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ARGUMENTO -NOVELA A LA COSTA DE LUIS A.

MARTINEZ

La beata y en complicidad con el cura Justiniano, llevó a


Mariana a una solitaria casa, adecuada para albergar
Don Jacinto Ramírez y Doña Camila eran padres de
borrachos, rateros y prostitutas. Mariana sudando de
Salvador, de carácter manso y pasivo, su hermana
angustia y vergüenza inexplicable, atravesó los sucios
Mariana era el reverso de su hermano ambos criados
patios y entró al cuarto. Allí estaba esperándola,
con la moral católica.
sentado en un sillón el padre Justiniano. La beata
La amiga más íntima de doña Camila era doña Rosaura encontró algún pretexto los dejó solos y cerró la puerta
Valle, vieja solterona, una figura repulsiva en la que sin por fuera con llave; dejando al cura realizar sus más
dificultad se adivinaba la enemiga acérrima de la bajos instintos de lujuria.
belleza, de la alegría y de la juventud, acabada por los
Años después Salvador y Luciano se reencuentran,
malos tratos de la vida.
teniendo este una gran curiosidad por su amada
Salvador ya en la universidad conoce a Luciano Pérez Mariana; Salvador le cuenta que Mariana se había
con quien hizo la primera y única amistad de su vida. convertido en una pérdida y lo peor; corrompida por un
Luciano pronto en su corazón joven sintió el nacimiento fraile que tenía de santo y que andaba por las calles
de una verdadera pasión por Mariana el instinto le sucia llevando en sus brazos a un niño, hijo del fraile
advirtió que Mariana también lo amaba, ambos estaban infame.
persuadidos de su mutuo cariño y con todo, nunca
Pero el reencuentro dura muy poco porque Luciano
pudieron tener una conversación a solas en la que
debía viajar a Europa y Salvador debía refundirse en una
pudieran decirse lo que ambos sentían, eran amantes
hacienda donde consigue trabajo. Ahí se gana la
vergonzosos. Así estaban las cosas cuando la beata hizo
confianza de don Roberto, el amor de su hija Consuelo y
la denuncia de las pretensiones de Luciano hacia
el odio de Fajardo que pretendía desde hace mucho
Mariana
tiempo a la joven. Pasado el invierno llegó el dueño de
Mariana reconoció estar enamorada del joven Luciano, la hacienda, el señor Velásquez, se enteró de todas las
y enfrentó a su madre; Doña Camila muy rabiosa maldades que, hacia Fajardo a Salvador, y enterándose
prohibió a su hija volver a hablar con Luciano e igual del romance ayuda a los jóvenes para unirse en
hizo con su hijo Salvador obligándole al joven romper la matrimonio. Siete meses habían pasado todo era dicha
amistad. Pero sin embargo Mariana y Luciano en un y felicidad, Salvador no se había sentido más feliz en su
encuentro clandestino, venciendo todos los obstáculos vida y a hora tendría otra dicha, pronto iba a ser padre,
que les ponía esa sociedad cruel, se entregaron ese pues Consuelo le había confesado que llevaba en su
amor infinito, fugaz, inmortal. vientre el fruto de su amor.

Un día el doctor Ramírez regresó de la hacienda de Pero una mañana de febrero, Salvador le cuenta a
Guayllabamba, y sintiéndose repentinamente enfermo Consuelo que estaba enfermo, acostado en una cama
muere. Dejándola a doña Camila y a sus dos hijos en poco a poco fue agravando. Consuelo, amor mío, decía
orfandad Salvador, perdóname si te hago sufrir, pero debo
decirte que muero. De la ventana se divisaba el ancho
Mariana lloraba desconsolada en su cuarto, por la Guayas, y el majestuoso Chimborazo, eran las cuatro de
muerte de su padre y también porque se sentía impura, la tarde cuando abrió la puerta un hombre alto,
manchada, era una de tantas sacerdotisas del amor musculoso y bien vestido, era su amigo Luciano.
prohibido, sin hogar, sin virginidad.
He averiguado por ti. Y ahora vengo a verte, pero en
Rosaura iba de tarde en tarde a tratar de convencer a qué estado, ¡Dios santo ¡
Doña Camila para que obligue a su hija Mariana a
dedicarse completamente a los asuntos de la iglesia. Esta es mi mujer, dijo Salvador a Luciano, abrázala, te
Poco a poco la muchacha se creó una gran ilusión con el recomiendo a mi madre…Si ves a, a...a Mariana, dile
padre Justiniano. que...le perdono ...no la maldigo… pobrecita …Me
ahogo… Consuelo... estoy…
ARGUMENTO -NOVELA A LA COSTA DE LUIS A. MARTINEZ

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