Héctor Manuel Lázaro Hernández 27 de febrero 2022

Unidad 1.3 Flujos migratorios en Centro-Norte América y El Caribe

Reflexión

La migración se origina por múltiples causas, es un proceso complejo; podemos pensar que esta se
origina solamente por cuestiones económicas, sin embargo la realidad es más complicada ya que
puede ser motivada tanto interna como externamente; Aruj (2008), menciona que entre las externas
se encuentran:
1. Falta de alternativas para los logros ocupacionales.
2. Incertidumbre social sobre el futuro económico.
3. Inseguridad general frente al crecimiento de la violencia.
4. Necesidades básicas insatisfechas.
Y entre los internos:
1. Frustración en las expectativas de vida.
2. Frustración en la realización personal.
3. Mandato generacional ligado a la comunidad de la cadena migratoria familiar.
Asimismo la desigualdad estructural que viven los países del triángulo norte de Centroamérica, es
decir Guatemala, Honduras y El Salvador, obliga a las personas a dejar sus lugares de origen en
busca de una mejora en su bienestar, optando sin desearlo, por las diversas trabas que la autoridad
impone, recorrer el camino de forma irregular con los peligros que conlleva, desde el cruce de
puntos no permitidos que pueden llegar a ser peligrosos hasta toparse con la delincuencia
organizada,
Rodriguez (2014), destaca los motivos laborales, inseguridad, violencia la reunificación familiar y
en el caso de algunas comunidades la tradición migratoria, como las principales causas del
desplazamiento. Recientemente en su informe anual la Red de Documentación de las
Organizaciones Defensoras de Migrantes, (REDODEM, 2019), enlista los motivos siguientes:
económicos, de violencia, familiares, ambientales, socioculturales, personales, como origen de los
movimientos migratorios.
Es así como podemos observar las distintas causas que provocan el desplazamiento de personas y
constatar su multicausalidad.
Así como hay distintas causas de desplazamiento, los migrantes irregulares recurren a diversos
medios para trasladarse de un lugar a otro, Rodríguez (2014), afirma que el autobús (80%), es el
principal medio de transporte y no el ferrocarril como muchos pensarían, caminar (40 %) sería la
segunda forma de trasladarse, seguido del automóvil o camiones de carga (28%), que pueden ser
muy peligrosos debido a los accidentes que ocurren a menudo llegando incluso a perder la vida; el
siguiente seria el ferrocarril (22,5%).
Con ello también varía las rutas que usan los migrantes en su camino al norte de México, en la
frontera sur la mayoría opta por atravesar la frontera con Chiapas, provenientes de Guatemala, la
mayoría de los flujos atraviesa el centro del país, otras usadas en menor medida son las del golfo y
la costa del pacifico mexicano, según datos del Unidad de Política Migratoria (IPM, 2020). Dando
cuenta que las personas suelen elegir la ruta que mejor les convenga, para mitigar los peligros que
pueden encontrarse en su tránsito.
Olayo – Méndez (2017), reconoce que a lo largo de las rutas han surgido una red de organizaciones
de ayuda humanitarias, gestionadas por organizaciones no gubernamentales, muchos de carácter
religioso, que alojan y asesoran a personas migrantes, siendo un espacio humanitario importante
ante tanta vulnerabilidad a la que los migrantes se ven envueltos por su condición irregular.
Estas casas o albergues, alivian el caminar del migrante, donde pueden recargar fuerzas para seguir
su meta; dándoles voz y haciéndolos visibles. Aunque también resulta en conflictos de interés por
parte de la población local que pueden llegar a ver con cierto recelo el apoyo a este grupo
vulnerable. Sin embargo, se encuentran también personas dispuesta a colaborar con estas causas.
Las redes que pueden llegar a tejer estas organizaciones, son muy importantes dado que es una
forma que la sociedad civil incida en los problemas que aquejan al país, en este caso en la atención
de grupos vulnerables.
Lo que más me impacto del documental fue la manera en que el migrante suele pasar desapercibido,
por las autoridades nacionales tanto Mexicana como Estadounidense, tomando nombres falsos para
no ser ubicados por el temor a deportaciones, si no logran llegar pueden fallecer en el intento y si
no son hallados nadie se daría cuenta de su existencia. Además de que a pesar de los peligros que
llegan a enfrentar deciden seguir adelante, pues lo que dejaron atrás es peor que lo llegan a sufrir.

Referencias
Aruj, R. S. (2008). Causas, consecuencias, efectos e impacto de las migraciones en Latinoamérica.
Papeles de población, 14(55), 95-116.
Olayo-Méndez, A. (2017). La 72: un oasis en las rutas migratorias de México.
REDODEM (2019). Informe anual la Red de Documentación de las Organizaciones Defensoras de
Migrantes. https://redodem.org/wp-content/uploads/2020/09/REDODEM_Informe_2019.pdf
Rodríguez, E. (2014). Migración centroamericana en tránsito por México hacia Estados Unidos:
Diagnóstico y recomendaciones Hacia una visión integral, regional y de responsabilidad
compartida. México DF: ITAM.
Unidad de Política Migratoria (2020). Personas migrantes extracontinentales y extra regionales en
los flujos en tránsito por México, Secretaría de Gobernación.
http://politicamigratoria.gob.mx/work/models/PoliticaMigratoria/CEM/Investigacion/Rutas/Rutas
01.pdf