Está en la página 1de 8

El carbono, hidrógeno, oxígeno, nitrógeno fósforo, azufre, silicio

Dentro de la serie que estamos haciendo en Dciencia sobre los elementos químicos de la tabla
periódica, hoy vamos a hablaros de los elementos que están presentes y forman parte del cuerpo
humano.

Y es que, aunque no podamos imaginárnoslo, el cuerpo humano no es más (ni menos) que un
conjunto de elementos químicos en diferentes proporciones. Casi el 99% de la masa del cuerpo
humano está formada por seis elementos: oxígeno (65%), carbono (18%), hidrógeno (10%),
nitrógeno (3%), calcio (2%) y fósforo (1%). El pequeño porcentaje restante (~1%) está formado por
una larga lista de otros elementos, de los cuales podemos destacar el potasio, el azufre, el sodio, el
cloro, el magnesio, el yodo, el hierro y el zinc. Todos estos elementos son necesarios para la vida.
Carbono

Su símbolo químico es C y su número atómico es 6. Pertenece al Grupo 14 de


la tabla periódica (familia del carbono o los carbonoideos), y se distribuye
ampliamente en la naturaleza. Es el pilar básico de la química orgánica y
forma parte de todos los seres vivos. Es un elemento único en cuanto a la
gran cantidad de compuestos distintos que puede formar. En la naturaleza
puede encontrarse en distintas variedades alotrópicas (alotropía es la
propiedad de algunas sustancias simples de poseer estructuras atómicas o
moleculares diferentes). Las variedades más conocidas del carbono son el
grafito y el diamante, pero también están el grafeno, los nanotubos de
carbono y el fullereno. Por último, se encuentra la forma amorfa del carbono,
conocido como negro de humo, que es un pigmento de carbono que se
obtiene mediante la combustión incompleta de diferentes materiales.
Historia:
Los nombres de las diversas formas del carbono proceden del latín y del
griego. “Carbón” viene del latín “carbo”; “grafito” del griego “graphein”
(escribir) y “diamante” del latín “adamas” (indomable e invencible), que fue
evolucionando a adamant > diamaunt > diamant y, por último, diamante.

El carbón como hollín y carbón vegetal ya se utilizaba en la prehistoria. El


grafito y el diamante eran conocidos por las civilizaciones antiguas.

El descubrimiento de los fullerenos es mucho más reciente, fue en 1985


cuando los químicos Harold Kroto, Robert Curl y Richard Smalley
descubrieron estas moléculas de carbono que puede adoptar formas
geométrica que recuerdan a una esfera, una elipse, un tubo o un anillo. Este
descubrimiento los llevó a ser galardonados con el Premio Nobel de Química
en 1996.
Propiedades:
A temperatura ambiente se encuentra en estado sólido. Sorprendentemente,
el grafito es uno de los materiales más blandos conocidos, mientras que el
diamante es uno de los más duros. Existen tres isótopos de carbono que se
producen de forma natural, el 12C y 13C (estables) y el isótopo radiactivo
14C.

El carbono y la vida humana:


El carbono es el segundo elemento más abundante en nuestro cuerpo.
Concretamente supone el 18% de la composición de nuestro organismo (es
decir, unos 13 kilos en un adulto de unos 70 kilogramos de peso). Sin
embargo, el carbono en nuestro organismo nunca se encuentra como
elemento químico individual, sino que siempre está formando compuestos
junto con otros elementos. El papel principal del carbono en relación con la
vida deriva de su capacidad para formar cuatro enlaces que permiten
construir cadenas de moléculas largas y complejas. El enlace entre moléculas
de carbono es esencial para nuestra vida. Es un enlace que se puede romper
aportando muy poca energía, lo cual permite que se rompan fácilmente unos
compuestos carbonados y se formen otros nuevos. Esto hace que el
organismo pueda fabricar con poco gasto energético las moléculas que
necesita a partir de otras que ya no necesita o de aquellas que se han
absorbido por la dieta. De hecho, el carbono es parte esencial de todas las
macromoléculas, proteínas, grasas y glúcidos, también llamados estos
últimos hidratos de carbono. Es, por tanto, un elemento que forma parte de
todas las estructuras de nuestro cuerpo. Además, de las moléculas que
contienen carbón, como la glucosa, nuestras células obtienen energía en el
proceso que hemos descrito anteriormente, con el oxígeno.
Por otra parte, también hay que tener en cuenta la importancia del dióxido
de carbono (CO2) en nuestro organismo. Es un producto de desecho
procedente de diversas reacciones celulares.
También mencionar que hay algunos compuestos de carbono, como el
monóxido de carbono y el cianuro, que son extremadamente tóxicos para los
mamíferos. A todos os sonará el caso de los mineros, que, debido a la
inhalación de grandes cantidades de carbono durante periodos prolongados,
puede desarrollar la enfermedad del pulmón negro.

La huella de carbono:
La huella de carbono (en inglés, carbon footprint), que hace referencia a la
totalidad de gases de efecto invernadero (medidos como CO2 equivalente)
emitidos por efecto directo o indirecto a través de la actividad que desarrolla
un ciudadano, una organización, la fabricación de un producto o la prestación
de un servicio. En este momento de gran crisis climática que estamos
viviendo, todos tenemos que hacer un gran esfuerzo por reducir nuestra
huella de carbono.

Hidrógeno
Su símbolo químico es H y su número atómico es el 1. Es el elemento químico
más “ligero” de la tabla periódica y el más abundante en el universo (el 76%
del universo está formado por hidrógeno).

El hidrógeno y la vida humana:


Solo comentaros que el hidrógeno es el tercer elemento en cantidad en
nuestro cuerpo, fundamentalmente porque está presente en el agua (H2O), y
hay que recordar que el agua supone más del 60% del peso de nuestro
cuerpo. Además, casi todos los compuestos carbonados portan en su
composición también hidrógeno.

Oxígeno
Su símbolo químico es O y su número atómico es el 8. El oxígeno es el
elemento más abundante en el cuerpo humano, Los elementos que
respiramos, el oxígeno lo respiramos y nos permite obtener energía para que
así cada célula del cuerpo pueda realizar sus funciones. Sin oxígeno, las
células de nuestro cuerpo se mueren. Alberto también nos habló de la
historia, propiedades, métodos de obtención y aplicaciones del oxígeno
El oxígeno y la vida humana:
El oxígeno es estrictamente necesario para nuestra vida. Forma parte del
agua (H2O) y de todo tipo de moléculas orgánicas. Además, como hemos
comentado, lo necesitamos para producir energía en nuestras células. ¿Y
cómo se produce esta energía en nuestras células? La energía se produce en
lo que conocemos como “respiración celular” (no confundir con “respiración
pulmonar”), un proceso por el cual nuestras células degradan las moléculas
de los alimentos (principalmente la glucosa) para obtener energía en forma
de ATP (adenosina trifosfato), la denominada “moneda energética” del
organismo. Es un proceso complejo, con diferentes etapas encadenadas. La
última etapa, llamada fosforilación oxidativa, se produce en las mitocondrias
de las células, y es cuando el oxígeno tiene un papel esencial. El oxígeno
recibe los electrones procedentes de la cadena de transporte de electrones y
recolecta protones del medio para formar agua. En este proceso se libera
gran cantidad de ATP.

Nitrógeno
Su símbolo químico es N y su número atómico es el 7.

El nitrógeno es el principal componente de la atmósfera (78%), y el elemento


más abundante que respiramos. Ya os hablamos de él en Los elementos que
respiramos.

El nitrógeno y la vida humana:


El nitrógeno forma parte de muchas biomoléculas, pero destaca su presencia
en los ácidos nucleicos y los aminoácidos. El nitrógeno forma parte
estructural de las 5 bases nitrogenadas (adenina, guanina, citosina, timina y
uracilo) que forman parte de los ácidos nucleicos, el ADN y el ARN. En la
estructura de doble hélice del ADN, la adenina forma pareja con la timina
(A=T), mientras que la citosina es la pareja de la guanina (CºG). La
complementariedad entre las bases nitrogenadas es la esencia de la
estructura del ADN, y la disposición secuencial de estas 4 letras a es lo que
determina la información genética. Fragmentos concretos del ADN
(denominados genes) son copiados a ARN, proceso que se conoce como
transcripción. A continuación, este ARN se utiliza para generar las proteínas
en los ribosomas. Las proteínas son cadenas de aminoácidos. En el código
genético está la información de 20 aminoácidos distintos, cuyas infinitas
combinaciones dan lugar a las proteínas que son los verdaderos actores de
nuestras células. Las que se encargan de trabajar, cada una en una tarea
distinta, para que todo funcione correctamente.

Además, el nitrógeno también forma parte de otras moléculas como son los
lípidos (las grasas) o el óxido de nitrógeno (NO). El NO es muy importante en
nuestro organismo ya que participa en la relajación de los músculos, en el
sistema cardiovascular, el sistema inmunitario, el sistema nervioso central y
el sistema nervioso periférico.

Fósforo

El símbolo químico del fósforo es P y su número atómico es el 15. El fósforo


no se encuentra como elemento nativo, pero es el elemento principal de los
fosfatos, que son unos compuestos importantes tanto en la naturaleza como
en nuestro propio cuerpo. De hecho, es el undécimo elemento más
abundante en la Tierra.

Historia:
Este elemento químico fue descubierto por el alquimista alemán en 1669 en
el transcurso de sus experimentos encaminados a la búsqueda de la piedra
filosofal. Así, al mezclar orina y arena y destilar la mezcla, cuando se
evaporaba la urea, obtenía un material blanco que brillaba en la oscuridad.
Su nombre proviene de la unión de dos palabras griegas fos, que significa
“luz” y foros, que significa “portador”.

Propiedades:
El fósforo existe en tres formas, blanca, roja y negra. El fósforo blanco es muy
tóxico e inflamable. Cuando se calienta a 300-400 ºC en ausencia de oxígeno,
se transforma en fósforo rojo, que no es tóxico. Si el fósforo blanco o el rojo
se calientan a 200 ºC a una presión de 12.000 bar, se obtiene el fósforo
negro.

El fósforo y la vida humana:


El fósforo es un elemento esencial para la vida. El ser humano contiene,
aproximadamente, 770 gramos de fósforo en su organismo. El fósforo tiene
dos funciones principales en el cuerpo humano. Por un lado, es muy
importante para las estructuras óseas del cuerpo, donde se encuentra el 90%
de todo el que tenemos en nuestro cuerpo. Pero por otro cumple un
fundamental papel energético, puesto que forma parte de la molécula de
ATP. Recordemos que se trata de la “moneda energética” de la célula. Es
decir, es la molécula que acumula la energía que es usada para llevar a cabo
todas las funciones celulares. En su fórmula podéis ver que lleva tres átomos
de fósforo (en forma de grupos fosfato).

Silicio
Como componente importante de tu cuerpo, el silicio ayuda a equilibrar la
mineralización de los huesos. Además, juega un papel importante en la
mejora de la textura de la piel, ayudando a equilibrar la formación de células
y el metabolismo.

https://www.dciencia.es/los-elementos-en-los-humanos-o-c-h-n-ca-p/

https://www.centrosideal.com/blog/que-es-silicio-
organico/#:~:text=Como%20componente%20importante%20de%20tu,de%20
c%C3%A9lulas%20y%20el%20metabolismo.

También podría gustarte