Está en la página 1de 2

¿Por qué se habla de una distinción histórica entre las sociedades NO fundadas sobre el

trabajo y las sociedades fundadas sobre el trabajo?

La estructura y el tejido social son muy diferentes en ambos tipos de sociedades. En una
sociedad fundada por el trabajo, el trabajo es el que configura el orden social y establece la
posición que tiene cada persona y cómo ha de subsistir. Estas sociedades ligan el trabajo al
dolor, sacrificio y sufrimiento; las sociedades no fundamentadas en él no relacionan el
concepto de dolor con el concepto de trabajo. En este tipo de sociedad, no dependen los
derechos de cada uno en función de su trabajo. El destino de las personas no se estable de
acuerdo a su trabajo. Así mismo, no existe tal cosa como la acumulación de riquezas y no
se produce con el fin del intercambio. Inclusive no existe en sociedades pre-económicas un
concepto como el de trabajo que conocemos hoy. En estas sociedades llega a suceder que
no hay términología para distinguir a las actividades que involucran la producción de las
demás actividades humanas. Además se dedica una cantidad corta de tiempo para las
actividades de producción: el hombre no se encuentra esclavizado con el fin de realizar
actividades de producctivas. No hay más producción de la que es vitalmente necesaria.
Aquí se labora no por un fin, si no, la labor es el fin. La estructura social no depende de la
economía, esta depende más bien de lazos sanguíneos, parentesco, factores naturales y
tradicionales. No existe tal cosa como la plusvalía o la transformación de la naturaleza para
acomodarla a nuestras necesidades. En las sociedades modernas la gente es obligada a
entrar en una lógica de intercambio donde vende o intercambia sus servicios con fines de
supervivencia. El trabajo no determina nada en las sociedades pre-económicas. El trabajo
no es valorizado. Llega a existir desprecio hacia la ganancia y hacia lo terrenal. El término
trabajo se unifica hasta el siglo 18, y actividades que no tenían relación de pronto se
unifican en un término. En la sociedad fundamentada por una lógica laboral el trabajo
determina la autonomía de las personas. Esta sociedad buscará la producción ilimitada y la
acumulación sin fin de riquezas; el enriquecimiento es individual y colectivo. Se transicionó
de una sociedad a otro debido a la reinterpretación de textos bíblicos que llevó a dotar de
importancia y valor al trabajo, este se glorificó, en esta narrativa se habla de la libertad
creadora que brinda el trabajo. El tiempo estructura la vida cotidiana en las sociedades de
trabajo porque el tiempo es la medida que usa el trabajo. El trabajo es una manera de existir
y sin él, las sociedades colapsan porque debido al carácter determinante de este.

2)Trabajo es una actividad humana que da lugar a un beneficio para las personas. El
beneficio puede ser emocional, social, de salud, comodidad, económico, entre otros. Puede
ir más allá que las actividades que representan una fuente de ingresos. El trabajo consume
esfuerzo y tiempo, tiene un objetivo y es de utilidad. Las actividades domésticas son trabajo,
por ejemplo, porque sirven para que en la lógica patriarcal, el hombre sea alimentado,
cuidado, tenga ropa limpia, comida caliente y un ambiente doméstico apto para que pueda
salir a trabajar todos los días y generar ingresos. La crianza, el cuidado de los niños, su
alimentación y el cumplimiento de sus necesidades le sirve al sistema económico que
tenemos para que en un futuro, esos niños se conviertan en trabajadores o en mano de
obra como ocurre en Latinoamérica. Las labores de cuidados y atención de la salud de
personas mayores le sirve a la lógica económica para que los trabajadores puedan
sobrevivir al envejecer. El trabajo también puede ser político, intelectual, o en forma de
voluntariado, puede ser categorizado en diferentes áreas. Cumple diferentes tipos de
necesidades, como la necesidad de cuidados, la necesidad de salud, o la necesidad de
alimentación.
3) Las comunidades necesitan de el cubrimiento de necesidades para que puedan subsistir
y sobrevivir. En este sentido, se necesitan hacer actividades para el cumplimiento de las
necesidades comunales. Ahora, se podría hablar de la reunión de esfuerzos de forma
colectiva para el cumplimiento de estas necesidades, y no es necesaria una lógica de
producción infinita y acumulación de capital mientras se cumplan las necesidades básicas
de las personas de una comunidad. Esto es, claro, algo que no ocurre en las sociedades
modernas. En estas el trabajo es importante para que se cumplan las necesidades de las
personas, para crear convivencia y lazos entre las personas del tejido social y para darle un
sentido al tiempo y a la vida. Es un factor para la felicidad. Al parecer, las personas no
saben qué hacer si en una comunidad se elimina el trabajo de forma completa. El trabajo le
da valor a una persona y la hace útil. Es un elemento esencial en las sociedades y en la
vida cotidiana de las personas. A pesar de estos supuestos, no tiene que ser así. Es posible
la existencia de sociedades que no giren en torno al trabajo en donde las personas
encuentran un sentido y cómo sobrevivir sin él; así funcionaban las sociedades pre-
económicas y así lograron existir. Las comunidades pueden unir esfuerzos para llevar a
cabo las tareas necesarias, es posible imaginar comunidades cuya estructura no depende
de lógicas económicas, donde el sentido de la vida de las personas y su destino no
depende del trabajo que tienen. En una encuesta sobre valores europeas, la gente pensó
en un 66% que sería bueno darle menor importancia al trabajo. El trabajo no tiene que ser
un obligación penosa, no tiene que consumir la mayor parte de la vida de una persona, el
trabajo no tiene que definirnos y podemos encontrar otros medios a través de los cuales
realizarnos como individuos. El apoyo colectivo puede liberarnos de la esclavitud laboral en
la que vivimos hoy.

También podría gustarte