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El ruido es uno de los peligros laborales más comunes. Los niveles de ruido peligrosos se
identifican fácilmente y en la gran mayoría de los casos es técnicamente viable controlar el exceso
de ruido aplicando tecnología comercial, remodelando el equipo o proceso o transformando las
máquinas ruidosas.
Una razón muy importante de la ausencia de programas de control del ruido es que,
lamentablemente, el ruido suele aceptarse como un “mal necesario”, un aspecto inevitable del
trabajo industrial. El ruido peligroso no derrama sangre, no rompe huesos, no da mal aspecto a los
tejidos y, si los trabajadores pueden aguantar los primeros días o semanas de exposición, suelen
tener la sensación de “haberse acostumbrado” al ruido. Sin embargo, lo más probable es que
hayan comenzado a sufrir una pérdida temporal de la audición, que disminuye su sensibilidad
auditiva durante la jornada laboral. Esa pérdida auditiva aumenta gradualmente a lo largo de
meses y años, y pasa en gran medida inadvertida hasta alcanzar proporciones discapacitantes. Por
ello, se deben tomar medidas preventivas antes de que comience la pérdida auditiva.
Para prevenir los efectos perjudiciales del ruido para los trabajadores, es preciso elegir
instrumentos, métodos de medición y procedimientos que permitan evaluar el ruido al que se ven
expuestos aquéllos. Los principales objetivos de la medición del ruido en ambientes laborales son:
Términos:
Normas
Instrumentos de medición.
o Sonómetro normalizado; sonómetro: es un instrumento para medir el nivel de presión
acústica y que satisface las especificaciones de alguna norma de referencia declarada por
el fabricante
Como consecuencia de la Ley de Weber Fechner, para medir el sentido de la audición, se posibilita
la elección de una escala logarítmica. De este modo, se reduce considerablemente el rango de
valores de presiones acústica.
Decibel: es una unidad de relación entre dos cantidades utilizada en acústica, y que se
caracteriza por el empleo de una escala logarítmica de base 10. Se expresa en dB
continuación:
Mañana
Tarde
Noche
Nivel Diario Equivalente, es el nivel de presión acústica continuo equivalente , ponderado A ,para
un tiempo de 8 horas (jornada laboral de nuestro trabajador)
Datos 10^(0.1(Li
N° de datos tomados n= 9 ))
37153.52
45.7
1 Li 29
39810.71
46
1 71
70794.57
48.5
1 Laeq= 56.73113528 84
93325.43
49.7
1 01
107151.9
50.3
1 31
223872.1
53.5
1 14
575439.9
57.6
1 37
1230268.
60.9
1 77
1862087.
62.7
1 14
Con los resultados obtenidos pudimos observar que el ruido que pudiera escuchar el vigilante en
su jornada laboral es de 56.7 dB.
De acuerdo con la norma, nos dice que en una jornada laboral de 8 horas, el nivel máximo
permisible debe ser de 90 dB(A), lo que significa que el vigilante no supera ese nivel.
De acuerdo con la NOM-081-SEMARNAT-1994, el área de trabajo del vigilante se encuentra en
una zona residencial, debido a que esta abarca habitacional unifamiliar y plurifamiliar;
vivienda habitacional con comercio en planta baja; vivienda habitacional
mixta; vivienda habitacional con oficinas; centros de barrio y zonas de servicios educativos. Y
nuestro operador, no tiene un ruido continuo, varía dependiendo de la hora del día y de las
condiciones del tráfico. Por ejemplo, en 15 minutos antes de horas cerradas hay mucho flujo de
vehículos, debido a que entran o salen los estudiantes, los claxon debido al trafico en horas pico y
debido a que es una zona industrial y el paso de camiones debido a que el instituto tiene empresas
vecinas, o maquinas en caso de que arreglen la calle (bacheos) son algunos de los ruidos más
fuertes que podría oír el operador, pero no son continuos.