Está en la página 1de 119
We AGC Una Uuper Pen, Cane Galaé Depésito Legal N°: L5061201 12003264 ISBN: 978-980-12-5243-6 Impreso en Maracaibo- Venezuela Digital Color C.A- Primera edicién: 2011 Edicién en Bspaftol “Todas las eit bfblicas son tomadas de la Version Reina-Valera revisién de 1960, a menos que se indique otra cosa. werw.carmengalue.com rosagalue@hotmail.com Facebook: Carmen Galue Indice Reconocimiento Prefacio Introduccién Capitulo 1: El conflicto de los siglos * Cuando, dénde y qué originé este conflicto? + 2Existe alguna solucién para este conflicto? * ,Cudl ha sido Ia respuesta de la mujer a este conflicto? Capitulo 2: La creaci6n de Dios. Iguales y diferentes + {Somos iguales o diferentes? + 4Cémo queda el tema de la sumisién? Capitulo 3: La identidad de la mujer * {Qué determina la identidad de un individuo? * Por qué es importante conocer nuestra identidad? * 4C6mo conocer y afirmar nuestra identidad? ® {Qué papel juega la iglesia con respecto a fa mujer? Capitulo 4: La dignidad de la mujer {Qué dice al respecto el pasaje de Proverbios 317 * 4Cudles son las consecuencias de tener baja autoestima? * {Cémo combatir la baja autoestima? * Miitestimonio Capftulo 5: El disefio de la mujer * Diferencias emocionales + Diferencias fisiolégicas * Virtud tinica de la mujer Capitulo 6: Ejercicio de gobierno de la mujer Capitulo 7: Una ligera mirada al mundo Capitulo 8: La belleza de Ja mujer « Reconocimiento Asi como para que cualquier proyecto pueda ser posible y llegue a su realizacién, se necesita Ja influencia y la participacién de muchas personas, también para la realizacién de este libro, fueron muchas las personas que influyeron directa o indirectamente. A todas ellas agradezco el hecho de haberme animado a escribirlo y de haber crefdo en mf. Tengo que reconocer a mi esposo Juvencio, cuya sonrisa y palabras de animo —cada vez que lefa las lineas que escribfa—, me inyectaron el deseo de seguir adelante. Pero sobre todo, tengo que reconocer a mi Padre, el Sefior Dios. Toda fa gloria de este libro le pertenece solo El. Jamas en mis afios de vida se me habia ocurrido escribir un libro. De hecho, no escribfa ni atin las tarjetas que regalaba. Todas mis tarjetas, decian lo mismo: “Te quiero mucho. Dios te bendiga”. Pero en cierto momento de mi vida, Dios comenzé a cercarme para que lo escribiera. Cuando ya no pude ignorarlo mas y tomé la decisién de hacerlo, sabfa de qué tema queria hablar; habia un fuerte peso en mi coraz6n por la mujer, pero no tenia ni Ja menor idea de cémo abordarlo; no sabia cémo comenzar, cémo expresarlo, c6mo plasmar en un papel lo que habfa en mi coraz6n. Sin embargo, grande era mi asombro cuando cada vez que me sentaba a escribir comenzaba a fluir dentro de mi un torrente de palabras y de ideas cuya coordinacién sabfa que no venian de mi, El inspiré en mf cada una de Jas palabras que estén escritas en esta obra. Por eso, con toda propiedad, puedo asegurar que este libro nacié en el coraz6n de Dios. Prefacio He aqui wna mujer es un mensaje que nace en el corazén de Dios. Como todas fas cosas que nacen en El tienen un propésito, el de este libro es traer luz acerca de la verdadera naturaleza de la mujer. Revelacién que puede hacerla libre para que asi, con toda autoridad, traiga orden a su vida y ponga freno a la opresién y al abuso del cual ha sido objeto por tantos afios y que fe ha robado la bendicién de ser mujer. Esta obra ofrece herramientas que ayudardn a la mujer a dedicarse con absoluta dignidad a ser la persona que Dios disefié. La que existe desde fa eternidad en su corazén, la que Fl siempre quiso que fuera. He aqui una mujer desea que todas las mujeres conozcan cual era el suefio que habia en el corazén del Padre cuando la creé y que este conocimiento le sirva de norte y fortaleza. Es mi oracidn que, a través de las paginas de este libro, pueda bendecir, traer sanidad y descanso a todas aquellas mujeres a quienes Dios me permita alcanzar y tocar con él. Carmen Galué Introduccion A la mujer de hoy le resulta sumamente dificil vivir en este siglo veintiuno. Aunque nos parezca increible, esta dificultad se debe a la gran confusién de identidad que existe en las culturas occidentales, y a las grandes atrocidades que se cometen en las culturas orientales. A esto se suma los conflictos que todos los seres humanos tenemos. La ciencia ensefia que todos fos seres humanos sufren conflictos, los cuales muchas veces no saben identificar y si son identificados, la mayorfa de las veces no saben c6mo enfrentar. Conflictos que nacen de experiencias vividas y que son reforzados por el medio ambiente y por patrones culturales. Este conjunto de experiencias va marcando y determinando la manera en la que el ser humano procesa la vida y responde a ella. Desde los comienzos de la historia de la raza humana hasta hoy. la mujer ha sido enmarcada dentro de conceptos equivocados, y se le han dictado pardmetros de vida y conducta, que no solo han distorsionado su verdadero valor, propdsito. identidad y digni dad; sino que la han convertido enun_ser-vulnerable al abuso espiritual, | emocional y fisico, que 1a han llenado de confusién y rebeldia. Lamentabiemente la mujer de todos los tiempos y de todas 9 LL las culturas ha tenido y tiene ain una perspectiva distorsionada, tanto de la vida, como del evangelio. Esta perspectiva le ha impedid a la mujer realizarse y cumplir con el_propésito para el cual fue creada; asi como también, disfrutar de la vida maravillosa y abundante que Cristo compré también para ella._ Aun en nuestra cultura, dentro de nuesiras iglesias la mujer est4 enfrentando este profundo conflicto de identidad. Cuando ella mira a su alrededor en busca de orientacién y gufa, encuentra que la mayorfa de los ministerios de mujeres que existen estén dirigidos a la ensefianza de temas como: el papel de Ja mujer en el reino, Ja mentalidad de reino_en la mujer, la autoridad de fa mujer, a mujer_como guerrera, y_otros_asi_por ¢l estilo, De ninguna manera quiero decir que estos no son temas de interés, 0 que no son un mensaje de Dios para su pueblo hoy. Lo que quiero decir es que estos temas no son jos que pueden satisfacer y responder a las necesidades mds inmediatas de la mujer, Una mujer puede que se_muestre euférica, cuando se le habla de estos temas, puede incluso, con absoluta_sinceridad decir que Jos cree; Pero la confusidn y el do! 1¢ lleva por dentro han establecido en ella barreras que no le permiten conciliar la verdad gue escucha,con.ta realidad que vive, la que experimenta. Una de las cosas que he aprendido de Jas experiencias vividas en mds de veintisiete afios de ejercicio ministerial al lado de mi_esposo, es el hecho de que nadie, y en este caso, ninguna mujer que no c an su_identidad y el propdsito de Dios para su _vida,.que no tenga un sano sentido de autoestima y dignidad, podra ser capaz de_asimilar, disfrutar y menos de impartir las bendiciones del _reino_a_otras mujeres. 4Cémo hablarles del reino de Dios, cuando los Hlamados por Dios a extenderlo y revelarlo aqui en la tierra, estén confundidos en cuanto a cudl es el papel que juega cada uno de ellos (hombres y mujeres) en el cumplimiento de esta tarea? Como Ministro de 10 4 Dios, como esposa de pastor, pero sobre todo como mujer, me siento inclinada e inspirada por Dios a abordar este tema. “La mujer de hoy, necesita conocer su_verdadera identidad y luego o He aqui una mujer es un fibro que esta dirigido a ja sanidad, bendicidn.y_edificacién_ integral de la mujer, a través de la exposicién de temas que la llevaran a conocer_su_identidad y a desarrollar al maximo su_potencial, mientras establece como fundamento en su vida un sano sentido de autoestima y dignidad. Es mi oracién, que He aqué una mujer inspire y estimule a muchas mujeres para que se esfuercen por encontrar su camino y se conviertan en mujeres maduras; mujeres que tengan una. rdadera mentalidad_de reino. De igual manera, deseo que este libro sea lefdo no solo por mujeres, sino también por hombres; no solo por ayejas, sino también por lideres y ministros. Carmen Galué L Capitulo 1 | El conflicto de los siglos El asunto de la identidad de la mujer, es un tema que a lo largo de toda la historia de la raza humana, no ha perdido ni su vigencia ni su interés. Actualmente, en pleno siglo veintiuno, las mujeres alrededor del mundo estén enfrentando_un problema de identidad.. Muchas estén_confundidas en cuanto a cud! es su_verdadero papel dentro del_micleo famitiar, en sus iedad en Ja que viven. Esta. confusion estriba en el desconocimiento de cémo tiene que, ser ella, cémo ak debe comportarse y cudles son sus responsabilidades, cudies sus derechos y eudles_sus_privilegios, Algunas mujeres luchan por conocer cudl es su verdadera_razon de vida, su posicién y funcidn dentro. de la misma; y; muchas de ellas sufren porque ni siquiera conocen su propio valor y estima. | ‘Nosolo ha habido diferentes y contradictorias opiniones en cuanto a la identidad de Ta mujer a través de Ja historia, sino también entre las cientos de culturas que han existido en el mundo y las que existen actualmente. Lo asombroso del caso es que han sido Jas hombres quienes siempre han dictado en las diferentes cufturas y a través de Tos afios, los estéindares de vida y conducta para las mujeres; pero lo ms triste de todoxes que han sido las mismas mujeres quienes Jos han aceptado y asumido, aun y cuando por dentro muchas de ella no. han estado de acuerdo, 13 En las diferentes culturas que actualmente existen en el mundo, las opiniones sobre la mujer son tan diferentes y contradictorias, que a ella se le hace dificil escoger una como guia para establecer su_pardmetro de vida, conducta, valor y propésito. ~ Por ejemplo, en algunos patses occidentales, tan solo unas pocas décadas atréis no existia el término violencia doméstica; por tanto, los hombres podian castigar y golpear a sus y en dia, és cierto que se han creado leyes que defienden y protegen la Integridad fisica y emocional de Ia mujer, asf como también leyes que le reconocen derechos y valores que le permiten enyolverse y participar en casi todos ios sectores de Ja vida det pais, tales como la politica, la educacidn, los negocios, la planificacién y la economla; pero igualmente se le exige que siga Ilevando a cabo lo que dichas sociedades Ilaman funciones tradicionales dé la mujer, es decir, las labores domésticas. — En estos paises, las expectativas que existen sobre la mujer son mayores que nunca, Jo que se traduce en un aumento de sus cargas y responsabilidades. Es en esta cultura occidental donde la mujer deberia tener una identidad bien definida y una mejor calidad de vida, gracias a los avances logrados y a la toma de conciencia de la sociedad en cuanto a su valor y a sus derechos; sin embargo, no es asi, ella se encuentra més confundida y con mayor carga. En algunos paises desarrollados, el espftita de competencia ha alcanzado grados tan altos y ‘modernos’, que han pasado de un extremo al otro. Es cierto que después de largos afios de lucha, Ja mujer ha Jogrado que se le reconozcan derechos de cardcter juridico, moral, social y salubre, y también ha logrado integrarse a la sociedad. El problema est en que en su afin porque se Ie dé la misma valfa que a los hombres, se ha empefiado en demostrar que es igual a él, esforz4ndose por desempefiar los mismos trabajos que cllos. Con esto, solo ha logrado distorsionar mas aun su identidad, hasta el punto que muchas veces pierde sa feminidad. La hicha por esos cambios la ha cegado de tal manera que no puede medir las consecuencias. Existen otros pafses cuyas creencias religiosas privan 0 limitan a la mujer de su valor y derecho como individuo, Ella es usada para desempeftar labores domésticas, como objeto de reproduccién, para alivio sexual de su 4 £.. marido y carece de ciertas protecciones juridicas. En algunas culturas la mujer no tiene derecho a herencia, ni pertenencias, ni aun sobre sus hijos. Si ¢3 repudiada por su esposo, pierde el derecho hasta de sus hijos, aunque sean bebés, Los hijos solo pertenecen al padre, porque de él tienen su sangre. La mujer soltera le pertenece al padre; de faltar este, pasa a ser propiedad del mayor de sus hermanos. Si est4 casada, es propiedad de su marido; y de faltar su marido pasa a ser propiedad de su primer hijo. Le est prohibido relacionarse con los hombres, incluyendo sus hijos; en su propia casa, no puede sentarse a la mesa con su marido y sus hijos. Por ejemplo, los hebreos, todas las mafianas al orar, lo hacfan de la siguiente manera: “Oh Dios, gracias te doy que no nacf gentil, ni esclavo, ni majer”.! La mujer que vive bajo los pardmetros de vida de cualquiera de estas culturas, se convierte en. una persona vulnerable a los abusos fisicos, emocionales y espirituales. Cuando, donde y qué originé este conflicto? {Qué ha pasado?, ,dénde estuvo el problema?, ;por qué prevalece atin esta crisis de identidad?, ;fue asi como Dios lo disefié? Muchos consideran que se originé después de Ja cafda de la raza humana. Bn cuanto a quién fue el responsable, algunos dicen’ que fue el ‘hombre’, otros dicen que fue la ‘mujer’. Es cierto que cuando Dios le dio la orden a Adan de no comer del frbol de la ciencia del bien y del mal, Eva atin no habfa sido creada (Gén. 2:16-17). Pero también es cierto que cuando la serpiente se le acereé a Eva para engafiarla, esta ya sabfa que no debia comer de ese arbol (Gén. 3:1-3). En realidad, los dos fueron responsables de sus actos, ambos comieron voluntariamente y al hacerlo, ambos desobedecieron y recibieron las consecuencias de su desobediencia. Una de las caracteristicas de la naturaleza humana cafda es endosar la responsabilidad de sus faltas y de sus problemas a fos demés como una via de escape para no enfrentar las consecuencias. Un ejemplo de eso podemos leerlo en el libro de Génesis. Después que Adin y Eva comieron del arbol prohibido y les fueron abiertos los ojos, escucharon la voz de Dios que se paseaba por el huerto y se escondieron de su presencia. Dios [lam6é a Adan, quien le responde que estaba escondido porque tuvo miedo, ya que estaba desnudo, entonces Dios le pregunta cémo supo que estaba desnudo, que si habfa comido del arbol, y mira lo que ellos responden: * William Barclay, Comentario al Nuevo Testamento, Lditorial Clie, Barcelona, Espatia, 1970, p. 691. 15 FEE “Y ef hombre respondi: la mujer que me diste por compafiera me dio del drbol, y yo comt. Entonces' Jekovd Dios dijo a la mujer: ;Qué es lo que has hecho? Y dijo la mujer: La serpiente me engaié, y comi.” (Génesis 3:6b-13) Casi que puedo visualizar-a 1a ‘serpiente diciéndole a Dios: “...ef elefante...” En los primeros cinco capftulos del libro de Génesis se menciona el origen del hombre y la mujer. Dios tuvo Ja iniciativa de crear a un ser a su imagen y conforme a su semejinza, un hombre y una mujer, dos personas, y Jas llama por un solo nombre, Adan (Gén. 1:27; 5:2). Se dirige a ambos de la misma manera y les da las mismas instrucciones, responsabilidades y privilegios. Antes de la caida, ambos tenfan el mismo lugar de honor, tanto / delante de Dios, como ante ellos mismos. Sin embargo, después de la caida, ocurrié un cambio dentro del hombre. A partir de la caida, el hombre ha responsabilizado a la mujer por la falla de la raza humana, y la mujer ha aceptado esa responsabilidad. Desde entonces é] ha descargado su frustracién sobre la mujer. Est& demostrado que aunque una persona posea una personalidad y cardcter firme, sea de espfritu fuerte, tenga una estima saludable y esié segura de si misma, pero otra persona a quien ella respete, la maltrate y abuse en todos los sentidos continuamente, que le diga palabras ofensivas, castrantes, que nieguen su valor y dignidad; la primera persona terminard por sucumbir a esas palabras. Ahora, la perspectiva desde Ia cual Addn mira y estima a Bva ha cambiado, La caida originé terribles consecuencias en la naturaleza espiritual, emocional y fisica del ser humano. Este sentir se fue transmitiendo por medio de la tradicién de generacién en generacién, a muchas culturas. Al suceder esto, se fueron desplazando las verdades fundamentales por conceptos y perspectivas distorsionadas. Esta perspectiva distorsionada esta tan acraigada en ta raza humana que se puede ver reflejada a lo largo de las Escrituras. Cuando analizamos el lenguaje utilizado en las Escrituras y la actitud asumida en referencia a la mujer, tanto por Ie Dios como por los hombres, podemos notar c6mo cada uno de ellos mira a la mujer desde una 6ptica diferente. Alo largo de Jas Escrituras el lenguaje que Dios usa para referirse a la mujer es diferente del que ha usado el hombre a través de la historia de la humanidad. Por ejemplo, con respecto al relato de la mujer de Proverbios 31;10-31, el anélisis que de este pasaje hace el Comentario Biblico de Matthew Henry dice lo siguiente: “Esta descripcién de la mujer hacendosa, tiene por objeto mostrar Jas cualidades de una buena esposa, para estimulo de las mujeres mismas y para indicar a Jos hombres la clase de mujer que han de buscar por esposa.”” Estoy de acuerdo con este comentario, pero también hay que destacar que este pasaje no se trata de una parabola o de la narracién de una historia real, por lo que creo que es la expresién del modelo de mujer que existe en el coraz6n de Dios; es decir, una mujer cuyo valor es inestimable; que ha sido dotada de dones, de virtudes y de habilidades que la capacitan para ser de bendicién; con una conducta virtuosa en todos tos aspectos; a la que se le permite libre ejercicio e inherencia en todos tos aspectos de la vida, porque se confia en su capacidad y criterio; y sobre todo, una mujer que es estimada y reconocida. Por siglos, el judfo tradicional, el dfa viernes en la noche —cuando comienza el dfa de reposo o Shabat—-, retine a toda su familia para narrarles su historia, para afirmarfes su identidad como pueblo de Dios, para recordarle sus responsabilidades como tal y para bendecirles. Cada vez que esa reunién tiene jugar, el padre de familia o la cabeza del hogar leva a cabo una serie de titos y ceremonias, entre las cuales le lee a su esposa, delante de toda su familia, el pasaje de “La mujer virtuosa” de Proverbios 31, con el propésito de bendecirla’> Visuaticemos este cuadro més detalladamente. Cincuenta y dos veces al aiflo se le dice a la mujer Jo especial que es; cémo ha sido maravillosamente capacitada por Dios para hacer tantas cosas a favor de su familia y de la sociedad; se le dice lo fructifera e inteligente que es; que sus ? Mathew Henry, Comentario Biblico de Mathew Heury, Editorial Clie, Barcelona, Bspafia, 1999, p. 706. * http:/Horahinternacional.com/Besorah/Besorah%2009%20de%20Mayo-2009. pdf hi Jiuvew.mes a iors oot habath, S070 ‘L.doc#] opiniones o consideraciones sobre los negocios son de alta estima y de relevante importancia; lo digna y estimada que es por su esposo, su familia y la sociedad por causa de todas sus virtudes y contribuciones; y que esperan recibir de ella todo este bien del que ha sido dotada por Dios para bendicién de ellos. Pero contradictoriamente, Jés 313 dias restantes del aiio, se le dice que no hable, ni opine, porque es un ser ignorante ¢ indigno, que su criterio estd totalmente desprovisto de’ valor: Que solo existe para servir al hombre en sus necesidades basicas, para su alivio sexual, para la reproduccién y para el servicio. Que por no ser digna de confianza, no se le tomard en cuenta para las decisiones futuras y traséendentales del destino de su familia, y mucho menos de la sociedad. Es evidente el impacto emocional y la confusién de identidad que causa en una persona que sé Ie siente 52 veces al afio delante de su familia y se le diga lo especial’y Virtuosa que es, mo se supone que funcione y lo qué se espera de ella; pero que los 313 dfas restantes del afio se le trate como a un ser insignificante ¢ indigno. Con semejantes contradicciones y tratos, cualquiera tiene confusién en cuanto a su identidad y al propésito que tiene que cumplir en esta vida. En el libro de Proverbios hay veinte pasajes que hacen referencia a la mujer, cinco lo hacen en forma positiva y quince en forma despectiva. Es dificil no creer que el pueblo hebreo tena un concepto bajo ¢ indigno de Ja mujer; 16 peor es que estos conceptos negativos, a través de los sigles, han influenciado no solo al pueblo judfo, sino también a las demds civilizaciones, ya que han sido adoptados como normas de vida y conducta. Contradicciones como esas explican cémo a lo largo de la historia en todas Jas culturas hay tanta confusién en cuanto a Ja identidad y al desempefio del papel de la mujer. Otro ejemplo que podemos citar se encuentra en el libro del profeta Joél. Cuando Dios, a través del profeta, expresa su promesa de bendecir en el futuro a su pueblo y de derramar su Espiritu sobre ellos, no excluy6 a las mujeres. “Y después de esto derramaré mi Espiritu sobre toda carne, y profetizarn vuestros hijos y vuestras hijas... ¥ también sobre los siervos y sobre las siervas derramaré mi Esptritu en aquellos dias.” (Joel 2:28-29} 4Cémo es esto posible? En la mentalidad de los judios no le es permitido a fa mujer hablar en ptiblico, especialmente durante reuniones de hombres y mucho menos aun, traer una palabra de parte de Dios a los hombres estando en piiblico. Ella no puede participar del culto a Dios dentro de un recinto donde haya hombres. Sin embargo, al nacer la iglesia se le permitié estar presente en las reuniones de oracién y en los cultos, pero aun “asi no Ie era permitido hablar. Hoy en dia hay entre los judios diferentes posiciones; unos son un poco més liberales y abiertos en cuanto a la participacién de la mujer en las diferentes actividades, pero aun hay otros que son mas conservadores con sus costumbres, Otro ejemplo digno de analizar es cuando Dios saca al pueblo hebreo de Egipto. En la narracién de este hecho, generalmente se menciona que Dios ievanté a dos hombres para que dirigieran a su pueblo en esa travesia, a Moisés y Aaron, “Este es aquel Aaron y aquel Moisés, a los cuales Jehova dijo: Sacad a los hijos de Israel de ta tierra de Egipto por sus ejércitos.” (Exo. 6:26) Dios inspiré a Moisés para que escribiera todos esos sucesos. Pero Moisés nunca menciona que Dios también levanté a Marfa. Sin embargo, en el libro de Miqueas estd registrado, porque Miqueas escribié literalmente una profecia dicha por Dios. “Porque yo te hice subir de la tierra de Egipto, y de la casa de servidumbre te redimt; y envié delante de tia Moisés, a Aarén y a Marta.” (Miqueas 6:4) Aunque la religién, Ja tradicién, los historiadores y los escritores biblicos se empefien en ignorar que Dios escoge, levanta, unge y coloca mujeres estratégicamente para efectos del avance de su reino en la tierra, no pueden borrar la evidencia que existe a lo largo del Antiguo y Nuevo Testamento de mujeres a quienes Dios escogié y levanté para dirigir y bendecir a su pueblo. Del Antiguo Testamento, cabe destacar a Débora. Una mujer a quien 19 FO Dios levanté en medio del pueblo hebreo y colocé en una posicién de gobierno (Jue. 4-5). Durante ef tiempo de los jueces, periodo en el cual el pueblo de Israel viva de espaldas a Dios, y donde cada quien vivia como mejor le parecfa, razdn por la cual pueblos enemigos venfan contra ellos para oprimitlos y subyugarlos, Dios levantaba a un juez, una persona aguerrida, que los libraba det opresor. y luego tos gobernaba bajo Jos preceptos divinos. Una de estas personas a quien Dios levanté, fae a una mujer, Débora, No solo fue gobernadora de Israel, sino que fue una comandante militar en cuya mano Dios entreg6 al enemigo: Hay que mencionar también a Ester. Una esclava hebrea que se convittié en Ia esposa de uno de los reyes de Persia, Por su sagacidad, patriotismo y valentfa, fue usada por Dios como instramento para preservar a la nacién judfa, ya que habfa sido decretada su completa destrucci6n. ‘También mencionemos a Ruth. Una mujer gentil, moabita; viuda de un israelita, quien por voluntad propia decide volver a Belén junto a su suegra y adopta Ta cultura y la religidn hebrea. En obediencia a una ley que no era la saya, se casa con un hombre judfo, pariente de su exesposo y su hijo llega a ser el abuelo del Rey David. De esa manera llega a ocupar un lugar en fa gonealogfa del Mesias. Habiemos también de Rahab, Una ramera, de la tierra de Canaén, que recibi6 a dos espfas israelitas que habfan entrado en Ia ciudad de Jericé para reconocerla y los escondié y protegié. Ella sabfa que esos hombres venian a despojar a los cananeos de esas tierras, por io cual su rey les habia declarado a guerra. Pero también habfa escuchado de las hazafias de Jehova Dios a favor de los israelitas, raz6n por Ja que se arriesgé a protegerlos. Por su fe y valentia, no solo fue justificada, sino que fue preservada su vida y la de su familia (Jos. 2:1-21; 6:22-23; Heb. 11:31; Stg. 2:25-26) y pado cumplirse el propésito de Dios en esa ciudad. Del Nuevo ‘Testamento debemos mencionar a un gran atimero de mujeres que desempeiiaron un papel vital en el ministerio apostélico y en ta extension del Evangelio de Jesucristo. En el capitulo 16 del libro de Romanos, el apéstol Pablo menciona a un grupo de creyentes, entre los cuales figuran una larga lista de mujeres, quienes habian sido sus ayudantes y colaboradoras en el ministerio. Comencemos por la hermana Febe, a quien recomienda celosamente; Priscila, quien junto a Aquilas expuso su vida por el apéstol; Marfa, Trifena, Trifosa y Pérsida, mujeres que habjan trabajado 20 \? mucho entre ellos en el Sefior. En otros libros menciona a otras mujeres como Byodia y Sintique, mujeres que combatieron juntamente con él en el evangelio (Fil. 4:2-3). Loida y Eunice, abuela y madre respectivamente de Timoteo, quienes sembraron en él ta fe en Dios (2 Tim. 1:5). Entre la lista de personas a quien el apéstol Pablo menciona en el capitulo 16 del libro de Romanos, figura Junias, de quien dice que junto con Andrénico, eran compaiieros de prisiones y apéstoles muy estimados (Rom. 16:7). La mayorfa de los historiadores concuerdan en que evidentemente Junias se refiere a una mujer que fue una apéstol destacada y estimada. Aunque hay en el tiempo moderno quien quiere argumentar para demostrar que Junias se trataba de un hombre, més son las evidencias que demuestran lo contrario. Tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento existe una diferencia de pensamiento entre Dios y los hombres. Cuando Jestis estuvo en la tierra, rompié con todos los esquemas de la cultura de entonces. El hablaba con las mujeres, permitfa que estuvieran presentes en el mismo recinto donde I estuviera reunido y hablando; y no solo permitfa su presencia, sino que también se dirigfa a ellas, las atendfa y en algunas ocasiones, centré su atencién en ellas; también comia con ellas, caminaba ptiblicamente con ellas y fue justo al momento de tener que emitir un juicio sobre una de ellas. Para Ja cultura de entonces, eso era un escindalo. Cuando comparamos este cutadro con fa manera en la que los cristianos, incluyendo Jos apéstoles, trataban y se referian a las mujeres, vemos dos perspectivas diferentes. Analicemos el ejemplo del apéstol Pablo. Aunque para algunos parezcan fuertes y hasta irreverentes estas palabras, creo que es evidente que en él habia una dualidad de pensamientos. En su carta a los Gélatas él dice: “pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesiis... Ya no hay judio ni griego; ne hay esclave ni libre; no hay varén ni mujer; porque todos vosotros sois uno en Cristo Jestis.” (Gdlatas 3:26-28) Con esta declaracién pareciera que su postura fuera que e] hombre y la mujer en Cristo tienen igual valor para Dios. Debido a que las ensefianzas y os escritos det apéstol Pablo fueron los que establecicron en gran parte la doctrina de] Nuevo Testamento, el asunto de la poca estimacién de la mujer entre los judfos podria haberse dado por terminado; pero no fue asi porque a més adelante el mismo apéstol hace declaraciones que desvirttan lo antes dicho. En su primera carta a los Corintios y a Timoteo, él dice lo siguiente: “La mujer aprenda en silencio, con toda sujecidn, Porque no permito ala mujer enseftar, ni ejercer dominio sobre el hombre, sino estar en silencio. Porque Addn fue formado primero, después Eva; y Adén no fue engafiado, sino que la mujer siendo engafiada, incurrid en transgresion. Pero se salvard engendrando hijos, si permaneciere en fe, amor y santificacién, con modestia.” (1 Tim. 2:1-15) “yuestras mujeres callen en las congregaciones; porque no les es permitido hablar, sino que estén sujetas, como también la ley lo dice. Y si quieren aprender algo, pregunten en casa a sus maridos; porque es indecoroso que una mujer hable en la congregaci6n.” (1 Cor.14:34-35) La cultura y las costumbres sociales eran tan fuertes, que aun a los hombres de Dios les impedia ver y escuchar la manera en 1a que Dios el Padre y Jestis consideraban a la mujer, y lo que decian de ella. Claramente, atin prevalecfan en ellos sus perspectivas humanas, es decir, fortalezas en la mente. Podemos ver la gran influencia de las costumbres y los prejuicios de una sociedad machista que habfa esclavizado a las mujeres. Los patrones, conceptos y esquemas con los que nacemos y somos formados, son tan fuertes dentro de nuestra mente, que es muy dificil cambiarlos. Solo, como dice el mismo apéstol Pablo, con la renovacién del entendimiento; es decir, sustituyendo verdades o conceptos aprendidos por la verdad de su Palabra; para lo cual se necesita disposicin y determinacién. En algunos libros como el de Romanos y otros, el apésto! Pablo hace mencién de mujeres que fueron su ayuda y soporte en su trabajo en el Sefior; mujeres que combatieron junto a él por el Evangelio de Jesucristo; pero, sin embargo, como ya vimos, en otros pasajes de las Escrituras se refiere a las mujeres de forma’muy negativa, Queriendo pensar lo mejor del apéstol Pablo, podria decir que es posible que esta dualidad de pensamiento se debfa al extremo cuidado que los apéstoles y ancianos de la iglesia primitiva tenfan al pronunciarse 2 abiertamente en contra de esas costumbres y de su cultura; por un lado, por causa de los judios inerédulos, y por el otro, para no causar un impacto tan fuerte entre los que se convertfan al cristianismo; ya que de to contrario, provocarfan una fuerte persecucién de parte de los judfos incrédulos, o el rechazo absoluto de los que si se sentian atrafdos por las ensefianzas del evangelio. Ahora bien, habré quien diga: gcémo puede ser posible esta dualidad de pensamiento, si todas las Escrituras fueron inspiradas por Dios? Creo que los hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espfritu Santo como lo dice en 2 Pedro 1:21. Pero ciertamente fueron inspirados, no posefdos. Dios utilizé el lenguaje humano y revelé su Palabra usando al hombre, quien expresé el mensaje divino por medio de su vocabulario y la gramética de su lenguaje. Este hombre también posefa conceptos propios y cultura. El hecho de que el hombre fue inspirado por Dios, no anulé su identidad, ni su personalidad. A este principio se le denomina en Teologia: Identificacion sin pérdida de identidad* ‘Tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento, Ia participacion de Ja mujer estaba muy restringida, no solo en su vida privada, ptiblica y social, sino también en Ja espiritual. En los cultos realizados en las sinagogas, los judfos mantenfan a las mujeres desvinculadas dei desarrollo de dicho culto, Ellas no podfan dirigir ningtin aspecto de él, ni tampoco podfan orar, leer, preguntar o aprender junto con el resto de Jos asistentes; tenian que escuchar desde un lugar aparte, sin derecho a preguntar u opinar. La liturgia que se Ilevaba a cabo en la sinagoga seguia et siguiente programa: una oracién introductoria invocando la presencia del Sefior, luego la lectura de Ja oracién de Deuteronomio 6:4-9, luego se hacian oraciones de bendicién, alabanza, peticidn y accién de gracias. Seguido, se lefa una porcién de la ley y luego se explicaba alguna parte de los pérrafos leidos, si habia alguien calificado para hacerlo. Al final de la exposicida, se hacfa una oracién y casi al terminar, se cantaba un himno. Este era un cdntico congregacional del que se exclufa a las mujeres. Por tiltimo, se proclamaba la bendicién aarénica contenida en Nimeros 6:24-26. jA las mujeres ni siquiera se les permitia cantar con los demés para alabar a Dios! 4 Jonatan P. Lewis, Misién Mundiat, Editorial Unilit, Tomo 1, Miami, Florida, 1990, pp. 17-18 § Tuan Varela, BI culto eristiane. Origen, evolucién, actualidad, Editorial Clie, Barcelona, Espada, 2002, p. 90. 23 Quiero mencionar también a algunas mujeres que a lo largo de la historia de la iglesia se enfrentaron a un mundo que les era dificil y antagénico. Pero lo hicieron con valentia, Pardndose firmes en la palabra de Dios, obedeciendo 1a voz de su Iamado. Creyendo en El, cerraron sus ojos y oidos a las voces contrarias de quienes se les oponfan, convirtiéndose de esta manera en columnas y baluartes del Evangelio de Jesucristo; me refiero a mujeres como: Marfa Woodworth-Btter (1844-1925), quien fue conocida como “La mujer que mostré el Espfritu de Dios”, a quien hasta el dia de hoy, se le considera como “la abuela del movimiento pentecostal que se extendi6 por todo el mundo” > Aimee Semple McPherson (1890-1944), conocida como Ia “Mujer de la Providencia”. Se le consideraba como una mujer valiente, esforzada y que no vefa obstdculos cuando se trataba del evangelio. Durante la época de la Gran Depresién, construyé el ‘Angelus Temple’; un templo muy elaborado con capacidad para cinco mil personas sentadas. También construyé {a primera estacién de radio cristiana en el mundo? Por tiltimo, quiero mencionar a Kathryn Kuhlman (1907-1976), de quien se decia que era “La mujer que crefa en tos milagros”. Citando estas palabras, era como acostambraba a subir a la plataforma, Su ministerio senté los fundamentos para la obra def Espiritu Santo. También se le considera la precursora de la igiesia del futuro, es decir, la iglesia de hoy.* Estas tres mujeres tuvieron algo en comtin: por el solo hecho de set mujeres, sus ministerios no eran bien vistos ni por Jos hombres, ni por los religiosos de sus tiempos. Al igual que cllas, muchas otras mujeres de nuestro tiempo y de nuestra cultura han trafdo una palabra fresca, restauradora y liberadora; una palabra, que no solo ha edificado la vida de cientos de miles de mujeres, sino también Ja vida de cientos de miles de hombres. £ Roberts Liardon, Los Generales de Dios, Editorial Penicl, Buenos Aires, Argentina, 2000, pp, 53-88. tbid, pp. 269-313. “Thid, pp. 317-360. 24 2Existe alguna solucién para este conflict Sf existe. Ambos, hombres y mujeres debemos volver a las verdades fandamentales. Debemos volver a tas Escrituras y aprender del manual que nos dejé el Creador del ser humano, cuat es fa naturaleza con fa que ambos fuimos creados y conocer nuestro potencial, nuestras funciones y el propésito que puso en cada uno de nosotros. Nadie mejor que el Creador puede decirnos cémo fuimos hechos, para qué y cémo funcionamos. Dios es Dios. El no hace y nunca hizo nada al azar, El es omnisciente y sabio. 81 tenfa muy claro en su mente y corazén lo que iba a hacer y para qué lo queria hacer. En otras palabras, todo lo que Fi ha hecho, lo ha hecho con un propésito. Decit que todo lo ha hecho con up propésito nos hace entender que todo fo que hizo tenfa caracteristicas especificas y estaba dotado de cualidades y habilidades tnicas, para que pudiera hacer en esta tierra aquello para lo cual habfa sido creado. Es decir, el propésito determina el disefio. Cuando desconocemos quiénes somos y quiénes son los demas, no solo nos hacemos vulnerables a ser controlados y maltratados por otros, sino que también nosotros mismos tendemos a controlar y a maltratar a los demés. Tanto el hombre como 1a mujer fueron disefiados de manera diferente y ambos ven, procesan y responden a la vida de manera diferente; cuando esto no se entiende en su correcta perspectiva, se mal interpretan [as intenciones y se dafian las relaciones, Mas, por el contrarto, cuando sabemos quiénes somos; es decir, cuando conocemos nuestra identidad y entendemos el propésito de Dios en nuestra vida, aprendemos a respetar, valorar, reconocer y soportar a los demés; también aprendemos a apreciar las diferencias en los demés y a verlas como virtudes complementarias. Es por eso que es necesario volvernos ai Creador; solo viendo y entendiendo las cosas desde su perspectiva, podremos poner fin a tanto abuso y podremos comenzar a valorar y a disfrutar de los dones y caracteristicas tinicas que posee el otro género. ¢Cual ha sido la respuesta de la mujer a este conflicto? Los’ seres humanos reaccionamios. diferente al mismo estimulo, dependiendo de la personalidad, la educacién, la cultura y ntuchos otros factores, Algunas mujeres han asumido una actitud neutra, de resignacién y sometimiento. Por muchisimos afios han aceptado tos pardmetros que se le han dictado. Otras en cambio, que han reflexionado sobre sf mismas, han reaccionado de manera rebelde, porque se sienten violadas en su humanidad, en sus derechos, Por mucho tiempo, iiuchas mujeres han deseado ser hombres, debido en gran parte a la enorme diferencia de trato y beneficios que la sociedad ha brindado a favor del hombre. Hasta hace menos de tres décadas en nuestra cultara occidental y en ‘algunos paises desarrollados, era muy evidente la manera en‘ la que el hombre era favorecido. El gozaba de mejores oportunidades de estudio y de trabajo, mejores oportunidades pata desarrollarse y realizarse profesionalmente, mejor remuncracién por su labor, mejores beneficios legales, mejores responsabilidades y hasta se consideraban més dignas las tareas que Ja sociedad asignaba al hombre que a la mujer, gozaba de mayor prestigio, su opinién e interés era lo que prevalecfa y se respetaba, en fin, gozaba de mayores beneficios y privilegios. Debido a esa enorme diferencia, a tanto abuso y a la discriminacién de que ha sido objeto la mujer por mucho tiempo, para finales del siglo XTX, en los pafses industrializados, ésta comenz6 a levantar su voz. en pratesta por la desigualdad y el abuso. Inicié asf una fuerte lucha a favor de ella misma, pero con un enfoque equivocado. Se enfocé en demostrar io que ella era capaz de hacer, en lugar de dar a conocer lo que ella era. Se puede decir que fue un movimiento que comenzé en fos paises desarvollados, como consecuencia de los grandes cambios politions, ccanémicos y socidles que estaban sucediendo por causa de Ta Revohicién Industial. A este movimiento en Inglaterra se le llamo “Liberacién Femenina”, l que muy pronto pass a los Estados Unidos. & principios del siglo XX, hubo un suceso que influyé fuertemente en este movimiento feminista: la Primer Guena Mundial (1914-1918). Los hombres tuvieron que salir al frente de batalla y las mujeres tuvieron que ocupar su lugar en Tas grandes fbricas. Tan pronto como ella se dio cuenta de que su presencia fue determinante para la economia y la sociedad, sintié entonces Ia fuerza para exigir que se le reconociera el derecho a votar por sus gobemantes. 26 Todo eso comenz6 a cambiar la mentalidad de las mujeres, lo cual se hizo evidente en la década de los 20. El ama de casa tradicional dejé de sex surisa y comenzé a adoptar un estilo més masculino. Cambié los armadores por ropa sencilla de trabajo, comenzé a usar pantalones, a cortarse el cabello, a fumar, a conducir antoméviles y a practicar deportes considerados como varoniles, En algunas manifestaciones, las mujeres se quitaban los brasieres, los amontonaban y luego les prendian fuego como simbolo de prote: Luchaban para que se les dieran oportunidades de educacién y capacitacién profesional. Buscaban abrirse nuevos horizontes laborales. Defendian el derecho de tener mayor control sobre su sexualidad y se oponfan a la subordinacién al esposo dentro del micleo familiar. Para la década de los 60, cuando comienza Ja era de los hippies, Ja liberaci6n sexual y el amor libre, el movimiento feminista cobra un nuevo auge. Para ese momento, las necesidades basicas de la mujer comienzan a ser promovidas también por filésofos, soci6logos y defensores de los derechos y valores humanos. Ya para la década de los 70, Ja identidad de la mujer estaba bastante distorsionada; los valores del matrimonio y la familia habfan cambiado. Su papel dentro de Ja sociedad y la familia no estaban claros.” No se puede negar que muchos cambios han sido buenos y favorables, y que se han logrado muchos objetivos. Sin embargo, la condicién de nuestra sociedad y e] estado de nuestras familias hoy nos muestran que esos cambios también tuvieron repercusiones negativas. A pesar del paso del tiempo, atin sigue extraviada la verdadera perspectiva acerca de quiénes somos y cudnto este mundo nos necesita como mujeres. Dios doté con unas caracteristicas, capacidades y habilidades especificas, diferentes y Unicas al hombre, y con otras a la mujer; y los colocé a ambos en este mundo para que aportando cada uno de ellos 10 que son y lo que tienen, pudieran sefiorear y cuidarlo eficazmente. A este mundo le hace falta el aporte de 1a mujer. El hombre por sf solo no podré jamés aportar todo lo que este mundo necesita. Lo que la mujer debe ensefiar y afirmar es que ambos somos diferentes, pero complementarios y que, por ende, este mundo requiere el aporte de ambos. Necesita ensefiar que tanto hombres como mujeres se ° nitostivwwsw.elkiosko.com mxvla tiberagion femening,hien ” 2 ee necesitan el uno al otro. Que cada uno de ellos necesita que el otro género le aporte sus virtudes para que le complemente. Cuando el hombre y la mujer reconozcan y acepten el inmenso valor que tienen cada uno de ellos en sf mismos, que cada uno fue hecho tinico, con virtudes que el otro no posee y que necesita, y con carencias que el otro le puede suplir; perderén la engaiiosa necesidad de ser y ocupar el lugar del otro género para afirmar su valor. En su lugar, su realizaci6n plena consistird en que sean completa y absolutamente ef ser que son, es decir, ciento por ciento hombre y ciento por ciento mujer; asi aprenderdn a respetarse, a estimarse el uno al ofro, y a entender que parte de su realizacién plena yace en complementar al otro. - No quiero finalizar este capitulo sin antes compartir el testimonio de dos mujeres. La primera, Betty Greene, una de las fundadoras de “Missionary Aviation Fellowship”, quien pilote6 casi todo tipo de aviones excepto jets. Muchos dicen que nos sorprenderfamos al ver que nunca Iucié como un piloto y que frecuentemente cuando aterrizaba en campos de aterrizajes extranjeros las autoridades se sorprendfan al ver salir del avin a una mujer. Frecuentemente le preguntaban: “;Pilotea este avién sola?” Ella habfa decidido que si iba a entrar en “el mundo de los hombres”, tendrfa que hacerlo como una dama. Ella competirfa con el hombre para ser piloto, no para ser hombre. De modo que se rehus6 a actuar como hombre.'° La segunda mujer cuyo testimonio quiero compartir porque también, lo considero valioso, no solo por su actitud valiente y su cardcter determinado, sino porque para alcanzar cl éxito en su tiempo se levanté y enfrenté a un mundo que “pertenecia a los hombres”, segtin sus propias palabras; cosa que hizo, sin competit con ellos y sin querer demostrar que podfa ser como ellos. Su éxito 10 obtuvo afirmando que su fortaleza y su mayor virtud estaban en su condicién de ser mujer. Me refiero a la sefiora ‘Mary Kay Ash. Una mujer cristiana, de firmes y profundos principios espirituales. Desde nifia, debido a la influencia de su mam, aprendi6 a creer en ella misma y a luchar por sus suefios, por encima de cualquier obstéculo. Se convirtid en una mujer de negocios exitosa, aun cuando, segtin sus propias palabras, “muchas veces estuve en desventaja o impedida por ideas de lo que 1 Biisabeth Blliot, Ler Me Be a Woman, Tyndale Hause Publishers, tnc., U.S.A., 1976, pp. 64-65. 28 deberia y no deberfa hacer una mujer cuando trabajaba con los hombres”. Luego de jubilarse, después de 25 aiios como yendedora exitosa, pens en ayudar a que otras mujeres superaran esos obstaculos. Estando jubilada su interés fue mucho mds alld de Jo financiero. Ahora su interés era crear una compaiifa que le brindara a la mujer una oportunidad que no encontraria en otra parte. Vefa con frustracién Ja falta de oportunidades para la mujer. Durante sus afios como ejecutiva de ventas, vio muchas injusticias cometerse con las mujeres. Algunas de ellas eran verdaderamente excepcionales que lo més alto que podfan aspirar era ser la asistente de un ejecutivo importante. Mary Kay realizaba funciones de gerente de ventas nacionales; pero por ser mujer, le pagaban un sueldo de directora de capacitacién, Fueron varias las ocasiones en la que le asignaban aun hombre para que lo entrenara, y luego det entrenamiento le pagaban a ese hombre el doble del sueldo de ella, solo por ser hombre. Sus ideas de mercadeo no se respetaron, ni se consideraron nunca; la respuesta a sus propuestas siempre era: “Mary Kay, es que ti siempre piensas como una mujer”. Segtin sus propias palabras: “Aprendi, que mientras el hombre ereyera que la mujer no podfa hacer nada, esta nunca podria tener una oportunidad”. Pero también estaba convencida de que la virtud més grande que Dios le habfa dado, era ser mujet. Todo eso y mucho ms fue lo que la inspiré a crear una compafifa basada en la “Regla de Oro” (tratar a los demas, como td quieres que te traten a ti) y en la que pensar como mujer fuera una ventaja y no un obstéculo. Se propuso cambiar la percepcién que las mujeres tenian de sf mismas. Querfa clevar 1a conciencia de jas destrezas innatas que posee la mujer. Su suefio fue crear una compafifa que le permitiera a la mujer desarrollarse, afirmarse como mujer y alcanzar el éxito usando sus propias caracteristicas, cualidades y destrezas femeninas. Pue asi que después de comprar unas férmulas de cosméticos, disefié y desarroll6, como ella misma Jo define: “la oportunidad de negocio para 1a mujer”; “La compafifa de sus suefios”. Y asi, el 13 de septiembre de 1963, abrid las puertas de la compaiifa Mary Kay Cosmetics. Hasta el dia de hoy, varios afios después de su muerte (ocurtida ef 22 de noviembre de 2001), se conservan atin entre las asociadas de la compatifa, disciplinas y esquemas que “segtin su criterio”, eran una de las cosas que definfan a esa empresa como “Una compaiifa para fa mujer” y que levantaban y afirmaban la feminidad. Las asociadas siempre deben lucir muy 29 femeninas. Durante el ejercicio. dé su ‘trabajo, deben vestir siempre faldas con medias de nylon y tacones;’ preferiblemente iraje de modista, Deben mantener el cabello muy bien arregiado y las tufias impecables. La apariencia debe ser muy elegante, fémenina, pero profesional; nunca sensual. En la compaiifa predominan el color rosado y mucho glamur, encajes y perlas. El yehiculo que manejan como recompensa, las asociadas que han alcanzado cierto nivel de éxito, es’ tm Cadillac rosado. En fin, todas las cosas que, segtn ella, simbolizaban a.una mujer. Esos detalles me recuerdan el mismo enfoque 0 manera de pensar que tuvo Betty Greene, la piloto; que si iba a incursionar ert el: ““mundo de: los: hombres”, tendria que hacerlo como una dama, EI suefio de la sefiora Mary Kay era dejar un legado a las mujeres de las siguientes genéraciones. Y hasta hoy, ha cambiado y enriquecido la vida de miles de mujeres alrededor del mundo, que han puesto en préctica sus principios y convicciones. Estas mujeres, no solo han cambiado y bendecido la vida de sus familias financieramente, sino que se han realizado profesional y personalmente. Las mujeres que trabajan para esta compafifa, desarrollan un sano orgullo de ser mujeres. Mary Kay fue una mujer cuyo ejemplo y estructuras de negocio son utilizados hoy por escritores reconocidos como John Maxwell, La Facultad de Negocios de Harvard es una de las muchas universidades que utiliza su programa de mercadeo como recurso educativo. Ella escribié un libro titulado Mary Kay on People Management, en ol que plasins todas sus ideas y principios de mercadeo, y la “Regla de Oro”, como la gufa para trabajar con el personal y desarrollar un negocio exitoso. Este libro se convirtié més tarde en un bestseller. La revista Forbes la incluyé entre las més grandiosas historias de negocios de todos los tiempos (Greatest Business Stories of All Time). Ha sido nombrada tres veces como una de las “Cien mejores compafifas para las cuales trabajar en los Estados Unidos”. También ha sido nombrada como una de las diez mejores empresas para mujeres.’! Actualmente, la compafifa no solo abre sus puertas a las mujeres, sino también a los hombres. Hoy, tiene mas de 48 aiios de fundada y es interminable la cantidad de reconocimientos que ha recibido la sefiora Mary Kay y esta empresa, que nacié con ef propésito de Jevantar y afirmar a la mujer. "Mary Kay Ash, Ocurren Jos milagros, Alamah, México, 2005 (comentarios y cits tomadas de este fibro, «que es su biografia). 30 Independientemente de la idea que la sefiora Mary Kay tuviera de lo que representaba la feminidad externa de una mujer, lo que quiero destacar con el testimonio de estas dos mujeres, es que la verdadera lucha es la que se hace con Ia perspectiva correcta, la que corresponde a Ja misma perspectiva divina: EI valor de la mujer estriba en el hecho de ser mujer. La mujer tiene que reencontrar su yerdadera identidad y luego afirmarla. Cuando eso suceda, no lncharé mas por demostrar lo que es capaz de hacer, sino que se enfocard en ser toda una mujer. 3M Capitulo 2 La creacién de Dios. Iguales y diferentes Hay quienes luchan por demostrar que los hombres y las mujeres son iguales; que tienen las mismas capacidades y habilidades para hacer las mismas cosas y que como seres humanos, ambos tienen los mismos derechos y privilegios. Pero hay también quienes se empefian en demostrar que son totalmente diferentes ffsica y emocionalmente y que procesan la vida de manera distinta. Hay quienes afirman que la mujer es superior al hombre intelectualmente, en sentimientos, en cardcter, en destrezas y otros aspectos. Pero también estan los que se atreven a decir que Ia mujer es inferior al hombre, porque fue creada para él y porque por causa de ella se introdujo el pecado en la raza humana; por tanto, ella es su pertenencia, su servidora o esclava, y no se le debe tener consideraciones. Es un error gigantesco considerar cada una de estas perspectivas aisladamente, puesto que por sf solas son afirmaciones erréneas, sin embargo, cada una de ellas arroja ciertas verdades. ‘Muchos de los criterios utilizados como parémetros para establecer las diferencias entre hombres y mujeres, han sido tomados de resultados de estudios sobre las personalidades realizados por sicdlogos y siquiatras; pero habrfa que tomar en cuenta que esos estudios fueron realizados por hombres, lo cual los reviste de cierto grado de subjetividad. Ejemplo de ello son los andlisis sobre las mujeres hechos por el sicdlogo Sigmund Freud, quien 3 ejercié mucha influencia en sicdlogos y siquiatras contempordneos con él, y quien sostuvo que la mujer era inferior al hombre, que era un ser ansioso y neurético, a cuyo criterio no debia dérsele relevancia por estar muy influenciado por sus sentimientos y estados de animo."” En la narracién biblica de los capitulos | y 2 del libro de Génesis, encontramos el proceso de creacién del hombre, el cual sucedié de la siguiente manera: Dios habfa creado los cielos y la tierra, pero esta se encontraba desordenada y yacia, En seis dias Dios ordena todas las cosas y hace nacer vida vegetal y animal sobre Ja tierra. Después declara: “Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y sefioree... Y creo Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creo; varén y hembra los creo.” (Gen. 1:26-27) En el siguiente capitulo, versiculos 4 al 7, el narrador recuenta el proceso creativo y luego especifica cémo y cudndo Dios crea al hombre: “Estos son los origenes de los cielos y de la tierra cuando fueron creados... Entonces Jehovd Dios forms al hombre del polvo de la tierra, y soplé en su nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente.” (Gén. 2:4-7) Luego Dios, en un lugar especifico de la tierra, labra un huerto y alli coloca al hombre (al varén) que habia creado. Cudnto tiempo pasé para que Dios creara a la mujer, no lo dice el relato, solo habla sobre el orden de tos acontecimientos. Luego de colocar al hombre en el huerto, le da algunas instrucciones, ¢ inmediatamente dice: “Y dijo Jehovd Dios: No es bueno que et hombre este solo; le haré ayuda idénea para él... Entonces Jehovd Dios hizo caer suefto profundo sobre Addn, y mientras éste dormia, tomé una de sus costillas, y cerré la carne en su lugar. ¥ de la costilta que Jehova Dios tomé del hombre, hizo una mujer y fa trajo al hombre.” (Gen. 2:18, 2-22) 34 Después de crear todas las cosas, Dios decide crear a un ser a su imagen y semejanza. Primero forma al vardn det polvo de la tierra y luego, para formar @ la mujer, toma una parte de! cuerpo del hombre. Los dos tenfan la misma naturaleza, porque ambos fueron hechos del mismo material, de tierra. El hecho de que la mujer es sacada del hombre nos habla de que posec la misma naturaleza de él. Ambos tienen naturaleza humana, fisica; esto los convierte en seres compatibles. Luego de crear el cuerpo del hombre det polvo de la tierra, sopla en su nariz aliento de vida y ast convierte al hombre en un sex viviente. Hse aliento de vida que sale de Dios y que le da vida al hombre, es el ser que es imagen y semejanza de Dios. Tiene 1a misma naturaleza de Dios, porque sale de dentro de EJ, Cuando Dios crea al ser a su imagen y semejanza, en su mente habla dos enfoques: * EL primero_era relacignal, porque nos creé para que_tuvigramos relacién y comunién con El. * El segundo era ejecutive, porque nos creé para que desempefidramos una funci6n en esta tierra: enarla, cuidarla. gob . ella. Elespfritu de Dios podia relacionarse con el espiritu que estaba dentro del hombre, porque ambos eran dela misma naturaleza. Pero una de las cosas que El también queria al crear al hombre, era colocarlo sobre toda su creacién, para que sefforeara sobre ella y la cuidara, A fin de que eso fuera posible, tenfa que hacerle un cuerpo para que el hombre pudiera interactuar con este mundo natural, razén por la cual Dios crea un cuerpo fisico, que fuera compatible con este mundo material, natural. Dios crea al hombre, a la especie humana y los llama por el mismo nombre: Adan. Ahora bien, en esta especie humana, hace dos cuerpos, a un hombre y a una mujer; es decir, un cuerpo masculino y otro femenino, y coloca dentro de ellos al ser que es su imagen y semejanza, con su propia naturaleza: espiritu. Nétese que en el capitulo 5 del libro de Génesis, de nuevo se hace referencia al asunto de la creacién del hombre, Otro detalle al que debemos prestar suma atencién, es al juego de palabras que se utiliza en todos estos pasajes. “4. El dfa en que cred Dios al hombre, a semejanza de Dios lo hizo. 35 Varén y hembra los cred; y los bendijo, y lamé ef nombre de ellos Addn, el dia en que fueron creados.” (Génesis 5:1-2) La Esctitura dice que creé al hombre, que a semejanza de Dios lo hizo, en singular, Luego pluraliza la creacién y dice que varén y hembra los hizo, para luego finalizar en singular y decir que Hamé el nombre de ellos Adin. Este mismo juego de palabras lo encontramos en Génesis 1:27. “Y cred Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creé; vardn y hembra los creé.” (Nétese cémo primero lo dice en singular, “al hombre”, y luego en plural “varén y hembra los creé.”) {Somos iguales o diferentes? Totalmente iguales + Ambos son seres espirituales. Ei ser que habita dentro de ellos proviene de Dios, Dios sop!é sobre ellos, por tanto tienen Ja misma naturaleza diving; es la imagen de Dios dentro de ellos. * Ambos tienen el mismo acceso delante de Dios. fil se relaciona de Ja misma manera con el ser que habita dentro del cuerpo de ellos, porque tienen su misma naturaleza, espiritual; porque provienen de la misma fuente, de Dios. También porque esa fue la razén principal por la que fueron creados, para tener comunién con El. Cuando ambos se acercan a Dios, El los recibe con la misma solicitud, consideracién, amor, dignidad, honor, valor y respeto, Dios no hace ninguna diferencia entre ellos, * Tanto al hombre como a la mujer, les fue dada ia misma responsabilidad de cuidar, gobernar, sefiorear y sojuzgar sobre la creacién de Dios, la tierra. Ambos deben ejercer el mismo dominio sobre la creacidn. Los dos son igualmente responsables delante de Dios por ella. 36 Totalmente diferentes * Dentro de la tarea de gobernar y sojuzgar, cada uno tiene responsabilidades diferentes. Para poder Mevarlas a cabo, cada uno de estos cuerpos fue disefiado de manera tinica; con habilidades y caracteristicas totalmente diferentes. Cada uno de ellos posee y manifiesta rasgos y caracteristicas de la naturaleza de Dios. Es por eso que no podemos seffalat como de mayor importancia 0 relevancia las caractetisticas de uno y subestimar las del otro. Reconocer que fisiolégica y emocionalmente somos diferentes, en lugar de separarnos, doberfa unimos, ya que muestras diferencias son complementarias. Ambos necesitamos de las caracteristicas, habilidades y capacidades del otro para funcionar més eficazmente en este mundo. No estoy diciendo que el uno sin el otro no pueda funcionar o ser eficaz; s{ funcionaria, pero no seria io eficiente que puede ser con el aporte de las habilidades y capacidades complementarias del otro. El hombre solamente puede funcionar como hombre; y la mujer, solamente puede operar como mujer, Nunca uno solo de ellos podré cumplir con sus responsabilidades y al mismo tiempo Nenar y satisfacer a cabalidad 1a ausencia del otro. Eso me recuerda las palabras de la conferencista y escritora Joyce Meyer, quien lo expresa de manera jocosa y sencilla, como ella sucle decir las cosas: “diferentes no quiere decir mejores 0 peores, simplemente diferentes”."’ Cuando aceptamos esta realidad en su correcta Perspectiva podremos valorar y apreciar lo que nos puede aportar el otro género. En un trabajo en equipo, cada uno de los integrantes tiene una capacidad y una responsabilidad diferente para la realizacién de una labor. La participacién de cada uno de ellos hace falta para cumplir con esa tarea. Si alguno de ellos faltara 0 no diera su aporte, cumpliendo con su responsabilidad especifica, aumentaria el trabajo al resto de los miembros, ya que para terminar satisfactoriamente con la tarea encomendada, no solo tendrian que cumplir con sus responsabilidades personales, sino también cubrir las del miembro faltante. "Joyce Meyer, Mujer segura de sf misina, Casa Creacién, Lake Mary, Florida, 2007, pla. 37 Un ejemplo que ilustra el maravilloso aporte que hacen con sus habilidades o capacidades tinicas, los diférentes miembros de un equipo, es la competencia de natacién. con’ televo, En esta competencia participan cuatro nadadores. Cada uno tiene que realizar un estilo de nado. Uno de los nadadores realiza el estilo pecho’o braza, otro el estilo libre, otro el estilo espalda y el titimo el estilo mariposa..Lo importante en esta competencia es que para que el equipo gane, tienen que participar sus cuatro integrantes, y cada uno de ellos debe realizar el estilo de natacién que Je corresponde. No se puede prescindir- de ninguno de los nadadores, porque tienen que realizarse los cuatro estilos dé natacién, y ninguno de los nadadores puede remplazar a otto. También podemos considerar nuestro ecosistema. Para que este no se rompa, se necesita que participen todos los seres y subsistemas que lo componen. La participacién de cada uno de ellos, més que importante es imprescindible. Ninguno de sus componentes es més importante 0 necesario que el otvo; si alguno de ellos cesa en su funci6n y aportacion, el ecosistema se desequilibra y pierde su coordinacién, trayendo como consecuencia un cas. ¢£Cémo queda el tema de la sumisién? Asi como el ser diferentes no nos hace inferiores, ser ignales no anula la sumisién. Cada vez que escuchamos esta palabra, automaticamente la asociamos con Ja manera en la que se relaciona un hombre y una mujer dentro del matrimonio. Lo otro que viene a nuestra mente y emociones, son sentimientos de rechazo y autodefensa. Debemos entender algunos principios de la sumisién para poder disfrutar de sus beneficios. La sumisién es un plan disefiado por Dios para nuestro beneficio. ES decir, para hllestia protecclon, resguardo, seguridad, fuerza Toctzn ’ paca que la autoridad que debemos ejercer sea respaldada y fluya, El Sometimientoes_un_acio de fa _voluntad, Antes de poder someternos a alguien, debemos primero estar sometidos a Dios;, este es ef principio; la base para poder someternos a otros. Estar sometida significa que voluntariamente me pongo a la disposici6n de otro. Me tefiero a todo lo que soy, lo que tengo, mis 38 ' emociones y sentimientos, mis deseos y mis sueiios, mis talentos, habilidades y dones, etc, Para poder disfrutar de los beneficios de estar sometida debo estar dispuesta a alinear mis pensamientos, emociones y acciones, a fa palabra y a la voluntad de Dios. Solo hasta entonces podé convertirme en Ja mujer poderosa que Dios quiere que yo sea, y que yo misma quieso ser. Estar sometida, habilita a Dios a hacer cosas que redunden en mi beneficio, Libera el favor de Dios para_mf. Solo dentro de un Yerdadero esquema de Rufio & de somelimvents. podemos saber quicuen somos realmente y funcionar eficazmente de acuerdo a lo que somos. Casi siempre se ha Teladionade Ta”palabra sumision con debilidad y Talia de cardcter, nada mds lejos de la verdad de Dios. En toda comunidad o sociedad es necesario que uno de sus miembros ejerza la posicién de cabeza, para dirigir y establecer las pautas, mientras que los otros se_subordinan a esa autoridad y se someten a los pardmetros que se establezcan. De esa manera puedé haber un marco de orden y entendimiento, sin ef cual dicha sociedad se convertirfa en una anarquia. Es dentro de este marco de orden, autoridad y respeto, cuyo propésito es delinear las funciones y responsabilidades especificas de cada uno de sus miembros, y velar por los derechos de los mismos, que se hace posible el desenvolvimiento y desarrollo de cada uno de ellos, por Jo que se puede avanzar y lograr el propésito. Para mf, el mejor modelo de lo que es Ia verdadera sumisién es la Trinidad. Las tres personas, Padre, Hijo y Espiritu Santo, son exactamente iguales en naturaleza, esencia, poder y autoridad; son un solo Dios. Sin embargo, como personas individuales, cada uno de cellos tiene responsabilidades diferentes en el propdsito eterno de Dios con el hombre. La tarea del Padre fue crear (por supuesto con la participacion del Hijo y del Espiritu Santo). La del Hijo fue venir como hombre a la tierra en su labor de yedentor, y estar ahora a la diestra del Padre intercediendo por la humanidad. La del Espirit es, entre muchas, convencer al mundo de pecado, de justicia y de juicio; aperar el nuevo nacimiento en Tos corazones de Tos que reciben fjo como su Sefior, imputar la obra de Jesucrisio a la vida de todos Tos creyentes; recordar a los creyentes todas las palabras habladas por Jestis y pot_el Padre; y Mevar a los hombres a Ia verdad. Durante ta vida de Jesucristo aqui en la tierra, El y el Espiritu Santo estavieron subordinados al Padre. E1_no_hablé_por_su_propia cuenta, obedecié lo que el Padre le indicaba. No vino a hacer su voluntad, sino la del que lo envié (Jn. 12:49-50; 4:34; 5:30; 6:38). Sin embargo, Jesucristo y el Espiritu Santo no eran 39 | ! inferiores al Padre, solo desempefiaban reg sponsabilidades diferentes, dentro de un marcg de autoridad y_ Tespeto, En esto vemos que se cumple el dicho: “Entre iguales, no hay superiores”. Desde esta misma perspectiva debe entenderse el asunto de que el hombre es Ja cabeza de Ja mujer. Ser cabeza'no le hace superior a Ja mujer, solo le asigna mayor responsabilidad. Nadie pierde su. valor 9 autoridad por, estar en una posicién de_sometimiento-a otra autoridad. Este es un_asunto de funcién, no_ de yalia, Nuestra _posicion tiene que ver es con nuestro prop6sito en la vida, EF propésito ‘es el que hace necesaria 1a posiciéa. El hombre y la mujer_son_iguales espiritualmente, pero dentro de esta esfera natural, tienen diferentes responsabilidades'y papeles que cumplir. Existe un principio que nos enisefia que todo lo que proviene 0 procede de algo, por naturaleza se_somete a aguello de Jo cual procede. Es decir, se establece automaticamente un orden de jerarquia, La Palabra de Dios dice que el hombre procede de Dios, que la mujer procede del hombre, y que los hijos.proceden_detlos padres. En 1 Corintios 11, se dice que la mujer fue creada por.causa.del.varén; pero en el Sefior ninguno es sin el otro, porque es cierto que la mujer proviene del vardn, pero cl hombre nace de la mujer. Los hijos provienen de los padres. De acuerdo a este principio, entendemos que el hombre es cabeza de la mujer, porque fue creado primero que ella, y porque ella procede de! hombre; fue formada de una costilla que fue sacada de él. Los padres tienen que dar cuenta a Dios por los hijos; de igual manera, el esposo da cuenta a Dios por la esposa. Para que los_hijos gocen de los beneficios comespondientes deben estar sometidas a, .sus.padses; solo de esa manera podrin disfrutar de Ta bendicién, amor, cuidado, proteccion, provision, dioccién y oobijo que le quieren dar sus padres. Bn esta misma linea, para qe ios a 0 tales tienen dentro de sus casas, y puedan hacer valer x deneches privileges como is. _deben estar sometidos a la autoridad de la casa, es decir, a sus padres, Fste mismo principio funciona con la esposa con respecto al mario. La mujer se somete a su maride y goea de todos los beneficios de estar sometida a la auttoridad del esposo, quien a su vez. est sometido y da cuentas a tuna autoridad que esta sobre él, que es Cristo. Solo si esté sometid a Ctisto, su cabeza, podrd gozar de los beneficios que te da su cobertura; fa bendicién, amor, cuidado, proteccién, provisién, direccién y cobijo, y también pode gorar del respaldo que Crisio le dari como cabeza de hogar cuando ejexza sus fanciones como tal, y como aquel que tiene que rendir cuentas porla mujery su faailia, e) Si los hombres entendieran que cuando estén verdaderamente sometidos a la autoridad de Dios, es cuando tienen la moral para ejercer su autoridad, y estén verdaderamente capacitados para ser de bendicién a sus familias, solo de esa manera ha de fluir el respaldo desde su cabeza, que es Cristo, hasta_su familia, Soto cuando un hombre estd alineado con los pardmetros de Dios, puede pedir y esperar el respaido de la autoridad divina, a la que est4 sometido. Por eso mismo, el apéstol Pablo les decia a los hombres: “Vosotros, maridos, iguaimente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer como a vaso mas fragil, y como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no tengan estorbo.” (UU Pe3:7) Dios ha establecido un orden para todas las cosas en la vida; no para darles mayor valor a anos sobre los otros, sino para_establecer responsabilidad y para asegurar el flujo de autoridad que rediumdard en beneficio de aquellos que se alinean |. Una manera de explicarlo es analizando el orden de responsabilidad y el_flujo_de_autoridad dentro de_un_ejército. Menciondndolos por orden descendente, tenemos lo siguiente: En primer lugar el general en jefe, el cual es el presidente de la reptiblica, luego vienen el general cuatro estrellas, el general tres estrellas, el coronel. el mayor, el_capitin, el_teniente, el subteniente, el sargento_y por ultimo el soldado. Para asegurar el flujo y respaldo de autoridad, este orden no puede quebrantarse. Nunca un soldado © un sargento gbedecerén aun capitin o a un coronel que dicte una, . contraria a las dictadas por el general, o que se haya rebelado a la autoridad de sus superiores. La autoridad siempre _fluye a hacia abajo. La autoridad que respalda aun general del ejército es la que le ha sido delegada por el presidente de la repiblica, siempre y cuando permanezca sometido a ~Suordende autoridad, De esta manera debemos entender el principio “del —sametimiento, iit ara_minimizarnos, o asignarnos.menos valor, sino solo para nuestro benefici Dios-es un Dios de orden, por lo que ha establecido un _esquema.ce, antoridad...61 mismo establecié pardmetros de_orden, autoridad_y respeto como marco dentro del cual los seres humanos debfamos funcionar. En las Escrituras encontramos tales parémetros: 41 “Pero quiero que sepdis que Cristo es la cabeza de todo varén, y el vardn es la cabeca de la mujer, y Dios la cabeza de Cristo.” (1 Co.11:3) Este marco de autoridad es explicado por el apéstol Pablo en otra de ‘sus Cartas: “Someteos unos a otros en el temor de Dios, Las casadas estén Sujetas a sus propios maridos, como al SéHOF; porque el marido es cabeza de la mujer, ast como Cristo es cabeza de {a iglesia, la cual es su cuerpo, y él es su Salvador. Asi que, como la Iglesia esté sujeta a Cristo, ast también las casadas lo estén _a sus maridos en todo,. Maridos, amad a yuestras mujeres, ast como Cristo amd a la Iglesia, y se eniregd_ast_ mismo por ella, para .santificarla, habiéndola purificado_en_el lavamiento del agua por la palabra, a fin de presentdrsela a si mismo, una iglesia gloriosa, queno tuviese’mancha njarruga ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin mancha. Ast también lox maridos Deben amar.a sus mujeres como. sus mismos cuerpos, El que ama a su mujer, a st mismo se ama. Porque nadie aborrecié jamds q_su propia carne, sino que la sustenta y la cuida, como también Cristo a la iglesia, porque somos miembros de su cuerpo, desucarne.y de sus huesos,.. Por lo demds, cada uno de vosotros ame también a.su mujer como a st mismo; y la mujer respete asumarido.” (Ef. 5:21-30,33) “

También podría gustarte