No sé qué he dicho para que aparezca, pero quiero que vuelva a suceder.

Voy a luchar por lo que quiero, y una mirada a esa mujer y supe
exactamente lo que ansiaba, lo que necesitaba. A ella. Sólo a ella.
Mientras me miran, todas menos la persona que quiero que se fije en mí.
Ni siquiera mira en mi dirección, a pesar de que debe sentir mi mirada
clavada en ella.
Él ignora mis palabras.
Se estremeció y me sentí como un imbécil.

Sus siguientes palabras me hacen sentir como si me hubieran arrojado un balde de agua helada.

El sonido de un motor girando me recordó dónde estábamos, y de mala

gana puse a Skye de nuevo en pie.
Maldita sea, ¿cómo he tenido tanta suerte?
Había un plato cubierto en la isla y suspiré. Mi dulce chica me había dejado la cena otra vez.

Mi próximo beso te dejará temblando… por todas partes.

Un protector, un amante devoto, todo lo que ella necesita.
Es un ciervo atrapado en los faros, pero, por suerte para ella, estoy aquí
para cuidarla.
Ladré. Imogene retrocedió en shock, e inmediatamente lamenté mi tono.

Una extraña sensación de orgullo se apoderó de mí al ver su determinación de no dejarse

intimidar.

— ¿Cómo podría no hacerlo? Eres perfecta para mí, bebé.

Parece que voy a cámara lenta mientras abro la puerta y abro mi única
oportunidad de amor.
El peso de su rechazo se sienta pesado sobre mis hombros.
"Acabo de llamarle imbécil, así que sí, tengo un problema con eso".
"Te echo de menos", su voz se quiebra, y también lo hace un trozo de mi
alma. "¿Por qué me dejaste atrás?"
Sus necesidades y sus deseos siempre estarán antes que los míos.
Porque siente que no se lo merece.
“Así que la próxima vez que decidan mencionar su peso o sus hábitos alimenticios, serán
despedidos”. —Nadie lastima a Cara. No en mi maldito castillo.”

La sola idea de que ella sea la novia de otra persona me revuelve las entrañas.

Me juré a mí mismo que una vez que fuera mía, compensaría todo el daño que había causado
mientras luchaba por mantenerla a distancia.

Su sombra de las cinco de la tarde me hacía cosquillas en la palma de la

mano.
—¿Que me ofreces? —Eso es una pregunta capciosa, nena.

Mía para tomarla. Mía para protegerla.

La cabeza de Bianca voló en mi dirección, y la miré fijamente, desafiándola a que no estuviera de
acuerdo.

¿Cómo demonios podría vivir sabiendo que el hombre que amo me odia
profundamente?
¿Es posible enamorarse de alguien tan rápido?
No puedo soportar la idea de que pueda odiarme.
Sus ojos verdes, tan parecidos a los míos, brillaron con diversión, y las
esquinas se arrugaron cuando sonrió.
Reproduzco frenéticamente el último minuto de nuestra conversación y
mi corazón se desploma aún más. Mierda.
Este es el mundo en el que vive.
Y sé que ésta es sólo la primera de las muchas mañanas de Navidad que
pasaremos juntos.
Mis caderas empiezan a mecerse contra las suyas con cada empujón y
pronto encontramos nuestro propio ritmo.
Me río más fuerte hasta que alguien carraspea detrás de mí.
—¿Estás bien, Sandía? —digo con una nota de desesperación en mi voz.
Llámame bastardo egoísta, pero quiero cada momento de su tiempo y
toda su atención.
Su barba roza mi suave piel.
Me alegro de haberte encontrado.
Debes saber que soy naturalmente muy dominante. Una vez que tengo
algo no lo dejo ir.
Le agarro de la parte delantera de la camisa y tiro de él hacia mí.
"No se trata de que seas débil, calabacita", me decía con esa aspereza de
fumador que tenía. "Se trata de tratarte como la reina que eres. No te
mereces nada menos".
Su brazo me rodea la cintura y me atrae contra su costado
Esta es su lucha, pero quiero que sepa que no tiene que afrontarla sola.
Es extraño que no sepas lo que te pierdes hasta que lo pruebas por
primera vez.
No soy capaz de decirle que no a la mujer de mi vida.
No puede retractarse ahora y actuar como si no hubiera pasado nada
entre nosotros.
Su brazo me rodea la cintura y me atrae contra su costado.
Sé que está tratando de desafiarme, y me gusta.
Ignoro la punzada de dolor que sus palabras provocan en mí.
No tenía ni idea de que se sintiera así.
Yo nunca te dejaré marchar. Nunca.
Quiero hacer realidad cualquier deseo/sueño tuyo.
La atraigo más fuerte y nos quedamos así un rato.
Mi voz sale como un chillido, pero me cuesta respirar con él tan cerca.
Sus ojos se oscurecen un poco y su cuerpo se relaja bajo el mío.
Siempre sabe qué decir para hacerme sonreír.
Cada hueso de mi cuerpo anhela estrecharla entre mis brazos, hacer que
su dolor desaparezca.
No voy a descansar hasta tenerla con mi anillo en su dedo...
Mi corazón y mi cuerpo están sintiendo tanto placer ahora mismo.
Su sabor es tan dulce y perfecto como lo recordaba.
Te extraño tanto, que cuando me despierto cada mañana, estiro mi brazo
para poder abrazarte, olvidando que estás ahí, y dándome cuenta del
error de haber herido y perdido a la persona más feliz me ha hecho.
De repente, ya no oigo el incesante parloteo de Hadley.
Un solo toque es todo lo que hace falta.
—Estás muy cerca de mi chica, Kade. Aléjate —dice Zack frente a nosotros
con un gruñido.
.. jadeó con indignación, pero yo vi la culpa que se reflejaba en sus ojos.
Sus besos recorren mi cuello y me estremezco bajo él.
Me ha matado no estar ahí para ella entonces y especialmente ahora.
Muri se giró y le dio otra vista impresionante de su trasero.
Sí", digo, levantando el vaso medidor como si estuviera demostrando algo.
Había pensado en su figura en varias ocasiones, pero mis ensoñaciones no
eran nada comparadas con la realidad que tenía ante mí.
Nuestras lenguas se encuentran y se enredan en un beso que hace que las
ondas de choque recorran mi cuerpo.
mientras lo acerca para darle un abrazo, y nuestros ojos se conectan por
encima de su hombro.
Ella sonríe y mi mundo se ilumina como un árbol de Navidad.
Y aunque estoy seguro de que puede cuidar de sí misma, no puedo evitar
querer mimarla y tratarla como sé que se merece.
Nick estaba sufriendo. Y era su culpa. Necesitaba hacer desaparecer ese
dolor.
Sus dulces risas se convierten rápidamente en gemidos cuando empujo y
la follo contra el colchón.
Sus dedos encuentran el cierre de mi sujetador.
No puedo creer que no sea capaz de ver lo mucho que la amo.
No puedo creer que me haya lanzado a un hombre así.
Seguro que es virgen. Lo sé por la forma en que se sonroja cada vez que
estoy cerca. Cada palabra sucia que digo hace que esas adorables mejillas
florezcan con calor rosado.
Salgo corriendo y me subo, solo hay un lugar en donde puede estar.
Mentalmente rezo para encontrarlo ahí.
Se acercó a él y él agachó la cabeza para besarla antes de rozar sus
narices. Era asquerosamente adorable.
La agarro con más fuerza mientras ella empuja su húmedo coño contra mí
y gime.
No quiero imaginarme la vida definitivamente sin ella.
Se le escapa una sonrisa que hace que sus hoyuelos salgan a relucir.
Sus ojos se quedan fijos en los míos.
Lentamente, se levanta la camiseta de algodón para revelar el tesoro que
se esconde debajo.
Se muerde el labio inferior con nerviosismo, como si esperara que la
detuviera, pero no lo hago.
porque en sus ojos puedo ver que ella también me ama.
Nos revolcamos en un lío sudoroso, pegados el uno al otro.
Owen fue todo para mí, le di mi corazón y lo rompió en mil pedazos.
Todo mi cuerpo está caliente y deseoso cuando baja su boca hasta mi
clítoris. Gimo con fuerza cuando su lengua se arrastra lenta y fuertemente
contra mi pequeño clítoris. Me agacho para enredar mis dedos en su pelo
mientras aprieto mi coño contra su cara. Hacía tanto tiempo que no me
excitaba que casi no puedo creer que este momento esté a punto de llegar.
Se levanta rápidamente, rompiendo mi corazón en un millón de pedazos.
Vuelve a dejar caer sus dulces e inocentes ojos sobre su plato mientras
sus mejillas se encienden.
La forma en que me mira me hace sentir segura y apreciada.
Una sola lágrima corre por su mejilla y la limpio con el pulgar.
Me muestra una sonrisa malvada que me irrita y me excita al mismo
tiempo. Este hombre me hace sentir las emociones más confusas y, sin
embargo, no puedo resistirme.
inquiero con la voz rota.
El calor se encendió dentro de ella al sentir las manos de él apretando sus
curvas, anclándolas juntas.
Recorro con mis manos la fría piel de sus brazos, sintiendo cómo se
estremece ante mi contacto.
Mi peor error fue perderte,
Suena el timbre del apartamento. Cojo mi bolso y me dirijo a la puerta
para abrirla.
Quería encontrar un hombre que me amara y que estuviera en esto a
largo plazo.
Sus ojos se llenan de una oscura necesidad que me dice que es hora de
follarla como es debido por primera vez.
No puedo seguir enfadada con él, no cuando me mira como si hubiera
colgado la luna y las estrellas.
Me pasa las manos por el pecho y me rodea el cuello con los brazos.
Mi visión se oscureció, mi cuerpo comenzó a temblar y exploté en una
oleada de sensaciones.
nunca me perdonaré lo ciega que fui.
Su piel está enrojecida y su pelo es un desastre, pero nunca ha estado más
hermosa.
Parece tan feliz y emocionado de saber de mí que se me llenan los ojos de
lágrimas.
Ella gime en mi boca y yo profundizo el beso.
Me agarro con fuerza a la puerta y me quedo mirando cómo entra en la
habitación. Joder, se lo está buscando.
Su mirada recorre lentamente mi cuerpo.
Nunca he dejado de amar a Lily, incluso después de que me rompiera el
corazón.
¿Cómo su amor pudo resistir por tanto tiempo?
Mis manos buscan sus caderas y agarran su culo.
Parece pensarlo un momento y su voz suave responde
Lucharé cada día por el resto del tiempo para que mi oscuridad nunca
apague su luz.
Ser amado por alguien es el mayor regalo de todos.
Su mirada, cuando llega a la mía, refleja el deseo que siento por él.
pero sentirlo, verlo, vivirlo, es algo totalmente distinto.
la sombra de las cinco en punto
Me las arreglo para sonreír durante..
Intentando memorizar cada detalle de su atractivo rostro.
Mi piel se calienta y me inclino hacia su suave tacto.
"No podía soportar la idea de que te pasara algo"
Mi lengua baila con la suya mientras mis manos se mueven por sus
caderas hasta la suave carne de su culo.
No logró terminar la frase cuando una mano la tomó fuerte de su muñeca
y la jaló para caminar.
El sonido provoca en mi cuerpo cosas que nunca antes había sentido.
Joder, me encantaría poner un bebé en su vientre ahora mismo. Pero
tenemos demasiada mierda que resolver antes de que eso ocurra.
Lo peor de todo es que me he dado cuenta de que estoy enamorada de ___
y que no hay nada que pueda hacer al respecto.
La decepción me invade. Porque quería compartirlo con mi mujer.
La levanto del suelo y la coloco en mi escritorio detrás de ella.
Abrumada, mis sollozos vuelven a aparecer y abrazo con más fuerza al
hombre que amo.
Aquella noche estaba decidida a hacer algo loco, pensaba darle una
lección a los Quinn.
Las lágrimas corrían por sus mejillas, y él odiaba el hecho de haber sido él
quien las había puesto ahí. Lo último que quería hacer era hacerla llorar.
Detecto un matiz de desesperación en su voz y se me rompe el corazón.
Suspiro, sin saber cómo explicarme.
"¿No te asusta estar cerca de un tipo que a veces está demasiado aterrado
para salir de su cabaña?"
Eres todo lo que siempre quise
Respiro profundamente y levanto la cabeza para mirarlo.
Solo espero que mi corazón no se rompa en el proceso..
Le rodeo la cintura con los brazos y la levanto, haciéndola girar en círculo
antes de volver a ponerla en pie con cuidado.
El lugar más seguro para ti será siempre a mi lado. Siempre.
Es como si todas las terminaciones nerviosas de mi cuerpo se activaran a
la vez.
Un destello de dolor aparece en sus ojos, pero desaparece.
Jadea y se tapa la boca con las manos.
De lo contrario, me arrepentiré el resto de mi vida
Antes de que las palabras salieran de mis labios, se estrelló dentro de un
solo golpe. Llorando por la intrusión, pude sentir el dolor mezclado con el
placer. Sus labios cubrieron los míos, ensordeciendo mi grito. No se
movió, su dura longitud estaba enterrada hasta la empuñadura y pronto,
ya no había ningún dolor. Sólo una necesidad cruda. Doblando mis
caderas, lo insté a moverse.
Ningún hombre me ha hecho sentir así.
Desabrochando mis vaqueros, mete una mano dentro de ellos y me
acaricia la polla.
El dolor en su voz me golpea en el pecho.
Le doy un último empujón, manteniéndome dentro de su dulce coño
mientras lo lleno con mi semilla.
Nunca he estado más seguro de algo en toda mi vida.
Su risa hace que las mariposas de mi estómago revoloteen salvajemente.
Enuncia sus palabras extendiendo la mano para rozar un pulgar áspero en
mi mejilla.
"Pienso consentirte todos los días durante el resto de nuestras vidas, …".
"No", respondo, con las cejas fruncidas por la confusión que me producen
sus palabras.
Dejo escapar un gemido gutural mientras me suelto y sucumbo a las
sensaciones de mi propia liberación.
Bien, porque nunca la dejaré marchar.
Se siente tan bien compartir todo esto con alguien a quien realmente
parece importarle.
Reclamando mi derecho sobre la única mujer que he amado. En la única
mujer que amaré siempre.
Sus ojos están fijos en mí, y no se me escapa el doble sentido de sus
palabras.
Empieza a moverse dentro de mí y yo gimo con abandono. Lo rodeo con
una pierna para sentirlo más profundo y Bash me agarra el culo para
aprovecharlo. Su polla se introduce profundamente en mi interior y llega
a un punto que ningún otro hombre ha conseguido. Cada empujón me
acerca al borde de un segundo orgasmo.
El contacto chisporrotea con un deseo eléctrico que recorre mi cuerpo.
Me siento atraído por la necesidad, por el deseo.
Lentamente, salió casi por completo, luego, con la misma lentitud, empujó
hacia atrás.
Se retuerce en mis pantalones, ansiosa por salir y entrar en el calor
resbaladizo de Ruby.
Nick está grabado en mi corazón, como una marca que nunca se borrará.
Estoy deseando a este hombre como una mala adicción a la cafeína.
Ella le dedica una sonrisa radiante y, maldita sea, quiero darle una paliza
al cabrón por estar en el extremo receptor. Quiero ser el único que reciba
sus hermosas sonrisas, el único al que mire. Si eso me convierte en un
bastardo codicioso y egoísta, que así sea.
--¿Cómo puedes pedirle a cualquiera que se case contigo?
-¿Quién dijo que me casaría con cualquiera? La persona con la que me
quiero casar... eres tú.
Cómo puede alguien amar a un gigante feo y lleno de cicatrices como yo
Tres bombeos a ese ritmo y Summer se corría de nuevo mientras gritaba
mi nombre una y otra vez.
-Y soy bastante bueno.. - - en muchas cosas.
Si amas a alguien, tomas ese amor y le demuestras cada día lo que
significa para ti.
O si acabo de perder lo mejor que me ha pasado.
“ ¡Más rápido!” Supliqué contra sus labios. Sus caderas se movieron y sus
labios fueron a mi cuello, dejando un rastro de besos mientras
murmuraba lo bien que me sentía.
Apreciemos los recuerdos y sigamos adelante.
Su excitación huele a miel dulce y se me hace la boca agua.
Me retorcí debajo de él, rogándole más. Su ritmo se aceleró y pronto, estaba
empujando tan fuerte que podía sentir que la cama se movía.
Mi corazón es demasiado frágil para eso.
Solo hay una persona con la que quiero pasarlo, y esa eres tú.
Le había pedido que confiara en él, así que eso era exactamente lo que iba
a hacer.
Mis hombros se desploman y asiento, abatida. Sólo intentaba ayudar, pero
supongo que hay cosas en las que nunca seré buena. Nunca he sido capaz
de hacer que nadie se sienta mejor por nada, por mucho que lo haya
intentado, y a veces me pregunto si tal vez todos estarían mejor sin mí.
Le subo los dedos por el culo hasta llegar a las bragas y se las bajo para
quitárselas.
Entierro mi cara entre sus piernas y absorbo su dulce aroma.
Saco algunos tomates frescos y albahaca y me pongo a preparar una
sencilla salsa de tomate antes de agarrar un poco de pasta y dejarla cocer
a fuego lento mientras exploro el piso de abajo un poco más a fondo.
Me encuentra de pie como un ciervo atrapado frente a los faros.
Sus suaves labios se separan mientras profundiza nuestro primer beso, y
de repente me pierdo en un desesperado torbellino de necesidad, deseo y
pasión.
Estoy destinada a ser suya y él está destinado a ser mío.
Esos suaves labios, sus inevitables pechos perfectos, sus cautivadores ojos
azules, seguía siendo tan hermosa para mí. Saber que no podía tenerla,
me mataba.
La lengua de Lando recorre mis labios, obligándome a abrirme a su
intrusión.
Me mira profundamente a los ojos durante tanto tiempo que me muevo
torpemente de un pie a otro, pero me niego a romper su mirada.
Finalmente, susurra en voz tan baja que no estoy segura de haberlo oído.
“ Me encanta tu coño, bebé. Eres tan dulce. Tan apretado, agarrando mi
polla como si no pudieras tener suficiente”.
Empiezo a llorar, cubriéndome la cara con las manos, y _______ se acerca,
envolviéndome en sus fuertes brazos. Me besa suavemente la parte
superior de la cabeza, me hace callar y me lleva fuera del granero.
Su cuerpo es un festín. Uno que pretendo disfrutar.
Saboreo su dulce liberación en mi lengua.
Empiezo a gritar su nombre, pero su mano me tapa la boca y amortigua el
sonido.
Tengo que tenerla. Será mía. Ya es mía, sólo que aún no lo sabe.
Sus dedos me separan, encontrando mi centro empapado y gimiendo en
mi oído. Rodea mi clítoris una vez antes de bajar y burlarse de mi entrada.
Demasiado abatido para perdonarla todavía, le doy una sonrisa triste
antes de dirigirme a mi coche.
Juro que ahora están más oscuros. (ojos)
"Ojalá pudiera ver el mundo como tú",
"Sin embargo, no soy perfecta, Sean. Siento mucho lo que te hice pasar".
Prefiero ahorrarme el dolor de perderlo más adelante y detener las cosas
antes de enamorarme perdidamente de él.
“Si alguien me hace mal, lo saco de mi vida. No hay segundas
oportunidades.”
Está claro que no se preocupa por su seguridad.
Aparto mis ojos de los suyos por un momento, antes de asentir, respirar
profundamente y volver a mirarle.
Hay demasiados escenarios donde ella está en peligro, y no me gusta. Ni
un poco.
Llevo la mano a su clítoris para estimularla y siento cómo las paredes de
su coño se cierran y aprietan sobre mi polla.
"Bueno, es verdad". Inclino la barbilla hacia arriba con obstinación,
prácticamente retándole a que discuta conmigo.
Otro gruñido retumba en su garganta.
Se acerca a mí y me odio por sentirme aliviada de que esté aquí..
Es obvio que no se cree digna de atención o afecto. Estoy desesperado por
hacerle ver que lo es. Decidiendo que sólo hay una manera de demostrar
mi fervor, me inclino y aplasto mis labios contra los suyos.
Me mete un dedo en el interior y yo me retuerzo contra él al sentir la
sensación. Su otra mano sube por mi vientre hasta tomar mi pecho
desnudo.
Está claro que no confía en mí.¿Por qué debería confiar en él?
Se acerca a mí y me odio por sentirme aliviada de que esté aquí
“Cuando estoy contigo, es como si el resto del mundo desapareciera".
"Estoy bien", dijo, con la voz apenas por encima de un susurro.
Mi corazón se siente de repente demasiado grande para mi pecho.
“Estoy tan contento de que hayas tropezado con mi vida"
Casi no puedo creer lo que oigo.
Su voz suena aturdida mientras parpadea y mira a su alrededor.
Lindsay se desploma sobre mí y yo la rodeo con mis brazos por la espalda,
acercándola a mí, pecho con pecho.
-admito. Si no puedo ser sincero con Jade, entonces no la merezco
Se inclina y presiona la cabeza de su polla contra mi abertura y empieza a
empujar suavemente. Gruño ante la presión y, cuando me mira con una
ligera preocupación en los ojos, lo atraigo hacia mí, besándolo
apasionadamente.
La electricidad se dispara entre nosotros sólo con esa pequeña conexión.
Mi pecho se agita y mi piel está cubierta de sudor cuando él se retira y se
limpia la boca con el dorso de la mano.
Algo parecido a la lástima aparece en sus ojos, y tengo que apartar la
mirada. Eso es algo que no quiero ver de Jade, ni de nadie, en realidad.
Estoy solo, y esa es la realidad de la situación. No hay necesidad de insistir
en ello.
La intensidad de mi deseo por ella me emociona y me asusta un poco.
Envuelta en sus brazos, me siento segura y completamente en paz por
primera vez en mi vida.
El aroma de su almizcle llega a mis fosas nasales. Inhalo, saboreando su
esencia.
"Te necesito dentro de mí", me dice con su perfecta sonrisa ladeada antes
de tirar de mí para cubrir su cuerpo.
Lo eres, y lo sabes. Puedes intentar negarlo todo lo que quieras, pero eres
mía.
No puedo creer que casi la pierda
Sus ojos comienzan a humedecerse y mi corazón se rompe al ver sus
lágrimas.
Mierda, ese pensamiento duele.
Nada será nunca tan increíble ni tan importante para mí como tú y
nuestra familia.
Aunque lo único que quiero hacer es lanzarme a los fuertes brazos del
montañés, rodear su cintura con mis piernas y enterrar mi cara en su
cuello, inhalando profundamente.
Pero me encanta que me muestre esta faceta suya.
Mi polla palpitaba con insistente necesidad.
Un hombre que parece haber salido directamente de las páginas de una
de mis novelas. Tiene una espesa barba, una camisa de franela y unos
vaqueros desgastados que abrazan perfectamente sus musculosos
muslos.
Nuestras miradas vuelven a conectarse, y entre nosotros se dicen
palabras silenciosas.
El hombre se gira y sus cálidos ojos marrones se encuentran con los míos.
Se me entrecorta la respiración cuando empieza a besarme por el
estómago. Mis caderas se levantan de la cama.
Juro que el aire entre nosotros crepita y echa chispas al igual que el lugar
donde se encuentran mis muslos se llena de llamas líquidas.
Su sabor era tan bueno que hizo que mi hambre fuera aún mayor.
Cuando me toca un lado de la cara, exhalo en su contacto.
Creo que nunca he estado más emocionada.
Sé que es la indicada para mí. Sólo espero ser el adecuado para ella.
Su tacto me hace derretirme y estoy tan caliente por él que estoy a punto
de arder.
Sus ojos se clavan en los míos.
Sólo tiene que decir la palabra, y yo estoy listo para darle lo que necesita.
Emite un grito estrangulado cuando mis paredes internas se aprietan
alrededor de su longitud y mi cabeza se inclina hacia atrás en éxtasis.
¿De verdad creías que no iba a elegirte?
Para mí también ha pasado mucho tiempo y estoy reprimido de una
manera que ni siquiera entiendo.
Me inclino hacia su tacto.
Gime en cuanto nuestras lenguas se unen y siento las vibraciones hasta
los dedos de los pies.
Es mío y necesito demostrarlo.
Respiró, enviando una pequeña bocanada de aire a través de mi cuello
que hizo que mi polla se endureciera en mis pantalones de deporte.
Mis rodillas se debilitan cuando su lengua me lame el labio inferior,
buscando acceso.
Y sí, es cierto, es mi veterinaria. La reclamo. Al menos en mi mente,
aunque es casi seguro que está mejor sin mí.
Quiero que me bese, pero lo que debería hacer es abofetearlo de nuevo.
Se queda sin aliento mientras su cabeza cae hacia atrás y se mece contra
mi mano.
No puedo evitar el gruñido de mi voz.
El calor inunda mi núcleo y mi temperatura se dispara al saber lo que está
por venir.
A ella no parece importarle.
Tienes una forma curiosa de demostrarlo.
Me rodea con sus brazos y me siento segura en su abrazo.
Me froto las lágrimas que resbalan por mis mejillas ahora que estoy sola.
Hacía demasiado tiempo que no tenía este tipo de contacto cercano con
otro humano. No me había dado cuenta de lo mucho que mi cuerpo lo
anhelaba.

Me vuelvo a hundir en su calor, nos cubro a los dos con la manta y tengo
que obligarme a no soltar el gemido de satisfacción que quiere salir de
mis labios.
Mi espalda se arquea mientras él besa y lame mis pechos a través del
sujetador, que están hinchados y piden ser liberados.
Sus pezones estaban duros y rosados, pidiendo atención.
Además, había algo en ella que me hacía querer abrirme sobre cosas que
no quería abrir.
Pero no puedo pensar en el sonido de mi corazón golpeando en mi pecho.
El calor me llenó hasta los pies mientras asentía febrilmente.
No recordaba la última vez que alguien me había abrazado, y anhelaba esa
sensación de conexión con otro ser humano; no, no con cualquier ser
humano. Con este hombre. Con Kurt.
Su sonrisa hizo que mi estómago diera un vuelco
Era hermoso en un sentido terrenal y varonil.
—Joder —gruñe, pegando sus labios a los míos y moviendo sus caderas,
provocando toda una serie de nuevas sensaciones en mi interior.
Me inclino y paso la lengua por la curva de sus pechos hasta llegar a sus
pezones.
Mis emociones son abrumadoras y no estoy segura de cómo me siento
realmente en este momento.
Thomas estira la mano y la toma entre las suyas. Un cosquilleo caliente
me recorre y me siento cautiva de su tacto.
La atraigo más hacia mi cuerpo, necesitando que sepa que todo eso ya ha
terminado.
Sin embargo, una parte de mí sentía que sí lo conocía, en algún extraño
nivel.
Sus ojos oscuros se encuentran con los míos y aparece una sonrisa
socarrona.
Necesito espacio de todo el mundo y del ruido
Sus ojos se abrieron de par en par, y toda su cara se sonrojó de color
carmesí, pero se mordió el labio y asintió ansiosamente.
Podría haber comprado este momento, pero la verdad es que había
conseguido mucho más de lo que esperaba.
Dejé caer mi mano sobre su culo, presionándola con más fuerza sobre mi
erección. Luego aparté la boca y acerqué mis labios a su oreja, empujando
hacia arriba y casi perdiéndola cuando se estremeció y gimió.
No podía creer la suerte que había tenido al encontrarla. Ella era todo lo
que siempre había deseado y más de lo que podría haber soñado.
Alguien tan maravilloso como ella nunca debería encogerse para encajar
en el molde de otra persona.
Me incliné y tomé uno de sus duros picos en mi boca, chupándolo
mientras....
Aprieto los dientes, intentando no pensar en ello.
Busco su brillante raja y deslizo mis dedos a lo largo de su longitud.
Toda mi atención se ha centrado en la persona que más amo. El único
problema es que ella me detesta.
Y entonces, cogiendo mis mejillas barbudas con las palmas de las manos,
atrae mi cara hacia la suya y me besa con fuerza.
"Me gusta ver cómo te preparas para mí".

La agarro por los hombros y le gruño directamente a la cara.

Ella no se inmuta. En cambio, levanta la barbilla y se encuentra con mi

mirada acalorada.
Ahora hay unas cuantas personas a nuestro alrededor, pero el mundo
podría incendiarse literalmente y no me daría cuenta-
Introduzco dos dedos en el interior de Suri, uno por uno. Abrirla mientras
se aprieta a mi alrededor es fácil porque ya está empapada. Hago palpitar
mi dedo en su hinchada protuberancia. Verla retorcerse en respuesta
hace que mi polla se ponga aún más dura.

Thomas me coge la barbilla y me inclina la cabeza hacia la suya. Sin decir

nada más, su boca se posa en la mía. Siento que el beso me atraviesa como
un chasquido de electricidad. Me hace girar la cabeza y absorbe todo el
aire que nos rodea.
Su voz se quiebra en la última palabra, y quiero caer de rodillas y pedir
perdón.
Repentinamente desesperada por aliviar la tensión que se acumulaba en
mi cuerpo.
su voz es muy fría, nada que ver con mi dulce Elsy.
"Quiero que me toques. No quiero que pares nunca", jadeé, colocando mi
mano sobre la suya entre mis piernas.
Odio haberla hecho sentir siquiera un poco de tristeza. La compensaré.
Me retorcí en su regazo, tratando de conseguir una mejor posición para
que nuestros centros se alinearan perfectamente, y me apreté contra su
dura polla. Las manos de Kurt bajaron a mis caderas, anclándome contra
él, y el beso estalló.
Me aprieta el brazo, pero me lo quito de encima.
Un suave gemido escapa de sus labios.
pantalones y me quito el sujetador, dejándolos caer junto a mi bolsa de
viaje en la
Mi barba rozó la delicada piel y, cuando me retiré para ver las marcas que
había dejado, me dieron ganas de golpearme el pecho y gritar como un
cavernícola.

Deslicé mi mano bajo sus pantalones cortos y froté su clítoris por encima
de sus bragas. El material empapado era áspero, y aumentó la
estimulación, haciéndola gritar de placer. Al soltar su pezón con un
chasquido, lamí un camino hacia su oreja y gruñí.
Mis piernas rodean más alto su cintura y su erección se desliza más
dentro de mí en esa posición. Se queda sin aliento mientras su cabeza cae
hacia atrás y se mece contra mi mano.
Willa se tensó por un momento, luego dejó caer la cabeza hacia atrás y
gritó. Enterré mi cara en su cuello, jadeando por el esfuerzo que me costó
no correrme con ella. Maldita sea. No eres una adolescente que no puede
controlar su polla.
Me dedica una suave sonrisa antes de dirigirse a la puerta.
El corazón se me apretó en el pecho. Forzando una sonrisa en mi rostro,
me di la vuelta y caminé lentamente hacia el spa.
La puerta de la habitación estaba abierta, pero no había rastro de Elsie en
la sala principal de la suite. Con pasos pesados, me arrastré a través del
umbral y miré a mi alrededor lentamente, pero no tardé en confirmar lo
que ya sabía en mi corazón.
Bajé la cabeza y capturé su boca en un beso profundo y salvaje. Los dedos
de Willa se clavaron en mi pelo, enviando rayos de deseo directamente a
mi polla. Moví las caderas y la punta de mi polla besó su entrada.
Me encantó la suave calma de esa voz.
La atraigo hacia mí mientras me acuesto a su lado.
Me había marchado sin motivo. Había dejado que mi cabeza se alejara de
mí y había arruinado algo maravilloso, nuevo y perfecto.
Suri jadea al recibir mi enorme grosor.
Tenía un aspecto desaliñado, pero angelical. Nunca había visto a una
mujer tan hermosa estando desordenada.
Necesito todo lo que hay en mí para mantenerme quieto mientras ella se
estira para acomodarme.
Me tomo mi tiempo para meter tanto de él en mi boca como puedo, hasta
que siento su cabeza presionando la parte de atrás de mi garganta.
Mientras tanto, Thomas mantiene mi mano entre las suyas. Me pasa el
pulgar por el dorso de los nudillos y yo no me alejo.
Me preocupaba que sus ojos se quedaran sin lágrimas.
¿Sabes que fuiste la primera chica en la que besé? En mi vida. Y sí me
dejas me encantaría que fuera la última que besé también.
Cierra los ojos, su cuerpo se retuerce de placer debajo del mío.
Agachando la cabeza, la besé y luego froté mis labios contra los suyos.
No puedo creer que esté realmente interesado en mí. ¿Qué está pasando?
Esto no puede ser real.
Suri deja escapar un largo gemido que resuena en el techo. Aprieto mis
dientes en el lateral de su cuello, los mantengo ahí un momento y luego la
mordisqueo.
preguntó con un toque de diversión en su voz.
Ahora ella es mía para siempre. Nada ni nadie puede arrebatármela.
Tomó el control, empujándome hacia arriba y abajo de su polla hasta que
estalló en mi boca.
Pero sé que Suri y yo somos el uno para el otro. Más que eso, sé que ella
también lo siente. Que ella quiera o no admitirlo es otra historia.
Preciosa niña, reviviría cada momento de mi vida, los momentos
dolorosos y las partes cercanas a la muerte sin cambiar, si eso nos llevara
a este momento. Lo eres para mí; ¿no te das cuenta? ¿No lo sientes?"
Me recordó que era una impostora, que nunca podría tener su familia. Y
eso me rompió el corazón más de lo que nunca me había dolido nada.
Había pensado que la familia de Scott podía ser la mía.
Ver a Ella romperse sin poder hacerla sentir mejor era la peor sensación
del mundo.
Hay un largo momento acalorado que espesa el aire a nuestro alrededor.
Éramos un revoltijo de manos, cada uno intentando tocar al otro en todas
partes a la vez.
Me quedé callado, sintiéndome como un intruso en este momento familiar
tan intensamente privado.
Thomas se lleva mi mano a la boca y le da un dulce beso.
Mi tiempo aquí había terminado.
El hecho de que me necesite así me lleva al límite.
Esto no es un suave picoteo en los labios como la última vez que nos
besamos. Es un beso hambriento y voraz. Su lengua se introduce en mi
boca y devora mis gemidos mientras me derrito contra él. Su agarre en mi
mandíbula se aprieta y gira mi boca para poder besarme aún más
profundo.
Golpeo a Suri con tanta fuerza que mi cabecera se estrella contra la pared.
Pero por favor, no dejes que eso te haga dudar de mis sentimientos por ti.
Siempre vas a ser tú. Hoy, mañana, siempre, siempre te elegiré a ti"
No puedo creer que esta impresionante mujer sea toda mía.
"Será mejor que lo recuerdes. Eres mío y no voy a dejar que nadie, y
menos ella, te aleje de mí",
Acelero el ritmo.
Deslizo la palma de la mano a lo largo de su pene y él suelta un profundo
gemido mientras cierra los ojos.
Empujaba dentro de mí como si estuviera marcando su territorio, como si
me asegurara que no iba a ir a ninguna parte. Cada embestida era una
declaración, poderosa y duradera.
Su túnel está apretado y resbaladizo a mi alrededor mientras se aprieta y
agarra a lo largo de mi eje. Una sensación de ardor me recorre.
"Y nunca te dejaría. Nadie me obligará nunca a dejarte. Estamos unidos el
uno al otro de por vida. Te lo juro"
El gesto hace que se me ponga la piel de gallina y que el calor me suba a
las mejillas. El lugar donde han tocado sus labios permanece caliente
mucho tiempo después de que retire su boca.
Estaba perdiendo a Scott. Casi lo sentía. Y eso me aterrorizaba.
Coloco mi polla en su abertura y la introduzco lentamente. Cuando vuelve
a levantar las caderas, la penetro de golpe y acallo el grito que sale de su
boca sellando mis labios sobre los suyos.
Gemí visiblemente, luchando a duras penas por contener mi rabia.
Mi polla está en su estrecho canal y ella me aprieta hasta que puedo sentir
el precum que gotea en su interior. No voy a durar mucho.
Nunca sentiré por nadie lo que siento por ella.
Exprime mi cuerpo como una esponja húmeda, decidido a hacerme sentir
hasta la última gota de placer.
jadeo mientras mis caderas se agitan con su movimiento.
"Puede que la hayas parido, pero no estás capacitada para ser su madre.
Valerie, sabes que perdiste el privilegio de llamarte su madre cuando la
dejaste. La sangre no siempre es más espesa que el agua", dije.
Presionó la yema de su pulgar contra mi clítoris y gemí, moviendo mis
caderas instintivamente para prolongar el contacto.
Valerie golpeó de repente la mesa con los puños cerrados. Todo el
comedor se sobresaltó. Era la primera vez que la veía perder la calma. Se
recuperó rápidamente.
siempre habrá una parte de mí que no se siente lo suficientemente buena
Sea cual sea el problema, me gustaría que pudiéramos hablar de ello y
seguir adelante.
Nuestras pieles chocan entre sí, nuestros gemidos y respiraciones se
mezclan en el silencio de la habitación.
Tengo una oportunidad de hacer esto bien y no la voy a desperdiciar.
Sus ojos marrones ardían de furia.
Necesito todo lo que tengo para mantener el control...
Si soy sincera conmigo misma, es un sentimiento del que también tiendo a
huir
Su cuerpo se sacude con temblores y Suri gime mi nombre.

Me abalanzo sobre ella con cortos y superficiales empujones que la dejan

sin aliento. Vuelvo a clavarle los dientes en el cuello y eso la lleva al límite.
Ese voto provoca una mirada en sus ojos que no había visto antes.
Adoración. Y vaya, no sabía que estaba deseando esa profundidad de
afecto de él. No se trata simplemente de lujuria y de un intercambio de
poder. Es mucho más.
Respondí sin aliento, sacudiéndome mientras él pellizcaba suavemente mi
manojo de nervios entre el pulgar y el índice.
"Retira eso", dijo con tono de advertencia.
Ella se zafó de mi agarre.
Me encogí de hombros con una sonrisa. "¿O qué?" pregunté.
Haciendo rodar su pulgar en círculos sobre mi clítoris.
Supongo que hay un poco de incomodidad, pero el regocijo de ser poseída
en cuerpo y alma por este hombre supera con creces cualquier dolor.
Todos mis sentidos estaban en alerta máxima.
"No hay distancia que no vaya a recorrer para demostrarte que eres la
mujer con la que quiero estar, Nicole.
Me aclaro la garganta.
Nicole se acercó a mí. Me besó apasionadamente. Sus mejillas estaban
húmedas. Le limpié las lágrimas.
Cualquiera que intente hacer daño a mi chica tendrá que pasar por
encima de mí".
Suri me pasa los dedos por el pelo.
La bestia codiciosa que hay en mí necesita probarla.
"No quiero dejar nunca este lugar. Quiero quedarme aquí contigo,
envuelto así a partir de ahora"
Y la imagen me hace sonreír de oreja a oreja.
gimió mientras sus piernas rodeaban mis caderas y sus talones se
clavaban en la parte posterior de mis muslos.
Grito en el instante en que mi lengua se conecta con su cálida carne.
Fresca y dulcemente ácida, es la perfección femenina.
Su agarre en mi barbilla fue suave mientras inclinaba mi cabeza hacia
atrás para mirarme a los ojos.
Un millón de vidas más, seguiría eligiéndola a ella.
Luego se inclinó sobre mí, apretando mi cara contra su pecho mientras
me acariciaba una mano por la espalda.
Por fin tengo todo lo que había imaginado.
Lo único que sabía de ella en ese momento era que era mía.
Perdida en sus hipnotizantes ojos, sacudo la cabeza para volver a
centrarme y responder a su pregunta.
Ver a las dos interactuar hace que mi corazón se hinche de alegría de una
manera que no merezco.
Y ese es el verdadero comienzo de nuestro para siempre.
Los tres hemos forjado un vínculo inquebrantable.
Su tono me hace sonrojar, y el sonido de su voz me acaricia la piel,
haciendo que mis pezones se pongan de punta.
La idea de que estuviera herida o sufriera algún tipo de dolor me volvió
loco.
Le aseguraré todos los días de su vida que no me voy a ir.
La aprieto contra mí en un intento de profundizar el beso, sin poder evitar
agarrar sus muslos y levantarlos.
Los ojos de mi chica se encontraron de repente con los míos.
Echando los hombros hacia atrás, recupero la compostura.
Mis ojos se abrieron de par en par mientras jadeaba: "¿Me amas?".
"Con cada fibra de mi ser".
La forma en que su sonrisa se curva en las esquinas la hace irresistible.
Quería oírla decirlo, decirme lo que deseaba.
De hecho, la emoción de que nos pillen sólo aumenta la excitación.
La cabeza me da vueltas y el corazón me golpea la caja torácica.
Sentir sus suaves curvas contra mí no es suficiente, no con todas estas
capas entre nosotros. La aprieto contra la pared mientras su lengua me
pasa por el labio superior y lucho por mantener algún tipo de control
sobre la situación.
Creo que deberíamos hablar de esto en persona porque me has entendido
mal.
Esta desconocida ha mantenido mi atención todo el día y me ha llevado a
la distracción absoluta.
Chupé su otro pezón y solté una muñeca para meter una mano entre
nosotros y frotar su clítoris entre dos dedos.
Mientras vuelvo al trabajo dejando atrás a Chuck, un nudo se retuerce en
mi estómago.
¿Estoy haciendo lo correcto?
Su cuerpo se tensó, luego su espalda se arqueó y gritó mientras se sacudía
con violentos temblores.
Charlotte jadea y sus ojos se clavan en los míos mientras se lleva los
dedos a los labios.
Respondió a mi súplica con su boca, pero sin usar palabras. Su lengua
recorrió mi coño de abajo a arriba antes de rodear mi clítoris. Un gruñido
retumbó en su pecho cuando sumergió su lengua en el interior, entrando
y saliendo de mi apretado agujero.
¿Por qué has corrido así? ¿Cómo puedes creer que me acercaría a alguien
que no fueras tú?
Tomo su muñeca y froto mi pulgar en la palma de su mano.
Sus gritos sólo intensificaron mi necesidad. Mis movimientos se volvieron
salvajes y vigorosos, haciendo crujir el colchón y golpeando la cama
contra la pared.
Intento racionalizar en mi cabeza que este hombre es sólo un apuesto
desconocido y nada más.
Sea lo que sea esto, era diferente. Como si mi alma se conectara con la
suya. Como si vinieran del mismo lugar y ya se conocieran.
Pero mi corazón sabe que estoy mintiendo.
Ella es mi otra mitad y tenemos el resto de nuestras vidas para
conocernos.
Luke enhebra nuestros dedos y nos guía.
Debería haberle dicho antes que la amo. Tal vez si la hubiera hecho sentir
más segura, no se hubiera creído esa patraña de que estoy en una cita.
Los celos corren por mis venas mientras intento alejar ese pensamiento.
Sus labios son cálidos, suaves y se sienten tan bien. La punta de su lengua
se desliza dentro de mi boca y yo me abro para él. Su beso es suave pero
exigente.
Todo mi cuerpo se ilumina, sintiendo cosas que nunca antes había
sentido.
Le paso los dedos por el pelo y lo acerco. Su barba me roza la piel, pero no
me importa.
Debería haberle dicho antes que la amo. Tal vez si la hubiera hecho sentir
más segura, no se hubiera creído esa patraña de que estoy en una cita
Respondí con dificultad, con los ojos clavados en los suyos mientras
continuaba la deliciosa tortura.
Es hora de soltar toda esta carga emocional y esta montaña me va a
ayudar a hacerlo.
Deslizó sus dedos hacia adelante y hacia atrás por mi resbaladizo calor.
Abro mi mapa y encuentro dónde estoy exactamente con la esperanza de
estar avanzando bien.
Mis rodillas se doblan, pero él me presiona contra la puerta para que me
mantenga en pie.
El talón de su mano patina por el interior de mi muslo hasta rozar mi
sexo.
Jesús, va a hacer que me corra sólo con sus palabras.
Alcanzo su cinturón y lo saco frenéticamente mientras él me baja la parte
superior del vestido, liberando mis pechos. Los agarra con firmeza y me
chupa los duros pezones hormigueantes.
Todo lo que estamos haciendo se siente tan bien.
Y por primera vez en mucho tiempo, me siento yo misma.
No hay otra forma de describir lo que siento cuando estoy con él.
Cuando atravieso la puerta principal de la casa de Thomas, un delicioso
olor se extiende hacia mí a través del aire.
Quiero estrecharla entre mis brazos y besarla, impregnarme de esa risa y
de su sabor.
Si no lo supiera, juraría que estamos destinados a estar juntos.
Se da la vuelta para continuar por el camino y se aparta para que yo
pueda ir a su lado.
Como si su tacto y sus palabras tuvieran el poder de poner en marcha mi
motor. Mi corazón.
Cierra los ojos, su cuerpo se retuerce de placer debajo del mío.
El agarre de Jack sobre mí se aprieta mientras empuja en todo el camino y
sostiene su polla en mí con un gruñido salvaje. Siento cómo su polla se
tambalea en mi coño y luego el hermoso calor de su semen llenando cada
centímetro de mí.
Profundizo en el beso, amando la forma en que se siente entre mis brazos,
su sabor.
Gruñó en su oreja, su voz profunda, mezclada con deseo.
Ella es real y es toda mía. Yo también soy todo suyo
Me agacho y me masajeo el clítoris, el placer empieza a aumentar.—
Y nunca faltaré a mi palabra.
Su cuerpo se enrosca y sus uñas se clavan en mi hombro.
Se siente natural tener mi mano en la suya.
Sonidos que quiero escuchar todos los días durante el resto de mi vida.
Se me revuelven las tripas con una abrumadora sensación de decepción.
Se sonroja y sus ojos brillan de deseo.
Él flexionó sus dedos, dándome la presión que ansiaba, y yo cabalgué
sobre su mano, persiguiendo el orgasmo que estaba justo fuera de mi
alcance.
Estoy dispuesto a todo, siempre que estemos juntos.
Se metió en la boca del lobo sin saber que se había entregado a mí esa
noche.
que a los metamorfos les gusta el espacio y poder correr.
Un gemido oscuro y profundo sube por mi garganta cuando me agarra los
vaqueros y los desabrocha lentamente antes de deslizarlos por mi cuerpo.
Imaginar a Savannah embarazada de mi hijo me pone la polla dura.¿A
quién quiero engañar? Pensar en ella siempre me tiene en un estado
constante de excitación.
Era tan jodidamente dulce que hacía que me dolieran los dientes.
Y cuando se acerca a las velas y la luz tenue, noto los rastros de lágrimas
en su rostro manchado de maquillaje.
Una vez impresa la receta, me la entregó.
No me detuve, las lágrimas se derramaban con más fuerza.
Anoche fue un claro ejemplo de ello.
Mi cuerpo se tensó, y cuando sustituyó su lengua por dos dedos, la tensión
aumentó.
Sus ojos se ven tristes y mi oso gime al verla afectada.
Parece que no puedo apartar la mirada de la plenitud de sus pestañas o
las manchas rosadas de piel alrededor de su nariz por el llanto. Ella es una
chica hermosa, tan inocente y pura.

En serio, la sigue como un cachorro perdido y la mira como si hubiera

colgado la luna.
Pone sus manos en mi pecho para deslizarlas hacia arriba y alrededor de
mi cuello. Luego me baja para darme un beso.
Sus suaves muslos acunando mis caderas mientras me metía la polla
hasta el fondo,
Pero soy un bastardo egoísta y la quiero de todas formas.
Lo que daría por probar lo que hay entre ellos...
Veo cómo los músculos de la mandíbula de Thomas se contraen y se
tensan.
Aparece un hoyuelo en su mejilla izquierda y se pasa una mano por su
espeso pelo.
Todo mi cuerpo se ilumina, sintiendo cosas que nunca antes había
sentido.
Quien le haya hecho creer que es menos que perfecta, más vale que rece
para que nunca nos crucemos.
Luego, empieza a frotar lentamente mi sensible nódulo, haciendo que los
dedos de mis pies se enrosquen de placer.
El calor llena mis mejillas, pero me apresuro a quitarle la fregona y
extiendo mi mano derecha.
Debería haber estado ahí para ella y me prometo a mí mismo que estaré
ahí para ella en el futuro.
La base de mi columna vertebral empieza a cosquillear y sé que yo
también estoy a punto de correrme.
Frota tu coño contra mí. Usa mi mano para excitarte. Quiero ver cómo te
corres, ver cómo llegas al límite"
El pulso me late tan fuerte que la sangre me corre por los oídos.
He esperado lo suficiente, y la espera ha terminado. Es mía y quiero que
todos lo sepan. Por primera vez en años, por fin me siento completo.
Ojos que he llegado a admirar y querer tanto.
Me envuelvo en él y me agarro con fuerza.
Ella asiente rápidamente y sale por la puerta principal sin mirar atrás.
Sus ojos se vuelven vidriosos.
Su voz es tan suave que apenas puedo oírla por encima de la música.
Cuando empieza a bombear dentro y fuera de mí, lenta y tiernamente, me
aferro a sus fuertes brazos, mirando fijamente sus ojos.
Ella soltó el labio inferior que estaba mordiendo de nuevo.
Mi lobo se acurruca en mi pecho, en paz ahora que nuestra compañera
está aquí, en nuestra casa. Me siento a su lado, observando su piel clara y
las pecas que salpican.
Yo respondo con un ronroneo, incapaz de formar palabras.
Mi polla se agitó dentro de mis vaqueros, amando la sensación de su
suavidad presionada contra mí. Me obligué a calmarla;
Disfruto de sus atenciones durante lo que parecen horas, perdiéndome en
el calor de su lengua, el sonido rítmico de su respiración y la suave
presión de sus manos sobre mis muslos.
Sus caderas se movían debajo de mí, buscando cualquier cosa que la
ayudara a aliviar el dolor allí.
Mi lobo grita en mi pecho, ambos angustiados por verla así.
La maldición finalmente se rompe. Las lágrimas empiezan a correr por mi
cara. Levanta la cabeza para mirarme.
Asiento con la cabeza y obligo a mis pies a alejarme de su dulce sonrisa.
Estoy tan caliente por él que siento que voy a explotar si no me toca
pronto.
Dios mío, Aiden! ¿Podrías dejar de poner esa cara de presumido? Sonreí
Su coño estaba hinchado y brillaba de necesidad.
Mi mano sobre su corazón, deseando poder quitarle algo de su dolor y
soportarlo por él.
Deslicé un dedo dentro de su apretado coño al mismo tiempo y ella se
arqueó en la cama mientras palpitaba alrededor de mi dedo, encontrando
finalmente su liberación.
El orgasmo acaba por desvanecerse y mis piernas empiezan a
acalambrarse. Jack me pone de nuevo en pie y me saca la polla a
regañadientes.
Bianca se rió y giró la cabeza para depositar un beso en mi mejilla
Acababa de encontrarla. No podía perderla ya.
Nunca sabrá cuánto significa para mí que se quede conmigo, que no me
oculte esto.
Cediendo a mi frustración, me agaché, cogí una piedra del suelo y la lancé
impulsivamente contra el camión que se marchaba.
Me río mientras las lágrimas se secan y mi corazón se acelera.
Para ser un macho alfa, podía ser como un gran oso de peluche cuando se
trataba de mí.
Suelto pequeños gemidos mientras clavo mis dedos en su espalda.
Me cogió la cara y me sonrió, limpiando una lágrima con el pulgar.
Me alejé para protegerla, y todo lo que hice fue herirla. No me extraña que
siga diciendo que no le gusto.
La gran estructura de piedra gris con sus enormes puertas dobles de
hierro se cernía sobre nosotros
Como si mi placer importara más que cualquier otra cosa en el mundo.
Empujo mis caderas, intentando que mi sexo toque sus labios...
Una lágrima se desliza por su mejilla.
Le echo los brazos al cuello a Thomas.
paseo de la vergüenza.
Tu coño está hecho para recibir mi polla.
La aguda inhalación cuando bajo los brazos y él ve mis pechos desnudos
por primera vez hace que mi clítoris palpite.
Mi clítoris palpita en busca de atención.
Sus lágrimas corren libremente por sus mejillas, y yo sólo quiero
abrazarla y hacer que todo su dolor desaparezca.
Se metió un pezón en la boca y utilizó la lengua para frotar el sensible
pico antes de prestar la misma atención al otro pezón. La combinación de
sus dedos trabajando en mi coño y sus dientes recorriendo mis pezones
fue suficiente para llevarme al límite y me corrí. Con fuerza.
Este hombre es todo lo que quiero.
Sabios carnosos ligeramente abiertos. Tuve una visión repentina de esos
labios envolviendo mi polla y una oleada de lujuria se abalanzó sobre mí,
casi haciéndome caer de rodillas.
Un escalofrío me recorre la columna vertebral cuando me coge la mano y
la coloca sobre la dura y curvada cresta de su polla.
Su coño se estremeció, y gimió contra su cuello.
sus ojos me encuentran por primera vez, y juro que la Tierra deja de girar
y ambos dejamos de respirar. Sólo dura un segundo, pero es suficiente.
Respira con fuerza en mi cuello y se retira, tomando mis manos entre las
suyas.
Apreté mi nariz contra su centro cubierto de bragas y respiré una
bocanada de su aroma
Profundiza el beso, introduciendo su lengua entre mis labios para
saborearme. Me abro para él y jadeo cuando sus manos bajan y me
aprietan el culo.
"Entonces, córrete para mí, cariño", ordenó antes de succionar mi clítoris
en su boca.
Sus labios se separan mientras su mirada se posa en mi coño. Parece que
quiere devorarme.
La posesividad de su tono me emocionó y me llevó al límite. Cuando una
de sus manos se deslizó desde mi cadera hasta mi centro para poder
pellizcar mi clítoris entre sus dedos, vi las estrellas.
En menos de un segundo está sobre mi coño, separando mis muslos
mientras su lengua se desliza por mi raja. Apenas tengo tiempo de
registrar lo que me está haciendo cuando su lengua se centra en mi
clítoris.
Su lengua rosada y húmeda se desliza alrededor de mi cabeza hinchada,
haciéndome gemir mientras recoge una nueva oleada de presemen y se la
bebe.
El placer estalla en mi interior como fuegos artificiales en el cielo
nocturno.
Caemos sobre el colchón, enredados en un abrazo sin romper el lazo que
une nuestros labios
Rodeé el tronco con mi mano, notando lo cálida que es su piel. La acaricio
lánguidamente.
Se echó hacia atrás y atrapó sus labios con los suyos.
Mi pulso se acelera cuando la cama se hunde por su peso.
Las palabras se me atascan en la garganta y salen de mí sin pensarlo.
Mi mujer es una gran blandengue, aunque a veces lo esconda tras su
exterior de malvada.
Las lágrimas que han estado escondidas detrás de mis ojos se derraman y
las dejo caer en cascada por mis mejillas.
Siento la cabeza de su polla en mi abertura, preparada y lista para tomar
mi virginidad.
Lleva su mano a mis mejillas y las limpia.
Tal vez debería haber esperado a que me diera permiso, pero el hambre
me dominaba y cualquier pensamiento racional había sido eclipsado por
el deseo
"Iré tan despacio como pueda", dice entre dientes apretados.
Te amo, Suri. Desde el momento en que nos conocimos supe que mi vida
nunca sería la misma"
Con un gruñido, empiezo a bombear mis caderas, poniendo más fuerza en
mis movimientos. Siempre le daré lo que necesita.
Puedo sentir su aliento caliente hormigueando en mis pliegues
empapados...
Jodido infierno. No había tenido esta reacción ante una mujer en...nunca.
Nunca me había sentido tan obsesionado en cuestión de segundos.
Chanclas rosas colgaban de sus dedos, y sus caderas se balanceaban
seductoramente mientras prácticamente se deslizaba por la arena. Eran
anchas y apetecibles, perfectas para la reproducción
Me pongo de puntillas y le doy un beso en la mejilla.

Todo mi cuerpo se estremeció mientras ella me observaba, con los ojos

cargados de deseo.
Me inclino y beso su frente, envolviéndola en mis brazos.
Sus ojos son tan intensos cuando me mira fijamente. Todo en este hombre
es intenso y me gusta.

Jadeo cuando su lengua rodea mi pezón izquierdo y pasa al derecho. Su

mano se desliza por mi abdomen y me separa las piernas.

De un solo movimiento, me agarra de las caderas y me pone de espaldas.

Luego se coloca entre mis piernas. Siento su polla presionando contra mi
coño. Estoy tan mojada y excitada que se abre paso dentro de mí con
facilidad.
Pasaré toda la vida lamentando las decisiones que tomé entonces.
Pero no puedo apartar los ojos de él. Están clavados en este hombre y en
su amplio y poderoso pecho. Mi aliento se queda atascado en algún lugar
de mi garganta cuando mira hacia nuestro helicóptero y veo la vista
completa de su magnífico rostro. Mi núcleo se aprieta. El calor me recorre.
Siempre ha sido Lillian para mí.
Gritó, aturdida por su clímax y disfrutando de la sensación de su semen
llenándola.

Otro escalofrío recorrió mi cuerpo al saber que ella estaba tan excitada
como yo y cualquier intención noble que tuviera se evaporó.
Busco en los ojos de Lillian un atisbo de reconocimiento de la emoción
que solía existir entre nosotros, pero ella no revela nada.
Ella tiene un lugar aquí y es justo a mi lado.
Dejando caer la cabeza en su hombro, se aferró a él, agradecida por su
fuerza y sus brazos sosteniéndola.
Pienso en la expresión de su cara mientras se aleja y se me rompe el
corazón.
Gruño al liberarme mientras me vacío dentro de ella.
Su polla se engrosó en su interior, sus embestidas se volvieron más
profundas.

Se aferró más fuerte a él, mareándose cuando llegó a su cima.

La estaba volviendo loca y haciéndola sentir como la mujer más deseada

del mundo. Le encantaba.

No podía pensar, todo lo que podía hacer era disfrutar del éxtasis de todo.
La sensación de su cuerpo contra el suyo era casi alucinante. Estaba
subiendo rápidamente a la cúspide, a segundos de llegar a su punto de no
retorno.

Apartó los labios de los suyos y enterró la cabeza contra su cuello,

aferrándose fuertemente a él.

Si esto era un sueño no queria despertar.

Cada vez que la veo, es como si hubiera un campo de mariposas en mi

estómago, y me quedo sin aliento.
Tenerte en mi vida se siente como una recompensa por toda la tristeza y
la soledad que he soportado.

Las curvas por las que haría cualquier cosa por poner en mis manos.

Al girar las caderas contra ella, me rodea con las piernas y me empuja
hacia dentro, apretándome con fuerza. Entierro mi cara en su cuello, sin
palabras por lo bien que se siente.

"Kurt", jadeé, inclinando mis caderas para recibir su empuje.

mpujé mis caderas hacia delante, introduciendo mi polla más

profundamente en su puño y enviando espirales de placer por mi
columna vertebral. Su mano era demasiado pequeña para abarcar mi
circunferencia, pero me apretó con fuerza y se sintió mejor que cualquier
otra cosa que hubiera experimentado antes. Luego, su otra mano se unió a
la fiesta, ahuecando y masajeando mis pelotas, llevándome a un nuevo
reino de placer.

Había algo en la visión de un hombre blandiendo un hacha que era

increíblemente excitante.
Los músculos de sus hombros y brazos se flexionaron cuando hizo caer el
hacha sobre el tronco, partiéndolo en dos antes de repetir el proceso con
otro.

Tanto Val como Tidas responden al mismo tiempo.

Su boca vuelve a posarse en la mía y mis rodillas se debilitan. Su lengua
separa mis labios y me besa hasta dejarme sin aliento. La forma en que mi
cuerpo responde a sus labios es estremecedora, es como si estuviéramos
hechos el uno para el otro.

Gimió mientras su cuerpo se tensaba y el dulce placer de su propio

orgasmo se precipitaba a través de ella.

La sensación se dispara directamente a mi clítoris, y me retuerzo contra

él, tratando de aliviar la palpitación que está creando. La que siempre
surge cuando está cerca de mí.

Su mano baja en mi brazo.

Mi cara se cierne sobre el calor de ese coño que me ha poseído durante

tres meses. Tomo una profunda bocanada de aire, memorizando su
aroma.

Lo último que oigo antes de quedarme dormida son sus palabras.

Me paralizo. Su dura polla está presionada justo en mi culo.

Su otra mano subió por mi columna hasta enredarse en mi pelo.

Levanté la barbilla hacia Dash en señal de saludo.

Cuando le di la vuelta, se me cortó la respiración al ver la belleza que tenía
delante. Su piel enrojecida, aún acalorada por el orgasmo, sus ojos azules
vidriosos por la pasión, los pezones rodeados de piel oscura por los
chupetones que le había hecho, y su coño ya empapado de nuevo.
Me muevo, poniéndome cómoda y acurrucándome más en él.

Los besos de Thomas pasan de ser dulces a sexys en cuestión de

segundos. El calor que arde en mi interior se convierte en un fuego que
me invade. Quiero entregarme a él en cuerpo y alma.

Me atrae hacia sus brazos.

Entierra su cara en mi pelo.

Parece una eternidad, antes de que él responda.

He esperado años para probarla, y no voy a perder ni un segundo más.

Su voz está llena de dulzura. Apuesto a que su boca es aún más dulce.

Me alejo, mi cuerpo todavía hormiguea por su contacto.

La imagen de parar el camión y tirar de ella en mi regazo para azotar su

culo inunda mi mente. Es una fantasía que solo ella puede arrancarme.

Su labio inferior tiembla por un segundo, y me entran ganas de patear mi

propio culo.

Veo su batalla interna en su expresión y me doy cuenta de que tengo que

hacer algo rápido.
Realmente haría cualquier cosa por esta chica.

Se me cortó la respiración y mis ovarios se agitaron. El calor me llegó al

vientre, extendiéndose hacia abajo, y resistí el impulso de apretar los
muslos.

Su voz ronca me produce un escalofrío.

Sus labios cubren los míos y me olvido de todo lo demás.

homas me aparta un mechón de pelo de la cara.

Mis rodillas se levantan automáticamente para acunar su cabeza mientras

siento que un enorme orgasmo comienza en los dedos de mis pies y sube
por mi cuerpo.

Gime en un lado de mi cuello y desliza su polla ligeramente en mi húmedo

centro. Un pequeño dolor mezclado con un intenso placer me recorre.

Quiero inclinarte sobre el respaldo de ese sofá y demostrarte lo mucho

que te quiero"

Sus brazos me rodeen la cintura por detrás.

Cuando la tengo desnuda, se arrastra hacia atrás en mi cama.

Me invade un sentimiento de alivio y deseo a partes iguales.

Me giro y me inclino para besar sus suaves labios.

Sus tetas llenas y redondas son el puñado perfecto. Sus magníficas curvas
piden que las devore. Me agarra por el brazo, tirando de mí hacia ella, y yo
obedezco con gusto.

El deseo brilla en sus brillantes ojos verdes y se muerde el labio.

Kurt me hizo un nudo en el estómago, deseando su contacto. Quería sus

manos callosas en mi piel, quería sentir su gruesa polla dentro de mí,
llenándome de su semen mientras yo llegaba al clímax a su alrededor.
Todavía estaba excitada por la sensación de su pesada polla en mi mano
la noche anterior, por la forma en que había palpitado y pulsado mientras
él había disparado su carga.

Estoy luchando contra el deseo de demostrarle una vez más lo mucho que
significa para mí.

Deslizo mi dedo bajo su falda y la encuentro desnuda.

Me tomo mi tiempo, recorriendo con mis manos cada centímetro de su

piel expuesta.

Gimo mientras deslizo mi dedo en su humedad.

Susurra en mi cuello antes de inclinarse para morderme la oreja.

Mis manos se dirigen a su pecho para apartarlo,

pero en su lugar mis dedos agarran su camisa con fuerza mientras él
presiona sus labios contra los míos.

Voy a amar cada parte de ella durante toda la noche.

El brazo de Jason me rodea por detrás y coloca la palma de su mano en mi

estómago.

La sensación de las yemas de sus dedos rozando mi pecho hace que el

calor baje hasta mi polla.

Es tan hábil con su lengua -su poderosa, ansiosa y enérgica lengua- que
sólo tarda unos minutos en llevarme al clímax.

Me da la vuelta, de modo que estoy de cara a la pared, y utiliza sus rodillas

para separar mis piernas. Agarra su polla y la frota contra mi coño
empapado.

"Te mereces algo mucho mejor que yo", dijo.

Negué con la cabeza.

"No hay nadie mejor que tú, Kurt", respondí, levantando las palmas de las
manos hacia su pecho.
Pero sabía que no podía hacer nada con respecto a mi deseo por ella.
Como hermana pequeña de mi mejor amigo, estaba fuera de los límites.

La única forma que se me ocurría para afrontar la situación era ignorar a

Holly. Odiaba que eso me hiciera parecer un imbécil, pero con un deseo
tan fuerte como el mío, no podía ver ninguna otra opción.

Parece un poco desanimada por mi respuesta, y una vez más me siento

mal por actuar así con ella. Si supiera la razón.

Al menos tengo algo que me hace olvidar a Holly... bueno, que me hace
olvidar a Holly. Sigue siendo una locura estar cerca de ella, pero la
distracción del trabajo ayuda.

La hace aún más hermosa.

Holly se agacha para coger otra caja del suelo y, antes de que pueda
apartar la vista, veo su perfecto escote. Al instante, mi polla se estremece
y aprieto la mandíbula.

Luego aparto los ojos.

Daniel se eleva sobre mí con una expresión feroz en su rostro. Cualquier
otra persona probablemente estaría nerviosa o asustada en este
momento, pero yo no.
Sin embargo, en lo que respecta a la conversación, Nick sigue siendo frío
conmigo de la forma tan molesta que siempre ha tenido. No sé cuál es su
problema. ¿Soy realmente tan horrible para estar cerca?

No quiero creer que eso sea cierto, pero es una posible explicación.
Mi pecho se calienta ante su cumplido.

Terminamos de dar los últimos toques a...

Se pone detrás de la mesa a mi lado.

Sus manos están sobre mis hombros desnudos y me clava las uñas en la
piel. Respiro ante el dolor que me inflige.

Cierro los ojos y dejo que me bese.

El calor me recorre el cuerpo al sentir sus labios sobre los míos.

Este beso es mucho

mejor que el que había imaginado.

dice, inclinándose hacia mí. Su aliento es cálido en mi oreja y siento un

pequeño e inesperado escalofrío.
¿Por qué no me esforcé más para llegar a la verdad?
Doy un sorbo al cacao caliente y no puedo evitar soltar un gemido de
satisfacción.

Sería un tonto si no hiciera nada al respecto.

No hay lugar para la duda en mi voz.

Como si lo quisiera, creyendo que se merece el dolor. Oh, Jesús, no. Por
favor, no. No.
Una sonrisa se dibuja suavemente en los labios de Holly.
—Nunca podría odiarte. Ni por un solo segundo.
Estoy muy orgulloso de ella.
"No tengo ninguna duda de que puedes alimentarte por ti misma", le
aseguré.
Es decir, sé que es una regla tácita no ir detrás de la hermana pequeña de
tu amigo...
...pero esto es diferente. No estoy tratando de ligar con ella.
Quiero cuidarla, mimarla, darle el mundo.

Sé que he estado pensando en él.

Puede que también haya tenido algunas fantasías.

No tengo más remedio que aceptar. Al menos eso es lo que me digo a

mí misma.
Apretó su frente contra la mía y mis dedos se enroscaron en su brazo. No
quería que esto terminara.
No me hagas volver aquí y sacarte a rastras delante de todos.
Quería envolverla en mis brazos y anular el dolor que le había causado.
Lo miro boquiabierta.

La aspereza de sus dedos se siente tan bien.

Me acerqué más. Necesitaba tocarla.
Me dejo inclinar hacia él aunque no debería.
Lo último que quiero es asustarla cuando acabo de encontrarla.
Su sonrisa es genuina.
Me estremecí ante su contacto. Si iba a darle todo de mí, necesitaba la
verdad.
La atracción instantánea que sentí por ella me golpeó como un tren de
carga. Sé que carece de
lógica, pero me importa un carajo.
"¿O qué?" Se apretó el labio inferior entre los dientes, provocándome.
Aprieto mi nariz contra él. Mis ojos se cierran y aspiro una profunda
bocanada de él.

Aparto los pensamientos de Nick de mi mente y me concentro en la

llamada telefónica.

Ahora me mira seriamente. Hay algo diferente en sus ojos.

Es algo que me hace sentir un cosquilleo en todo el cuerpo.

Holly gime y me pasa la mano por el pelo, luego me pone la palma de la

mano en la nuca y me empuja con más fuerza contra su pecho.
Me pone un dedo bajo la barbilla, levantando mi cara.
Le desabrocho el sujetador, lo tiro también al otro lado de la habitación y
agacho la cabeza para chuparle uno de sus ya duros pezones.
Me hace sentir tan segura y protegida.
Muerdo suavemente su pezón, haciéndola gemir aún más fuerte. Mientras
continúo mordiendo y lamiendo suavemente su duro pezón, muevo una
mano entre sus muslos, frotando mis dedos sobre sus bragas y sintiendo
la humedad que ya ha empapado la tela.
murmuro contra sus labios abiertos.

Me mira por encima del hombro y sonríe.

La arrastro hacia arriba y hacia abajo por su raja, provocándola,

haciéndola gemir, y luego le introduzco la punta hinchada, arrancando un
grito de su boca.
Es delicada y moriría antes de hacerle daño.
-gime ella, empujando contra mí, metiendo más dentro de ella. Empujo
más dentro de ella, deleitándome con la visión de mi polla
desapareciendo dentro de ella. Está apretada pero increíblemente
húmeda.
Su mirada busca la mía durante un largo momento.
Gimo mientras me deslizo dentro de ella. Lentamente, entro y salgo de
ella con movimientos profundos. Sus dedos se abren más en la cómoda y
su respiración se hace más agitada a medida que pasa el tiempo.
Estoy en tu casa. Puedes decirme dónde estás o llamaré a todas las
puertas hasta que te encuentre.
Me abalanzo sobre ella con varias embestidas duras y profundas y me
derramo en su dulce y empapado coño. Holly grita mientras se corre
también.
Hay muchas puertas a las que llamar, pero no voy a parar hasta que Ángel
vuelva a estar en mis brazos.
Levanto la boca de su pecho y vuelvo a besar sus labios.
Hoy estuve a punto de perder la cabeza cuando vi a Michael mirándola.
No me arrepiento, y lo haría todo de nuevo si eso significara que
terminaría
con ella"
Deseo su cuerpo más de lo que he deseado nada en mi vida.
Me burlo, y prácticamente puedo oírla poner los ojos en blanco.
Dejo escapar un suave suspiro y la beso lentamente, recorriendo su
lengua con la mía.
Respira con dificultad cuando cae sobre mi pecho, y la rodeo con mis
brazos, abrazándola con fuerza.—Sin ti no soy nada. — Beso su frente y
cierro los ojos.—Por favor, no me hagas perseguirte de nuevo. Me mira y
apoya su barbilla en mi pecho.—Te amo, Rory. No voy a ir a ninguna
parte.
No quiero que lo dude ni un minuto.
Las palabras salen de mi boca antes de que pueda pensarlas, pero son la
verdad. No hay otro lugar al que pertenezca más que a mi lado.
No me permitiré llorar.
Cualquier inseguridad que pudiera haber sentido se desvanece
rápidamente. No son solo sus palabras, sino la forma en que me mira.
Realmente cree que soy la cosa más hermosa que ha visto jamás.
Cada respiración me duele y lo único que quiero es tenerla de nuevo entre
mis brazos.
Mientras se aprieta alrededor de mi polla, la sigo hasta el límite y apenas
evito caer encima de ella.
Hace una pausa mientras se mordisquea el labio inferior.
Como si fuera lo único que me mantiene vivo.
Suspiro. "No vas a parar hasta que diga que sí, ¿verdad?". Levanto las
manos. "Muy bien, tú ganas".
Ella es todo lo que no sabía que necesitaba en este momento.
Se ríe, lo que es música para mis oídos.
Ella es mi razón de vivir.
Mi hombre de la montaña me rodea la cadera con un brazo, y el simple
contacto me tranquiliza.
Siento que mis palabras le hacen perder algo de tensión. Había planeado
decírselo esta noche, pero después de lo ocurrido no voy a dejar pasar ni
un segundo más sin hacerle saber lo que siento de verdad.
Tenerla en mis brazos es una sensación increíble, como si por fin hubiera
encontrado mi hogar, mi otra mitad, y no quisiera dejarla marchar.
Encuentro fuerzas para afrontar esto sabiendo que está a mi lado.
Ella jadea y abre la boca mientras me rodea el cuello con los brazos y
gime.
Cuando sus cejas se fruncen, tomo sus manos entre las mías.
No pierdo el tiempo, introduzco mi lengua en su boca y tomo el control de
la situación.
Dice con dulzura mientras acaricia mi mejilla.
Me da un suave beso en la cabeza.
Cásate conmigo y déjame amarte hasta el fin de los tiempos.
Sus labios y su cuerpo contra el mío se sienten bien y encajan
perfectamente. Como si estuviera destinado a ser.
Acerco su boca a la mía y la beso sin aliento.
Cuando nos soltamos para recuperar el aliento, le susurro al oído: "Te
necesito. Ahora".
Gruño mientras vuelvo a empujar, mi necesidad de ella se vuelve posesiva
y áspera.
Las lágrimas corrieron por sus mejillas antes de poder respirar
profundamente.
Está tan jodidamente mojada que el sonido de mi polla golpeando dentro
de ella es sucio y fuerte.
No podía dejar que le hicieran daño. Ella ya era demasiado importante
para mí.
Es tan fuerte y rápido que se me nubla la vista.
Había algo increíblemente reconfortante en su compañía. Como si hubiera
estado aquí desde siempre. Como si estuviera destinada a estar aquí.
Levanto la mano y engancho los dedos en la parte superior de sus
pantalones cortos, ayudándola a arrastrarlos lentamente junto con las
bragas hacia abajo.
Como si fuera a ir a cualquier parte. Ella no tenía que preocuparse, no
había ningún lugar en el que él prefiriera estar.
Cuando termine de comerte, te voy a follar hasta que el único nombre que
recuerdes sea el mío.
las lágrimas uniéndose a la lluvia corrían por su cara.
Mi mirada se desplaza de sus bonitos ojos de cierva a sus labios
sutilmente pintados y al vestido lila que acentúa sus grandes pechos y se
ciñe a la cintura.
Subió sus manos hasta los pechos de ella, amasándolos, antes de darles un
apretón.
Mi cara se sonroja ante mis estúpidas palabras y su posible insinuación
sucia.
Su espalda se inclinó hacia atrás con un jadeo.
Las palabras salen volando de mis labios antes de que pueda detenerlas.
Maldita sea, él no quería hacerle daño. Diablos, no, eso era lo último que
quería.
Su cara tiene el tono más bonito de rosa. El rubor se extiende por los
costados de su cuello hasta la turgencia de sus pechos, que están muy
rojos por mis rudas caricias, pero a Suri no parece importarle.
Amar por fin su cuerpo, poseerlo, para que no se fuera nunca más.
Mi cara está más caliente que antes.
Me mira a los ojos con necesidad y calor mientras asiente con la cabeza.
Su espalda está pegada a mi frente.
Me acaricia de arriba a abajo y la sensación me llena de deseo.
El efecto que produce en mí es instantáneo, y me mojo tanto que me
sorprende.
El fino algodón de mis calzoncillos no oculta mi excitación. Sé que puede
sentir mi virilidad erecta presionada contra ella, pero no intento ocultarla.
No quiero hacerlo. Quiero que sepa exactamente cómo reacciona mi
cuerpo ante ella. Le echo el pelo hacia atrás y entierro mi nariz en su
cuello. La beso ahí y subo hasta su oreja.
Sonriendo, la beso y le pongo el anillo en el dedo. Exactamente donde
tiene que estar.
Mi lengua se adentra en sus pliegues y sus caderas se agitan. Pongo un
brazo sobre su bajo vientre y la mantengo ahí.

Mis caderas se flexionan y golpeo el borde de la cama debajo de mí.

Me meto entre nosotros y agarro la polla con la mano. Estoy más duro que
nunca, y sé que es gracias a ella.

Me alineo y empujo dentro de ella, lentamente al principio, y cuando se

adapta a mi tamaño, empiezo a pulsar dentro y fuera de ella. Se mueve
debajo de mí, y estoy cerca.

Pongo mi mano entre nosotros y le acaricio el clítoris hasta que

convulsiona y su cuerpo se estremece. Su coño sufre un espasmo,
ordeñándome, y gruño y me libero en su apretado y caliente coño.

Me coge la cara con las manos, frota su nariz contra la mía y me inclino
hacia su palma. En la seguridad de su tacto.
Algo empieza a zumbar en mis oídos y sacudo la cabeza. La ansiedad y el
miedo se arremolinan en mis venas.

Ella levantó la vista hacia mí y casi me perdí en sus ojos brillantes.

Puede que mi vida no haya ido según lo planeado, pero creo que resultó
mucho mejor.

Agarro mi bolso y salgo de allí, sin siquiera molestarme en escucharla

llamar mi nombre
detrás de mí.

Pero ella siempre ha sido mía y siempre lo será.

Con él mirándome, no puedo pensar con él presionando su cuerpo contra

el mío, inmovilizándome contra
la pared.

Sus ojos ardiendo con un deseo que nunca había visto en nadie. Algo en su
mirada me dio poder, me hizo sentir sexy de una manera que nunca había
experimentado. Está mal, pensé. Pero se siente tan bien.

Mi cerebro no comprende lo que está pasando hasta que sus labios se

encuentran con los míos.
Su toque me provocó una sacudida en la columna vertebral y tuve que
apoyarme en la mesa para no desplomarme sobre mi espalda.

Me empujé contra él, pidiendo más mientras sentía que la dulce liberación
empezaba a surgir dentro de mí.

Me quedé sin aliento cuando volvió a hundir su polla en mi interior. Desde

este ángulo, estaba tan profundo que pensé que me iba a partir por la
mitad.

Me dolía el corazón, como si se hubiera congelado y estuviera a punto de

romperse en mil pedazos.

No creo que pueda soportar perderla. Estaría tan perdido sin

ella.

Tanto Val como Tidas responden al mismo tiempo.

Siento que ordeña mi polla, que todo su cuerpo se flexiona mientras grita
mi nombre. La presión que ejerce sobre mi polla es como un tornillo de
banco y ella está sacando mi semen, chupándome hasta dejarlo seco.

Manteniendo los ojos cerrados, lo oí deslizarse fuera de su ropa interior y

sentí el calor de la punta de su polla contra mis labios.

Tendré que ignorar las mariposas que se agolpan en mi estómago cada

vez que me habla o cuando vea la sonrisa con la que es tan tacaño.
de besarla como si hubiéramos estado separados durante años en lugar
de horas.
Sonrío por encima del hombro mientras camino hacia mi coche. Incluso
mientras conduzco por el camino de entrada hacia la casa de mi padre,
sus
ojos permanecen en mí.
Te he amado desde que supe lo que era el amor, y lo sigo haciendo hasta
hoy.
Se cruza de brazos, levantando sus abundantes pechos, y me maldigo por
darme cuenta. Luego, me estudia detenidamente por un momento, como
si
pudiera decir que no le estoy contando toda la verdad.
Te amo, , y nunca dejaré de hacerlo. No mientras viva.
arqueándome una ceja.
Tiene los ojos cerrados cuando hace la pregunta, pero puedo sentir el
miedo en sus palabras.
Tratando de encontrar una salida a esta conversación,
niego con la cabeza.
Me duele el alma cuando no estás en mis brazos.
¿Qué diablos acaba de pasar?
Estoy aquí porque no podría estar ni un segundo más sin estar cerca de ti.
Se ve cómoda con sus jeans, mostrando esas curvas que amo. Pero sobre
todo, ella todavía está sexy
como el infierno. Aunque parece un poco nerviosa hoy, y me alegro de no
ser el único.
Muéstrale a la gente quién eres con tus acciones, no solo con tus palabras.
Bueno, las cosas se pusieron mucho más interesantes.
Prácticamente puedo oírle poner los ojos en blanco.
Mis labios se deslizan por su cuello, mientras paso las manos por debajo
de
su camisa. Cuando empieza a buscar mi cinturón, la detengo.
Una parte de mí se pregunta si estoy soñando.¿Cómo si no podría esta
chica querer mi grueso y feo culo.
Perdiéndome en su sabor, paso mi lengua sobre ella de nuevo.
—Lo sé. Sé que no lo hiciste. Hubo un momento de duda, pero me di
cuenta de que te conozco mejor que eso. Nos conozco mejor.
Justo cuando se acerca a caer por el acantilado, me aparto y deja
escapar un gemido de frustración.
No puedo más que asentir. Cuando me mira así, pondría el mundo a sus
pies.
Es el sonido más perfecto del mundo.
Eres todo lo que veo cuando ni siquiera estás ahí.
Me mataba cuando me miraba con tanto odio.
Tratando de encontrar una salida a esta conversación,
niego con la cabeza.
Rezo para que nada me arrebate a ninguno de los dos. No creo que pueda
soportarlo.
Doy una risa amarga.
Myra jadea suavemente cuando mi cálido aliento roza su centro.
Jeans que lo abrazan a la perfección, y su cuerpo fuerte y musculoso me
ruboriza la cara.
Su fragancia es absolutamente embriagadora.
Tenía mis manos en su pecho, mis uñas clavadas en su carne.
La forma en que me agarra la cabeza y hace rodar su delicioso coño
contra mi lengua, follando con avidez mi boca, es lo más caliente que he
experimentado.
Puede que me convierta en un neandertal, pero maldita sea, Bethenny,
quiero gritar a los cuatro vientos que eres mía.
"Esto significa que eres mía", digo, con la voz cargada de emoción.
Mis caderas rechinaban contra la cama mientras intentaba encontrar un
poco de alivio a la creciente presión sin perder el control y desperdiciar
mi venida fuera de ella.

La lamí un par de veces más antes de rodear su clítoris con mis labios y
chupar con fuerza.
¿Cómo puedes ser tan estúpida? me reprendo a mí misma, luchando
contra las lágrimas.
Ella se deshizo, gritando mi nombre y estremeciéndose de éxtasis cuando
su orgasmo la invadió.
Se acerca para hablarme al oído y su perfume embriagador se me sube a
la cabeza.
Empujé hasta que me senté por completo, con la cabeza de mi polla
empujando contra su cuello uterino.
Subo las piernas para rodear su espalda mientras él empuja profunda y
lentamente.
Un bonito rubor tiñó sus mejillas y asintió.

Su éxtasis vibró en su voz mientras mi nombre salía de sus labios, y

apretó el cabecero con tanta fuerza que sus nudillos se volvieron blancos.

Enterrado lo más profundo posible, rugí su nombre mientras el placer se

abatía sobre mí en una oleada tras otra.
No tienes ni idea de lo jodidamente cerca que estoy de correrme sólo de
pensar en que soy el único hombre que estará dentro de este coño".

Me eché hacia atrás y miré su pecho, relamiéndome al ver sus generosas

tetas que prácticamente se salían del sujetador de encaje rosa mientras
jadeaba con fuerza.

Me agaché y le desabroché los pantalones, luego se los bajé de un tirón

junto con las bragas que hacían juego con el sujetador.

Estuve muy tentada de subirme a él como a un árbol, pero probablemente

era demasiado pronto para hacerlo. De todos modos, eso era lo que ya le
había hecho mientras dormía.

Su expresión se tornó seria al responder: "No hay ningún lugar en el que

prefiera estar".
Puede que haya entendido mal todo el asunto del playboy. Tengo que
dejar de juzgar antes de conocer a la gente, pero es muy difícil cuando
creces como yo lo hice. Es una de las formas en que he aprendido a
protegerme.
Y de alguna manera soy el hombre más afortunado del mundo de que ella
sea mía.

Podía quedarme ahí y verla dormir por el resto de mi vida porque sabía
que nunca me cansaría de eso.

El olor almizclado y masculino de Ace.

Éramos perfectos el uno para el otro.

Nunca he deseado tanto a nadie. Me duele lo mucho que la quiero.

Saber que yo era el único hombre que estaría dentro de su coño me hizo
querer golpearme el pecho como un maldito cavernícola.

Sólo escuchar su risa me llena de una felicidad que no sabía que todavía
tenía en mí.

Mis manos se dirigen a su redondo trasero. La levanto y la rodeo con las

piernas.

Suspira y se agarra a mi camisa de franela. Sus labios se separan y me

permiten acceder a su boca.

Grita. Mi nombre resuena en los árboles y las montañas que nos rodean.

Necesito tenerla y hacerla mía de todas las maneras posibles.

Su pulgar se desliza sobre mi labio inferior, todavía magullado por los

besos.

Acercando su boca a la mía.

Mis ojos se cierran mientras me estiro para acomodarme a su tamaño, mis

manos se apoyan en su pecho.
El sabor salado de su semen inunda mis sentidos.

Sus dedos se dirigen de nuevo a mi clítoris, y todavía estoy sensible por

mi anterior orgasmo, así que no pasa mucho tiempo antes de que esté
lista de nuevo, y él empuja, llenándome por completo y tomándome.

Vuelvo a deslizar una de mis manos hacia su culo, clavando mis dedos en
él, acercándola aún más mientras la acaricio.

Cuando siento que sus muslos me aprietan la cara, sé que está cerca.

Con un grito, se tensa mientras su orgasmo toma el control.

En los fuertes brazos de Max, me siento como una mujer. Una deseada y
cuidada.

Su sabor es dulce y salado a la vez. Incluso mejor de lo que sabía que sería.

Él baja la cara. Se detiene, con sus labios a un centímetro de los míos, su

aliento los calienta, enviando escalofríos de placer por mi espina dorsal.

—Muéstrame todo ti. — dije con esa voz ronca que era más animal que
humana.

Me encantó que tuviera esta reacción hacia mí.

La forma en que me miró me hizo sentir como la presa de un depredador
muy peligroso.

Mi polla palpita, pidiendo estar dentro de ella.

Deslizo mi lengua por sus pliegues y la introduzco en su interior. Su coño

se aprieta alrededor de mi lengua una y otra vez.

Mueve sus caderas, intentando follarse a sí misma con mi lengua.

No es lo único que reclama. También se llevó mi corazón.

Levanto mis caderas, presionando mi sexo contra su polla.

Me lleva hasta la cama y me tumba.

Su boca recorre mi cuerpo hasta llegar a mi sexo. Gimo cuando su lengua

rodea mi clítoris. Presiona un dedo dentro de mí y empieza a bombearlo
dentro y fuera.

Todo mi cuerpo arde de necesidad. Mete el clítoris en la boca, moviéndolo

de un lado a otro con la lengua.

No puedo imaginar una vida sin él.

Mis dientes se hunden en mi labio inferior, excitándome por su

posesividad.
Su coño se cierra alrededor de mi polla. Gruño, tratando de aguantar
mientras sigo bombeando dentro y fuera de ella.

Sus uñas rasgan mi piel mientras su coño sigue contrayéndose alrededor

de mi polla.

Aunque corriera, iría tras ella. La encontraría.

Presiona su boca contra la mía en un duro beso

Sus dientes se hunden en el labio inferior mientras me ve empujar su

vestido por los muslos antes de que le tire las bragas a un lado.

Mis pelotas se tensan tanto que es casi doloroso. Los puntos negros bailan
en mis ojos. Mis rodillas se
doblan cuando empiezo a correrme dentro de ella.

En lugar de eso, la levanto de sus pies.

Me rodea con sus piernas. Mi polla se desliza hasta su abertura. Ya
está resbaladiza. De un solo empujón la meto hasta el fondo. Un grito
ahogado sale de ella mientras sus uñas se hunden en mis hombros.

No me canso de ti. La forma en que hueles, la forma en que tu

coño me envuelve. Todo de ti. Nunca es suficiente.
Entra en su habitación, cerrando la puerta de una patada tras él.

Olía tan bien, y no tenía ninguna duda de que sabía igual de dulce.

Gime, apretando su coño contra mi polla. Puedo sentir el

calor de su excitación a través de su ropa. Juro que casi me corro en
los pantalones.

Extendió sus manos y las enroscó alrededor de mis bíceps,

acercándome.

Respiraba con más fuerza, sus pupilas se dilataban.

En el momento en que te vi, supe que eras mía.

Los músculos de sus muslos se tensan bajo mi mano.

Mi boca está insípida porque no la he lamido en horas. Necesito lamerla.

El hambre es un rugido en mis oídos.

Sus manos ásperas pero suaves sobre mí.

Me acerqué a ella para que estuviéramos a solo un
pie de distancia.
Tenemos que salir de esta camioneta antes de que te salte encima. — Su
mano se mueve entre mis piernas para frotar mi polla, y gimo.

Mi mano libre se introduce en mis vaqueros. Mis dedos se dirigen

rápidamente a mi clítoris y lo frotan, buscando alivio.

La forma en que sus ojos se fijaban en los míos mientras entraba y salía de
mí.
Sus labios forman una delicada "O" que es a la vez, besable y excitante.
Mi corazón dio un vuelco ante la lujuria y el deseo que ardían en sus ojos.

Nuestros cuerpos estaban sincronizados y eran uno solo.

Se acerca a mí, como si quisiera asegurarse de que realmente estoy aquí.

Todo lo que puede hacer es jadear mientras aprieta los ojos.

Inhalé, absorbiendo su olor,

memorizándolo.

Está arañando las sábanas y luchando contra su orgasmo hasta que no le

doy otra opción que caer sobre el borde. Su grito es fuerte, y me encanta
cómo suena mi nombre en mis oídos. Mientras su coño sigue apretando
mis dedos, me siento y deslizo mi polla por su humedad antes de
introducirla por completo. Jadea y abre los ojos, pero no me muevo. Me
mantengo en lo más profundo, dejando que su apretada vaina se
acostumbre a la intrusión. Inclinándome sobre su cuerpo, le beso entre
los pechos y luego le chupo los pezones. Los picos están duros contra mi
lengua y los rozo con los dientes. Sigue gimiendo mi nombre mientras
cambio de un lado a otro, prestando a ambos la misma atención.

Empuja y mis uñas se clavan en sus hombros.

Levantando las caderas para recibir cada uno de sus empujones.

Vuelvo a gritar cuando otro orgasmo me golpea.

Su voz es tan baja que me produce un escalofrío.

Gruñe mientras me penetra hasta el fondo, y no puedo evitar el pequeño

jadeo que me sale.—

El resto del mundo se desvanece y solo existe la felicidad sin otras

preocupaciones.

Lentamente, abro los ojos para encontrarme con los suyos. Apoya su
cabeza en el interior de mi muslo, usándolo como almohada. También
tiene una sonrisa de satisfacción en los labios. No puedo darle una mierda
por eso tampoco porque es piadoso con esa boca. Algún día me casaré con
él.

Clavo mis dedos en su pelo mientras el orgasmo me golpea. Su boca es

implacable mientras me lleva al extremo del puro placer. Tanto mi cuerpo
como yo estamos locamente enamorados de este hombre. Puede que no
llevemos mucho tiempo juntos, pero sabe leerme mejor que nadie.
Le cubro el coño con la boca y se lo chupo mientras mi lengua rueda de un
lado a otro sobre su sensible capullo.

Digo contra sus labios mientras le desabrocho los vaqueros y se los bajo
por las caderas.
Me fijo por primera vez en las pecas de su nariz y me resisto a pasar el
pulgar por ellas.
Mientras me deje estar a su lado, eso es todo lo que necesitaré.
Voy a pasar el tiempo que me quede en esta tierra saboreándola,
complaciéndola, viviendo cada día sólo para verla sonreír.
Se estremece mientras sus manos se dirigen a mi pelo y me agarran con
fuerza. Mueve sus caderas contra mi cara y gime.
Sus profundos ojos marrones se clavan en los míos.
Su voz es tan áspera y cruda que se me pone la piel de gallina.
Nunca tendré suficiente de mi mujer.
Su agarre se hace tan fuerte que es casi doloroso.
Ella levanta los ojos hinchados hacia los míos, con una expresión
desolada.
Quizá debería tener miedo, pero eso es lo último que siento cuando estoy
con Donovan.
Sus sollozos me rompen el corazón y la recojo en mis brazos.
Dice contra mis labios mientras aprieta sus curvas llenas contra mis
líneas duras. — ¿Eso te excita?— Mi mano baja por la parte trasera de sus
vaqueros y le toco el culo.

Me inclino y la beso en los labios antes de que pueda discutir conmigo.

La acuno suavemente, sosteniéndola mientras se desmorona.
Lo único que sé es que cuanto más tiempo estoy con Gracie, menos quiero
estar lejos de ella.
Aúllo cuando el clímax me invade en una acalorada carrera.
Gime cuando envuelvo mi mano alrededor de su polla y empiezo a
bombear. Sabía que sería grande. Lo había sentido presionado contra mí,
pero maldita sea. No tengo ni idea de cómo va a caber dentro de mí
porque va a ser difícil que mi boca lo envuelva. Una gota de semen gotea
de la punta de su polla, y paso la lengua por ella, saboreando lo que le
hago. Suena otro gemido, y sé que voy a ser adicta a hacer que más de
esos sonidos salgan de su gran cuerpo. Se apoya en la puerta, y abro la
boca y lo acojo en mi interior.—Sunshine. — gime, cogiendo mi trenza y
enrollándola en su mano. Me aprieta el puño mientras empiezo a mover la
cabeza de un lado a otro.—Joder. — gime cuando lo llevo hasta el fondo
de mi garganta.

Una obsesión que solo ha crecido con el tiempo.

Esto demuestra que con amor todo es posible.

Mi espalda se arquea y me aprieto alrededor de él, ordeñando su descarga
mientras me llena con su cálido y pegajoso semen.
Cerró los ojos e inhaló y exhaló lentamente, tratando de recuperar la
compostura, el autocontrol.
Louisa dirige sus ojos hacia mí y su mirada se clava en la mía.
Todo el mundo me mira fijamente. Juro que se podría oir caer un alfiler
con lo silenciosa que se ha vuelto la sala.
"Pero no debería haberlo hecho. Fue la decisión más estúpida que he
tomado nunca".
Se quitó la chaqueta y se subió las mangas hasta los gruesos antebrazos,
revelando indicios de tatuajes que asomaban mientras serpenteaban por
sus brazos.
Sus palabras son casi susurradas y puedo ver todo el dolor que he
causado escrito en su cara.
Se echó hacia atrás y me miró a los ojos.
Empuja sus caderas, meciéndose en mi cara mientras monta una ola de
liberación.
Siento un deseo abrumador de estrecharla entre mis brazos y besarla
hasta dejarla sin aliento.
"Maldita sea, lo que daría por ser ese vestido, abrazando todas esas
suaves curvas femeninas tuyas".
Sus músculos se contraen bajo las yemas de mis dedos, despertando la
excitación que se está gestando en mi vientre.
Es corta, negra y se ajusta a ella como una segunda capa de piel,
acentuando hasta la última de sus curvas.
Esta vez no hay forma de detener las lágmas, ya que un torrente de
emociones se abalanza sobre mí.
El espectáculo hace que mi polla se retuerza en mis pantalones.
Embriagada por el momento, la sensación, la electricidad que fluye entre
nosotros.
Su cuerpo se estremece y su respiración se entrecorta en el pecho.
Tal vez, solo tal vez...
Me alejé de ella una vez, y no lo volveré a hacer. Voy a recuperar a Louisa
pase lo que pase.
Tan lista.
Que se tragó su orgullo y se disculpó... por mí.
Algo empieza a zumbar en mis oídos y sacudo la cabeza. La ansiedad y el
miedo se arremolinan en mis venas.
Puso sus labios sobre los míos, y mientras me besaba, metió la mano
entre nuestros cuerpos y colocó la punta de su polla en la entrada de mi
coño.

Su sabor era dulce pero también indómito, intensamente bueno.

Deslizo mis manos sobre sus hombros y las enlazo detrás de su cuello.

Busca en mi cara, y sé que tiene que ver la sinceridad ahí.

He encontrado al hombre con el que quiero pasar el resto de mi vida, y

eso es mejor que cualquier otra cosa en el mundo.

Mi visión se nubla mientras las lágrimas llenan mis ojos. Trago con fuerza
y me muerdo el interior de la mejilla, tratando de no llorar.

Nunca me he sentido más segura e incluso más amada que ahora... pero
eso no podría estar más lejos de la verdad. No me ama.

No puedes ser verdaderamente feliz si no enfrentas tus miedos.

Nos abrazamos durante varios minutos, ambos tratando de recuperar el

aliento.

Nunca pensé que encontraría eso en otro lugar que no fuera esta
montaña.
Me he pasado la mayor parte de mi vida intentando encontrar dónde
encajar. Entonces lo encontré, en una cabaña en las montañas, en los
brazos de un hombre que no podía esperar a deshacerse de mí.

Mis ojos se ponen en blanco cuando su lengua sube y baja por mi raja,
acariciando mi clítoris. Sólo hacen falta unos cuantos lametones para que
me corra con fuerza contra sus labios. Se desliza por mi cuerpo y su cara
se cierne sobre la mía.

Nos ha costado llegar hasta aquí... pero no lo cambiaría por nada del
mundo"

Con un fuerte grito, la tensión de mi cuerpo se rompe y me corro, las olas

de placer me invaden. El apretón de mis entrañas le arranca un profundo
gemido, y sus embestidas aumentan la velocidad y la fuerza hasta que
gruñe mi nombre mientras se corre con fuerza, bombeando su cálida
semilla en mi interior.

Enrosqué mi mano alrededor del marco de la puerta, mi corazón tronaba,

mi garganta estaba seca y apretada.

Tan jodidamente bueno.

La acerqué, amando cómo su cuerpo se amoldaba al mío. Me incliné y la

besé.

Estamos destinados a estar juntos.

¿Cómo coño he tenido tanta suerte?

Quiero que seas mi esposa. Por favor, di que serás mía.

Dijo las palabras en voz baja, pero su voz era tan profunda, tan masculina.

Sentí que mis músculos internos se apretaban rítmicamente a su

alrededor. Rofus me estiró, me llenó completamente.

Todo lo que podía hacer era aferrarme a él.

"Te sientes tan bien"

Nuestros gruñidos y gemidos se fundieron en uno solo, al igual que

nuestros cuerpos al moverse juntos.

Pensó que no la quería. Nada podría estar más lejos de la verdad. Pero
esto era lo mejor, lo mejor para ella.

Me mantuve rígido sobre ella, mis ojos ardiendo en los suyos. Entonces,
un gruñido brotó de mi garganta mientras empujaba hasta el fondo,
enterrándome hasta las pelotas en su apretado calor.

Kat gimió y me clavó las uñas en los hombros, pero sus ojos no se
apartaron de los míos.

Ojalá fuera sencillo.

En lugar de reducir la velocidad, sigo empujando, llegando a ese punto en
el que gruñe y cada músculo de su cuerpo se tensa.

Me tomó la mejilla con su gran mano, su mirada salvaje, intensa.

Me sujetó las caderas tan fuerte que el dolor se transformó en un intenso

placer.

Me sentía tan llena, tan estirada que no podía recuperar el aliento.

Sus labios carnosos habían acariciado y engatusado mi cuerpo hasta el
éxtasis más absoluto durante toda la noche.  Sus manos ásperas, cálidas y
muy grandes habían adorado cada una de mis curvas. Sus manos se
habían movido entre mis piernas, a un pelo de mi doloroso y húmedo
núcleo cuando me despertó.  El deseo de la mujer todavía me recorre el
vientre y pulsa en mi coño necesitado.
Sentí el pesado peso de sus bolas presionando mi trasero cuando estaba
completamente dentro de mí.
El primer toque de sus labios es tierno. Suave, de la mejor manera posible.
Me derrito en él, cuando su lengua separa mis labios y se desliza en su
interior.
Dios, su voz me hace apretar los muslos. En serio, el hombre podría hacer
que una monja quisiera pecar sólo con su voz. Es rudo pero suave al
mismo tiempo. Es difícil de describir, pero maldita sea, me hace querer
saltar sobre él.
"Siento haberte hecho esperar tanto".
Mi corazón se apretó. Esta mujer me estaba absorbiendo como el flujo
interminable de la marea. Me iba a destrozar.

Su lengua se sumerge en mi boca y se frota contra la mía, lenta y sensual,

luego rápida y exigente.
==========
Trago con tanta fuerza que estoy segura de que debe oír la bola de nervios
que baja por mi garganta hasta el estómago.
Mis ojos se posan en su coño desnudo y gimo al ver cómo brilla para mí.
"Si siempre estás preparada para mí, dudo que abandone nunca esta
cama", bromea mientras me mordisquea el hombro haciendo que cada
nervio de mi cuerpo cobre vida. Las mariposas revolotean salvajemente
en mi estómago mientras él me complace haciendo que los dedos de mis
pies se enrosquen.
Gemí y cubrí su cuerpo con el mío. Sus piernas rodearon mi cintura para
que mi polla rozara su entrada.
==========
Tú eres el premio y estoy aquí para tomarte y hacerte mía".
Mientras entro y salgo de ella, nuestros gritos de placer se mezclan con el
golpeteo de nuestra piel.
Cierro los ojos y siento su calor filtrándose en mí, en lo más profundo de
mi pecho, donde antes mi corazón estaba frío y rígido.
Pasé mis manos por su suave piel, ahuecando sus pechos y deslizando mis
pulgares por sus pezones.
y me corro en ese momento. Gime mientras mi coño succiona su polla,
ordeñándola. Me llena, disparando su semilla dentro de mí.
Me encanta la forma en que me mira como si fuera el centro del universo
y la forma en que inclina la cabeza cuando me escucha. Me encanta la
forma en que me hace sentir que todo va a estar bien con sólo rodearme
con sus fuertes brazos.
Su risa resuena en la tienda vacía.
Pero de entre todas las personas, entiendo que la confianza debe ganarse.
No se puede exigir ni forzar.
Me regala otra de sus brillantes sonrisas, de esas que me hacen querer
arrodillarme y prometerle lo que quiera. No se da cuenta del poder que
tiene sobre mí.
Se me doblan los dedos de los pies y me corro en ese momento
Es la pieza que me falta y sin la que no quiero vivir.
Un pequeño gemido se escapa entre sus labios y aprovecho para
encontrar su lengua con la mía.
Daría cualquier cosa por ser un hombre digno de esa mirada en sus ojos.
Que sea digno de ella. Pero no puedo darle eso a ella. No puedo ser
alguien que merezca la pena.
Tiene los ojos y los labios hinchados de tanto llorar. Y me mata el hecho
de que yo sea parte de la razón por la que está alterada como lo está.
Saber que la estoy haciendo sufrir me desgarra, me atormenta.
Haría cualquier cosa para calmar su dolor, para que se sintiera mejor.
Incluso si todo lo que puedo hacer es distraerlo durante unos minutos.
Acabo de encontrarte. Y no hay manera de que te deje ir
Me doy cuenta de que sufre algún tipo de culpa y tiende a culparse de
todo.
No ha hecho nada más que ser protector y cariñoso conmigo, y yo se lo he
echado en cara una y otra vez
Debería haber adivinado que no sería capaz de perdonarme. Esto es
exactamente lo que sabía que pasaría y, de alguna manera, sigo siendo el
tonto bastardo que se sorprendió.
Un sollozo brota de mi interior y no puedo evitar que las lágrimas caigan
por mi cara.
Te quiero más que mi próximo aliento".
Le hice daño, la persona que más quiero en el mundo está llorando por mi
culpa. Ese pensamiento me llena de culpa y desesperación.
El mero hecho de saber que soy el único que puede hacerla feliz con mis
palabras me dice que soy el hombre más afortunado sobre la faz de la
tierra.
I bit my lower lip, reached up and took his face in my hands. A slight
tremble went through Knox; I felt it at the tip of my fingers and it made
me realize that my touch affected him almost as much as his affected me.
Me odio en este momento. Me odio.
==========
No lo entiendes. Si te pasa algo, también podría estar muerto, Mama.
Quiero ser el centro de tu universo porque tú eres el centro del mío.
He pulls my face up to look at him. I shrug at him and try to look away.
But he won’t let me.
==========

He nods at me before touching his lips to mine. “I want you. I want you
naked underneath me. Now.” And he pulls my shirt over my head. He
leans in to kiss me, while unsnapping my bra. When he pulls my bra down
my arms, he steps back and looks down at me. The lust is apparent in his
face and he sucks his breath in. His nostrils are flared, and his breathing
becomes heavy. His hands cup each of my breasts and he leans down and
sucks one of my nipples into his mouth.
==========
She had such a smartass little mouth – and it was a perfect fit to wrap
around my cock.
I looked at the uncertainty in her eyes. She was mine. Now that I had
tasted her and owned her innocent body, I wasn’t giving that up – no
matter how wrong it was.
He pulls me close and wraps his arms around me.
==========
“You are mine, baby girl. And I am yours. Are you good with that?”
His hands cup each of my breasts and he leans down and sucks one of my
nipples into his mouth.
==========
This fucking sucked. I couldn’t lose her now that I just really found
her. Trying not to pass out from the pain, all I could think was, I failed
her.
As we got to the top step, I heard the sweetest sound I had ever heard.
Rick was yelling at someone he wasn’t going to the hospital until I was
safe.
My legs shut together tightly. “No baby, I want to smell that sweet pussy.
I’ve never smelled anything as sweet as that.” He pulls my panties down
my legs and wastes no time before his mouth is on my wet slit. He presses
me down to the couch and then pulls me to the edge. I’m laid out on the
couch and I can’t take my eyes off him as he licks and caresses my swollen
nub. His tongue presses tightly against my clit while his fingers slide in
and out of me. My hips automatically gyrate against his face and I fill the
room with my moans. When I’m close, my legs tighten up around his neck
and he presses into me even harder. His rough hands grip my thighs,
holding me down as he takes control of my impending orgasm. When his
finger hits my G spot and he bites down on my clit, I come undone. I come
for what seems like hours, but he doesn’t stop. He laps at my juices until
my breathing comes back to normal.
==========
Soy tu hombre primero, jugador de fútbol después. Así es como va a ser
siempre.
The last thing I remember is the sensation of falling and warm arms
wrapping around me.
“I want to,” Kade murmurs, leaning toward me and brushing his lips over
mine.
The sight of him kneeling in front of me with his hand wrapped firmly
around my shaft has me impossibly hard.
To my utter surprise and pleasure, he opens his mouth and takes my
entire length inside until his lips are kissing the base. He gags when the
tip hits the back of his throat and unbidden my hand goes behind his
head, guiding his movement as he slides his mouth back up my shaft.
Kade’s saliva glistens on my skin, and when he repeats the movement and
groans, the vibration coming from his throat has my eyes rolling back, and
I nearly blow my load.
Abriendo lentamente los ojos, gimo cuando la luz que se filtra….
“Once we do this, Dev, there will be no turning back.”
“Don’t know what I did to deserve you, but I’m so damn fortunate fate
paired you with me. Every day for the rest of our lives, I'll do whatever it
takes to make sure you feel as lucky as I do right now.”
She was the forbidden fruit, but damn if I didn’t want a taste of that—of
her.
His chin is glistening with my juices, and he licks his lips. He pulls me up
and kisses me. I taste myself on him, but instead of grossing me out, it
intensifies the low pull in my belly.
“I’m making a promise, one that will never be broken.”

Nunca he conocido a nadie que me haya hecho querer sentar cabeza.

No hasta Darcy.
His hands slide down my inner thighs and push my legs apart. He leans
down and kisses me on the lips. I feel his hard bulge press against my wet
swollen center and instinctively I lift my hips to get closer to him.
==========
Verla marcharse se sintió como el mayor error de mi vida.
I moan as he captures my nipple in his mouth.
==========
No sé qué hice para merecerla, pero estoy tan feliz de que esté aquí
conmigo, que pueda pasar la vida con ella a mi lado.
I imagine having a child of my own and the image of Bella rounded with
my baby makes my heart skip a beat. I realize I want to breed her. I want
to put my seed in her and tie her to me for eternity.
==========
Me arrepentí tan pronto como lo dije. En cuanto las palabras salieron de
mis labios, quise retirarlas. Nunca debí hablarte así y te juro que nunca
más lo haré.
It’s a while later when I wake up. Bella is between my legs, tentatively
licking my already hardened cock. I moan when she takes a big swipe up
the length of me. I gather her hair out of her face so I can watch her lips
wrap around me. Her big eyes are looking up at me and I have to admit I
could wake up to this every day for the rest of my life. And I tell her so.
==========
Gime mientras mi coño succiona su polla, ordeñándola. Me llena,
disparando su semilla dentro de mí
She moans with her lips still wrapped around me and the vibration has
me lifting my hips off the bed. I grab her shoulders and pull her up the bed
until she’s straddling me. Her pussy is wet and pressed against my lower
belly while my cock is lying against her bottom.
==========
How could one simple touch from him have such an effect on me?
No debería sorprenderme cuando él no está ahí para atraparme.
She lifts up and aligns her opening with my cock. With one stroke, she is
fully seated on my cock. When I bottom out in her, we both moan loudly.
==========
No le doy tiempo a cambiar de opinión. Me inclino y aprieto mis labios
contra los suyos. Un simple toque es como una explosión en mi cuerpo.
Sonríe y se le ilumina toda la cara. Le inclino la barbilla hacia mí.
She starts circling her hips and raising herself up and down, riding me. My
hands are gripping her thighs as I pound into her. Her big beautiful
breasts are swaying with every thrust and she looks like a goddess as she
confidently rides me. She leans back on her arms, causing me to hit her at
a different angle. I look down between us and her clit is swollen, sticking
out from her hood, begging to be touched. I put my hand on her and rub
her in circles, causing her to ride me with even more intensity.
==========
Me mira con sorpresa. Su mano sube y acaricia mi mandíbula.
And her hips tighten up as she comes, causing me to shoot my cum,
coating her inner walls. Afterwards, she’s exhausted and leaning down
across my chest. I pull the hair back from her face and kiss her forehead.
==========
Pero ella ha sellado su destino con su suplicante súplica.
Me casaría contigo todos los días si me dejaras.
Aero no podía ir a por el malvado humano en persona porque necesitaba
mantenerse cerca de Ramsey durante las primeras fases de su
apareamiento.
Everything. She was everything to me.
"Dime que quieres esto, y seremos tú y yo contra el mundo".
It’s the least I can do for the girl I love that’s already suffered so much.
No mostrar miedo. Sé más grande que el miedo, y más grande que lo que
sea que te acecha.
Suelto el aliento que ni siquiera me había dado cuenta de que estaba
conteniendo.
I bit my lower lip, reached up and took his face in my hands. A slight
tremble went through Knox; I felt it at the tip of my fingers and it made
me realize that my touch affected him almost as much as his affected me.
I looked at the uncertainty in her eyes. She was mine. Now that I had
tasted her and owned her innocent body, I wasn’t giving that up – no
matter how wrong it was.
As we got to the top step, I heard the sweetest sound I had ever heard.
Rick was yelling at someone he wasn’t going to the hospital until I was
safe.
This fucking sucked. I couldn’t lose her now that I just really found her.
Trying not to pass out from the pain, all I could think was, I failed her.
There is a charm about the forbidden that makes it unspeakably
desirable.

MARK TWAIN
Es casi como si toda mi vida estuviera a punto de cambiar.
Pero aquí estoy, dado de baja con honores y tratando de resolver mi vida
de regreso en el rancho de mi familia. Serví durante diez años.
Todos los instintos masculinos que llevo dentro me gritan que me
acerque a ella, la envuelva en mis brazos y le diga que todo va a estar bien.
Confío en ti, Willow. Con todo mi corazón, confío en ti. Y te amo.
Es más fácil decirlo que hacerlo.
Sus palabras, no las mías.
“You belong to me now, Lily. And I will not be denied what is mine.”
“Open your eyes, Lily.” Jack’s fingers tweak my nipple. “I want you to
know who’s fucking you.” I let my lids flutter open and let the wicked
smile slip across my lips. It comes from my very soul.  “I know who I’m
fucking, Jack.”
"Porque no podía dejarte escapar ahora que por fin te he encontrado.
Ahora no queda más remedio que ir a ver a Ward y disculparme,
explicarle todo y esperar que me perdone y me acepte de nuevo.
"Por mucho que me guste ver tu cuerpo sexy cubierto por mi camisa, me
muero de ganas de desnudarte.
Si tan solo pudiera de alguna manera tomar el dolor que ella está
sintiendo ahora y ponerlo sobre mí.Señor, llevaría el peso del mundo
sobre mis hombros por ella.
Su mano bajó lentamente hasta mi culo, y presionó contra mi vestido.
Finalmente me aparté, dando un paso atrás. Casi jadeaba mientras
luchaba contra mi cuerpo. Lo deseaba demasiado.
Sus manos rodearon mi culo y me atrajeron hacia él.
Su lengua pasó por mi clítoris de un lado a otro y el éxtasis me invadió.
Antes de él, decía que no quería esas cosas porque no creía que pudiera
tenerlas. Esperaba que si lo decía lo suficiente, podría empezar a creerlo
yo misma
la manzana no cae lejos del árbol
Odio que nunca haya tenido a nadie en su vida que la pusiera en primer
lugar. A partir de este momento, eso es exactamente lo que planeo hacer.
"No voy a dejar de acosarte. No quiero controlarte, pero tengo este loco
deseo de asegurarme de que estás a salvo y de que estás protegida".
Levanto las manos frente a mí. "No voy a ceder en esto". Bookstagram
Stalk Her Hard hope Ford
Chico pelo negro, ojos oscuros
Ojos azules chica, pelo castaño

—“¿No has visto a Voldemort? -le pregunto a Harry.

—“¿Voldemort?”

—¿Quién es ese imbécil? —Celoso.

—“El que no debe ser nombrado”—Harry y Ron se miran confundidos—. “El quien tú sabes”.

—“¿Peeves?” —Susurra Ron.

—“No lo nombres. No quiero otras de sus estúpidas bromas. Todavía siento el pelo pegajoso —
se toca el pelo molesto”.

¿No existe en esta realidad?

Gracias a Dios. Me daba miedo ese tipo.

—“Ralph Fiennes” —pruebo con su nombre verdadero.

—“¿El actor muggle?” —Dice Draco con asco, volteo los ojos.

—“¿Es un actor? Espera, ¿cómo sabes que es un actor?” —Lo miro sorprendida.

—“Eh… Ha..Harry me contó el otro día” —Se pone nervioso.

—“Yo no te he contado nada”.

—“Ssi, si lo hiciste. Probablemente no te acuerdas”.

—“Draco. ¿ves películas Muggles?” —sonrío, molestándolo.

—¡Claro que no! —lo miro desafiándolo, no me gusta que me mienta— Bueno, está bien, vi solo
una —levanto una ceja—. Unas cuantas. Solo quería burlarme de lo malos que son actuando.

—Mmm, claro.