Productividad, base necesaria para Utilidades a Trabajadores

Ligar el PTU a la productividad haría más coherente su reparto, dice Carlos G. Amtmann Ituarte; además, dar un anticipo
durante el año haría que este tuviera una carga fiscal menor.

CIUDAD DE MÉXICO (CNNExpansión) — ¿Por qué se necesita un nuevo porcentaje de Participación en la Utilidades a los
Trabajadores?

Primero, hay una amenaza en el entorno: la iniciativa detenida en el Senado acerca de la integración del salario base de cotización del
IMSS, con la base de integración del ISR.

Segundo, la Ley del Trabajo solicita que cada empresa con más de 50 trabajadores haga su Programa de Productividad, que debe
integrar un Diagnóstico, Capacitación, Indicadores de mejora e incentivos o bonos para los trabajadores que mejoren la productividad.

Tercero, integrar un bono por desempeño o productividad a la nómina, resulta caro pagarlo. Cuesta $1.61 dar $1.00 neto. (Ver Boletín
Pago por Productividad, un Acuerdo Nacional para el Desarrollo. IMEF 2010),

Cuarto, el reparto de utilidades debe salir de los remanentes entre ingresos y gastos, para no afectar al costo y al precio de los
productos. Lo mismo debería suceder con los Bonos e incentivos por productividad, entonces, ¿por qué no fusionarlos?

Si la PTU se paga en función de la productividad, podría subir o bajar según se haga ganar más a la empresa y si es así, es más
coherente pagar más, cuando los trabajadores le hacen ganar más.

Por otro lado, si fuese posible, como ya sucede en algunas empresas, al dar un anticipo de la PTU durante el año; ese anticipo tendrá
una carga fiscal menor.

Los beneficios de ligar el porcentaje de la PTU a la productividad  serán notorios:

Primero, por no ser parte del costo, no sería inflacionario.

Segundo reponer la pérdida del poder adquisitivo de los trabajadores y mejorar la velocidad de circulación del dinero (PIB/M1) que ha
caído por debajo de 12 veces a 9 veces por año con M1 y de 4.6 a 1.9 con M4; como lo señala el Boletín citado, explota la correlación
de 82% entre pago variable y utilidades (ROI).

Tercero promueve la administración de la compensación con su debida función, en un modelo de administración madura. Esto porque
la empresa se obliga a generar acuerdos entre sus objetivos de competitividad, seguimiento, indicadores, inversión y remuneración.

Cuarto: invita a entender que integrar la PTU al salario base de cotización del IMSS, encarece la cuota patronal, justamente de las
empresas cumplidas. Además, que cuando éstas preparasen sus Programas de productividad, estarían pagando dos veces, por las
utilidades a los trabajadores.

Es por ello que este año surgió en el IMEF el Boletín: Estudio para proponer un nuevo porcentaje de PTU.

La Ley del Trabajo, permite presentar un estudio al secretario del trabajo para adelantar la reunión de esa Comisión Nacional para la
PTU. Nuestra iniciativa IMEF para una nueva PTU, será presentada ante en el sub Comité de Incentivos Laborales, del Comité
Nacional de Productividad, al obtener el consenso del sector empresarial.

El objetivo es adelantar la siguiente reunión de la Comisión Nacional de la PTU, para debatir cómo vincular la PTU a la productividad;
nuestras propuestas son unas, puede haber otras y de ser posible se convoque en fecha próxima. La vía para solicitarlo es el Comité
Nacional de Productividad, donde el IMEF participa vía el sub comité de incentivos laborales.

Conviene someter las ideas del boletín a especialistas de su confianza de RRHH para obtener su consenso de que no es inflacionario
y que si sirve para reactivar la circulación del dinero, ya que el citado Estudio propone tres nuevas fórmulas para acordar una de ellas
con el personal representado a través de la Comisión Mixta de Productividad:

Una, revivir la fórmula de la primer resolución de la PTU de 1963, donde el porcentaje es 20%, pero disminuido por una tabla que
depende de la proporción entre el Capital y el Trabajo que hubo en el año.

Las otras dos dividen el 10% EN 2+8%, este último se incrementa en proporción del incremento a la productividad o si hay decremento
se puede volver cero, más una combinación donde se eleva a un exponente para hacerlo más elástico. Además se mantiene la del
10%, para que exista una fórmula sencilla y nadie se queje de verse disminuido.
*El autor es miembro del Comité Técnico Nacional de Ética y Responsabilidad Social del IMEF y   Director de Nuevos Negocios en
Vencom & Global