión magnética.
Por último, señalar que el campo magnético en la Tierra
resultó clave en la aparición de la vida, pues dicho campo
actúa como escudo protector frente a las partículas y
radiaciones de alta energía procedentes del sol, como se
muestra en la imagen de la página siguiente.
Sin este escudo, por lo tanto, la vida no habría llegado a aparecer. Por eso, cualquier planeta que esté
geológicamente inactivo (interior frío), no desarrollará vida en su superficie y estará “muerto”
biológicamente hablando.
Dato curioso: las auroras boreales se corresponden con la interacción de las partículas solares de alta
energía con los gases de las capas altas de nuestra atmósfera. Estos fenómenos sólo se pueden observar en
las regiones de la Tierra donde el campo magnético se vuelve más débil, es decir, en los polos.

6. MÉTODOS DE ESTUDIO DEL INTERIOR TERRESTRE.

6.1. Métodos de estudio directos. Se basan en el análisis directo de los materiales extraídos de
la Tierra. Se utilizan para estudiar las zonas más superficiales de ésta, pues son las únicas accesibles
a esta metodología.
a. Análisis y estudio de los materiales extraídos en las minas. Poca profundidad
b. A partir de los materiales expulsados por los volcanes. Información de capas más profundas. Ej.
Kimberlita.
c. Extracción de testigos (columna de materiales) en sondeos realizados por perforación. Pozo de
Kola (12km)
d. Afloramientos, debido a la erosión, de rocas magmáticas y metamórficas de zonas más
profundas.
6.2. Métodos de estudio indirectos. Se basan en la determinación de propiedades del interior
del planeta tierra a partir del estudio y análisis de datos ofrecidos por diferentes técnicas. Gracias a
éstos, hemos conseguido determinar, con bastante fiabilidad, la estructura geológica interna de la
Tierra, así como la dinámica de su interior. Son, pues, los más utilizados.
a. Método magnético. Se basa en el estudio de las características del campo magnético terrestre
mediante magnetómetros. De dichos estudios se ha concluido:
 Los polos geográficos y los magnéticos no coinciden. El polo norte magnético se sitúa cerca
del polo sur geográfico y el polo sur magnético cerca del polo norte geográfico.
 El eje del campo magnético fluctúa.
 Los polos magnéticos se han invertido a lo largo de la historia. Esto se ha comprobado en la
disposición de los basaltos en las dorsales oceánicas. Cuando las rocas salen fundidas, se
orientan siguiendo las líneas del campo magnético, y al solidificarse conservan esta
disposición. Este fenómeno es el paleomagnetismo. Estos estudios constituyeron un punto
de apoyo más a la teoría de la deriva continental.

b. Método eléctrico. Se basan en los cambios de la

conductividad eléctrica de las rocas o de su valor
inversa, la resistividad. Generalmente, se utilizan dos
electrodos situados en la superficie, a una determinada
distancia, para medir la diferencia de potencial. Se
utiliza mucho en proyectos de prospección de aguas
subterráneas, ya que el agua aumenta la conductividad.
 c. Método gravimétrico. Se basan en estudio y las variaciones de la aceleración de la gravedad (g)
en diferentes zonas del planeta. A partir de la Ley de la Gravitación Universal, el valor de g, en un
punto de la Tierra, viene dado por la expresión:

Calibrando los valores esperados con la variable R, a veces estos no coinciden con los observados,
encontrándonos ante una anomalía gravimétrica:
 Positivas. Valor real > Valor esperado. Ocurre en presencia de yacimientos de minerales metálicos,
al tener éstos una elevada densidad.
 Negativas. Valor real < Valor esperado. Ocurre en presencia de acuíferos, cuevas o yacimientos de
gas o petróleo,
al poseer una
menor
densidad.

PD. La gravedad se mide con el gravímetro.

d. Estudio de meteoritos.
Los meteoritos son cuerpos sólidos que entran en la órbita de la Tierra. Algunos impactan en la superficie,
mientras que otros, los de menor tamaño, se desintegran al atravesar la atmósfera. Su utilización para
conocer el interior de la Tierra parte de la teoría de que la mayor parte de los meteoritos que caen en la
Tierra provienen del cinturón existente entre Marte y Júpiter. Éste pudiera tener origen en un planeta
destruido por interacciones gravitatorias con planetas próximos.
Al analizar químicamente los meteoritos procedentes de esta zona, observamos que la mayoría
corresponde a tres tipos: sideritos (muy ricos en elementos metálicos como hierro y níquel), siderolitos
(con sílice, metales y otros elementos más ligeros) y lititos (fundamentalmente con sílice). Estos meteoritos
de distinta composición y densidad se pueden hacer corresponder con las capas del planeta que explotó
(núcleo, manto y corteza) y que por comparación serían las mismas que en la Tierra.
 e. Método sísmico. Se basa en el estudio de las ondas sísmicas.
Dichas ondas pueden tener dos orígenes diferentes:
 Seísmos naturales. Liberación brusca de energía acumulada en las rocas, que están sometidas a
esfuerzos o tensiones, en el interior de la Tierra.
 Seísmos artificiales. Provocados por el hombre, a priori con fines científicos.
En ambos casos, las ondas sísmicas generadas se comportan como ondas luminosas, con capacidad de
refracción y reflexión, variando por lo tanto su trayectoria y velocidad dependiendo de las características
de la materia que “atraviesen”:
 El estado (sólido o líquido).
 El módulo de compresibilidad (resistencia a la compresión).
 La rigidez (resistencia a la deformación elástica).
 La densidad.

Vamos a convertirnos en sismólog@s, pero antes debemos:

 1. Conocer los diferentes tipos de ondas sísmicas. Las ondas sísmicas se dividen en:
 Ondas internas. Viajan por el interior de las capas terrestres. Son:
 Ondas P (primarias o longitudinales), son las primeras en llegar a los detectores sísmicos
(sismógrafos); es decir, son las más rápidas porque deforman el material por donde pasan
en la misma dirección que su movimiento.

Como se puede comprobar al interpretar la fórmula que describe el módulo de su velocidad, esta depende
directamente de la comprensibilidad de los materiales y de la rigidez del medio, e inversamente de la
densidad. Es decir, en medios incompresibles y rígidos, con poca densidad, la velocidad de las ondas P
aumenta. Se transmiten en medio sólido y fluido.
 Ondas S (secundarias, transversales). Son las segundas en detectarse por los sismógrafos.
Son más lentas que las anteriores al deformar el material en sentido transversal al
movimiento de la onda.

Su velocidad depende de la rigidez del medio. Los medios fluidos no tienen rigidez (μ=0) y por tanto no
permiten la transmisión de la onda a su través.
 Ondas externas. Se transmiten por la superficie terrestre.
Son las últimas en llegar a los sismógrafos; por lo tanto, son las más lentas y, además, se restringen a la
parte superficial de la tierra. Producen una deformación compleja, que se pueden descomponer en dos
tipos de ondas:
 Rayleigh. Producen un movimiento elíptico de la superficie, como las olas.
 Love. Producen un movimiento horizontal de
lado
a lado
en la

superficie.
 2. Registrar las ondas sísmicas anteriores. Para ello, se
utilizan los sismógrafos, que representan dichas ondas
sísmicas en un eje temporal mediante sismogramas.

3. Interpretar los resultados. Cambios bruscos en la trayectoria o velocidad de las ondas sísmicas nos
advierten de cambios importantes en los materiales que han atravesado. A estos cambios se les
denomina discontinuidades sísmicas.

1ª discontinuidad. Discontinuidad de Mohorovicic. A unos 25-70 km de profundidad en los continentes y a

unos 5-10 km en los océanos. Es la separación entre la corteza y el manto. Las ondas sufren un aumento de
la velocidad debido a un aumento en la rigidez y comprensibilidad de los materiales.
2ª discontinuidad. Discontinuidad de Repetti. Entre los 100 y los 1.000 km de profundidad se producen
variaciones sucesivas en la velocidad de las ondas, lo que puede indicar cambios parciales en el estado
físico (fusión parcial de los materiales). A los 70 km aprox. se localizaría dicha discontinuidad, que marca la
división entre el manto superior y el inferior.
3ª discontinuidad. Discontinuidad de Gutenberg. Situada a los 2.900 km de profundidad se produce un
brusco descenso en la velocidad de las ondas P y la desaparición de las ondas S. Esto se interpreta como el
paso del estado “semisólido” a líquido (como los líquidos tienen rigidez 0, la velocidad de las ondas S se
vuelve 0). Es la separación entre el manto inferior y el núcleo externo.
Nivel D. Análisis más detallados mediante tomografía sísmica (crea imágenes en 3D del interior del planeta
a partir del análisis de las velocidades de las ondas sísmicas) del manto inferior han permitido apreciar una
estabilización, e incluso una bajada de las velocidades de las ondas entre los 2700 y 2900 km, lo que puede
significar una mezcla de materiales del manto inferior con el hierro fundido del núcleo externo.

4ª discontinuidad. Discontinuidad de Lehmann. A unos 5.100 km de profundidad se produce un aumento

en la velocidad de las ondas P. Esto se interpreta como el paso del estado líquido a sólido. Es la separación
entre el núcleo externo líquido y el núcleo interno sólido.
En resumen, Gracias a los datos aportados por los métodos anteriores podemos afirmar que la Tierra
funciona como una máquina térmica, cuyo calor interno tiene como origen:
- Calor residual de cuando se formó el planeta.
- Desintegración de elementos radioactivos.
- Calor emitido durante el proceso de diferenciación, cuando el hierro cristalizó para formar el núcleo
interno sólido.
En base a esto, se han construido dos modelos diferentes para explicar su interior:
- Modelo geoquímico. Basado en las diferencias de composición química en las diferentes capas.
- Modelo geodinámico. Basado en el comportamiento mecánico en las diferentes capas.

MODELO GEOQUÍMICO.
Divide el interior de la Tierra en las siguientes capas:
 - Corteza:
o Continental: Espesor (30 km). Densidad 2,7 g/cm3.
Composición fundamental (granitos).
o Oceánica: Espesor (10 km). Densidad 3 g/cm3.
Composición fundamental (basaltos).
- Manto:
o Superior: Composición fundamental (peridotitas).
Debido a las elevadas presiones, los cristales se
comprimen aumentando la densidad de la materia.
o Inferior: La presión sigue aumentando y las
estructuras cristalinas siguen compactándose,
aumentando más la densidad. En la base de esta
capa se encuentra la capa D.
- Núcleo:
o Externo: estado fluido. Composición Fe, Ni y S.
Presión (1,8-3,2 millones de atmósferas).
o Interno: estado sólido. Composición Fe, Ni y S.
Presión (3,6 millones de atmósferas).

MODELO GEODINÁMICO.
Divide al interior de la Tierra en las siguientes capas.
- Litosfera: es la capa más externa. Tiene un comportamiento rígido y frágil. Incluye la corteza y la
parte superior del manto superior. Puede ser:
o L. continental: corteza continental + manto superior (100-300 km)
o L. oceánica: corteza oceánica + manto superior (50-100 km).

La litosfera funciona como una unidad y está dividida en las denominadas placas litosféricas.
- Astenosfera o manto sublitosférico: situada bajo la litosfera, hasta la discontinuidad de Repetti. Se
halla en estado sólido. Actualmente la comunidad científica tiene series dudas acerca de la
existencia o continuidad de esta capa.
- Mesosfera: abarca desde la base del manto superior hasta el núcleo externo. En ella tienen lugar
corrientes convectivas debidas a las diferencias de temperatura entre la parte más cercana al
núcleo y la más lejana. La comunidad científica ha determinado que las células convectivas son
mucho más caóticas y desordenadas de lo que se pensaba hasta ahora.
- Nivel D: situado en la parte inferior de la mesosfera, está parcialmente fundido por recibir calor del
núcleo externo. En esta zona, los materiales de la mesosfera se calientan, pierden densidad y
ascienden. Es la región que genera las corrientes térmicas. Las últimas investigaciones apuntan a
que el grosor de este nivel varía, y esto tiene consecuencias sobre la intensidad del campo
magnético.
Esta imagen rompe con la idea que se tenía hasta ahora donde las corrientes convectivas eran regulares.
En realidad, según los estudios de tomografía sísmica actuales, tanto las corrientes convectivas como
algunas de las capas estudiadas son mucho más caóticas e irregulares de lo que se pensaba.
- Endosfera: se corresponde con el núcleo. En el núcleo externo, las rápidas corrientes de
convección, alrededor del núcleo interno metálico, crean el campo magnético de la Tierra.

Para terminar, se muestra una imagen comparando los dos modelos, el geoquímico y el geodinámico
Es importante, de cara al tema siguiente, entender que la litosfera engloba a la corteza más una pequeña
parte del manto superior.