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Estudios del Desarrollo Social: Cuba y

América Latina
E-ISSN: 2308-0132
danita@flacso.uh.cu
Facultad Latinoamericana de Ciencias
Sociales
Cuba

Alonso Zayas, Karen


Violencia de género: pandemia de la sociedad
Estudios del Desarrollo Social: Cuba y América Latina, vol. 3, núm. 2, mayo-agosto, 2015,
pp. 87-98
Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales
Miramar, Cuba

Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=552357189002

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Revista Estudios del Desarrollo Social: Cuba y América Latina

www.revflacso.uh.cu

Violencia de género: pandemia de la sociedad

Gender Violence: Pandemic of Society

Lic. Karen Alonso Zayas


Licenciada en Comunicación
Centro para la Promoción del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera
karen.alonso@mincex.cu Fecha de enviado: 21/05/2015
Fecha de aprobado: 01/06/2015

RESUMEN: El presente artículo describe como la violencia de género


constituye un fenómeno social enraizado a la sociedad patriarcal
vigente. Afirma que, en la mayoría de las ocasiones, el término suele
homologarse con violencia hacia las mujeres, lo cual invisibiliza sus
incidencia en los hombres. De esta forma se hace mención de diversas
investigaciones que, en el marco de las ciencias sociales
contemporáneas, ponen de manifiesto dos dimensiones del tema:
intragénero e intergénero, donde mujeres y hombres (con
independencia de su orientación sexual) son víctimas de numerosas
expresiones de violencia que ocurren al interior y entre los géneros. El
objetivo se centra en resaltar como tales dimensiones son
imprescindibles para comprender la magnitud y complejidad del asunto.
Al mismo tiempo reflexiona en torno a las tipologías de violencia de
género, donde la psicológica cobra especial atención en ambos sexos
tanto por sus disímiles modos de manifestarse como por sus
perjudiciales efectos.

PALABRAS CLAVE: violencia de género, violencia intragénero,


violencia intergénero, violencia erótica, violencia psicológica, violencia
homofóbica, violencia lesbofóbica.

ABSTRACT: This article describes how domestic violence is a social


phenomenon rooted at the current patriarchal society. Intragénero and
inter-gender, where women and men (regardless of sexual orientation)
are victims of many forms of violence that occur: references to various
investigations in the context of contemporary social sciences, reveal two
dimensions of the issue is within and between genders. Highlights how
such dimensions are essential to understand the magnitude and
complexity of the case. At the same time it reflects on the types of
violence, which is particularly psychological care in both sexes therefore
manifest their disparate modes as for their harmful effects.

KEYWORDS: gender violence, intra-gender violence, inter-gender


violence, erotic violence, psychological violence, homophobic violence,
lesbophobic violence.

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“Una mujer es una mujer. Sólo se convierte en doméstica, esposa, La violencia de género, además, se
mercancía, conejito de Playboy, prostituta o dictáfono humano en
determinadas relaciones. Fuera de esas relaciones no es la conceptualiza como cualquier acto que resulte o
ayudante del hombre igual que el oro en sí no es dinero”. pueda resultar en daño o sufrimiento físico,
Gayle Rubin (1975, p.158)
sexual o psicológico a la mujer, incluye las
amenazas de tales actos, la coacción o privación
La violencia de género es un tema muy
arbitraria de las libertades en público o en la vida
controvertido que, en los últimos años, ha
privada, así como los castigos, malos tratos, la
ganado espacio en la agenda mediática de la
pornografía, la agresión sexual y el incesto
mayoría de los países del globo. No es de
(Dresch y Meneghel, 2005, en Valdés et al.,
extrañar que un fenómeno que acarrea cada año
2011).
numerosas víctimas, ocupe la atención de la
A través de los siglos, la violencia contra las
opinión pública a nivel internacional; y, en
mujeres ha adquirido diversas formas según los
consecuencia, se realicen investigaciones con el
tipos de escenarios. En un informe de la ONU
fin de conocer, en cada nación, la situación de
titulado “Estudio a fondo sobre todas las formas
este indicador para medir el desarrollo.
de violencia contra la mujer” (2006) se
Sin embargo, los levantamientos de
mencionan varios espacios: dentro de la familia
información aún adolecen de estrategias cuyo
(violencia dentro de la pareja y prácticas
objetivo se centre en transformar la realidad. La
tradicionales nocivas1), en la comunidad
mayoría de estas investigaciones toman el
(feminicidio, violencia sexual infligida fuera de la
carácter de informes nacionales con datos
pareja, acoso sexual y violencia en el lugar de
cuantitativos sobre el balance de la práctica de
trabajo o en instituciones educacionales, trata de
violencia por motivo de género, lo cual se torna
mujeres), violencia contra las mujeres cometida
en mera herramienta formal que poco o nada
o tolerada por el Estado (violencia en situaciones
contribuye al mejoramiento social.
de privación de libertad,2 esterilización forzada3)
Si bien este es uno de los problemas que
y discriminación múltiple por motivo de raza,
existen con respecto a la forma en que se trata el
origen étnico, casta, clase social, condición de
tema, no es menos importante la tendencia
inmigrante, edad, religión, estado matrimonial y
generalizada a igualar el término violencia de
orientación sexual.
género con violencia contra las mujeres.
Teniendo en cuenta esta lista es imposible
Según la “Declaración sobre la eliminación de
separar violencia de género de violencia contra
la violencia contra la mujer” aprobada por la
las mujeres. A través de la historia de la
Asamblea General de Naciones Unidas de 1993
humanidad han sido blancos de
(Res. A. G. 48/104, ONU, 1994), se define la
discriminaciones, humillaciones y actos
violencia contra las mujeres o violencia de
violentos, que en muchos casos culminaron en
género como:
muerte, por parte del poder patriarcal en nombre
de la ley, la religión, la moral y las “buenas
todo acto de violencia basado en el género que
tiene como resultado posible o real un daño físico, costumbres”.
sexual o psicológico, incluidas las amenazas, la No se trata de restarle importancia a todo el
coerción o la privación arbitraria de la libertad, ya sufrimiento que se le ha ocasionado y se
sea que ocurra en la vida pública o en la vida ocasiona diariamente a miles y miles de mujeres
privada. (Valdés et al., 2011, p. 35) pero, si bien es cierto que han sido a lo largo de
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los siglos víctimas por antonomasia de la que debería ser el comportamiento de mujeres y
violencia masculina, en la actualidad continuar hombres, por lo cual se dice que “está arraigada
con esa reducida visión significa dejar de lado el en los discursos de género de feminidad y
análisis de fenómenos múltiples que implica la masculinidad y en el lugar que ocupan los
violencia entre los géneros y al interior de estos. hombres y las mujeres con relación a sí mismos
Una mirada un tanto más abarcadora propone y a otros grupos de mujeres y hombres” (Valdés
considerar la violencia de género como alimento et al. 2011, p. 38). Dichos discursos de género
de las injusticias estructurales y de la lógica legitiman las conductas y comportamientos
imperante de una cultura violenta, donde la violentos en contextos privilegiados o de poder
costumbre es el dominio de unos a otros como jerárquico otorgados a determinados grupos,
forma natural de vida y sustento ideológico de fundamentalmente de hombres. Por lo tanto,
una sociedad de subordinación (Breilh, 1994 en puede afirmarse que “habrá violencia de género
Valdés et al., 2011). siempre que se ejerza violencia desde una
Si bien hasta el momento se han propuesto persona sobre otra en razón de las concepciones
una serie de conceptualizaciones para definir el o cosmovisiones de género que se defiendan o
término violencia de género, estas todavía se intenten preservar” (Valdés et al. 2011, p. 38).
continúan centradas en el binomio Son muchas las formas en las que se expresa
hombre/mujer, donde el primero actúa como la violencia por razones de género, desde la
agresor mientras la segunda se configura como violencia física, pasando por la sexual y
la víctima, lo cual obstaculiza la visualización y el económica, hasta la violencia psicológica o
análisis de formas de la violencia intragénero. simbólica, a modo de libertades restringidas,
Por lo tanto en este artículo se asume que la coerción y amenazas. Las cuales, como ya se ha
violencia de género mencionado, pueden producirse en el ámbito
privado y/o público; y donde mujeres, hombres,
concierne a todos los actos u omisiones mediante niñas/os, adolescentes y ancianos/as pueden ser
los cuales se daña, discrimina, ignora, somete y víctimas o victimarios/as.
subordina a otra persona en los diferentes A pesar de que la violencia física suele ser la
aspectos de su existencia por razones más visibilizada, y a menudo utilizada de manera
relacionadas con el género, por transgredir los
espectacular (en los medios de comunicación
modelos hegemónicos de lo femenino y lo
internacionales esta expresión de la violencia de
masculino. Esta forma de violencia atañe a:
expresiones de ataque material o psicológico que género suele ser utilizada por su fuerte carga de
afecta la libertad, dignidad, seguridad, intimidad e dramatismo en varios programas de televisión),
integridad moral o física de una persona. (Valdés existen otras manifestaciones muy comunes de
et al., 2011, p. 36-37) la violencia de género que no por menos
sensacionales dejan de ser oprobiosas y
Lo anteriormente expuesto se reproduce a su lacerantes. Estas son las llamadas “formas
vez en la dimensión intergénero y en la sutiles de la violencia de género o
dimensión intragénero, de las cuales se hablará microviolencias” (Valdés et al., 2011, p. 39), las
más adelante. cuales también se conocen en la literatura
Esta forma de violencia se encuentra anclada especializada como formas indirectas de
en concepciones, normas y definiciones de lo violencia y se caracterizan por ser “modos de
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manipulación social, donde hábitos, costumbres, en la sociedad, de lo cual se han valido


proverbios, creencias, estereotipos y mitos mayormente los hombres.
instalados en el sentido común y la convivencia
cotidiana, son legitimados y perpetuados Mujeres maltratadas
mediante recursos y acciones manipuladoras” Uno de los actos que constituye la mayor
(Valdés et al., 2011, p. 39.). expresión de dominación de la cultura patriarcal
Las manifestaciones de la violencia de es la llamada violencia sexual o, como la califica
género, si bien es cierto que encuentran su la feminista mexicana Marcela Lagarde, violencia
escenario más reconocido en el ámbito de las erótica. Para dicha autora la violencia erótica es
relaciones familiares y de pareja, tienen lugar en la síntesis política de la opresión de las mujeres,
otros espacios sociales tales como el contexto debido a que implica la violencia, el erotismo, la
laboral, los espacios comunitarios y de apropiación y el daño. “Es un hecho político que
convivencia entre vecinos, instituciones sintetiza en acto la cosificación de la mujer y la
escolares y medios de comunicación. realización extrema de la condición masculina
patriarcal” (2011, p. 259).
La violencia intragénero e intergénero Poco después refiere que, entre las formas de
Como ya se ha mencionado la violencia de violencia erótica, la violación es el hecho
género puede darse en dos dimensiones: supremo de la cultura patriarcal, como
intergénero e intragénero, de las cuales se reiteración de la supremacía masculina y como
hablará indistintamente en este subepígrafe. La ejercicio del derecho de posesión y uso de las
primera corresponde a la violencia que tiene mujeres como objeto del placer; pero además
lugar entre mujeres y hombres, donde ambos funciona como afirmación de la masculinidad.
pueden tener el rol de victimario/a; mientras que La violación, en la concepción feminista, se
la segunda corresponde a las situaciones plantea como un grado mayor de la violencia
violentas que ocurren al interior de cada sexo, patriarcal generalizada a las mujeres, puesto que
como resultado de concepciones tradicionales de se centra en el poder, en el abuso y en la
masculinidad y la feminidad. irrupción erótica, violenta, atentatoria de la
La violencia de género es consecuencia de integridad de la persona.
las normas, valores, roles y estereotipos que se Se considera que la violación
aprenden como parte del proceso de
socialización del género. Dicha socialización se es el abuso sexual de uno, dos o más hombres
basa en relaciones desiguales entre mujeres y sobre una mujer, cualquiera que sea su raza, edad
hombres que determinan posiciones antagónicas y condición social. El abuso sexual puede darse
por medio de la fuerza física, las amenazas y la
con relación a la distribución del poder en el
coacción física (…). El violador actúa sobre la
ámbito público y privado. Como ya lo mencionó
mujer víctima elegida para ejercer sobre ella, por
la investigadora estadounidense Joan Scott “el medio de la fuerza física o de la coerción, el poder
género es una forma primaria de relaciones sexista que el resto de los hombres tiene
significantes de poder” (Scott, 1986, p. 26). De extendido, además de al cuerpo físico de la mujer,
este modo la violencia se convierte en la táctica a todas las áreas de la actividad humana
idónea para perpetuar una posición privilegiada femenina. (Sau, 1981, en Lagarde, 2011, p. 260)

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Generalmente cuando se piensa en un hecho opresión del sexo femenino relativa a un tema
violento que implica la sexualidad se imagina que solo se consideraba concerniente a los
como un suceso perpetrado por un sujeto hombres; sin embargo, todavía en la actualidad
desconocido; pero no es posible descartar los subsisten rezagos que niegan y descalifican el
actos de violación que ocurren dentro de las derecho de las mujeres a la consecución del
relaciones conyugales. Estos actos tienden a no placer sexual.
ser considerados una expresión de violencia Pero la violencia erótica no es propiedad
contra las mujeres, puesto que en muchas exclusiva de los hombres. Existe violencia de
ocasiones se pone en práctica la concepción de este tipo perpetrada por mujeres hacia sus
que el cuerpo femenino pasa a ser propiedad, congéneres, en diversas situaciones. Por
mediante el matrimonio, del esposo. ejemplo, por aquellas que tienen bajo su
Aun cuando la sexualidad dominante, custodia a otras mujeres en instituciones como
expresada en materia de leyes, define que la hospitales, cárceles y asilos.
violación involucra la vagina, consagra a esta Otra de las expresiones de la violencia de
como el territorio de la violación. Aunque se género que con más fuerza y continuidad golpea
distinguen niveles y grados diferenciales, para el a las mujeres es la psicológica4. Esta forma de
feminismo, la violación no se limita a la coital. violencia ocurre, con más frecuencia, en el
Por el contrario, se considera violación “todo acto ámbito de las relaciones intrafamiliares
de irrupción sobre las mujeres, entre el piropo y (generalmente en las relaciones conyugales,
la violación: la apropiación erótica de la mujer es pero puede darse en las relaciones filiales) y
el núcleo de la violación” (Lagarde, 2011, p. produce un daño en la esfera emocional que
264). provoca alteraciones en la conducta y en la
Las aproximaciones eróticas (no deseadas) a personalidad de quienes son victimizadas. Se
las mujeres, entre las que se encuentran las caracteriza por ser ejercida mediante actos de
miradas que desnudan, los piropos (desde los humillación, insultos, amenazas, intimidación y
más decentes, hasta los más groseros) y los privación de afecto. La exposición constante a
manoseos, son prácticas agresivas que, este tipo de situaciones no solo ocasiona
lamentablemente, en la cultura erótica dominante perjuicios emocionales puesto que “la víctima no
están naturalizadas. Algunas mujeres, todavía sólo ve reducida su autoestima, sino en la
hoy, se sienten complacidas cuando logran la medida en que experimenta continuamente
reacción erótica del otro, se sienten reconocidas rechazo, desprecio, ridiculización, puede sufrir
por despertar el deseo de quien supuestamente alteraciones físicas, trastornos de alimentación,
está en su derecho viril de aproximarse. de sueño, de la piel, ulceras, gastritis” (Romero,
La violencia erótica debe ser entendida s.f., p. 5).
también como violación a la libertad sexual. Las Algunos ejemplos de la violencia psicológica
restricciones que sufren las mujeres, con tienen su expresión en lo que el psiquiatra y
respecto al auto-reconocimiento y plenitud director del Centro de Estudios sobre
sexual, son una manera muy eficaz de Masculinidad de Madrid, Luis Bonino Méndez,
mantenerlas sometidas. La liberación sexual, cataloga como micromachismos. Llama así a las
ocurrida en la segunda mitad del siglo pasado, “prácticas de dominación masculina en la vida
consiguió visibilizar y trasformar un tanto la cotidiana, del orden de lo micro, de lo capilar, lo
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casi imperceptible, lo que está en los límites de En los encubiertos, el hombre oculta su
la evidencia” (Bonino, s.f., p. 4). Asimismo objetivo de dominio. Estas maniobras son tan
incluye la palabra machismo para connotar los sutiles que pasan especialmente desapercibidas,
comportamientos de inferiorización negativos de por lo cual son más efectivas que las anteriores.
los hombres hacia las mujeres. Debido a su bajo perfil los micromachismos
A decir de Bonino encubiertos no se perciben en el momento, pero
se sienten sus efectos que, generalmente,
se trata de un amplio abanico de maniobras conducen a una reacción retardada por parte de
interpersonales que realizan los varones para la mujer como mal humor, frialdad o estallidos de
intentar mantener el dominio y su supuesta rabia (sin motivo aparente para los hombres).
superioridad sobre la mujer objeto de la maniobra;
Las expresiones de esta catalogación de
reafirmar o recuperar dicho dominio ante una
Bonino son el abuso de la capacidad femenina
mujer que se rebela por su lugar en el vínculo;
resistirse al aumento de poder personal o de cuidado, maniobras de explotación
interpersonal de una mujer con la que se vincula. emocional, maniobras de desautorización7,
(s.f., p. 4) paternalismo, creación de falta de intimidad8 y
auto indulgencia sobre la propia conducta
Estos micromachismos, o lo que es lo mismo perjudicial.
microabusos o microviolencias, atentan contra la Por su parte, a los micromachismos de crisis
autonomía personal de las mujeres. Son suele acudirse en los momentos de desequilibrio
consecuencia de la socialización de género en el “estable desbalance de poder en las
basada en el ideal de masculinidad tradicional y relaciones” (Bonino, s.f., p. 6), tales como
a través de ellos se intenta imponer, sin aumento del poder personal de la mujer por
consensuar, el propio punto de vista o razón. cambios en su vida o pérdida del poder del
Bonino (s.f.) los clasifica en tres categorías: los hombre por razones físicas o laborales. En esta
micromachismos coercitivos (o directos), los clasificación las expresiones se manifiestan
encubiertos (de control oculto o indirectos) y los mediante seudoapoyo9, desconexión y
10
de crisis. distanciamiento, hacer méritos y dar lástima. Si
En los coercitivos, el hombre usa la fuerza bien esta y las anteriores clasificaciones de
moral, psíquica o de su propia personalidad para micromachismos se hicieron pensando en la
intentar someter a la mujer. Son mecanismos pareja conyugal, la mayoría de dichas
que tienen efecto porque provocan un profundo manipulaciones son igualmente realizadas en el
sentimiento de derrota al comprobar, con ámbito familiar, por parte de los hombres, con las
posterioridad, la pérdida, ineficacia o falta de propias hijas y madres.
fuerza y capacidad para defender las propias
decisiones o razones. Sus consecuencias son la Hombres maltratados
inhibición, desconfianza en sí misma y A pesar de que no alcanzan los espacios para
disminución de la autoestima. Expresiones de denunciar la violencia contra las mujeres por
este tipo de micromachismo son la intimidación, parte de los hombres, es pertinente para este
la toma repentina del mando, la insistencia estudio visibilizar otras relaciones violentas que
abusiva5 y la apelación al argumento lógico6. se producen al interior de los géneros. Ello no
significa que se considere agotado el tema del
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abuso femenino. Dicho fenómeno ha sido que los varones sean brutos), la definición social
perpetrado a través del tiempo, por lo que está estereotipada (en los medios de comunicación)
mucho más tratado y en consecuencia es de de la sexualidad de los hombres como
mayor conocimiento a nivel social. Por su parte, compulsiva y simple, la simplificación social
la violencia de las mujeres hacia los hombres por estereotipada de los hombres (“todos son
razones de género11 y en la dimensión iguales”), el maltrato en los procesos de divorcio
intragénero es poco abordada en las y en las cuestiones relativas a la custodia de la
investigaciones y la literatura especializada. descendencia y la paternidad no consentida.
Existen investigaciones, como la Tesis de Se puede afirmar pues que las relaciones de
Maestría de Sonia Medina (2003) y la Tesis de pareja, tal y como se viven en una sociedad
Licenciatura de Rayner Cruz (2006), donde se patriarcal, suponen un campo de batalla
aborda la violencia de género desde la simbólico donde miden fuerzas constantemente
masculinidad. Sus resultados muestran que sus miembros y donde no siempre salen
existen formas de maltrato de las mujeres hacia victoriosos los hombres.
los hombres, entre las que se encuentran las En este sentido la propuesta de Bonino
prohibiciones, las acusaciones de infidelidad, la resulta muy interesante. A pesar de que el autor
negación de afecto, las ofensas e insultos y las denomina micromachismos (teoría fundamen-
humillaciones. tada por el trabajo que realiza con hombres) a
Dado el caso que el tema de las las estrategias utilizadas en el plano sentimental,
masculinidades ha devenido en un tópico con pudiera afirmarse que muchas de estas también
sobrada atención por parte de los/as son utilizadas por las mujeres de la actualidad
investigadores/as contemporáneos/as, en la para acceder a una posición de jerarquía en las
actualidad, se están realizando análisis revela- relaciones de pareja o responder ante una
dores acerca de cómo los mismos hombres amenaza o pérdida real del poder.
asumen, viven y enfrentan las diferenciaciones Según estudios, gran cantidad de mujeres
del género. víctimas del maltrato varonil se reconocen en los
El Doctor en Antropología Social, Oscar procesos como igualmente creadoras de
Guasch Andreu (2012), en un artículo publicado violencia, lo cual ha sido registrado como contra-
en la revista Sexología y Sociedad comenta los violencia12 (Pineda, 2008). Muchas mujeres
resultados de siete grupos de discusión cele- ejercen una activa violencia, especialmente
brados con grupos de hombres (homosexuales y verbal, como parte de los repertorios culturales
heterosexuales) entre 18 y 75 años de edad. En disponibles que son usados en una u otra
dichos grupos de discusión se presentan algunos dirección, en un juego de significaciones y
relatos políticos que los hombres están representaciones de género.
produciendo sobre el modo en que el género Debido a que la violencia de las mujeres
condiciona sus existencias. Sus conclusiones suele ser más verbal, es ejercida en términos
fueron ejemplos donde expresan que sufren asociados a la masculinidad hegemónica
discriminación, y por tanto violencia, por el hecho relacionados con la virilidad o su capacidad de
de ser hombres. Entre estos relatos se encuentra proveedor, como mecanismo de ofensa varonil.
la afirmación de que el fracaso escolar es más Así, la masculinidad se convierte en dispositivos
propio de niños que de niñas (porque es normal culturales que son utilizados para ejercer
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violencia hacia los hombres dado su alto nivel de deportiva la masculinidad demanda ciertos
operación (Pineda, 2008). comportamientos que suponen el uso de la
El daño que se autoinfligen los hombres con violencia como reafirmación del status viril.
la práctica de conductas violentas no ha sido Ejemplo de ello son los enfrentamientos que se
tratado en profundidad, sin embargo es un originan entre los fanáticos de dos equipos
fenómeno que ciertamente afecta psíquica y (generalmente de fútbol) en competencia;
emocionalmente al maltratador también. Al episodios que tienen como protagonistas, en su
respecto Bonino afirma que mayoría, a hombres que responden a diversas
clasificaciones dependiendo de la zona
su ejecución (de los micromachismos) brinda geográfica a la que pertenezcan.
ventajas, algunas a corto, otras a largo plazo para En el mundo deportivo también existen
los varones, pero ejercen efectos dañinos en las grupos de hombres que tienden a violentarse a
mujeres, las relaciones familiares y ellos mismos, sí mismos. A pesar de que no todos los modelos
en tanto quedan atrapados en modos de relación
de masculinidad hegemónicos llevan sus
que convierten a la mujer en adversaria, impiden
mandatos a extremos autodestructivos, en los
el vínculo con una compañera y no aseguran el
afecto (ya que el dominio y el control exitoso solo límites de la sumisión al modelo tradicional de
garantizan obediencia y generan resentimientos). masculinidad, existe una elevada susceptibilidad
(s.f., p. 5) a poner la vida al servicio de la afirmación de
género, elevando este rasgo de la subjetividad al
La efectividad de todas estas maniobras principal rasgo identitario de la persona (Espada,
forman una explosiva mezcla con negativos s.f.). Este fenómeno se ve especialmente
efectos relacionales: mujeres muchas veces presente en las prácticas deportivas donde
enormemente deterioradas en su autonomía y arriesgarse es sinónimo de virilidad y hombría, y
varones con aislamiento emocional progresivo y las consecuencias de las acciones no pesan
creciente desconfianza en el otro sexo, a quien mucho en un contexto donde la presión por
nunca terminan de poder someter plenamente. demostrar algo violenta en demasía la voluntad
Existen otros ámbitos donde los hombres del sujeto. En el caso de estos hombres, las
ponen en práctica los mandatos de la exhibiciones de audacia están en relación a
masculinidad hegemónica que han aprendido en mostrar a otros hombres su virilidad, y sitúan a
la socialización de género. La práctica deportiva los hombres como sujetos en lucha entre sí.
es vista como un ingrediente imprescindible Muchas de estas conductas no solo acarrean
dentro de la receta del hombre (tal y como debe accidentes debido a la práctica deportiva, de
ser). Es una forma de ejercer violencia sobre riesgo o no; sino que también se extrapolan a
varones que, en su mayoría durante la niñez y la incidentes de la vida cotidiana (accidente laboral,
adolescencia, no logran sobresalir en estas lizas; accidente de coche o moto).
quienes son, entonces, estereotipados y
revestidos de un aura femenina que llega a Violencia homofóbica y lesbofóbica
poner en entredicho hasta la orientación sexual. En un mundo donde la heterosexualidad es la
El deporte es uno de los escenarios donde se norma, el hecho de manifestar una orientación
produce y reproduce la famosa tríada de la sexual diferente es una elección que corre el
violencia13. Dentro de los marcos de la práctica riesgo de ser castigada con hostilidad, disgusto y
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violencia. Una abrumadora mayoría de quienes pronto percibe que existen determinadas
perpetran esas violencias contra las personas que existen fuera del orden, y esta
sexualidades no-normativas son hombres manera de vivir solo evidencia lo casual de su
(Gómez, 2007). forma de vida y socava su sistema de seguridad,
La violencia homofóbica es entendida como al proponer la posibilidad de perder lo que él y
aquella dirigida contra individuos que se perciben otros atesoran como el bien supremo. En este
como varones homosexuales. Según Michael S. sentido, los homosexuales merecen ser
Kimmel la homofobia de los hombres que se castigados por la pérdida de los privilegios de la
definen como heterosexuales, en contra de masculinidad.
hombres que se definen (o son percibidos) como Los actos de violencia cometidos por hombres
homosexuales está relacionada con el miedo a heterosexuales contra homosexuales son modos
ser mutilado de alguna manera: “el miedo de reafirmar las diferencias entre ambos. Los
implícito en la noción de homofobia es segundos deben subordinarse a la masculinidad
principalmente el miedo de los hombres hegemónica pues han perdido el derecho, por
heterosexuales a ser catalogados como propia voluntad, a disfrutar de los beneficios que
homosexuales por sus pares masculinos” trae el ser considerados totalmente masculinos.
(Kimmel, 1997 en Herek, 2000, p. 253). La homosexualidad, además, produce malestar
Todavía en la actualidad se igualan las debido a que es percibida como un virus capaz
orientaciones sexuales diversas a las de corromper hasta los más firmes cimientos de
concepciones tradicionales de género. Es decir la hombría; con lo cual se hace imprescindible
que, cuando se identifica a una persona como destruir dichas amenazas por medios que no
homosexual, no solo se hace referencia a la dejen lugar a dudas de qué le sucederá a quien
sexualidad sino también al rol o identidad de ose desafiar el orden patriarcal.
género. En el caso de la homosexualidad En el caso de la violencia lesbofóbica, esta
masculina, esta es percibida socialmente como consiste en gestos violentos dirigidos contra
un tipo de feminidad o como una amenaza de personas percibidas como lesbianas.
feminización (miedo a la penetración). Gayle Rubin (1975, p. 191-192) refiere que
Por lo tanto, ser catalogado como “(el falo)… es la incorporación del status de
homosexual conlleva el hecho de ser víctima de masculinidad… en el que ciertos derechos son
sexismo (el homosexual se convierte en un inherentes, entre estos, el derecho a una mujer”.
sujeto despreciado, pues tiene la oportunidad de Se define entonces como hombre, entre otras
ser hombre y la rechaza) como de homofobia (el cosas, quien tiene acceso sexual a las mujeres.
homosexual es la evidencia de que cualquiera Las lesbianas son señaladas, entonces, como
puede serlo, prueba de que cualquiera puede usurpadoras del derecho exclusivo de los
perder los privilegios y beneficios de la hombres: las mujeres.
masculinidad) (Gómez, 2007). En este contexto, “la noción de deseo lésbico
En la lógica de la homofobia el sujeto y los cuerpos que materializan ese deseo son
heterosexual toma distancia del sujeto imaginados como un bloqueo a la participación
contaminado y se alía a representantes de la del cuerpo masculino en la performancia del
moral (la familia tradicional, la religión) para deseo” (Gómez, 2007, p. 76). La idea de
obtener protección y respaldo. Pero el sujeto prácticas sexuales de naturaleza lésbica
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exclusivamente desorganiza y desestabiliza no Conclusiones


solo el goce heterosexual; sino además la En la actualidad los fenómenos sociales se
sexualidad normativa de cuerpos masculinos. están complejizando, y por ende lo mismo debe
Esto ocurre porque el deseo lésbico no requiere ocurrir con la forma de abordarlos desde el
de cuerpos de hombres para llevarse a cabo. conocimiento científico. La visión en torno a la
La heterosexualidad obligatoria es impuesta violencia de género debe adquirir un cariz más
sobre cuerpos femeninos por medio de la abarcador que afronte las nuevas problemáticas
exclusión de cualquier condición sexual de estos, que propone el contexto social de relaciones
a menos que se vean involucrados de alguna intergénero.
manera cuerpos de varones. En nuestra El término violencia de género no debe ser
sociedad las muestras físicas de afecto entre resumido a violencia contra las mujeres, aun
amistades femeninas son toleradas sin mayor cuando continúan siendo las principales
problema; sin embargo las mismas expresiones víctimas. Resulta imprescindible recoger también
entre hombres son estigmatizadas. Tal tolerancia dentro de este asunto las relaciones de poder en
puede deberse a la exclusión de los cuerpos las que los hombres son reducidos y
femeninos de la sexualidad en un orden discriminados en virtud de los mismos valores
patriarcal donde solo la presencia masculina que promueve la masculinidad hegemónica, y
puede dotar a las mujeres de poder sexual. que supuestamente deben compartir todos sus
Existe además la violencia que se ejerce representantes.
sobre cuerpos que rompen la ecuación entre Las formas de sentirse y configurarse como
roles binarios de género, sexo biológico y seres humanos han dado un vuelco en los
prácticas sexuales; es decir entre personas últimos sesenta años. El rompimiento con lo
transgénero. Pocos ataques son tan brutales, tradicional ha abierto el paso a nuevas y
repetidos y visibles como los perpetrados contra emergentes feminidades y masculinidades que
personas transgénero. Su centralidad viene dada se construyen de manera ajena a los patrones
porque ellas y ellos encarnan la indeterminación clásicos de conducta y pensamiento, y que
latente en toda sexualidad. Son la prueba viva todavía se encuentran en pugna por el
de lo prescindible de los términos binarios reconocimiento social.
(hombre-mujer /heterosexual-homosexual) que De lo que se trata, en última instancia, es de
sostienen a la heterosexualidad obligatoria y por promover una sociedad equitativa donde los
ende a la masculinidad hegemónica; por lo tanto prejuicios basados en concepciones de género
evidencian la eventualidad y arbitrariedad de la no coarten la libertad propia de cada ser
heterosexualidad y la homosexualidad. La humano, con independencia de su sexo, género
indeterminación del individuo transgénero u orientación sexual.
angustia al modo de lo abyecto y mina las
condiciones de la determinación, lo cual Notas:
1
convierte a las personas transgénero en blanco Entiéndase por prácticas tradicionales nocivas el
paradigmático de violencia excluyente (Gómez, infanticidio de las niñas y la selección prenatal del
sexo, el matrimonio precoz, la incitación al suicidio
2007).
de las viudas o la obligación a casarse con el
hermano del difunto y la mutilación genital femenina.

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La violencia sexual cometida contra las mujeres Catalogación realizada para reflejar las diferentes
detenidas. Algunos ejemplos de este tipo de formas que tiene la masculinidad hegemónica de
violencia son: violaciones, vigilancia inadecuada ejercer la violencia, dígase violencia de los hombres
cuando las mujeres se bañan o se desvisten; contra las mujeres, contra otros hombres y contra
revisaciones personales sin ropa llevadas a cabo ellos mismos (Kaufman, M., 1997, en González
por hombres o en presencia de hombres, acoso Pagés, 2010: 49).
sexual verbal.
3
El uso de la esterilización para controlar el
comportamiento reproductivo de la población Referencias:
femenina. Asamblea General de Naciones Unidas. (1994).
4
La violencia psicológica es el tipo de agresión que Declaración sobre la eliminación de la violencia
se encuentra más presente dentro de la violencia de contra la mujer. Resolución 48/104.
género puesto que incluso el maltrato físico deja Asamblea General de Naciones Unidas. (2006).
Estudio a fondo sobre todas las formas de
secuelas de daño emocional.
5 violencia contra la mujer. Informe del Secretario
Consiste en obtener lo deseado, por agotamiento de General.
la mujer para mantener su propia opinión, quien al Bonino Méndez, L. (s.f.). Micromachismos. La
final acepta lo impuesto a cambio de un poco de violencia invisible en la pareja. Obtenido el 31 de
paz. octubre de 2013 de:
6
Se recurre a la lógica y a la razón (varonil) para http://www.redmasculinidades.com/sites/default/fi
imponer ideas, conductas o elecciones les/archivos/biblioteca/00034.pdf.
desfavorables a la mujer. Cruz, R. (2006). Ser hombres hoy. Una mirada a la
7
Conducen a la inferiorización de la mujer a través de masculinidad y sus avatares a las puertas de una
un sinnúmero de descalificaciones que, en general, nueva era. Tesis de Diploma. Facultad de
son consonantes con las descalificaciones que la Psicología, La Habana.
cultura tradicional realiza y que hacen mella en la Espada Calpe, J. M. (s.f.). Hombres, motos y riesgo:
necesidad de aprobación femenina. Androcentrismo y sexismo en el mundo de las
8
Actitudes que bloquean la puesta en juego de las motos. Obtenido el 31 de octubre de 2013 de:
necesidades relacionales de la mujer y evitan la http://www.redmasculinidades.com/sites/default/fi
intimidad que para el hombre supone riesgo de les/archivos/biblioteca/00175.pdf
Gómez, M.M. (2007). Homofobia y Psicoanálisis:
perder poder y quedar a merced de la mujer.
9 entre lo secreto y lo público. Revista de Estudios
Apoyos que se enuncian sin ir acompañados de Sociales, 28, p.75-86.
acciones cooperativas. Son realizados, González Pagés, J. C. (2010). Macho, varón,
generalmente, con mujeres que acrecientan su masculino. Estudio de masculinidades en Cuba.
ingreso al espacio público. Se evita con ello la La Habana: Editorial de la Mujer.
oposición frontal. Guasch Andreu, O. (2012). Masculinidades: teorías y
10
Maniobras consistentes en hacer regalos, prometer experiencias de discriminación. Revista
Sexología y Sociedad, 48, p.4-10.
ser un buen hombre, ponerse seductor y atento,
Herek, G. (2000). Prejuicios sexuales y Género: hacer
hacer cambios superficiales, sobre todo frente a Heterosexuales. Journal of Social Issues, 56, p.
amenazas de separación. 251-266.
11
Dígase violencia que se ejerce de una persona Lagarde, M. (2011). Los cautiverios de las mujeres:
hacia otra en razón de las concepciones o madresposas, monjas, putas, presas y locas. 5ta
cosmovisiones de género que se intenten preservar. ed. México: UNAM, Coordinación de Estudios de
12 Estudios de Posgrado.
Se le conoce así a la violencia ejercida en
Medina, S. (2003). Violencia de género. Una mirada
respuesta a la agresión de la contraparte. desde la masculinidad. Tesis de Maestría.
Facultad de Psicología. La Habana, 2003.
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