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A. Saludos, 1: 1-2.
B. Exhortación, 1: 3-11.
2 Pedro 2:1-22
- Pero hubo también falsos profetas entre el pueblo, como habrá entre
vosotros falsos maestros, que introducirán encubiertamente herejías
destructoras, y aun negarán al Señor que los rescató, atrayendo
sobre sí mismos destrucción repentina.
- Pero hubo también falsos profetas entre el pueblo, como habrá entre vosotros
falsos maestros, que introducirán encubiertamente herejías destructoras, y aun
negarán al Señor que los rescató, atrayendo sobre sí mismos destrucción
repentina.
- y por avaricia harán mercadería de vosotros con palabras fingidas. Sobre los
tales ya de largo tiempo la condenación no se tarda, y su perdición no se
duerme.
En 2 Pedro 2:19 dice: “Les prometen libertad, y son ellos mismos esclavos de
corrupción”, cuando solo Jesús puede dar libertad como se señala en Juan
8:36 “así que, si el hijo os libertare, seréis verdaderamente libres”, muchos
falsos maestros se han levantado dentro del pueblo de Dios con intereses
propios de avaricia, es por ello que se ven en la actualidad líderes cristianos
acaudalados con las dadivas de la feligresía, ante ello nuestro señor Jesucristo,
Pablo y Pedro nos advierten y nos instan a estar despiertos, en alerta a que
tengamos mucho cuidado con estos falsos maestros, señalándonos a que “por
sus frutos los conoceréis”; asimismo, dándonos un sin número de descripción
de estos falsos maestros en 2 Pedro 2:12-18 (Blasfemos, alegres por pecar,
manchados, engañadores, adúlteros, no cesan de pecar, convencen a otros,
codiciosos, malditos, extraviados, hipócritas, seductores, vanos y esclavos).
Solo con oración y probando con la palabra profética más segura (la Biblia), se
podrá advertir la aparición de estos falsos maestros.