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Trabajo integrador 4to año 1er cuatrimestre 2022

Materia: Literatura
Profesora: Ferreyra Miriam
Contenidos: Mito. Leyenda. Leyenda urbana. Novela “Más liviano que el aire” Jeanmarie
Federico

ORFEO Y EURÍDICE (mito griego)


Cuentan los mitos que, en la época en que dioses y seres fabulosos poblaban la tierra, vivía en Grecia un joven
llamado Orfeo, que solía entonar hermosísimos cantos acompañado por su lira. Su música era tan hermosa que,
cuando sonaba, las fieras del bosque se acercaban a lamerle los pies y hasta las turbulentas aguas de los ríos se
desviaban de su cauce para poder escuchar aquellos sones maravillosos.
Un día en que Orfeo se encontraba en el corazón del bosque tañendo su lira, descubrió entre las ramas de
un lejano arbusto a una joven ninfa que, medio oculta, escuchaba embelesada. Orfeo dejó a un lado su lira
y se acercó a contemplar a aquel ser cuya hermosura y discreción no eran igualadas por ningún otro.
Hermosa ninfa de los bosques –dijo Orfeo-, si mi música es de tu agrado, abandona tu escondite y acércate a
escuchar lo que mi humilde lira tiene que decirte.
La joven ninfa, llamada Eurídice, dudó unos segundos, pero finalmente se acercó a Orfeo y se sentó junto a él.
Entonces Orfeo compuso para ella la más bella canción de amor que se había oído nunca en aquellos bosques.
Y pocos días después se celebraban en aquel mismo lugar las bodas entre Orfeo y Eurídice.
La felicidad y el amor llenaron los días de la joven pareja. Pero los hados, que todo lo truecan, vinieron a
cruzarse en su camino. Y una mañana en que Eurídice paseaba por un verde prado, una serpiente vino a
morder el delicado talón de la ninfa depositando en él la semilla de la muerte. Así fue como Eurídice murió
apenas unos meses después de haber celebrado sus bodas.
Al enterarse de la muerte de su amada, Orfeo cayó presa de la desesperación. Lleno de dolor decidió
descender a las profundidades infernales para suplicar que permitieran a Eurídice volver a la vida.
Aunque el camino a los infiernos era largo y estaba lleno de dificultades, Orfeo consiguió llegar hasta el
borde de la laguna Estigia, cuyas aguas separan el reino de la luz del reino de las tinieblas. Allí entonó un
canto tan triste y tan melodioso que conmovió al mismísimo Caronte, el barquero encargado de transportar
las almas de los difuntos hasta la otra orilla de la laguna.
Orfeo atravesó en la barca de Caronte las aguas que ningún ser vivo puede cruzar. Y una vez en el reino de
las tinieblas, se presentó ante Hades, dios de las profundidades infernales y, acompañado de su lira,
pronunció estas palabras:
¡Oh, señor de las tinieblas! Héme aquí, en vuestros dominios, para suplicaros que resucitéis a mi esposa
Eurídice y me permitáis llevarla conmigo. Yo os prometo que cuando nuestra vida termine volveremos
para siempre a este lugar.
La música y las palabras de Orfeo eran tan conmovedoras que consiguieron paralizar las penas de los
castigados a sufrir eternamente. Y lograron también ablandar el corazón de Hades, quien, por un instante,
sintió que sus ojos se le humedecían.
Joven Orfeo –dijo Hades-, hasta aquí habían llegado noticias de la excelencia de tu música; pero nunca hasta
tu llegada se habían escuchado en este lugar sones tan turbadores como los que se desprenden de tu lira.
Por eso, te concedo el don que solicitas, aunque con una condición.
¡Oh, poderoso Hades! –exclamó Orfeo-. Haré cualquier cosa que me pidáis con tal de recuperar a mi
amadísima esposa.
Pues bien –continuó Hades-, tu adorada Eurídice seguirá tus pasos hasta que hayáis abandonado el reino de
las tinieblas. Sólo entonces podrás mirarla. Si intentas verla antes de atravesar la laguna Estigia, la perderás
para siempre.
-Así se hará –aseguró el músico.
Y Orfeo inició el camino de vuelta hacia el mundo de la luz. Durante largo tiempo Orfeo caminó por sombríos
senderos y oscuros caminos habitados por la penumbra. En sus oídos retumbaba el silencio. Ni el más leve
ruido delataba la proximidad de su amada. Y en su cabeza resonaban las palabras de Plutón: “Si intentas
verla antes de atravesar la laguna de Estigia, la perderás para siempre”
Por fin, Orfeo divisó la laguna. Allí estaba Caronte con su barca y, al otro lado, la vida y la felicidad en
compañía de Eurídice. ¿O acaso Eurídice no estaba allí y sólo se trataba de un sueño? Orfeo dudó por un
momento y, lleno de impaciencia, giró la cabeza para comprobar si Eurídice le seguía. Y en ese mismo
momento vio cómo su amada se convertía en una columna de humo que él trató inútilmente de apresar
entre sus brazos mientras gritaba preso de la desesperación:

- Eurídice, Eurídice...

Orfeo lloró y suplicó perdón a los dioses por su falta de confianza, pero sólo el silencio respondió a sus
súplicas. Y, según cuentan el mito, Orfeo, triste y lleno de dolor, se retiró a un monte donde pasó el resto
de su vida sin más compañía que su lira y las fieras que se acercaba a escuchar los melancólicos cantos
compuestos en recuerdo de su amada.

Actividad :

1) ¿En qué país vivía Orfeo?


2) ¿Cómo era Eurídice?
3) ¿Qué cualidades encontró Orfeo en Eurídice?
4) ¿Qué compuso Orfeo para Eurídice?
5) ¿Por qué murió Eurídice?
6) ¿Qué laguna separa el reino de la luz del reino de las tinieblas?
7) ¿Cómo se llama El dios de las profundidades infernales?
8) ¿Qué condición puso Plutón a Orfeo?
9) ¿Por qué Orfeo giró la cabeza para ver a Eurídice?
10) ¿En qué se convirtió Eurídice?

“El rapto de Perséfone”

Perséfone era la hermosa hija del Dios Zeus y la Diosa Deméter. Perséfone era una hermosa joven de cabellos
dorados y grandes ojos verdes, que vivía con su madre en el monte Olimpo. De vez en cuando Perséfone bajaba
del Olimpo a los prados y recogía flores con sus amigas las ninfas. ´
Un día estaba la joven recogiendo flores tranquilamente, cuando Hades dios que reinaba en los infiernos, –que
estaba enamorado de ella- abrió una enorme grieta en la tierra y emergió justo donde la joven iba a recoger un
lirio, llevándosela consigo. Hades la secuestro en un carruaje negro, sin dejar ningún rastro.
Las amigas de Perséfone no habían visto como la joven se esfumó y no pudieron darle más explicación a su
madre. Deméter desesperada, comenzó a buscarla, disfrazada de anciana recorrió toda en Grecia en busca de
alguna pista sobre el paradero de su hija, durante nueve días estuvo buscando sin comer, ni beber.
Y finalmente halló noticias, el hijo de los reyes de Eleusis le contó lo siguiente:
Diosa, Deméter, me temo que tengo noticias poco afortunadas sobre el paradero de su hija. Un pastor me
contó, que vio un siniestro carruaje, guiado por un rey de armadura negra, se llevó a una hermosa joven, la
tierra se abrió y desapareció con ella en sus entrañas.
Deméter, enseguida llegó a la conclusión de que se trataba de Hades. Pensó que Zeus podría haberlo evitado,
pero que no lo hizo y decidió vengarse. Como ella era la diosa de la agricultura, recorrió de nuevo Grecia, esta
vez dando paso a su venganza. Prohibió a los arboles dar frutos, a los pastos crecer y a las semillas germinar. El
ganado no tenía con que alimentarse y comenzó a morir. Si la situación continuaba los hombres también
morían de hambre.
Zeus, intentó convencer a Deméter, con regalos y joyas, que ésta no aceptó, “solo quiero a mi hija Perséfone de
vuelta a mi casa” le decía la diosa. Zeus tuvo que recurrir a Hades y suplicarle que dejará libre a Perséfone, de
vuelta con su madre. A lo que Hades respondió,
Será libre para regresar, siempre y cuando no pruebe ningún alimento del infierno, pues todo aquel que
pruebe un alimento de los muertos queda para siempre obligado a permanecer aquí.
Perséfone había comido granadas del huerto. Hades subió a la joven en su carruaje y la llevó junto a su
madre. Ambas se abrazaron felices, y entonces Hades le dijo a Deméter:
Tu hija ha comido siete granadas de mi huerto, y por lo tanto debe regresar al infierno conmigo. A lo que Deméter
respondió: Si eso ocurre, nunca jamás levantaré la maldición que pesa ahora mismo sobre la Tierra y todos
morirán de hambre.
Zeus y Hera tuvieron que intervenir en la negociación. Finalmente, Deméter tuvo que aceptar que su hija se
casará con Hades. Perséfone debía pasar siete meses de los años con su marido en el infierno, un mes por cada
granada y los otros cinco meses los pasaría junto a Deméter su madre.
Por esta razón la tierra florece en primavera y en verano cuando Deméter disfruta de la compañía de su hija y
se queda triste y seca en otoño e invierno cuando Perséfone está junto a Hades.
A través de la lectura del mito, podrán comprender la fuerza del afecto hacía las personas queridas. Deméter
quería a su hija y estaba dispuesta a dejar morir a todos los animales y plantas si no tenía su compañía.
Comprenderán también los ciclos de la vida natural y el paso de las diferentes estaciones.

Responde luego de la lectura:

1. ¿Por qué Hades secuestro a Perséfone?


2. ¿Qué hizo la diosa Deméter al no saber nada de su hija?
3. ¿Por qué crees que la diosa se enfadó con Zeus?
4. ¿Cuál fue la venganza de la diosa?
5. ¿Qué ocurrió entonces?
6. ¿Por qué Hades no quería dejar regresar a Perséfone?
7. ¿A qué acuerdo llegaron al final?
8. ¿Por qué Perséfone pasaba siete meses con su marido y cinco con su madre?
9. ¿Por qué esto estaba relacionado con las estaciones del año?

De acuerdo a los dos mitos que leíste:


1) Menciona que características tienen para que sean mitos.
2) Menciona a los personajes de cada Mito.
ACTIVIDADES:
1. ¿Quién es Antü? ¿Por qué no demuestra interés por lo que pasa en la Tierra?
2. ¿Quiénes son los Pillán y por qué se enfrentan? ¿Qué función cumplen en la historia?
3. ¿Cuál es, según los mapuches, el origen de esos fenómenos naturales?
4. ¿A qué se deben, según esta historia, las «barbas» que posee el árbol del ñire?

Leyenda urbana
“Más liviano que el aire” Jeanmarie Federico

1) Cuenta con tus palabras de qué trata la novela


2) ¿Cómo se llaman los personajes principales? ¿Cuáles son las características de cada uno?
3) ¿Qué tipo de narrador se presenta en la novela? Justifica con una cita.

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