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LosGemidosDeTae

➜ Ganadora de los
TaekookAwards en "Historias
que todos deberían leer."

Kim Taehyung es un joven


estudiante que recibe miradas y
comentarios de burla
habitualmente por causa de su
vestuario.

Porque es que para Taehyung,


una camisa a rayas morada con
su jersey sin mangas de color
verde, acompañado de su
mochila rosa ¡Es lo último en
moda!

Taehyung tiene un pequeño


crush con una chica de su curso,
muy popular y con gran belleza,
él trata de ser cercano a ella,
pero su apariencia no lo deja
avanzar.

En su último intento de no
rendirse, pide ayuda a alguien
que sepa de prendas de ropa y
combinación de colores, por lo

que terminará encontrándose con Jeon Jungkook, un malhumorado aspirante a


diseñador que está enamorado de él.

⠀⠀➔ Fluff, Drama, Slash, Comedia.

➔ Inspirada en "Vistiendolo"; Historia Original.

➔ Mención al Namgi; Namjoon bottom.

➜ Alteración de edades: Taehyung menor que Jungkook.

Cliché.

ADAPTACIONES CON PERMISO.

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¡Vistiendo a Taehyung!

Taehyung andaba por los pasillos de su universidad inmerso en sus


pensamientos y con la cabeza gacha, mientras que las personas que se
encontraban caminando por ahí, reían y murmuraban acerca del castaño.602

¿Y cómo evitar comentarios si llevaba una pantalón chandal, combinado con


una chaqueta de cuero roja y una camisa a cuadros de color amarillo? no
olvidar del detalle de sus gafas todas rayadas y a punto de resquebrajarse
de literalmente, sus ojos.273

¿Extravangante? ¿excéntrico? ¿estrambótico? ¿estrafalario? No.108

Él era Kim Taehyung.

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1: Camisa de lunares y pantalones a
rayas.
— Oye, Tae... eres mi amigo y realmente te aprecio mucho.102

Taehyung se encontraba terminando sus tareas en la hora del descanso y


se detuvo en seco para mirar a su amigo pelinegro y hacerle entender que le
estaba oyendo atentamente.

— Pero creo que hoy te has pasado. ¿Quién lleva una camisa roja de
lunares con un pantalón a rayas?— preguntó Jimin, señalando al
contrario.345

— ¿Qué hay de malo con mi vestuario? a mí me parece bonito.— dijo


Taehyung con un pequeño puchero.436

Jimin se limitó a quedarse en silencio, analizando las palabras de su amigo.

Ya sabía que Taehyung era bastante torpe, distraído y con un pesimo


sentido de la moda y como este era un país donde se centraban mucho en
la apariencia de las personas, aunque el castaño fuese bastante
extrovertido, él tenía dificultades al relacionarse con otras personas.
Sus malas combinaciones de ropa, su pelo despienado y alborotado y esas
gafas que exigían una renovación desde hace años, tampoco le ayudaban
mucho.96

— Si te sigues vistiendo así nunca le gustaras a Taeyeon.313

Taehyung se sonrojó mientras bajaba la cabeza de nuevo hacia su


cuaderno y su amigo Jimin sonrió enternecido.

— ¡¿Te gusta Taeyeon?!— su amiga Lisa apareció de repente, asustado a


los dos chicos.— ¡¿Por qué no me lo dijiste?!218

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— ¿Por qué no le pides a alguien que te enseñe a vestirte?— cuestionó
Jimin, cortando a Lisa.

— ¿Por qué no lo haces tú?— preguntó Taehyung a Jimin.

— Lo haría, pero solo me visto de chándal y me da mucha pereza, mejor


pídele a alguien que sepa de esas cosas.— señaló a Lisa.52

— Lo haría, Tae, pero lo que tú necesitas es que te enseñen desde cero, y


yo no tengo tanta paciencia.— sonrió Lisa.—¿Pero, por qué no vas al taller
de diseño y le pides ayuda a alguna?— levantó las cejas de forma
sugerente.45

— ¿Hay ese taller?— preguntó el castaño.14

— ¿Hay ese taller por dos?— preguntó también Jimin.578

Lisa suspiró casi bufando, ¿cómo sus amigos se habían olvidado del club al
que pertenecía?22

— Sí, idiotas, así que me llevo a Tae después de clases.

Jimin le guiñó el ojo con una sonrisa soltado un suave "okay".


104

[...]
37

Las clases pasaron rápidas para un ansioso Taehyung. Algunas veces


miraba de reojo a Taeyeon, muy distinta a él. Era popular, bonita, amigable,
vestía tan bien que a Tae le daban ganas de vestirse de chica. Y aunque por
muy pequeña que sea su esperanza, tenía la ilusión de poder gustarle un
poco a su crush.169

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El timbre sonó y Taeyeon se despidió amablemente de Taehyung, como de
costumbre, dejando al castaño nervioso y Lisa se acercó propinandole un
buen golpe en la espalda y recibiendo la mirada de Taehyung.35

— ¿Listo? te voy a mandar con el mejor de todos.— dijo la rubia con una
sonrisa traviesa.
155

[...]
20

Taeyung miraba curioso el taller de diseño, había telas, maniquíes y bocetos


esparcidos por toda las clase.23

—¡¿Dónde está Jungkook?!— preguntó gritando por milésima vez Lisa.177

— ¡CALLATE, JODER!— exclamó una hastiada voz al fondo de la clase y


Lisa y Taehyung posaron la vista en el chico sentado en su sillas con una
expresión que detonaba su mal humor.— ¡¿Qué quieres?! ¡Estoy
ocupado!330

Lisa chasqueó la lengua sugerente y empujo a Taehyung delante de


Jungkook. El menor remojó los labios mientras apretaba las correas de su
mochila, y Jungkook mientras tanto veía detenidamente el vestuario del
otro.61

— H-hola Hyung, soy Kim Taehyung de la clase de segundo.376

— ¿Y?282

Lisa golpeó la palma de su mano contra la frente, debía haberle advertido a


su amigo de como era la personalidad de Jungkook.6

— Venía a pedirte ayuda.

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— ¿Con qué?— cuestionó irritado Jungkook.55

— Para cambiar mi look.

Jungkook le empezó a dar un tic en el ojo.— Oye, chico, ¡¿Te crees que soy
una tienda de ropa para que me pidas eso?! Mirate ¡tu ropa es un completo
desastre, tienes semanas sin afeitarte, esas gafas te quedan horribles y tu
pelo pide a gritos un lavado! No, no, es sumamente imposi-304

Taehyung puso una generosa cantidad de billetes delante de la cara de su


gruñón hyung y éste calló abruptamente cogiendo el dinero y contándolo.434

— Bueno, lo intentaré.— dijo después de haber contado la suma de dinero


acompañado de un carraspeo y voz poco convencida.341

Taehyung asintió con la cabeza con una sonrisa y el mayor suspiró.


Después de analizar brevemente al castaño señaló un cuarto en la otra
esquina del salón.

— Ahí tienes un baño. Tienes champú en un botecito pequeño y unas


afeitadoras en bolsa en los cajones, lo usamos para los modelos pero ya
qué. ¡Date prisa!14

Taehyung se sobresaltó por el grito de Jungkook y asintió rápidamente


antes de salir corriendo hacia el baño y encerrarse.4

Jungkook miró mal a Lisa que le dedicaba una sonrisa de burla, esos dos se
llevaban realmente mal.89

— ¿Por qué has tenido que recurrir a mí para eso, idiota? Te recuerdo que
no somos amigos.

— Cállate, abuelo.48

Jungkook le sacó el dedo del medio y Lisa soltó una carcajada ruidosa antes
de salir a paso rápido fuera del club de diseño.93

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El pelinegro suspiró por milésima vez y se sentó de nuevo en su silla y cogió
el lápiz para volver a centrarse en sus diseños.
Cuando ya tenía en mente su idea y tenía planeado comenzar, una voz
grave y a la vez chillona lo interrumpió.69

— ¡Ya estoy!

Jungkook se giró cansado, ahora apreciando el notable cambio del chico.

— Bueno, te ves un poquitito mejor, supongo. Aunque ya no hay nada que


mejorar.38

Taehyung se desanimó y él se encogió de brazos, mirando como las gafas


rayadas le impedían ver los ojos de Taehyung y parte de su flequillo le
tapaba los ojos pareciendo un emo.114

— ¿Has probado a...?28

Jungkook subió la cabeza para mirar a los tapados ojos del menor —que era
más alto que él— y llevo las manos a cada extremo de las varillas de las
gafas para retirarlas lentamente dejando ver claramente la cara de
Taehyung, que tenía una mirada tímida y angustiada esperando la reacción
de Jungkook.24

— ¿Jungkook hyung?232

Jungkook reaccionó dándose cuenta de que tenía aún las gafas en las
manos y las tiró asustado al suelo.75

— ¡Mis gafas!— exclamó Taehyung al ver como sus gafas se habían partido
de una vez por todas.65

— Dejalo, estaban destrozadas de todas formas.

— Pero no veo nada, hyung.4

— Comprate unas lentillas.123

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— ¿Por qué?

— Hmm... Te ves mucho mejor sin gafas.— dijo finalmente Jungkook


colocando sus cosas del escritorio.38

— ¿En serio?15

Taehyung sonrió emocionado aún sin poder ver a Jungkook nítidamente y


se acercó a él. Sin las gafas no pudo ver bien a que distancia estaba y
terminó chocando con Jungkook, aumentando su mal humor.27

— ¡Idiota, mira por donde vas!— exclamó enfadado el pelinegro.121

— ¡Pero no veo nada, hyung!140

Jungkook suspiro por incontable vez y cogió el antebrazo de Taehyung y lo


guió hasta fuera de la clase.

— Te voy a llevar con Lisa ¿tienes más amigos?7

— Sí, a Jimin.— respondió sonriente y poco inseguro por no saber donde


iba.— Señor estilista... ¿entonces me ayudarás?44

Jungkook frenó haciendo que Taehyung chocase con la pared y soltase un


quejido.34

— Mira por donde vas, tonto.171

— ...Sí, hyung.— contestó resignado Taehyung.4

— Verás, Taehyung, eres... guapo ¿vale? pero yo no quiero tener la


responsabilidad de vestirte.72

— Por favor, Jungkook hyung...41

— No, Taehyung, deja de insistir.

El menor le estaba haciendo ojitos a la pared pero Jungkook ignoró eso.468

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— Te devolveré el dinero así que deja de molestarme.— sentenció el
pelinegro.12

Taehyung tocó la cara de Jungkook para palparlo y fue bajando hacia sus
hombros y caderas. Jungkook se sonrojó empujándolo, haciendo que vuelva
a chocar contra la pared.220

— ¡¿Qué crees que haces, idiota?!— gritó el mayor al castaño.

— Lo siento, hyung, no quise incomodarte sólo trataba de situarte.58

Taehyung se sobó la cabeza y una vez recuperado volvió a acercarse


lentamente a la figura borrosa del mayor para palpar sus brazos y Jungkook
solo lo miró con el ceño fruncido.
Taehyung cogió sus manos entre las suyas y las levantó.7

— ¡Por favor, Jungkook! ¡hay una chica que me gusta mucho y tú eres la
única salvación que tengo! ¡por favor, por favor, por favor, por favor, por-

— ¡Está bien, cállate!— exclamó Jungkook quitando su mano de las manos


del contrario y llevándosela a la boca del otro.— Lo haré ¿de acuerdo?

Tae asintió con la cabeza y sonrió contra la palma de Jungkook.

— Mañana te quiero aquí a primera hora de la mañana, en el taller de


diseño.

Taehyung volvió a asentir frenéticamente. Jungkook volvió a coger el


antebrazo del castaño para guiarlo.

— ¿Y sabes dónde está ese tal Jimin?

— Debe estar jugando en la pista.—respondió Taehyung.

Jungkook sacó un suspiro ruidoso y se encaminó con Taehyung hacia la


pista del instituto.

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Y allí se encontraba su amigo jugando al baloncesto. Al percatarse de que
su amigo había entrado paró de jugar y se fue corriendo hacia él.

Jimin se paró delante de aquel duo y miró como el más bajito tenía agarrado
a Tae por su antebrazo.47

— ...¿Sois pareja o algo así?— preguntó dudoso y Jungkook soltó


rápidamente a Taehyung como si tuviera pulgas.263

— ¡Hyung! he convencido a Jungkook hyung de que sea mi estilista.—


explicó brevemente el castaño, feliz.

— Eso es genial... Por cierto, Jungkook ¿no?, ¿no eres bastante bajito para
ser un chic-?344

Las palabras fueron sustituidas por un jadeo de dolor, al impactar el pie de


Jungkook contra la entrepierna de Jimin.170

— ¡Los dos sois un par de idiotas!—gritó enfadado el más mayor.—


¡Encargate tú de él!— dijo refiriéndose a Taehyung y salió andando del
gimnasio enfurruñado.25

— Wo, que preciosidad.— comentó Jimin sonriendo dolorosamente aún.234

Taehyung solo entrecerró los ojos, Jimin pensó que le estaba mirando mal
pero era solamente que trataba de ver bien.158

— Wooo, Tae, ¡te ves genial! pero tu vestuario arruina tu cara.— comentó
despreocupado mientras se reincorporaba.27

— Gracias, Jimin.— ignoró el comentario final de su amigo.— ¿Me


acompañas a comprarme lentillas? No veo nada.17

— Claro, bro.

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2: Paso uno de la renovación.
Y como habían quedado, Taehyung se encontraba caminando por los
pasillos de su instituto a paso rápido debido a la emoción. Era temprano, y
aún no salía completamente el sol por lo que los pasillos eran un poco
oscuros. Llegó a su destino y miro el nombre del cartel "Club de Diseño y
Artes." Suspiró llenándose de valentía y tocó la puerta brevemente antes de
entrar.3

Jungkook pegó un respingo en su asiento y giró rápidamente la cabeza, el


susto se le paso cuando vio la iluminda cara de Taehyung y su... peculiar
vestuario.

¿Pantalón chandal con una camisa de botones a cuadros y una chaqueta


rosa?103

— Te ves horrible.— fue lo primero que comentó Jungkook para romper el


silencio.164

— Buenos días a ti también, hyung.— respondió Taehyung con una


sonrisita.104

Jungkook suspiró e hizo un ademán con la mano a Taehyung para que se


sentará en la silla de al lado de él. Taehyung dejó su mochila rosa que hacia
conjunto con su chaqueta en el respaldo de la silla y se sentó mientras que
Jungkook se tapaba la boca y miraba al castaño durante largos minutos,
analizándolo.

— Vale, ya lo tengo.

Dicho eso, Jungkook se dirigió a un armario que había en el aula y cogió


algunas prendas de ropa en manos, cerró de nuevo la puerta del armario y
volvió a encaminarse hacia Taehyung tirando la ropa en su escritorio.

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— ¿Qué harás, Jungkook hyung?— cuestionó sonriente Taehyung.

— Sólo quedate quieto y no preguntes.— respondió cortante.23

Cogió un peine de un cajón y empezó a peinar el pelo castaño del chico. A


medida que peina, había más y más enredones en su pelo y Jungkook se
estaba poniendo nervioso
por ende, empezó a peinar el pelo de Taehyung de forma violenta haciendo
que el que estaba siendo peinado empezará a soltar quejidos.307

— ¡Hyung, me está haciendo daño!— se removía Taehyung tratando de


escapar de los tirones del pelinegro.52

— ¡Quedate quieto, joder! ¡No es mi culpa que no te hayas peinado en los


últimos cinco años!— exclamó Jungkook mientras se apoyaba en el hombro
del castaño para ejercer más fuerza en el peine que estaba a punto de
quebrarse.225

Los griteríos de oían desde fuera de la aula y las personas que recién
llegaban se quedaban mirando un segundo a la puerta anes de volver a
encaminarse a sus aulas.99

Taehyung con pequeñas lágrimas en la cara y el labio inferior rojo de


haberlo mordido para sobrellevar el dolor—del peine—mientras Jungkook
guardaba de nuevo el peine en su cajón.
Se acercó y retocó algunos mechones del pelo del castaño mientras que
éste, lo miraba fijamente.67

— Esto es incómodo.— comentó Taehyung.76

— ¿Incómodo por qué?— preguntó Jungkook separándose y lanzando la


ropa a la cara de Taehyung.— Bueno, da igual. ¡Ponte eso y regresa
rápido!18

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Taehyung asintió después de echarle un vistazo rápido a la ropa, mientras
se levantaba de la silla. Dejó su ropa en donde estaba sentado antes y
Jungkook lo miró confuso. Taehyung empezó a deslizar a quitar su chaqueta
y desabrocharse el pantalón y el pelinegro abrió los ojos como platos y se
acercó veloz al castaño antes de que se subiese la camisa.210

— ¡Idiota! ¡En el baño, imbécil!— gritó empujando a lo bruto a Taehyung en


el baño.98

Eso dejó perplejo al castaño que se encogió de hombros y prosiguió a


quitarse la ropa y colocarse las prendas que le había dado Hyung.
Jungkook trataba de bajar el calor de sus mejillas golpeándose en la cara
repetidas veces.88

Taehyung apareció en el aula con su ropa nueva y su peina prolijo dejando


a Jungkook boquiabierto.

— ¿Eres Kim Taehyung?— el nombrado rodó los ojos divertido ante la


pregunta.28

— Muy gracioso, hyung. Pero sí.

Jungkook sonrió y Taehyung se sorprendió. Ahora que lo pensaba, hasta


ahora no lo había visto sonreír. ¿Será que empezará a ser más amable con
él?32

— ¿Qué miras, idiota?— su imaginación se cortó cuando Jungkook


preguntó descortésmente.55

— Y ahí está Jungkook hyung.77

El pelinegro alzó una ceja aún con el ceño fruncido y los brazos cruzados y
se dio la vuelta para sentarse en su escritorio y quitarle la vista a Taehyung
y devolverla a su cuaderno de diseño.

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— Será mejor que te vayas ahora, tus clases van a empezar en seguida.—
Dijo el mayor ante la incómoda mirada del castaño.

— ¿Y tú?

— ¿No sabes que los años superiores entran más tarde?64

Taehyung asintió con la cabeza y se despidió de Jungkook antes de salir


corriendo por la puerta. Posteriormente entró Yoongi en el aula después de
haber visto al famoso Taehyung salir pitando.2

— ¿Ese era el payaso de segundo?— preguntó mientras entraba a clase y


se sentaba en una silla.133

— No le llames así.— respondió gruñendo Jungkook mientras seguía


concentrado en su cuaderno de diseño.106

Yoongi sonrió.— Está bien. Pero no deberías jugar con eso, Kook.37

— No hace falta que te preocupes por mí.— dijo desinteresado.

— Solo te lo recuerdo.

— Acabaré con eso antes de que me haga daño.— se dio la vuelta en su


silla con su cuaderno en mano, Yoongi se encogió de brazos y empezó a
sacar sus materiales de dibujo.

⠀377

Taehyung se acercó a su clase y abrió la puerta, inmediatamente todas las


miradas se posaron en él. En él y sus pantalones negros ceñidos a sus
piernas, su camisa azul con los primeros botones desabotonados y su
perfecto pelo castaño brillante.

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La ropa y la situación era incómoda pero al ver la mirada sorprendida en la
cara bonita de Taeyeon se le paso cualquier tipo de sentimiento negativo.55

Le sonrió y la chica apartó la mirada avergonzada, derritiendo el corazón de


Taehyung.

Vio a Jimin escribiendose cosas del libro en el brazo y manos y suspuso que
estaba copiando para el examen. Se acercó a él con su típica aura alegre.149

— ¡Hola, Jimin!

El llamado dejó de copiar y miró extrañado al chico que juraba jamás haber
visto en la vida.

— ¿Hola?... ¿eres nuevo? ¿cómo te llamas?306

Taehyung ladeó la cabeza y miró extrañado a su mejor amigo.— ¿Qué?


Jimin, soy yo, Taehyung.

Jimin entrecerró los ojos y los abrió de golpe a los segundos después
levantándose.6

— ¡Taehyung, amigo mío! ¡Te ves increíble y esta vez tu vestuario no lo


arruina! ¡Cuando te vea Lisa va a morir, te ves sexy!37

Jimin subió y bajo las cejas señalando con la mirada la parte de su pecho
descubierta.65

— ¿Listo para conquistar a Taeyeon?— preguntó Jimin sonriendo.14

—Listo.— respondió determinado Taehyung.


177

[...]
7

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Al principio, Taeyeon al caer en cuenta que ese era Taehyung "el payaso de
segundo" no se lo pudo creer. Pero terminó entablando una conversación
por primera vez con ese peculiar chico. Eran tan divertido y carismático que
deseo haber hablado con él antes. Las demás personas de su clase también
se acercaron a Taehyung para dejar comentarios y al final terminaron
haciéndose amigos del castaño.296

Mientras que Taehyung se sentía en la gloria teniendo a tanta gente a su


alrededor. Cuando terminase las clases iría a ver al señor estilista y contarle
las cosas que le habían ocurrido gracias a él.

Taehyung iba caminando por los pasillos mientras un grupo pequeño de


chicas lo seguía, le incomodaba un poco pues él solo quería ir a ver a
Jungkook, pero supongo que algo de compañia no vendría mal.25

Encontró al pelinegro con otro de su misma altura de espaldas,


caminando.41

— Oh ¡Ahí está Jungkook hyung!

Yoongi se dio la vuelta al oir el nombre de su amigo y encontró al castaño


venir a paso rápido hacia ellos con una sonrisa.

— Eh, tú, ahí viene tu esposo imaginario.— comentó en voz baja a


Jungkook.267

Jungkook giró la cabeza viendo al molesto castaño venir.

— ¿Quieres dejar de decir estupideces? Solo veo a Taehyung como un


idiota pequeño.— respondió arisco a Yoongi.

— Sí, por supuesto.17

— ¡Hyung al fin te encuentro! Te estaba buscando.1

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— ¿Para? estoy ocupado para tus tonterias, Tae...Taehyung.— cortó
rápidamente Jungkook.16

— Puedes llamarme Tae, si quieres.— comentó sonriente el castaño.

Jungkook se avergonzó por dejar escapar ese nombre.— No, no somos los
suficiente cercanos.27

— Entonces deberíamos ser cercanos.— dijo sin borrar su sonrisa, mirando


hacia el más bajo.115

Jungkook desvío la mirada tratando de tapar una pequeña sonrisa y luego


llevó la vista al grupo de chicas que tenía Taehyung detrás de él.37

— ¿Por qué ser cercano a él cuándo puedes ser cercano a todas esas
lindas chicas?— cortó Yoongi leyendo los pensamientos de Jungkook.

— Ellas solo quieren ser mis amigas.— respondió confuso Taehyung.124

Yoongi y Jungkook se miraron mutuamente y luego volvieron la vista al


menor.

— En fin, Taehyung, tengo cosas que hacer, nos vemos luego.

— ¡Hasta luego, hyung!— gritó Taehyung y Jungkook suspiró.

— ¿Y ese tipo de chicos te gustan?— preguntó Yoongi llegando a sus


clases.45

— ¡Que no me gusta!— exclamó en voz alta Jungkook, ganandose la


mirada de sus compañeros y se sonrojó. Yoongi siempre encontraba alguna
manera de molestarlo.

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3: Yoongi es un pedófilo.

—Hola hyungs. ¿Qué os trae por la clase de segundo?— preguntó


Taehyung con una sonrisa al ver a Jungkook y Yoongi parados delante
suya, ambos con una expresión seria y con los brazos cruzados.

Empiezo a entender porque son amigos.143

Jungkook suspiró y relajó su expresión al ver la horribe camisa a lunares


que llevaba el menor.9

— ¿No te dije que quemaras esas camisas a rayas, lunares y cuadros que
tengas?— cuestionó retóricamente Jungkook.

— Pero Jungkook hyung... estas camisas me gustan mucho ¿acaso no me


quedan bien?— preguntó ahora un poco decaído Taehyung.76

Jungkook no pudo evitar mirarlo con lastima, no entendía porque quería


cambiar si le gustaba vestirse así.33

— No... esas camisas te quedan tan-12

— ¡Te quedan fatal! ¡En vez de quemarlas tendrías que triturarlas!—


exclamó Yoongi interrumpiendo la casi cagada de Jungkook.— ¿Verdad,
Jungkook?187

El pelinegro reaccionó y no tardó en asentir la cabeza frenéticamente


volviendo a su postura determinada.

— Como iba diciendo, hoy iremos a comprar ropa, porque no te voy a seguir
dejando la ropa que diseño.19

— ¿Por qué? a mi me gusta la ropa que diseñas.— dijo el castaño.3

— ...¿En serio?361

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Yoongi resopló y le dio un pisotón en el pie a Jungkook, este soltó un
quejido silencioso y pellizco la espalda del contrario, Yoongi soltó un quejido
más ruidoso, ganándose una mirada confusa de Taehyung.145

— Bueno, ya sé que mis diseños son perfectos, pero aún así, son ropas
para el desfile de fin de curso y no quiero que estés yendo con esas cosas
valiosas por ahí y que las chicas anden toqueteandot- digo, toqueteando la
ropa, ya sabes.232

Yoongi asintió cómplice y Taehyung suspiró.

— Está bien. ¿Cuándo iremos, entonces?

— Hoy, después de clases.— respondió rápidamente Jungkook.

— Okey, iré a recogerte en tu club.—Taehyung dijo y el pelinegro asintió.64

Después de esa conversación, Yoongi empujó a Jungkook fuera de la clase


de Taehyung porque ya iban tarde.

Cuando los dos estuvieron lejos de esa aula, Yoongi miró a Jungkook con el
ceño fruncido y este sólo le respondió con una mirada indiferente.

— ¿Eres consciente de que cuando estás con ese mocoso te vuelves


imbécil?250

— ¡No es así!— se defendi Jungkook.40

— Dices cosas estúpidas, tu personalidad "oh, sí, soy Jungkook y me la


pelas" desaparece.251

— No es así...21

Yoongi solo lo miró victorioso y entró a su aula de artes con su amigo


detrás.

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Yoongi y Jungkook se encontraban haciendo sus respectivas actividades.
Yoongi estaba siguiendo su proyecto de anatomía humana y perspectivas
en su lienzo y Jungkook en sus diseños para la revisión trimestral. Solo eran
ellos debido a que los demás miembros del club eran de primero o segundo,
que empezaban sus clases antes.5

El aula era silencioso e iluminado y solo se oía de fondo a los alumnos que
tenía educación física en ese momento.49

Aunque su buen ambiente fue cortado por el sonido de la puerta ser abierta
estruendosamente, Jungkook movió su lápiz del susto estropeando su
diseño y exactamente lo mismo le pasó a Yoongi.

— NOOOOOO, JODER, LLEVABA CUATRO PUTAS SEMANAS


HACIENDO ESTA MIERDA.— Yoongi empezó a gritar histérico
acompañado de insultos.— ¡Voy a matar a la mierda que haya hech-
Namjoon.354

Jungkook giró la cabeza y vio a Namjoon, era un nuevo estudiante de


primero, sí, un feto, pero que parecía más un estudiante universitario que de
preparatoria.164

— Lo siento, Yoongi hyung, será mejor que me vaya de nuevo.— El castaño


se dio la vuelta para salir de nuevo del aula.

— ¡No! no, ¿qué necesitas?— preguntó sonriente Yoongi mientras se


levantaba de su asiento y se acercaba al más alto.480

Jungkook entrecerró los ojos viendo la escena ¿ese era Yoongi siendo
amable con alguien?69

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— Mi grupo y yo nos vamos a presentar en las actuaciones de fin de curso y
necesitamos publicidad, ya que un grupo de primero no es nada popular... y
te había ofrecido para que tú hicieses el diseño del anuncio.— explicó
tímidamente Namjoon y Yoongi asintió.3

— ¡Está bien! Lo haré.250

Namjooon y Jungkook se quedaron impresionados por lo fácil que había


accedido Yoongi.3

— ¡Incluso Jungkook puede diseñar el vestuario!167

— ¡¿Qué?!— exclamó a su amigo que se había vuelto idiota.4

— ¿En serio, Jungkook hyung?— preguntó con un tono de voz ilusionado,


Namjoon.60

— Claro que n-3

— ¡Por supuesto que sí! ¿Verdad, Jungkook?— cortó a su amigo.20

Yoongi se acercó al pelinegro con una sonrisa y le pellizco la espalda


mientras simulaba un par de golpecitos de alentación.

— Jaja, así es...— Jungkook terminó accediendo porque le estaba


reventado el nervio de la espalda.177

— ¡Sí! ¡gracias Jungkook hyung!28

Yoongi miraba con una pequeña sonrisa y un tenue sonrojo en sus pálidas
mejillas al más pequeño del aula y Jungkook se sobaba la espada y se
detuvo a ver de nuevo a Yoongi.24

Sí, así te quería pillar.253

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— Gracias, Yoongi, tú siempre eres mi salvación.— Namjoon le dio un
rápido abrazos por los hombros al más bajito haciendo que esté se sonroje
mucho más fuerte.50

Se separaron después de largos e incómodos segundos para Jungkook.9

— Debo irme a clases ahora, vendré después de clases a enseñaros las


canciones para que sepáis como es la temática.— explicó Namjoon.6

— ¡Está bien! ¡Ten un buen día!— exclamó Yoongi mientras que el menor
salía corriendo por la puerta.

Yoongi aún estaba con la sonrisa plasmada en su rostro.36

— ¿Qué ha sido eso?— cuestionó Jungkook frunciendo el ceño.4

— ¿El qué?— Yoongi borró su sonrisa mirando a su molesto amigo.16

— ¿Y me dices a mí me dices que me comporto como un imbécil delante de


Taehyung? ¿Y tú? Encima es de primer curso, eres un pedóflilo casi
rozando la ilegalidad, ¿dónde quedó la personalidad "oh, sí, soy Yoongi y
me la pelas"?343

— Callate o te rompo los dientes.— amenazó Yoongi.58

— ¡Y encima voy a tener que diseñar trajes con lo ocupado que estoy con el
desfile de fin de curso, Taehyung, los estudios, las becas de la universidad!

— ¡Ya! ¡Lo siento! pero realmente no quería negárselo ¿no viste lo


ilusionado que estaba? era hermo-29

Yoongi se cortó y miró asustado a Jungkook y éste le miraba


inquisitavamente.49

— ¿No me digas que al gran Min Yoongi le gusta un feto de primero?—


cuestionó burlón Jungkook.93

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— ¡Callate que a ti te gusta el payaso de segundo!— exclamó Yoongi con
autosuficiencia.35

— ¡No le llames así y además, no me gusta!4

— Jaja, claro, así es.— respondió Yoongi dando por ganado la "pelea".


— Taehyung está tardando mucho.— comentó Jungkook mirando la hora en
su teléfono.

— ¿Por qué no vas con él y me dejas solo? Namjoon va a llegar en


seguida.— le dijo Yoongi.48

— Claro, porque tú quieres estar solo con ese feto para hacer tus cosas
pedófilas.139

Yoongi seguía mirando su pelo en el reflejo de su teléfono y le sacó el dedo


del medio al pelinegro.

Jungkook recogió sus cosas y se puso en la mochila en la espalda.

— Bueno, me voy ya para dejarte hacer tus cosas enfermizas solo.5

— Ajá, gracias.— Yoongi rodó los ojos y Jungkook soltó una risita mientras
salía del aula.2

Jungkook salió a paso rápido hacia el aula de segundo, en realidad, estaba,


solo un poquito, pero muy poquito, emocionado.18

Jungkook se acercó a la puerta y vio a Taehyung, estaba a punto de abrir la


boca para saludarlo pero vio unas manos rodeando el cuello del castaño y
paró en seco.228

Oh, es esa chica.13

P á g i n a 23 | 329
Claro, lo había olvidado.
Estaba ayudando a Taehyung por ella. Porque Taehyung quiere gustarle a
esa chica. A Taehyung le gustan las chicas, exactamente, Taeyeon.214

— Sé que hemos empezado a hablar hace poco pero he empezado a


sentirme feliz al estar a tu lado. — esa voz femenina hizo apareción en el
aula.182

No debería estar aquí, le esperaré fuera.

— ¿P-piensas que hice bien las cosas? — la voz grave de Taehyung


también rosonaba en la clase.— Lo hice por ti.87

— ¿En serio?— preguntó sonriente la chica.

— Sí, lo que quería decirte ahora era que tú-

Jungkook salió corriendo antes de oir esas palabras, no quería oirlo.


Jimin y Lisa se acercaron a su aula y vieron la espalda de Jungkook alejarse
corriendo.60

— ¿Ese no era el estilista de Taehyung?— cuestionó Jimin.

— Sí, es Jungkook.— respondió Lisa.— es la primera vez que le veo


correr...170

Jimin arqueó sus cejas dudoso mientras se acercaba sigilosamente a la


clase, para ver que Taehyung y otra chica estaban muy juntos.

— ¿Quién es ella?— preguntó susurrando Jimin y Lisa se asomó en la


puerta y vio a esa chica.

— Es la compañera de Taehyung en el club de teatro.— respondió


susurrando Lisa.73

— Y aquí termina el acto.— dijo la chica sonriendo mientras se separaba de


Taehyung.581

P á g i n a 24 | 329
— ¡Sí! Lo haremos genial en la actuación de fin de curso.— respondió feliz
el castaño.45

— ¡¿Estaban actuando?!— exclamó Lisa.— pobre Jungkook...261

— Sí, es una obra de romance, pero es una mierda, solo participamos


porque nos dan puntos extra.— explicó la chica.10

— ¡Jungkook!— gritó Taehyung.— ¡Tenía que haber ido a recogerlo, soy un


idiota!77

— Así es, eres un idiota, Jungkook se acaba de ir.— le dijo Lisa.4

Taehyung cogió su mochila y salió corriendo del aula por donde se había ido
Jungkook.

10


— ¡Jungkook! ¡Hyung! ¡Jungkook!

Taehyung corria detras de Jungkook por todo el instituto.

— ¡Dejame, Taehyung! ¡Quiero estar solo, tengo faldas, vestidos y muchas


cosas que hacer!86

— ¿Te gusta vestirte así?— paró la conversación Taehyung.2

— Ajá, me gusta ponerme faldas y vestidos.— respondió sarcásticamente


Jungkook.83

— Yo quiero ver eso.345

— ¡Que no, idiota! Lo hago para el club de teatro.— explicó Jungkook.2

— ¡Donde estoy yo!— exclamó feliz Taehyung.7

— ¿Estás en el club de teatro?— cuestionó sorprendido el pelinegro.

P á g i n a 25 | 329
— Sí, llegué tarde porque me quedé ensayando con mi compañera en
clase.— comentó Taehyung y Jungkook abrió la boca sorprendido.82

Ante esas palabras, el pelinegro le dio un cortocircuito en el cerebro.33

— ¿E-esa declaración era un ensayo?— preguntó con miedo, Jungkook.102

— ¿Lo viste? ¿Qué te pareció como actué?— respondió con otra pregunta
emocionado.2

— Eh...sí, parecía muy real...183

Taehyung sonrió con su típica sonrisa cuadrada y Jungkook le respondió


con una sonrisa tímida.

— Taehyung.

— ¿Sí?

— Estoy seguro que le llegarás a gustar mucho a Taeyeon.

4: ¿Has probado a usar algo que no sea


una camisa de lunares?

Después de aclarar cualquier malentendido, Jungkook y Taehyung se


dirigieron hacia el centro comercial más cercano. Nada más entrar,
Taehyung se rasco la cabeza, porque no tenía ni idea de cómo empezar y
Jungkook parecía mirar los escaparates en su mundo.
El moreno, al notar que el menor estaba perdido se acercó a él.1

P á g i n a 26 | 329
— Sólo tienes que acercarte a una tienda que te guste y coger la ropa que
te parezca bien y luego, yo elegiré cual es el menos vomitivo.— explicó
brevemente Jungkook mirando indiferente a Taehyung.60

— Está bien, Jungkookie hyung.— respondió alegre el castaño.56

— ¿Cómo me has llamado?114

Jungkook miró sorprendio, no es que no le haya gustado el apodo, es solo


que saliese de los labios del menor fue... raro. Taehyung tragó saliva con
fuerza, con algo de temor a que su amigo lo insultara.1

— Lo siento, Jungkook. No volveré a llamarte así.

— ¿Por qué?— cuestionó el pelinegro confundiendo a Taehyung.

— Pensé que no te había gustado.— Jungkook esbozó una pequeña


sonrisa al oír esas palabras.

— Está bien, sólo a ti te dejaré que me llames así, TaeTae.395

Taehyung se sonrojó ante el apodo que ahora le había puesto Jungkook.


Solo lo llamaba así Jimin, que solo se burlaba porque su madre lo llamaba
así, aunque pocas veces.

¿Cómo Jungkook sabe eso? Jimin y él solo se habían visto dos veces.

¿Dos veces, no?136

Taehyung miró a Jungkook que de nuevo se encontraba mirando


detenidamente la ropa de los escaparates y anotando en su cuaderno.

Aunque Jimin y Jungkook hyung no parecen combinar demasiadoen person


alidades.

Bueno, yo tampoco con Jungkook, pero...1

¿Por qué pienso tanto en esto?75

P á g i n a 27 | 329
— Taehyung, las tiendas no van a estar todo el día para ti ¿podrías darte
prisa?— pidió Jungkook y Taehyung asintió frenéticamente y corrió hasta la
tienda más cercana.20

Jungkook lo miró irse y se dio un golpe en la cabeza hastiado, Taehyung ni


siquiera había visto que había entrado en una tienda de lencería.
393

[...]5

— Bueno, vamos a ver que has cogido.80

Al final entraron a una tienda de ropa bastante grande y Jungkook le dijo


que cogiese las prendas de ropa que le gustasen y que luego él decidiría
que debía comprar y que no.3

— Bien, una camisa a lunares, oh, otra camisa de lunares...99

A medida que sacaba la ropa de la cesta sólo encontraba camisas a lunares


en su mayoría y otras a rayas.

— Camisa de lunares...— dijo suspirando Jungkook mientras sacaba la


ultima camisa a lunares de la cesta.

— ¡Pero esa es roja!— exclamó Taehyung.3

— ¿No vistes otra cosa que esas horri- que esas camisas a lunares o
rayas?— preguntó Jungkook.22

Taehyung llevo la mano a su barbilla, apoyando la cabeza en sus dedos,


pensativo.

P á g i n a 28 | 329
— Creo que eso es lo que marca la diferencia.— bajo la cabeza.— A mí me
gusta como me visto a pesar de que por ello no tengo muchos amigos.

Jungkook miro el semblante de Taehyung, una mezcla de tristeza y


resignación.9

— Si te gusta como vistes ¿por qué quieres cambiarlo?— cuestionó


frunciendo el ceño el moreno, aunque realmente ya sabía la respuesta.6

— Porque así es la única forma fe gustarle a Taeyeon.— respondió


sonriente Taehyung.209

Jungkook se quedó en silencio unos segundos mirando el suelo y luego dio


una bocanada al aire, tratando de decir algo que no salió de su boca y solo
se mordió el labio inferior recuperando la compostura y mirando indiferente
al castaño.

— No tienes porque cambiar lo que te gusta por eso... hay personas que les
puedes llegar a gustar por lo que eres y no por tu forma... extravagante de
vestir.127

Jungkook se dio la vuelta mirando las prendas de ropas.

— ¿A quién le gustaría una persona así?— preguntó con una risa vacía
Taehyung y Jungkook frunció el ceño aún sin darse la vuelta.208

— Hay muchos tipos de personas en este mundo, incluidas las personas


que le gustarias por como es tu personalidad.— El pelinegro bajaba la voz a
medida que hablaba hasta acabar en un murmullo.— Por ejemplo, yo...423

Se quedaron unos minutos cortos en silencio y Jungkook cayo en cuenta de


que se había dejado llevar y acaba de confesarse a Taehyung.
Su corazón latía desenfranadamente y su cabeza comenzaba a hervir.4

P á g i n a 29 | 329
Se dio la vuelta forzando una sonrisa amistosa, viendo la expresión perpleja
del castaño, soltó una carcajada.

— ¡Claro, claro! me refería a que me estás gustando ¡no! ¡sí! me gustas


como persona, ya sabes, no pienses nada raro, ¡no me gustas! ¡ay! en plan
amigos.— explicó balbuceando Jungkook ganándose una mirada confusa
del más alto.284

El pelinegro en un movimiento impulsivo le tiró la cesta de ropa, con otras


prendas de ropa que había elegido aleatoriamente hace unos segundos y lo
empujo a los probadores.

— ¡Ponte eso! ¡Las tiendas no van a esperar todo el tiempo a que te gusta
su ropa!— exclamó nervioso.3

A duras penas, Jungkook consiguió meter a Taehyung en el probador y él se


escapo corriendo fuera de la tienda. Al llegar, se apoyo en la pared de la
tienda tomando aire, y dándose palmadas en la cara, tratando de calmar su
ruidoso corazón.4

— ¿Qué pasa? A mí no me gusta Taehyung...— susurró.

Jk: (\(\
(๑•̀_•́)૭332

— Estoy agotado...

Jungkook y Taehyung caminaban con las bolsas de las compras en manos,


bueno, el castaño llevaba un montón de bolsas en las manos mientras que
Jungkook solo llevaba un pequeña bolsa.28

P á g i n a 30 | 329
— Yo también. Gracias por ayudarme hoy, hyung.— dijo felizmente
Taehyung con su cuadrada sonrisa.6

El peligro esbozó un leve sonrisa encogiéndose de hombros.29

Habían dejado de lado el comentario de antes del pelinegro, dándole poca


importancia. Al menos Taehyung, porque Jungkook planeaba darse contra
la pared de su casa nada más llegará a ella.

5: Tsundere.

— Maldito Yoongi, lo odio.— murmuró Jungkook mientras pasaba el patrón


por la cintura fe uno de los miembros de la banda de música, e iba
escribiéndolas en su cuaderno pesadamente.1

Namjoon y Yoongi estaban en un aura de felicidad hablando de cosas


triviales mientras que Jungkook estaba con su cara de amargado y su
pesada atmósfera de "odio mi vida, matame ya por favor" haciendo sentir
incómodos a los dos chicos a los que estaba midiendo.68

— Ya he terminado con estos dos... ¿Yoongi, te falta mucho?

Al no recibir respuesta de su amigo después de cinco segundo, se dio la


vuelta para ver que, ese chico de primero y el más bajo estaban hablando
alegremente, ignorándolo.
Jungkook con su tic en el ojo, se acercó a ellos peligrosamente y se colocó
detrás de Yoongi, asustando a Namjoon con su expresión.62

— ¡YOONGI!— gritó Jungkook en el oído de Yoongi.26

— ¡AAAAAH!58

P á g i n a 31 | 329
En un acto reflejo del susto, Yoongi estiró la cinta de medir que estaba
usando al rededor de la cintura de Namjoon, y por ende, lo apretó y el
menor de todo soltó un jadeo.

— A-ay, mi dia...fragma...— dijo entrecortado el peliplateado.190

— ¡Perdón!— se apresuró a decir y soltó la cinta, dejando respirar con


libertad al menor.

— En vez de estar conquetenado como un gato en celo ¡deberías


ayudarme, tú tuviste la idea de esta mierda!— exclamó cabreado Jungkook
lo que hizo que Yoongi se cabrease más.60

— ¿DISCULPA?30

— ¿ACASO ES MENTIRA?— cuestionó inquisitivamente Jungkook.

Yoongi siguió mirando a Jungkook con el ceño fruncido y la cara roja, ya que
era fácil hacerlo enfadar.

— ¡Hmp!— exclamaron los dos y se dieron la vuelta a seguir por donde


estaban.69

Namjoon soltó una pequeña risa.— Entiendo porque sois tan unidos.76

— A ver, perro, ¿de dónde se supone qué vamos a sacar 80000 wons?—
preguntó Jungkook viendo los presupuestos de la tela y los materiales.—
¡Tendrías que haberles dicho que al menos nos den un 30%!120

— Callate, ya sé que fuí un idiota.— dijo suspirando Yoongi.

— Al menos lo sabes.— suspiró también Jungkook.

P á g i n a 32 | 329
— ¿Y por qué no se lo pides al millonario de tu novio?— cuestionó pícaro
Yoongi.12

— No tengo ni idea de quién estás hablando y además, no es mi novio.—


respondió rápidamente Jungkook.13

— Tú sabes que sí...

— Que no, Yoongi.

Yoongi solo soltó un "hmp" lleno de ironía.

[…]

24

Yoongi se había ido a clase y Jungkook se había quedado en el aula de su


club, no le apetecía ir a clase y aún tenía que perfeccionar sus diseños.

— ¿Jungkook? ¿por qué no estás en clase?— la voz grave retumbó en la


silenciosa aula y el nombrado se dio la vuelta sorprendido.

De repente, su corazón empezó a ser ruidoso en su organismo, por lo que


llevo su mano a la zona izquierda de su pecho.10

¿Estaré enfermo?92

— Lo mismo puedo preguntarte.— respondió rápidamente.

Taehyung sonrió sin mostrar los dientes y se sentó al lado de Jungkook en


el suelo.

— ¿Por qué te sientas ahí? Tienes una silla allá.— señaló con el pulgar una
silla que se encontraba en el extremo de la habitación.

P á g i n a 33 | 329
— Me gusta sentarme en el suelo.— dijo Taehyung sin borrar su sonrisa.219

— Eres raro.— murmuró Jungkook mientras regresaba la vista a su


cuaderno.43

No hubo más conversación, lo único que había de fondo era el cómodo


silencio y los alumnos que estaban en educación física en el patio y el
ruidoso corazón del pelinegro, aunque sólo para él.2

— ¿Qué vas a ser cuándo salgas de la preparatoria?— cuestionó de


repente Jungkook.19

— ¿Mi señor estilista está interesado en mí?— dijo gracioso el castaño.113

— ¿Quieres que te meta una paliza? ¿Sabes qué? No sé ni porqué te lo


pregunto.— con el ceño fruncido, volvió a ponerse en sus diseños.37

Taehyung soltó una carcajada.— Seguire en el negocio familiar, supongo.

— ¿Cuál es tu negocio familiar?

— Es una cadena de diseñadores ¿te suena "Little Kim"?192

Jungkook abrió los ojos de golpe y dejo de escribir, se dio la vuelta con los
ojos como platos.23

— ¡Pues claro que los conozco! ¡son mis ídolos! ¡Sus diseños son los
mejores! me dan ganas de llevar vestidos sólo por eso.— dijo sonriendo el
pelinegro y luego calló de golpe.— mierda, no debí decir eso.187

Taehyung soltó una carcajada.

— De igual forma, es imposible que tu seas hijo de ellos...

Jungkook con una sonrisa cínica buscó en su móvil.

— La pareja tiene tres hijos, Kim Myeong, Kim HanNa y Kim Taehyung.
¿Espera, qué? Es simplemente imposible.— soltó una risa.55

P á g i n a 34 | 329
Jungkook deslizaba el dedo por la pantalla para ver las fotos de los tres
hijos.— Wo, son tan hermosos, parecen modelos.

— ¿Eso crees?— preguntó Taehyung con una sonrisa.

— Aunque sólo he encontrado una del hijo menor...

Gafas medio rotas, pelo despeinado y largo que casi cubre los ojos,
que horrible combinación de ropa...

no cabe duda...6

PERO SI ES

— ¡TAEHYUNG!

— Todos tienen esa reacción.1

— P-pero ¿cómo? ¿por qué? ¿qué? ¿tú? ¿eres la oveja negra de la


familia?— dijo Jungkook aún sin salir de la sorpresa.155

— Eso dolió.— Taehyung hizo una expresión triste de broma y luego se rió.

— Estás raro hoy ¿te ha pasado algo?— preguntó Jungkook, cortando al


castaño.— Te ves más callado y desanimado de lo normal.

— He estado sonriendo todo el tiempo.53

Jungkook se quedo en silencio sosteniendo la mirada de Taehyung y luego


se encogió de hombros.— Me doy cuenta de esas cosas, supongo.

Taehyung suspiró y retiro la vista de los ojos de Jungkook para posarlas en


sus pies.

— Hoy hubo una reunión familiar... y cómo tú dices... yo soy la oveja negra.
Ellos estuvieron comentando cosas como "deberías ser como tus
hermanos", "¿por qué no eres como tus hermanos?" y cosas así... y

P á g i n a 35 | 329
supongo que tienen razón, mis hermanos son perfectos e increíbles y yo...
yo sólo soy Taehyung191

Jungkook cerró los ojos meditando y asintió.— Lo entiendo.

El pelinegro dejo su lápiz en el escritorio y se bajo de su silla de un salto


para volverse a sentar a lado de Taehyung en el suelo.16

— Sé que lo que te digan tus familiares es importante pero, no puedes hacer


caso a los comentarios negativos siempre, porque la vida está llena de
eso.24

Taehyung asintió con una sonrisa. Jungkook llevo las manos a sus mejillas y
giró la cabeza del castaño para que lo mirase a los ojos, Taehyung,
sorprendido y un poco sonrojado, aguanto la mirada del pelinegro.

— Hyung, estás muy cerc-72

—Taehyung.— interrumpió Jungkook.— Es cierto, eres Kim Taehyung y la


ropa que lleves o como tengas el pelo no va a cambiar eso, así que deja de
decir idioteces y empieza a amarte a ti mismo.358

Más que una frase de apoyo, sonó como una orden.25

De repente la puerta fue abierta abruptamente mostrando al chico de ojos


felinos, ojos que se expandieron a ver la situación que estaba delante.11

— Mierda, ¿interrumpo?— cuestiono incomodado.65

— Pues claro que interrumpes, idiota.— respondió Jungkook.103

— Claro que no, hyung.— Respondió Taehyung a la vez.7

Jungkook suspiró y soltó al castaño, levantándose de su sitio y sacudiendo


su trasero con la mano para quitarse el polvo.— Nunca barremos esto, por
eso no nos sentamos en el suelo ¿sabes?

P á g i n a 36 | 329
— Gracias a mí, no llamaron a tu madre para notificar que no fuiste a clase,
pero, que si tienes una falta más, estarás castigado sin actividades del club
por tres semanas.— dijo Yoongi.

— Da igual, mi madre está trabajando en China, no creo que haga mucho y


lo demás es una mierda.— bufó el pelinegro.36

— ¿Vives solo, Jungkookie hyung?— preguntó sonriente Taehyung.5

— ¿Jungkookie? ¡A mí no me dejas llamarte así!— se quejó Yoongi.155

— Callate, Yoongi. Más o menos, sí, mi madre trabaja en el extranjero la


mayor parte del año y mi padre vive en Daegu.— explicó brevemente
Jungkook encogiéndose de hombros.— Tengo hambre y me da pereza
cocinar ¿me invitas a comer, Yoongi?33

— He quedado con Namjoon.— dijo brevemente el nombrado y Jungkook


sólo hizo un puchero.43

— Desde que apareció ese mocoso ya no hay más Jungkook ¿qué hay de
Jungkookie?119

Yoongi le sacó la lengua y Jungkook al instante lo hizo también.12

— Pff ¿en serio vosotros sois mis hyungs?— dijo riendo Taehyung.73

Jungkook y Yoongi también rieron por su comportamiento infantil de antes.

El timbre sonó indicando el final de la hora lectiva, segundos después el


bullicio de las personas saliendo de sus aulas hizo presencia.

— Buenoo, me voy, el amor de mi vida me espera.— dijo sin cortes Yoongi,


cogiendo su mochila del suelo y despidiéndose con la mano rápidamente.73

Cuando el blanquecino se marcho del aula, Jungkook fue a su escritorio y


recogió su cosas para guardarlas en su muchila26

P á g i n a 37 | 329
— Hyung.

— ¿Qué?57

— ¿Puedo invitarte a comer?— preguntó Taehyung de forma inesperada

Jungkoon paro sus movimientos y sintió su corazón volver a latir de esa


forma odiosa.33

— No creo...— murmuró en respuesta Jungkook.

— ¿Por?

— No quiero deberte dinero.

— Está bien, te estoy invitando.— le sonrió al pelinegro.

— ¿Como mucho, sabes?— comentó inquisitivamente Jungkook.89

— No hay problema.

— Pero mucho mucho.38

— ¿Qué pasa, Kookie? ¿No quieres comer conmigo y por eso insistes
tanto? — comentó un poco incómodo el castaño.23

— No es eso...— murmuró Jungkook de nuevo, terminando de recoger las


cosas.2

¿¿¿¿No quiero que me veas comer como un maldito cerdo??????253

ja71

— Bueno, adiós.— dijo cortante Taehyung al no haber respuesta del


contrario por unos largos segundos. Cogio su mochila rosa del suelo y fue
yéndose a paso rápido.16

¡Pero tampoco quería esto!

P á g i n a 38 | 329
Taehyung caminaba rápidamente mirando desinteresado su teléfono.
Hasta que un fuerte impacto cayó en su cabeza, atontándolo.
Se dio la vuelta viendo al bajito pelinegro con el ceño fruncido y la mano
levantanda por la colleja que le había metido antes.39

— Hay una promoción que me interesa en mi hamburguesería favorita, tú


pagas, y voy porque tengo hambre no porque quiera comer contigo.— Tras
decir eso, Jungkook se adelantó a Taehyung y empezó a caminar hasta la
salida.110

Taehyung rió suavemente yendo detrás del gruñón Jungkook.— Eres un


tsundere.— murmuró con su sonrisa.

La gente que aún andaba por los pasillos, miraban con burla a Taehyung,
que aunque éste, esté en su mundo sin darse cuenta, Jungkook lanzaba
miradas de odio a los que se reían en silencio del castaño y éstos se
callaban abruptamente.100

Que suerte que todo el mundo piensa que soy gangster.337

Sonrió para sus adentros.

— A todo esto, fuimos a comprar hace unos días ropa nueva ¿por qué
llevas ropa tan horrible?— cuestionó Jungkook después de "ahuyentar" a las
molestas personas que se burlaban de Taehyung.

— ¿Qué? Pero si es lo que compramos.— se justificó el más alto.

— ¿Qué?— paró en seco el pelinegro, y observó meticulosamente el


vestuario del menor.

Pantalón chándal gris con una raya verde y un jersey rojo a rayas.
y esos zapatos converse azules no pegan para nada.
¿Y además esa mochila rosa?37

P á g i n a 39 | 329
Incluso la ropa linda se ve horrible si no la combinas, eh...44

Jungkook miró con disgusto la elección de ropa de su amigo.7

— Taehyung.

— ¿Sí, Jungkookie hyung?3

— Eres un verdadero idiota.

6: Plan de Conquista.

- Creo que me gusta Taehyung.109

Jungkook hizo una repentina aparición con esa frase en el aula del club
donde se encontraba Yoongi leyendo tranquilamente un gran libro.
El de ojos felinos, bajó el libro de su cara dirigiendo una mirada indiferente a
su amigo y luego subió de nuevo el libro, tapando su cara.25

- Vaaya... ¿en serio?- canturreo Yoongi haciendo fruncir el ceño a


Jungkook.24

- ¿Eso es lo único que vas a decir?- cuestionó Jungkook.

Yoongi bajo el libro de su cara y suspiró mientras dejaba el libro en la mesa


y luego se encogió de hombros, llevo la mano a su nuca e hizo con la mano
libre.

- Hmm... ¿cómo te lo digo?... ah, sí.- Yoongi miro a los ojos a Jungkook con
una expresión neutral.- eres el único idiota que no lo sabía.22

- ¿Qué?

P á g i n a 40 | 329
- Sí, amigo, eres muy obvio, y Taehyung es tan idota como para no darse
cuenta de que lo tratas mal a propósito.9

- No es propósito.- se justificó Jungkook.

- ¿No? Cuando te avergüenzas sólo lo insultas, y avergonzarte es fácil, sólo


tienen que hacerte cumplidos, mirarte fijamente, elogiar tus diseñ-18

Jungkook llevo la mano a la boca de Yoongi para callarlo y este sacó la


lengua para lamer la palma de la mano del pelinegro y Jungkook lo aparto
rápidamente con una mueca de desagrado mientras se secaba en la tela de
su pantalón.- Que asco.120

Yoongi se estuvo riendo por largos minutos y Jungkook reprimía ganas de


golpearlo. De repente el sonido del teléfono de Jungkook interrumpió.

El pelinegro sacó el aparato de su bolsillo y miró la pantalla.

¿número desconocido?

Ignoró eso y contesto.

- ¿Quién es?- respondió Jungkook mientras Yoongi sólo lo miraba.

- Jungkookie hyung.- la voz grave le atreveso el oído y Jungkook suspiró


ganándose una risilla de burla de Yoongi.62

- ¿Taehyung? ¿cómo has conseguido mi número?- cuestionó sorprendido.

- Me lo dio Lisa.- respondió Taehyung.

- ¿Y Lisa cómo tiene mi número?

- Se lo di yo.- respondió Yoongi.86

Jungkook le dio una mirada que decía "te mataré" y Yoongi se encogió de
hombros como usualmente lo hacía.8

P á g i n a 41 | 329
- ¿Y qué quieres?- preguntó bruscamente Taehyung.21

- Intimidalo más si puedes.- comentó Yoongi y Jungkook sólo rodó los


ojos.16

- No quería molestarte, hyung.

Maldito Taehyung, es como un cachorro.23

Jungkook suspiró.- No me molestas, Tae... pero si me has llamado es


porque necesitas algo de mí.

- Puedo llamarte porque me apetece hablar contigo.81

Yoongi se llevo la mano a la boca en una expresión de sorpresa fingida y


Jungkook no tardo en volverse un tomate.139

- ¡Si has llamado para decir tus estupideces, te colgaré!- exclamó nervioso
el pelinegro y Taehyung se rió a través de la línea.21

- Es broma,
Jungkookie. Sólo llamaba para que me dijeras que tengoque ponerme hoy,
quiero verme bien para Taeyeon, hoy regresa desu viaje.186

Oh, cierto, lo había vuelto a olvidar.6

- ¿A-ah? sí... emmm ¿pues qué quieres llevar hoy?- cuestionó ido
Jungkook.

- ¡La camisa negra de cuello largo!

Jungkook pensó unos segundos.- Está bien, ponte eso, los pantalones
negros, pero no los de chándal ni los de rayas, el liso, que te conozco.42

Taehyung hizo un sonido de asentimiento y empezó a vestirse.

- Y abrigate, hace frío, ponte el abrigo negro largo y una bufanda.58

P á g i n a 42 | 329
- Está bien, hyung, gracias.- dijo Taehyung y se notaba feliz por lo que el
azabache sonrió.4

Después de una despedida rápida, Jungkook se apresuró a colgar y suspiró,


liberando el estrés de la situación anterior.

- ¿No es demasiado negro?- cuestionó Yoongi mientras comía unas galletas


y con una en mano señaló a Jungkook.- Ya sabes, Taehyung es más,
colores y caras sonrientes por todos lados, no me lo puedo imaginar vestido
como un macho.87

- No digas tonterías, no habrá tanta diferencia.- respondió Jungkook mirando


la pantalla de su teléfono sonriente y un poco sonrojado.7

Yoongi masticó la galleta y entrecerro los ojos viendo a su amigo.- Wo, eso
fue lindo ¿eres Jungkook?27

- ¿De qué hablas, idiota?- Frunció el ceño.1

- Y ahí regreso el tosco Jungkook ¿sabes? si hicieras más expresiones


como esas, Taehyung estaría a tus pies.- comentó Yoongi con la boca
llena.17

- ¿Cuáles?- cuestionó Jungkook y Yoongi sólo se encogió de hombros.3

Jungkook hizo un puchero y Yoongi casi se atraganta con su comida.- Ooh


sí, como esas.105

El pelinegro arrugó la nariz aún tratando de entender a Yoongi.4

Estuvieron varios minutos en silencio, cada uno en su mundo y Yoongi


interrumpió el silencio.

- ¿Y bien?- preguntó.

- ¿Y bien, qué? - cuestionó Jungkook.

P á g i n a 43 | 329
- ¿Cuál es el plan de conquista? duh.48

- ¿Conquista?- Jungkook alzo una ceja dudoso.

- Claro, ya admitiste que te gusta ese mocoso, ahora tienes que tener un
plan de conquista, listo.- explicó brevemente el blanquecino.4

Jungkook soltó una risa sin gracia.- Haga lo que haga, Taehyung ya tiene a
alguien en el corazón, una chica linda, amigable, que lo trata bien y que es
inteligente.

- ¡Tú también eres lindo! a ratos, y lo de amigable... eso sólo se trata de


practicar, y tienes las mejores notas de clase sin ir a ninguna clase. Y lo de
Tae... pfff, fácil, sólo tratalo bien.33

- ¿Eso fue un cumplido?- cuestionó Jungkook y luego volvió a suspirar.- No


es tan fácil, sabes que me cuesta hablar con las personas y que mi forma de
que mis sentimientos, no me dominen, por así decirlo, es ser...

- ¿Un tsundere?87

- Básicamente.

Yoongi llevo la mano a su barbilla, frotándose mientras hacia como que


pensaba.

- Bueno, además de que se supone que lo estoy ayudando a conquistar a


esa chica.4

- AAAH, es que eres un idiota de primera, Jungkook.6

Jungkook llevo las manos a su pelo y se despeino frenéticamente.- ¡Ya lo


sé!1

- Bueno, menos mal que tienes a un genio de amigo, en un segundo he


ideado el mejor plan de conquista del mundo, sólo dejamelo a mí.- Yoongi
se sañalo con el pulgar y una sonrisa presumida mientras le guiñaba un ojo

P á g i n a 44 | 329
a Jungkook mientras que éste lo miraba con asco fingido.
37

- Primer paso, una buena apariencia.

Yoongi había dibujado la pizarra un "dibujo" de Jungkook para explicar su


plan.34

490

- ¿Y tú eres estudiante de artes?- cuestionó a punto de estallar de risa


mirando el dibujo de Yoongi.48

- Callate, son bocetos muy rápidos y en tiza.- se cruzó de brazos frunciendo


el ceño.20

- Tae tiene cara de tener problemas, yo no tengo tanto diente de conejo y no


tengo el pelo así.68

- ¡Que te calles! Bueno, como iba.- Yoongi señalo al dibujo de Jungkook


enfadado.- Este eres tú, feo, mugriento y horrible.137

Jungkook le dio el tic en el ojo.66

- Y este serás tú.- señaló al Jungkook sonriente.- Cuando te pongas bien


hermoso. Confía.41

- Tengo miedo.3

- He traído a una experta.

P á g i n a 45 | 329
- Hola, abuelo amargado.- la chirriente voz de la rubia apareció detrás de él
y Jungkook soltó un brinco del susto.19

- ¡Lisa! ¿Qué haces TÚ aquí? - exclamó Jungkook.

- Este es mi club, idiota, además Yoongi me ha pedido ayuda para que dejes
de dar tanto asco.34

Jungkook miro a Yoongi, con una expresión de asesino serial y Yoongi sólo
le guiño el ojo.

- Te di mi amistad y me escupiste en la cara.116

Dijo Jungkook mientras Lisa lo sentaba en la mesa y sacaba su maletín, que


estaba lleno de maquillaje y cosas extrañas que Jungkook jamás había
visto.1

Yoongi se volvió a sentar en el suelo para leer su libro y Lisa le puso una
pinza en el pelo para sujetar su flequillo mientras tatareaba una canción.13

- ¿Puedes parar? es molesto.- se quejo Jungkook.

- No, ahora callate, que voy a empezar por los labios.- Lisa sonrió con
malicia mientras sacaba cuatro tipo de pintalabios y bálsamos.41

- ¡Y listo!

Exclamó feliz Lisa, mientras guardaba su deliniador.

P á g i n a 46 | 329
- Tengo miedo de mirarme al espejo.- Jungkook se levantó de la silla
mientras se quitaba la pinza del pelo.

- Dios, si no tuviera a Namjoon en mi corazón, serías mi crush, Jungkook.-


dijo Yoongi, inspeccionando la cara de su amigo sonriente.87

El pelinegro lo miro con asco y cogió el espejo que le dio Lisa.


Incluso él se sorprendió de verse, el maquillaje era sutil y suave, no era
exagerado y le daba una pinta más delicada a su rostro.

- Wo... me veo muy lindo.94

- Lo sé, soy genial.- comentó Lisa con las manos en las caderas y una
mirada triunfadora.33

- La verdad es que sí.- admitió Jungkook aún mirándose al espejo.

Lisa y Yoongi expandieron sus ojos al oir lo que había dicho.123

- Me voy, esas palabras me han impactado demasiado.- dijo la rubia


recogiendo sus cosas asustada.24

Jungkook frunció el ceño rodando los ojos y volvió a mirarse al espejo


sonriente.

- Por cierto, Jungkook.- dijo Lisa, ganándose la atención del llamado.- Eres
muy lindo incluso sin maquillaje ¿sabes? Por favor, no vuelvas a decir que
no lo eres porque te meteré una paliza.115

Jungkook no sabía que decir y sólo le sonrió ampliamente a Lisa, una


sonrisa que mostraba sus lindos dientes y Lisa y Yoongi se sonrojaron
inmediatamente.68

- ¡LINDO!143

[...]

P á g i n a 47 | 329
Yoongi le puso un accesorio de cabello en forma de flor, tal y como su dibujo
a Jungkook y éste gruño.205

- Esto me hace parecer como una chica.- se quejó Jungkook.

- ¿QUÉ? Es perfecto así que no digas tonterías.4

Yoongi se levantó a buscar una cosa para completar la apariencia de su


amigo y Jungkook sonrió satisfecho al mirarse al espejo de cuerpo completo
que había en el aula.

- Y por último...

Dijo Yoongi y Jungkook se dio la vuelta con una sonrisa al ver lo que había
preparado su amigo, sonrisa que se esfumó al completo y lo sustituyó una
mueca de asco y confusión.

- No planearas que me ponga eso.1

- Eso es exactamente lo que planeo.

- Definitivamente no.

- Tú sabes que sí.1

- ¡NUNCA! Apoyo que las personas que le guste, lo hagan, pero yo no soy
una de esas personas.- Jungkook retrocedia a medida que Yoongi se
acercaba.

Yoongi tenia entre sus manos, ni más ni menos, que una falda negra y una
camisa blanca con botones también negros.322

- Jungkook...- susurró con malicia Yoongi.11

P á g i n a 48 | 329
- ¡NOOOOOOO!25

Jungkook salió corriendo del aula y Yoongi iba por detrás.- ¡No te
escaparas, Jungkook! Este es uno de mis sueños y me cansé de
reprimirlo.295

- ¡Te mataré!- le grito a medida que corría por el pasillo y los demás
estudiantes veían confusos y divertidos la escena de ese par.

Jungkook paro de correr al chocar con alguien y este le tomo de los


hombros para evitar la caída.
Jungkook espero que fuera una de esas escenas clichés de los animes
shojo que veía y levantó la cara tímidamente.68

- Oh, eres tú.- Dijo indiferente al ver al amigo de Taehyung, Jimin, mirandolo
sorprendido.72

- Wo, ¿Jungkook hyung? te ves realmente bonito...- Jimin le sonrió un poco


sonrojado.85

- Claro que me veo lindo, yo siempre me veo así, idiota.- respondió


Jungkook.- ¿Puedes soltarme? Las manos te sudan.68

Jimin los retiró rápidamente avergonzado.- Lo siento, hyung... ¿te he dicho


que te ves bonito?46

- Sí.- respondió indiferente.4

- Oh... Jeje.130

Jimin y Jungkook estuvieron en silencio sin saber que decir y Jimin un poco
nervioso por tener a esa carita bonita cerca suya.151

- ¡Jungkookie hyung, te encontré!- exclamó una grave voz y Jungkook abrió


los ojos abruptamente, alzando la cabeza para ver a Taehyung y su nuevo
look.- Justo iba a ir al aula del club ahora.

P á g i n a 49 | 329
Jungkook asintió sonriendo y embobado por lo bien que se veía Taehyung
con esa ropa.4

- ¡Wow, Jungkookie hyung, te ves muy lindo!- comentó Taehyung al


examinarle el rostro.

A Jungkook no le tardo en subirle los colores a su cara, terminando como un


tomate, y empezó a jugar con sus dedos nervioso.- ¿De verdad?109

- ¡Sí!- exclamó.

El pelinegro esbozó una sonrisita aún con la cabeza agachada.

- Incluso estás actuando lindo...- le dijo el castaño.74

Se quedaron en un cómodo silencio mientras que Yoongi y Jimin los


miraban escondidos.
Yoongi giró la cabeza y vio al amigo de Taehyung.

- ¿Y tú que haces aquí?3

- Observar al amor de mi vida.- respondió Jimin, mirando con una sonrisa a


Jungkook.347

Yoongi abrió los ojos asustado.

- Mierda, espero que no lo estés diciendo en serio.

7: Primero estudios, luego fiestas.


— Por milésima vez, Jimin. No me interesas, no me gustas y no me
gustarás.— dijo Jungkook mientras cogia la caja de bombones en forma de

P á g i n a 50 | 329
corazón que le había tratado de dar el menor.— Aunque me quedo esto, las
flores te las puedes quedar.249

El rubio asintió con una sonrisa mientras arrancaba la cabeza de la flor y la


colocaba detrás de la oreja del pelinegro, consiguiendo una mirada confusa
y de asco del contrario.4

— ¡Vamos, hyung! Soy todo lo que necesitas, divertido, guapo, sé cantar,


bailo y tengo dinero.— Dijo Jimin con una voz seductora mientras le guiñaba
el ojo.160

— No, adiós, Jimin.— Dicho eso, Jungkook le cerró la puerta del aula en la
cara.40

— ¡Cool! ¡chocolates!—, Dijo Yoongi levantándose a coger la caja después


de presenciar la escena.97

— No, es mía, Jimin me lo regalo.— se rehusó a dárselo.3

— ¿El mismo Jimin que rechazas una y otra vez? No tienes derecho,
amigo.— Yoongi cogió un chocolate de la caja y se lo metió en la boca.19

Jungkook bajó la cabeza suspirando y cogiendo un chocolate de la caja para


meterselo en la boca.

— Enamoro a la gente que no quiero.— dijo Jungkook.334

—Suele pasar.—contesto indiferente Yoongi mientras seguía tragando


chocolates.26

— ¿Cómo puedes tener una piel perfecta si comes como un cerdo?–


cuestionó Jungkook.72

— Genes de oro, amigo.239

Jungkook se rió y apoyo la cabeza en su pupitre, este era uno de esos raros
días que asistía a clases.

P á g i n a 51 | 329
La clase de segundo se encontraba delante de la suya, y gracias a las
ventanas que habían en las clases dando la vista a los pasillos, podía ver
todo.

Busco con la mirada al castaño que se encontraba en los pasillos hablando


con la bendita chica esa.38

Sonríe como un idiota, seguro que también está diciendo idioteces.

Soy mucho más bonito que esa chica, tengo mejores notas, soy mejor en los
deportes, pero no soy una chica.214

Taehyung, ¿no te vas a interesar en mí sólo porque no soy una chica?99

Jungkook suspiró abatido y se levanto de su pupitre bajo la atenta mirada de


Yoongi.

—¿A dónde vas?—cuestionó éste.

—Al salón del club, se me ha ido la motivación de asistir a clase.26

–Te acompaño, yo también me he cansado.1

Yoongi cogió su mochila rápidamente y salió detrás de Jungkook.


Una vez fuera, todos ya estaban en sus clases.

—Fue muy arriesgado salirse cuando ya estaba el profesor... ¿Jungkook?3

El llamado estaba mirando la tabla con las listas de mejores notas de los
pasados exámenes, fueron de los más difíciles.

—Número 1, como siempre.—dijo Jungkook con una sonrisa de


autosuficiencia.32

—Número 26, soy un genio.–comentó entusiasmado Yoongi.—A ver mi


esposo, Namjoon, namjoon, namjoon, aquí, 6, mi esposo también es un
genio.361

P á g i n a 52 | 329
Jungkook soltó una carcajada e instintivamente busco el nombre de
Taehyung.

—¿Número 98? ¡uno de los últimos! Tanto tiempo desperdiciando en


vestirse, y mira como están sus notas.24

—Y Taeyeon no se aleja mucho, 83.70

—Esa chica no me importa.— Gruño Jungkook y volvió a encaminarse a su


salón sigilosamente para no ser visto por los profesores.

Estuvieron dentro del aula hasta la hora del descanso, Yoongi haciendo
cualquier cosa y Jungkook estudiando.

Cuando el timbre sonó, Taehyung apareció en el aula donde estaba


Jungkook y Yoongi con un portazo.

—Taehyung.

— ¡Jungkookie, Taeyeon va a calebrar su cumpleaños hoy y yo tengo que


vestirmeparapodervermebien para ella!151

—No sé que has dicho pero no.— dijo secamente Jungkook regresando la
vista a su libro.13

—¿Por qué?

—Porque está celoso.— dijo Yoongi contundentemente mientras pintaba en


su lienzo.193

Jungkook rojo como un tomate con el ceño notablemente funcido, bajo


libro.– ¡No es verdad! Pero mañana tienes las competencias de Literatura
¿cierto? Tienes que estudiar.1

—Pero...6

P á g i n a 53 | 329
—Nada de peros. Si quieres ir a esa fiesta tendrás que estudiar al menos
dos horas. Ven aquí después de clase.7

— Está bien, papá.—respondió bufando Taehyung.168

Cuando dijo eso, se dio la vuelta para salir rápidamente del aula y Jungkook
suspiro.

—Muy buena excusa para que no vaya a ver a Taeyeon.—le dijo con el
ceño fruncido Yoongi.

—Soy una mierda, le dije que le le iba a ayudar pero sólo estoy retrasando
esto.— Jungkook se sentó.– Sólo debería rendirme y abrirle la puerta a
Jimin.371

Yoongi miró triste el decaído rostro de su amigo y fue rápidamente a


abrazarlo por detrás, rodeando sus hombros.9

— Eh, no te preocupes, Jungkookie.

La puerta fue abierta con otro portazo sorprendiendo a los dos chicos que
estaban abrazados.

—¿Otra vez tú, rubio de bote?— cuestionó Yoongi al sonriente rubio.75

— ¡Jungkookie hyung!

El nombrado frunció el ceño ante el apodo por el que le había llamado y se


levantó.

—¿Jimin? ¿Qué haces aquí aparte de acosarme?3

— Ya que el idiota de mi amigo Taehyung no aprecia tu ayuda en los


estudios, ¿puedes ayudarme? estoy en en el puesto 75.92

—¿Por qué todos los de segundo sois idiotas?–preguntó Yoongi, con un


asentimiento por parte de Jungkook.33

P á g i n a 54 | 329
— Un momento, ¿cómo sabías que había ofrecido mi ayuda con Tae,
Taehyung? ¿Me espías?— Señalo Jungkook.

— NoOo, lo que pasa es que iba a entrar pero Tae se me adelanto y no


quería interrumpir el diálogo.—explicó rápidamente Jimin.122

Jungkook estaba poco convencido pero aún así se encogió de hombros.—


Está bien, puedo ayudaros a los dos, ven aquí después de clase.

—¡Gracias hyung!— Jimin se acerco al pelinegro peligrosamente para tratar


de plantarlo un beso en la boca pero Jungkook fue más rápido y llevo la
mano a la boca del contrario creando una barrera.32

—Uy, Jimin, ya van a empezar tus clases, vete.—ordenó Jungkook.70

—Pero...

Jungkook le señaló la puerta y Jimin suspiró retirándose.

—¿Si hubiese sido Taehyung hubieses dejado que te besara?—le pregunto


pícaro Yoongi.61

Ante la pregunta, Jungkook no tardo en sonrojarse intensamente.

—¡P-p-pues claro que...!—Yoongi alzo una ceja mirando a su amigo.— s-


sí...131

—Ya estás empezando a ser más honesto y lindo ¡un gran avance!— animó
Yoongi ganándose una mala mirada del contrario.

[...]24

— Jiminnie... ¿Qué haces aquí?– preguntó el castaño después de darse


cuenta después de quince minutos andando a la biblioteca junto con Jimin y
Jungkook para estudiar.

P á g i n a 55 | 329
— Nada de "Jiminnie", bastardo, ahora somos rivales amorosos.– amenazo
el rubio aunque a Taehyung sólo le dio gracia, ese chico siempre exageraba
cuando estaba en ese modo290

— Jimin, no digas tonterías.–comentó Jungkook leyendo el libro de


Literatura de los chicos.9

— Sí, cariño.–contestó el nombrado.84

— Jimin-13

— Das asco, por favor, para.– terminó la frase Taehyung.98

— Tú si que das asco, amigo, tener a una persona como Jungkookie hyung
enamor-- la contestación de indignación de Jimin fue cortado por el
azabache.14

— Una palabra más y te mato.–le dijo Jungkook a Jimin señalandolo pero a


Jimin solo le dio ternura porque el pelinegro era más pequeño que él y se
lanzo a estirarle las mejillas.85

—¿Qué?–cuestionó Taehyung confuso.8

Este día va a ser muy largo...

8: Pelea tras pelea.


— Bueno, ya he leído vuestro temario, a diferencia de matemáticas, esto es
mucho más fácil, sólo se trata de estudiar.— explicó Jungkook cogiendo
entregándole a cada chico una pila de folios.— os he puesto lo importante
es esquemas y todo eso... haremos una práctica, leereis esos documentos y
respondereís a las pregunta ¿cappici?70

P á g i n a 56 | 329
— Entendido, Jungkookie hyung.— dijeron a la vez los sonrientes chicos.

Jungkook asintió y saco su libro para leer mientras que dejaba a los chicos
hacer sus cosas.
Los chicos leyeron con aburrimiento los documentos y el pelinegro sólo se
sumergió más en su lectura.

Taehyung, quien estaba muy concentrado haciendo los ejercicios, recibía


codazos de su amigo constante. — Psssst, Tae.

— ¿Qué quieres, Jimin?— susurró el castaño parando sus actividades.

— ¿No es Jungkookie lindo?— cuestionó Jimin mirando a su hyung.— mejor


que una chica.258

— ¿Para eso me molestas?— le preguntó aburrido Taehyung.

Jimin hizo un puchero ante la contestación de su amigo y volvió a ponerse a


leer.

Los minutos pasaban y Taehyung pensó en las palabras de Jimin, claro que
sabía que Jungkook era lindo pero... ¿mejor que una chica?
El castaño dirigió la vista hacia el pequeño cuerpo que estaba delante suya,
leyendo.5

Piel blanca, como Taeyeon...313

Taehyung paso la vista por toda la cara de Jungkook

Ojos negros grandes y pestañas largas

Nunca me había fijado en que los labios de hyung son finos ypequeños y tie
nen un color intenso.2

Jungkook hyung, sin duda, es muy bonito.76

Y parece sonrojado ¿se habrá maquillado hoy?

P á g i n a 57 | 329
— Taehyung ¿se puede saber que tanto me miras?— Cuestionó Jungkook
con las mejillas rosas y Taehyung se dio cuenta de que estaba mirando a
Jungkook como un baboso y le sonrió.63

— Sólo pensé que te veías muy lindo hoy, hyung.96

Jungkook abrió los ojos y dio una bocanada al aire, poniéndose rojo hasta
las orejas.9

— Yo-

— ¡OYE TÚ, DEJA DE COQUETEAR CON MI ESPOSO DELANTE DE MI


CARA!— le exclamó Jimin, dando un golpe en la mesa y señalando al
asustado Taehyung.379

— ¡Jimin!— le dio Taehyung un golpecito en la frente al llamado.

— ¡Callaos ya, a estudiar!— exclamó Jungkook avergonzado por la escena


que estaban haciendo en medio de la biblioteca.13

— ¡No!— gritaron Jimin y Taehyung.

— ¡SILENCIO!— exclamó el vigilante de la biblioteca e inmediatamente ese


par se disculpo y se callaron.29

[…]2

— Era mi biblioteca favorita...— Murmuró Jungkook con su tarjeta de la


biblioteca que decía "vetado hasta nuevo aviso".146

Jimin y Taehyung se miraron de reojo con culpabilidad.

— Lo siento mucho, Jungkookie, ha sido nuestra culpa.— dijeron.

— ¡Pues claro que ha sido vuestra culpa, par de imbéciles!— les regaño
Jungkook y Taehyung y Jimin se inclinaron para hacer un reverencia en
forma de disculpa.40

P á g i n a 58 | 329
Jungkook los miro y suspiro.— Soy vuestro hyung y cuando os digo que os
calléis, lo tenéis que hacer ¿está claro?71

Jimin y Taehyung asintieron frenéticamente.

— Y como me han vetado, uno de los dos me va a invitar a comer.

— ¡Entendido!

Jungkook abrió la boca, sorprendido.— ¿Así de fácil?55

— Es lo mínimo que puedo hacer por ti, Jungkookie hyung.— le dijo con una
sonrisa Taehyung.

— ¿Por qué hablas en singular? soy yo quien le va a pagar la comida a


hyung.— se quejó Jimin.

— No, yo.— le contestó con el ceño fruncido.

— Y aquí vamos de nuevo...— susurró Jungkook.54

— Yo le voy a pagar la comida a Jungkook.— aclaró el rubio.

— No te tomes la molestias, Jiminnie, yo lo hago.— le dijo Taehyung.

— Yo y punto.

— No, yo y punto pelota.93

— ¡BASTA! Hoy me lo paga Jimin y otro día Taehyung, ya está.— terminó la


discusión Jungkook.61

— Vale~— canturreo Jimin.

— Bueno, está bien.— dijo Taehyung con los brazos cruzados.

Los tres chicos fueron hasta un Mc Donald cercano, y Jungkook eligió toda
la comida que quería ya que lo dos chicos se peleaban por quién podía
comprarle más cosas al mayor.40

P á g i n a 59 | 329
Esto es el jodido paraíso.221

Pensó Jungkook mientras daba un mordisco a su hamburguesa y veía como


el sol perdía su brillo lentamente y hacia paso a la noche.

— Mi padre me acaba de llamar, ha dicho que esté en casa dentro de un


rato que si no, me mete una paliza.— comentó Jimin recogiendo sus
cosas.18

— Tu padre es un poco agresivo...— le dijo Jungkook frunciendo el ceño.2

— Nah, es sólo que Jimin se expresa así. — le explicó Taehyung al


azabache brevemente.20

El rubio asintió y le dirigió una mirada seria a Taehyung.— Y que no me


entere que intentas robarme a mi esposa.139

— ¡Soy un chico, idiota!— exclamó Jungkook30

— Esposo, quiero decir.— corrigió

— Y no soy tu nada, ni lo seré.— Jungkook puso los ojos en blanco


cruzándose de brazos.32

— Tú tranquilo, Jimin.— soltó una carcajada el castaño.2

Jimin también se rió con Taehyung y poco después se despidió de los dos
chicos y se fue.

Jungkook comía en un incómodo momento donde Taehyung lo miraba con


una sonrisa.

— Taehyung, ahora que lo pienso, ¿tú no usas gafas? hace mucho que no
te las veo puestas.— sacó tema Jungkook.16

— Ah, sí, me dijiste que me veía mejor sin ellas, tienes razón.— le explicó.

— Te ves bien con los dos...— murmuró para sí mismo Jungkook.41

P á g i n a 60 | 329
— ¿Qué has dicho?— le preguntó Taehyung, pues el más bajo había
hablado tan bajo que no lo había oído bien.

— ¡Que te ves igual de feo con ellas que sin ellas!— le exclamó con el ceño
fruncido y un poco sonrojado.130

El castaño soltó una risa suave.— ¿A qué viene ese cambio de humor?

— Sólo pienso que si estás más cómodo llevado gafas, deberías hacerlo.—
le dijo Jungkook.1

— A Taeyeon le gusta que no lleve gafas.— comentó entusiasmado el


castaño.176

— Taeyeon lo otro, Taeyeon aquí ¿y tú? he notado hoy que te molestaban


las lentillas.— dijo el azabache dando un mordisco a sus patatas. — Está
bien que los lleves con ella, pero conmigo tienes confianza, no tienes porque
llevarlas.76

Taehyung le sonrió cálidamente al contrario haciendo que Jungkook sienta


un calor expandiéndose por todo su pecho.

— Gracias, hyung, la próxima que te invite a comer, llevaré puestas mis


gafas.6

Jungkook sonrió enternecido por ese comentario.


El castaño borró su sonrisa y miro sorprendido al azabache, no había visto
esa sonrisa de su hyung desde que habían empezado a ser amigos.

— Jungkookie hyung.

— ¿Qué?

— Eres muy lindo.74

Jungkook se atraganto con la cocacola que estaba tomando, y tosió


frenéticamente asustado a Taehyung.59

P á g i n a 61 | 329
— Estoy bien, estoy bien... Taehyung.

— Dime, Jungkookie.

— ¿Estás tratando de ligar conmigo?— cuestionó dudoso Jungkook.6

— ¿Qué? ¡No!— exclamó avergonzado Taehyung.— Cuando pienso que


alguien se ve bonito, siempre se lo digo, a Taeyeon siempre se lo digo.281

— Ahh... comentario innecesario.— murmuró Jungkook.— ¡Me da igual! Voy


a comprarme algo dulce.2

— ¿Más? Has comido mucho hyung.

— Que te importa.— Le dijo agriamente el azabache por ese comentario


hiriente para el más bajo.41

— Es broma, puedes comer lo que quieras.— Taehyung se rió y llevo la


mano a la cabeza de Jungkook para alborotar su pelo.4

Jungkook se sonrojo por eso.— Deja de tratarme como si tú fueses el hyung


aquí.— dijo y se levantó para ir a la zona de bollería y pastelería.24

Taehyung sonrió y sintió su teléfono vibrar, lo sacó de su bolsillo y reviso


sus mensajes.

Taeyeon. �52

Hola, Tae.55

He notado que no has venido a la fiesta...30

Si has terminado de estudiar, la fiesta aún no ha terminado, puedes venir.


�130

Es cierto, hoy es la fiesta de cumpleaños de Taeyeon...

Taehyung sonrió por eso, aún podía asistir a la fiesta.

P á g i n a 62 | 329
Llevo la vista hacía Jungkook, que miraba felizmente todos los pasteles que
había en la vitrina, con una sonrisa y Taehyung automáticamente sintió una
punzada en el estómago, que ignoró.23

Jungkookie hyung se ve lindo sin quererlo.45

Taehyung suspiró con una sonrisa y tecleo en su pantalla.

Taehyung.9

Lo siento, preciosa.271

Me ha surgido algo importante.427

9: San Valentin alocado.


— ¡Maldita seas, Yoongi!— le grito Jungkook al recordar que dentro de un
mes era el festival de primavera y él no llevaba hecho nada de el vestuario
del grupo ni sus diseños para la exposición.6

— ¿Ahora qué hice aparte de haber nacido?— cuestionó exasperado el


recién nombrado.96

— No te hagas, sabes lo que hay dentro de un mes y no llevamos hecho


¡absolutamente nada! Ya veo el fracaso...

— Tranquilo, hombre... Además este mes también está San Valentin.— le


recordó Yoongi.

— ¡San Valentin me importa una mierda!— exclamó enfadado Jungkook.162

P á g i n a 63 | 329
— Que poco romántico... Si te fuese tan bien en el amor como a mí, te
encantaría.— dijo desinteresado Yoongi mientras caminaba por el salón del
club.25

— Estás pidiendo a gritos que te meta un puñetazo, Yoongi.— le advirtió.24

— ¿Alguien ha dicho San Valentin?— cuestionó un chico rubio abriendo la


puerta de golpe haciendo que Jungkook se sobresalte y se diese la vuelta
para ver de quien se trataba.81

— ¡Jimin! ¡Te he dicho que dejes de acosarme!— le regaño.

— No te estaba acosando, bebé, pasaba por aquí y casualmente lo oí.—


explicó brevemente Jimin.60

— Me vuelves a llamar "bebé" y te irás despidiendo de tus hijos.— dijo


amenazadoramente.39

— ¿Los hijos que tendremos?— cuestiono con picaría.122

— ¡Jimin!

— Parar de coquetear delante de mí.— dijo Yoongi.

— Sí, porfa.— dijo Taehyung.93

— Espera, ¿Taehyung? ¿cuándo has entrado aquí?— preguntó dudoso


Jungkook.45

— Hace unos minutos pero estabas ocupado hablando con Jimin.—


comentó encogiéndose de hombros.72

Yoongi entrecerro los ojos mirando al castaño por su comentario.— ¿Celoso


de que Jungkook ya no te preste tanta atención como antes?194

Todos se quedaron callados por la bomba que acaba de tirar Yoongi y éste,
estaba tan tranquilo.83

P á g i n a 64 | 329
Después de largo segundos de silencio, Jimin habló.— Sí, bueno ¿quién
tiene hambre?286

Jungkook suspiro y el rubio volvió a hablar:

— Y bueno, hyung, ¿qué quieres que te regale por San Valentin?3

— Que te calles sería un buen regalo.— le dijo sarcástico.48

— Algo realista.18

— No quiero que me regales nada.

— Venga, di algo.21

— ¡Que pesado! Bueno, vale.

Jimin y Taehyung llevaron toda su atención a lo que iba a decir Jungkook.

— Quiero un puto oso de un conejo, que mida tres metros, tenga


decoraciones de flores por todas partes y que sea negro con manchas
azules.308

Yoongi soltó una carcajada por la petición de su amigo.2

— Ah y tiene que tener los ojos de distintos colores, uno gris y otro rosa
respectivamente.— terminó. — Si no tiene todo eso, no lo aceptaré.76

— ¡Hecho!— exclamaron determinados los dos chicos.186

— ¿Qué?— cuestionó alarmado Jungkook.3

— El peluche que te voy a regalar será el más bonito y grande que vas a ver
en tu vida, Jungkookie.— le dijo Taehyung con usa sonrisa.49

— Já ¿estás tratando de competir conmigo? mi peluche va a ser mucho


mejor que el tuyo y Jungkook me querrá a mí.— dijo con autosuficiencia.18

— El mío va a ser mejor.— le dijo Taehyung a Jimin.

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— No, el mío va a ser el mejor.— contestó.

— ¿Por qué no competís por quien tiene mejores notas que es más útil?—
interrumpió la pelea Jungkook.74

— ¡También podemos hacer eso!— exclamaron los dos chicos a la vez.48

Jungkook los miro con cara de pocos amigos y Jimin sonrió acercándose a
él.

— A cambio de tu peluche, claramente me regalarás chocolate ¿no es así?

— Ni en un millón de años.— le contestó mal.20

— Jungkook no sabe cocinar.— interfirió Yoongi.

— ¡Sí que sé! y más si son dulces.— le contesto.— Pero de todas formas,
no voy a ponerme a hacer esa mierda para nadie.3

— ¿Y para mí?— preguntó inocentemente Taehyung.97

Jungkook se sonrojó fuertemente.— Pues a-a l-lo m-m-mejor...171

Yoongi le dio un codazo y Jungkook tomo aire.— No.128

[…]8

— ¿En serio no les vas dar el gusto?— cuestionó Yoongi.

— ¿De qué hablas?— preguntó confuso Jungkook.

Yoongi iba a hablar pero el ruido de la máquina de coser de Jungkook


interrumpió.

— Me refiero a que-

La ruidosa máquina volvió a interrumpir.

— A que-

P á g i n a 66 | 329
Y como una segunda vez, también una tercera.

— ¡Jungkook! ¡tu puta máquina me molesta!— le grito tapándose los


oídos.40

— ¡No es mi puta culpa que me hayas comprometido a hacer tres trajes de


mierda para antes del mes que viene, imbécil!— exclamó cabreado.10

— Touché, bueno, como iba, quiero hacer un experimento social y necesito


que le des los chocolates a Jimin y a Taehyung.71

— De ninguna forma.— le dijo con el ceño fruncido y volvió la vista a la


ropa.1

— Vanga, man, no seas así.— rogó.44

— Que no, Yoongi, eso es demasiado cursi, me da asco.

— ¿O quieres decir vergüenza?

Jungkook se sonrojo por milésima vez en el día.— Quizás.

— Todos sabemos que te encantan las cosas cursis, además.— añadió.1

— No es cierto.

— Apuesto que si viniese Jimin con un ramo enorme de flores para ti,
olvidarías por completo a Tae.52

— Ojalá fuera así de fácil.— se quejó.

— A lo importante, necesito que lo hagas.— volvió a pedir Yoongi.

— Si tengo tiempo, lo hare.— concluyó.

12

P á g i n a 67 | 329
— ¿Qué haces en mi casa?— le preguntó a su amigo desde el umbral de la
puerta.5

— Vengo a ayudarte con los chocolates, he traído todo lo que necesitas.—


explicó.51

— Que pesado eres, pasa.— Jungkook se dio la vuelta para ir a la cocina y


Yoongi paso detrás de él.3

— ¿Te imaginas que carita pondrá Namjoon cuando le lleve esto en San
Valentin?74

— ¡Por eso estás tan pesado con esto! No sabes hacerlo y por eso
recurriste a mí ¿no?43

Yoongi se quedo en silencio unos segundos y asintió haciendo a Jungkook


suspirar.4

— Venga, antes de que me arrepienta de dejarte entrar a mi cocina.5

[…]2

Yoongi y Jungkook estuvieron haciendo los chocolates durante toda la tarde,


Jungkook hacía todo diligentemente y Yoongi se corto cinco veces y se
quemó tres.143

— Y esta es la última.— comentó Jungkook terminando de poner las tiritas


en las heridas de los dedos de Yoongi.9

— Gracias, Kookie.20

Jungkook le sonrió y se levantó para mirar las bolsas de chocolates.

— Ahora sólo falta ponerle el nombre a la etiquetas.

P á g i n a 68 | 329
Yoongi escribió lentamente el destinatario de su regalo y Jungkook también.

El día de San Valentin llego y Jungkook estuvo nervioso durante todo el día
por causa de eso, siempre que veía a Jimin o Taehyung los evitaba, así,
hasta el final del día.

Jungkook observaba detenidamente como su sonrojado amigo entregaba


sus bolsa al chico grande de primero.9

— Incluso Yoongi se puedo ver lindo haciendo ese tipo de cosas...63

— ¿Cierto?

Jungkook dio un brinco del susto.— ¡Jimin! deja de hacer eso.8

— Lo siento, pero en realidad tú eres el despistado, hyung.

Jimin fue callado porque Jungkook le puso una bolsa de bombones delante
de su cara, Jimin se sonrojo y las cogió lentamente aún procesando la
información.

— ¿Para mí?

— NoO, pone "Jimin" en la etiqueta porque son para mi abuela, idiota.—


bufo el azabache, se estaba tragando toda su vergüenza para darle eso y el
rubio decía tonterías.94

Antes de que dijese algo más Jimin empezó a llorar y asusto mucho a
Jungkook.— Mierda, ¿por qué lloras?63

— E' que estanbonito quesnifff hayas hechoestOsniff.213

Jimin le dio un beso en la mejilla y se fue sin decir nada más dejando a un
confuso Jungkook ahí.23

P á g i n a 69 | 329
— Ese chico tiene que ir a un médico.12

— ¿Por qué se ha ido llorando Jimin?

Jungkook abrió los ojos en grande y se dio la vuelta a ver al dueño de esa
grave voz y éste también lo miro y sonrió.

— Feliz San Valentin, Jungkookie hyung.

— Hm... sí, feliz día... — Jungkook jugo con la bolsa que tenía entre sus
manos haciendo ruido esperando que el castaño se diese cuenta por sí
mismo, pero este estaba en su mundo.— ¿Taeyeon te ha dado algo?

Taehyung se mordió el labio y desvió la mirada.— No.8

— Ya veo...

Se quedaron en silencio durante unos minutos, Jungkook se maldecía


internamente porque estaba sin habla de los nervios.

— ¡Bueno, entonces, toma! — Jungkook tiro la bolsa de chocolates a la cara


de Taehyung y éste lo cogió gracias a sus rápidos reflejos.55

— ¡Chocolates! Jungkookie hyung ¿es para mí?71

Pero cuando alzo la vista, el pelinegro ya se había alejado lo suficiente de


él.3

Taehyung suspiro con una sonrisa y se apoyo en la pared mirando la


etiqueta donde ponía "Taehyung".64

[…]2

Jungkook llegaba corriendo a su casa aún con la cara roja como un tomate y
el cuerpo temblando por los nervios acumulados y su baja condición física.14

— Eres tan idiota Jeon Jungkook... — se dijo aún jadeando.

P á g i n a 70 | 329
Luego sonrió porque al menos había entregado lo que quería.

— Disculpe, ¿es usted Jeon Jungkook?— un chico con su uniforme de


cartero le habló y él le sonrió.35

— Sí, soy yo.

— Le ha llegado dos paquetes, firme aquí, por favor.158

El cartero le dio un bolígrafo y con duda, éste firmo.

Aunque yo no he pedido nada...

Cuatro hombres aparecieron trayendo dos enormes osos de peluche, que le


sacaban a Jungkook, por lo menos cinco cabezas.225

— Pero qué mierda...

Un momento...

Conejo negro, con flores, manchas azules y ojos gris y rosas...57

Esto sólo puede ser obra de derroche de dinero de...

— ¡Taehyung y Jimin, os voy a matar!

10: Enfermo. 1/2


— Es el tercer día que Taehyung falta a clase...— murmuro Jungkook
mirando la hoja de faltas de segundo.31

— ¿Has hablado con él? — le preguntó Yoongi.

— No contesta a los mensajes, así que no, estoy un poco, pero sólo un
poquito preocupado...— le dijo ganándose un gesto de obviedad de Yoongi.

P á g i n a 71 | 329
— Mi traductor de tsunderismo de Jungkooks me está diciendo que te estás
muriendo de ansiedad por saber lo que le pasa.— le señaló el ahora
rubio.145

— No digas tonterías.

— ¿Y por qué no se lo preguntas a Taeyeon? ¿la-novia-no-novia de


Taehyung?— Yoongi abrió los ojos en grande al caer en cuenta de lo que
había dicho y miro a Jungkook para disculparse pero el pelinegro tenía la
mirada perdida.— Mierda, ¿por qué soy así?43

— No te preocupes Yoongi, cuanto antes me entre en la cabeza eso, más


fácil será mi vida.— trato de aliviarlo.— Así que debería preguntárselo...

Jungkook localizó a Taeyeon hablando con sus amigas y se sonrojó un poco


a causa de la vergüenza, básicamente esa chica no le caía bien, porque le
estaba arruinando la vida amorosa y además pasaba de Taehyung y eso
sólo lo hacía enfadar.

— Sólo hablale y demuestrale quien manda de paso.— le susurró el rubio al


pelinegro.

— Entendido.— le contestó determinado.

El pelinegro tomo aire y puso una expresión seria mientras se acercaba


peligrosamente al grupo de chicas.

— Oye, tú, Taeyeon.— exclamó Jungkook con los brazos cruzados ganando
la mirada asustada de la chica por el tono que había usado. Yoongi se
golpeó la frente con el palma de la mano.98

— Me refería a demostrarle quien manda en ternura... fracaso total.—


murmuro Yoongi.58

P á g i n a 72 | 329
— Necesito saber todo lo que sepas de Taehyung.— dijo demandante, a
pesar de que Jungkook sólo superaba a Taeyeon por unos cortos
centímetros, cuando estaba en ese modo, se veía intimidante.

— ¿T-Taehyung? ¿p-por qué lo preguntas?— cuestionó temblorosa


Taeyeon.

Esa pregunta descolocó a Jungkook, que ahora tenía una expresión


confusa.

— ¿Qué? ha faltado tres días, supuse que tú sabrías lo que le pasaba.

— Ah~.— soltó una risa linda Taeyeon que Jungkook detestó.— Lo siento
Jungkook oppa, no me había percatado de que había faltado.338

Pero...

— ¿Qué? ¿qué no te habías percatado?— cuestionó para comprobar si


realmente había oído bien.

— Esto va a acabar mal...— susurro Yoongi.

— E-eh, sí, es que b-bueno, Taehyung....

— Paso, no quiero oírte, eres...—Jungkook se fue sin completar la frase y


dándole la espalda a la chica para llevarse por el brazo a Yoongi.9

— Owowowow, ¡tendrías que haber visto que cara se le ha quedado!— dijo


riéndose Yoongi siendo tirando por Jungkook.9

— No quiero ver su cara nunca más, es que, Taehyung está detrás de ella
como un perrito todos los días ¿y qué dice ella? "ni mi hi pircitidi di si
prisincia", la odio.129

Jungkook estaba que soltaba humo por las orejas.

P á g i n a 73 | 329
— ¿Y qué es eso de "Jungkook oppa"? no soy su oppa, maldita sea.— el
pelinegro no paraba de quejarse mientras Yoongi oía todo con
deteniemiento dándole la razón a su amigo.153

Cuando llegaron al salón del club, Jungkook seguía indignado y Yoongi


estaba en su fase pensadora.1

— ¡Ya sé!— exclamó el rubio.

— ¿Ya sabes qué?— preguntó desinteresado Jungkook.

— No preguntes cómo, pero sé donde vive Taehyung.— le susurró Yoongi.34

— Yo también.— comentó sutil Jungkook.119

— ...74

— ...74

— Qué56

— Qué.207

— Bueno, voy a ignorar eso, como iba, ¿por qué no vas a ver lo que le
pasa?— propusó el rubio.1

— ¿Eso no es un poco acosador?21

— ¿Sabes qué cuando un amigo falta a clase lo demás amigos van a


visitarlo? y si no te convence, pues una buena excusa y darle los apuntes de
los días donde ha faltado.11

— Pero no voy a su clase, ni siquiera voy a mi clase yo.— le dijo otra pega51

— Y aquí es donde entra Jimin.— dijo con una sonrisa Yoongi.

— ¿Dónde entro yo?— cuestionó una voz aguda por la puerta.213

P á g i n a 74 | 329
— ¡Jimin, te he dicho miles de veces que dejes de oír mis conversaciones!—
le gritó Jungkook tirándole un cuaderno a la cara, el cual recibió con un
quejido.5

— ¡No es así! Venía pasando y la puerta estaba medio abierta y mientras


iba a clase pues oí la frase de Yoongi hyung en la cual me nombraba.—
explicó brevemente Jimin.65

Jungkook había perdido la cuenta de cuantas excusas le había metido


Jimin.3

— Tú tienes los apuntes de las clases para dárselos a Taehyung ¿cierto?


damelos.— exigió Jungkook.

— Sí ¿por? ¿estás planeado ir a visitarlo? te acompaño.

— ¡Oye, Jimin, deja de joder un rato e interrumpir mis planes de cupido


perfectos!— exclamó Yoongi con el ceño fruncido.51

— ¿Cupido?— Jimin miro confuso a Jungkook y luego entendió.— OoH,


claro.78

Jimin con una sonrisa afligida sacó los apuntes de Taehyung y se los
entregó a Jungkook guiñándole el ojo.— No me agrada que tú, la persona
que me gusta, vaya a estar sólo con otro chico pero como te quiero tanto
como para que seas feliz incluso si me estoy muriendo de celos, te los
daré.537

Jungkook se quedo quieto en su sitio mientras Jimin salía.

— Oyeme, Kook, si no te lo quedas tú, lo hago yo.— le dijo sorprendido


Yoongi.301

— ...¿A ti no te gustaba Namjoon?— cuestionó con el ceño fruncido


Jungkook.

P á g i n a 75 | 329
— Namjoon y yo estamos a favor del poliamor.
578

Jungkook se encontraba de delante de el edificio de Taehyung. Era en


forma y se notaba que era moderna, Jungkook estaba intimidado de ver a
todas esas personas en elegante y cara ropa y él con su sudadera azul
pastel que le quedaba grande con sus pantalones negros y sus desgastadas
adidas.56

Jungkook aprovecho que una pareja salía para entrar él en el portal, que era
aún más bonito y elegante que la vista exterior.

De repente tengo muchas ganas de tener una pareja millonaria.156

Se entretuvo hasta llegar al piso noveno, donde residía Taehyung.1

Delante de su puerta, estuvo debatiendo internamente si darle al timbre o


dar la vuelta e irse.
Sin pensarlo, Jungkook le dio determinadamente al timbre.

Al notar que aunque oía música en el apartamento no atendían, infló sus


mejillas y pulso frenéticamente el timbre siguiendo el compás de la canción
sólo por molestar.54

— Ahg, qué demonios quieres, pa-.— la rasposa y cansada voz de


Taehyung apareció y calló rápidamente.— ¿Jungkook? ¿qué haces aquí?

Jungkook analizó la apariencia de Taehyung, estaba sudando, despeinado,


tenía toda la cara roja y los ojos llorosos.8

— ¿Qué te pasa? Parece como si fueras a morir pronto.

P á g i n a 76 | 329
— Creo que estoy a punto de hacerlo.— dijo medio afónico mientras se
acercaba a Jungkook pero terminó fatigado y se apoyo rápidamente en
Jungkook antes de caer.35

Mientras tanto, el corazón de Jungkook estaba a punto de salirse del tórax.2

Un momento.

¿Este no es el típico momento de un manga donde el chico enfermose cae e


ncima de la chica y al final termina la chica diciendo "estásbastante mal *no
mbre del protagonista* no te puedo dejar así, dejaque te cuide"?175

— Estás bastante mal, al parecer, Taehyung, no te puedo dejar así, deja


que te cuide.— dijo Jungkook separando a Taehyung de él y ayudándolo a
entrar de nuevo en su casa.630

Taehyung asintió a punto de desmayarse mientras iba siendo acompañado


de Jungkook.

— ¿Por qué hace tanto calor aquí?— preguntó Jungkook sofocado dejando
a Taehyung en sofá, recostado.7

— Tenía mucho frío y puse la calefacción.— contestó con la voz a penas


audible.

Jungkook sospechó y toco la frente del castaño, lo apartó rápidamente.—


Eres un idiota ¿lo sabes? estás ardiendo en fiebre y pones la calefacción al
máximo.26

Jungkook fue al termostato y bajo la temperatura.

El pelinegro miro el panorama.

Un Taehyung casi muriendo y la casa hecha uno auténtico desastre.

— ¿Por dónde debería empezar?

P á g i n a 77 | 329
11: Enfermo.
— Si te sentías tan mal ¿por qué no has ido al médico?

Jungkook oyó el pitido del termómetro y a movimientos lentos, Taehyung se


lo paso. La pequeña pantalla marcaba "39'7 C°"— Estás muriendo.151

Taehyung soltó una risa débil.— Creo que ya tenía la sospecha.

— ¿Dónde guardas los medicamentos?—preguntó mirando cada rincón del


salón

— No tengo medicamentos.— respondió adormilado.

Jungkook lo miro con confusión.— ¿Qué? ¿por qué?

Taehyung sólo se encogió de hombros y el pelinegro suspiró.

— Iré a comprarlas, duermete un rato.— dijo Jungkook con voz


demandante.

— Estoy bien, Jungkookie hyung, no tienes porqué hacer esto.— Dicho eso,
Taehyung se tumbó en el sofá.— En unos días volveré a clases.

— Lo hago porque quiero, no seas pesado.— refunfuño Jungkook y antes


de que el contrario abriese la boca, preguntó.— ¿Dónde están las llaves?4

— Aquí.— el castaño levantó su mano y Jungkook lo miro con una


interrogación. — mi anillo es la llave.170

— Ya veo...

Se quedaron en silencio y Taehyung susupiro, sacándose el anillo del dedo


suavemente y extendiendo la mano para dárselo a su mayor.

— Sólo ponlo delante del escáner y abrirá la puerta automáticamente.45

P á g i n a 78 | 329
Jungkook sonrió dulcemente y cogió el anillo, que tenía una piedra negra de
decoración.

Cuando el pelinegro se disponía a irse, la voz ronca del menor lo


interrumpió.— Jungkook.

— ¿Qué?12

— No tardes mucho ¿vale? No me gusta estar solo...— dijo Taehyung en


voz baja tapándose con la manta hasta la cabeza.106

Y Jungkook asintió con una pequeña sonrisa de ternura y salió rápidamente


del apartamento.

[…]
13

Jungkook paso su dedo por delante del escaner y la puerta se abrió, tal y
como le dijo Taehyung.

— Increíble, mi pomo está hecho de madera y a punto de quebrarse.213

Un chico soltó una risa pequeña de burla por el comentario del pelinegro y
éste se sonrojó de la vergüenza.

— Debería callarme los comentarios de pobre...— susurró avanzando por el


pasillo.78

Subió al ascensor y tenía suerte de no haber ninguno de esas personas es


traje o llevando ropa de marca.

Al llegar , hizo lo mismo que con el portal, abriendo la puerta.

P á g i n a 79 | 329
Esto es genial.
36

Pensó con una sonrisa y se hizo paso en el gran apartamento


sigilosamente, por si Taehyung estaba dormido y cuando entro al salón, vio
a Taehyung tumbado viendo la televisión.

— ¡Tae, te dije que durmieras!

El castaño se sobresalto porque no había oído a Jungkook entrar.

— ¡En mi defensa diré que me acabo de despertar!— saco las manos de la


manta y las levantó.62

— Hmp... da igual.— Jungkook puso la pequeña bolsita en la mesa y otra


más grande en el suelo.34

— ¿Qué has comprado? ¿cuánto ha costado? te lo pagaré.

— Ay, Tae, callate un rato, no hace falta que me devuelvas nada, hago esto
porque quiero.— le explicó un poco sonrosado entregándole una pastilla y
una botella de agua.— Toma esto, te bajará la fiebre.38

Taehyung esbozó una sonrisa rara y tomo lo que le había ofrecido


Jungkook.

— ¿Has comido algo?— cuestionó el pelinegro.

— Sí.— contestó.

— ¿El qué?

— Comida.— respondió obvio.76

Jungkook puso los ojos en blanco cruzándose de brazos.

— Comida instantánea de esas.— le dijo con una sonrisa inocente.

P á g i n a 80 | 329
— Básicamente, mierda.— comentó serio.67

El más alto asintió avergonzado.

— Te haré algo de comer.— dijo determinado cogiendo de nuevo la bolsa


grande que había dejado en el suelo.

— Pero hyun-3

— Si vas a decir que no hace falta que lo haga, guarda silencio.— cortó
Jungkook.

Taehyung asintió llevándose la mano a la boca para no hablar y Jungkook


se rió por eso.

— La cocina está al fondo.18

Jungkook hizo un gesto de aprobación y se marchó. Al dejar las bolsas en la


mesa de la gran cocina, su móvil vibró, era un mensaje de Yoongi.

Lil meow meow.152

<( ´ρ')>┌┛┌┛60

¿Y qué le pasaba al payaso?

Kookaracha.417

Te he dicho que no le llames así

¿quieres que te mate?2

Lil meow meow.

JAJAJAJAHSSJJSHAJAKJS68

sólo me gusta molestar.

Ya en serio ¿qué le pasa?

P á g i n a 81 | 329
Kookaracha.13

눈_눈256

Está enfermo y me estoy quedando en su casa para cuidarlo.

Lil meow meow.

He visto muchos vídeos porno para saber como terminará esto.221

Kookaracha.

¿Te han dicho que eres asqueroso?1

Lil meow meow.

Sí.

Lil meow meow te ha enviado una imagen.1

216

Kookaracha.

Qué demonios, Yoongi.

Lil meow meow.

Tienes que estar vestido así ¿no?85

es lo mínimo que requiere un trabajo como cuidar al chico enfermo que te


gusta.

Revisa por si tiene revistas porno debajo de su cama.5

Ya te imagine así judjujusus43

Kookaracha.

¿Por qué no vas a vestir con tus trajes fetichistas a Namjoon?

P á g i n a 82 | 329
Y

no veo a Taehyung como el tipo de chicos que ven esas cosas.45

Lil meow meow.

Taehyung tiene cara de consumir porno todos los días.134

¿Qué te hace pensar que no lo he hecho ya?2

Kookaracha.

No quiero entrar en detalles.

Pero eres un pedófilo.


4

Jungkook decidió ignorar al raro de su mejor amigo y se puso a cocinar.

— ¿Qué le gustará a Taehyung? Supongo que algo de carne estará bien.68

Jungkook saco todo lo que había comprado y lo colocó en los lugares que
creyó conveniente, ya que, Taehyung tenía prácticamente la casa vacía.

Me pregunto por qué...8

Sólo mantuvo en la mesa lo que iba a usar y se puso manos a la obra.

/) /)
(。>\\<) ♡

P á g i n a 83 | 329
Jungkook llevo con cuidado, en una bandeja que encontró por ahí, el plato
de comida. Al final había decidido cocinar Japchae, un plato sencillo de
pasta para no tardar mucho y un zumo al lado con los medicamentos que
debía tomar.8

Lo puso en la mesa y la arrastro tratando de no hacer mucho ruido hacia


donde estaba Taehyung acostado durmiendo.

— Tae, ¡despierta!— exclamó asustando al llamado que le irguió en su sitio


rápidamente.3

— Kookie hyung, estoy enfermo ¿no podrías ser algo más dulce?— dijo
cómico Taehyung y luego miro sorprendido la comida que había en la
mesa.— ¡whao! ¿es para mí?18

Jungkook asintió avergonzado.— ¿Quieres que sea más dulce contigo?—


murmuró.1

— No te he oído, hyung ¿puedes repetirlo?1

Jungkook cogió los palillos con determinación antes que Taehyung y enrolló
los fideos entre estos, suspiro para quitarse lo nervios y acerco la comida a
su menor.— Abre la boca.53

Taehyung tardo unos largos segundos en procesar lo que estaba haciendo


Jungkook y se sonrojo fuertemente sonriendo.— Jungkookie, sé comer
solo.32

— Abre la boca o te la abro yo a puñetazos.— Jungkook estaba tan nervioso


que recurría a la agresividad.388

Aunque dijese esas palabras, Taehyung sólo veía a un avergonzado y


sonrojado Jungkook esperando a darle la comida, así que le resto
importancia y abrió la boca. Jungkook precedió a llevar los palillos a su boca
para que el castaño puediese comer.

P á g i n a 84 | 329
— Jungkook ¡esto está buenisimo! quien se case contigo tendrá mucha
suerte.— comentó alegre.219

— Gracias, Taehyung...— Siguió dando de comer al castaño, que no


comento nada más y se mantuvo mirando a Jungkook hasta que el plato se
termino.1

— Ya es tarde, será mejor que me vaya.— dijo Jungkook levantándose de


su sitio al lado de Taehyung.— Procura tomar tus medicinas.8

No puedo creer que haya hecho algo tan vergonzoso.

— ¡No! espera...

Taehyung no deseaba quedarse solo en su apartamento aún así que


mientras Jungkook lo miraba confuso, pensó en una excusa.— Y-yo, tengo
una camisa rota ¿me la coses?146

Jungkook suspiro, decepcionado pero no sorprendido.— Está bien.46

Taehyung fue rápidamente a su cuarto y le trajo su camisa, que tenía todos


los botones descosidos.4

— Pensé que te había dicho que quemases todas esas camisas a rayas.—
comentó Jungkook cogiendo la camisa.

— Y-yo... puedo explicarlo...— titubeó Taehyung, asustado.3

— Tae, es broma, me da igual la ropa que uses.— le dijo Jungkook con una
sonrisa mientras cogía una aguja de la cesta que le había dado Taehyung.2

Taehyung asintió. A veces, Jungkook lo confundía, cuando siempre era tan


agresivo y frío con él pero ahora es como si cada palabra que soltase
entrase con una calidez intensa a su corazón.

— Deberías darte una ducha, apestas.

P á g i n a 85 | 329
Y ahí está el Jungkook que conocía.

— Está bien, comandante.— le dijo sarcástico y dicho eso se fue a su cuarto


a coger su pijama de repuesto para ducharse.2

Mientras tanto, Jungkook cosía cuidadosamente los botones de la camisa


de Taehyung.

Paro un momento a admirar el salón de el apartamento y luego llevo la vista


hacia lo que estaba haciendo.

— Esto es... como si fueses una pareja de recién casados.— comento


animado soltando una risita.— Demonios, Jungkook, no, soy tan cursi que
me estoy dando asco.86

El hemisferio izquierdo y el derecho de Jungkook estaban peleando.26

— Listo.

Una vez puesto todos los botones, Jungkook admiro su trabajo hecho.
Y rápidamente se lo puso.

QUÉ ESTOY HACIENDOOO.72

Una vez puesto la camisa de Taehyung fue al espejo de el pasillo para


mirarse.

a Jungkook no le gustaba porque la camisa era verde con rayas moradas.—


Que feo.
Y también porque le quedaba grande.30

Jungkook fue al salón y se quito rápidamente la camisa, lo menos que


quería es que Taehyung lo viese con algo suyo puesto.

Oyó el sonido de la puerta abriéndose y supuso que Taehyung ya había


salido.
Así, hizo aparición en el salón con el pelo mojado.

P á g i n a 86 | 329
— Ya te he arreglado esto.— le extendió la camisa doblada perfectamente a
Taehyung.— Ahora me voy.1

Jungkook cogió su mochila del suelo rápidamente y se propuso a marcharse


pero una mano en su muñeca lo detuvo.

— Espera, Jungkook.

— Tengo cosas que hacer y es tarde, Tae...— dijo Jungkook mirando su


reloj.

— Por favor, quedate.— le dijo sin titubear mirándolo a los ojos y haciendo
temblar a Jungkook.22

— T-tae ¿por qué me pides eso? Ya estás mejor, no hace falta que me
quede.— dijo con la voz temblorosa quedándose estático en su sitio.

— No me gusta estar solo aquí, sólo será esta noche...— dijo con la voz
apagada mirando la reacción del pelinegro.41

El ambiente se había vuelto tenso y los dos chicos se quedaron en silencio.

— Vivo solo aquí, odio la soledad.— comenzó a explicar Taehyung bajando


la vista hacia la mano de Jungkook que tenía su anillo y llave de la casa aún
puesto.— No me molestaba y ya me había acostumbrado, pero viniste tú, a
cuidarme y a hacer este ambiente más ruidoso y activo que recordé lo
mucho que odio estar solo.147

Jungkook se quedo en silencio algunos minutos.— ¿Por qué no avisas a tu


familia y le dices eso?

— Soy la oveja negra de la familia, realmente soy una carga, por eso me
regalaron este apartamento, para que esté en otro lugar.— La voz de
Taehyung se fue apagando a medida que hablaba.89

P á g i n a 87 | 329
— Tae... Lo haría, pero no he traído mis libros para mañana y no tengo
ropa...— el pelinegro busco excusas.

— Está bien, te puedo dejar ropa y Yoongi te puede pasar fotos de los los
libros ¿no?— dijo rápidamente el más alto.

— Taehyung, estás siendo egoísta.— sentenció Jungkook haciendo callar al


nombrado.— Si he dicho que no, es porque no.51

Porque si
sigo quedándome a tu lado, voy a seguir enamorándomede ti y no quiero he
rirme más.169

— Supongo que tienes razón...

— ¿Por qué no se lo pides a Taeyeon?— ofreció el pelinegro.12

— Me ha dicho que no ¿por qué crees que te lo estoy pidiendo?— dijo


bromeando sin gracia para Jungkook, que realmente le dolieron esas
palabras.
277

No quiero ser tu segundo plato.


73

— Entonces, si ella te hubiese dicho que sí, a mí no me lo hubieras pedido


¿eso es lo que me estás tratando de decir?— Jungkook se soltó con un
movimiento bruto del agarre de Taehyung.— ¿Qué voy a seguir siendo tu
segunda opción siempre?107

— Jungkook ¿qué te pasa?— Taehyung cuestionó sorprendido mirando con


confusión al mayor.1

P á g i n a 88 | 329
— ¡Tú eres lo que me pasa!— Y sin más, algunas lágrimas se escurrieron
por las mejillas rojas de furia de Jungkook.— ¡Porque soy yo quien se está
esforzando para gustarte!411

— Jungkook ¿qu-?1

— ¡Me gustas, maldita sea! ¡Te quiero tanto y odio eso!— a pesar de que
Jungkook secaba sus lágrimas con las mangas de su suéter, seguían
cayendo de sus ojos y cada ve con más abundancia.— ¡O-odio estar dando
lo mejor de mí para que me mires y tú sólo tengas ojos para Taeyeon! ¡Y
odio que a mí me gustes... me gustes tanto para aceptarte tal y como eres y
que quieras cambiar para g-gustarle superficialmente a otra
per...sona...ugh...— Taehyung se quedo en silencio por la agresiva
declaración de Jungkook.214

— Jungkook, yo...— trato de llevar una mano al hombro de el chico que


lloraba delante suya, pero este se aparato rápidamente de él, evitando el
contacto.1

— Me voy.— dijo entre hipidos, ldando la vuelta corriendo para salir de la


casa del castaño.75

Y corrió por todo el pasillo viendo a la gente mirándole raro, pero ahora eso
no le importaba.2

Acaba de cagarla.
Su amistad con Taehyung, su integridad emocional...
Y corrió, hasta su casa para poder hundirse en su cama y arrepentirse de
todo lo hecho y llorar.

28

Kookaracha.26

P á g i n a 89 | 329
Yoongi.

Lil meow meow.

Qué.28

Kookaracha.

Acabo de confesarme a Taehyung.1

Lil meow meow

Lil meow meow te ha enviado una imagen.

534

QUÉ HAS HECHO QUÉ.

P á g i n a 90 | 329
12: Jungkook es un chico guay.
— ¡Jungkook!— el grito de una voz grave hizo presencia en el aula del club
de artes seguido de un ataque de tos.— Uhg, no debí haber gritado sin
haberme recuperado aún.33

Yoongi giro la cebeza con aburrimiento y un poco hastiado porque estaba


pintando relajadamente y el grito de Taehyung lo había descolocado.

— Jungkook no está, no ha venido a clases.— dijo contundentemente y


volvió a posar su vista en el lienzo.— Le habrás pegado tus gérmenes.1

— No fue eso...

Yoongi sólo asintió soltando un "¿hmm?" sabiendo a lo que se refería el


menor.

— Tú eres su mejor amigo, debes saber donde vive.— cuestionó


indirectamente el castaño.11

— Lo sé, ciertamente.— le contestó con un tono aburrido.

— ¿Me puedes decir su dirección? Por favor.— le pidió Taehyung juntando


sus dos manos en seña de ruego.8

Yoongi suspiró y volvió la vista al más alto.— Tae, no tengo nada en contra
de ti pero... como que no es el momento ideal para que Jungkook vea tu
cara. ¿Qué le vas a decir? ¿que llevas saliendo con Taeyeon unas semanas
y no se lo has dicho justo cuando ayer se te declaró?298

— Justo eso, quería aclararselo... no quiero ser malo ni nada de eso, es sólo
que...

— No hace falta, incluso si no se lo has dicho, Jungkook no es tonto y sabe


de sobra que jamás te vas a fijar en él.— dijo en un suspiro.

P á g i n a 91 | 329
Taehyung miró al suelo aparentemente abatido por las palabras de el
mayor.

— Así que será mejor que toméis distancia porque no quiero que Jungkook
acabe destrozado por ti.— le aconsejó frunciendo levemente el ceño.85

— Lo siento... — dijo Taehyung con voz pesada sin levantar la vista.

— No lo sientas. No es tu culpa.— Yoongi le sonrió con empatia tratando de


hacerlo sentir mejor. — Simplemente no podemos controlar de quien nos
enamoramos.86

Taehyung asintió aún pensativo.

— Ahora será mejor que te vayas, tus clases van a empezar en unos
minutos.

El castaño asintió y salió de ese aula arrastrando los pies y dándole una
mirada de reojo, sabiendo que, quizás, no volvería a entrar de nuevo allí,
hasta dentro de un tiempo.

— Jungkook, ¿cuándo vas a dejar de morir?— cuestionó Yoongi sentado en


el suelo de la habitación del nombrado mientras que éste estaba hecho bola
debajo de su manta en la cama.47

— Yo también quiero saberlo.— le dijo sin gracia y con la voz cansada.

El rubio hizo un puchero y se levantó a destapar suavemente a Jungkook


pero éste agarró los extremos de la manta y lo estiró, evitando que Yoongi lo
destapase.

P á g i n a 92 | 329
— AAAAH, maldita sea, Jungkook ¡no te puedes quedar el resto de tu vida
en tu cama!— Yoongi siguió tirando de la tela que cubría a Jungkook
mientras este hacia lo mismo.27

— ¡¿Y quién dice que no puedo?! ¡DEJA DE TIRAR, ME VAS A ROMPER


LA MANTA!— le grito a la vez que le metía una patada en el estómago a su
amigo que rápidamente se tiro al suelo devastado.39

— Eres más terco que una mula.— dijo Yoongi tratando de recuperar el aire
sobandose la tripa.26

— Mira quien fue a hablar.— Jungkook indignado termino destapándose


para mirar a Yoongi.

Yoongi llevo la vista hacia su amigo, tenía las mejillas rojas al igual que la
nariz y los ojos y el pelo despeinado y descuidado, sus párpados estaban
levemente hinchados, estaba demacrado y no acostumbraba a ver a
Jungkook con esa apariencia, pues él era muy delicado con eso.1

— Ya sé que estoy feito, no me mires así... — se quejó Jungkook al ver que


Yoongi no despegaba la mirada de él.214

— Un momento ¿acabas de usar un diminutivo?— cuestionó el rubio con los


ojos expresando notable sorpresa.39

Jungkook lo miró con el ceño fruncido y juzgándolo para luego suspirar.

— Yoongi, odio estar así.

— ¿Así cómo?

— Llevo la misma ropa de ayer y mi cara da asco, soy aburrido, es normal


que Taehyung no se haya fijado en mí.— dijo Jungkook llevándose las
manos a la frente y agachando la cabeza para apoyar la cabeza en sus
palmas y cubrirse.68

P á g i n a 93 | 329
Yoongi lo miro entrecerrando los ojos y pensativo mirando a su decaído
amigo y analizando sus palabras.

— ¡Ya sé!— exclamó Yoongi con una sonrisa triunfadora asustando a


Jungkook.1

— ¿Ya sabes qué?— cuestionó desinteresado Jungkook.

— Un cambio de look.— añadió Yoongi ilusionado levantándose del suelo


para coger su teléfono.— En las películas siempre funciona.75

Jungkook lo miro con desagrado y aburrimiento.

— No quiero teñirme el pelo de azul o rojo.— comentó.74

— Ya sé que tu paleta de colores es una mierda comparado con el mío,


tranquilo, soy un genio y he pensado en todo en menos de un segundo.—
Tecleó algo en su pantalla y rápidamete guardo de nuevo el teléfono en si
bolsillo.— Y sé quien es una experta en cambios de look.

— ¿Lisa, a que sí?— cuestionó con tono obvio.2

— ¡Exacto!

Jungkook se golpeó la frente con la palma.

— Ahora esto es un ¡vistiendo a Jungkook!— exclamó el rubio mirando al


por ahora pelinegro.152

— Menudo título de mierda.— Jungkook se volvió a cubrir con la manta.131

— Callate y si tú no te vas a emocionar lo hago yo.— se quejó Yoongi.


29

[…]

P á g i n a 94 | 329
— Linda habitación, Kookie, olvidaba que te encantaban las muñecas de
acción.— dijo Lisa sonriente tocando el pelo de una de ellas.

— Son de colección y no las toques, por favor.— dijo Jungkook con una
sonrisa amable forzada mientras cogía el dedo de Lisa y lo retiraba de su
preciada muñeca de acción.28

Lisa asintió con una sonrisa determinada.

Aunque Lisa y Jungkook eran como un perro y un gato, llevaban juntos


desde que eran pequeños junto con Yoongi. Cuando entraron a la
preparatoria, Lisa decidió ser una mariposa social mientras que Jungkook un
asocial. Por lo que Lisa es amiga de todo su instituto y especialmente de
Taehyung y Jimin.31

— Bueno, he diseñado tres peinados en base a tus gustos por los colores
pasteles. Yoongi me ha ayudado a dibujarlos.— dijo emocionado Lisa
entregándole el papel con los dibujos a Jungkook.3

— Atento.— comentó Yoongi.

439

Jungkook no tardó en soltar una gran carcajada.

— ¿Y se supone que tú eres estudiantes de artes?— preguntó entre risa y


risa a Yoongi.2

— Callate, era un boceto rápido y además no me gusta la ilustración.—


Yoongi frunció el ceño cruzándose de brazos.4

— Bueno, como iba.— exclamó Lisa.

P á g i n a 95 | 329
¿Por que siento esta escena tan familiar?
55

— El primer diseño.— señaló la rubia al dibujo de la izquierda.— es


básicamente decolarte el pelo y dejartelo castaño y luego ponerte mechas
rosas.126

Jungkook asintió pensativo.

— Este.— señaló ahora al dibujo de el medio.— Me inspire en un ulzzang


que se parecía a ti así que pensé que te podría quedar bien...1

— ¿Qué rayos con el dibujo de la derecha?— cuestionó frunciendo el ceño


señalando al dibujo de él con el pelo largo.

— Fue idea de Yoongi, dijo que a lo mejor te interesaba ponerte una peluca
y vestirte de chica.— Lisa se encogió de hombros y Jungkook miro a Yoongi
negando con los ojos entrecerrados y el rubio soltó un bufido.132

— Jungkook, realmente eres un aburrido. Tenía hasta la falda preparada.—


Dijo haciendo un puchero.42

— ¿Por qué no vistes con eso a Namjoon mejor?— ofreció Lisa.

— ¡Pero que buena idea!— exclamó el rubio con una sonrisa.20

— Es un fetichista de primera.— susurró Jungkook a Lisa.33

— Lo sé y temo por Namjoonie.15

— No soy un fetichista y no tienes porque temer, te aseguro que a él le


encanta hacer eso.— susurró también Yoongi.16

— No quiero entrar en detalles pero deja de hacer tus perversiones con mi


hermano pequeño. — le regañó Lisa.289

P á g i n a 96 | 329
— No hago nada pervertido, sólo pienso en la belleza incomprendida de que
un chico se vista con delicadas prendas femeninas ya que es lo que el
mundo quiere y debe ver y lo que tengo como cometido dibujar como
amante del arte y sus derivados. Y además aprovecho que Joonie es mi
musa en todos los sentidos.— explicó orgulloso Yoongi llevando la mano al
corazón.61

— Fetichista, en otras palabras.— comentó Jungkook.

— Para que mentirte pero ¿a que ha sonado bien como lo he dicho? — le


respondió Yoongi haciendo que Jungkook y Lisa soltasen una carcajada.66

Al día siguiente, Jungkook estaba delante de la puerta de su centro escolar,


buscando internamente la valentía necesaria para entrar y afrontar todas las
miradas, comentarios y sus enemigos más importantes, Taehyung y
Taeyeon.90

El ahora castaño con mechas rosas.


Incluso su ropa le hacia sentir extraño, esos pantalones ceñidos a sus
piernas que le dificultaban caminar junto con una camiseta blanca y por
encima otra de color rosa. Totalmente distinto al típico chándal que llevaba
todos los días (algo irónico siendo un amante de la moda) y que le parecía
muchísimo más práctico.80

Además, Yoongi había insistido en que se llevase las gafas puestas, ya que
según él, "daba una imagen más amigable e inocente de ti"53

Tomó aire y abrió las puertas suavemente como solía hacer todos los días.1

P á g i n a 97 | 329
Al entrar y tal como tenía mentalizado y planeado, todos los estudiantes que
habían en los pasillos dirigieron la vista hacia él. Trato de ignorarlos y
caminó normalmente hasta el aula de su club.

Mientras caminaba oía comentarios como "Joder, ¿ese es el Jungkook de


tercero? me lo quiero-" y palabras que omitía en su cabeza inocente o "¿Ese
es Jungkook?" "¡Jungkook oppa está muy lindo!"
76

Podría acostumbrarme a tener toda esta atención...


17

— ¿Ese es el famoso Jungkook que le gusta Taehyung?— ese comentario


le hizo poner sus oídos en la conversación de un grupito de chicos. ¿Cómo
se habían enterado de eso?

— Deberás que mal gusto.17

— Es imposible que le guste el tonto de Taehyung. A comparación de él,


Jungkook hyung es...

— ¡Sí!— exclamó Jungkook con el ceño notablemente fruncido mirando al


grupo de chicos que habían saltado por el grito que había pegado el
castaño.— Me gusta mucho Taehyung ¡¿tienes algún problema con eso?!175

— No, hyung...— dijo el muchacho con un tono asustado.

— No me llames hyung.— sentenció sin delicadeza mientras se iba


acercando amenazadoramente al chico.— Y si vuelvo a oir que dices algo
malo de él...33

El chico empezó a llorar interrumpiendo la amenaza del castaño por el tono


duro que había usado Jungkook y éste ni se inmuto cruzándose de brazos y
volviendo a caminar hacia su clase.

P á g i n a 98 | 329
63

Bueno, a lo mejor me he pasado...7

Mierda.

¡¿Acabo de gritar que me gusta Taehyung en todo el pasillo?!30

Que vergüenzaAAAAA.155

Mientras iba pensando en esas cosas y deseando darse contra la pared


más cercana, su cabeza chocó con el hombro de alguien soltando un
quejido.

— Esto... disculpa, no miraba por donde iba.— se disculpo rápidamente.

— ¿Jungkook hyung?— cuestionó una voz conocida que deseaba que no


fuese conocida con notable confusión.

El llamado alzo la vista y sonrió de forma forzada pero que se vio bastante
natural para el contrario.

Recuerda tu faceta genial, Jungkook.

— Sí, Taehyung. Ese soy yo.

P á g i n a 99 | 329
13. Barbie.

— Hmm... me gustan tus zapatillas de Barbie.— comentó Jungkook


mirando los zapatos rosas de Taehyung y después soltó una carcajada.80

Taehyung se sonrojó por la vergüenza y apretó los extremos de su camisa,


nervioso y el silencio volvió a inundar la habitación.

Después de aquel encontronazo en el pasillo, Taehyung llevo a su hyung al


aula del club de teatro, con la excusa de que quería hablar con él.
El aula estaba vacía porque todos los integrantes del club de teatro, excepto
Taehyung, estaban en sus respectivas clases.4

— ¿Dónde has conseguido esas zapatillas de una talla tan grande?


Normalmente es para niños. — volvió a cuestionar el de mechas rosas con
una sonrisa traviesa.39

— ¡Deja de burlarte de mí!— chilló avergonzando el que portaba las


zapatillas de Barbie.— Ya sé que son horribles y no me quedan bien.1

— No he dicho que sean horribles y que no te queden bien.— dijo serio


Jungkook obteniendo la atención del castaño.— Pero no sabía que te
gustaban ese tipo de cosas.

— ¿Hay algo de malo?— cuestionó con ceño fruncido y la voz apagada,


apretando los dientes.— ¿Ahora voy a dejar de gustarte porque tengo
gustos extraños...?230

Jungkook frunció el ceño enfadado.

— ¿Por qué eres tan agresivo? ¡Ya te he dicho que vistas de la forma que
vistas me va a dar igual y me vas a seguir gustando! — Exclamó Jungkook
perdiendo la paciencia.124

P á g i n a 100 | 329
Aunque luego de caer en cuenta en sus palabras, el color rojo inundó toda
su cara y los extremos de sus orejas.

Taehyung se quedó atónito al oír la segunda confesión de su hyung, no


sabiendo que decir o cómo actuar. Después recordó porque había traído a
Jungkook ahí.6

— Eso fue incómodo,lo siento, lo dije sin pensar.— comentó Jungkook


desviando la mirada aún sonrosado.— Olvidalo, ¿de qué querías hablar?

Taehyung se mordió el labio nervioso, ahora juguetando con sus dedos y


moviendo inquietamente sus pies bajo la atenta mirada de el más bajo.5

— Sé que no es el momento ideal para decir esto...— empezó a hablar


Taehyung en voz baja.— y que seguramente me odies.120

Jungkook rodó los ojos.

como si eso fuese posible.

— Pero yo tengo la necesidad de decirte que...— El más alto cerró los ojos
apretando la tela de su camisa.— ¡estoy saliendo con Taeyeon! Desde hace
unas semanas...437

El aula se volvió a quedar en silencio, Jungkook con una expresión


sorprendida por la confesión del menor y Taehyung sin atreverse a mirarlo a
la cara.

El mayor cerró los ojos y suspiro, con una sonrisa afligida.

— ¡Enhorabuena, Tae! Estoy feliz de que estés con la persona que


quieres.— le dijo con la voz aterciopelada y en un tono bajo.— Después de
todo... ¿es por eso que empezamos a hablar, no?244

P á g i n a 101 | 329
— Jungkook hyung...4

— Tú querías que te ayudase a conquistar a Taeyeon y yo acepte... no


puedo quejarme de lo que pasa.— Jungkook bajó la cabeza reprimiendo
ganas de llorar.53

Taehyung se quedó inmóvil pensando en como consolar a su hyung, que


parecía que lo estaba pasando realmente mal.

— Y-yo, realmente lo siento, hyung, en serio que lo sien- — las palabras de


el manor fueron cortadas por un "shhh" de el contrario.21

— Tae, te quiero.— confesó Jungkook por segunda vez en ese momento.96

Taehyung volvió a tener la misma reacción ahora mucho más nervioso.

— Te quiero.— repitió sonriendo.— Pero sé que tú no eres mio. No tienes


que disculparte por algo como esto, no es tu culpa.161

Taehyung asintió embobado y Jungkook le dedicó otra sonrisa de ternura.

— Por cierto, me encantan tus zapatillas, al menos sabes combinarlas con


tu mochila.— cambio de tema radicalmente señalando la mochila también
rosa de el menor.— Estás aprendiendo algo, supongo.26

— Hablando de eso...— siguió el rumbo de la conversación Tae.— No sé


como vestirme para hoy, no quiero que se rían de mí en clase.87

Jungkook bufó golpeándose la frente con la palma.17

— No sé, tu casa está lejos...— cerro los ojos para reflexionar.— Bueno, no
hay de otra...

Taehyung lo miro con duda.

Jungkook se sentó en la silla y se empezó a quitar los zapatos y su


sudadera haciendo al castaño oscuro, sonrojarse.65

P á g i n a 102 | 329
— ¡H-hyung! ¿Q-qué haces?— cuestionó tapándose los ojos.

— ¿Cómo que qué hago?— Jungkook frunció el ceño con duda pasándole
sus deportivas adidas recién sacadas.— Tienes suerte de que aunque sea
más bajo que tú, tengo los pies grandes.36

Taehyung tomó los zapatos sorprendido.

— Antes de ponertelos, tengo talco para los pies en mi mochila de


educación física.6

El contrario asintió, pillando la idea de su hyung.

— ¿No te molesta hacer esto?— cuestionó Taehyung y Jungkook soltó una


risa.

— Tienes suerte, soy muy cuidadoso con estas cosas... pero supongo que
lo necesitas.— le dijo encogiéndose de hombros.— Y me da igual si se trata
de ti.— comentó esto último para sí mismo.81

Taehyung miró con una sonrisa melancólica los zapatos de Jungkook.

— Toma mi sudadera y dame tu chaqueta.26

El de mechas rosas le tiro su sudadera amarilla en la cara, que por suerte, a


él le quedaba grande y a Taehyung justo y éste lo cogió segundos después.
Posteriormente, Taehyung le entregó su chaqueta verde con estampado de
lunares rojos.60

Jungkook lo miró con desagrado, porque, aunque era de Taehyung, no


podemos olvidar el detalle de que siendo él modista, veía esto como un
delito hacia la moda.

22

P á g i n a 103 | 329
Jungkook iba caminando por los pasillos cautelosamente de no ser pillado
por algún profesor.

Llevaba las zapatillas de Barbie de Taehyung junto a esa cosa que no


sabría si considerarla una chaqueta.
27

Si alguien me viese así...

Adiós a mi futuro como diseñador.

Algunos alumnos lo miraron con burla a él y a su singular conjunto de ropa


haciendo a Jungkook perder la paciencia y fruncir el ceño.

— ¡¿Qué miran, imbéciles?! — exclamó asustando a los chicos que


anteriormente se reían de él.78

— ¡Lo siento!— gritaron acelerando el paso para evitar la pelea con El Gran
Jungkook.33

Jungkook, con una sonrisa socarrona, miraba a los chicos marcharse al ser
intimidado por él.
Luego, volvió a poner rumbo hacia su aula del club.

Al abrir la puerta, se encontró a Yoongi tumbado en el suelo, con una


cámara delante de su cara y enfocando a la chica que llevaba una falda
negra y una camisa roja vino con botones negros que tenía delante, sentada
y posando.54

P á g i n a 104 | 329
— Hola Yoongi, hola Namjoon.— el primero soltó un sonido en forma de
saludo y el castaño (porque tenía una peluca castaña) le sonrió agitando la
mano suavemente a Jungkook.206

Antes, cuando Yoongi entro a la preparatoria con él y empezó a desarrollar


sus gustos extraños, a Jungkook le pareció cosa del otro mundo y súper
extraño, pero ahora, es tan normal como respirar.12

El rubio se levantó del suelo con la cámara colgando de su cuello y una foto
entre sus dedos. Y al ver a Jungkook con este atuendo y esos zapatos
explotó a carcajadas.

— ¿De que circo saliste? payaso.— se burló Yoongi tratando de


recuperarse del ataque de risa que le estaba dando.54

— ¿Te crees muy gracioso, pedazo de aborto?— le respondió


agresivamente Jungkook tratando de defenderse haciendo que Yoongi se
riera más fuerte.
160

Jungkook se encontraba sentado en la silla con su máquina de coser roja


terminado los detalles del vestuario para los integrantes de la banda de
Namjoon ya que se aproximaba el festival y tenía que darse prisa.

— ¡Hyung, coge!134

La voz aguda de Jimin interrumpió su cómodo silencio en soledad, ya que


Yoongi se había ido a acompañar a Namjoon en su exposición.

P á g i n a 105 | 329
Cuando se dio la vuelta para ver que demonios quería Jimin, recibió un
impacto en toda la cara por un objeto no identificado.23

— Jimin... ¡Te voy a matar!— gritó Jungkook con la voz amortiguada debido
a que se estaba sobando la nariz por el dolor.23

— ¡Lo siento mucho! pero en mi defensa diré que tienes unos reflejos
bastante malos.— comentó con una sonrisa el pelirrosa, acercándose a
revisar la nariz de el mayor.

— Jimin, una palabra más y-

Jungkook formo una "o" con los labios al ver el paquete de galletas de
chocolate que anteriormente había golpeado su cara y que ahora estaba en
su regazo.

— También te he traído leche de fresa.— Jimin le entregó el brick del batido


con una sonrisa dulce.190

— Gracias...— dijo el castaño tímidamente con una sonrisa abriendo la caja


de galletas.— ¿A qué se debe esto?6

— Sólo hago una situación para decirte que tu nuevo look te hace verte más
hermoso de lo que ya eres.— dijo rápida y contundentemente.132

Jungkook, que comía tranquilamente sus galletas, empezó a toser


descontroladamente por el comentario de el menor.1

— Jimin...3

— ¿Sí, hyung?

La sonrisa dulce de el pelirrosa se cambió por una expresión seria mientras


tomasutilmente la mano de Jungkook que aún estaba desprevenido por el
comentario anterior y entrelezaba sus dedos con un poco de recelo.

— Sé que te gusta Taehyung.— comentó de la nada el menor de los dos.2

P á g i n a 106 | 329
— ¿C-cómo?— cuestionó con una sonrisa forzada y confusa tratando de
retirar sus dedos de la mano de el contrario.

— Pero sólo te pido que me des una oportunidad, me da igual que te guste
alguien más, podemos intentarlo...— la determinada mirada de Jimin hizo a
Jungkook fruncir el ceño pensativo.267

— N-no, no lo sé... — murmuró bajando la cabeza.

— Jungkook-

La puerta fue abierta después de dos toques rápidos a la puerta.


Eran Taehyung y otro chico que no reconocía.

Los dos chicos que habían entrado hace un segundo al aula, miraron con
una expresión y sonrisa nerviosa la situación y la mirada irritada de Jimin
que estaba dedicando a los chicos que habían interrumpido a él y a
Jungkook.

— ¡L-lo siento, Jimin hyung! pero el entrenador te llama.— dijo rápidamente


el chico que era compañero de Jimin en el club de baloncesto y cuando dijo,
salió corriendo.4

— ¡Tae!— exclamó Jungkook retirando su mano rápidamente de la mano de


Jimin y levantándose para ir con el más alto.— ¿Vienes a devolverme mis
cosas?

Jimin los miro con una ceja enarcada, al darse cuenta de que, los zapatos
de Jungkook era los conocidos zapatos de Barbie de Taehyung, al igual que
esa inolvidable chaqueta verde.

— Dejaremos esa conversación para más tarde, Jungkook.— dijo


lentamente el pelirrosa sin añadir el "hyung" que hizo avergonzar al
nombrado.— Adiós, Tae.6

P á g i n a 107 | 329
— ¡Adiós, Jiminnie!— exclamó con una sonrisa el castaño oscuro.1

Después de que dejase la habitación, Taehyung puso una expresión seria


mirando a Jungkook, que frunció el ceño.3

— ¿Qué miras?— preguntó bruscamente al ponerse un poco nervioso.3

— Nada.— sonrió de nuevo.— Vengo a devolverte tu sudadera y tus


zapatillas.1

Jungkook asintió sonriendo y se sentó en la silla más próxima para quitarse


sus rosados zapatos.

— Siento haberte tratado así antes.— habló el menor.

Jungkook relajó su expresión llevando su atención a Taehyung, que iba a


seguir hablando:10

— No estoy acostumbrado a que me digan que les da igual como me vista y


que me quieran de cualquier forma ¿sabes?— comentó con una sonrisita
haciendo a Jungkook sonrojar mirándolo con fastidio.— Gracias, hyung.15

Jungkook no dijo nada aún pensando en las palabras de Jimin y poniéndose


su sudadera que tenía el leve olor del perfume de Taehyung.

— Por cierto, ¿qué te dijo Jimin? Parecía enfadado.8

El sonrojo se expandió por las orejas de Jungkook ante esa pregunta, cosa
que no paso desapercibida para el contrario.— Mmm, nada importante.18

— Oh.84

Se volvieron a quedar en un incómodo silencio y Taehyung llevó la vista


hacia la mano de Jungkook, dándose cuenta de que sus preciadas llaves
estaban entre unos de sus dedos.9

P á g i n a 108 | 329
— Jungkook hyung, mi anillo.— comentó Taehyung señalando su dedo y
haciendo que el de mechas rosas llevase la vista a su dedo y poniendo una
mueca de sorpresa.

— ¡Joder, es cierto! Lo siento, Tae, se me olvido devolvértela, ya sabes...

Jungkook se la iba a quitar pero Taehyung lo detuvo retirando la mano que


quería quitar el anillo que se encontraba en el otro dedo.

— No te preocupes, tú me has ayudado antes. Quiero que te la quedes.89

El más bajo asintió pensativo mirando sus dedos.

— Pero... ¿por qué te lo has puesto en el dedo anular?— cuestionó


avergonzado Taehyung y Jungkook fruncio el ceño confuso por la
pregunta.46

— No lo sé, era en el único dedo donde me quedaba bien.— explicó


restándole importancia.54

— Ya veo.

Y otra vez volvieron a quedarse en silencio.

— ¡YA HE LLEGADO!— grito Yoongi abriendo la puerta de un golpe, junto a


Namjoon vestido como normalmente lo hacía.40

— Hola Taehyung y Jungkook hyung.— volvió a saludar gentilmente el


peligris.8

— ¡Hola Namjonnie!— exclamó con ternura Taehyung.

Jungkook sólo le hizo un gesto con la cabeza en modo de saludo.

— Bueno, debo irme ya.— comentó apresurado Taehyung y miró a su


hyung.— Gracias por lo de hoy, Kookie hyung.5

P á g i n a 109 | 329
El nombrado se encogió de hombros son una sonrisa para despedirse y
después de que el más alto se despidiese de todos, se marcho.

Cuando el cuerpo de Taehyung desapareció de la vista de Jungkook, éste


pudo al fin relajarse y suspirar.

— ¿Te encuentras bien?— cuestionó Yoongi.1

— No, tengo ganas de llorar.— contestó con tono aburrido mirando al


suelo.83

— ¿Por qué haces como si nada hubiese ocurrido y sigues a su lado?— le


preguntó con el ceño fruncido el rubio.

— Porque Tae me necesita y él no tiene la culpa de que yo me haya... yo


me haya enamorado de él, supongo.— Jungkook cubrió su cara con las
manos y volvió a suspirar entrecortadamente.87

Yoongi sabía que no podría hacer cambiar de opinión a su amigo, así que lo
único que hizo fue acercarse a él y rodearlo con los brazos para formar un
abrazo, que rara vez sucedía ya que ambos eran reacios al contacto físico.

14: Aceptar.
— ¡¿Pero qué has hecho?!— el casi grito de Jungkook resonó en todo el
aula mientras Taehyung forzaba una sonrisa avergonzada.28

Jungkook estaba tranquilamente terminando los detalles de los trajes de la


banda de música junto con Yoongi, que estaba durmiendo, babeando en
uno de los pupitres del club. Hasta que el castaño grito, consiguiendo
despertarlo.1

P á g i n a 110 | 329
Yoongi miró entrecerrando los ojos y frunciendo el ceño, dirigiendo la vista
hacia el más alto de todos.

— ¿Qué pasa? Yo no le noto nada fuera de lo normal, a parte de que tiene


el pelo rojo.— preguntó el rubio restregándose las manos por los ojos.51

— M-mi querido mullet...— susurró para si mismo para luego volver a


exclamar.— digo, ¡su mullet! ¡su color de pelo!179

— Tranquilo, Jungkookie hyung... no es para tanto.— comentó Taehyung sin


borrar su sonrisa, sobándose ahora su descubierta nuca.5

— ¡¿Por qué te lo has cortado y por qué te has teñido?!— cuestionó


indignado aún el de mechas rosas.30

El contrario desvió la mirada aún sin apartar la mano de su nuca, detonando


inseguridad a lo que Jungkook frunció el ceño.

— Taeyeon me dijo que me hacia ver feo y que me lo cortará, además de


que mi color de pelo era aburrido, así me vería más lindo... ¡al parecer, tenía
razón! ¿no me queda bien?— concluyó feliz Taehyung esperando la
respuesta de sus mayores, pero que estaba completamente sorprendidos
por la historia de el menor.336

Se quedaron en silencio hasta que Yoongi


carraspeó.— CofCofRelacióncofcofTóxicacofcof, Uff, creo que me voy a
enfermar pronto ¿podéis cerrar las ventanas?233

— ¿Por qu-

— ¡Me voy a clase!— comentó Jungkook parándose de golpe y tomando su


mochila rápidamente de la mesa para salir corriendo hacia su aula de
clases.6

P á g i n a 111 | 329
Cuando Taehyung se quiso dar cuenta, el mayor de ya había salido del aula.
Y cuando fue a pedir explicaciones por el comentario anterior de Yoongi, el
nombrado estaba completamente dormido de nuevo en el pupitre.

34

Jungkook salió mareado de su última clase para ir al descanso de media


hora. Tener a su profesor haciendo bromas pesadas acerca de que no
asistía a clase o su mala personalidad lo agotaban y los estúpidos de sus
compañeros.4

Da igual, cómo sea. No voy a volver a asistir a clase.3

Al llegar a su casillero para guardar sus cuadernos, se quedo meditando


mientras miraba la foto de Taehyung que había sacado de un articulo de
internet y que estaba colgado el el fondo de su casillero, obviamente, nadie
sabia de esto.
13

Taehyung está cambiando mucho y eso no me gusta.

Me gustaría si fuese él quien decidiera hacerse esas cosas, pero... éles com
o un niño manipulable.84

Aunque, yo no soy quien para meterme en sus asuntos, supongo.


18

Otro suspiro volvió a salir de sus labios mientras cerraba la puerta de donde
guardaba sus libros.

Sus pensamientos se vieron interrumpidos porque una suave mano rodeó


su muñeca empujándolo hacia delante. El castaño abrió los ojos del golpe
para encontrarse la seria mirada de Jimin.

P á g i n a 112 | 329
Al reconocer de quien se trataba se sonrojó frunciendo el ceño y en un
movimiento brusco se libro del agarre del menor.10

— Hola a ti también Jimin.— dijo con tono enfadado mientras llevaba la


mano a su pecho para sobarse.

— Hola, hyung.— saludó el pelirosado esbozando una sonrisa.— Siento si


te he hecho daño, sólo quería recrear una escena de un dorama.136

— Eres un imbécil.— espetó Jungkook aún enfadado por lo de antes.4

— Lo soy, pero por ti.— dijo suavemente sin borrar su sonrisa tranquila,
alterando al contrario.— Por cierto, Jungkook.32

— ¿Se te olvida que soy tu mayor? dime hyung.— le regañó alzando la


mano y señalándolo y Jimin volvió a coger su mano gentilmente ganándose
una mueca de el de mechas rosas.8

— Quiero saber tu respuesta, cuando se terminen las clases te estaré


esperando en la salida, hyung.— le explicó tranquilamente y Jungkook se
volvió a sonrojar quedándose en silencio unos largos segundos.

— Y-yo, aún no lo sé.— le dijo tartamudeando tratando de esquivar la


situación.

— Pues tendrás que saberlo. He estado esperado tres días, yo creo que es
un período de tiempo razonable para meditar.— dijo Jimin señalándolo.44

— No me agobies.— exclamó Jungkook y también señalándolo con el dedo.

— Par de desviados ¿podéis dejar de hacer tanto ruido?— una voz


femeninamente desagradable interrumpió la discusión entre Jungkook y el
pelirrosa.100

— ¿Y tú qué demonios quieres?— cuestionó tosco, Jimin.

P á g i n a 113 | 329
Jungkook llevó la vista hacia el grupito de cuatro que estaba delante de
ellos. Esa era Taeyeon y su grupo de amigos insoportables y...

— Taehyung.— fue lo único que dijo al ver una cabellera roja acompañado
de una mueca incómoda.

— Jungkook.— exclamó en vez de el llamado, la novia de éste.— He oído


que te gusta mi novio.— le comentó con ánimo de burlarse de él y el de
mechas rosas frunció el ceño.132

Jungkook no tardó en empezar a hablar.— Sí, pues has oído bien ¿a qué
viene esto?44

— Dejame decirte que, a pesar de que has cambiado de look, tú siempre


vas a seguir siendo la segunda opción de todos.— la chica le sonrió
suavemente con autoauficiencia al ver la mueca de Jungkook.— Por eso,
Taehyung se fijó en mí y no en ti.198

— Taeyeon.— exclamó Taehyung con el ceño fruncido ante las palabras de


su novia.7

— Calla, Taehyung.— le dijo llevando el dedo índice a los labios del


nombrado.77

Mientras tanto, Jimin miraba indignado como Taehyung se dejaba callar.79

— Jungkook, no quiero que te vuelvas a acercar a Taehyung.— sentenció


dura Taeyeon.43

— ¿Ah, sí? ¿y qué harás si no te hago caso?— cuestionó desafiante el


castaño acercándose para quedar cara a cara con la chica.

— ¡BASTA!— el grito agudo del pelirrosa hizo que Jungkook se girara a


verlo y los demás chicos de la pandilla de Taeyeon llevaran la vista hacia él.

P á g i n a 114 | 329
Jimin no tardo en acercarse de forma intimidante hacia Taehyung que lo
miraba con una expresión de miedo. Al acercarse lo suficiente a él lo cogió
de el cuello de la camisa mirándolo a lo ojos enfadado.23

— ¡¿Vas a quedarte ahí parado sin hacer nada mientras que tu novia y el
chico al que le gustas se pelean por tu culpa?!— preguntó gritando y
Taehyung tragó saliva tratando de apartarlo de él.174

Los alumnos que habían salido de su aula rodebana la escena, murmurando


y comentando cosas.

— Jimin...

— Taehyung. ¡¿No entiendes que estás perdiendo a tus amigos y a ti por


estar con esa chica?!197

El pelirrojo frunció el ceño empujando.— Lo que yo haga con mi vida, a ti te


da igual.— le dijo con la voz gruesa y Jimin sólo frunció los labios.127

— ¡Taehyung, lo único que haces es causar problemas!— gritó el pelirrosa


al más alto, que estaba en shook por las palabras que había usado su
compañero y Jimin salió corriendo empujado a la multitud que estaban
rodeándolo.
19

Mierda, ¿cuándo ha ocurrido todo esto?

Se preguntaba Jungkook mientras tenía la intención de seguir al que acaba


de salir corriendo pero una mano rodeó su muñeca impidiendo su paso.

— Jungkook...— dijo con la voz apagada el pelirrojo y el llamado sólo frunció


el ceño con melancolía y desagrado.1

P á g i n a 115 | 329
— Jimin era tu amigo.— dicho eso, Jungkook se zafó del agarre de el más
alto y salió corriendo tras el menor dejando atrás a Taehyung.
223

/) /)
( ㅍ_ㅍ)140

— ¡Jimin! Llevo un buen rato buscándote.29

Jungkook apoyó sus manos en sus rodillas para tomar aire después de
haber salido corriendo mientras Jimin estaba sentado en las escaleras
tapando su cara.

No dijo nada pero el mayor se sentó a su lado sin saber que hacer en ese
momento para hacer sentir mejor a su dongsaeng.

— Tae y yo somos mejores amigos. Sé que cuando se le pase la tontería


del enamoramiento volverá y me pedirá perdón.— dijo Jimin con la voz
amortiguada debido a que estaba cubriendo su cara.— Y entonces yo le diré
"¡Lo siento, Taehyung, pero yo soy como el tiempo, no perdono pero sí
olvido!" y entonces él me comprará comida y volveremos a ser mejores
amigos.165

Jungkook lo miró con una sonrisita al oír su monólogo.7

— Jungkook, me gustas.— vale, eso no se lo esperaba. Abrió los ojos en


grande sin saber lo que decir.2

— Jimin, no quiero hacerte daño.— el de mechas rosas bajó la cabeza para


mirar al suelo.— Si te acepto seré una mala persona y te terminaré haciendo
daño y eso es lo que menos quiero.45

P á g i n a 116 | 329
— Lo sé.

Jimin se puso delante de Jungkook arrodillándose para estar a su altura y


que el último nombrado estaba aún sentado.
Lo miro seriamente a los ojos.6

— Dejame intentarlo, da igual el final de esto, lo aceptare.— Jimin cogió las


manos de el mayor entre las suyas y las miro.— Si al final... si al final sigues
enamorado de Taehyung... lo aceptare y te dejare ir.208

Jungkook se quedo mirando pensativo al pelirrosa , conectando miradas


durante unos pocos minutos.

Sé que esto me convierte en una mala persona.

Pero quiero dejar de centrarme en Taehyung y centrarme en lo quetengo del


ante de mí.

Lo siento, Jimin, te mereces algo mejor que yo.


9

— Está bien, Jimin, acepto.

15. Kim Taehyung.


"Taehyung, nunca paras de causar problemas".

Tras esas palabras, Taehyung despertó de golpe con algunas lágrimas


agolpadas en las esquinas de sus ojos.

P á g i n a 117 | 329
Cuando por fin su respiración se estabilizó, se irguió en su cama matrimonial
en el familiar silencio de su habitación y luego dirigió la vista hacia el
calendario que tenía cierta fecha marcada en un intenso rojo.2

— Con que faltan tres días...

192

— Hijo, dentro de unas horas habrá la gran fiesta donde muchos de los
diseñadores más importante del mundo van a asistir.— le dijo un sonriente
señor progenitor de un joven Taehyung de ocho años que lo miraba feliz.—
Así que debes verte bien porque tú y tus hermanos vais a tener que ir a
saludarlos.3

— ¡Sí, papá, voy a ser el niño mejor vestido de todos!— le dijo el pequeño
castaño determinado a su padre.80

Éste sólo se rió acariciando la cabeza de su hijo para luego marcharse.

[…]2

— ¡Pero, Noona! ¡¿Por qué no me puedo poner la corbata verde?!— se


quejó Taehyung pataleando porque su traje era demasiado negro y eso a él
no le gustaba.21

Su padre tenía la estricta norma de que sólo podían vestir de negro, blanco
o azul marino. A sus hermanos les parecía bien pero al más pequeño de
todos le gustaba ponerse ropa colorida y bonita y pensaba que podía
aprovechar la fiesta de su padre para llevar otra cosa que no sea negra.12

— Amo Taehyung, ya le he dicho que su padre no quiere que lleve ropa que
no sea de color negra.— le dijo su sirvienta con una sonrisa cansada que
trataba de ponerle su corbata.13

— Papá es un pesado.— se cruzó de brazos.15

P á g i n a 118 | 329
— No hable así del su padre, ya sabe porque no le gusta que llevéis ropa de
colores.— le dijo con ánimo de regañarlo poniéndole al fin su pequeña
corbata.— A mí me encanta la ropa que sueles usar cuando tu padre no
está, pero ahora debes comportarte ¿de acuerdo?9

El pequeño castaño sólo hizo un puchero mientras veía como su sirvienta se


marchaba de su cuarto.
Faltaban apenas unos diez minutos para que los invitados empezaran a
venir.

Taehyung miró con una mueca la corbata verde que había nombrado antes
y luego sonrió.

— Voy a verme bien y a papá le va a volver a gustar los colores.— murmuró


para si mismo y empezó a quitarse su aburrido traje negro.

76

[…]2

Byeong-Ho, el padre de Taehyung y sus hermanos, saludaba con


cordialidad a todos los invitados que llegaban a su mansión con la compañía
de sus tres hijos pero le faltaba el cuarto más pequeño.4

— ¿Dónde se ha metido Taehyung?— le preguntó a sus hijos.19

Los tres negaron y se encogieron de hombros.

El hombre le restó importancia a eso y siguió saludando a sus invitados.

Cuando una gran cantidad de gente ya se encontraba reuinida en el salón,


hablando y riendo entre ellos, el pequeño Taehyung apareció al lado de su

P á g i n a 119 | 329
padre y sus hermanos lo miraron asustados y Byeong-Ho llevo la vista hacia
su hijo.

— Taehyung, al fin aparec- ¡Taehyung! ¡¿qué demonios haces vestido así?!

Taehyung llevaba esa odiosa corbata verde con una chaqueta de esmoquin
de color rosa que no sabía de donde la había conseguido. Lo único que
llevaba negro era ese lacito que afirmaba su castaño cabello porque sus
zapatos era blancos al igual que sus pantalones.100

Taehyung miró asustado a su padre por el tono que había usado.

— Vaya, pequeño Tae, la última vez que te vi eras un bebé.— dijo un señor
mayor con apariencia afable tratando de aliviar la situación.— Aunque tu
traje es un poco peculiar, no te queda mal. A tu madre también le encantaba
combinar colores.141

La gota que colmó el vaso era que su amiga volviese a nombrar a su difunta
esposa así que cogió bruscamente el brazo de su hijo más pequeño y lo
arrastro fuera de el gran salón.11

— ¡P-papá, me haces daño!— exclamó Taehyung siguiendo a tropezones


los pasos rápidos de su progenitor, que no le contestó.

Atrás de él estaban sus hermanos junto con su Noona.

— ¡Amo, pare! Le está haciendo daño.— exclamó exaspera la sirvienta


haciendo que Byeong-Ho se parase de golpe y Taehyung chocase
bruscamente contra él.4

— Estás despedida, recoge tus cosas y vete.— le dijo con voz dura y sin
expresión en su cara mientras apretaba más el agarre que tenía en el brazo
de su hijo.— ¡¿No me has oído?! ¡Que te vayas!47

P á g i n a 120 | 329
— ¡No, papá! ¡Haneul no tiene culpa de nada, ella me vistió como le dijiste,
soy yo quien te ha desobedecido, castigame a mí!— chilló Taehyung
haciendo que muchas lágrimas saliesen de sus ojos.10

— ¡Callate, Taehyung! ¡Haneul, quiero verte fuera de esta mansión en


quince minutos!— volvió a ordenar y la nombrada asintió haciendo una
reverencia y marchándose del lugar.1

— ¡Haneul!— gritó Taehyung con la voz quebrándose por las lágrimas.

— ¡Quiero verte dentro de unos minutos con la ropa que te dije que te
pusieras ¿lo has entendido?!— le espetó su padre y Taehyung sólo asintió
con hipidos.— Y no vuelvas a romper las reglas.

Dicho eso, Byeong-Ho se marchó a pasos furiosos dejando a Taehyung y


sus hermanos en medio del pasillo.

— Taehyung.— le dijo su hermana mayor por cuatro años, Duri


notablemente enfadada.— Nunca paras de causar problemas.128

Dicho eso, ella también se fue, agarrando a sus hermanos de la mano que
lo miraban con pena.

Y Taehyung lloraba porque la única persona que lo aceptaba tal y como era,
se había marchado.67

Como su madre.

Taehyung estaba empezando a empeorar, tanto en las notas como


anímicamente, lo único que podía oír eran las palabras de su linda novia.56

La reunión familiar que sucedería dentro de tres días lo tenía en la luna,


mientras que Jimin y Jungkook lo ignoraban prácticamente.

P á g i n a 121 | 329
No puedo quejarme, todo es mi culpa.38

Al menos tengo a Taeyeon, como siempre quise.

— No quiero que te vuelvas a acercar a Jungkook.— le dijo Taeyeon seria


mientras miraba la pantalla de su teléfono. — Ni a Jimin, ni a Yoongi ni a
ese de primero... ¿Queda claro?

Taehyung asintió.
184

Como siempre quise...

16. ¿Novios?

— Taehyung se ve como si estuviese muriendo en vida.— comentó Yoongi


viendo la cara aburrida de el pelirrojo que iba con el grupo de amigos de
Taeyeon.3

— Tampoco me pide ayuda para vestirse, ahora sólo copia el estilo de


"chico malo" de sus "amigos"— dijo Jungkook haciendo comillas con los
dedos.— Ahora siempre va de negro2

Comentó mirando que, ciertamente Taehyung iba completamente de negro,


pantalones, chaqueta y esa cadena que se engachaba a su pantalon y
resonaba al caminar.65

P á g i n a 122 | 329
— ¡No nos importa, Taehyung puede hacer lo que quiera con su vida!—
exclamó Jimin cuando el más alto paso delante de ellos con sus amigos sin
dirigirles la mirada.— Vamos, Kookie.4

Dicho eso, el pelirrosa cogió de la mano a su novio y junto a Yoongi se


marcharon.195

Jungkook le dio una última mirada a Taehyung y éste también lo miro de


reojo durante unos segundos antes de perderse entre los pasillos.

— Voy a la cafetería a traer algo de comer, me estoy muriendo de


hambre.— comentó el castaño mientras se levanataba de la silla.

— Traeme un Sándwich.— le pidió (ordenó) el rubio mientras pasaba el


pincel meticulosamente por el lienzo siendo observado con fascinación por
Namjoon.16

— ¡Te acompaño!— le dijo sonriente Jimin levantándose y cogiendo de la


mano a Jungkook.

A pesar de que llevaban saliendo ya tres días, Jungkook no se estaba


acostumbrando a las muestras de afecto de Jimin, pero tampoco le negaba
nada, sabía que con el tiempo llegaría a acostumbrarse.48

Fueron hablando de cosas triviales mientras llegaban a la cafetería para ver


que estaba repleto de gente.

— Está bien, hyung. Yo ire a comprar las cosas, esperame aquí.

El de mechas rosas asintió y Jimin salió corriendo para entrar a la cafetería


y colarse.

P á g i n a 123 | 329
Jungkook miraba la pantalla de su teléfono, deslizando el pulgar por este de
forma desinteresada.1

Hasta que sintió que lo tiraban con mucha fuerza hacia atrás y Jungkook
soltó un grito por la inercia, oyó el ruido de una puerta cerrándose con
brusquedad y segundos después tido estaba muy oscuro.72

— ¡Jungkookie! He conseguido colarme... ¿Jungkook?— Jimin vio a su


alrededor buscando a su mayor, pero había desaparecido.56

[…]

— ¡¿Qué demonios te pasa?, sueltame, sueltame!— pataleaba Jungkook


gritando mientras sentía que sus mueñrcas estaban retenidas por las manos
de otro. En una patada, logró golpear en un punto blando haciendo al
desconocido contrario soltar un jadeo del dolor.25

— ¡Hyung! ¡Soy yo!— exclamó una voz grave tratando de reponerse del
golpe sin haber soltado aún a Jungkook.

— Esa voz... ¡Taehyung! ¡¿Eres idiota o qué te pasa en la cabeza?!


¡Sueltame!— Ahora que ya sabía quien estaba detrás de su secuestro, pudo
distinguir esa cabellera roja brillante.— ¡¿Dónde estamos?!5

— Tranquilo, Jungkook hyung, no te voy a hacer nada y estamos en el


desván de la cafetería.— explicó Taehyung con la voz normal de nuevo.

— ¿Para qué me has traído aquí?— cuestionó serio tranquilizándose.

— Antes de nada... ¿estás enfado conmigo? digo, por lo de hace unos días
con Jimin y Taeyeon.— explicó en voz baja con un poco de amargura.90

Jungkook suspiró girando levemente la cabeza para no mirarlo.— Jimin es


un tema aparte, los problemas que tengas con él no me incumben. Y
Taeyeon... supongo que podrías haberle dicho algo.

P á g i n a 124 | 329
— Lo siento.— fue lo único que dijo y el castaño sólo se encogió de
hombros.

— Ya que lo sabes ¿qué es lo qué necesitas?— volvió a preguntar


empezando a ponerse nervioso por la cercanía y os posición en la que
estaban.— ¿Y por qué me has traído aquí?

— Tengo que ir a Seúl dentro de tres días, durante unos días, quiero que
me acompañes.151

Jungkook abrió los ojos de golpe ante la propuesta.— ¡¿Estás loco?! ¡No
pienso moverme de aquí! ¿Para qué?2

— Tengo una reunión familiar donde estarán mis hermanos y mi padre y


bueno, necesito tu ayuda porque mi padre me odia y también la forma en la
que me visto.— explicó brevemente.3

— Aunque te parece ir bien sin mi ayuda...— le dijo con tono de reproche al


ver su conjunto.— Aunque el negro no va contigo, estás mucho mejor con
colores.52

A Taehyung se le iluminó la mirada por esas palabras haciendo que


Jungkook pusiese una expresión de confusión.1

— Por favor, Jungkook, acompañame, puede venir quien tú quieras si no


quieres estar a solas conmigo.— le rogó Taehyung mirándolo a los ojos.

Jungkook se sonrojó sosteniendo la mirada de el menor.

Mierda, ¿por qué soy tan débil?

El castaño suspiro asintiendo.— Está bien, pero tendré que llevar a mi


primo, viene dentro de tres días también.92

P á g i n a 125 | 329
Taehyung asintió emocionado y con una sonrisa.— No hay problema.

— Y también llevare a Jimin, es más, vamos al aula del club a que se lo


comentes.— condicionó.41

— Pero...

— Nada de peros.— sentenció el castaño con voz dura y Taehyung asintió


resignado.

Se quedaron quietos durante unos segundos mirándose hasta que


Jungkook carrapeó avergonzado.— ¿Puedes soltarme?9

Taehyung cayó en cuenta de que estaba en una posición comprometedora


con su mayor por lo que sonrojado, soltó las muñecas de Jungkook y de
esta forma liberándolo.3

Se quedaron sin hablar, sin atreverse a mirarse mutuamente.


Como si esperasen que el contrario diga algo que los hiciese salir de aquel
cuarto oscuro.

— ¿Vamos?— le preguntó Taehyung para romper el vergonzoso silencio.

— Vamos...

— Definitivamente no.— respondió seco Jimin cruzado de brazos evitando


mirar al pelirrojo.

Jungkook y él habían ido hacia el club de arte donde el pelirrosa estaba


esperando a su novio, muy preocupado por su repentina desaparición.
Ahí, Taehyung aprovechó para comentarle todo acerca de ello y la
respuesta de el pelirrosa fue un rotundo "no".

— Vamos, Jimin. No te va a saltar clases, vamos a en los tres días festivos


que hay.— trató de convencerlo el de mechas rosas.

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Jimin se quedo pensativo y luego suspiro.— Está bien... ¡pero que sepas
que no lo hago por Kim traidor Taehyung! ¡lo hago porque no quiero que mi
novio esté solo con ese!— exclamó con el ceño fruncido señalando a
Taehyung.127

El pelirrojo al oír las palabras de su examigo puso una expresión de


confusión.— Está bien pero ¿novio?

Jungkook abrió los ojos de golpe sorprendido, se le había olvidado ese


detalle y segundos después trato de tranquilizarse.

— ¿Novio?— cuestionó Yoongi con sorpresa entrando por la puerta.61

Y es que Jimin y Jungkook empezaron a salir pero con la condición de que


fuera en secreto, por lo menos, hasta que se acoatumbrasen.
El castaño más bajo suspiró y asintió.7

— Sí, Jungkook y yo estamos saliendo desde hace unos días.— dijo Jimin
cogiendo de la mano al nombrado y entrelazando sus dedos para
levnatralos y enseñárselo a ese par.4

Yoongi miro a Jungkook serio y éste desvió la mirada por lo que sonrió.—
¡Me alegro mucho! Siempre supe que hacías buena pareja.84

Taehyung aún estaba sorprendido por la noticia y Yoongi le dio un golpe en


la espalda para que reaccionase.— ¿A qué sí, Tae?

El pelirrojo entró en razón y asintió sin para con una sonrisa suave y un
poco forzada.— Me alegro por ustedes.199

— Gracias.— dijo Jimin y Jungkook se soltó rápidamente del agarre de su


novio.

Mi intuición de dice que esta semana va a ser realmente intensa.

P á g i n a 127 | 329
17. Viaje a Seúl con...
Kookaracha.67

Yoongi.

Lil meow meow.1

Qué quieres.

Kookaracha.7

Es la primera vez que voy a Seúl...

¿Qué debería ponerme?

Lil meow meow.

Vas a ir con Taehyung y Jimin ¿no?

Kookaracha.

Sí.

Lil meow meow.

Ya sé lo que tienes que ponerte.

P á g i n a 128 | 329
Lil meow meow te ha enviado una imagen.

2 85

Kookaracha.

Eres de lo peor.

Lil meow meow.

JDUSKSBJXSLKSJD95

Kookaracha.

¿Me acompañas a recoger a Hoseok mañana por la mañana a la estación?


254

Lil meow meow.

¿VA A VENIR HOSEOK?66

P á g i n a 129 | 329
¿POR QUÉ NO ME HAS DICHO NADA?

Kookarcha.

SÍ TE DIJE.

PERO COMO ESTÁS MUY OCUPADO IGNORANDOME.

Lil meow meow.

Bueno, claro que te acompaño.

¿Pero sí viene, va a ir contigo a Seúl?

Kookaracha.

Duh.
32

Lil meow meow.

Voy contigo.

Kookaracha.

Tienes que pedirle permiso a Taehyung.

Lil meow meow.

Taehyung me la pela.204

Yo voy a ir sí o sí.
6

P á g i n a 130 | 329
Kookarcha.

Kookaracha ha enviado una imagen.

147

Después de echarse unas risas con las tonterías de su amigo , volvió la


vista hacia su maleta, ya estaba todo terminado para los tres días que iban a
estar ahí y ahora sólo faltaba decidir que atuendo llevaría mañana.

— Voy a encontrarme con los padres de Tae...— habló para si mismo


sonrojándose.— Incluso si no significa nada, tengo que verme bien.18

Dicho eso, fue delante de su armario y abrió la puerta de este para buscar
las prendas de ropa que tenía en mente.

P á g i n a 131 | 329
— ¡Madita sea Yoongi! ¡¿Quieres darte prisa?!— exclamó Jungkook oído de
Yoongi.

— ¡Lo haría, pero mi bici no tiene motor aún!— le gritó contestándole


mientras subía una cuesta pedaleando con sus delgadas piernas y con peso
extra detrás suya.148

Después de tres minutos de agonía para Yoongi y sus piernas, subieron


toda la cuesta que daba con la puerta principal de la estación de buses. Una
vez en la cima el rubio se bajo de su bici y se tumbo en el suelo y Jungkook
fue corriendo con una sonrisa al chico que estaba mirando su teléfono.2

— ¡Hoseok hyung!— le exclamó el castaño lanzándose encima de su primo


y recibiendo una risa de éste.7

— Jungkookie, me alegro de volver a verte.— le dijo dando un beso en la


frente, ganándose una risita avergonzada del contrario.— ¿Y Yoongi?
Pensé que te acompañaría.42

— Me ha acompañado, está ahí muriendo por su baja condición física.—


Señaló con el pulgar hacia atrás y el señalado levanto la mano saludando.—
¿Para cuantos días llevas ropa?40

— Hmm... para tres.— le respondió confundido ante la pregunta.

— Perfecto.21

Jungkook cogió la mano de su primo Hoseok y fue con el moribundo Yoongi,


tenían que irse rápido porque ya iba a ser la hora de recogida.7

— ¿Pero no vamos a tu casa?— cuestionó el pelimorado.3

— Te lo explicó por el camino.— le dijo Jungkook subiéndose encima de


Hoseok para ir en la parte de atrás de la bici.46

P á g i n a 132 | 329
— Por fin un poco de diversión.— comentó Yoongi con una sonrisa traviesa
al ver la empinada bajada.109

— Yoongi, ten cuidado.— le advirtió el mayor de todos.

— Tranquilo, yo controlo.— dicho eso, cogió impulso por la bajada y


rápidamente la bicicleta tomó velocidad haciendo ese espeluznante sonido
que hacía las ruedas con el contacto del suelo.
Yoongi lleno de adrenalidad, vio que la baja iba a terminar y presionó de sus
frenos, pero estos no respondían, por lo que empezó a presionarlos con
más fuerza.109

— ¿Pasa algo, Y-yoongi?— cuestionó temeroso y con los ojos llorosos


Jungkook.71

— Pues que ya no controlo.


356

— ¡¿Jungkook?! ¿qué te ha pasado?— preguntó alarmado Taehyung al ver


que el más bajo estaba lleno de hojas y palos por el pelo y un pequeño
arañazo en el pómulo.79

— Nada, Yoongi es un imbécil.— dijo con el ceño fruncido y soltando un


seseo porque le escocia la herida.23

— Lo siento, se me olvidaba que mis frenos no funcionaban.— se encogió


de hombros tratando de sacar los palos de los mechones de un lloroso
Hoseok.134

— ¡Pensé que iba a morir, Yoongi, eres un estúpido!— le gritó y Yoongi


asintió.5

P á g i n a 133 | 329
Jungkook giró la cabeza para mirar a ese par y Taehyung aprovechó para
ponerle una curita suavemente en su mejilla, alarmado al castaño.32

— ¡Taehy-

— Lo siento, tiene estampado de flores. Pero si no te gusta, en Seúl tengo


unas normales.— dijo el más alto con una sonrisa infantil haciendo a
Jungkook sonrojarse.9

— N-no, así está bien.— dijo tartamudeando y luego lo miro a los ojos
sonriendo.— Gracias, TaeTae.6

Taehyung se sonrojó porque la situación estaba siendo un poco extraña y


por el apodo que había usado su mayor.

— ¿Ellos son novios o algo así?— cuestionó en tono bajo Hoseok al


rubio.100

— Sí, bueno no, tienen algo extraño.— explicó de forma confusa y Hoseok
asintió frunciendo el ceño tiernamente entendiendo.45

Mientras tanto, Jungkook y Taehyung seguían charlando y el de mechas


rosas aprovecho para explicarle quien era Hoseok.

Taehyung observó el vestuario de Jungkook, pues antes estaba muy


ocupado quitándole las ramas de su pelo. Era un estilo que nunca antes
había visto en él.

Jungkook llevaba una blusa blanca simple con botones negros y ancha en
sus muñecas, también un pantalón campana negro que le llegaba a cubrir
toda la cintura y dejaba holgada la parte de sus tobillos y las habituales
zapatillas adidas eran sustituidas por zapatos de taco bajo blancos.155

— Te ves bien.— dijo Jungkook sacando a Taehyung de sus


ensoñamientos.

P á g i n a 134 | 329
Y Taehyung, llevaba un traje negro—a petición de su padre— con la camisa
y la corbata negra. Iba entero de negro de no ser por el pelo rojo.
3

Tú te ves hermoso.108

— Gracias.— le dijo con una pequeña sonrisa ignorando sus pensamientos


ya que le habían parecido demasiado raros.22

— ¡Ya llegué, Taehyung!— dijo una voz chillona enganchándose del brazo
del llamado y asustándolo.89

— Oh... Hola, Taeyeon.— dijo el llamado dirigiéndole una sonrisa leve y un


tanto aburrida.174

Jungkook se incomodó.— Voy a poner mis cosas en el maletero.— explicó y


se dio la vuelta y el pelirrojo quiso detenerlo pero se vería un poco fuera de
lugar delante de su novia por lo que no hizo nada.10

— Pensé que te había dicho que no te acercaras a Jungkook ni a sus


amigos...— susurró la rubia para Taehyung y éste cerro los ojos
exasperando y suspirando.55

— Dejame un rato en paz ¿quieres? No estoy de humor.— cuestionó


aburrido separándose de su novia y sorprendiéndose de haberle respondido
tan mal a su novia.— Perdón, no quise decirlo así... es sólo que...129

Taeyeon lo miró con los brazos cruzados y una expresión negra y Taehyung
tomó aire dándose la vuelta para hablar con el conductor que los llevaría a
Seúl.4

— ¿Dónde se ha metido el otro?— preguntó aburrido Yoongi porque ya se


quería ir.

P á g i n a 135 | 329
— Me ha dicho que ya está viniendo.— le contestó Jungkook sacudiendose
las manos guardando las cosas de su primo.

— ¡Ya estoy, chicos!— gritó una voz aguda y los tres chicos giraron la vista
para ver a Jimin corriendo hacia ellos a toda velocidad con determinación.10

Después de pestañear ya se encontraba delante de sus ojos.

Cosas de ser de un equipo de baloncesto.


1

Pensó Jungkook mientras Jimin le saludaba con un beso en la mejilla por


primera vez había tomado tanta confianza.
28

¿Será porque está Taehyung?

— ¿Qué te ha pasado en la cara?— preguntó Jimin alarmado.

— Una larga historia.— respondió aburrido el castaño

— ¡Hola! ¡tú debes ser el novio de mi primo! ¡Me llamo Hoseok aunque
puedes llamarme Hobi!— le dijo tomando su mano y agitándola con
exaltación.130

El pelirrosa analizó al chico que tenía delante y por un instante pensó que
era realmente bonito.— Yo me llamo Jimin, encantado de conocerte
también.— rió haciendo sonreír al contrario.345

Yoongi miró la escena con los ojos entrecerrados creando un montón de


historias en su cabeza.207

— ¿Has visto eso?— cuestionó Yoongi a su mejor amigo.

P á g i n a 136 | 329
— ¿El qué?— preguntó Jungkook girando la vista hacia el rubio con la boca
llena de comida y Yoongi suspiró.5

— Nada, pero que en este viaje soy el único sin pareja.

87

EXTRA; Yoongi pidiendo permiso a alguien (sale mal)55

Desconocido.

Qué hubo.18

Agendar más tarde. (Tae)1

Hola.

¿quién eres?

Desconocido.

Tu madre.
65

Agendar más tarde. (Tae)

mi madre falleció hace 17 años.229

Yoongi hyung.45

P á g i n a 137 | 329
Ooh.

Vaya.
1

Agendar más tarde. (Tae)

Sep.

Yoongi hyung.

Yoongi hyung te ha enviado una imagen.

394

Mierda, perdón.

18. De vuelta a ¿casa?


Los cinco chicos estuvieron en el coche dirigiéndose hacia Seúl durante casi
tres horas.
Durante todo el camino Taehyung estuvo en silencio y serio a pesar de que
era muy hablador cuando estaban en grupo, cosa que Jungkook notó.1

P á g i n a 138 | 329
Cuando llegaron, estuvieron recorriendo un camino de tierra rodeado de
jardín y estatuas, todos quedaron fascinados por eso pero el pelirrojo sólo
se mordía la uña del pulgar sin admirar nada de ese precioso jardín.

— Ya hemos llegado, joven amo.— comentó el conductor del vehículo


frenando en frente de para unas grandes escaleras.35

— "¿Joven amo?"— cuestionó Yoongi frunciendo el ceño y salió


rápidamente para comprobar sus sospechas.

Lo que menos se esperaba es que nada más asomarse, viese una casa tan
alta que tenía como aproximadamente cuatro pisos, de mármol impoluto y
grandes ventanas y ventanales esparcidos por sus paredes. Había grandes
escaleras blancas que daban a la entrada principal, hecho también de
cristal.10

Conclusión que llego a sacar después de procesar: ¿Literalmente Taehyung


era jodidamente rico y vivía en una mansión?43

— ¿Yoongi, qué miras tanto?— preguntó Jungkook bajándose y después de


mirar hacia donde estaba viendo el contrario, tuvo la misma reacción que el
rubio.

— Brutal...— comentó Jimin mirando el gran jardín, que era lo que más le
sorprendía.128

— ¡Que flor tan bonita!— exclamó Hoseok sonriendo al bajarse del coche y
fue hasta ella para arrancarla.277

— ¡Hoseok hyung! ¡No estamos en nuestra casa, no puedes venir y arrancar


las flores porque te apetezca!— regañó Jungkook notablemente
avergonzado por lo que acababa de hacer su primo.2

Hoseok borró su sonrisa e hizo un puchero.— Pero, es que es tan bonita...91

P á g i n a 139 | 329
Jungkook rodó los ojos cruzándose de brazos y yendo al maletero a por su
cosas, mientras que Jimin se reía tiernamente de la inocencia del
pelimorado Hoseok.
158

30

Mientras que algunos criados llevaban el equipaje de los chicos y el suyo,


Taehyung miraba con angustia la casa que tenía delante y a la cual debía
entrar por obligación.
Suspiraba y suspiraba viendo como sus mayordomos llevan los últimos
bolsos.

De repente, interrumpiendo su pesadumbre, sintió unos dedos agarrar


suavemente sus manos, por lo que llevo su vista inmediatamente al chico
castaño que lo miraba con el ceño fruncido y suspiró contemplándolo.3

— Taehyung, todo va a estar bien.— le dijo Jungkook esbozando una


pequeña sonrisa para tratar de tranquilizarlo, Taehyung le devolvió la
sonrisa un poco más aliviado de repente.2

— Suelta a mi novio.— su paz fue interrumpida por el mandato de una voz


femenina.— Nunca aprendes ¿verdad, Jungkook?214

Jungkook soltó al pelirrojo, dispuesto a volver a tomar distancia, pero


Taehyung fue más rápido y volvió a coger la mano del mayor.81

— Taeyeon, te quiero y te respeto, pero aunque sea así, Jungkook es


alguien importante para mí y exijo que tú también lo respetes.— demandó
serio y mirando intimidantemente a la rubia.— Y no quiero más escenas de
estas en estos tres días, por favor.243

P á g i n a 140 | 329
Dicho eso, Taehyung soltó delicadamente la mano del sonrojado Jungkook
para darse la vuelta y Taeyeon rodó los ojos asintiendo, poniéndose al lado
de su novio.3

— ¿Has visto eso?— cuestionó boquiabierto Yoongi.12

— ¿Y-y tú desde cuándo llevas ahí?— le respondió aún con la cara roja y el
ceño fruncido.

— Lo suficiente para saber que Taehyung tiene su parte daddy y no me


estoy refiriendo al dinero, pero que también.312

Jungkook lo miró confuso, a veces no entendía las expresiones extrañas


que usaba el rubio.
96

[…]

— Si queréis o necesitáis algo, no dudéis en pedírselo a los mayordomos o


amas de llaves.— comentó Taehyung con una sonrisa mientras caminaba
por el gran pasillo del salón con los cinco chicos que estaban mirando
boquiabiertos las instalaciones.

— No me lo digas, ese mayordomo se llama Sebastian.— dijo Jimin


señalando a un mayordomo pelinegro que estaba parado firmemente en una
esquina esperando alguna orden.311

— ¿Cómo lo sabes?— preguntó el pelirrojo muy sorprendido.97

— ¿En serio?— intervinó Jungkook frunciendo el ceño.— ¿Y ahora qué?


¿tienes un perro llamado Alexander?209

— ¡Sí! Pero debe estar en el jardín.— comentó con entusiamo.149

P á g i n a 141 | 329
— Wow.— expresaron Jungkook y Jimin asintiendo.

Después de aquello, siguieron caminando en silencio hasta el salón principal


donde esperaba el padre de Taehyung.1

Mientras caminaba, notó las miradas curiosas y felices de algunas


sirvientas.

— el Amo Taehyung ha crecido tanto...— comentó murmurando una de


ellas.

— Tan sólo tenía doce años cuando se fue, ahora es todo un hombre.—
respondió otra.55

El de mechas rosas frunció el ceño ante esos comentarios ¿doce años


cuando se fue de casa? Estaba ahora muy confuso.

— Taehyung y su padre no se han visto desde hace cinco años.— le


susurró Jimin al oído al ver la perplejidad en la cara del más bajo.7

— ¿Por qué?— cuestionó también susurrando.

Jimin se encogió de hombros.— No sé, Taehyung nunca me lo ha dicho, es


un tema amargo para él.

Jungkook asintió y dio por zanjada la conversación.

Llegaron delante de la puerta de otro salón donde estaría su padre.

— Deberías entrar antes los invitados, es una tradición de los Kim.— les dijo
Taehyung con notable inquietud a los cuatro chicos.

Jimin, Hoseok y Yoongi se miraron entre los tres y asintieron, poniéndose


delante de la puerta con Taeyeon. El pelirrojo se mantuvo a un lado y
cuando Jungkook iba a pasar también lo tomó de la mano atrayéndolo de
nuevo fuera del salón, cerrando la puerta a la vez.

P á g i n a 142 | 329
— ¿Taehyung? ¿Qué demonios?— cuestionó Jungkook extrañado.

— Jungkook hyung, estoy tan nervioso que creo que si entro a esa
habitación, vomitaré.— le respondió rápidamente con las palabras
atropelladas.— ¿Y si no soy lo que esperaba? ¿y si vuelvo a decepcionarlo?
¿y si no quier-

— Taehyung, primero callate y trata de respirar.— le dijo poniendo las


manos en sus hombros y Taehyung en vez se tomar aire, estaba
hiperventilando.

— ¿D-doy vergüenza, cierto? Ponerse nervioso con algo como esto...—


soltó una risa nerviosa y sin gracia mirando hacia la puerta.— N-no me
parezco en nada a lo p-perfecta que era mi madre... me dijeron que ella
nunca se ponía n-nerviosa

Jungkook frunció el ceño ante las palabras del pelirrojo.

— Taehyung, eres perfecto tal y como eres, no tienes que parecerte a nadie
ni ser como nadie, porque no tiene nada malo ponerse nervioso o tener
miedo.— le dijo Jungkook mirándolo a los ojos y poniendo sus manos en las
mejillas del contrario para que se agachase a verlo.52

Taehyung asintió pensativo.

— Repite conmigo.— dijo Jungkook y Taehyung lo miró atento.— "Soy Kim


Taehyung y no tengo nada de que avergonzarme porque estoy bien como
soy".111

Taehyung asintió cerrando los ojos.— Soy Kim Taehyung y no tengo nada
de que avergonzarme porque estoy bien como soy.

A medida que iba diciendo la frase, se iba relajando y Jungkook lo notó y


sonrió arrugando las esquinas de sus ojos.

P á g i n a 143 | 329
— Sí, TaeTae, eres perfecto tal y como eres.— le dijo susurrando.65

Taehyung tomó aire un par de veces y se puso firme de nuevo, ahora


determinado.— Puedo hacerlo

Jungkook asintió convencido dándole apoyo.

— Gracias, Jungkookie.— le dijo Taehyung dedicándole una sonrisa que


mostraba sus dientes y Jungkook no pudo evitar que su corazón latiese más
rápido ante esas simples palabras.

No puedo hacer nada contra esto ¿cierto?

Pensó con una mezcla de euforia y tristeza llevando la mano derecha a su


corazón mientras que Taehyung abría la puerta, encontrándose la mirada
feliz y una cara sonriente de parte de su padre al verlo.28

Taehyung se quedo sin aire por un momento pero volvió a repetir


murmurando las palabras que le había dicho Jungkook y volvió a
tranquilizarse.

— Hola padre, ha pasado mucho tiempo ¿no?

19. Te lo contaré.
La habitación estaba en completo silencio desde que entraron Taehyung y
Jungkook.6

P á g i n a 144 | 329
El señor amo de la casa estaba sentado en un sillón marrón delante de ellos
con una sonrisa tranquila y Taehyung estaba serioy mirando fijamente al
contrario.

Y Jungkook estaba temblando y sudando, mirando con nerviosismo a ese


señor ya que no paraba de mover los pies.

— ¿Qué demonios te pasa?— le preguntó Yoongi susurrando después de


haberle golpeado con el codo.

— N-n-nada.— el rubio lo miro fijamente y Jungkook suspiró.— E-e-el padre


de Taehyung es el m-mismísimo Byeong-Ho.96

— ¿Quién?— cuestionó confuso Yoongi arrugando la nariz.

El castaño rodó los ojos y le dijo con señas a su amigo "luego te lo


explico".11

— Me alegra volver a verte, hijo.— la voz grave y serena de aquel señor


resonó por primera vez en el salón y Taehyung se estremeció asintiendo.

— Digo lo mismo, padre. — respondió él, casi en un susurró y después su


padre colocó una mueca.

— Esto como que está siendo un poco incómodo.— comentó susurrando


Jimin, Hoseok asintió mirando a Taehyung y su padre repetidas veces.

Byeong-Ho soltó una risa.— No has cambiado nada, realmente no puede


mantenerte sin tener ningún color.— dijo señalando su cabeza, haciendo
referencia a su color de pelo.— Y bueno ¿quiénes son tus amigos?

— Oh, cierto.— recordó el pelirrojo.— Estos son mis amigos, Yoongi hyung,
Jungkook hyung, Jimin, Hoseok hyung.11

La rubia esbozó su sonrisa muy amable mientras se alegaba al pelirrojo y


mirando al dueño de la casa y se enganchó al brazo de su novio.

P á g i n a 145 | 329
— Esta es mi amiga Taeyeon.— presentó a la chica, que ante sus palabras
se quedo de piedra.627

— ¿Amiga?— cuestionó su padre enarcando una ceja.

— ¿Amiga?— volvió a preguntar Jungkook.81

— ¿A-amiga?— preguntó para finalizar Taeyeon aún boquiabierta.168

— Sí. Amiga.— respondió remarcando la palabra incómodo y con una


forzada sonrisa.— Se quedaran estos tres días.128

Byeong-Ho asintió y luego miro a todos los que estaban el salón.— No hay
problema. Si necesitáis algo, no dudéis en acudir a mí o a los trabajadores
de esta casa.1

Los chicos asintieron y Taehyung se levantó lo más rápido que pudo.—


Bueno, os llevaré a vuestras habitaciones.

Los chicos asintieron y siguieron al pelirrojo mientras que su padre siguió


sentado ahí mirando al suelo y Jungkook se sintió un poco mal.

ㅤ5

— Jungkook, pongamonos juntos en la habitación.— propuso Jimin con una


sonrisa y Jungkook esbozó una sonrisa forzada pensativo.12

— Las habitaciones son individuales.— le dijo rápidamente Taehyung.— Sin


excepción.142

El pelirrosa frunció el ceño mirando fastidiado a su pelirrojo ex-amigo y éste


se encogió de hombros con una sonrisita.56

— Taehyung, pero yo quiero dormir con Hoseok.— pidió —más bien


demandando— el de mechas rosas.2

P á g i n a 146 | 329
— Bueno, está bien.— contestó el anfitrión sin darle muchas vuelta al
asunto.81

— ¡¿Y por qué a él si le dejas a mí no?!— exclamó señalando a Hoseok y


pataleando.4

— Porque Jungkook y Hoseok son familia. Tú y Jungkook son...— se cortó


Taehyung a sí mismo tratando de pronunciar la palabra.32

— Novios.— terminó la frase Yoongi.66

Taehyung asintió carraspeando y luego miro a Jungkook y al notar que se


estaban mirando mutuamente, desviaron la mirada.

— Podéis ir a cualquier rincón de la casa, las puertas de la casa se cierran a


las diez de la noche.— terminó su explicación el alto pelirrojo.20

Las habitaciones no estaban juntas unas a las otras, sino que estaban
repartidas por toda la mansión. Por ejemplo, la habitación de Jimin,
Jungkook y Taehyung estaba en el tercer piso, mientras que las
habitaciones de Yoongi, Hoseok y Taeyeon estaban en el segundo y primer
piso.16

— Y por último, el desayuno es a las diez de la mañana aunque podéis pedir


algo a los cocineros si os levantáis más temprano o más tarde.1

— ¿Es esto el paraíso?— cuestionó Yoongi.87

— Vuestros equipajes ya están en vuestras respectivas habitaciones.—


finalizó Taehyung y después de la explicación guió todos a sus
habitaciones.23

[…]

— Demonios, me aburro.— comentó Yoongi mientras caminaba a la par de


Jungkook por aquella casa.12

P á g i n a 147 | 329
Taehyung había dicho que tenían tiempo de sobra hasta que sea la hora de
la cena, donde se volverían a reunir así que pasearan por los al rededores y
terminaran sus cosas. Por lo que Jungkook y Yoongi "exploraban" aquella
gran casa.

— Yo también.— le dijo Jungkook mientras miraba su cuaderno con los


diseños más recientes.

Después de mucha caminata y conversaciones triviales e insultos por parte


de los dos chicos, encontraron un pequeño rincón de la casa.

No era una habitación. Era un espacio cuadrado pegado al pasillo, tenía


grandes sillones de color fucsia, con estanterías pequeñas de maderanal
rededor con libros y fotos. Delante de los sillones había una mesa
rectangular de madera también que tenía más libros.5

Yoongi fue corriendo a sentarse en uno de sus sillones.

— ¡Yoongi! No es nuestra casa, no puedes sentarte en cualquier lado... ¿y


si es algún tipo de santuario?— adivirtió Jungkook mirando las fotos pero
Yoongi hizo caso omiso, encogiéndose de hombros.

— Taehyung dijo que podíamos hacer lo que quisiéramos.— recordó el


bajo.165

Jungkook infló una mejilla aún dudoso pero decidió hacer caso a su amigo y
sentarse a su lado.1

— Que silenciosa es esta casa ¿cierto?— comentó Yoongi después de unos


minutos sin hablar.1

— Lo dices porque vives con tres niños pequeños. Yo creo que es normal,
me gusta el silencio.— le dijo Jungkook.50

P á g i n a 148 | 329
— Toda está casa está de colores oscuros salvo estos sofás, lo demás es
negro o marrón.— observó con detenimiento Yoongi y Jungkook se encogió
de hombros restándole importancia al asunto.


Yoongi se centra en unas cosas...
ㅤ51

Se volvieron a quedar en silencio y mientras que Jungkook dibujaba y


trazaba bocetos en su cuaderno de diseños, Yoongi decidió revisar los libros
que estaban encima de aquella mesa de delante suya.

Encontró revistas viejas, periódicos de hace muchos años atrás y un álbum


de fotos que no dudo en abrir, porque los gatos son muy curiosos.66

— ¿Qué miras?— cuestionó Jungkook al llevar su atención a su amigo y ver


que lo que estaba viendo eran fotos.— ¡Yoongi! ¡Esas son cosas privadas!

— Es Taehyung.— le dijo Yoongi pasando de página y mirando más fotos.—


Cuando era pequeño, junto con otros niños.

Jungkook le picó la curiosidad y se junto más con el rubio para mirar las
hojas.3

— Taehyung no ha cambiado mucho.— comentó el de mechas rosas con


una sonrisa al ver esa sonrisa cuadrada y el ese pelo castaño tan
característicos.1

— Esta mujer se parece mucho a Taehyung.— le dijo Yoongi señalando una


foto.23

Era una foto familiar, por lo que pudo deducir Jungkook, una mujer de
cabello castaño y sonrisa gentil, sostenía a un pequeño bebé mientras que

P á g i n a 149 | 329
era rodeada por los hombros por quien pudo reconocer como Byeong-Ho
más joven con otros tres niños pequeños al rededor de la pareja.

La mujer se parecía tanto al ahora pelirrojo que supuso que era su


progenitora.

— Ahora que lo pienso ¿dónde está la madre de Taehyung?— cuestionó


Jungkook después de recordar no haberla visto por ahí.

— No puede ser...

Jungkook frunció el ceño.— ¿Qué?

— Hace unos días estuve hablando con Taehyung y él llego a decir algo
como que su madre había fallecido hace años.— miró Yoongi sorprendido a
Jungkook, y éste abrió los ojos de golpe.— Pensé que era algún tipo de
broma pero ahora todo cuadra.68

— Yoongi...

— Por cierto.— interrumpió al castaño.— ¿Por qué estabas tan nervioso con
ese tal Bogum-Ho?34

— Byeong-Ho.— corrigió Jungkook.— Y él es uno de mis modelos a seguir.


Es un diseñador que empezó a los 28 años y es conocido mundialmente.

— O sea...¡¿que estamos al lado de una celebridad?!— cayó en cuenta


Yoongi y Jungkook asintió frenéticamente.— ¡¿Y ese Taehyung tiene como
padre a un diseñador?!

Jungkook volvió a asentir.

— Jamás se me pasaría por la cabeza, o sea, ¡ese Taehyung que hace


unos meses se presentó pidiéndote ayuda para vestir!1

P á g i n a 150 | 329
— Cuando me lo dijo, me costó creerlo pero ahora sé que es real.— dijo
Jungkook al seguir viendo la foto.— Me hubiese gustado que también me
contará sobre esto.

Dijo pasado el dedo suavemente por la cara de aquella sonriente mujer.—


Me pregunto que habrá pasado.

Yoongi analizó foto.— ¿Y quienes son los otros niños?— cuestionó mirando
a Jungkook.

— Yo que sé, Yoongi, menudas preguntas me haces.— se quejó el castaño.

— Pensaba que Taehyung y tú tenían tanta confianza como para hablar de


eso...— explicó el rubio mirándolo con obviedad.

— Ahora que lo pienso... r-realmente no sé muchas cosas acerca de Tae.—


admitió Jungkook sin apartar la vista del libro.

— No me esperaba que encontraseis este lugar.79

Una voz más grave hizo aparición en la habitación y Jungkook y Yoongi casi
se caen del sofá del susto.
Levantaron la vista encontrándose con Byeong-Ho y su sonrisa amable,
apoyado en la pared.49

— Y-yo, y-yo, y-yo y-yo...— empezó a hablar Jungkook poniéndose rojo


como un tomate y a punto de convertirse en agua.42

— Lo siento, no queríamos causar problemas ni cotillear.— dijo rápidamente


Yoongi metiéndole un codazo a su amigo.4

El dueño de la casa soltó una risa suave acercándose al par de jóvenes.—


No habéis causado ningún problema.

Sin más, se sentó al lado de Jungkook y miró las fotos con una sonrisa
melancólica.— Pensaba que había perdido este álbum.

P á g i n a 151 | 329
Se quedaron en silencio mientras Byeong-Ho miraba las fotos pasando de
páginas.

— Disculpe.— habló Jungkook de repente, y Yoongi y Byeong-Ho llevaron


su vista y atención hacia él.

— S-sé que es repentino y que apenas acabo de llegar aquí, p-pero me


gustaría saber que le pasó a la m-madre de Taehyung...— dijo reduciendo
su tono de voz a medida que decía cada palabra por la vergüenza de que
estaba siendo muy atrevido, según él mismo.42

El padre de Taehyung suspiró borrando su sonrisa y quedando en completo


silencio durante varios minutos y luego sonrió asintiendo.1

— Estaré encantado de contártelo, Jungkook.

20. Plan de Reconquista.


— Yo entre en el mundo de la moda cuando tenía veintinueve años.—
comenzó sonriendole a los dos chicos que tenía delante.— Era aprendiz y
siempre iba con un diseñador muy reconocido en su época, para ver como
era ese mundo.16

Jungkook asintió emocionado y Byeong-Ho se recostó en el sillón mirando al


techo con una sonrisa serena y la vez nostálgica.

— Una vez fuí a una sesión de fotografía con todo tipo de modelos de una
línea famosa de ropa y la encontré a ella. Mi querida Kim HaYun y la futura
madre de Taehyung.— tomó una foto de aquella chica y se la entregó a los
dos chicos para que se la mirasen.— Ella era tres años mayor que yo. Era
fotografa y le encantaban los colores, siempre vestía extravagantemente y

P á g i n a 152 | 329
otras veces se ponía lentillas de colores y se teñia el pelo muchas veces.
Cuando la vi pensé que era la chica más rara del mundo y deseaba no
relacionarme con ella más.45

Jungkook sintió un Deja Vù ante esas palabras.113

— Pero para ser breves, me enamoré de ella perdidamente y ella también


de mí. Pasaron muchas cosas y al final, quedó embarazada de Taehyung.46

Su mirada se entristeció de repente y se quedó en silencio durante unos


largos segundos.— Fue difícil ¿sabes? Lo intentamos muchas veces pero
ella tuvo dos abortos antes de Taehyung y su nacimiento fue literalmente un
milagro.102

— Lo siento... — dijo susurrando Jungkook, se sentía mal de haber


preguntado algo como eso.3

— ¡No lo sientas, Jungkook!— sonrió ampliamente.— Yo también quería


contarlo, había guardado esta historia para mí durante mucho tiempo.9

El de mechas rosas asintió avergonzado y Byeong-Ho prosiguió.

— Cuando ella estaba embarazada, yo decidí crear mi línea de moda que


fue un completo éxito.— Jungkook asintió recordando las primeras épocas
de la compañía.— Y ella me dio la idea de llamarlo "Pequeño Kim" por
Taehyung pero al final lo pusimos en inglés porque sonaba mejor.—
después de eso soltó unas carcajadas.109

Yoongi miraba atentamente al señor de la casa al igual que Jungkook.

— Antes de casarme con HaYun, tuve dos esposas con las que también
tuve hijos. Ella los acepto y los crió como si fuesen sus propios hijos. Bueno,
a lo importante.63

Byeong-Ho volvió a abrir el álbum de fotos sin borrar su sonrisa.

P á g i n a 153 | 329
— En su parto, tuvimos que decidir entre HaYun y Taehyung. — sentenció
aparentemente tranquilo y Jungkook y Yoongi se quedaron de piedra
boquiabiertos, eso realmente no se lo esperaban. — Le insistí que no lo
hiciese, que podíamos seguir intentándolo hasta conseguirlo pero ella me
dijo "si lo abandonase, tendría tres abortos ¿crees que podríamos volver a
intentarlo?" en ese momento, no supe que contestar y aún recuerdo su
sonrisa, entonces supe que tenía que dejarla ir172

— Y-yo, si quiere parar, puede hacerlo...— insistió Jungkook preocupado y


el otro pelinegro negó.

— Estoy bien, ya ha pasado mucho tiempo.— borró su sonrisa y miró al


suelo de repente.— Aquel día todo cambió para mí. Prohibí todo lo que me
recordase a ella. Los colores, la fotografía, fotos suyas, libros, vídeos,
objetos suyos y me aleje de Taehyung, algo de lo que realmente me
arrepiento.99

Jungkook tragó saliva, quería seguir oyendo pero por otra parte se sentía
mal.

— Mi pequeño Taehyung... él era la viva imagen de mi difunta esposa


Hayun. Su cara, sus ojos, sus labios, su sonrisa, su color de pelo y también
le encantaba desobedecerme vistiéndose de colores y siendo ruidoso.


Bueno, realmente no ha cambiado mucho.


Pensó Jungkook.35

— No quería verlo, más beien, no podía verlo. Me recordaba tanto al dolor


de la pérdida de mi esposa, tan solo verlo me hacía querer llorar y me

P á g i n a 154 | 329
recordaba que, por él, mi querida esposa ya no estaba a mi lado.— frunció
el ceño y entrelazó sus dedos tomando aire para relajarse.— Le eché la
culpa de todo, siempre aprovechaba cualquier situación para decirle que
prefería que Hayun siguiese viva y que él no hubiese existido, a pesar de
que tan sólo era un niño pequeño sin culpa de nada y a pesar de que era lo
que más amaba HaYun.84

El ambiente se puso incómodo, realmente Jungkook quería juzgar a ese


señor porque él era uno de los grandes factores de que Taehyung fuese tan
inseguro, pero, realmente lo entendía y no estaba en posición de juzgarlo.20

— Me centré en mis otros tres hijos mientras que Taehyung era criado por
sirvientas durante toda su infancia y adolescencia. A los doce años lo
mandé a otro apartamento junto con damas de compañía que lo cuidasen y
desde hace tan sólo un año, vive solo.46

"No me gusta estar solo"

Perdona por no haberte entendido en ese momento, Tae.


ㅤ94

— Sé que lo hice todo mal. Sé que no lo merezco pero quiero que Taehyung
me vea como su familia, como un padre. Porque se lo merece y es lo que
HaYun quería.1

— Habla con él.— le dijo Yoongi.— Lo hiciste sentir fatal durante toda su
vida, pero sabiendo como es él, hay posibilidades de que te perdone.79

Jungkook asintió.— No sé con certeza si Taehyung te perdonará. Pero no


es una persona rencorosa, si se lo explicas como nos lo has explicado a
nosotros, estoy seguro que lo entenderá.— le aconsejó el castaño con una
sonrisa insegura.26

Byeong-Ho asintió con tristeza.— Realmente espero que sí.

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Yoongi se había ido a hablar por teléfono con Namjoon dejando a Jungkook
con su soledad. Iba caminando lentamente por toda la casa mirando al
suelo.
ㅤ2

— ¿Cómo superaste a HaYun?— preguntó Jungkook como últimacuestión a


ntes de irse de aquel espacio de la casa.1

— No la superé.— admitió sonriente Byeong-


Ho.— Sólo me di cuentade que no estaba tratando de superarla, sino que es
taba tratando deolvidarme de ella. Y aunque te parezcan dos conceptos simi
lares, sonmuy distintos.67

Esas palabras se habían grabado en la cabeza del castaño.




No estoy tratando de superarlo, ¿estoy tratando de olvidarlo?
ㅤ32

— Mierda, no quiero ponerme a llorar por esto ahora.— murmuró para sí


mismo apartando algunas traviesas lágrimas de sus mejillas y ojos.

De repente, el sonido de una puerta abriéndose bruscamente asustó al


castaño que brincó del susto para luego darse la vuelta para ver que o quien
había hecho eso.4

Encontró a Taeyeon saliendo de un cuarto, el cuarto de Taehyung.


Jungkook estuvo imaginádose miles de razones de porqué estaba Taeyeon
en el cuarto de Taehyung.6

Pero sus dudas se disiparon al ver el ceño fruncido y la mandíbula apretada


de ella y a Taehyung saliendo de la habitación serio pero tranquilo.

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El de mechas rosas se dio la vuelta dispuesto a irse cuando vio a la rubia
bajarse por los escalones pero Taehyung fue más rápido.

— ¡Jungkook hyung!— exclamó con tono alegre repentino y el llamado paró


de golpe sin darse la vuelta.

Oyó los pasos que hacían los zapatos de Taehyung acercarse a él. El
pelirrojo llevo una mano al hombro del contrario y le dio la vuelta.
Jungkook estaba sonrojado y con ceño fruncido mirando al suelo y se
maldijo internamente de que tan sólo con que Taehyung estuviese cerca de
él, su corazón latiese tan rápido.84

Taehyung mantuvo su sonrisa esperando alguna palabra del castaño.

— ¿Taeyeon y tú os habéis peleado?— cuestionó silencioso sin mirar hacia


el más alto.

La sonrisa en el pelirrojo se desvaneció y llevo una mano a su descubierta


nuca para sobarse, incómodo.— Ah, sí... es porque antes la llame "amiga".

— ¿Por qué lo hiciste?— volvió a preguntar ahora mirando al contrario con


curiosidad.

— Para ser breves, si mi padre se enteraba, se lo comentaría a mis


hermanos y ellos siempre están filtrando información sobre mí, no quería
que Taeyeon sufriera acoso de periodistas o cosas de esas si eso llegaba a
pasar, no es algo que vaya a pasar seguro, pero quería prevenirlo.— explicó
mirando a los ojos a Jungkook, analizándolo y éste asintió.— Pero no lo
quiso entender y dijo que estaba siendo paranoico. Por eso terminamos
peleando.135

Jungkook murmuró un "ya veo" con un asentimiento y se quedaron unos


largos segundos sin decir nada.

P á g i n a 157 | 329
— ¿Ahora me dirás por qué estabas llorando?— cuestionó con tono serio y
Jungkook se sobresaltó abriendo los ojos de golpe.1

— ¿Por qué piensas que estaba llorando?— respondió con un tono bajo
mientras apretaba la tela de su camisa nervioso.

— Tienes los ojos un poco rojos y como tienes pestañas largas, se notan
que están mojadas y que estés un poco decaído y callado te delata.13

Jungkook soltó una risa suave.— ¿Eres detective o algo así?— preguntó
sarcástico y con una ceja enarcada.1

— No.— retiro la vista del castaño y desvío la mirada al suelo.— Pero


cuando se trata de ti, puedo darme cuenta.134

Jungkook borró su sonrisa mirando atónito a Taehyung. Tomo aire y bajo la


cabeza.— A veces me confundes...— susurró.4

— ¿Qué?— preguntó el pelirrojo acercándose más pues no había oído lo


que había dicho.

— Que estuve paseando por el jardín y como es casi primavera, tengo


alergia, estuve con los ojos llorosos y rascandome, nada más.— se cruzó de
brazos mirando demandante a Taehyung para que no hiciese más
preguntas acerca de sus emociones.22

Taehyung se quedó mirando sin hacer ninguna expresión durante unos


segundos al bajo y luego sonrió asintiendo.— Está bien, hyung. Si necesitas
algo, guardamos muchas medicinas en la enfermería.7

— ¿Aquí hay una enfermería?— cuestionó confuso y Taehyung volvió a


asentir.9

P á g i n a 158 | 329
— Tenemos todo lo que necesites.— sonrió alzando el pulgar.— Bueno,
ahora que estás aquí quería comentarte que mis hermanos vendrán
mañana.22

— ¿Tus hermanos?... — el pelirrojo asintió.

Jungkook llevaba un largo seguimiento de la familia Kim y por lo que sabía,


Taehyung era el menor de tres. Una hermana mayor que era también
diseñadora y dos hermanos, uno periodista y otro presidente de un canal
importante en Corea.

Básicamente era una familia de talentos.




Bueno...93

Jungkook llevó la vista hacia el sonriente Taehyung.— Te tienes que ver


bien cuando vengan ellos ¿verdad?

— ¡Sí!— exclamó.

Jungkook asintió con una pequeña sonrisa.


Solo haré lo que he estado haciendo durante todos estos meses.

21: Chaqueta rosa y camisa de flores.


— ¿Quienes son lo hermanos de Taehyung?— preguntó Hoseok mirando
hacia hacia Jimin.

P á g i n a 159 | 329
Jimin, Hoseok y Yoongi se encontraban en el jardín dando un gran paseo
mientras que Taehyung y Jungkook seguían durmiendo como si no hubiese
un mañana.27

Jimin le sonrió.— La hermana mayor es una gran diseñadora pero no sé


mucho acerca de sus otros dos hermanos.

Yoongi se encogió de hombros mientras tecleaba en su teléfono.1

Hoseok sacó su teléfono para mirar la hora y el pelirrosa aprovechó para


verlo también y le hizo gracia el infantil fondo de pantalla que tenía el
pelimorado, con dibujos de conejos y osos así que soltó una risita.6

— ¿De qué te ríes?— cuestionó sonriente Hoseok inclinando la cabeza.3

— ¿Acabas de entrar a la preparatoria? que monada.— comentó Jimin


mirándolo con una sonrisa.3

El contrario borró su sonrisa y miró al peligrosa con una interrogación en el


rostro y Yoongi soltó una risa reprimida.8

— ¿Qué pasa?— preguntó Jimin al ver que Hoseok había dejado de sonreír.

— No estoy en la preparatoria, soy mayor que tú. Me acabo de trasladar a la


univerdad de Daegu.— comentó riéndose por la expresión que había puesto
Jimin.121

— ¡¿Universidad?!— cuestionó el pelirrosa sin creer que ese chico que se


veía como un adolescente de catorce años era mucho más mayor que él.—
¡Pensaba que eras ilegal!22

Hoseok asintió sin entender el último comentario.— Pero tranquilo, estoy en


el primer año.26

El paseo siguió entre conversaciones triviales entre Jimin y Hoseok acerca


de la universidad y Yoongi chateando con Namjoon.5

P á g i n a 160 | 329
Taehyung abrió los ojos con pereza y se quedo mirando al iluminado techo
durante unos largos minutos hasta que por fin se irguió en el cabezal de su
cama.

Con los párpados casi pegados, cogió su teléfono móvil y miró la hora
rápidamente.
El sueño desapareció por completo al ver que tan tarde era y que sus
hermanos llegarían en dos horas y media.
Se levantó de la cama de un salto y cogió cualquier prenda de ropa de su
maleta y se fue directo al baño de su cuarto para darse una buena ducha.

[…]

Había tardado exactamente 27 minutos en ducharse, afeitarse y vestirse ,


así que cuando creía verse presentable, salió de su cuarto mirándose en el
espejo por última vez y fue en dirección al cuarto de su hyung, que por
suerte, se encontraba en el mismo piso que el suyo.25

Iba con prisa, porque ni siquiera había desayunado, por lo que abrió la
puerta de golpe.
Se paró de golpe al analizar a Jungkook, que estaba de espaldas.

Tenía el pelo mojado, por lo que supuso que se acababa de duchar, otro
detalle, es que el castaño no llevaba camiseta, y por último unos
pantalones— demasiado— cortos azules pijama.138

Primero paso la vista inconscientemente por las espalda descubierta y fue


bajando por sus caderas hasta los blancos muslos y las piernas del mayor.
Jungkook se dio la vuelta espantado por la brusquedad con la que habían
abierto la puerta y Taehyung se pudo fijar por fin en su cara, que tenía una
extraña mascarilla negra que sólo dejaba ver sus enormes ojos.274

P á g i n a 161 | 329
Los dos se quedaron mirando mutuamente durante unos minutos hasta que
Jungkook exclamó, notablemente enfadado.— ¡Taehyung! ¡¿Se puede
saber por qué no llamas a la puerta antes de entrar?!16

Y sin aviso propio, una zapatilla impactó contra la cara del pelirrojo que
estaba embobado hasta que sintió el golpe en su cara.
Soltó un quejido agudo y se sobó la nariz agachando la cabeza.— ¡Perdona,
hyung! ¡Fui un desconsiderado!50

Sin más que decir, volvió a salir rápidamente de la habitación cerrando la


puerta tras sí.

Se apoyó en la pared llevándose la mano al corazón porque ahora se


encontraba muy nervioso y otra, aún tratando de aliviar el dolor de su cara.23

Minutos más tarde, se oyó el sonido de la puerta abrirse y se retiró


rápidamente para ver a Jungkook, con el ceño fruncido y mirándolo con
desprecio.

— Realmente lo-

— Callate, Tae.— le interrumpió tosco el mayor.— Ya sé que tus hermanos


vienen en unas horas, pero sigo enfadado ¡Imagina que estuviese haciendo
otra cosa o desnudo!79

Taehyung puso una pose y expresión pensativa.— Con otras cosas... ¿a


qué te refieres?181

Jungkook no tardó en volverse rojo como un tomate.— ¡No estaba


pensando en eso!3

Taehyung inclinó la cabeza confuso al no entender donde quería llegar el


castaño.— ¿En qué?

P á g i n a 162 | 329
El más bajo tomó aire relajándose y negó con la cabeza, luego se cruzo de
brazos.— Nada. Te perdonaré pero no quiero que vuelvas a violar mi
privacidad ¿entendido?— cuestionó de forma amenazadora y el pelirrojo
asintió frenéticamente, luego Jungkook esbozó una pequeña sonrisa
satisfecha.62

— Bueno, empecemos.

ㅤ9

Taehyung llevó a Jungkook a su habitación para que revisase la ropa que


tenía y eligiese cual le quedaría mejor.4

En su estancia, el de mechas rosas insistió en que debía cuidar más su cara


y que se pusiese una de sus mascarillas, Taehyung decidió aceptar y por
eso tenía lo mismo que el mayor hace un rato.17

— Realmente cuidas tu apariencia...— comentó el pelirrojo mirando al


mayor que estaba delante suya recogiendo su flequillo para que se pegase
a su mascarilla.

— Por supuesto, me gusta ser lindo.— le respondió serio, terminando de


recoger el pelo del contrario.43

— ¿Te gusta ser tú?— cuestionó con una sonrisa y luego cayó en cuenta
del piropo estupido que había dicho.137

Jungkook ignoró su comentario pero el intenso color rosa de sus pálidas


mejillas lo delataban.
Taehyung lo miró fijamente y puede ser, aunque sólo quizás, se haya
sentido un poco feliz de que, después de bastante tiempo, el mayor se
sonrojase por algo que él había dicho así que esbozó una pequeña sonrisa
traicionera.

P á g i n a 163 | 329

Jungkook revisaba la maleta de Taehyung para ver si encontraba algo que
le llegase a convencer, pero sólo estaba lleno de camisa a rayas, cuadros y
lunares, hasta que saco una camisa blanca con estampado de flores de
colores y luego una chaqueta rosa pálido.2

— Esa chaqueta me queda grande, no voy a poder ponermela.— le dijo el


menor señalando la prenda que acaba de sacar.— Aunque realmente me
gustaría, era de mi madre.~112

Jungkook miró pensativo a Taehyung y luego a la chaqueta.— Supongo que


puedo hacerte un arreglo rápido.

El pelirrojo lo miró con una exclamación, el castaño le hizo una seña para
que se levantase y Taehyung lo hizo enseguida.

Jungkook le colocó la chaqueta y lo miró asintiendo concentrado.— Hmm,


eres de hombros anchos, por lo que esa parte te queda bien, pero te queda
muy suelto en las mangas y un poco largo, ¿es de tu madre? es bastante
grande para la complexión de una mujer.11

— Me dijeron que le gustaba usar ropa muy grande.— le dijo sonriente.144

El castaño sonrió suavemente y sacó de su mochila un set de costura que


siempre llevaba encima. Le señaló como debía situarse y Taehyung
extendió los brazos para que Jungkook pudiese empezar a arreglar la
chaqueta.

El castaño colocaba alfileres en las partes donde le quedaban holgadas


para poder acomodarlas más tarde.

— También leí que era fotografa de modelos muy famosos, ella era muy
demandada por artistas...— Taehyung explicaba alegre mientras que
Jungkook seguía cortando y arreglando su chaqueta con una sonrisa,

P á g i n a 164 | 329
porque le hacía muy feliz y le daba paz que su menor hablase tan
felizmente.

— Tú también quieres ser fotógrafo, ¿cierto?— le preguntó Jungkook de


repente.

— ¿Cómo lo sabes?— cuestionó Taehyung sorprendido.9

— ...Cuando acababas de entrar a primero en la preparatoria, siempre


llevabas una cámara colgada en tu cuello, así que lo supuse.— explicó
Jungkook sin darse cuenta y luego cayó en sus palabras, levantando la vista
asustado para ver delante la cara impresionada de Taehyung.62

— Jungkook...— dijo el pelirrojo y el nombrado no contestó.— ¿D-desde


hace cuánto...?113

— ¿Q-qué te importa?— le respondió completamente rojo y le clavó un


alfiler intecionalmente en el brazo para interrumpirle142

— ¡AYYY!— exclamó adolorido retirando el brazo rápidamente.

Una risa proveniente de la puerta los hizo detenerse y mirar hacia el umbral,
encontrándose al pelinegro padre de Taehyung apoyado.71

— ¡P-padre!

— S-señor...28

— Estaba pasando y vi esta escena, así me recordó a tu madre y a mí hace


muchos años.— le dijo con una sonrisa elegre.208

Taehyung bajó la cabeza.— ¿Vas a empezar de nuevo?...6

— No.— le respondió rápidamente.— No quiero hacerte sentir mal. Lo


guardó como un recuerdo feliz que quería hacerte saber acerca de tu madre
y yo.

P á g i n a 165 | 329
El pelirrojo miró a su sonriente padre con sorpresa y luego esbozó una
pequeña sonrisa.— Realmente me alegra saberlo.7

Jungkook sonrió muy feliz por el primer paso que estaban dando Taehyung
y su padre y aliviado porque eso haría al pelirrojo olvidar el vergonzoso
recuerdo que había compartido anteriormente.

22: Mi novio y la tuya.


Yoongi hyung ♥

¿Hoy es tu audición, cierto?


Joonie ❤︎❤︎❤︎❤︎❤︎❤︎❤︎❤︎❤︎❤︎❤︎96

Sep.

Estoy un poco nervioso porque no sé como vestirme.


ㅤ17

Yoongi hyung ♥

Yo sé algo que te puedes poner.


Joonie ❤︎❤︎❤︎❤︎❤︎❤︎❤︎❤︎❤︎❤︎❤︎

No, hyung

No voy a ponerme ninguna falda, vestido, encaje, medias o alguna prenda


femenina.
ㅤ122

P á g i n a 166 | 329
Yoongi hyung ♥

�188

Se intentó.

Jungkook pasaba delicadamente un brillo labial por los labios rosas del
pelirrojo mientras los miraba fijamente, muy concentrado de no salirse.—
¡Listo!1

Taehyung asintió mientras se restregaba los labios entre sí para esparcir


mejor el brillo.

— Jungkook hyung...

El llamado guardaba sus alfileres e hilos de nuevo en su caja y llevó la vista


hacia el menor para oír lo que tenía que decir.

— Echo de menos a Jimin.— confesó tímidamente bajando la cabeza.3

Jungkook sonrió con ternura.— Entonces ¿por qué no te disculpas con él?

Taehyung negó con la cebeza.— Le dije cosas horribles, no quiere verme la


cara.33

— Fuiste cruel, es cierto, pero ¿ya has rectificado, cierto?— cuestionó y el


pelirrojo asintió.— No dejes que tu amistad con él se pierda por una pelea
puntual. Jimin también te echa de menos.

Taehyung levantó la mirada sorprendido hacia Jungkook.— ¿Él dijo eso?

— A veces cuando que ve algo por el teléfono dice "esto a Tae le gustaría" o
cuando pasa delante de una tienda de ropa suele comentar "este estilo se
parece al de Taehyung".— le dijo con una sonrisa mientras colocaba su
mochila en su espalda.— Así que no seas tonto y ve a disculparte con él.49

P á g i n a 167 | 329
Taehyung sonrió también y asintió ahora con más vitalidad.— ¡Lo haré!4

Jungkook alzó el pulgar en modo de aprobación y antes de que se diese


cuenta, Taehyung se había acercando a él y había pasado los brazos por
sus hombros para darle un abrazo. Jungkook de quedo estático en su lugar,
ya que el corazón le iba a mil por hora y si cara empezaba a arderle.47

— Gracias por todo lo que haces por mí, Jungkookie.83

Éste se quedo en silencio sin responder mientras temblorasamente rodeaba


el pecho de Taehyung para que el abrazo sea mutuo. No entendía a que
venia la muestra de afecto pero se sentía tan bien estar entre los brazos de
Taehyung.
Jungkook reposó la cebeza en el hombro del menor, cerrando los ojos
mientras se deleitaba con el perfume del pelirrojo.64

Después de largos minutos abrazados por alguna razón desconocida,


Jungkook cayó en cuenta de sus acciones y deshizo el agarre en el pecho
de Taehyung para separarse. El menor lo miro anodadado por la
brusquedad de la separación.

Jungkook estaba rojo como un tomate y mirando con el ceño fruncido a


Taehyung mientras apretaba la tela de su camisa.— ¡¿Quién te permitió
darme un abrazo?!59

Taehyung borró su expresión de confusión y luego sonrió con dulzura.—


Disculpa, no sabía que debía firmar algún documento.
ㅤ65

Jungkook hyung se ve tan pequeño y tierno cuando está así denervioso, ten
go ganas de...
ㅤ345

P á g i n a 168 | 329
Taehyung abrió los ojos de golpe ante sus pensamientos y los cortó de
golpe, Jungkook alzó una ceja por el cambió repentino de semblante del
pelirrojo. Parecía asustado, confuso y sorprendido.5

— ¿Pasa algo?

— N-n-n-no ¿p-por qué piensas es-so?— preguntó forzando una sonrisa y


llevo un dedo al cuello de su camisa para estirarlo y refrescar un poco su
cuello del calor que estaba sintiendo.9

Jungkook asintió perplejo.— Por nada... bueno, cambiando de tema. No he


visto a Taeyeon ni ayer ni hoy...16

Taehyung lo miro con una interrogación y luego cayó en cuenta.—


¡Taeyeon! cierto... ugh, no lo recordaba... se encerró en su habitación y no
ha salido desde ayer, aunque mande a las sirviertas que le llevaran la
comida ¡no te preocupes!87

— No estaba preocupado ni en lo más mínimo por ella.— confesó


rápidamente Jungkook sorprendiendo a Taehyung.73

El castaño lo miraba con sus grandes y brillantes ojos trasmitiéndole todo lo


que quería decir.

El timbre de la casa sonó por toda la casa interrumpiendo su conexión de


miradas y alarmando a Taehyung.— Mierda ¿qué hora es?3

Jungkook se quedó un poco desconcertado porque era la primera vez que


oía al menor decir una "mala palabra"— Justo la hora de que vengan tus
hermanos.36

Taehyung asintió y se miró al espejo rápidamente antes de salir de su cuarto


cogiendo de la mano a Jungkook para correr hacia la entrada.1

P á g i n a 169 | 329
Yoongi, Hoseok y Jimin estaban delante de la puerta esperando con ansias
ver a los hermanos de Taehyung.

Las puertas se abrieron justo cuando Jungkook y Taehyung llegaban.

Lo primero que vieron fue a una alta y esbelta mujer, que a simple vista era
mucho más alta que Taehyung, con el pelo castaño y con unas gafas que
tapaban sus ojos y cejas y unos voluminosos labios rojos.42

Yoongi silbó en bajo ganándose un golpe de Hoseok y una risa avergonzada


de Jimin.90

— ¡Señorita Duri!— exclamó una de las empleadas del lugar con notable
alegría en su voz y la llamada se sacó las gafas con una sonrisa.30

— Esa soy yo.— dijo mientras daba su equipaje a un mayordomo para que
lo llevase a si habitación y se acercaba a Taehyung.— Y este es mi lindo
hermanito, ¿supongo? has cambiado mucho.65

Taehyung asintió con una sonrisa nerviosa recibiendo una caricia en el pelo
de su hermana por unos segundos. De repente todos los de su familia
parecían ser más amistosos con él.

— Y este debe ser tu novio...247

Jungkook notó que la sexy chica le estaba mirando a él y frunció el ceño


confuso.— ¿Por qué piensa eso?5

Duri miro repetidamente a Taehyung y él y luego hacia abajo. Los dos


chicos bajaron la vista y se encontraron con que sus manos estaban
entrelazadas. Las separaron rápidamente sonrojados mirando a lados
contrarios.139

Duri los miro con una sonrisa.24

P á g i n a 170 | 329
— ¡Hola! soy Jimin y él es mi novio Jungkook.— dijo el pelirrosa con una
amplia sonrisa cogiendo de la mano a su pareja.156

— Yo soy Taeyeon y él es mi novio.— dijo repente otra voz femenina,


abrazando el brazo de Taehyung. Este se asustó y miro a la rubia con el
ceño fruncido y luego a su hermana que lo miraba con una sonrisa
traviesa.48

— Yo soy Yoongi pero puedes llamarme el amor de tu vida.— se presentó el


rubio guiñando un ojo y Duri borró su sonrisa.304

— Lo siento, me gustan las chicas.— le confesó rápidamente y sin pelos en


la lengua y Yoongi suspiró.261

— Y a mí los chicos, especialmente los llamados "Namjoon"127

Duri volvió a sonreír dando la mano al rubio en modo de saludo.7

— ¿Dónde están-?— cuestionó Taehyung mirando a los lados son ver a sus
otros dos hermanos.2

— Viaje de negocios, pero te mandan saludos.— respondió cortándole su


hermana mayor.

El pelirrojo asintió decaído y bajo la mirada.


Ellos no han venido porque estoy yo.




Jungkook miró preocupado a Taehyung. quería ir a preguntarle como estaba
pero la mano de Jimin se aferraba a la suya y pensó que estaría fuera de
lugar ya que también estaba Taeyeon.40

P á g i n a 171 | 329
— ¿Dónde está padre?— cuestionó Duri y Taehyung señaló con el dedo
hacia arriba y la chica sonrió asintiendo.— Vuelvo en un rato, voy a
saludarle.8

Taehyung volvió a asentir pero realmente no estaba oyendo.

Cuando su hermana se fue, se soltó del agarre de su pareja bruscamente.—


Iré un rato a mi cuarto, avisarme cuando sea la cena, por favor.

— Sí, joven amo.— respondió una criada haciendo una reverencia y


después de dio la vuelta para irse.3

Jungkook lo miro irse decaído. A pesar de que Taehyung y él habían


invertido tanto tiempo en verse presentable para sus hermanos...93

Después de un rato de matar el tiempo, Jimin y Hoseok se fueron a dar una


vuelta por los jardines solos de nuevo ya que Jungkook ni Yoongi
accedieron a salir ya que también se encontraba un poco decaído y
Taeyeon sólo regreso a su habitación.2

Cuando el rubio y el de mechas rosas se encontraron solos en aquella


inmensa casa, caminando sin rumbo.

— Yoongi...— Jungkook se detuvo mirando al suelo.

— ¿Hm?...— respondió él dándose la vuelta para mirar a su amigo.

El castaño tomó aire y después de unos segundos, habló: Voy a acabar con
todo esto.— admitió derrotado con alguna lágrimas tracioneras queriendo
escapar de sus ojos— Lo intente, realmente quise enamorarme de Jimin,
realmente quiero hacerlo feliz pero, simplemente no puedo.— dicho eso, se
tapó la cara dejando que las lágrimas fluyesen por sus palmas.— Aunque no
quiera ¡Amo a Taehyung!114

P á g i n a 172 | 329
Yoongi lo miró serio y asintió, quería ayudar a su amigo pero era algo que
debía superar por sí solo.

Mientras tanto, con esas palabras, había logrado alocar de una forma muy
intensa y grata el inexperto y confuso corazón de un chico pelirrojo que
siempre estuvo oculto entre las escurridizas paredes de la mansión.

23. Una despedida amarga pero dulce


— Eh, Taehyung, ¿has visto a-

— ¡D-disculpa, Jungkook hyung, tengo que ir a hacer una c-cosa, luego


hablamos!— exclamó con la cara roja y muy nervioso y luego salió corriendo
a toda velocidad dejando al castaño anodadado.38

— Está bien...— murmuró Jungkook con el ceño fruncido y volvió a caminar


en busca de su mejor amigo.

Taehyung estaba encerrado en su habitación dando vueltas mientras se


revolvía el pelo desesperado.

Su mente y corazón era un revoltijo de pensamientos contradictorios,


sentimientos encontrados y confusión y no tenía a nadie con quien
desahogarse o que le explicase que era lo que sentía.4

¿Jimin? No, sigue enfadado conmigo y encima es novio de Jungkook.

¿Jungkook? No, no puedo decirle que es su confesión la que me está


haciendo perder la cabeza.

P á g i n a 173 | 329
¿Taeyeon? No, definitivamente no.

¿Yoongi? No, me mandaría a la mierda nada más verme.46

¿Namjoon? No, no está aquí y se lo podría contar a Jungkook o a Yoongi.15

El pelirrojo dejo escapar el aire frustrado y se tiro a la cama.


ㅤㅤ

— Mamá... ¿qué es lo qué debería hacer? ¿cómo debería actuar?—
cuestionó susurrando al mirar aquella chaqueta rosa que estaba colgada en
el respaldo de la silla.62

Cuando estaba empezando a quedarse dormido por la suave brisa


primaveral que entraba por la ventana y movía sus rojizos mechones, unos
golpes bruscos en su puerta lo sacaron del ensueño.5

Se levantó con pereza y fue a abrir la puerta, abrió los ojos de golpe cuando
se encontró a su novia delante suya.

— T-Taeyeon, ¿qué haces aquí?— preguntó Taehyung mirándola ahora


más tranquilo.

— Taehyung, es nuestro último día en Seúl... deberíamos ir a recorrer el


centro un rato.

El pelirrojo asintió sonriendo ampliamente.— ¡Buena idea! Avisaré a los


demás.

Cuando se iba a ir, la rubia lo cogió de la muñeca para detenerlo, recibiendo


una mirada confusa del contrario.

— No, quiero que vayamos los dos solos.— le dijo seria la chica mirándolo
con el ceño fruncido.

— P-pero...

P á g i n a 174 | 329
— ¡Taehyung! No pasamos nada de tiempo a solas, ¡te recuerdo que eres
mi novio y debes darme prioridad!— se quejó Taeyeon y Taehyung frunció
el ceño, soltándose del agarre de la chica.104

— Taeyeon, he venido con todos, sería de mala educación no traerlos


también...

— ¡Es es mentira! ¡Tú lo único que quieres es que Jungkook se vaya


contigo!— la chica empujó a Taehyung a su habitación y entró con él.93

— ¿De qué estás hablando?— cuestionó Taehyung tratando de no alzar la


voz.

— ¡Siempre es igual! Siempre le das preferencia a él, siempre quieres estar


con él, seguro que él te parece más lindo que yo, ¡estoy segura de que a ti
te gusta!— le gritó llena de cólera y Taehyung se mantuvo en silencio,
mirando asombrado a su novia.— Si te gusta alguien más, si yo ya no te
gusto, ¡entonces deberíamos acabar con esto!167

— Taeyeon, claro que no, tú me-

— ¡Callate! ¡No actuamos como novios, no nos besamos, no nos tomamos


de la mano, no nos abrazamos... ¡No nos gustamos!165

El pelirrojo bajó la cabeza, realmente quería contradecirla y decir que estaba


locamente enamorado de ella y quizás atreverse a besarla pero una parte
de su mente y cuerpo no lo dejaba hacer eso.

Y Taehyung, por fin lo comprendió, por lo que unas lágrimas rebeldes se


asomaban por sus ojos.

Estaba haciendo sufrir a Taeyeon, porque ella se merecía ser amada


correctamente y estaba haciendo daño a Jungkook por tomar decisiones a
la ligera.

P á g i n a 175 | 329
Jungkook...

_ Tienes razón, Taeyeon.— admitió Taehyung después de largos minutos
de silencio.— Creí estar enamorado de ti, me esfocé tanto por ti, actúe como
querías, me vestí y me teñí el pelo para acercarme mínimamente al modelo
de hombre que estabas buscando... ¡Todo lo hice por ti! ¡Cambié todo por
ti!96

Taeyeon le miro aún con el ceño fruncido, cruzándose de brazos.

— Sí... lo cambié todo, para que me amarás, para que te sientieses bien a
mi lado.— Taehyung se sentó en su cama, resignado.— Pero, ya no quiero
seguir cambiando. Quiero encontrar a una persona que me ame tal y como
soy, con mis gustos extravangantes en la ropa y con lo lento y estúpido que
puedo llegar a ser.51

La chica que tenía delante suspiró profundamente después de tensos


minutos en silencio.

—Entonces... ¿se acabó?154

Taehyung alzo la cabeza para mirarla y esbozó una sonrisa débil y leve
mientras asentía suavemente, entonces Taeyeon miró hacia un lado,
pensativa. Se había acabado, por fin.19

— ¿Irás a por Jungkook?— cuestionó de repente la chica y Taehyung negó


con la cebeza.21

— Aún no estoy seguro de lo que siento por él.— Taeyeon rodó los ojos, y
bufó, pensando que era el chico más lento que había conocido jamás.—
Además, es el novio de mi mejor amigo y le he hecho mucho daño. Soy lo
peor para él.

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— Pues será mejor que espabiles antes de que realmente se enamoré de
ese chico pelirrosa y tú no tengas posibilidades nunca más. Sería más
soloro para él obligarse a amar a otra persona, supongo.— le dijo con tono
de reproche frunciendo de nuevo el ceño.— Se sincero contigo mismo por
una vez en tu vida.220

— ¿Por qué estás tratando de aconsejarme? Te recuerdo que acabamos de


romper.— cuestionó Taehyung con una sonrisa socarrona.

— He sido una mierda contigo y con Jungkook, pero no creas que me


arrepiento, la verdad es que no te aguanto ni a ti, ni a tus amigos.— Explicó
rodando los ojos.— Y ya que no estamos afectados por la ruptura, se me
ocurrió darte un empujón emocional.142

— Pues no funciona.

—En serio que eres insoportable.

— ¿Y lo dices tú?— cuestionó Taehyung con una ceja alzada.97

Los dos chicos se echaron a reír por unos segundos.— Si no hubise tenido
prisa en que seas mi novia, podríamos haber sido buenos amigos.—
comentó Taehyung y Taeyeon negó con la cabeza de forma rotunda.

— De eso ni hablar, eres el payaso de segundo, mi reputación se iría al


picado, solo te acepte porque te empezaste a vestir mejor.— le dijo negando
con la cabeza.62

— Tsk, ese mote no tiene nada de creativo ni gracioso.

Taeyeon se encogió de hombros.

— Quiero irme a Daegu de nuevo ¿me llamas a un chofer?

Taehyung asintió sin borrar su sonrisa.

— ¿Crees que es muy tarde para ir a por Jungkook?18

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La rubia lo miró con una pose pensativa y luego se encogió de hombros.—
Sólo sé atrevido, Jungkook tiene cara de gustarle las personas decididas, no
sé que te vio a ti pero aprovecha eso y usalo para ponerlo nervioso.86

El pelirrojo se sonrojó.— Yo no soy un chico atrevido.41

— Hace unos minutos lo estabas siendo.

Taehyung desvió la mirada avergonzada y Taeyeon sonrió satisfecha.5

— Realmente siempre supiste que te estabas enamorando de Jungkook, por


eso no se te está haciendo difícil asimilar mi plan.

— A lo mejor, aún tengo que meditarlo un rato más.21

La chica bufó y Taehyung soltó una carcajada.

Taeyeon se acercó a la puerta de la habitación y con una sonrisa de lado,


dijo:

— Ojalá no verte nunca más, Taehyung.86

— Hasta nunca, Taeyeon.131

Ambos chicos se despidieron amablemente y la chica rubia salió del cuarto


del pelirrojo para volver de nuevo a su casa.11

Y Taehyung sonrió relajado. Con esa ruptura, se sentía más ligero y ¿feliz?
esos largos y oscuros meses habían llegado a su fin.2

Además, ahora tenía un camino definido que quería tomar hasta cierta
persona y estaba más determinado que nunca a conseguirlo.

— Ya era hora de volver a ser yo.

P á g i n a 178 | 329
24: Declaraciones inesperadas.
Jungkook seguía buscando por todos
los rincones de la casa a su desaparecido mejor amigo. Estaba empezando
a preocuparse pero considerando la seguridad que había en aquella
mansión, descartó un secuestro.


¿Quién secuestraría a Yoongi, para empezar?


Mientras caminaba, se encontró a Jimin y a Taehyung charlando mientras
reían, sentados en el sillón. Eso lo desconcertó.
Se acercó dudando de su vista a los dos chicos que sonreían felizmente.52

— ¡Jungkook hyung!— exclamó la aguda voz de su novio que sea acercó


con una sonrisa y le dio un tierno beso en la mejilla.6

Taehyung rodó los ojos, fastidiado por ello y cuando Jimin se volvió a dar la
vuelta para sentarse, esbozó rápidamente una sonrisa.104

— ¿Habéis hecho las paces o algo por el estilo?— preguntó Jungkook


dudoso al ver que ya no había la pesada tensión entre los dos amigos.

Taehyung asintió sin decir nada, repasando con su serena sonrisa toda la
figura del mayor que se encontraba con las manos apoyadas en sus
caderas.

— Le dije "¡yo soy como el tiempo, no perdono, pero sí olvido!" y él me dijo


"te compré comida" y me abalancé a sus brazos como la pareja de mejores
amigos que somos.173

P á g i n a 179 | 329
— ¿Por qué esta historia se me hace tan conocida?— se cuestionó para sí
mismo el castaño.— De todas formas, me alegro mucho por ustedes,
chicos, echaba de menos verlos juntos.6

Jungkook esbozó una sonrisa sincera, no mentía cuando dijo eso, sabía que
ambos chicos se necesitaban a pesar de sus diferencias.

Llevó la vista hacia el pelirrojo y se sonrojó al ver que éste lo estaba mirando
finalmente con sus penetrantes ojos marrones y brillantes con una sonrisa
suave que se convirtió en una ladina al notar el color rojo en las mejillas del
mayor.118

Jungkook desvió la mirada hasta la dulce de Jimin.— En fin... ¿habéis visto


a Yoongi?

El pelirrosa negó con la cabeza.

— Dijo que quería leer algo y le recomendé que fuese a la biblioteca.—


empezó a hablar Taehyung sin apartar la vista de Jungkook.— Así que, a lo
mejor estará ahí.

El castaño estaba empezando a ponerse nervioso, porque a pesar de que


no había ningún mensaje oculto tras las palabras de Taehyung, su intensa e
interrumpible mirada lo estaba confundiendo.2

Jungkook asintió y cuando iba a darse la vuelta para irse, volvió a mirar a
Taehyung, recibiendo un descarado guiño de éste. Jungkook se sonrojó y se
marchó de ahí a pasos rápidos.313

Taehyung, cuando vio a su mayor irse, pudo soltar el aire retenido en sus
pulmones y el calor en su cara se expandió. Eso había sido simplemente
demasiado osado viniendo de una persona tan tranquila como él pero
cuando vio a su hyung sonrojándose, supo que había valido la pena.12

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— Taehyung.— dijo Jimin, asustando al llamado que giro la cabeza para
verlo.— Hoseok hyung es muy lindo.260

Taehyung ladeó la cebeza confuso y con una sonrisa divertida al ver su


pelirrosa amigo sonrojándose también.— ¿Vale?...3

— Me he sentido raro últimamente a su lado.— admitió llevándose las


manos a la cara para cubrirse por la vergüenza.— Me he sentido así desde
que vino, estuvimos hablando, le gusta las mismas cosas que a mí, se ríe de
mis chistes... Jungkook nunca lo hace..., le gusta estar a mi lado. Estaba
confundido por este repentino sentimiento y no sabía a quien decírselo para
sentirme mejor, no quiero que piensen que soy un enamoradizo o
apresurado pero realmente creo que Hoseok hyung...— se cortó ahí y no
dijo más y el pelirrojo dio por entendido lo que quería decir.74

Taehyung le vino a la cabeza un sentimiento similar que había tenido.

— ¿Qué debería hacer? no quiero hacerle daño a Jungkook.130

Taehyung esbozó una sonrisa llena de ironía sabiendo que los sentimientos
de Jungkook solo tenían espacio para él. Pero la borró tan rápido como
apareció.79

— No lo sé.— respondió pensativo.— Pero, oye, ahora que estamos en


confianza.20

Jimin lo miró con curiosidad, apartando las manos de su cara para ver la
expresión tímida de su amigo.

— Me gusta Jungkook.

Jungkook había ido donde le había dicho Taehyung, aún aturdido por la

P á g i n a 181 | 329
acción atrevida de su menor. ¿Quizá la vista le estaba fallando y se le había
metido algo en el ojo?96

Jungkook pensó en muchas posibilidades, hasta que encontró a la hermana


mayor de Taehyung caminando por el pasillo con una extraña sonrisa.

— Oh, hola, Jungkook.— saludó sonriente la chica, apoyando la mano en


cintura.— ¿Has visto a la otra chiquilla rubia?50

— Hola, señorita Duri... ¿chica rubia?— cuestionó Jungkook y trató de


recordar donde había visto una chica rubia antes.— ¡Oh! Taeyeon... no, no
la he visto pero Taehyung debe saberlo.30

Duri asintió.— Taeyeon, eh... ¿estudia contigo?82

— Es una año más pequeña que yo pero va a mi mismo instituto.— le


explicó el castaño.— ¿por qué quiere saberlo?19

Duri negó con la cabeza y soltó una risita.— Por nada. Gracias, cuñado.261

Jungkook frunció el ceño.— ¿Cuñado?

Duri asintió con una sonrisa en la cara.— Mi hermanito siempre has sido un
poco tonto.— Jungkook alzó la ceja por aquel grosero comentario.— Pero
estoy más que segura que le gustas mucho.93

Jungkook empezó a ponerse nervioso y rápidamente se cruzó de brazos.—


¿C-cómo...?

Duri sonrió y se fue rápidamente, pasando al lado de impresionado chico.


Jungkook se quedo parado unos segundos, aún impactado.


¿Acaso me oyó aquel día?...
ㅤㅤ

P á g i n a 182 | 329

— Eh, Jungkook.— saludó tranquilo Yoongi apareciendo de la nada.—
¿Qué pasa? Parece que acabas de ver a un fantasma.8

— ¿Y si Taehyung me oyó?...13

Yoongi frunció el ceño.— ¿De qué hablas?

Jungkook abrió los ojos de golpe, no se había dado cuenta de que su rubio
amigo había aparecido. Sonrió negando con la cabeza.— No es nada...
¿dónde te habías metido? te llevo buscando toda la mañana.

— En la biblioteca.2

— Pero si a ti no te gusta leer.— comentó dudoso Jungkook y Yoongi se


encogió de hombros.2

— Estaba en videollamada con Namjoon. Dijo que le parecían muy


atractivas las personas que se pasaban todo el día en la biblioteca.—
explicó brevemente el rubio y Jungkook se golpeó la frente con la palma.144

— ¿En serio has hecho esa idiotez para "impresionar" a Nam?2

— El burro hablando de orejas...70

Jungkook rodó los ojos.

— Quiero visitar Seúl antes de irnos.— dijo de la nada Yoongi.— Vamos a


hablar con Taehyung.

— Mejor habla tú con él...— dijo Jungkook sonrojándose levemente.

— ¿Por?

— Tú sólo hazlo.— demandó con el ceño fruncido y Yoongi rodó los ojos.
ㅤ4

P á g i n a 183 | 329
— ¿Ir a Seúl?— cuestionó Taehyung pensativo.— Está bien.

Yoongi sonrió satisfecho y de repente apareció Hoseok bajando por las


grandes escaleras de la casa con su sonrisa habitual y saludando
animadamente con la mano.25

— ¡H-hobi hyung!— exclamó Jimin sonrosado, detalle que no paso


desapercibido por Jungkook.4

El llamado amplio su sonrisa al ver al pelirrosa y se acercó a los chicos.—


¡Hola! ¿por qué estáis reunidos todos aquí?3

Taehyung empezó a hablar para explicarle al mayor el plan del día. —


Estaba planea-

— ¡Queremos ir al centro de Seúl a dar una vuelta antes de irnos!


¿vendrás?— interrumpió Jimin y Taehyung le dio un codazo con una sonrisa
forzada.38

— Sí, lo que Jimin dijo...— murmuró el pelirrojo.1

— ¡Sí! vámonos ya.— dijo emocionado como un niño alegre el pelimorado y


Jimin lo miraba con una sonrisa emocionada.

Taehyung se alejó de los tres chicos, dejando a Yoongi de tercer tercio.33

— Jimin es tan obvio.— comentó Jungkook, haciendo que Taehyung se


sobresalte ya que no esperaba que estuviese ahí.

— ¿A q-que te r-refieres?— cuestionó Taehyung y se sonrojó al hacer


contacto con los grandes ojos del mayor. ¿Por qué de repente se ponía
nervioso ante acciones tan pequeñas como esa?3

— A nada.— respondió Jungkook serio y desvió la mirada de la de


Taehyung.— ¿Vas a invitar también a tu padre?

P á g i n a 184 | 329
Taehyung se puso frío de repente y empezó a sentirse incómodo.—
¿Debería?2

— Es nuestro último día aquí, pensé que querrías pasar tiempo con él...—
habló en tono bajo Jungkook y Taehyung lo miró durante unos segundos.

— Quiero pasar tiempo contigo. — murmuró el pelirrojo en voz aún más baja
pero lo suficientr alto para que el contrario lo oyese y Jungkook rápidamente
se sonrojó.101

— D-deja tus tontas bromas...— se quejó el castaño con el ceño fruncido,


cruzándose de brazos.

Taehyung soltó una risa nerviosa asintiendo, por culpa de su comentario,


ahora había una gran tensión entre él y Jungkook.

— S-sí... e-es una b-buena idea... voy a avisarle...— dijo tímidamente


Taehyung y Jungkook asintió sin mirarlo.8

— Y también a Taeyeon..

— Taeyeon ya se ha ido a Daegu.— comentó el pelirrojo y Jungkook giró a


verlo confundido.

— ¿Qué? ¿por qué?— no tardó en expresar su curiosidad.

— Una larga historia... pero digamos que ya no estamos juntos.

Después de haber soltado eso tranquilamente, Jungkook asintió y él se fue


casi corriendo al despacho de su padre.

Mientras tanto, el castaño meditaba las últimas palabras del menor y


después de minutos procesando, abrió los ojos de golpe mirando aturdido a
todos lados.13

— ¡¿QUÉ?!

P á g i n a 185 | 329
25. Te quiero.
— Estos tres días han sido como una semana entera.24

Los cinco chicos estaban caminando por una zona transcurrida en el centro
de Seúl, junto al padre de Taehyung, mirando donde podrían comer
mientras charlaban de cosas triviales.

— ¿Quieres ir a una pizzería? — cuestionó sonriente Byeong-Ho a su hijo y


éste negó con la cabeza.6

— No me gusta la pizza.275

Hoseok, quien era un gran amante de la pizza no tardó en soltar un


comentario como "¿eres de este planeta?"135

Después de estar debatiendo que querían comer, el más mayor del grupo
optó por un restaurante conocido.4

— Voy a pedir mesa, vuelvo en seguida. — dijo el pelinegro y los chicos


asintieron.28

Cuando el mayor se encontró fuera de la vista de ellos, Yoongi miró el


restaurante de arriba a abajo con los ojos entrecerrados y analíticos.

— Este lugar parece caro.— atinó a decir mientras que Jimin leía el precio
de cada plato en la carta y una gota de sudor frío caía por su nuca.1

— Un entrante cuesta ¡109.000 wons! — exclamó el pelirrosa señalando el


precio.108

Taehyung negó la cabeza con una sonrisa.— Está bien, mi padre os va a


invitar y si no, lo puedo pagar yo.74

P á g i n a 186 | 329
Los cuatro chicos giraron la cabeza, cortos segundos después de que
Taehyung hubiese dicho eso, muy desconcertados y éste ladeó la cabeza
confuso por la reacción de sus amigos.3

Una chica seria que llevaba el uniforme de camarera, se acercó a los chicos,
interrumpiendo su charla.

— ¿Es usted Kim Taehyung?— cuestionó la mesera y éste asintió


suavemente.— Seguidme, por favor, su padre les espera.

Los chicos se miraron unos a otros y luego siguieron a la chica que los
llevaba hasta un ascensor.

Hoseok, Jimin y Yoongi murmuraban cosas acerca de las personas que se


les quedaban mirando y del inmenso y elegante lugar.9

Taehyung se sintió incómodo al ver como todas esas sofisticadas personas


con trajes o con vestidos combinado perfectamente con sus accesorios y
zapatos lo miraban. A él y a su camisa verde decorado con si corbatín rojo
al rededor del cuello y sin olvidar el detalle de sus llamativos pantalones
amarillos.143

Subieron al ascensor, era bastante grande y amplio por lo que no estaba


apretujados.

— El corbatín te queda mal.— comentó Jungkook con su gran par de ojos


mirándolo, impactando a Taehyung por sus duras e inesperadas palabras.
El pelirrojo frunció los labios y bajó la mirada avergonzado asintiendo
lentamente.

— Tienes razón... será mejor que me lo quite.— dijo en voz baja mientras
llevaba una mano a su cuello para quitarse su llamativo accesorio pero
Jungkook llevó su mano a la del pelirrojo, deteniéndolo.

P á g i n a 187 | 329
El castaño esbozó una sonrisa traviesa negando con la cabeza.— Me refiero
a que lo tienes torcido, así no te va a quedar bien.109

Taehyung retiró las manos rápidamente, asintiendo para dejar que Jungkook
se lo pusiese correctamente de nuevo.56

Mientras que los ágiles dedos de Jungkook colocaban el cuello de su


camisa con su corbatín, el más alto miraba fijamente al mayor y éste se iba
sonrojando mientras fruncía el ceño.5

— Deja de mirarme así.— demandó Jungkook retirando sus manos


temblorosas del cuello de Taehyung.

— ¿Te pongo nervioso, hyung?— preguntó inocentemente y soltó una risa


suave al ver al mayor dándose la vuelta para ignorarlo.192

La puerta del ascensor se abrió segundos después y los chicos salieron y


aquella mesera los guió hasta donde Byeong-Ho los esperaba.

La camarera se fue poco después de que se sentasen. Hoseok, Yoongi y


Jimin estaban un poco desconcertados de porqué había tantos tenedores y
cucharas de distintos tamaños mientras que Taehyung enseñaba cada uno
y sus funciones a Jungkook.17

Otro camarero más sonriente se acercó a los clientes con una sonrisa y al
ver su confusión decidió hablar.2

— Yo les recomiendo nuestros frescos "Escargots"— dijo el chico y


Jungkook miró dudoso a Taehyung, arrugando la frente y éste soltó una risa
por la ternura que le daba el mayor.94

— Caracoles en francés.168

Jungkook hizo una mueca de desagrado y siguió viendo en la carta algo que
él reconociese.

P á g i n a 188 | 329
Yoongi pidió el plato más caro de todos.
Jimin y Hoseok se conformaron con una hamburguesa que al final
compartieron debido al lo grande que era.

ㅤ280

18

Después de comer, fueron a mirar las tiendas de ese lugar. Jungkook


estaba emocionado porque era un lugar donde los grandes diseñadores
tenían sus más importantes sucursales en Corea.

— ¿Te gusta la moda, Jungkook?— cuestionó el señor pelinegro al ver al de


mechas rosas dibujar algunas cosas en su cuaderno mientras miraba un
curioso los escaparates.10

El llamado lo miró avergonzado mientras asentía.— Me gustaría ser


diseñador.1

— ¿Me dejarías ver, por favor?— preguntó señalando aquel cuadernillo


donde Jungkook dibujaba sus ideas. Él asintió y se lo entregó con timidez.108

Byeong-Ho abrió el cuaderno por la primera página delicadamente y recorría


con una inquisitiva mirada mientras pasaba las hojas. Jungkook lo miró
mordiéndose el labio inferior de forma nerviosa

El padre se Taehyung y también uno de sus grandes modelos a seguir,


siempre estaba tratando de entablar una conversación con él pero Jungkook
era demasiado vergonzoso para decir más de unas pocas palabras a una
persona como él.74

— ¡Son bastante innovadores! — comentó con una pequeña sonrisa


mientras le devolvía el cuadernillo.21

P á g i n a 189 | 329
Jungkook correspondió con sonrisa avergonzada y un poco sonrosado.1

— ¡Jungkook!— exclamó Hoseok sonriente mientras se acercaba con toda


la banda a su primo y le extendió un cono de helado de color rosa.— Aquí
tienes.37

El de mechas rosas asintió agradeciendo y giró la cabeza viendo al


sonriente Taehyung y su progenitor, uno al lado del otro pero sin hacer
ningún contacto por lo que frunció el ceño.

El pelirrojo se acercó a él después de que lo interceptara mirándolo.

— Tae, ahora es el momento.— dijo repentinamente Jungkook mirándolo a


los ojos, decidido.— Pronto vendrán a recogernos, es el momento para que
hables con tu padre.

Taehyung cambió su expresión a una dudosa.— Pero, hyung...9

Jungkook alzó una ceja desafiante y el más alto asintió repetidamente y se


acercó de nuevo al más mayor, después de intercambiar pocas palabras, se
fueron a caminar sin rumbo, alejándose de los cuatro chicos.
Jungkook exhaló con una sonrisa aliviada y decidió a terminar su helado
tranquilamente.

Yoongi, Hosoek y Jimin estaban en las mismas, sentados en un banco en


medio del parque relajadamente, así que Jungkook se unió a ellos,
sentándose entre Yoongi y Hoseok.8

— No quiero volver a clase.— se quejó Yoongi alargando sus palabras.137

— Pero si tú nunca asistes a clase.— contrapuso Jimin mirándolo con los


ojos entrecerrados y Hoseok y Jungkook soltaron una carcajada dándole la
razón.54

— Tengo que levantarme temprano igualmente.

P á g i n a 190 | 329
Siguieron comentando cosas sin importancia, viendo como lentamente el sol
se ocultaba tras los edificios y los dejaba en sombra con la fría y
reconfortante brisa primaveral.

— Aah, es nuestro último año.— comentó Jungkook pensando en que


pronto tendría que ir a hacer las pruebas y la matricula para la entrada a la
universidad de diseño.107

Yoongi asintió pensativo mientras miraba el cuenco de cartón de su helado


derretido.1

— ¡¿Taehyung y yo nos quedaremos solos?!— exclamó el pelirrosa,


cayendo en cuenta de que eran los más pequeños del grupo y tendrían que
quedarse un año más y encima sin sus dos mayores.

Byeong-Ho y Taehyung aparecieron con una expresión pacifica en sus


rostros y camianron hasta quedarse delante de los chicos que estaba
sentados en el banco.

— El chofer vendrá en seguida a recogeros.— avisó el pelinegro con una


suave sonrisa y ante eso, se levantaron de donde estaban sentados.— Ya
han recogido vuestras cosas así que podréis iros directamente para que no
lleguéis demasiado tarde a Daegu.

Los chicos estuvieron sonrientes y de acuerdo ante la afirmación de


Byeong-Ho y se mantuvieron charlando y caminando durante los minutos
que estuvieron antes de que el gran coche negro aparacara delante de ellos
con el conocido chofer uniformado.1

Todos los chicos se acercaron al coche, no sin antes despedirse del anfitrión
y agradeciendo su hospitalidad.

Taehyung y su padre se mantuvieron delante del otro, mirándose


inexpresivos antes de forjar un abrazo rápido y sin palabras de

P á g i n a 191 | 329
acompañamiento. A pesar de parecer un acto frío, se notaba que los dos ya
no estaban tan tensos como hace tres días.

Jungkook estaba a punto de subirse al coche, pero la grave voz de Byeong-


Ho los detuvo.7

— ¡Jungkook, espera!— ante eso, el llamado se dio la vuelta rápidamente,


alarmado.21

— Señor Byeong-Ho.— los extremos de sus labios se curvaron en una


sonrisa suave.— ¿qué sucede?

El contrario rebuscó en su bolsillo de su chaqueta y sonrió al encontrar lo


que buscaba. Extendió un pequeño trozo de papel a Jungkook, que lo miró
curioso, agarrándolo.

— Pronto acabarás la preparatoria ¿no?— Jungkook asintió expectante.—


Cuando termines tus estudios y si sigues interesado en el diseño, llama a
este número y podrás hacer las pruebas para entrar aquí.153

El castaño miró detenidamente el contenido del papel y tan rápido como


terminó de leer, abrió los ojos sorprendido alzando la vista al mayor.

— ¡Es el centro que usted formó!— clamó Jungkook aún sin creer el valioso
contenido que tenía entre los dedos y el contrario asistió con una sonrisa
amplia.— Yo... no sé si estare a la altura pero me esforzare mucho, ¡muchas
gracias!64

Con las mejillas sonrojadas y una brillante mirada, Jungkook terminó de


agradecer y despedirse de Byeong-Ho y se subió al coche sin retener sus
chillidos de emoción, el resto no entendía la causa de la inesperada pero
linda reacción del mayor pero sonrieron empaticos.27

P á g i n a 192 | 329
Ya sumidos en la tranquila noche, conquetramente en la medianoche, con el
traqueteó moderado del vehículo en la carretera. Hoseok y Jimin dormían
apoyando la cabeza con el otro mutua y respectivamente mientras que
Yoongi tenía su cabeza en el hombro de Jungkook mientras soltaba suaves
ronquidos por la mala posición.60

Taehyung miraba a través de la ventana el paisaje, aunque no se veía


realmente nada.

— ¿Taehyung?...— cuestionó Jungkook con la voz adormilada y un poco


ronca. El nombrado giró la cabeza para mirar al soñoliento mayor y sonrió.—
¿Todo bien con tu padre?6

El pelirrojo se encogió de hombros.— Tampoco había nada que solucionar


realmente. Pero estuvimos hablando de mí, de lo que me gustaba, de lo que
quería hacer cuando terminara la preparatoria... y esas cosas.

Jungkook asintió mientras bostezaba y cerraba los ojos, preparándose para


volver a dormir.— Eso está... bien.28

Y tan pronto como dijo eso, cayó desplomado en el brazo de Taehyung.


Éste esbozó una sonrisa, cautivado por lo bonito que se veía el castaño
incluso durmiendo.
Se removió para comodidad de Jungkook, y colocó con delicadeza su
cabeza en el hombro, haciendo una cadena con Yoongi, que dormía
babeando en el hombro derecho de Jungkook.22

— Te quiero, Jungkook hyung.128

Y cortos minutos después cerró los ojos relajado, apoyando su acolchada


mejilla en el momento en que cayó dormido, en la coronilla del mayor.

P á g i n a 193 | 329
26: Preparativos, príncipes y caballeros.
— Estoy tan cansado...— se quejó Jungkook mientras se estiraba, entrando
a su centro escolar junto con Yoongi, comiendo a su lado.23

— Sí, la verdad es que te ves horrible.— comentó el rubio con las mejillas
infladas de comida, mirando al pálido castaño y sus sutiles pero notables
ojeras.— ¿Te has desvelado estudiando?2

Jungkook esbozó una sonrisa ladina.— Yo no necesito estudiar, soy una


eminencia.103

El rubio lo miró entrecerrando los ojos con desdén mientras daba un


mordisco a su bocadillo.1

— He estado preparando la pasarela y la ropa para el festival de mañana.


Lo malo de dejar todo a última hora, por lo que me quede toda la noche
cosiendo, tejiendo, midiendo... además de que me comprometiste a hacer
los trajes del grupo de Namjoon.— explicó soltando suspiros de cansancio y
con aire de reproche por lo antes nombrado.

— ¡¿Mañana es el festival?!— clamó Yoongi atragantándose con su comida,


con el pánico y la preocupación en cada pelo de su cuerpo.41

Jungkook frunció el ceño y llevó la vista hacia su asustado amigo.— ¿Es en


serio? te lo llevo diciendo desde que nos fuimos a Seúl. No has hecho el
cartel del grupo de Namjoon ¿cierto?

Yoongi sonrió sarcástico y con aires de superioridad, y se señaló con su


pulgar.— Por favor, Kook, lo hice en el mismo momento en el que me lo
pidió.60

El castaño asintió rodando los ojos.

P á g i n a 194 | 329
Yoongi estaba el club de artes, por lo que tendría que exponer con sus
compañeros de afición su progreso en todo el año, y bueno, Yoongi no ha
progresado nada porque no ha hecho absolutamente en todo el curso, pero
como tiene talento, no necesita esforzarse demasiado para hacer un bello
retrato rápido que sorprendiense a los críticos maestros de las
universidades artes.20

Jungkook y Yoongi siguieron hablando acerca de los planes para el día de


mañana hasta que se encontraron a Namjoon y su grupo. Conformado por
él y dos chicas, Yeri y Hwasa de primero y tercero respetivamente.169

Yoongi frunció el ceño al acercarse y ver que su novio estaba siendo


demasiado cercano con esas chicas. Jungkook lo miró interesado y luego
soltó una risa suave y bromista. — No me digas que estás celoso de esa
tontería. Son un grupo, es normal que sean muy cercanos.16

— Los celos son para personas inseguras, Jungkook.— respondió el rubio


mirándolo con una sonrisa tranquila y arrugando la frente con sarcasmo.48

Jungkook asintió, impresionado por el comentario de su amigo.


¿Desde cuando Yoongi era razonable y maduro?


ㅤ26

— Y yo soy la persona más insegura del mundo.




Retiro lo pensado.
ㅤ262

Cuando el timbre sonó, indicando que todos los alumnos tenían que
marcharse a sus clases, las dos sonrientes chicas de separaron del ahora

P á g i n a 195 | 329
pelinegro, y éste también comenzó a caminar, dispuesto a irse, hasta que
una mano rodeó su muñeca y lo detuvo.

Namjoon giró la cabeza asustado y luego agachó la mirada para ver al


refunfuñado y pequeño rubio, él sonrió en grande al verlo.— ¡Yoonie! te he
echado de menos.17

— Eres mi novio ¿lo entiendes o te tengo que dar besitos en público?—


cortó el saludo Yoongi y Namjoon lo miró desconcertado, luego volvió a
curvar sus belfos en una sonrisa que dejaba ver sus lindos hoyuelos.104

Jungkook los miró incómodo y resignado a sus amigos cuando la pareja


empezaron a abrazarse y darse cortos besos pero por un extendido tiempo.
Y pareciendo que no iban a separarse pronto, ignorando que habían dejado
excluido al castaño Jungkook suspiró rodando los ojos y retomó el camino
hacia el aula de diseño.
ㅤ14

ㅤㅤ
— Jimin, si a ti no te gusta Jungkookie hyung ¿por qué no me dejas el
camino libre?— preguntó con desinterés Taehyung mientras dibujaba en la
mesa corazones con una cara extraña y seria.114

Jimin, que estaba cerca de babear en su pupitre, casi durmiéndose, pero


abrió los ojos de golpe, frunciendo el ceño indignado por la pregunta,
mirando a su compañero que estaba al lado de él en la última fila.

— De eso nada, después de lo mal que le hiciste pasar a Jungkookie hyung,


no te lo voy a poner tan fácil.— explicó ceñudo el pelirrosa y luego volvió a
cerrar los ojos.— Si rompemos, será porque Jungkook quiso.64

Taehyung suspiró resignado y se desplomó en la mesa, dejando de hacer


gabaratos en la superficie de su mesa.

P á g i n a 196 | 329
— Está bien, pero no le pidas que sea tu pareja para el baile de mañana,
por favor.

— ¿Y qué gano yo?— cuestionó Jimin desinteresado.

— ¿Mi más profunda amistad?— respondió forzando una sonrisa tierna a su


amigo y éste lo miró con los ojos entrecerrados e indiferente, porque estaba
a punto de dormirse y su amigo no le estaba proponiendo una oferta
interesante. Aunque, de todas formas, no tenía planeado ni ir a aquel
festival.2

— ¿Es lo único que se te ocurre?

— ¿Comida?2

Jimin volvió a fruncir el ceño, molesto.— ¿Crees que soy tan fácil de
convencer?29

Taehyung llevó un dedo a su labio, pensativo mientras miraba al techo.

— Puedo tratar de convencer a Jungkook para que Hoseok venga al festival,


los padres y familiares están invitados.

El pelirrosa reflexionó sobre las palabras de Taehyung con los ojos


cerrados, no creía que su amigo fuera a conseguirlo pero de todas forma
aceptó.— Bueno, vale.

— ¡Yeii!— gritó Taehyung elevando las manos hechos puños y una sonrisa
alegre.2

— Joven Taehyung, ya nos hemos enterado de que desea ir al baile con el


joven Jungkook de tercero, pero guarde silencio, por favor, estamos en una
clase.— comentó el profesor con una voz severa y grave, mientras que sus
compañeros explotaron a risas y otros murmuraban.296

P á g i n a 197 | 329
Taehyung agachó la cabeza rojo como su color de pelo debido a ese
vergonzoso momento.
ㅤ13


Jungkook leía relajandamente un libro en la comodidad del silencio del aula,
esbozaba una pequeña sonrisa serena e inconsciente a medida que
leía, porque al fin tenía un descanso sin personas y sin trabajo, ya que
Yoongi se había escapado con Namjoon para no ir a una conferencia de no
se acordaba de qué, y Taehyung, Jimin y sus compañeros del club de
diseños aún estaban en clases.3

Estuvo durante unos minutos así, hasta que el sonido de la puerta


abriéndose suavemente resonó en toda la clase haciendo eco. Jungkook
giró la cabeza para ver quien había entrado y luego esbozó una sonrisa
pequeña y rápida antes de volver la vista a su libro.

— ¿Y Taehyung?— cuestionó con desdén el de mechas rosas pasando la


mirada por una de las líneas del libro.

— Lo han castigo, no preguntes por qué.— respondió Jimin a punto de


soltar una carcajada y se acercó a su novio a darle un pequeño paquete con
galletas.

Jungkook recibió gustoso el obsequio.— Gracias.21

El pelirrosa se sentó en una silla delante de Jungkook, deshaciendo el papel


de aluminio que protegía a su bocadillo en la reconfortante compañía de un
concentrado y silencioso Jungkook que estaba sumido en su lectura.

— Taehyung y yo vamos a actuar con el club de teatro mañana, espero que


vengan tú y Hoseok hyung.— comentó repentinamente Jimin y Jungkook
asintió con la cabeza, alzando las cejas con asombro.

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— ¿Tú no estabas en un equipo de baloncesto?— cuestionó el de mechas
rosas mirándolo y el contrario asintió.

— Sí, pero en Teatro no hay muchos y necesitaban otro personaje, así que
Taehyung me pidió ayuda a mí. Esperan que después de mañana, más
gente se una a su club.— explicó brevemente con una sonrisita.— La
historia es un romance típico medieval, ya sabes, dos caballeros
enfrentados por una princesa.81

Antes la explicación, Jungkook asintió interesado, era un gran amante de las


obras románticas medievales así que, seguramente iría. Terminaron la
charla y volvieron a hacer sus propias cosas, leer y comer.3

Ya era el final de las clases, todos los alumnos o al menos la mayoría, ya se


habían ido y sólo quedaban los clubes de deportes que entrenaban en el
patio.2

— Jimin, ¿te gusto?— cuestionó repentinamente Jungkook pero sin apartar


la vista de las páginas del libro.36

El nombrado paró en seco sus movimiento, antes de dar un bocado a su


comida y luego alzó la vista con neutralidad al mayor, que seguía con la
vista clavada en uno de los textos del libro.

— ¿A qué viene esa pregunta?— cuestionó esbozando una sonrisa para


tranquilizarse y el castaño se encogió de hombros.

— No lo sé, solamente se me ocurrió, no le des importancia a mis palabras.


Sólo estaba pensando en que han cambiado las cosas de como eran hace
unos meses. — le respondió correspondiéndole con una sonrisa superficial
que duró a penas unos segundos.

Jimin asintió y se quedó en silencio durante unos minutos.

— Jungkook, yo no voy a gustar ¿cierto?

P á g i n a 199 | 329
El nombrado aguantó la respiración debido a los nervios, sus hombros se
tensaron y se alzaron, luego volvió a exhalar el aire para relajarse y
recuperar la compostura.

— ¿Qué te hace pensar eso?

Jimin soltó una carcajada suave y luego miró su bocadillo con seriedad y
reflexivo.— Tú quieres Taehyung, y por mucho que me esfuerce siempre va
a ser así ¿no?

— Jimin...— susurró Jungkook frunciendo el ceño, viendo por donde estaba


yendo la conversación , pero no logró completar su frase.

— Tranquilo, no estoy triste.— se apresuró a decir el pelirrosa, alzando la


vista con un semblante amable y relajado.— Estoy orgulloso de mí, en
realidad. Hice mi mayor esfuerzo y llegué muy lejos, ¡incluso estamos
saliendo!...90

Jungkook miró al menor con angustia y el ceño fruncido.

— Pero, quiero estar con alguien que me quiera también...— dijo Jimin
borrando su sonrisa y desviando la mirada hacia otro lado.— Y sé que eso,
no lo voy a conseguir estando a tu lado.82

El castaño no dijo nada, no negó ni afirmó nada y bajó la vista hacia su libro
cerrado, que descansaba en su regazo.

— Te lo dije desde un principio, aunque es mi culpa que te sientas así...—


respondió Jungkook jugando con los anillos de sus dedos para calmar su
tensión interior.

Jimin asintió con los belfos curvados levemente en una sonrisa, negando
suavemente con la cabeza.— ¡No! sé que diste lo mejor de ti. Por eso quiero
que seas feliz, a pesar de que yo no sea la causa de ella.2

P á g i n a 200 | 329
Jungkook abrió los ojos de golpe para mirar a Jimin.— ¿Estás...?

— Sólo si tú quieres.— respondió Jimin anticipándose a la pregunta del


mayor, con una mirada decidida y penetrante.29

El contrario volvió a relajar el cuerpo y miró sin ninguna expresión concreta


al pelirrosa durante largos minutos, y después asintió lentamente y el
pelirrosa pudo suspirar de alivio finalmente levantándose.

Cogió la mano derecha de Jungkook con delicadeza y éste lo miró perplejo,


Jimin acercó los nudillos del contrario a su mejilla y la restregó durante una
segundos en un gesto amistoso y con una sonrisa pacífica, pero
rápidamente, se separó.1

— "Entonces, el mejor y más perfecto caballero se retira para dejar a otro


mucho más tonto e inexperto, que consiga la mano del hermoso príncipe."—
recitó de repente haciendo una voz extraña de narrador pero con
determinación y posteriormente, se encaminó a la puerta con la idea de salir
e irse a casa, por fin95

Jungkook alzó una de sus cejas con duda, siguiéndole con la mirada.— ¿Y
eso qué quiere decir?14

Jimin sonrió encogiéndose de hombros con desaire y cerró la puerta tras sí,
sin responder a la pregunta de su mayor.

Jungkook exhaló aire con alivio, sintiendo como un peso se quitaba de


encima suyo y volvió la vista a su libro, abriéndolo con una sonrisa relajada,
de verdad.

— Por cierto, ¡me gusta tu primo!— dijo de golpe la conocida voz de Jimin
apareciendo inesperadamente, por el umbral de la puerta y luego volvió a
cerrarla de golpe y ultra veloz.252

P á g i n a 201 | 329
Jungkook giró la cabeza hacia la puerta con los ojos más abiertos de lo que
jamás habían estado pero Jimin ya había desaparecido antes de que
pudiese preguntar nada.15

[…]

— ¡Jimin~! el señor Choi casi me mata, ¡me repitió toda la clase! y a ti no, y
tú estuviste hablando conmigo.— se quejó Taehyung mientras arrugaba la
frente hacia un pequeño puchero inconsciente.32

Jimin soltó una carcajada.— No te quejes, es tu culpa.

El pelirrojo asintió fastidiando y con la cabeza gacha.— ¿Jungkook hyung ya


se ha ido?

Jimin pensó su respuesta y asintió.— Hace un rato.

Taehyung soltó un tipo de chillido molesto, refunfuñando.— ¡Odio


literatura!35

El pelirrosa sonrió mientras se encaminaba con Taehyung al lado hacia la


salida del centro.

— ¿Y de qué habéis estado hablando?— preguntó Taehyung interesado


mirando a su sonriente amigo.

— Hmm, cosas sin importancia, ya lo sabrás. — respondió bostezando y


restándole importancia al asunto y el pelirrojo arrugó la frente confuso.—
Taehyung.

— ¿Sí?

— Consigue la mano del hermoso príncipe.

P á g i n a 202 | 329
27. El inicio del plan de la princesa
Jimin.
— Mierda, no alcanzo.454

Jungkook estaba de puntillas, los finos dedos de sus pies a punto de


reventar por sostener todo el peso de su cuerpo, el cuerpo adolorido de
tanto estirarse y el ceño frucido con cansancio.

Ya era el día del festival, todos los clubes mostrarían el trabajo que han
estado haciendo a lo largo a los profesores del centro y otros maestros de
algunas universidades para valorar el trabajo de algunos futuros
universitarios.4

Jungkook estaba colocando la decoración de la elegante y gran pasarela,


que ya contaba con los focos y los adornados asientos a cada lado del pase,
había colocado casi todo, pero las partes altas se le resistían, y era
demasiado alto y peligroso como para subirse a una silla.

— Yoongi, subeme a los hombros.— pidió, aunque mejor dicho, ordenó, a


su amigo sentado en una de las sillas con el teléfono, el nombrado alzó la
vista al castaño y arrugó la frente y puso una mueca de confusión.

— ¿Estás loco?— fue lo primero que dijo y luego flexionó su delgado brazo
derecho mientras que con la mano izquierda se tocaba el bicep mientras
mantenía el contacto visual con su amigo.— ¿Has visto estos brazos palo?
con suerte puedo sujetar mi propio cuerpo.111

Jungkook rodó los ojos y luego reflexionó y la verdad es que Yoongi tenía
razón.

P á g i n a 203 | 329
— Ya ha llegado vuestro brillante caballero a salvaos de cualquier apuro, mi
príncipe.— una chillona voz hizo una repentina aparición, sobresaltando a
Jungkook, que después de unos pocos segundos cayó en que era Jimin.51

Se dio la vuelta con la intención de saludarlo pero lo menos que se


esperaba al verlo, es que tuviese colocado un elegante y abultado vestido
de color rosa fucsiamuy intenso y con pliegues por todas partes. Y como
estaba tan sumamente decorado y mullido, Jungkook lo relacionó con la era
victoriana.64

Jungkook llevó la vista con la boca abierta hacia el rostro del pelirrosa, que
sólo dejaba ver su eyesmile ya que su boca, mejillas y nariz estaba tapado
por un gran abanico del mismo color del vestido.1

— Dos palabras... ¿qué demonios?— atinó a decir de una vez el castaño


después de repasar el vestido y el portador como unas cien veces y luego
caer en cuenta de que él mismo había diseñado y realizado ese vestido a
mano meses antes.7

— Te dije que actuaría en la obra como uno de los protagonistas pero no te


dije que yo sería un príncipe.— comentó Jimin con una expresión presumida
mientras se abanicaba con fingida distinción.— Creo.93

— ¿Y entonces quién es el príncipe? por cierto, soy tan buen diseñador y


tengo tanto talento.— dijo Jungkook con una sonrisa tonta y a la vez
presumida al ver ese preciosa creación suya.41

Jimin miró hacia arriba pensativo y luego sonrió al acordarse.— ¡Lisa!129

Jungkook abrió los ojos y luego esbozó una sonrisa algo impresionada.—
Eso sí que fue algo inesperado.8

P á g i n a 204 | 329
Jimin se encogió de hombros riéndose y luego llevó la vista hacia Yoongi,
que lo miraba fijamente, pero tapándose de nuevo media cara con el
abanico.— Ya puedes soltar tus comentarios.32

Yoongi suspiró aliviado con una sonrisa mientras se tocaba el corazón, su


expresión era serena y se mantuvo mirando a Jimin con una sonrisa
genuina. Jungkook y el pelirrosa lo miraron con extrañeza.2

— Estoy muy excitado.441

Jimin abrió los ojos de golpe, sonrojándose de repente al recodar


lospeculiares gustos del mayor y luego repasar cómo estaba vestido,
Jungkook sólo se golpeó la frente con la palma, negando con la cabeza.
El pelirrosa se puso detrás del castaño con miedo a la pervertida mirada del
rubio.29

— ¿Ya te dije que estoy en una relación abierta con Namjoon? puedo
aceptarte también como mi pareja si te vistes todos los días así.— le dijo
Yoongi sin borrar su sonrisa tranquila pero lleno de deseos oscuros mientras
se acercaba al temeroso Jimin.123

— Gracias por la invitación, pero me niego rotundamente.— dijo el más alto


al instante tratando de tener una expresión neutra mientras apretaba los
hombros del resignado Jungkook por los nervios contenidos.6

— ¿Qué está pasando?54

La voz grave de Taehyung acompañada de la pregunta apareció de repente,


interrumpiendo de golpe la rara situación entre los dos chicos y un
incomodado tercero y también asustándolos de lo sigiloso que podía llegar a
ser Taehyung.

— ¡Taehyung!— exclamo Jungkook con una expresión de pura molestia.—


¡Ya te he dicho que no aparezcas así!50

P á g i n a 205 | 329
El pelirrojo asintió con entusiasmo. Estaba deseando ver a su mayor desde
hace unas horas, ya que lo había estado observando mientras preparaba su
pasarela y le había molestado un poco que Jungkook no hubiese girado la
cabeza a verlo ni una sola vez, cuando él estaba practicando su actuación,
pero su enfado se le paso al ver como el más bajo tenía tiernamente —solo
para él— el ceño fruncido.34

Jungkook al ver que el menor no iba a quitarse esa estúpida sonrisa de su


cara ,suspiró dándose la vuelta de nuevo e ignorado los latidos de su
corazón de lo bien que le quedaba a su menor ese disfraz de príncipe azul y
esa capa blanca, como salido de uno de esos cuentos que tanto le gustaba
en su infancia.97

— ¿Alguien me va a ayudar a subirme ahí arriba?— cuestionó con molestia


al ver que había perdido tiempo en esa trivial situación y aún tenía tantas
cosas que hacer.

Jimin asintió repetidamente y se agachó a toda velocidad para que


Jungkook pudiese subirse a sus hombros, adelantándose a las acciones dd
Taehyung, que se quejó en silencio.

El castaño se subió con cuidado a los hombros del pelirrosa y se sujeto con
fuerza a su pelo al ascender.32

Jungkook tomó aire y alzó los brazos para poder colocar los dichosos
decorativos de una vez por todas.

Después de varios lazos y adornos colocados, el de mechas rosas terminó


por fin su tarea y pidió a Jimin que lo bajase, éste asintió con la intención de
bajarlo, pero al retroceder, piso con el talón de sus tacones el extremo de su
largo vestido haciendo que su cuerpo se echase hacia atrás con violencia y
Jungkook tirase de su pelo, cerrando los ojos de golpe y encogiéndose al
ver presentir el impacto.107

P á g i n a 206 | 329
Al oír un gran impacto pero no sentir ningún dolor, al cabo de algunos
minutos, abrió los ojos lentamente y temeroso, sólo se encontró cara a cara
con el rostro asustado y sorprendido de Taehyung y luego cayó en cuenta
de que estaba literalmente en sus brazos, con un brazo al rededor de su
cintura y otro por debajo de sus muslos.165

Taehyung vestido de príncipe, había conseguido atraparle en pleno vuelvo y


Jungkook mientras que éste lo sujetaba al estilo princesa. No tardó en
sonrojarse hasta las orejas por esos estúpidos y cirsis pensamientos
mientras que seguía sin apartar la mirada de la Taehyung.42

Mientras tanto, Jimin, cayó en una superficie blanda, aturtido, se irguió en su


sitio, pero aún sentado en aquella firme pero suave superficie y luego se
encontró el rostro sin alma de Yoongi.303

— ¡Yoongi!...— gritó Jimin asustado al ver que el mayor no respondía y su


respiración era muy débil.— ¡Lo siento!

— ... Siempre he soñado... con t-tener a un chico con vestido de la era


victoriana encima mío.— comentó a penas susurrando, estando en la
últimas y agonizando pero tratando de recuperar el aire y Jimin lo miró con
una mueca de desagrado y luego se tiró de golpe al cuerpo del mayor con
desagrado, negándole su derecho a respirar.205

Mientras tanto, Taehyung y Jungkook seguían mirándose, uno más


sonrojado que otro.3

— Te lo agradezco, Taehyung, pero ya puedes bajarme.— dijo por fin el


Jungkook apartando la mirada, vergonzado.1

El pelirrojo cayó en cuenta que seguía sujetando al mayor y asintió


euforicamente, haciendo caso al consejo de Jungkook.— ¿Te has hecho
daño?45

P á g i n a 207 | 329
Jungkook negó y Taehyung observó el semblante avergonzado del mayor y
su fuerte sonrojo, muy notable por su piel clara, mientras que pasaba,
tembloroso, las manos por sus propios brazos. El pelirrojo sonrió,
disfrutando del primerizo pero cálido sentimiento en el pecho.

ㅤ23ㅤ

— ¿Entonces, Hobi vendrá a ver la obra?— cuestionó interesado el pelirrosa
con una sonrisa esperanzadora.6

Jungkook asintió desinteresado mientras apuntaba algunas cosas en su


libreta de los trajes que iban a usar en la actuación de dentro de unas horas
y Jimin chillaba con felicidad.

— ¿Desde cuándo tenéis tantas confianza como para llamaros por


apodos?— preguntó Jungkook mirándolo con una ceja alzada y una sonrisa
burlona.

— Tengo su número, hablamos a todas horas.— explicó Jimin sonriendo


tontamente mientras miraba su pantalla.8

El castaño asintió un poco desconcertado por ello ya que su primo no le


había comentado nada y luego observó el libreto del club de teatro, decidió
echar un vistazo a la obra que representarían.

— ¡¿Así que la obra es "Cinco poema de mí y cinco poemas de él para mi


princesa"?!— clamó Jungkook con la boca formando un círculo al ver el
título de la obra.

Jimin asintió abanicándose, fastidiado por el largo nombre.— La princesa a


penas habla pero hace las escenas más impactantes, pero yo no veo lo
divertido de tener que besarme con Taehyung.— el que estaba hablando

P á g i n a 208 | 329
hizo una mueca, entrecerramdo sus ojos con asco.— De tan sólo recordarlo,
siento escalofríos.112

El de mechas rosas asintió sin realmente hacer caso al pelirrosa mientras


leía con una sonrisa el libreto, Jimin lo miró curioso.

— ¿Conoces la obra?

— ¡Por supuesto! puedo recitarte el libreto completo de memoria de todas la


veces que me lo he leído.— admitió con una sonrisa amplia y alegre y liego
volvió a sumergirse en su lectura.171

Jimin sonrió, esbozando una minúscula sonrisa maliciosa y susurrando


posteriormente.59

— ¿De memoria, eh?...

28. Cambios que descambian.


Después de que todos los clubes estuvieran organizando y decorando sus
próximas exhibiciones, la hora lectiva terminó y todos los alumnos fueron a
sus respectivas casas para prepararse para la gran tarde.1

El plan del festival era, básicamente, la inauguración, que daría paso al baile
de presentación, luego la exposición del trabajo de los talleres y por último,
otro baile para finalizar.

El grupo de amigos contaban con dos horas y media para vestirse y


prepararse para la fiesta, así que Jimin y Taehyung se fueron por su lado y
Yoongi y Jungkook por el otro.

P á g i n a 209 | 329
— Este te queda bien.— dijo Jungkook pensativo mientras ponía delante
alguna camisa a Yoongi para probarla sin necesidad de ponerla.— No,
mejor este.10

Yoongi miró a su amigo con aburrimiento ya que llevaba media hora sin
decidir SU ropa, y eso que no era la de él mismo.

— ¿Sabes? yo prefiero usar el traje típico de todos los años.— dijo el rubio.

— Llevas usando este traje tres años, está desgastado.— comentó el


castaño con el ceño fruncido y colocaba otra camiseta delante de su amigo,
meditando.6

— Pero tiene mi esencia.57

El sonido de la puerta de la habitación de Jungkook abriéndose, interrumpió


la trivial conversación entre los dos amigos, dejando ver al sonriente hoseok
con un camisa, chaqueta lisa y pantalones completamente negros. Los
primeros botones de su pecho estaban desabrochados, exponiendo un poco
de sus clavículas y en su rostro yacía esas gafas de sol de lentes de color
naranja.184

El mayor sonrió en grande a los dos chicos y se dio la vuelta para que
Jungkook y Yoongi pudiesen apreciar con se veía su ropa por todos los
ángulos.3

— Te ves bien.— elogió Yoongi al pelimorado con una sonrisa y alzando el


pulgar en signo de aprobación.

Jungkook también asintió ante lo dicho por el contrario.

— ¡Gracias, Yoongi! y a ti, Jungkook, tú me has ayudado a elegir la ropa.—


dijo Hoseok con una de sus brillantes sonrisas a su primo que también la
correspondió.— Estoy emocionado por esta noche, he oído que vendrán los
antiguos estudiantes, espero ver a Seokjin por ahí.140

P á g i n a 210 | 329
— ¿Seokjin?— cuestionó Jungkook con una ceja alzada y luego sonrió al
recordar a su hyung favorito, aunque ya hacía tiempo que no lo veía.— ¡Jin!
seguro, en el comité dijeron que sería el presentador.36

Hoseok aplaudió emocionado por la noticia.

— ¿Quién es Seokjin?— preguntó curioso Yoongi al ver que sus dos amigos
parecían feliz de oír ese nombre.92

— Jin era uno de mis mejores amigos cuando estaba en vuestra


preparatoria estudiando.— empezó a explicar el pelimorado con una sonrisa
nostálgica pero alegre.— Eramos como tú y Jungkook. Le dieron una beca
para estudiar en Seúl en una de las mejores facultades de medicina y se
fue, se me olvidó pedirle su número o su correo electrónico y perdimos
contacto.— concluyó la historia el mayor encogiéndose de hombros
divertido.— Pero oí que vino hace en mes de nuevo a Daegu así que por
eso vine.4

Yoongi asintió con su curiosidad satisfecha y luego miro la ropa que le


estaba eligiendo Jungkook.4

— ¿Sabes? mejor me pongo mi traje.

— ¿No te gusta lo que he elegido?— cuestionó incrédulo el de mechas


rosas con la frente arrugada.

— Sí me gusta, pero ese traje y yo tenemos una promesa.— aseguró el


rubio pero su amigo rodó los ojos dándose la vuelta para preparar su propio
vestuario.

— ¿Debería maquillarme?— se cuestionó Jungkook para sí mismo, mirando


su cara sin ningún tipo de imperfección y luego susurró .— Aunque
Taehyung me dijo que no hacía falta maquillarme para verme bonito...55

P á g i n a 211 | 329
— ¡A la mierda ese Taehyung!— exclamó Yoongi con el celo fruncido y las
llamas de enojo en sus ojos y Jungkook giro a verlo asustado.— ¡deberías
olvidar a ese tipo y buscarte algo mejor como yo! aunque no precisamente
yo, pero alguien casi igual a mí porque no hay nadie mejor que yo...192

Jungkook rodó los ojos cortando el discurso narcisista de Yoongi y volvió a


darse la vuelta para mirarse en el espejo.

— Realmente me esfuerzo mucho para que me deje de gustar Taehyung.—


comentó con el ceño fruncido aún, mientras se recogía el flequillo con una
pinza.— ¡aunque no es tan fácil! es como pedirte que te deje de gustar
Namjoon.1

— Misión imposible.— contestó rápidamente el rubio con neutralidad y


Jungkook asintió de acuerdo.41

— En fin, de todas formas.— Jungkook cerró su caja donde guardaba todo


sus productos de belleza, decidiendo que no iba a maquillarse.— hoy quiero
disfrutar del festival así que tratare de dejar de lado mis sentimientos por
Tae, hoy.31

Yoongi asintió convencido por las palabras decididas de Jungkook y Hoseok


asintió con entendimiento e interesado.

— Si eso no funciona ¿conoces algo llamado "amarre"?— cuestionó el


pelirmorado sentado en la cama.308

— ¡Hoseok!

46

P á g i n a 212 | 329

— ¿Me pongo este o este?— preguntó Taehyung con dos trajes en una
percha a cada lado de su cuerpo y sujetados con las manos, a su amigo,
que jugaba con su teléfono móvil.8

— Ponte el que quieras.— respondió Jimin desinteresado masticando chicle.

Taehyung resopló bajando las dos prendas con fastidio.— ¿Has venido a
ayudarme o a qué?

— Te quivocas, yo no soy Jungkook, yo sólo he venido a robarte el WiFi. Y


ya tengo puesto mi impecable traje.— dijo el pelirrosa con una sonrisa
presumida deslizando sus manos por todos su cuerpo para que su amigo
pudiese ver lo bien que le quedaba ese traje clásico.70

— Quizás yo también debería optar por un traje clásico.— comentó ahora un


poco desanimado al ver sus extravagantes trajes y su característica mala
combinación de colores.

— ¿Taehyung y la palabra "clásico" en una misma frase?— cuestionó


sarcástico su mejor amigo mirándolo con una ceja alzada y el nombrado
asintió.2

— Quiero invitar a Jungkook a bailar conmigo pero no quiero que sienta


vergüenza cuando todo el instituto lo vean bailando con un tipo vestido
como un payaso.— explicó y suspiró profundamente un poco decepcionado
pero sabiendo que esa era la verdad. Tiro sus conjuntos al suelo para darse
la vuelta a su gran armario y buscar su traje negro clásico.105

Jimin frunció el ceño ante la confesión y luego negó con la cabeza,


sobándose el puente de la nariz.— Ah, Taehyung, eres un verdadero
idiota.20

P á g i n a 213 | 329
El pelirrojo se giró para mirarle angustiado por el comentario y Jimin asintió
determinado con los brazos cruzados.

— Taehyung, salí con Jungkook, trate de cosquistar a Jungkook pero no


funciono y eso es porque te quiere a ti.— dijo el pelirrosa y Taehyung no
pudo evitar empezar a sonrojarse.— Y cuando realmente quieres a alguien,
lo aceptas tal y como es y sólo te preocupas por esa persona sin hacer caso
a los demás42

Taehyung asintió con interés pero sin realmente saber a donde quería llegar
el pelirrosa con ello.1

— ¿Jungkook ha hecho eso contigo?— preguntó mirando a su amigo con


una pequeña y suave sonrisa al ver como asintió después de unos largos
segundos de pensa.— Y entonces ¿por qué piensas que ahora va a ser
diferente?

Tras esas palabras, Taehyung se quedó mirando fijamente uno de sus trajes
en el que había elegido cada prenda según sus gustos.

Tenía razón, Jungkook siempre lo había aceptado ¿por qué ahora no?31

— ¡Tienes razón, Jiminnie!— clamó Taehyung alegre y con una sonrisa


amplia y cuadrada en su cara abrazando lo que iba a llevar esa noche.— A
Jungkook voy a seguir gustándole si soy yo mismo.3

Jimin asintió alzando el pulgar por la afirmación, y feliz porque había


conseguido convencer a su amigo de ser él mismo.5

Se levantó de la cama donde estaba sentado y se acercó a su sonriente


mejor amigo y luego señaló el pelo de éste, Taehyung ladeó la cabeza
confuso, borrando su sonrisa y llevando sus orbes marrones hacia arriba.

— Exacto, y por eso, vamos a empezar dejando de ser el "chico alto y


pelirrojo como le gusta a Taeyeon"— empezó a decir mientras cogía

P á g i n a 214 | 329
rápidamenre su mochila del suelo y empezaba a sacar una caja de tinte de
pelo y una sonrisa convincente a su anodadado amigo.— A "el Taehyung
siendo él mismo como le gusta a Jungkook".

29. Justo en frente de mi ensalada.


Los cinco chicos estuvieron vistiéndose y alistándose, hablando de cosas
que realmente no eran importantes hasta que por fin, llego la hora de salir
de casa e ir rumbo al festival del colegio.17

La casa de Jungkook quedaba lejos del instituto al igual que la de Yoongi,


por eso siempre iban e bicicleta.3

— ¿Te apuntas?— preguntó Yoongi al asustado Hoseok al ver de nuevo la


bici del rubio y recordar malos e impactantes momentos.— Ya he arreglado
los frenos, tranquilo.59

Hoseok se esforzo por confiar en él y se subió al asiento de metal detrás de


él con inseguurdad y agarrando con fuerza la chaqueta del traje de Yoongi,
iría con Jungkook pero éste no contaba con el asiento de atrás como la de
su amigo.60

Jungkook empezó a pedalear y Yoongi y Hoseok no tardaron en ponerse a


su lado, por suerte, aún era inicios de primavera y no hacía tanto calor como
sudar y que tu ropa quedase hecha un desastre.

El pelimorado, más tranquilo y con una sonrisa serena levantó la vista hacia
su conductor, viendo como éste, estaba todo sudado y con una expresión de
estar haciendo un gran esfuerzo.2

P á g i n a 215 | 329
— ¿Qué te pasa, Yoongi? vamos muy lento.— le preguntó preocupado y
frunciendo el ceño al ver como en la cuesta, cada vez iban más lentos y con
más dificultad y Jungkook por delante sacándoles varios metros.42

— Bueno, eso es porque tengo pinchadas las ruedas.



ㅤ32
Cuando llegaron, Yoongi fue corriendo al puesto de bebidas más cercana
para comprarse algo y reponer la fuerza y la masa muscular(grasa) que
había perdido sus piernas y se desaflojó el corbatín del traje.57

Suspiró aliviado cuando la brisa chocó contra su cara y su cuerpo empezó a


destensarse.

— Yoongi es un idiota.— comentó Jungkook mirándolo con perplejidad y


molestia en una sola mueca, Hoseok soltó una carcajada.

A estas alturas, la mayoría del centro escolar ya estaba en la fiesta,


reencontrándose con los amigos y comentando el vestuario de los demás.

Aunque Jungkook había dicho que trataría de dejar sus sentimientos de


Taehyung atrás, la verdad es que se encontraba un poco ansioso porque
Taehyung aún no aparecía. Así que estuvo mirando a la entrada hasta que,
realmente parecía que no iba a venir.7

— ¿Es en serio?— se cuestionó para sí mismo, decepcionado y quizás un


poco triste aunque no lo quisiese admitir, cuando cerraron las puertas para
ingresar en la fiesta y Taehyung y Jimin no habían aparecido.

Se dio la vuelta suspirando hacia la mesa de los aperitivos y empezó a


comer con desgana pero disfrutándolo a la vez, aún fastidiado por la falta de
Taehyung.

P á g i n a 216 | 329
— Maldito Taehyung, eres un completo idiota.— comentó para sí mismo con
la boca llena y Yoongi y Hoseok lo miraron raro y luego mutuamente.

— ¡Mierda, Tae! ¡¿quieres entrar?!— gritó Jimin exasperado porque el idiota


de su mejor amigo estaba delante de la puerta cerrada que conectaba con la
fiesta, totalmente nervioso y paranoico.

— ¿Y si no está? — cuestionó de nuevo asustado y el pelirrosa rodó los


ojos.16

— Hoseok me envió un mensaje diciendo que ya estaba él con Yoongi y


Jungkook.

— ¿Y qué le digo a-?

— ¡Cállate y entra!— le gritó con el ceño fruncido y levantando el uni en


señal de amenaza aunque no iba a pegarlo de ninguna manera.14

Taehyung tragó saliva con dificultad y jugando con sus dedos y la tela de su
camisa. Asintió después de largos minutos y se dio la vuelta con la intención
de abrir la puerta.4

Cerró los ojos pensativo e inspiró aire, cuando por fin se hubo relajado, abrió
los ojos y con determinación, abrió la puerta.2

La movida música resonaba en aquel gran gimanasio y las luces de colores


estaba en cada rincón del espacio aunque aún el sol brillaba en un cómodo
atardecer que pronto daría lugar a la noche.

Nada más abrir la puerta, todos los alumnos fijaron la vista en él y por
supuesto, no tardo en aparecer las miradas de burla y extrañeza mientras
que personas se acercaban al oído de su amigo y murmuraban cosas de él
para posteriormente reírse.92

P á g i n a 217 | 329
Todo el mundo había dejado de hacer caso a la música y la decoración para
fijarse en él y en su estupido vestuario.5

— Tae, tranquilo, no pasa nada... — trató de tranquilizarlo su mejor amigo


tocándole el hombro pero Taehyung estaba inmóvil y con el sudor frío
recorriendole toda la frente.18

— Jimin, no puedo hacerlo, no puedo hacerlo, quiero irme a casa.— empezó


a decir el más alto sintiendo la ansiedad abalanzarse por todo su ser ya que
no sus compañeros no apartaban la vista ni las sonrisas burlecas de él.—
quiero irme de aq-31

— ¡Taehyung, has venido!— un toque en su hombro pudo detener el ataque


de pánico que le estaba dando. Taehyung exhaló aire tembloroso y giró la
cabeza para ver a su sonriente mayor, mirándole a los ojos con adoración.—
¡tu pelo!59

El más alto por fin reaccionó, quitando la vista de las personas que lo
miraban. Estaba ahí por Jungkook, no por sus compañeros, sólo necesitaba
la opinión de él.1

Esbozó una sonrisa cuadrada con aire infantil asintendo.

Y es que, Taehyung había vuelto a su color castaño oscuro de antes con


ayuda de Jimin y había decidido dejar volver a crecer su cabello, como
siempre le había gustado.19

— ¿Me veo bien, hyung?— cuestionó con un tono inocente y sonriendo aún
más cuando las mejillas del mayor se encendieron.

Jungkook frunció el ceño dándose la vuelta y cruzándose los brazos con la


intención de que viese su cara sonrojada.— Hmm, pues no es nada del otro
mundo.

Taehyung soltó una carcajada, ahora muchísimo más relajado.— Que cruel.

P á g i n a 218 | 329
Jimin suspiró aliviado al ver que su amigo se había calmado y se dedico
a buscar con la mirada a Hoseok, cuando por fin lo encontró, lo vio mirando
con una sonrisa emocionada el escenario.
Jimin, dudoso, elevó la vista al escenario viendo a un chico rubio y alto
caminando elegantemente por la plataforma para acercarse al micrófono.62

— Estimados alumnos, profesores y familiares, anuciamos el inicio del


Festival escolar de primavera.— su sonrisa genuina y su esbelta figura se
convirtieron en el tema de hablar en a penas un segundo.— esta noche,
disfrutaremos del baile y de la exposición del trabajo de los talleres de
música, artes y diseño y teatro, con esto, ¡que comience la fiesta!6

Todos aplaudieron y vitorearon aunque eran las mismas palabras de todos


los años pero el presentador era guapo, así que...55

— Les recordamos que está prohibido el consumo de alcohol y cualquier


tipo de droga.— Dicho eso, y entre aplausos, el chico alto y rubio se
marchó.32

Jimin se encogió de hombros y fue a buscar a su Hyung pero éste, había


salido corriendo hacia el escenario dejando a Yoongi comiendo solo.
ㅤ9

La música de Vals hizo presencia y Taehyung supo que este era el mejor
momento para pedirle bailar a Jungkook.49

El ahora castaño giró la cabeza para ver a Jungkook, con su ceñido


pantalón corto con un pequeño estampado de flores rosas a cada lado, una
camisa blanca metida por los pantalones pero que no dejaba de ser grande
por los hombros y brazos y esos dos detalles que lo estaban volviendo loco,
su collarín negro con una linda rosa pálida al rededor de su claro y perfecto

P á g i n a 219 | 329
cuello y las medias igual de blancas y con un sutil encaje, tapándole hasta
las rodillas.177

Taehyung estaba acostumbrado a ver a Jungkook con esas camisas negras


grandes y sus típicas sudaderas así que verlo con un estilo delicado y de
colores pastel, fue un sorpresa muy grata y que daría lo que fuese por ver
estilos así más seguido.

Jungkookie hyung se ve bonito vestido con esas cosas lindas.7

Y yo aquí con una camisa de girasoles, chaqueta azul a cuadros


ypantalones morados.207

— Jungkook.— el llamado llevó la vista hacia el más alto con los labios
fruncidos y serio mientras que movía los pies al ritmo de la lenta música.

— ¿Qué?— contestó, querría haber sido más suave al responder pero la


idea de que Taehyung lo hubiese llamado para bailar lo ponía
extremadamente nervioso.20

Taehyung tendió su mano delante de Jungkook y éste sintió como su


corazón se aceleraba de forma súbita al ver la sonrisa lastimera y
esperaznada de Taehyung como si esperara un rechazo.3

— ¿Me concedes este baile?— recitó una de las frases que le había dicho
Jimin y le agradeció internamente al ver que fuerte sonrojo de Jungkook.104

El de mechas rosas asintió aún confuso y llevó su temblorosa mano hacia la


de Taehyung, que temblaba igual o más.35

Se acomodaron de forma rápida y torpe debido a los nervios.


Taehyung terminó colocando una mano en la cintura de Jungkook mientras
se mordía el labio muy intranquilo y el contrario posaba su mano el su
hombro.57

P á g i n a 220 | 329
Taehyung esbozó una sonrisa forzada para corresponder la incómoda de
Jungkook y luego se fijo en su mano izquierda, que estaba suelta. El pánico
volvió a apoderarse de él.


¿!DÓnde poNGo esta MAno¡?!!240

¡practique tantas veces las pose con Jimin y ahora no me acuerdo!20

¿tengo que tomar su mano?


ㅤ56

Taehyung se estaba agobiando con sus propios pensamientos hasta que


una mano ajena tomó la suya libre con delicadeza, miró confuso a
Jungkook, que posó con lentitud y vergüenza su otra mano en el otro
costado de su cintura, luego, con una sonrisa abochornada y las mejillas
rojas, posó sus dos manos en los hombros del castaño.104

— ¿Así es más cómodo, no?— cuestionó sonriente y Taehyung, que estaba


igual de rojo que él, asintió aún sin creer que estaba acariciando la marcada
cintura de su mayor.
Empezaron a mover sus pies con lentitud tratando de llevar el ritmo de la
canción.60

Estuvieron en silencio durante todo el baile, pero fue más que agradable y
no había necesidad de hablar de nada.

— Malditos, justo en frente de mi ensalada.— comentó Yoongi al ver que a


esos dos en su mundo y él solo en el centro de baile.

P á g i n a 221 | 329
30. Te matare.
Después de que la música terminase de sonar, ambos chicos se separaron
rápidamente el uno del otro, los dos con la cara hirviendo.37

— Ha estado bien... — comentó en voz baja Taehyung, mirándolo y


Jungkook asintió aún sin atreverse a mirar al más alto..

— Taehyung...

— Atención a los integrantes del club de teatro ¡en media hora


empezamos!— clamó una la profesora de dicho taller y el castaño llevo toda
su atención al llamado.15

— Luego me lo dices, ¿vale, hyung?— preguntó Taehyung y Jungkook


asintió duduoso, antes de que pudiera contestar, el menor ya había salido
corriendo hacia su profesora.1

Jungkook se quedó mirando su espalda hasta que salieron del gimnasio


para prepararse.
ㅤ5

— Te ofrezco todo el dinero que quieras a cambio de que no actúes.— le


dijo Jimin a su suplente, ya que si ella no lo sustituía, podría seguir con su
plan.96

— ¿Dinero? ¿por quién me tomas, Park?— cuestionó incrédula la chica que


se estaba maquillando en el caso de suplantar a Jimin en la obra.

— Bueno, pues mi padre es el dueño de una hamburguesería, comida gratis


en el McDonald durante un año entero, bebé ¿qué me dices?— trató de
engatusarla, ante eso, la chica sonrió en grande a sintiendo
frenéticamente.— entonces, cuento que no vas a actuar.70

P á g i n a 222 | 329
— ¡Me da igual la obra si tengo comida chatarra gratis durante un año!162

Jimin alzó el pulgar mientras asentía debido a la buena decisión de su


compañera.

Su plan tal y como lo había planeado.

— Mira, este es el plan...


ㅤ25


[…]

Taehyung recitaba nervioso sus frases al espejo mientras un chico del club
de diseño, lo maquillaba.

Llevaba trabajando en esta obra durante todo un año, así que tendría que
ser el mejor actor, nada iba a salirse de su elaborado plan.

— "¡Princesa...!"5

— ¡ME HE ROTO LA PIERNA!— el grito agudo de una voz masculina


interrumpió la practica de Taehyung, haciendo que se sobresalte.174

El príncipe Taehyung salió de su vestuario hacia donde provenía el grito de


su amigo, corriendo, cuando llego, vio a su amigo sentando en su asiento
del aula con un montón de personas con expresión de preocupación en el
rostro.5

— Estaba bailando y me he hecho daño en el tobillo.— Jimin subió su


vestido y enseñó su rojizo tobillo y Taehyung no pudo evitar colocar una
mueca de dolor ajeno.5

— Que mal, Jimin, con la ilusión que te hacía actuar en esta obra.35

P á g i n a 223 | 329
El pelirrosa miro a su amigo diciéndole "¿en serio?" pero luego se dio cuenta
de que estaba actuandi y asintió lastimero, tapándose la cara.— Supongo
que alguien tendrá que actuar por mí.

— Es una pena pero sí.— dijo su profesora y luego miro a todos lados.—
¿dónde está Han?

— ¡Han me ha llamado diciendo que se ha ido de urgencia porque han


hospitalizado a su madre!— exclamó paranoica otra de las alumnas.81

La profesora abrió los ojos, quedándose en blanco.— ¿Y ahora qué


hacemos? no tenemos a ninguna princesa.

— Yo pod-147

— ¡Yo conozco a alguien que se sabe las líneas de memoria!— exclamó


Jimin alegre y sus compañeros y Taehyung lo miraron extraño, luego volvió
a actuar como si le doliese el tobillo.— Yo conozo a alguien que podría ser
la princesa.153

— ¡Bueno, di! sólo quedan quince minutos para que empiece la obra.—
exclamó la maestra empezando a ponerse nerviosa.

— Se llama Jeon Jungkook.— Taehyung abrió los ojos, en la cúspide de la


sorpresa por la idea tan alocada en la que acababa de caer.— Es de
tercero, actuó en lo mismo el año pasado, estuvimos practicando y se sabe
las líneas de memoria.— mintió el pelirrosa, aunque pareció convencer a la
adulta.28

— ¡Traed a Jungkook!— algunos chicos del club asintieron y salieron


corriendo a buscarlo.90

Mientras tanto, la profesora y los demás alumnos volvieron a salir del aula
para seguir organizando su obra. Taehyung miro a su amigo con el celo
fruncido y la frente arrugada.4

P á g i n a 224 | 329
— ¡Jimin! ¡has planeado algo muy descabellado!— dijo con la intención de
regañarlo y Jimin sonrió ladino, apoyando sus dos pies mágicamente sanos
en el suelo.63

— Taehyung, mi querido amigo Taehyung...— empezó a decir el pelirrosa


pasando un brazo olr los hombros de su ceñudo amigo.— sólo imaginatelo,
Jungkook actuando como tu princesa, con un pomposo vestido y al final,
bum, escena de beso.112

Taehyung pareció nublarse ante esas palabras y Jimin pudo seguir


camelando con su idea, añadiendo cosas dulces al oído.

— ¿No te parece un buen plan?5

— La mejor que he oído en mi vida.



ㅤ1ㅤ
— ¡Jungkook, has llegado!— exclamó la profesora con alegría al ver que su
nuevo fichaje en la obra era alguien tan hermoso.7

— ...Eso creo, hola...— saludó tímido aún sin entender porque estaba en el
taller de teatro con Taehyung vestido de príncipe y Jimin con una venda en
el tobillo.

— Seré breve, necesito que actúes en la obra como la princesa.— fue la


profesora directa y a Jungkook no le dio tiempo a reaccionar antes de que
una chica le acercase el vestido que tenía que ponerse.9

El castaño observó incrédulo el gran vestido que tenía delante y luego negó
con la cabeza repetidamente y con fuerza.

— ¡No pienso ponerme un vestido! ¡también me rehuso a besar a quien


tenga que besar!— exclamó Jungkook sonrojado al ver la cara de leve
decepción de Taehyung.— Además, no me sé los diálogos de la obra.66

P á g i n a 225 | 329
— Oh, venga, Kook, no seas modesto.— comentó el pelirrosa abanicándose
con su abanico que era parte de su disfraz.

— ¡He dicho que no!— volvió a negarse y se dio la vuelta dispuesto a irse
pero una mano en su muñeca lo detuvo.

Se dio la vuelta, sorprendido por la acción y aún mas cuando vio que
Taehyung colocaba sus manos entre las suyas y lo mira fijamente, cosa que
lo intimidaba y no tardo en desviar la mirada, con las mejillas sonrojadas.

— Jungkook, si no tenemos una princesa tendremos que cancelar la obra.—


dijo Taehyung con un tono de voz profundo y aparentemente triste.— He
trabajo un montón de tiempo para esto y realmente quería.3

Jungkook lo miró aún con el celo fruncido y poco convencido y Taehyung lo


soltó dándose la vuelta.79

— Pero bueno, tampoco puedo obligarte a que seas mi princesa.207

Jimin sonrió impresionado por la actuación y le guiñó el ojo cómplice al


sonriente Taehyung, que estaba de espaldas para que nadie lo viese.9

Ante sus palabras, Jungkook no pudo evitar que un escalofrío recorreise


cada extremo de su cuerpo.

Su princesa...79

mierda, por qué soy débil , fetichista y altruista.



— Bueno, está bien, acepto.— concluyó Jungkook cruzándose de brazos y
mirando hacia abajo descontento mientras que los integrantes y la profesora
aplaudían.— Pero no voy a besar a nadie.137

— Está bien, joven.— aseguró su sonriente profesora.— No hace falta que


os beséis realmente, sólo tenéis que acercar la cara y quedaros mirándose

P á g i n a 226 | 329
hasta que el telón baje ¿fácil, no? ¡Vamos, todos a sus puestos! ayudad a
Jungkook a ponerse el vestido.6

— Te matare.— le dijo el de mechas rosas al más altos antes de que dos


chicas lo llevasen al probador para maquillarlo, peinarlo y vestirlo en menos
de diez minutos.

Taehyung alzó un extremo de su labios en una sonrisa de lado y


socarronería, guiñó un ojo a su mayor, que le sacó el dedo de en medio,
sonrojado.

31. No he pensando en él.


CHAT GRUPAL: Yoongi y sus seguidores. �♀︎138

Yoongi hyung.

Yoongi hyung ha enviado una imagen.

P á g i n a 227 | 329
59

mira que pedazo de baby boy se carga el Taehyung.

178

Jungkookie - ̗̀ ♡ ̖́-.

YOONGI, POR QUÉ TIENES QUE PONER ALGO TAN EXTRAÑO EN UN


CHAT GRUPAL.

Yoongi hyung.

Estaba hablando con Namjoon(♡♡♡♡) y me equivoque de chat jajaja.

Hoseok hyung.82

P á g i n a 228 | 329
La verdadera pregunta aquí es, de qué estabas hablando con Namjoon.

Taehyung.

¿Qué es chico bebé?


132

Jungkookie - ̗̀ ♡ ̖́-.

Nada importante, Tae.

Namjoonie.

Responder a: La verdadera pregunta aquí es, de qué estabashablando con


Namjoon.

Somos Yoongi y yo

¿en serio te preguntas de qué estábamos hablando?

Obviamente acerca de que tipo de fetiches tiene Hoseok, Jungkook y


Taehyung.

Concluimos que Taehyung tiene dacrifilia y odaxelgania y a Jungkook


pigofilia y disfezarse según un rol.250

Las de Hoseok y Jimin aún las estamos pensando.

Jungkookie - ̗̀ ♡ ̖́-.

P á g i n a 229 | 329
Jungkookie - ̗̀ ♡ ̖́- ha enviado una imagen.

79

¿Eres consciente de que mañana tienes que presentarte a 4 exámenes y


entregar 3 trabajos?

13

Taehyung.

No creo que me excite ver llorar a alguien... 145

Jiminnie.く|:-P彡 ~~~♪

@Yoongi @Namjoon: F por Jungkook.

F424

Yoongi hyung.

P á g i n a 230 | 329
F

Namjoonie.1

36

Jungkookie - ̗̀ ♡ ̖́-.

No entendí.130

Taehyung.

Jejejeje.
116

— Me retracto, no pienso salir con esto en medio de tanta gente.

Jungkook se miró en el gran espejo que tenía delante con una mueca de
incomodidad y por sobretodo, desagrado.

Su caída de vestido era muy abultado, aunque por suerte, no había


necesitado ponerse uno de esos miriñaques, como él
llamabaexoesqueletos, sólo algunos de kilos de tela para que se viese tan
voluminoso.33

La tela que rodeaba su espalda y sus costados, era blanco con un


estampado floras de color fucsia muy vistoso, mientras que la parte frontal
del vestido que sólo ocupaba el centro de su tórax y seguía sobre su falda,
era de una tela lisa y del mismo color que las flores. Los tirantes estaban
muy decorados por pliegues de tela y se sujetaban un poco más abajo de

P á g i n a 231 | 329
sus hombros, casi llegando al inicio del antebrazo y luego caía por todo su
brazo de forma holgada y elegante.
Los volantes negros que había al final de la manga cubrían sus manos y
otros múltiples detalles como el lazo cojungado al color del vestido que
cubría su vientre y uno aún más grande por debajo de su cintura y el collarín
que cubría casi todo su cuello y estaba adornado en sus costados por otros
volantes que picaban.109

El club de teatro pidió a Jungkook este vestido con medidas dedicadas a


una complexión masculina ya que tenían planeado desde un principio que
un chico actuase el papel femenino, por lo que no tenía un busto abultado y
los hombros eran un poco más anchos.

Jungkook maldeció porque su propia obra estaba siendo usada contra él.130

Miro por última vez su rosados labios, sus párpados sutilmente maquillados
y la sencilla cinta fucsia que pasaba por toda su cabeza para finalizar en un
pequeño lazo, a cortesía de Jimin.

Jungkook bajó la cabeza y puso sus manos en su cara con cuidado para no
arruinar el maquillaje, lamentándose.

— Me veo ridículo, todos se van a reír, quiero llorar.43

— Y-yo creo que te ves b-bien.114

El castaño abrió los ojos de golpe, dejando su lamento atrás y retirando


rápidamente sus manos de su cara para alzar la vista con las cejas
curvadas de frustración a la persona que había hablado, y esa grave voz
pertenecía solamente a Taehyung.

Jungkook frunció sus labios y sus mejillas se mancharon de un suave rojo


que fue disimulado por el maquillaje y luego trató de remediar esa reacción
ya que, indudablemente, no le gustaba.1

P á g i n a 232 | 329
Tomó aire para relajarse y volvió a su expresión neutral de siempre.

— ¿Por qué estás sonrojado, idiota?— cuestionó el más bajo frunciendo el


ceño y confundido al ver al menor un tanto inquieto.

El pelinegro soltó una risa nerviosa y negó con la cabeza.— No es nada, es


sólo que... Estoy un p-poco nervioso por la obra, ya sabes... Mmmh...
Seh.212

El contrario asintió dudoso y ambos se quedaron en silencio durante unos


cuantos minutos, Jungkook jugaba con los volantes de su manga izquierda
mientras se mordía el labio inferior con nerviosismo, al igual que Taehyung.

— Te ves... mmh... sólo...— El más alto quería decir algún comentario más
para que su mayor pudiese entrar en confianza con su apariencia pero el
calor en su cara y la sensación de su corazón retumbando en su cuerpo, no
lo dejaba pensar con claridad. — ...Nadie se reiría de alguien tan bonito
como tú.130

Jungkook lo miró anodadado. Últimamente Taehyung había estado


halagándolo con frecuencia pero ahora se sentía un poco... distinto.
El color rojo paso por toda su cara hasta las puntas de sus orejas y parte de
su cuello, detalle que para el pelinegro, no paso desapercibido y sonrió
complacido.10

— Jungkook ¡la obra va a empezar! a tu puesto.

El llamado se dio la vuelta y asintió con fuerza, luego volvió a mirar al


sonrojado Taehyung sin dejar de arrugar su frente del bochorno que le había
causado.

— Eres un idiota, Taehyung.

P á g i n a 233 | 329
Dicho eso, se dio la vuelta para correr, cogiendo cada extremo de su vestido
para no matarse en el proceso hasta el otro extremo del escenario antes de
que el telón subiese.77

Taehyung no tenía previstas esas palabras, pero igualmente lo tomó bien,


sabiendo la forma en la que su mayor se comportaba cuando estaba
avergonzado.3

Lisa saludó alegremente desde el centro a su amigo Jungkook y éste


correspondió, posteriormente el telón fue subiendo y el corazón de
Jungkook no podía ir más rápido.

Mi personaje es el que menos habla pero estoy tan nervioso...

Jungkook pasó son delicadeza sus dedos sobre sus pintados labios de
forma involuntaria, de repente, había recordado el porqué de su inquietud,
aunque no tenía sentido, porque habían quedado en no hacerlo.3

Pero, aún así...

28

— Hey, Jimin.— saludó Yoongi, caminando hacia él con la manos en los


bolsillos.20

El pelirrosa le hizo un gesto con la cabeza en modo de saludo y volvió a


dirigir la vista al escenario, donde Taehyung y Lisa interpretaban una
acalorada discusión y Jungkook estaba sentado en un trono haciendo con
una expresión de aburrimiento, que también era parte de la actuación.

P á g i n a 234 | 329
— ¿Has visto a Jungkook? llevo buscándolo un buen rato.

— ¿Eres idiota? lo tienes delante de tu cara.— respondió sarcástico


llevando la vista al confuso rubio y luego otra vez al escenario.82

Yoongi abrió los ojos de golpe al entender la señal, y su cabeza se giró con
brusquedad, aunque sus ojos casi se salen de sus órbitas al ver que
Jungkook estaba encima del escenario y como siempre había soñado
verlo.351

A toda velocidad, sacó su teléfono móvil de su bolsillo y los desbloqueó


abriendo la cámara, enfocó al desinteresado castaño y su pulgar, una vez
que hizo contacto con la pantalla, no dejó de presionar el botón para hacer
la foto durante unos largos minutos.63

Jimin arrugó la frente, asustado, ya que su mayor, Yoongi, llevaba sacando


la misma foto desde el mismo ángulo durante un buen rato.61

— ¿Estás bien?— preguntó Jimin por si el mayor había desarrollado un


enfermedad que no le permitía dejar de mover el pulgar.68

— No.
223

[…]

La obra siguió su curso, mientras Jimin comía sonriente su sándwich con su


tobillo intacto, la presentación que ya estaba a punto de culminar.

Y Yoongi no paró de hacer fotos durante todo ese tiempo.24

— Pero... ¿dónde está tu sustituta?— cuestionó el blanquecino, dejando de


hacer fotos para mirar al pelirrosa con curiosidad.

P á g i n a 235 | 329
— Comiendo un hamburguesa en algún lugar.— respondió despreocupado
y Yoongi asintió aunque, sin entender.— Le dije que si se marchaba, le
daría un vale para comida chatarra durante un año.2

El rubio ahora entendió, y analizó el brillante plan de Jimin, que sólo por
suerte, había conseguido su propósito. Volvió a asentir repetidamente para
sí mismo, aún meditando.

— Eres un hijo de puta muy listo.131

Jimin se encogió de hombros y curvó sus cejas en un gesto de superioridad


ante las palabras del mayor.

— Este es el mejor momento, hyung, es la escena del beso, aunque no se


besen, pero algo es algo..— comentó bromista y emocionado a la vez el
menor y Yoongi miró el escenario con mucho atención.

— Taehyung la va a cagar.— comentó en forma de burla mientras se reía de


lo nervioso que se había empezado a poner Jungkook, que sólo con ver su
expresión facial, lo decía todo.

Jungkook pasó todo la actuación que a penas duro unos cuarenta y cinco
minutos en total, desinteresado.8

Realmente sólo contaba con diez lineas.3

Y en la escena del baile, pisó a Lisa sin querer, clavándole todo el tacón en
los dedos, pudo ver como sus labios se fruncian en una sonrisa dolorosa y
susurrando un agonizante "no pasa nada, Kookie" pero como su mano
apretaba su cintura, resistiendo el posible malestar, no decía lo mismo.102

P á g i n a 236 | 329
Y como se tropezó con su vestido al ciminar pero Taehyung pudo sujetar de
los hombros antes de destrozar la actuación y haciéndolo pasar por una
escena de la obra.

Jungkook suspiró aliviado al ver que esta era la escena final y podría ir a
centrarse en su presentación.

UN MOMENTO1

¡¿LA ESCENA FINAL?!

Giró torpemente su cuerpo con cuidado de que sus tacones no le


traicionasen. Al ver que, como según el guión decía, Lisa y Taehyung
extendían su mano con la intención de que la princesa expresara su
elección y que por supuesto, también por el guión, él tenía que elegir a
Taehyung.53

Jungkook tragó saliva al ver la sonrisa amable de Taehyung que mantenía


su mano extendida en su dirección, al igual que Lisa que sólo miraba con un
brillo travieso al par.9

Taehyung le hizo una se la de que debía empezar a moverse y Jungkook


asintió disimuladamente, tomando aire y relajándose, sólo era una actuación
más, no iba a pasar nada fuera de lo que decía el guión por lo que tenía que
relajarse.

Empezó a caminar, con el detallado sonido de sus pasos en la plataforma y


la música que subía la tensión del ambiente.5

P á g i n a 237 | 329
Sujetando un poco la tela de su vestido y extendiendo su mano derecha en
busca de la de su príncipe.32

Y tal como lo decía el guión, su mano terminó delicadamente en la gran


palma de Taehyung.31

Yoongi no paraba de sacudir a Jimin por los hombros sin quitar la vista de la
escena mientras que éste sólo se dejaba ya que compartía el mismo
sentimiento.260

Jungkook mantuvo su pequeños labios separados atontado, mientras que


Taehyung se levantaba otra vez y tomaba su otra mano por delante de su
pecho.

Taehyung había recitado las lineas que tenía y Lisa se retiraba sutilmente
del escenario pero Jungkook sólo podía fijarse en cosas que siempre habían
estado ahí, pero que ahora eran tan especiales.
Como la diferencia de altura que tenían Taehyung y él, la voz grave de
Taehyung resonando a unos centímetros de su cara, su pelo negro, de
nuevo crecido, con la intención de volver a ser largo, o los ojos miel y con un
brillo raro que estaba fijos en un punto de su cara, pero no tenía la mente
clara para razonar que parte era, sólo se dejo llevar por la sesación y el
golpeteo de su corazón.2

Jungkook había vuelto a darse cuenta de que, no había cambiado nada.

Él seguía enamorado de Taehyung.63

Los aplausos y los silbidos empezaron a hacer estruendo en la sala y


Jungkook por fin pudo salir de su burbuja.

La obra ya había terminado, ahora sólo tenía que esperar a que el telón de
bajase y...

P á g i n a 238 | 329
Todo pensamiento fue interrumpido cuando un peso algo caliente y humedo
se posó en sus labios con algo de brusquedad y torpeza.446

Jungkook abrió los ojos progresivamente al darse cuenta de que, ese peso
que estaba sintiendo justamente en su boca, era Taehyung, besándolo.211

Se había quedado estático y el sonido había pasado a segundo plano y las


apretó sus manos que estaban también sujetas a las de Taehyung, que
mantenía una expresión relajada con los ojos cerrados y Jungkook,
dejándose llevar por esa sensación nueva, bajó sus párpados, moviendo
también sus labios pero con la misma inexperiencia y lentitud que el
pelinegro.32

El telón terminó bajándose, dejando en la oscuridad a los dos chicos y al ver


que no se separaban, las demás personas de la obra iban yéndose con
velocidad e incomodidad.162

Jungkook abrió los ojos lentamente, con el éxtasis desvaneciéndose poco a


poco, y cuando se dio cuenta de lo que estaba haciendo, se alarmó y
empujó con fuerza a Taehyung, logrando separarse.

El contrario posó las manos en los antebrazos para volver a acercarlo y


besarlo de nuevo sin dar tiempo a Jungkook a rehusarse.79

— ¡Taehyung, no! Joder, mierda... — gritó el castaño y empujó


directamente al menor, que miró asustado como lágrimas recorrían las
mejillas de Jungkook cayendo en cuenta de que estaba siendo brusco y
desconsiderado.10

— Yo... lo siento mucho.

— ¿Qué ganas con esto?— preguntó el castaño pasando sus dedos por el
costado de sus ojos para apartarse las lágrimas. Taehyung no pareció

P á g i n a 239 | 329
entender la pregunta.— Te quiero y a pesar de que trate de que eso no se
interpusiera en nuestra relación, quieres burlarte de mí de esta forma.77

— ¡No, no es nada de eso! Jungkook, realmente-

— ¡Callate! ¡eres...!— exclamó con los ojos llenos de lágrimas por todas los
sentimientos y sensaciones acumuladas que tenía y que, ahora, había
volcado.5

Sin terminar su frase, agarró los extremos de ese estupido vestido y salió
corriendo por el lado contrario de Taehyung, que aún no sabía como
reaccionar ante ello.53

A Jungkook le gustaba, entonces ¿por qué?16

— ¡ERES UN PEDAZO DE IDIOTA!— la voz enfadada de su amigo Jimin lo


sacó de su ensueño y miro confuso como agarraba el cuello de su traje y lo
zarandeaba.— ¡Bueno para nada! hasta en algo ya hecho ¡lo arruinas!41

— No lo entiendo, Jiminnie, a Jungkook le gusto, entonces, ¿por qué se ha


ido llorando?— Taehyung bajó su cabeza aún tratando de buscar una
explicación. — He hecho llorar a Jungkook hyung.3

— Lo has hecho muchas más veces, imbécil.— escupió Yoongi con los
brazos cruzados, mirándolo con el ceño fruncido.— Pero como estabas
ocupado pensando, hablando de Taeyeon jamás te diste cuenta de eso y
Jungkook jamás te dijo que le molestase porque sabía que te hacía feliz.24

El rubio se acercó amenazante al pelinegro y éste sustituyó el lugar del


pelirrosa, agarrándolo con brusquedad.— ¿Crees que besándolo de la nada,
tratando de hacer todo rápido, vas a conseguir dejar todo eso atrás? eh,
Taehyung, dime ¿vas a añadir más inseguridades de las que ya le has dado
a Jungkook, excusandote de que tú no tenías idea?85

Taehyung oyó con detalle las palabras de su furioso mayor, tenía razón.

P á g i n a 240 | 329
No había pensando en como se sintió Jungkook en el pasado.

— Ahora vas a mover tu puto culo hasta donde esta el de Jungkook y le vas
a dejar claro el tema, diciéndole que lo quieres de verdad y quiero un final
feliz porque si no, te meto una paliza.132

— Yo también.— intervinó serio Jimin.58

Taehyung asintió aterrorizado y por otra parte, determinado.

Yoongi lo soltó y éste salió corriendo por donde se había ido Jungkook, ya
que, con vestido y tacones no habrá ido muy lejos.

Ya era hora de hacerle saber a Jungkook que siempre lo hizo feliz.

32. Amar como tú.


CHAT GRUPAL: Map of soul: PERSONA = ARTE �

Hobi hyung <3.

Hobi hyung <3 ha enviado unas imágenes.

P á g i n a 241 | 329
85

12

Deliciosos chipirones fritos cocinados por el maestro Yoongi �

Joonie (novio de Yoongi, que la verdad es que sigo sin encontrar una
explicación lógica a parte de que esté siendo chantajeando con algo.)92

Ya decía que el beso de esta mañana tenía un regusto extraño.

P á g i n a 242 | 329
Tae. ♡3

Tae ♡ ha enviado una imagen.

47

Jungkook.1

Te matare.

Te dije que borraras esa foto y todas las que tuvieses de mí. :)

Tae ♡.

¿Por qué? Me encanta tener fotos tuyas en mi galería.


1

Lil meow meow.

Uy, pasa el pack.

Jk te dejo en visto kkkkkk que fracasado


70

P á g i n a 243 | 329
Jimin.( ��•ᴗ•�� )7

Respondiendo a: Hobi hyung ha enviado unas imágenes.

¿Cuál es tu opinión acerca de este exquisito plato? maestro Yoongi.

Lil meow meow.

Opino que fue delicioso, bastante, la verdad.

Pero no tanto como los labios de Nam.

Jungkook.

Dejame estrachar la mano de poeta a poeta.

55

Tae. ♡

¿Por qué no me contestas, Jungkookie?

Visto por Jungkook.


82

Hobi hyung. <3

Respondiendo a: pero no tanto como los labios de Nam.

P á g i n a 244 | 329
140

Alerta, pedófilo fetichista suelto.


53

Jimin.( ��•ᴗ•�� )

Respondiendo a: Pero no tanto como los labios de Nam.

A k rico.
56

Joonie (novio de Yoongi, que la verdad es que sigo sin encontrar una
explicación logica a parte de que esté siendo chantajeando con algo.)

Tú también te puedes unir si quieres, Jimin. ;)

Lil meow meow.69

Ya se lo ofrecí, pero él no sabe acerca de la buena vida.2

Jimin. ( ��•ᴗ•�� )

P á g i n a 245 | 329
Exacto.

Mi corazón pertenece fielmente a Hoseok hyung, lo siento.

Hobi hyung. <3

khe?!135

— Te has tropezado tres veces con la capa ¿estás bien?— preguntó medio
riendo Namjoon, que estaba sentado en una de las gradas del lugar, junto
con Taehyung buscando a alguien con la mirada.— Yoongi me ha pedido
que te traiga tu ropa, si te la quieres poner ahora.

El ahora castaño asintió sin apartar la vista de la gente, pero suspirando al


ver que no encontraba a quién buscaba y se sentó en las gradas, al lado del
moreno.

Llevaba buscando a Jungkook durante una hora por todo el recinto, sin dar
con él, se había quedado sin saldo de mandar tantos mensajes a su hyung y
éste le había bloqueado las llamadas.

— Namjoon, necesito un consejo amoroso.— admitió Taehyung mientras se


desenganchaba la capa y se quitaba su extravagante chaqueta del disfraz
de príncipe.6

El nombrado lo miró durante unos segundos y luego desvió la mirada,


encogiéndose de hombros.— Tengo de pareja a un chico que le gusta
vestirme como una mujer, come grillos y casi me mata cuando íbamos
dando un paseo el bicicleta... pero, adelante.192

El mayor asintió, sabiendo de las extrañezas de Yoongi hyung.

P á g i n a 246 | 329
— Bueno, es que Jungkook hyung me dijo hace unos meses que me quería,
pero lo rechacé porque en ese momento, me gustaba Taeyeon.— Namjoon
cerró los ojos y puso los dedos en su barbilla mientras que apoyaba el codo
en su rodilla, pensativo.— pero hoy en la obra lo besé-

— ¡¿Lo besaste?! ¡¿Estás loco?!— exclamó Namjoon abriendo los ojos de


golpe al oír la locura de su mayor.4

— ¡Sí, lo estoy!— Taehyung se removió el pelo frustrado al oír esas


palabras de nuevo.— ¡¿Pero, por qué?!34

Namjoon miró al contrario con sorpresa, a pesar de ser más mayor que él,
no tenía mucha experiencia cuando, de sentimientos de otros se trataba. El
menor de los dos soltó un suspiro mirando con obviedad a Taehyung.

— Eres todo un idiota ¿eh?— El castaño asintió como respuesta sin


despegar la vista del suelo.— Mira, imagina esto. Imagina que te gustó
Jungkook hyung desde hace mucho tiempo, te declaras y te rechaza, y poco
tiempo, cuando intentas, bueno, cuando tratas de... ¿intentar? susperarlo,
viene y te besa de la nada, ¿cómo te sentirías?57

Taehyung levantó la vista con duda, y se quedo recreando esa situación en


su mente para entenderlo mejor durante un tiempo.

— Hmm, me sentiría... ¿raro? No sé como explicarlo.— se paso la mano por


su nuca, expresando su confusión y extrañeza.

Namjoon asintió como un sabio con los brazos cruzados, llegando al punto
donde quería llegar.6

— Pues eso es lo que está sintiendo Jungkook hyung en este momento.

Taehyung pareció entenderlo cuando frunció el ceño y asintió


consecutivamente.

P á g i n a 247 | 329
— ¿Y qué debería hacer para solucionarlo?

Namjoon esbozó una sonrisa tranquila y luego giró mirar a ceñudo


Taehyung, que también lo miró, esperando que contestase a su pregunta.

— Vestirte, ir a buscarlo, decirle cómo te sientes y explicarle por qué hiciste


eso.— aconsejó con un poco de gracia y obviedad en su voz.— Debe
pensar que querías reírte de él.18

Taehyung se levantó de golpe mientras que se desabotonaba la camisa y


Namjoon giró disimuladamente la cabeza hacia otro lado, no es que le
resultase raro ver el cuerpo de otro hombre, sólo que él era muy pudoroso y
Taehyung parecía tener facilidad para desvestirse frente a otras personas.45

Por suerte, estaban en las gradas del fondo, era de noche y las tenues luces
sólo iluminaban la pista.

Taehyung se colocó a la velocidad de la luz, su camisa con estampado de


girasoles, la chaqueta azul a cuadros que no combinaba ni lo más mínimo
con su camisa y se dejó el pantalón de su disfraz puesto, descombinando
aún más su vestuario.47

— Pareces salido de un circo.— comentó Namjoon y luego se tapó


rápidamente la boca, esperando que su mayor no se lo haya tomado tan
mal.

Su sorpresa fue, que cuando levantó la vista asustado a Taehyung, éste lo


miraba con una sonrisa ladina y el ceño levemente fruncido pero con gracia,
y asintió una vez antes de salir corriendo por las escaleras de las gradas.

Namjoon se le quedó mirando, cómo su hyung volvía a correr por todo el


gimnasio, chocando alguna vez con la gente, que volteaban a mirarlo raro
por su vestuario, pero, el castaño sólo parecía centrado en buscar a
Jungkook.

P á g i n a 248 | 329
— Bueno, hyung, has conseguido lo que realmente querías.

— ¿Dónde ha metido Jimin mi ropa?— se preguntó Jungkook para sí


mismo, regresando al club de teatro, donde él había dejado su ropa, pero no
estaba.6

Se había mantenido corriendo de Taehyung durante una hora y cada vez


que el menor creía haberlo encontrado, Jungkook daba vueltas y vueltas
hasta volverlo a perder de vista. Nunca pensó que tendría tan buenos dotes
de espía pero en parte se debía a que, como no solía asistir a clases, los
profesores lo perseguían y él debía saberse cada rincón del centro escolar
para esconderse y no ser pillado.13

Quería irse a casa, pero ir en bicicleta con un vestido más grande que él
mismo, lo veía un poco imposible.

Todos los alumnos estaban en el gimanasio, bailando o viendo alguna


exposición del algún club, por lo que los pasillos y aulas estaban vacías.1

Jungkook se mantuvo rebuscando entre las taquillas que habían ahí para
ver si encontraba al menos cualquier camiseta de cualquier persona, ya se
lo devolvería más tarde.

— Te encontré.44

Jungkook abrió los ojos de golpe y se dio la vuelta casi en un salto, con el
corazón latiendo a mil del susto que le había dado la repentina intromisión
de... Taehyung.

— ¡A ver si lo haces de nuevo!— soltó en un grito, con sus belfos


curvandose en una sonrisa atrevida pero con un atisbo de preocupación y
nervios.

P á g i n a 249 | 329
Poco después abrió la ventana del aula, y aprovechando que esa clase
estaba en la planta baja y solo había una distancia de una pierna del suelo,
saltó y salió corriendo por el oscuro patio, en un solo parpadeo de
Taehyung, que se quedó alucinado.72

— Con tacones y vestido... eres sorprendente, Jungkook hyung.120

Dicho eso y con una sonrisa satisfecha, salió corriendo en la dirección de la


ventana y como Jungkook, saltó y fue tras él.

Jungkook corría a toda la velocidad que podía, levantando los extremos de


la falda de su gran vestido y procurando no matarse en el camino, con
Taehyung pisándolo los talones.56

— ¡Hyung, no seas inmaduro, tenemos que solucionar estas cosas como


adultos! ¡No puedes salir corriendo, literalmente, de todos los problemas!

— ¡No eres el más indicado para decirme inmaduro!2

Desde el exterior, la situación era algo cómica y peculiar, ¿cómo actuarias si


vieses un chico con un vestido de la era victoriana siendo perseguido por
otro chico con una camisa de girasoles, chaqueta a cuadros azul y pantalón
de un disfraz de príncipe mientras discuten?124

— ¡Jungkook hyung, será mejor que pares de correr o haré algo que será
aún peor!— exclamó el castaño, cada segundo acercándose más al otro
castaño, que hizo caso omiso al grito.

Jungkook giró y Taehyung pudo vez como éste, le estaba sacando el dedo
del medio con una sonrisa atrevida.61

— Tú me has obligado, Jungkookie.— se dijo para sí mismo, cogiendo de


nuevo impulso.— AAAAAH, JUNGKOOK.— gritó lo más que pudo con su

P á g i n a 250 | 329
rasposa voz y a la vez, se abalanzó en dirección a la espalda del castaño, y
luego se agarró con violencia a la falda del vestido.123

Todo fue tan rápido que Jungkook no pudo ver ni sentir nada hasta el
momento en que sintió su cara impactando contra la hierba y el gran peso
en su espalda.

— Vale, vale ¡lo entendí, ya no voy a huir pero quitate de encima! ¡quitate,
quitate!— hizo berrinche Jungkook pataleando y agitando sus brazos pero
Taehyung seguía aferrándose firmemente a sus caderas.

— Si tratas de huir otra vez, será peor, ¿entendido? — advirtió Taehyung


alzando la cabeza y Jungkook asintió, dándolo por entendido.19

Tras eso, el menor de los dos se separó de la espalda del mayor y ambos
se enderezaron y se sentaron en la hierba donde habían caído.25

La conversación no fue a más, se quedaron en silencio durante unos largos


cinco minutos, mirando a cualquier persona o cosa.

— ¿Q-qué fue el b-beso de antes?— cuestionó el de mechas rosas para


romper el silencio e inconscientemente poso algunos dedos en sus labios.

Taehyung apoyó las manos en el suelo, quedando inclinado y luego giró la


cabeza para dirigirle la mirada a Jungkook, con una sonrisa tranquila.— Fue
una forma de decirte que me gustas.157

Jungkook se quedó aturdido por la confesión y tardó al menos un par de


minutos en procesarlo, manteniéndose en silencio mientras miraba con los
ojos bien abiertos por la sorpresa, a Taehyung.

— Aunque quizás no la más acertada... Ow, Jungkookie hyung ¿estás


llorando?— cuestionó preocupado Taehyung mientras acercaba su cabeza
al lloroso hyung pero con un poco de ternura.87

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— ¿E-eres idiota? por s-supuesto que no estoy l-llorando...— Jungkook
desvió la mirada con enojo y el ceño fruncido, luego paso "disimuladamente"
los dedos por encima de sus ojos para retirar las traviesas lágrimas.— Eres
un imbécil de lo peor, realmente no tienes nada bueno...18

Taehyung asintió, manteniendo sus sonrisa tierna.— Tienes razón... No


tengo ningún talento como Namjoon, no tengo tan buenas notas como tú, no
soy muy bueno en los deportes como Jimin, no soy tan gracioso como
Yoongi, no tengo tanto carisma como Hoseok...36

— ¿Por qué siempre te terminas comparando con alguien?— cuestionó


Jungkook, parando la confesión de Taehyung y luego agachó la cabeza y
susurró.— Seas como seas, te voy a seguir queriendo.31

— Porque es la verdad, Jungkookie.— admitió el castaño y poco después


borró su sonrisa, dejando una expresión lastimera.— ¿Por qué te gusta
alguien como yo?... Verás, es que somos muy diferentes. Tú eres
enfadadizo y te gusta estar haciendo algo todo el tiempo a pesar de que no
te guste moverte mucho, pero siempre estás leyendo algo, cosiendo,
diseñando mientras que yo prefiero mirar a la ventana y pensar y trato de
tener mucha paciencia e indulgencia con las personas, tú eres diseñador y
yo sólo soy un chico que no puede ver que el morado y el rojo no quedan
bien juntos. Tú eres increíble, Jungkook hyung y yo sólo, soy yo, no soy-69

— ¡¿Y tú cuánto sabes del Taehyung que yo conozco y quiero?!— exclamó


Jungkook, puchereando para retener lágrimas del cúmulo de emociones que
estaban por sacudirlo.

Taehyung se quedó mirándolo confundido.

— Adoro todo de ti.— confesó Jungkook, sonrojándose y mirando a los ojos


a Taehyung, que también había comenzando a sentir su cara arder.— Amo
tu forma de caminar, amo cuando halagas mis diseños, amo tu sonrisa y me

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encanta oír tu risa, amo cuando estornudas, aunque sea muy ruidoso, amo
como tus ojos son neutros la mayoría del tiempo pero pueden llegar a
expresar todo en una sola vez, coml ahora. — Taehyung oyó atentamente
cada revelación y apreciándolo, porque Jungkook había dejado todo su
orgullo para decir algo como eso.— Y el que te odies a ti mismo y no veas
nada bueno en ti, sólo me dan ganas de decirte todas las cosas
maravillosas que hay acerca de ti y que me hacen feliz.218

El castaño se quedo anonadado ante las palabras del abochornado


Jungkook, que bajó la vista sonrojado y luego, Taehyung sonrió
avergonzado y cubrió su cara con la mano derecha.

— Lo has vuelto a hacer, Jungkookie.— El llamado levantó la vista hacia el


contrario dudoso.— Tus palabras y tú me hacen sentir especial siempre, que
soy único, pero eso era lo que yo quería hacer contigo... Dime, Kookie, ¿te
he hecho mucho daño?46

Jungkook entendió a donde quería llegar el menor y ante la pregunta,


asintió.

— Mucho.— Jungkook realmente quería hacer saber a Taehyung como se


había sentido estos últimos meses.— Me hiciste pensar de una forma
horrible que yo siempre sería tu segunda opción, que a pesar de lo mucho
que te apoyase y quisiese, siempre habría otra persona que preferirías
antes que a mí.— admitió con la voz quebrada, tratando de reprimir las
ganas de llorar.— Siempre estuve pensando en eso, cuando te quería invitar
a algo, terminaba pensando que tendrías a alguien o algo mejor qué hacer...
Me diste muchas inseguridades a lo largo de este año que aún estoy
tratando de superar por mí mismo.4

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Taehyung asintió, viendo cuan expuesto había dejado a Jungkook, que
detrás de ese caparazón de mal humor estaba ese chico que buscaba que
le dijesen que era único e insustituible.

— Jungkook, dame otra oportunidad.— pidió Taehyung acercándose a su


mayor, que se alejó involuntariamente.— He cambiado, he crecido, te lo juro
y te lo puedo demostrar.3

— Taehyung... realmente te quiero pero si te aceptase, estaría riendome de


mí, porque hasta el último momento, sigo esperando que me quieras.—
Jungkook se abrazó a sí mismo, una forma inconsciente que tenía de
refugiarse de sus propios sentimientos.

— No quiero que me aceptes aquí y ahora... — aclaró rápidamente y llevó


su mano a la mano de Jungkook, entrelazandola tímidamente con la del
mayor, que no opuso resistencia.— Solo dame una oportunidad para que
me quieras de nuevo, para volverte a construir de nuevo y hacer que
desaparezcan todas las inseguirdades que te he causado. No quiero ser tu
novio, Jungkookie hyung, quiero que me dejes saber más de ti y
enamorarme más de ti.81

Jungkook lo miró a los ojos, mientras curvaba sus cejas en una expresión
triste y mordía sus labios para retener balbuceos ya algunas lágrimas ya
habían empezado a recorrer sus mejillas y manchar sus labios.2

Taehyung se acercó lenta y gentilmente al rostro de Jungkook, mientras


posicionaba su palma delicadamente en la blanca mejilla del mayor y
acariciaba con cariño la marcada cicatriz que había en esta.

— ¿Me dejarás?— cuestionó en voz baja y ronca, solo para oídos de


Jungkook, que cerró los ojos por inercia mientras sellaba sus labios,
esperando contacto.— ¿Está bien que sea alguien como yo? Mi querido
señor estilista.16

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Jungkook llevó las manos a la cintura de Taehyung y se aferró a la tela de
su chaqueta mientras que abría levemente sus ojos para mirar los marrones
profundos de éste.

— No quisiera a nadie que no fueras tú, chico que no tiene ni idea de como
vestirse.105

Y dicho eso, con la respuesta que necesitaban ambos y una sonrisa


inconsciente, Taehyung acortó los pocos milímetros que quedaban de los
labios de Jungkook y los juntó en un beso delicado, con poco movimiento
pero con muchos sentimientos.135

Los labios de Jungkook eran salados debido al rastro de las lágrimas, que
también estaban mojando sus dedos.
Paulatinamente, Jungkook decidió mover con torpeza y lentitud los labios y
Taehyung no tardó en corresponder la petición de su mayor, siempre
tratando de ni ser brusco ni intimidar al ahora frágil Jungkook.3

Jungkook, a partir de ahora, siempre sería frágil para él.


2

Voy a hacer sentir a Jungkook hyung tan amado como él lo hizoconmigo.

CHAT GRUPAL: ME LEÍ 32 CAPÍTULOS DE PURA


MIERDA— YOONGI.147

Fetichista-sshi.30

Kowalski, análisis.

140

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Namjoonie.

Código rosa, capitán, Taehyung y Jungkook se están besando.

37

Hoseok hyung ❣︎❣︎❣︎❣︎❣︎❣︎❣︎

¡¿QUÉ?!

Jimin.

Jimin ha enviado una imagen.

166

Fetichista-sshi.

LO ESTOY VIENDO, JIMIN.

THE END.

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33. [FINAL] El rival de Jimin y la
pareja "contraste"
Cuando los dos chicos se separaron de ese íntimo y eufórico contacto, se
miraron a los ojos fijamente, con la respiración un tanto agitada y la cara
decorada con un fuerte carmín. Aunque era más notorio en el rostro de
Jungkook porque su piel era más clara.38

Jungkook cayó en cuenta del incómodo momento y desvió la mirada al


suelo, sentándose bien en este.

Taehyung hizo lo mismo, tragando saliva y haciendo cualquier cosa para


retener sus nervios y no decir o hacer una estupidez.

¿Qué se supone que deberían hacer ahora? Aunque el comentario que hizo
Jungkook antes del beso lo suficiente concreto, ¿qué se debía hacer,
entonces?10

Los dedos meñiques de ambos podían tocarse con timidez y eso sólo
aceleraba sus respectivos corazones, pero no se decidían a hacer algún
movimiento que pudiese llegar a ser algo mínimamente atrevido.

Taehyung carraspeó mientras se pasaba la mano por la nuca, capturando la


atención del otro castaño, que mantenía la mirada gacha.

— Creo... que deberíamos ir dentro...4

Jungkook asintió una vez y de forma lenta.


Taehyung se puso de cuclillas y extendió su mano con la intención de
ayudar al contrario a levantarse. Jungkook lo miró con algo de vergüenza, a
él y a su mano extendida.
Era como en la obra, pero esta vez no estaban actuando.

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Con timidez, el mayor posó su mano encima de la gran mano de Taehyung
y esta pudo acoger la de Jungkook, cubriéndola con gentileza y calidez, y un
poco temblorosa.44

Ambos se levantaron de ahí y Jungkook tuvo la intención de retirar su mano


de nuevo, pero Taehyung lo retuvo con firmeza.
El corazón del mayor estaba siendo ruidoso e incluso el castaño podía oírlo
y eso es lo que más le avergonzaba, por lo que en un principio, se mostró
reacio.

Pero esa sesación fue desapareciendo cuando Taehyung sutilmente


entrelazó sus manos mientras sostenía una mirada confiada que Jungkook
rápidamente evadió y se dejó hacer.5

— Si te molesta...

— E-estoy bien.— respondió atropellando las palabras y adelantándose a la


frase del chico con el que estaba tomado de la mano.13

Caminaban con lentitud hacia la puerta de entrada al gimnasio, donde


estaba la fiesta, aunque Jungkook iba cojeando, lo disimuló bien pero
Taehyung se dio cuenta aún así.37

— ¿Te duelen los pies?— preguntó parándose mirándolo con preocupación


y esperando una respuesta, Jungkook hizo una mueca y volvió a desviar la
mirada.1

— N-no es n-nada, sólo es un p-poco incómodo estar con t-tacones durante


mucho tiempo.62

Taehyung puso una mueca pensativa y luego sonrió.

— Tengo una idea.

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— Emocionante.— comentó Yoongi viendo como el sonriente Taehyung y el
serio Jungkook estaban unidos, entrelezando sus manos.15

El menor de todos asintió y luego se volvieron a quedar en silencio.

— Llámame loco, pero creo que ahora es cuando me explicáis porque


Taehyung lleva tacones.— comentó el rubio alzando una ceja.— No me
digas que para rematar tu horrible estilo ¿has decidido que te gustan los
tacones?259

Jungkook no pudo evitar soltar una carcajada por ocurrencia de su amigo y


Taehyung negó con la cabeza, un poco abochornado.

— A Jungkook le dolían sus pies, así que le di mis zapatos.— explicó


brevemente Taehyung.— De todas formas, no es una mala idea, mis
piernas lucen bien con tacones.189

Yoongi no tardó en esbozar una sonrisa torcida y Taehyung cayó en cuenta


de lo que acaba de decir.
El rubio se acercó a él y el menor se sintió intimidado por como su mayor
pasaba toda la vista sobre él.112

— Hmm, pues no estaría mal... ¿No quieres pasarte por mi casa un día de
estos?— expresó con fingida melosidad y obviamente, segundas
intenciones150

— ¡Yoongi!— exclamó sonrosado Jungkook y Taehyung se rascó la mejilla


con confusión.25

— Yoonnie.— la voz grave de Namjoon apareció en esa extraña


conversación, rodeando el pecho del llamado y levantándolo, ya que el
moreno era más alto que su novio y le dio un corto beso en su blanca mejilla
antes de bajarlo de nuevo.

— Hola, Monnie.— saludó con una sonrisa suave.

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Jungkook se paró a pensar por un momento en los apodos cariñosos que
usaban frecuentemente Yoongi y Namjoon.2

Namjoon miró con una sonrisa neutra los zapatos de Taehyung.

— Hmm... ¿Has desarrollado algún nuevo fetiche que Yoongi y yo no


habíamos previsto?— cuestionó señalando los tacones y Taehyung
suspiró.42

— No soy una persona de disfrutar usar tacones, son dolorosos e


incómodos.1

Yoongi alzó la cejas pinchando con el codo el costado de Taehyung.—


¡Claro! ¡Entonces, eres del tipo que le gusta ver a otras personas con
tacones! ¿Sabes? Yo podría...3

— ¡Yoongi!— volvió a exclamar Jungkook sobándose la cara.— Tienes a tu


novio detrás.

El rubio borró su sonrisa y miró fijamente a si amigo.— Yo le iba a ofrecer


ayudarlo a elegir tacones para ti.74

La cara de Jungkook no tardó en tornarse completamente roja, al igual que


la de Taehyung.

— ¡Eso es aún peor, idiota!— le gritó su mejor amigo mientras hacia el


amago de golpearlo y éste no paraba de reírse al igual que Namjoon.

Taehyung se sobó el brazo avergonzado por esa broma pesada y subida de


tono. Miró de reojo al par que discutía, bueno, más bien uno y el otro no
paraba de reírse.

— Si ya sabes como soy, ¿para qué me invitas?— cuestionó Yoongi


parando de reírse lentamente.144

— ¡Yo no te invite! ¡Viniste porque quisiste!25

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Jungkook parecía querer decir más comentarios hasta que llegó su primo,
con su característica y radiante sonrisa.

— Jungkook, como no asististe a tu exposición, dije que yo era algo así


como tu "asistente"— comentó él, haciendo comillas con los dedos y el
nombrado asintió.— Has recibido muchas tarjetas de contacto, cuando
lleguemos a casa, te las daré.

Jungkook asintió sonriente.— Gracias, hyung.3

— ¡Hobi-hyung!~— canturreó ruidoso esa conocida voz infantil y rodeó por


detrás, con sus dos brazos la cintura del llamado, que se tensó rápidamente
y se relajó al ver que era solamente Jimin.— ¿Dónde estabas? Te busqué
durante toda la noche...

— Ugh, Jiminnie, apestas a alcohol.— comentó Hoseok con una sonrisa


cansada y dando unos golpe cortos en la pelirrosa cabellera.42

— N-no es cierto, hip.54

— Es la primera vez que veo borracho a Jimin.— dijo sorprendido su mejor


amigo y el pelirrosa lo miró con el ceño fruncido.

— No mientas, ambos nos emborrachamos antes.— la voz de Jimin estaba


ida pero sabía lo que decía.

Taehyung soltó una risa incómoda a la vaez que miraba al sorprendido


Jungkook.— No le creas, Jungkookie hyung, está borracho, no sabe lo que
dice.19

— ¡Oye!~

— Hoseok, ya estoy listo, podemos irnos.— apareció de repente aquel rubio


del escenario con esa perfecta sonrisa y cara y mientras todos estaban en
medio de la fascinación, Jimin lo miraba con desagrado.

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— Que veo, un rival.— el menor se aferró al cuerpo del pelimorado,
mientras frotaba su mejilla con su hombro y dedicaba una mirada fulminante
al sonriente Seokjin. Hoseok empezó a sonrojarse mientras negaba con la
cabeza.196

— Jimin, Seokjin hyung se ha ofrecido a llevarnos a casa, sé educado.—


suspiró.

— No somos rivales, Jimin.— le dijo afable y con amabilidad el rubio.—


Porque si lo fuéramos, habrías perdido hace mucho tiempo.303

Jimin frunció el ceño.— ¡¿Cómo has dicho?!12

— OooH.— ovacionó Yoongi colocándose delante de la cara de Jimin y


moviendo las manos delante del rostro del pelirrosa.— Te ha dejado en el
suelo.106

Mientras tanto, Taehyung y Namjoon trataban de separar a Jimin de la


espalda de Hoseok, pero éste se rehusaba.

— Jimin, por favor, me estás avergonzando.— le dijo Taehyung.4

— ¡Mira quién fue a hablar!— exclamó Jimin señalando su vestuario y


Taehyung arrugó la frente, ofendido.38

Ahora Jungkook y Yoongi trataban de separar a Taehyung y a Jimin de


meterese una paliza mutua.98

Hoseok y Seokjin miraban la escenas escépticos y sonriendo con derrota.1

— Los adolescente son difíciles.

— Menos mal que dije que estaba prohibido el consumo de alcohol...2

— Tomó porque fuiste tú quien lo dijo.— respondió Hoseok riendo mientras


miraba a Jimin mientras estaba siendo separado de Taehyung.

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— Me duele la cabeza...— Jimin arrastró las palabras con la voz áspera y
sobándose la cabeza. Tomar en exceso era malo, ahora lo sabia.— ¡¿Por
qué tiene que haber clases después de un festival?!15

— Cállate, anoche no parabas de hacer berrinche porque querías dormir


con Hoseok.— Jimin lo miró indignado recibiendo una mirada sugestiva de
Taehyung, por lo que se calló.

— Bueno, ¿entonces, qué? ¿Jungkook y tú ya sois novios oficiales?—


cuestionó cambiando de tema y bostezando.

— M-mh... Aún no se lo he pedido...— admitió Taehyung sonrojado mientras


se pasaba incómodo, la mano por la nuca.— No sé como hacerlo y qué
haremos si me acepta.

— ¿Qué haréis? Fácil.— Jimin de abrazó a sí mismo mientras ponía morros


exageradamente y hacía sonidos de besos.69

Jimin terminó recibiendo una fuerte colleja de parte del irritado Taehyung.

— Sólo dejate llevar~.9

— Tú ayer de dejaste llevar y no salió, que digamos, bien.

— Tú cállate. A Hoseok hyung le gustó que lo abrazase así.

Taehyung negó con la cabeza derrotado, el efecto del alcohol en su mejor


amigo aún no se le había pasado, por la cantidad de tonterías que estaba
diciendo

— Ese Seokjin fue muy grosero...

— Tú sí que fuiste grosero.— replicó Taehyung y Jimin se encogió de


hombros. Llevó la vista hacia el frente y se encontró a Jungkook, que lo miró
sorprendido y un tanto sonrojado.— Ah, Jungkook hyung-

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— L-lo siento, tengo cosas que h-hacer.— se apresuró a decir antes de salir
corriendo por las escaleras del centro escolar y Taehyung puso sus labios
en una línea.8

— Creo que te está evitando.— comentó el pelirrosa.

— Vaya, Jimin.— Taehyung le dio un palamadas en el hombro al llamado.—


Nada se te escapa.19

— Ni ni ni ni ni ni ni.— el castaño rodó los ojos ante la infantil reacción de su


compañero.— ¿Qué vas a hacer?19

Taehyung miró en la dirección donde había salido corriendo el abochornado


Jungkook y sonrió suavemente.1

— Jugar. A Jungkook le encanta jugar a ser perseguido.190

Jimin miró extrañado como Taehyung caminaba tranquilamente, con las


manos en los bolsillos hasta las escaleras y subía en dirección a donde se
había ido Jungkook.

Cuando se encontró fuera de el campo de visión de él, el pelirrosa


entrecerró los ojos, dudoso.

— ¿Es algún tipo de código fetichista?

Jungkook colocaba los libros en la estanterías mientras trataba de calmar el


ruido de su persistente corazón.3

Había huido nada más ver a Taehyung en el pasillo, hacia la biblioteca, que
estaba silenciosa y vacía ya que era la hora de clases normales y los
estudiantes debían estar en clase.1

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— Ah... Taehyung debe estar en clase, eso me dará más ventaja para
esconderme.— pensó en voz alta y se acercó a la ventana para recibir el
aire primaveral en si rostro. A veces se sonrojaba recordando aquel
momento de anoche.3

Jungkook frunció los labios y llevó los dedos a estos, acariciándolos de


forma gentil.

Estaba tan inmerso en sus pensamientos hasta que la puerta de la


biblioteca fue abierta suavemente.
Jungkook se dio la vuelta pensando que sería algún profesor, pero no
esperaba encontrarse a Taehyung mirándolo con seriedad mientras que sus
manos estaban guardadas en sus bolsillos, que sólo conseguía, de alguna
forma, intimidar más a Jungkook.47

— Hyung...

— T-T-Taehyung, deberías estar en c-clase...— Jungkook se esforzó lo más


que pudo en sonar enfadado y en fruncir el ceño, pero sus cejas se curvaron
y se mordió el labio nervioso cuando tuvo al menor a centímetros de él.3

A medida que Taehyung se acercaba, Jungkook retrocedía y desviaba su


vista de la penetrante mirada contraria. Hasta que llegó a un punto en el que
llegó al fondo de la biblioteca y una mesa le bloqueó el paso.2

— Jungkookie hyung.— dijo Taehyung con una sonrisa amable recibiendo la


lastimera mirada del llamado.— La verdad es que no me gusta ser
autoritario.97

En un rápido movimiento, Taehyung hizo sentarse a Jungkook en el borde


de la mesa, mientras que su mano derecha se metía entre el brazo del
contrario y su costado, apoyándose en la mesa y acortando la distancia con
el rostro y el cuerpo del sonrosado Jungkook.105

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Luego, alzó su mano libre hacia la mejilla izquierda de Jungkook y pasó un
dedo suavemente por toda su mejilla y la cicatriz que el de mechas rosas
poseía en su piel.14

Sintió a Jungkook temblar aún sin mirarlo pero, sin oponerse a la caricia y la
cercanía que le estaba proporcionado Taehyung.

— Pero si tu solución es evitarme y huir de mí, no me quedará de otra que


serlo.133

Jungkook no respondió y giró la cabeza para dejar de recibir el toque del


castaño, que sonrió con serenidad mientras tomaba entre sus dedos la
barbilla del mayor y lo atraía para quedar cara a cara de nuevo.49

— Jungkookie hyung.— el nombrado decidió mirar a los ojos al chico que


estaba delante de él con atención.— Te ves precioso sin resistirte a mí
como siempre sueles hacerlo.49

— Ya lo has arruinado, ¿quieres que te meta un puñetazo?— cuestionó


Jungkook por primera vez, fastidiado por ese comentario y levantando la
mano para propinar el golpe en su cabeza.74

Aunque no le dio tiempo ha realizarlo, ya que Taehyung juntó


repentinamente sus labios pero con suavidad.
El calor se extendió por toda su cara y esa sensación tan molesta y
revoltosa en el vientre hizo que no pudiese mantener la mano arriba y fuese
debilitándose poco a poco.23

Taehyung tomó esa mano e hizo que rodease su cuello a la vez que
seguían con el lento beso.
Jungkook se dejó llevar por la inercia y cerró los ojos con lentitud mientras
trataba de seguir con torpeza el beso del castaño.64

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Taehyung puso sus dos manos en cada costado de Jungkook al ver que no
había forcejeado y había correspondido su beso, mientras tanto, Jungkook
tenía los ojos cerrados con fuerza y su mano se aferraba al cuello de la
camisa del contrario.

Los dos chicos movian sus labios en un desordenado pero dulce compás.
Todo iba bien hasta que se separaron de golpe, tapándose la boca y
poniendo una expresión de molestia.20

Sí, habían chocado con los dientes.285

— P-perdón.— se apresuró a decir Taehyung, mirando con una sonrisa


incómoda a Jungkook.— Ha sido mi culpa, tratare de practicar más.55

Jungkook alzó una ceja aún sonrojado por lo anterior.— ¿Q-qué quieres
decir con eso?

El menor se encogió de hombros y luego soltó un gran suspiro antes de


acercarse de nuevo al rostro del castaño, que se tensó por ello y cerró los
ojos en un movimiento involuntario.

Los abrió lentamente cuando sintió el peso en su hombro derecho y llevó la


vista hacia abajo para ver que Taehyung había apoyado su frente en el
espacio entre su cuello y su hombro.

— Hyung, te quiero.— dijo después de minutos se silencio y Jungkook


frunció los labios y desvió la mirada hacia arriba.— Quiero que seas mi
novio y poder besarte y abrazarte cada vez que me apetezca, pero no
quiero forzarte...76

— Estás haciendo eso ahora mismo.— respondió Jungkook frunciendo el


ceño y posando la vista en la cabellera oscura. Tenía ganas de acariciarlo,
pero era tímido y orgulloso.5

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— E-eso es porque tú estabas evitandome.— le respondió levantando la
cabeza y poniéndose cara a cara nuevamente, exponiendo el fuerte color
rojo de sus mejillas.

Jungkook lo miró asombrado y luego esbozó una sonrisa suave.—


Realmente, tu personalidad tiene muchos contrastes.2

Taehyung lo miró con duda.

— Puedes ser muy atrevido como antes, pero a los minutos estás
avergonzado de lo que hiciste.— especificó y el castaño bajó la mirada
avergonzado.58

Se mantuvieron en silencio durante largos segundos en los que Jungkook


esperaba dejar de ser acorralado por el cuerpo de Taehyung, ya que era
una posición comprometedora, en medio de la biblioteca y con estudiantes a
punto de salir de sus clases.

— Sólo tú sacas ese lado de mí...— Jungkook volvió a curvar sus cejas y
mirar hacia otro lado y por no mencionar por milésima vez que la cara
empezó a calentarse.

— E-estás diciendo c-cosas r-raras.21

Taehyung asintió ante eso, desviando la mirada.— Perdón.

Se volvieron a quedar en ese incómodo silencio y en el que las dos partes


quieren decir algo pero ambos se mantienen en silencio.

Momento en el que Jungkook se dio cuenta que su mano seguía


descansando en el hombro de Taehyung y suspiró.
Llevó su otra mano detrás de la cabeza del castaño, tocando de nuevo su
castaño cabello y que estaba creciendo sobre su nuca, volviendo al peinado
de pelo largo con el qué le había conocido.52

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Taehyung se quedó rígido y miró con vergüenza al mayor y éste le miraba
embelesado mientras acariciaba el suave pelo.

— Te amo, Taehyung.— el nombrado no pudo evitar bajar la vista después


de que Jungkook pronunciase esas significativas palabras.— ¿Tú te
amas?224

Taehyung lo miró un poco extrañado por esa pregunta, ya que no era la


pregunta que esperaba, pero después de pensarlo poco, asintió.

— Amo cada parte de mí porque tú amas cada una de esas partes.—


contestó con una sonrisa traviesa que Jungkook correspondió con
bochorno.119

Taehyung se posó de nuevo en el hombro de Jungkook, aspirando el olor de


su suave colonia.8

— Sé que es un poco dependiente.— el menor rodeó la cintura del mayor,


abrazándolo, y Jungkook no dijo nada oyendo con atención las pausadas
palabras de Taehyung.— Pero, ¿me permites que sea así?

Jungkook se mantuvo en silencio, pensando en una buena respuesta para


eso. Volvió a soltar aire y subió su mano para hacer un vaivén en forma de
caricia en la cabeza de Taehyung.

— No tengo problemas en que dependas de mí.— Jungkook tomó el cuello


de la camisa de Taehyung y tiró de ella sin mucha fuerza hacia atrás,
haciendo que el rostro del contrario volviera a ponerse frente a la suya y
Jungkook lo miro sonriente y dijo con determinación:— Porque quiero ser el
motivo del porqué te ames a ti mismo, quiero que seas feliz gracias a mí,
quiero disfrutar las mismas cosas que tú disfrutas, quiero que uses esas
horribles camisas a rayas que te gustan y esos pantalones a lunares, que
lleves el pelo despeinado como solías llevar, quiero que vuelvas a sentirte
seguro llevando corbatines, corbatas o cualquier accesorio que sé que te

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gusta llevar... Pero, por sobre todo, quiero ser lo más importante para ti
porque tú ya lo eres para mí.211

Taehyung abrió los ojos sorprendido al ver con cuanta fluidez su mayor
había conseguido decir esa comprometidas palabras.

— Si estás de acuerdo con eso...

Jungkook llevó sus dos manos a las mejillas de Taehyung y las sujetó con
firmeza, y mientras que el menor no salía de su shook, el mayor unió sus
labios con el menor.
Aunque ese acto valiente acto de parte de Jungkook terminó pocos minutos
después por la vergüenza.

Taehyung sonrió al ver las sonrojadas mejillas y orejas de Jungkook.

— Estoy de acuerdo con eso.— contestó ganándose una mirada furtiva de


Jungkook.— Así que ya no tienes ningún obstáculo para aceptar ser mi
novio.

El mayor esbozó una sonrisa pequeña, negando con la cabeza.

— Supongo que no.

Los dos chicos salieron sigilosamente de la biblioteca.


Todos los alumnos se quedaron petrificados al ver a los dos chicos saliendo
del esa aula, y sonriendo con vergüenza y con las manos entrelazadas.5

— Vaya, veo que los tortolitos ya se han unido.— dijo Yoongi saliendo de
haber estado en clase(algo muy extraño) y ver primeriza pareja.— Por favor
decidme que ya se acabó el drama, me están saliendo canas.17

— Pero si tienes el pelo casi blanco.— contestó Taehyung.

P á g i n a 270 | 329
— Veo que lo entiendes.— respondió bromista Yoongi y Jungkook rodó los
ojos.26

La mano del rubio fue agitada por otro chico más alto y sonriente.

— ¡Moonie!— exclamó contento su novio.

— Hola, Yoonie.

Jungkook miró a la pareja. Yoongi acababa de burlarse de que él porque


Taehyung estaban siendo empalagosos pero él tendría que mirarse a un
espejo.

— Yoongi y Namjoon están más felices de lo habitual.— comentó Jungkook

— Debe ser porque ya han foll-102

— ¡Jimin!— exclamó intimidante Taehyung, con el ceño fruncido.3

— Quería decir que ya han entregado su folletín. — rectificó improvisada y


rápidamente Jimin.45

— ¿Folletín de qué?— cuestionó Jungkook y el pelirrosa y Taehyung se


encogieron de hombros, ganándose un ceño fruncido del mayor.

— Bueno, vámonos a comer y así dejo pasar que soy el único sin pareja
aquí. — cambió de tema Jimin, empezando a caminar hacia la cafetería del
centro.26

— A penas son las ocho y media de la mañana para tomar el almuerzo.—


dijo Namjoon pero siguiéndole el camino al pelirrosa.

— Shhh.

Todos los chicos se dirigieron donde se estaba yendo Jimin, comentando


cosas triviales y haciendo bromas, la nueva pareja estaban detrás del todo,

P á g i n a 271 | 329
así que Jungkook, con un leve sonrojo en las mejillas se puso de puntilla
para acercar su boca al oído de Taehyung y dijo:

— Sólo aceptare ser tu novio si me dices que me quieres durante todo el


mes.108

Taehyung lo miró y luego esbozó una sonrisa ladina.

— Tenía planeado decírtelo hasta cuando nos casemos.196

— ¡¿C-casarnos?!

Mientras que los demás estudiantes miraban boquiabiertos a Taehyung y a


Jungkook tomados de la mano y haciendo bromas y riéndose. Era algo raro
verlos así, porque...

Ese chico alto que llevaba una camisa verde lisa de botones y unos
pantalones muy holgados de color rosa y que le gustaba que ninguna
prenda de su vestuario combinase y ese otro chico que aspiraba a ser
diseñador y siempre cuidaba que hasta sus piercings y pendientes
combinasen con su ropa, estuviesen juntos, era sumamente raro.67

Pero, bueno...

¿Extravangante? ¿excéntrico? ¿estrambótico? ¿estrafalario? No.


44

Ellos eran Kim Taehyung y Jeon Jungkook.

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1. [EXTRA] En mi primer año, conocí...
— Todos los de clase son idiotas.— Se quejó Yoongi mientras caminaba
con pésame a su clase, y su lado, su mejor amigo, Jungkook.— Me
encantaría meterles una buena paliza.97

Jungkook soltó una risa suave, Yoongi siempre iba a ser así.

— No digas eso, ellos también están tratando de ser amistosos con


nosotros.

— Amistoso mi puño.— contradijo el pelinegro mientras miraba con réplica


al otro chico.— ¡Jungkook, ellos siempre se meten contigo! Deberías dejar
de tratar de defenderlos. Son imbéciles.6

— Hmm...

— A este paso, nuestro primer año en este sitio va a ser un infierno.—


Yoongi se cruzó de brazos mientras fruncía el ceño.— Necesitas volverte
más duro, ya sabes.

— No podría hacer eso...1

El más alto— porque en ese momento, Yoongi era más alto que Jungkook—
rodó los ojos.24

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— ¿Hiciste el trabajo?— cuestionó Jungkook, sonriente, cambiando de
tema.

— ¡¿Cuál trabajo?!— exclamó paranoico el pelinegro y el contrario


carcajeó.53

— Es sobre lo que queremos ser cuando salgamos de la preparatoria.— le


explicó con una voz dulce y Yoongi pudo respirar tranquilo.— He puesto que
quería ser diseñador11

El pelinegro sonrió al peliazul con cariño y gracia.— ¿Sigues con eso? No te


ves como un diseñador.

Y es que, Jungkook cuando era más joven, tenía el pelo de color azul
(experimentos de la juventud), aparato dental que le dificultaba cerrar la
boca y gafas circulares y enormes, dándole una imagen de
un Nerd de alguna película rancia de romance.121

Jungkook frunció el ceño y agachó la mirada, ahora decaído por las


palabras bromistas de su amigo.— ¿En serio?

Yoongi negó con la cabeza frenéticamente en cuanto vio el cambio de


humor repentino del más bajo.

— ¡Es broma, Jungkookie! Sabes que te voy a apoyar en todo lo que


quieras ser...— trató de remediar el pelinegro.— Además, las gafas es para
ver mejor y pronto te quitaran eso de la boca, así que no te preocupes ¿de
acuerdo?41

Jungkook miró a su compañero más alegre y asintió.

— Eres genial, Yoongi hyung.

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— Bueno, chicos, leamos vuestros trabajos de "Lo que quiero ser cuando
sea un adulto"— dijo con fingida alegría y emoción la profesora de primer
año y fue pasando la mirada por todos los alumnos del aula.— ¡Yoongi, tú
primero!48

El llamado se revolvió en todo su asiento, mientras que sus neuronas


buscaban una solución de forma ultra rápida.— E-eh, s-sí...

Cogió un cuaderno de la mesa de Jungkook y miró la hoja en blanco de esta


como si su trabajo fuese a aparecer por arte de magia allí, escrito.36

— Yo, la verdad es que no tengo planeado que quiero ser cuando salga de
este sitio.— empezó a disimular leer.— Porque ¿quiénes somos realmente?
Cada uno de nosotros es un enigma para sí mismo. ¿De dónde venimos,
para qué existimos, por qué? A mí me parece, hermanos, a mí me parece,
amigos, que vivir uno así, por vivir, sin saber quién es ni de dónde viene, es
la clave de la felicidad. Decidire que deseo ser cuando llegue el momento de
hacerlo porque ahora soy considerado como un inmaduro y para elegir a
que quiero dedicarme en el futuro, necesito ser claro conmigo mismo y que
me comprenda de verdad, a fondo, que me conozca.203

La profesora miró con una sonrisa congelada a Yoongi, que tenía cara de
póquer, esperando que su improvisada reflexión de la vida hubiese sido lo
suficientemente creíble para sacarlo de esa situación y el resto de sus
compañeros lo miraron boquiabiertos y en silencio mientras pestañeaban.48

— Eso es todo.38

Dicho eso, Yoongi se sentó de nuevo en silencio en la silla de su asiento.

— E-e-excelente trabajo, joven Min Yoongi.— dijo rápidamente la


profesora.— Mm... Veamos, siguiente... ¡Jungkook!2

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El nombrado asintió tímidamente mientras se levantaba de su silla con su
hoja en mano. Sus cara empezó a enrojecerse al notar la mirada de toda su
clase en él.38

— Mmh... Cuando salga del instituto.— empezó a leer, atropellando las


palabras de la vergüenza, realmente odiaba leer en frente de toda clase.—
M-me gustaría ser d-diseñador de r-ropa p-porque...

— ¡¿Han oído eso?!— exclamó uno de los chicos que estaba al lado de
Jungkook, y éste dejó de leer abruptamente.— ¡Este chico de aquí quiere
ser diseñador!133

La clase empezó a reírse y el peliazul agachó la cabeza mientras fruncía los


labios y aferraba la hoja a su pecho.

— ¿Q-qué tiene d-de malo?— cuestionó asustadizo y el chico soltó una risa
aún más fuerte.21

— Ese pelo azul tuyo te queda horrible.— dijo con una sonrisa ladina y
malicia en sus ojos y Jungkook se encogió en su sitio.— ¿Y esas gafas
enormes que ocupan la mitad de tu cara? ¿Y ese asqueroso aparato que
solo hacen que tus dientes sean más grandes de lo normal?... ¿En serio
piensas que alguien con tu apariencia llegaría a ser diseñador de algo?100

— Chicos, calmense...— trató de relajar paranoica, la profesora.9

— ¡Cállate, imbécil!— Yoongi se levantó de su sitio de golpe y se dirigió a la


mesa de aquel chico y le tiró todos los libros de la mesa.— ¡Tú si que no vas
a poder ser diseñador después de como te voy a dejar la cara!141

Jungkook se mantuvo en sitio con la cabeza gacha, mientras que las


palabras de aquel chico nublaban su mente.4

Como estaba distraído, una chica tiró de su cuaderno y consiguió quitárselo


de las manos con brusquedad. Jungkook reaccionó al instante.21

P á g i n a 276 | 329
— ¡Oye! ¡Devuelmelo!

Su compañera se rió de él y empezó a leer en voz alta el texto que contenía


la hoja del cuaderno.13

— "Quiero ser diseñador porque..."3

— ¡He dicho que me lo devuelvas!

Jungkook tiró de su cuaderno con la única intención de recuperarlo, pero al


final, terminó rompiendo la hoja y tirando a la chica al suelo por la fuerza y el
la gravedad.

Toda la clase se mantuvo mirándolo con sorpresa y él fue retrocendiendo


con miedo.

— Genial. Además de feo, se mete con las chicas.47

— Ah, Jungkook, en serio eres de lo peor...

— Sabía que eras un chico raro, pero no te imaginaba así.31

Jungkook observó a todos su compañeros por un rato con sus labios


haciendo una línea.

— ¡¿Sabéis qué?!— cuestionó ganándose la mirada atenta de todo mientras


que él fruncía el ceño y arrugaba el trabajo que había hecho con rabia.—
¡Iros a la mierda!80

Y dicho eso, tiró la bola de papel a la chica , que soltó un chillido y se


marchó de ahí a pasos furiosos mientras Yoongi alzaba el pulgar en su
dirección con una sonrisa orgullosa.

123

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— Noona va a ir a hablar con dirección ¿de acuerdo? Quedese quieto y no
haga travesuras.— dijo aquella mujer con una voz amable y el pequeño
castaño asintió con su sonrisa cuadrada.

Taehyung estuvo suspirando sin parar desde que se fue su cuidadora.


Además, la ropa negra, poco interesante pero bien conjuntado que le había
hecho llevar solo le hacía aburrirse más. Así que, aunque había prometido
quedarse quieto, decidió dar un paseo, después de todo, el próximo año
estudiaría ahí su primer año.

Todo iba bien hasta que llegó a la pista de baloncesto, el suelo estaba
agrietado, lleno de malas hierbas y piedras, así que ya no estaba en uso.

Le llamó la atención la azul cabellera que estaba sentado en un bordillo y


tenía la cabeza entre sus piernas.41

Se acercó sigilosamente y pudo distinguir el sonido de un llanto que luchaba


por ser silencioso, así que corrió a ponerse delante de el chico.

— O-oye ¿por qué estás llorando?— cuestionó asustado y el contrario tensó


su cuerpo al instante, parando el llanto.2

Jungkook alzó la cabeza con la frente arrugada mientras pasaba las mangas
por los aguados ojos.

— ¿Y a ti qué te im..importa, idiota? Dejame en p-paz...— dijo con poca


delicadeza que no lo caracterizaba.51

— ¡Sí que me importa!— replicó ofendido el más pequeño.— Ahora


deberías estar en clase y estás aquí, llorando.

Jungkook puso una mueca y pasó la vista por aquel entrometido chico. Su
ropa iba completamente de negro, una camisa manga larga a botones, un

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pantalón liso y cinturón, podría decirse que con ese estilo se veía mucho
más mayor de lo que su cara aparentaba.

— Tú sí que te verías como un diseñador...— soltó de repente, de forma


inconsciente.

Taehyung miró al más mayor con interrogación en la cara.

— ¿Y eso por qué?

— M-mm, p-porque te vistes bien, no llevas gafas ni un... aparato horrible en


la boca.— dijo de forma despreocupada mientras arrastraba un palo corto
en la arena.— Te ves bien para ese tipo de puesto.1

Ambos chicos se mantuvieron en silencio durante unos segundos antes de


el castaño explotase a risas.

— ¿D-de qué te ríes, tonto?— preguntó el peliazul frunciendo nuevamente


el ceño.

— Los oficios no tienen imagen.— dijo parándose de reír.— Más bien, tú


haces la imagen del puesto, ¡así que puedes ser como quieras! Mientras lo
hagas bien, supongo.95

Jungkook lo miró frunciendo los labios, ese chico tenía suerte, no estaba
acomplejado con su físico.

— Hoy había que e-exponer un trabajo acerca de lo que querías ser de


mayor... y yo, um... dije que quería ser d-diseñador...— empezó a decir el
mayor mientras se abrazaba a sí mismo.— Y b-bueno, dijeron que con la
apariencia que tenía no llegaría nunca a ser diseñador, porque era... f-feo.56

Taehyung apoyó su cara en sus palmas mientras miraba a Jungkook con


atención y asentía.

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— Yo creo que esos chicos son unos idiotas.— el peliazul suspiró,
asintiendo, aunque ahora se sentía mejor después de decirlo.— Tu
apariencia es solo una imagen exterior y los trabajos que no siguen las
mismas pautas como diseñador, fotógrafo.— Taehyung levantó su cámara
que colgaba de su cuello con una sonrisa.— o pintor depende de como es la
creativad del que lo hace.52

Jungkook ladeó la cabeza confuso.

— Quiero decir...— Taehyung se rascó la cabeza dudoso.— Ser diseñador


es un oficio en el que creas cosas con tu creativadad, y tu creatividad
depende de como sea el estilo del creador o lo que influya en ello, por eso,
ningún diseño o cuadro es igual al otro, porque todos se han basado un
ideal y en una imagen distinta. Así que, eso de no tener la apariencia de
diseñador es estupido porque los artistas no siguen pautas de moda, sino,
de como son. Mmmh... No sé si estoy siendo claro.55

El peliazul miró con los ojos bien abiertos al dudoso chico que tenía delante.
Esa temblorosa y simple explicación, aunque haya sido de un extraño, lo
había hecho entrar en razón.

Eso es, todo artista se basa en su propio estilo para crear sus obras, por eso
nunca hay artistas iguales, todos son diferentes.

No hay apariencia determinada.

— Además...— Jungkook salió de su ensoñación y puso atención


inmediatamente a las palabras del pequeño castaño, que lo estaba mirando
con su cuadrada sonrisa.— Yo pienso que eres muy bonito.142

Jungkook volvió a quedarse sin aire, y siento ese agardable calor por toda la
cara y esa vigorosa sensación en su estómago. Extrañamente, su corazón

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empezó a hacer mucho ruido al latir y sentía hasta las puntas de las orejas
arder.

— G-gracias...— Dijo con sus mejillas teñidas de un tierno rojo y desviando


la mirada.— P-por cierto... ¿Cómo te llamas?6

— Me llamo Kim Taehyung.— se presentó ensanchado su sonrisa y


formando una cuadrada, muy bonita a ojos de Jungkook.— ¿Y tú?5

— Yo me llamo-13

— ¡Amo Taehyung!— el grito de una mujer interrumpió la voz de Jungkook,


que miró desconcertado hacia donde provenía la voz.6

Una mujer se acercaba a ellos corriendo, hasta por fin tenerla delante.

— ¡Le dije que no se moviera ni hiciese travesuras! Le estuve buscando, ya


me estaba empezando a preocupar porque no aparecía.

— No hice ninguna travesura, Noona.— replicó Taehyung y la mujer negó


con la cabeza y tomó la mano del chico y empezó a tirarlo para llevárselo.

Jungkook se quedó estático en su sitio al ver a la intimidante mujer.

— ¡Ah, espera Noona, aún no sé su nombre!— trató de zafarse del agarre


de su cuidadora pero ésta no la dejaba.8

Taehyung encendió su cámara rápidamente y sacó una foto lo más deprisa


que pudo al embobado chico.
De esta manera, cuando ingrese el próximo año, se guiaría por la foto para
volver a encontrarlo.63

Jungkook se despidió con la mano cuando se dio cuenta de lo lento que


estaba siendo, pero, ese chico ya estaba de espaldas, marchándose del
recinto.

P á g i n a 281 | 329
— ¡Jungkook! ¡Te están buscando desde hace una hora!— clamó Yoongi
enfurruñado al encontrarse a su mejor amigo vagando por el patio con la
mirada pérdida.— Tienes la cara roja, ¿te sientes mal?1

Jungkook negó con la cabeza con timidez y una pequeña sonrisa.— Oye,
Yoongi, ¿cuánto falta para que entren los de nuevo ingreso?

Yoongi parecía desconcertado por aquella pregunta pero puso una


expresión de pensar.

— Hmm... Pues aún falta tres meses para que se acaben las clases y... y
otros dos meses y medio de vacaciones... ¡Cinco meses y medio! ¿Por qué
lo preguntas?3

— No es nada.— dijo aún manteniendo su sonrisa perdida y el pelinegro


alzó una ceja confuso.— Tengo tiempo.

— ¿Tiempo para qué?

— Dentro de tres meses me quitan esta cosa de la boca.— explicó un poco


más entusiasmado.— Dejare de usar estas gafas tan feas y volveré a teñir
mi pelo de negro.55

Yoongi miró a su amigo disconforme.— ¿Es por qué te lo han dicho esos?
Que sepas que no hace falta que cambies por ellos...1

— No es por ellos.— contradijo el peliazul jugando con el extremo de su


sudadera.— Q-quiero verme bien... Para una persona que vendra en el p-
próximo curso...142

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Yoongi alzó sus belfos en una sonrisa sugestiva mientras levantaba y
bajaba las cejas.— Oooh.7

— ¿Me ayudarás?

El pelinegro asintió con la cabeza.— Claro, cuando salgamos de clase


iremos a comprar el tinte.

Jungkook correspondió su sonrisa. A pesar de que ese chico tan amable le


había dicho que le parecía bonito, Jungkook quería mejorar y quizás,
cuando Taehyung ingrese el próximo año... Podrían pasar cosas
interesantes.31

Jungkook no pudo evitar volverse rojo como un tomate al pensar de nuevo


en ese chico y Yoongi frunció el ceño confuso.

— Bueno, vamonos ya. Es hora de empezar la misión de... "¡Vistiendo a


Jungkook!"125

El nombrado puso una mueca de desagrado.— Es un nombre horrible.14

— Hombre, no tienes romanticismo...

35

Los meses pasaron, y Jungkook había cambiado su imagen completamente.

No tenía aparato dental, ni esas gafas redondas y su pelo volvía a ser


azabache, además, se había vuelto un poco más alto, teniendo la misma
altura que su mejor amigo.11

— ¡Vamos, Yoongi!— exclamó Jungkook mientras tiraba del brazo de su


desinteresado amigo.

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Los de primer año estaban en el patio, porque allí se encontraban las tablas
de información, que les indicarían a que clase pertenecían y Jungkook tenía
que darse prisa si no quería que todos se fuesen.

— ¡Ve tú solo!— se quejó Yoongi, revisándose a dejar la comodidad de su


asiento.

— ¡Vamos!

El otro pelinegro suspiró resignado y tuvo que levantarse y ver a los


renacaujos de primero. A pesar de que hace unos meses, él era uno de
ellos.66

Jungkook salió corriendo, y Yoongi fue detrás de él pero a paso de zombie.

— ¡Ah! ¡Jungkook, ten cuidado!— clamó Yoongi y el llamado giró a verlo


confuso, aunque eso hizo que el que estaba delante no viese por donde iba
y terminase chocando bruscamente con otra persona delante de él.

Jungkook abrió los ojos, aturdido, y sorprendiéndose del agarre firme en sus
hombros, que eso, por suerte evitó un gran golpe en su espalda y trasero.

Encontró a un chico castaño, mucho más alto que él, con las gafas
desgastadas, ese flequillo tan largo que hacía que a penas se vieran sus
ojos, y ese bigote luchando por crecer en su piel.24

Sin duda, su apariencia gritaba "descuidado"

¿Y qué decir de esa horrible corbata morada con esa camisa azul a lunares
rojos? Jungkook le dio un escalofrio al pasar la vista por todo su vestuario.7

— Y-yo... ¿n-nos cono-— empezó a balbucear el más alto.8

— ¡Disculpa! ¡Tengo prisa!63

Dicho eso, Jungkook se zafó del agarre del chico y salió corriendo otra vez
hacia el patio, seguido del cansado Yoongi.

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Cuando ambos chicos se encontraron fuera de la vista de ese castaño, éste
sacó una fotografía de su pequeño cuaderno de notas.

La foto mostraba a ese chico que conoció en el patio hace unos meses, con
su revoltoso pelo azul, esas enormes gafas y su vistoso aparato dental.1

Taehyung esbozó una sonrisa suave mientras miraba aquella foto con
cariño.5

— No... Me he equivocado.122

Jungkook, mientras corría, recordó a ese chico, que casualmente llevaba


una cámara colgada en su cuello.

Negó con la cabeza, mientras esbozaba una sonrisa cómica.

— No... Solamente es una coincidencia.

101

— ¿Vas a seguir deprimido también este año?

Yoongi miraba a su amigo, que estaba apoyando la cara en una de las


mesas del aula del club de Diseño, desprendiendo una aura de tristeza que
deprimía a cualquiera que pasase por delante.

— No ingreso aquí...

— Ya ha pasado un año, amigo... ¿Ya has ido a buscar en las clases de


segundo?

Y es que, ninguno de los dos chicos se encontró en el primer año, Taehyung


buscaba a un chico que se pareciese al de su fotografía y Jungkook
buscaba a alguien que era de altura y que se vestía muy bien.
Así que, aunque muchas veces se cruzaran, nunca se reconocían y seguían

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buscando desesperadamente a la persona que casualmente, tenían al
lado.58

Hasta que ambos de dieron por vencidos.

Jungkook se removió en el sitio, en signo de asentimiento.— Busque cada


Taehyung que había en el centro, pero ninguno se parecía a él.

— Hmm... A lo mejor se ha teñido el pelo, o ha crecido más... Una persona


puede cambiar mucho en un año.

— ¡Le reconocería en cualquier lugar!104

Yoongi frunció los labios mientras se encogía de hombros.

El rubio sacó una hoja del cajonero de la mesa y se la extendió a


Jungkook.— Venga, ponte a diseñar algo, te sentirás mejor.

El pelinegro se irguió en su sitio, y con desgana tomó un lápiz para seguir la


recomendación de su amigo.1

Jungkook iba dibujando y a medida que lo hacía, fruncía el ceño y apretaba


la mina en el papel con más fuerza.

— Él dijo que vendría... Me lo dijo. "Yi piinsi qui irirs mii biniti", Idiota, idiota,
lo odio, lo odio, lo odio, ¡lo odio tanto! Maldito mentiroso, lo odio, lo detesto
tanto.53

Yoongi miró asustado a su amigo y a la hoja de papel, que seguía pasando


el lápiz por la hoja con violencia a pesar de que la mina del lápiz estaba
destruida, mientras Jungkook seguía maldiciendo y odiando a su primer
amor—A primera vista—7

—¡¿Dónde está Jungkook?!— Y para rematar, el grito de aquella chica


haciendo aparición en el aula, hizo que Jungkook se enfadase aún más.146

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— ¡CÁLLATE, JODER!— exclamó una hastiada voz al fondo de la clase y
Lisa y Taehyung posaron la vista en el chico sentado en su sillas con una
expresión que detonaba su mal humor.— ¡¿Qué quieres?! ¡Estoy ocupado!94

— Ocupado expresando su odio por el amor.— comentó Yoongi ganándose


una mala mirada de Jungkook.7

Lisa chasqueó la lengua sugerente y empujo a Taehyung delante de


Jungkook. El menor remojó los labios mientras apretaba las correas de su
mochila, y Jungkook mientras tanto veía detenidamente el vestuario del otro.

— H-hola Hyung, soy Kim Taehyung de la clase de segundo.

Jungkook abrió los ojos de golpe al oír ese nombre y luego negó con la
cabeza.23

Era imposible que el bien vestido chico que él conocía sea el tipo
extravagante que tenía delante.

— ¿Y?— atinó a decir.

Lisa golpeó la palma de su mano contra la frente.

— Venía a pedirte ayuda.

— ¿Con qué?— cuestionó irritado Jungkook.

— Para cambiar mi look.2

Jungkook le empezó a dar un tic en el ojo.— Oye, chico, ¡¿Te crees que soy
una tienda de ropa para que me pidas eso?! Mirate ¡tu ropa es un completo
desastre, tienes semanas sin afeitarte, esas gafas te quedan horribles y tu
pelo pide a gritos un lavado! No, no, es sumamente imposi-50

Taehyung puso una generosa cantidad de billetes delante de la cara de su


gruñón hyung y éste calló abruptamente cogiendo el dinero y contándolo.3

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— Bueno, lo intentaré.— dijo después de haber contado la suma de dinero
acompañado de un carraspeo y voz poco convencida.

Taehyung asintió con la cabeza con una sonrisa y el mayor suspiró.


Después de analizar brevemente al castaño señaló un cuarto en la otra
esquina del salón.

— Ahí tienes un baño. Tienes champú en un botecito pequeño y unas


afeitadoras en bolsa en los cajones, lo usamos para los modelos pero ya
qué. ¡Date prisa!2

Taehyung se sobresaltó por el grito de Jungkook y asintió rápidamente


antes de salir corriendo hacia el baño y encerrarse.

Jungkook miró mal a Lisa que le dedicaba una sonrisa de burla, esos dos se
llevaban realmente mal.

— ¿Por qué has tenido que recurrir a mí para eso, idiota? Te recuerdo que
no somos amigos.

— Cállate, abuelo.

Jungkook le sacó el dedo del medio y Lisa soltó una carcajada ruidosa antes
de salir a paso rápido fuera del club de diseño.11

Yoongi analizaba la situación mientras fruncía el ceño.

El pelinegro suspiró por milésima vez y se sentó de nuevo en su silla y cogió


el lápiz para volver a centrarse en su diseño, bueno, más bien en la bola
negra qué había hecho.

— ¡Ya estoy!

Jungkook se giró cansado, ahora apreciando el notable cambio del chico.

— Bueno, te ves un poquitito mejor, supongo. Aunque ya no hay nada que


mejorar.

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Taehyung se desanimó y él se encogió de brazos, mirando como las gafas
rayadas le impedían ver los ojos de Taehyung y parte de su flequillo le
tapaba los ojos pareciendo un emo.

— ¿Has probado a...?

Jungkook subió la cabeza para mirar a los tapados ojos del menor —que era
más alto que él— y llevo las manos a cada extremo de las varillas de las
gafas para retirarlas lentamente dejando ver claramente la cara de
Taehyung, que tenía una mirada tímida y angustiada esperando la reacción
de Jungkook.

El pelinegro se quedó estático mirando al chico, esa mirada... Podría


reconocerla en cualquier lugar, ojos neutros y con esa peculiar forma.
Pero, era imposible. ¿Cómo ese chico con el que siempre se encontraba en
los pasillos iba a ser su niño qué llevaba buscando un año y medio?
12

¿Cómo?

¿Él era el chico que me gustaba y no me he dado cuenta?¿Cómo?

¿Él era el chico que me gustaba y no me he dado cuenta?

¿Y este chico tampoco me había reconocido?8

Ha cambiado tanto... Ahora es mucho más alto, sus hombros se han


ensanchado y su apariencia es tan desaliñada, su ropa no combina para
nada...

Era todo lo contrario a lo que estaba buscando.

— ¿Jungkook hyung?

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El nombrado reaccionó dándose cuenta de que tenía aún las gafas en las
manos y las tiró asustado al suelo.6

— ¡Mis gafas!— exclamó Taehyung al ver como sus gafas se habían partido
de una vez por todas.8

— Mierda.

2. [EXTRA] Peticiones inesperadas.


Unos largos dedos deslizaban las manos por todas sus cámaras, a la vez
que miraba analizante la imagen que emitía el monitor de su equipo de
fotografía.
⠀62

Hola.10

Soy Kim Taehyung.6

Soy fotógrafo.
⠀57

Delante de la gran y moderna cámara que estaba siendo apoyada por un


soporte alto, un chico bonito estaba un sonrojado y enfurruñado, sentado en
la ordenada cama matrimonial, tratando de posar ante la cámara, a petición
de Taehyung.46

Sobre su azabache cabello, estaba una corona de flores bastante


voluptuoso, y que estaba incorporado con un blanco velo, que descendía
por toda su nuca y espalda y sobraba suficiente como para que el resto de
la tela, estuviese apoyado prolijamente en la cama.

P á g i n a 290 | 329
Además, solo estaba vestido con una gran camisón blanco y ropa interior.
⠀57

Y este chico enfadado que está posando delante de mí.

Es Kim Jungkook261

Mi esposo.

— ¿Por qué estás frunciendo el ceño?— cuestionó Taehyung con una


sonrisa resignada mientras capturaba otra foto al ceñudo Jungkook.— Te
recuerdo que tengo que exponer estas fotos, ¿quieres que te vean con una
cara enfadada?

— ¡Me da completamente igual!— replicó el pelinegro mientras echaba su


velo hacía delante y tapaba el bochorno de su rostro.— ¿Se puede saber
por qué me has obligado a posar con mi velo? ¡Ni siquiera me has dejado
quitarme el pijama!18

Taehyung esbozó una pequeña sonrisa, concentrándose de nuevo en el


monitor de las cámaras que estaban delante y los costados de la cama.

— Solo pensé que sería bonito volver a verte con un velo~.— canturreó
ajustado algo en su cámara.— No te he dejado quitarte el pijama porque se
supone que debo capturar un momento en mi vida de forma casual.14

— ¿Casual es despertarte cada mañana y ver a tu marido con un velo?—


cuestionó Jungkook sarcástico, rodando a los ojos y cruzándose de
brazos.154

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El castaño suspiró y se acercó a la cama, situándose delante del enfadado
mayor. Taehyung observó lo hermoso que era Jungkook incluso estando
molesto con él justo en ese momento.

El menor llevó sus dedos a la barbilla del pelinegro, y con un poco de


resistencia, consiguió que Jungkook lo mirase desafiante.

— ¿Quieres que te de un besito para qué se te quite el mal humor?—


cuestionó Taehyung dulce al contrario e hizo que Jungkook volviense a
rodar los ojos y a desviar su mirada.— ¿Por qué estás así?27

— Porque llevo dos horas haciendo esta mierda.

— Esa boca.53

Jungkook se sonrojó.— Porque llevamos haciendo esto dos horas. A-


además, tenía a-algo importante q-que de-decirte.104

Taehyung dejó un casto y sonoro beso en la cicatriz que tenía Jungkook en


su pómulo, antes de regresar de nuevo a su posición, detrás de su cámara.5

— Es porque todo el mundo va a ver esta exposición.— comentó Taehyung


mientras captaba el precioso momento donde el sonrojado Jungkook llevaba
su mirada tímidamente a la cámara.— Y aunque te veas perfecto con
cualquier tipo de expresión, quiero que tu rostro sea inolvidable.25

Taehyung sacó una instantánea, imprimiendo rápidamente la foto que


acababa de tomar y sacando su billetera para guardarla en uno de sus
bolsillos.— Y de paso, las colecciono.63

Jungkook asintió, aunque poco convencido de la explicación de su esposo.

— ¿Y qué es eso tan importante?— preguntó con desdén el castaño, a la


vez que ajustaba algo en su equipo. El pelinegro se le volvió a subir el color
a sus mejillas.

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— D-dentro de dos días sera nuestro segundo a-aniversario.— comenzó a
explicar Jungkook mientras jugaba con los extremos de su velo.— Y-y
llevamos jun-juntos des-desde que eramos a-adolescentes.113

Taehyung asintió, aún sin entender por donde estaba yendo la dirección de
la conversación.

— Y... C-creo que e-estamos preparados para...— Jungkook se quedó ahí,


mirando con las cejas alzadas a Taehyung, para que entendiese lo que
estaba tratando de pedir pero éste asentía confundido y con el ceño
fruncido.72

— Quieres ir de viaje.89

— ¡No!— contestó Jungkook desesperándose.— Para... ya sabes, a-


agrandar... l-la f-familia.134

Taehyung asintió aún con el ceño fruncido.— ...Quieres que adoptemos un


perro.190

El pelinegro se pasó la palma de su mano por toda la cara, resignado.

— ¿Un gato?20

— Déjalo, Taehyung.— contestó abatido y devsiando la mirada con algo de


incomodidad y se abrazó a sí mismo.— Si no lo entiendes es porque tú lo no
quieres aún.158

El nombrado no supo que contestar, realmente no sabía a lo que se refería


su esposo. Pero siempre que se sentía triste se abrazaba, y eso no paso
desapercibido.
⠀12

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— Taehyung, eres idiota.— contestó sonriente Jimin mientras se apoyaba


en la mesa.

El nombrado ladeó la cabeza, confuso.— ¿Por qué? ¿Qué es lo qué quieres


Jungkook? Lleva todo el mes bastante extraño y hoy parecía distinto.2

Su mejor amigo asintió con una sonrisa desinteresada.— Jungkook quiere


algo en específico, algo que solo tú le puedes dar. Deberías preguntárselo.

— ¡Lo hice! Pero creo que solo lo empeore más.— el castaño se llevó las
manos al pelo, revolviéndose.— ¿Por qué soy tan tonto?

— Yo también quiero saberlo.— respondió el ahora pelirrojo y luego hizo un


gesto hacia alguna habitación de la casa, ya que ellos estaban en la
cocina.13

Taehyung llevó la vista hacia el salón, donde Hoseok veía la televisión


mientras que hablaba de algo con su primo, que jugaba con un bebé en su
regazo, teniando una una amplia sonrisa.1

Jimin y Hoseok cuidaban de la hija de un amigo del trabajo de Hoseok, que


necesitaba ayuda de un niñero de última hora, por lo que ellos se
ofrecieron.2

Taehyung miró sorprendido el cambio de humor de su esposo.


En el camino, estaba enfadado y no quería hablar con el menor y ahora,
parecía la persona más feliz del mundo mientras hacia sonido extraños para
hacer reír al bebé.

— ¿Lo entiendes?— cuestionó Jimin con una sonrisa.

P á g i n a 294 | 329
— Sí...— Taehyung asintió, por fin comprendido lo que quería Jungkook.
Ahora se sentía aliviado.— ¡Jungkook quiere empezar a diseñar ropa para
bebés!349

El pelirrojo asintió y luego abrió los ojos de golpe, mirando a su mejor amigo
como un loco.— ¿Qué?23

— Ah, Jimin, ¿qué haría sin ti?— cuestionó el castaño, levantándose de la


sola y yendo a por un vaso de agua.

— Taehyung.

— ¿Sí?

— Eres un verdadero idiota.


⠀8

A la noche siguiente, mientras Taehyung se duchaba, Jungkook mantenía


una conversación con su mejor amigo Yoongi por videollamada.

— Wo, te has casado con un imbécil.— comentó Yoongi mientras no paraba


de reír a través de la pantalla del ordenador del serio Jungkook.— ¿Por qué
simplemente no lo dices "quiero tener un hijo"? Ya sabes que Tae es muy
bueno, amable, bondadoso... Y todo eso, pero es muy, muy, muy, muy, muy
lento.70

Jungkook se sonrojó, desviando la mirada de la pantalla.— Quiero que él


me lo proponga, que me diga que quiere tener una responsabilidad tan
grande como esa.1

— ¿Y tú?— cuestionó el peliazul, mirándolo con una ceja alzada.— ¿Estás


preparado?

P á g i n a 295 | 329
— Sí.— contestó al instante.— Taehyung y yo tenemos buenos puestos de
trabajo, una casa comprada, el suficiente dinero como para mantener bien a
tres hijos y aún somos relativamente jóvenes.29

— Siempre tan analizador.1

— Obviamente.— contestó susurrando.— Taehyung fue mi primer y único


amor. Y realmente quiero esto, he estado investigando y estudiando mucho
acerca del embarazo y la crianza.185

Yoongi asintió, oyendo atentamente las palabras de su amigo.— Te


comprendo. Oye, si necesitas un consejo acerca de eso cuando se lo digas,
yo tengo a un sujeto en primera persona.— El peliazul señaló con el pulgar
al bulto en la cama.

— ¿Cómo está, por cierto?— Jungkook sonrió dulce.

— Bien, últimamente tiene antojos extraños pero nada que el gran Kim
Yoongi no pueda solucionar.— contestó con una sonrisa relajada mientras
tomaba algo.160

— Yoonie, quiero sandía.— la voz rasposa de Namjoon hizo aparición de la


vídeollamada.71

— Lo tenía previsto, compre sandía antes de venir. Te lo traigo en un


momento.

— Quiero sandía de la frutería de Jennie de Daegu.— pidió, pero en tono


exigente.92

— Bueno, Jungkook, tengo que colgarte, tengo que tomar el coche e irme a
Daegu.99

— ¿En serio vas a tomar un viaje de tres horas sólo por sandía?—
cuestionó Jungkook cómico1

P á g i n a 296 | 329
Yoongi empezó a reírse como un loco a la vez que golpeaba su muslo y
Jungkook rió también, casi se creía que su perezoso mejor amigo iba a
hacer algo como eso.25

— Claramente.
⠀14

Jungkook estaba leyendo un libro informativo, sentado en el borde de la


cama, como acostumbraba a hacer todas las noches.

El sonriente Taehyung salió del baño con una toalla húmeda en su cabeza y
el pijama holgado que conjuntaba con el de Jungkook.30

El pelinegro dejó rápidamente el libro que estaba leyendo anteriormente en


su escritorio, dándole la vuelta para que no se vea la portada.2

— Jungkook, ya sé lo que te pasa.— dijo Taehyung sentadose de un salto al


lado de su esposo, haciendo que rebote en la cama.79

El contrario abrió los ojos sorprendido, luego de que se sonrojarse, sonrió


tímido.— ¿E-en... Serio?

— ¡Claro!— exclamó emocionado el menor.— Y sabes, ¡yo también lo he


pensado!41

Jungkook miró a su marido con los ojos brillantes y una sonrisa


esperanzada. Se mordió el labio mientras jugaba con la manga de su
camisón.13

— ¿Y-y c-cómo quieres lla-llamarlo?62

A Taehyung le descolocó esa pregunta.

Se rascó dudoso la cabeza mientras fruncía el ceño hacia Jungkook.

P á g i n a 297 | 329
— El nombre de tu tienda puede seguir siendo el mismo. No tienes porque
cambiarlo.174

Jungkook se quedó en silencio ante la inesperada respuesta de Taehyung.


Lo miró con tanta seriedad que el castaño empezó a sentir miedo.

— Umm, ¿Taehyung, de qué estamos hablando específicamente?—


cuestionó Jungkook sobandose el brazo con incomodidad.

— ¿D-de qué quieres empezar a diseñar ropa para b-bebé?— contestó con
inseguridad.— Y por eso, no necesitabas cambiar el nombre de tu
compañía, puedes hacer una linea de ropa infantil sin cambiar el nombre.16

Jungkook se quedó mirando a Taehyung durante unos minutos sin decir


nada y negó con la cabeza. Apagó la luz de la lámpara de su escritorio y se
levantó de la cama.1

— ¿Jungkook? ¿A dónde vas?— El castaño se levantó alarmado de la


cama y siguió a su marido por toda la casa en medio de la oscuridad.29

— Taehyung, vete a dormir.— le dijo en tono bajo pero lo suficiente para


que el nombrado lo oyese.70

Taehyung perdió al pelinegro y buscó por toda la casa pero Jungkook no


daba señales de vida. Así que con idea de que su esposo había salido de
casa, se puso su chaqueta con la intención de salir a buscarlo.

Aunque la silueta en la terraza lo hizo detenerse antes de abrir la puerta.


Taehyung suspiró y se quitó su abrigo, lo tiró por algún rincón de la casa y
empezó a caminar hasta Jungkook.

Cuando salió a la terraza, se lo encontró sentado en el suelo, a pesar de


que había asientos. Con las piernas flexionadas y siendo abrazadas por él
mismo, su cabeza se encontraba apoyada en ellas.34

P á g i n a 298 | 329
Taehyung se sentó en silencio al lado de Jungkook y se quedó en silencio,
mirándolo. Mejor callarse que cagarla más.36

— Taehyung, mañana es nuestro aniversario.— dijo Jungkook con la voz


amortiguada debido a la posición, rompiendo el incómodo silencio, y
Taehyung asintió.— ¿Qué me vas a regalar?6

— Umm, e-es una sorpresa. No puedo decírtelo.— confesó incómodo,


sobandose la nuca mirando al cielo.

— Yo quiero algo en especial.— Comentó el pelinegro y Taehyung puso


increíble atención a eso. Quizás sería una manera de solucionar su error,
incluso si no sabía cuál había sido.

— ¿Qué es? ¿Quieres un anillo de diamantes? ¿Un coche nuevo? ¿Tela?


¿Un entrada para ese grupo que te gusta?— cuestionó Taehyung
emocionado. Le encantaba regalarle cosas a Jungkook.— Pidelo y te
prometo que te lo daré.71

Jungkook se quedó en silencio durante largos minutos, sin romper su


posición y sin mirar a Taehyung. Su corazón latía con fuerza, estaba
preparado para que su marido le hiciese daño.39

— Quiero tener un hijo.72

El castaño abrió la boca por pura inercia ante la petición de su marido. No,
definitivamente es lo que menos se lo esperaba. Aunque el pelinegro y él
disfrutaban de la presencia de los niños, pero ¿tenerlo? ¿Con él?21

Taehyung tragó saliva, mientras soltaba un suspiro largo.

— ¿Era eso?— preguntó, de repente más aliviado, posándose en la pared


para ver el cielo. Jungkook no respondió y siguió sin mirarlo.— ¿Y cómo
quieres que lo llamemos?47

P á g i n a 299 | 329
El contrario sacó su cabeza de entre sus piernas y miró sorprendido hacia el
lado de Taehyung, que giró la cabeza mirándolo con una sonrisa serena y
un carmín en sus mejillas.16

Se tomó la confianza de tomar una de las manos que aún rodeaban sus
piernas y la frotó contra su mejilla.

— Jungkookie, te amo.— el nombrado empezó a ponerse rojo al ver que su


esposo repartía besos en toda su mano. Algo usual entre ellos, pero este
momento era tan íntimo.— Fuí inmensamente feliz cuando pediste que me
casara contigo.129

El mayor miró al contrario con intensidad, esperando que dijese más cosas.

— Siempre he querido ser alguien increíble para ti.— Taehyung suspiró


antes de dejar otro beso en su alianza.— Pero soy tan idiota que no pude
captar lo que tanto querías incluso dandome señales tan obvias. ¿Seré un
buen padre? ¿Si no puedo darme cuenta de lo que quiere mi hijo?... O hija.

Jungkook bajó la vista con una sonrisita.

— De eso me encargo yo... Tú puedes encargarte de otras cosas... De eso


trata esto, de complementarnos y mejorarnos a pesar de nuestras
diferencias.9

El pelinegro entrelazó sus dedos con su esposo y miró sus manos con
felicidad y Taehyung miró a Jungkook con seriedad.

— La verdad, es que no quiero tener un hijo.138

Jungkook se quedó sin habla por minutos, tratando de procesar la confesión


de Taehyung. Asintió lentamente, sin saber que decir y sintiendo el pesar en
su pecho, además de las lágrimas bordear las esquinas sus ojos.

— Quiero cinco.273

P á g i n a 300 | 329
Jungkook golpeó la mejilla de Taehyung de un puñetazo y éste se cubrió la
cara al instante, soltando un gemido de dolor y mirando asustado a su
esposo.130

— Eres un imbécil.— le dijo el mayor con el ceño fruncido y con algunas


lágrimas cayendo por sus blancas mejillas.— ¡Tonto, idiota, imbécil,
estupido!46

Taehyung se irguió adolorido de nuevo, rápidamente pasó el brazo por la


espalda de Jungkook, posandolo en su cadera.3

— Un tonto, idiota, imbécil y estupido con el que vas a tener cinco hijos.— le
dijo cómicamente y Jungkook negó con la cabeza, resignado.38

— Espero que no salgan como tú.— le dijo, aún enfadado por la broma
anterior, pero feliz, porque Taehyung también quería.

— ¿Cómo yo de guapos?14

— Cómo tú de tontos y que le gusten llevar camisa de lunares con un


pantalón a rayas.— contestó con gracia y una sonrisa socarrona y Taehyung
rodó los ojos.

— Taehyung.

— ¿Sí?

— Te amo.46

El nombrado asintió con una sonrisa tranquila, antes de cerrar los ojos con
lentitud y unir los labios suavemente con los de su marido.
⠀10

Pronto dejarían de sentir la tranquilidad por las noches.

P á g i n a 301 | 329
3. [EXTRA] Cita pero grupal.
— Hablo en serio, Tae, Jungkook siempre tiene la iniciativa, deberías
sorprenderlo con tus atrevidos encantos masculinos.43

Namjoon, Taehyung y Jimin estaban reunidos delante de la entrada al


parque de atracciones, esperando a Yoongi, Jungkook y Hoseok, que,
llegaban siete minutos tarde.
Todos habían decidido que sería una salida grupal al parque de atracciones,
aprovechando que Taehyung y Jungkook solo llevaban tres semanas
saliendo y necesitaban un empujón, porque les daba vergüenza hasta
mirarse por más de un minuto.45

— L-lo intentaré.

Namjoon soltó una risa al ver al ceñudo Jimin explicando como debía actuar
en la cita al avergonzado Taehyung.

Mientras tanto, los tres chicos que faltaban en aquel encuentro, bajaron del
autobús que paró delante de la entrada.

— ¡¿Se puede saber por qué llegáis once minutos tarde?!— exclamó el
pelirrosa a los fastidiados recién llegados.1

— No es nuestra culpa, Jungkook ha tardado mucho en prepararse.—


empezó a explicar Yoongi.— Porque según él, "quería verse bonito para
Taehyung".113

El nombrado dio un fuerte pisotón al rubio, que soltó un quejido ruidoso,


pero le dio más miedo aún cuando su mejor amigo le susurró con una voz
terrorífica, "de esta no te salvas".1

Jungkook no tardó en ponerse rojo hasta las orejas al ver la mirada


sorprendida de su ahora novio.

P á g i n a 302 | 329
— Hobi hyung, está tan lindo como siempre.— comentó Jimin enamoradizo,
poniéndose delante del pelimorado y tomando sus manos, con un aura
enferma mente melosa. Hoseok esbozó una sonrisa avergonzada.41

— Tú también te ves muy lindo, Jiminnie.

Por otro lado

— Me excitas mucho.— comentó Yoongi viendo el vestuario de su novio.313

Solo consistía en una camisa negra y unos pantalones verdosos holgados


pero eso era suficiente como para calentar al rubio.

Namjoon se le subió el color por toda la cara y exclamó.— ¡Yoongi!8

Después de aquella extraña tanda de cumplidos, todos los chicos se


marcharon a la venta de tickets para entrar.
Cuando Jungkook iba caminando para seguir a sus amigos, un fuerte jalón
en su muñeca lo atrajó hacia atrás. Jungkook levantó la vista rápidamente
encontrando el rostro sonrojado de Taehyung.6

— ¿T-Taehyu-?

— Jungkookie hyung, pongas lo que te pongas siempre estarás muy


bonito.— le dijo sonriente a la vez que miraba los asustados ojos del
mayor.— B-bueno, t- te has esforzado en v-vestirte bien h-hoy, no quiero
decir que tu esf-esfuerzo no valga la p-pena...59

Dijo Taehyung ,observando la sudadera rosa que que Jungkook llevaba, que
le quedaba como cinco tallas más grande que él mismo, cubría parte de sus
muslos y sus manos estabas ocultas por las mangas, lo que hacía que le
diese una apariencia muy tierna.27

— Taehyung.

P á g i n a 303 | 329
— ¿S-sí?— el llamado levantó la vista, y observó durante unos segundos la
frente arrugada de su pareja, que lo miraba con un gran sonrojo en las
mejillas mientras jugueteaba con sus dedos.

— Ve a comprar las entradas antes de que te meta un puñetazo.161

Taehyung asintió euforicamente antes de salir corriendo hacia el puesto.


Con una gran sonrisa porque sabía que Jungkook recurría a amenazas
cuando los nervios rompían sus limites.32

Aunque, tampoco quería ganarse un golpe de verdad de su noviecito.21

— Bueno, este es el plan.— empezó a decir Yoongi con seriedad y todos los
amigos escucharon con atención.— No hay plan. Haced lo qué queráis, pero
yo me voy con Namjoon, solo vine con vosotros por el descuento grupal,
pero en realidad, quiero estar a solas con mi novio.171

— Apreciamos tu sinceridad, Yoonie.— dijo Jimin mirándolo con los ojos


entrecerrados y con cierto desagrado.17

El rubio asintió determinado.— No vemos aquí a las diez.2

Y tomó rápidamente la mano de Namjoon, que se despidió con la mano


antes de desaparecer por detrás de las atracciones.

— Bueno, supongo que quedamos nosotros cuatro, ¡podemos pasarnoslo


bien juntos!— clamó Hoseok alegre mientras daba un aplauso.

— ¡Hobi hyung! ¿Por qué no nos subimos en esta antes?— opinó el


pelirrosa señalando un juego "moderado" del mapa y el nombrado asintió
emocionado.

P á g i n a 304 | 329
— Me parece bien, ¿qué opinais, Kookie y T-...?

Jimin interrumpió al pelimorado, tomando su mano con brusquedad para


posteriormente salir corriendo con el anodado Hoseok.— ¡Adiós, chicos,
pasenlo bien! ¡Aquí a las diez!20

Jungkook y Taehyung pestañearon confudidos al darse cuenta de que sus


amigos los habían abandonado allí y ahora estaban completamente solos.
Sólo. Ellos. Dos.
Bueno, con las demás personas del parque pero esos no eran relevantes.23

Ambos se pararon a mirar de reojo al que tenían al lado, por lo que


terminaron encontrándose de miradas, se sonrojaron violentamente antes
de desviar la mirada de nuevo hacia el lado contrario.15

— ¿V-vamos a la m-montaña rusa?— propuso el nervioso Taehyung con


una sonrisa para tratar de romper el hielo que se había creado en los tres
minutos que llavaban ahí parados sin hacer nada.

Jungkook asintió tímidamente y comenzó a caminar a paso rápido al lado de


su novio en camino hacia esa atracción.

[…]

Jungkook no paraba de reírse a fuertes carcajadas, que hasta parecía que


estaba a punto de asfixiarse mientras Taehyung llevaba el gran gorro rojo
que decía en letras grandes y amarillas "cobarde".

En su última atracción antes de irse a comer algo, fueron a la casa del


terror, donde el que más miedoso se llevaba uno de esos gorros.
Y Taehyung había sido uno de los más ruidosos a la hora de gritar por su
vida, hasta casi se aferra a las piernas de Jungkook, ya que éste no quería
que se agarrara a su brazo porque le avergonzaba, aunque el menor lo
hacía solamente por puro miedo.30

P á g i n a 305 | 329
— No te rías de mí, hyung.— dijo abochonardo el contrario mientras se
retiraba su llamativa gorra de la cabeza.— Ya sabes que soy un miedoso.1

Jungkook se retiró una lágrima de la risa y miró con una sonrisa al


castaño.— Yah, no te preocupes.

Taehyung sonrió porque al fin su mayor iba a dejar de hacer esas bromas
que llevaba haciendo todo el trayecto.

Pero el de mechas rosas volvió a soltar más carcajadas.— Pero tendrías


que haberte oído gritar "JUNGKOOK, SALVAME" por toda la casa, creo que
a la gente le asustó más tu grito que la atracción.97

El menor suspiró porque "aquí íbamos de nuevo"18

Mientras su novio se reía, Taehyung recordó las palabras de mejor amigo,


quizás este era un buen momento para actuar. Tomó aire llenándose de
valentía.

Jungkook dejó de reírse abruptamente en el momento en el que sintió que


una mano cálida se posaba de forma segura en su cintura. Abrió los ojos y
vio el rostro serio de Taehyung, por lo que, ahora, su corazón empezó a latir
con más fuerza y de forma ruidosa. Sus mejillas se colorearon de un fuerte
carmín.

El menor lo atrajó hacía él, apegando sus pechos a la vez que seguía
manteniendo contacto visual con su pareja, que llevo las manos a los
hombros del más alto.

En esa posición, Jungkook fue cerrando los ojos de forma progresiva


mientras elevaba su mentón y Taehyung se quedó descolocado ante eso.

— ¿Estás durmiendote?250

El más bajo abrió los ojos de golpe, confundido.— ¿Q-qué?

P á g i n a 306 | 329
— Como has cerrado los ojos...74

Jungkook se alejó rápidamente de Taehyung ,soltando su agarre y


frunciendo el ceño.

— ¿Te estás quedando conmigo?— cuestionó el de mechas rosas, alzando


una ceja y el contrario ladeó la cabeza.

Ante la falta de compresión del menor, Jungkook suspiró resignado.1

— Da igual, vamos.

Desde ese momento, todo se había tornado muy incómodo, Jungkook no


hacia bromas acerca de lo mucho que gritaba en las atracciones, y
esbozaba sonrisas nerviosas y negaba si le preguntaba por qué estaba así.

— Jungkookie, ¡montemos aquí! — propuso Taehyung para liberar el


ambiente frío, pero el nombrado negó con la cabeza.51

— Está bien, Tae, estoy cansando, esperemos a los demás. — contestó él,
sentándose en un banco.8

El menor se sentó al lado de su pareja, que parecía estar en otro mundo.—


Pero si aún falta media hora...6

El más bajo se encogió de hombros mientras miraba la pantalla de su


teléfono de forma desinteresada. Taehyung frunció los labios y suspiró.
Apoyo los codos en sus rodillas y colocó su barbilla en sus palmas,
observando con desdén las brillantes atracciones moverse.

Estuvieron en silencio durante más de veinte minutos, Jungkook pasando el


dedo por la pantalla sin decir nada y Taehyung mirando cualquier cosa y
reflexionando en qué es lo qué había hecho para que su novio se enfadase

P á g i n a 307 | 329
con él.

Un momento...

Taehyung volvió a proyectar en su mente la escena anterior, antes de que el


ambiente se tornase incómodo y analizó los detalles.

Jungkook había aceptado su muestra de afecto y por eso había colocado


sus manos en sus hombros, también había cerrado los ojos y había
levantado el barbilla en su dirección.

El menor estuvo pensando y repensando esas cosas, hasta que vio la


matrix.85

Taehyung se pasó la mano por toda la cara, frustrado de lo poco perspicaz


que podía llegar a ser cuando quería.20

Había sido tan idiota de no darse cuenta de que su lindo y tímido novio, que
ahora estaba mosqueado con él, sólo quería un beso.
Y después de haber soltado ese comentario tan estupido "¿te estás
durmiendo?" Taehyung definitivamente quería golpearse la cara contra el
suelo.
44

Aunque, aún puedo remediarlo.


23

P á g i n a 308 | 329
— Kookie...— llamó él pero el apodo tierno no había causado impacto en su
novio, que hizo un movimiento con la cabeza para que siguiese hablando.

Entre la multitud, vio como sus demás amigos estaban regresando, todos
felices. Se le agotaba el tiempo.

— Jungkook.— llamó, pero esta vez más determinado y al nombrado no le


quedó de otra que mirar con desinterés a su pareja.

— Tae, ya te he di-

Sus palabras fueron interrumpidas por el repentino tacto blando en sus


labios. Aunque el impacto había sido un poco brusco pero sin ser doloroso.

Jungkook fue expandiendo el tamaño de sus ojos al darse cuenta


progresivamente de que estaba siendo besado nuevamente por su
Taehyung.29

El mayor trató de seguir el ritmo al contrario en los primeros minutos, pero el


menor parecía apresurado, tanto como la primera vez, así que no cedía ante
Jungkook.

Después de largo rato besándose con el contrario, el de mechas rosas se


separó velozmente para tomar aire y recomponerse porque el beso estaba
siendo demasiado rápido para sus lentos estímulos, pero, Taehyung había
vuelto a colocar sus manos en su cintura para ejercer fuerza hacia delante y
atraerlo de nuevo hacia su boca, concretamente a sus gruesos labios.

Jungkook trató de dejarse llevar por su pequeño—en edad— novio,


cerrando los ojos y tratando de calmar el temblor de su cuerpo ante el
cúmulo de emociones que el intenso beso de su pareja le estaba
proporcionando. A Taehyung le pareció lindo como su novio se removía
tembloroso debajo de sus manos.1

P á g i n a 309 | 329
Jungkook olocó su mano derecha en el hombro de Taehyung y su mano
izquierda se enrolló por el pelo largo que cubría su nuca.

Siguieron así durante varios y largos minutos en los que, se privaron del
mundo entero, metiéndose en su propia burbuja e ignorando a todas las
demás personas.

Pero como todo, se terminaron separando, pero dejando hilo de saliva de


entre las puntas de sus lenguas que se ocultaban de forma casi instantánea
en sus bocas de nuevo.86

Al separse, Taehyung siguió aferrado a la cintura de su pareja y Jungkook a


su cuello.
No estaban separados del todo, porque aún mantenían sus frentes unidas,
mientras se miraban intensamente a los ojos.1

— ¿Estás contento ahora?— preguntó Taehyung con un tono un tanto


juguetón.3

Jungkook trató de estabilizar su respiración antes de hablar y curvó los


labios en una sonrisa amplia.

— Mucho.6

59

— Bue, estaban a punto de hacerlo en el banco de un inocente parque de


atracciones y ahora les ves ahí, durmiendo como una pareja de pájaros.—
comentó Yoongi señalando a la pareja que estaba dormida en el asiento del
bus.— Les odio.112

Namjoon soltó una risa y luego miró con ternura como Jungkook dormía
plácidamente en el hombro de Taehyung y éste apoyaba su mejilla en su

P á g i n a 310 | 329
cabeza, y si descendías la vista, los veías tomados de la manos con mucho
apego.36

— Cállate, a ti también te gusta eso.— le dijo el castaño, apoyando su


cabeza en el hombro del rubio, que se terminó sonrojando.— No te
duermas, eres el único despierto aquí.

Yoongi llevó la vista a Hoseok y Jimin, que se apoyaban la cabeza, uno con
el otro, mientras dormían en esa incomoda posición, cuando se dio cuenta,
su novio también se había quedado dormido en su hombro.

Yoongi suspiró mientras cerraba los ojos.— Misión imposible.

4. [EXTRA] Desvistiendo a Taehyung.


- Gracias por ayudarme de nuevo, Yoongi hyung.- dijo Taehyung girando la
cabeza para mirar al nombrado con una sonrisa dulce.- Mañana es el
cumpleaños de Kookie, ya tengo su regalo pero quería darle algún otro
detalle.13

El rubio se encogió de brazos.- De nada... Bueno, ¿qué tienes en mente,


entonces?12

El castaño frunció el ceño y llevó su dedo a sus labios en una expresión


pensativa.- Había pensando en un gran peluche con su nombre y
caramelos.

Yoongi arrugó la frente y luego llevó una mirada crítica al contrario por esa
prepuesta.

- Eso es genial pero... Yo tenía en mente otra cosa.47

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Taehyung ladeó la cabeza alzando una ceja.- ¿A qué te refieres? A
Jungkook le gustan esas cosas.

El rubio asintió con desdén, desviando la mirada hacia arriba.- Jungkook ya


es un adulto y tú pronto también lo serás, si sigues comportandote como un
niño, tu Kookie perderá el interés en ti.12

El menor curvó las cejas y pronto su expresión de duda se convirtió en una


de temor. Quizás Yoongi tenía razón y Jungkook no le gustaba sus detalles
tan aniñados.1

- ¡No, hyung! ¡No quiero que eso pase! Ayudame, por favor.11

El más bajo esbozó una enorme sonrisa traviesa junto a una mirada
maliciosa.154

- ¡Y luego Hoseok me dijo que quería estar a solas con sus pensamientos y
me echó! ¡¿Puedes creerte eso?! ¡Me echó de mi propia casa!- Jungkook
seguía quejándose después de dos horas de estar indignado por ser
expulsado de su casa mientras Taehyung fregaba los platos y escuchaba
atentamente a su novio.- Gracias por dejarme dormir aquí, Tae.77

El nombrado se dio la vuelta con una sonrisa alegre.- No tienes que darme
las gracias, Kookie, mi casa es también tu casa. Además, seré el primero en
felicitarte mañana.

El mayor sonrió de vuelta ante las palabras de su novio y luego miró la hora
en su teléfono, que marcaba que ya casi eran las once de la noche.- Ya es
muy tarde, ¿quieres que te ayude a preparar la cena?39

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Taehyung negó con la cabeza.- Está bien, yo la haré. Puedes tomarte una
ducha si quieres.

- No, no he traído ropa de recambio y me da un poco de grima usar la


misma ropa después de ducharme.- explicó brevemente señalando su
camisa blanca.91

- Puedes usar mi ropa.

A Jungkook se le subió el color a la cara rápidamente.- N-no pienso ha-


hacer eso.

Taehyung frunció el ceño, confundido.- ¿Por?

El contrario desvió la mirada rápidamente de la del castaño y se cruzó de


brazos, sin decir nada y el más alto sonrió.

- Solo ve a mi armario y ponte lo que quieras.

A Jungkook no le quedó otra que asentir, porque realmente quería ducharse


y tampoco es que la idea de ponerse la ropa de su novio lo desagradase.
Cuando estaba a punto de salir de la cocina, sintió un tirón suave de su
muñeca, que lo hizo detenerse y darse la vuelta.

- ¿Pasa algo, Tae?- preguntó el mayor mirando con duda al sonriente


menor.

- Extiende las manos, es un pre-regalo de cumpleaños.

Jungkook asintió e hizo caso a la petición de su pareja. Y Taehyung


segundos después, poso un tubo negro pequeño en sus palmas. El
pelinegro miró confuso eso.

- ¿Qué es?

- Es un pintalabios.152

P á g i n a 313 | 329
Jungkook frunció el ceño con aburrimiento.- ¿En serio, Tae? ¿Un
pintalabios?

Taehyung negó rápidamente con la cabeza mientras soltaba una risa.- No


es un pintalabios normal, es de caramelo. Es solo un dulce, no para que te
maquilles, ¿te gustan las cosa dulces, cierto?81

Jungkook miró con una expresión neutra al pintalabios y luego a Taehyung,


que se dio la vuelta de nuevo para proseguir con la cena.6

Jungkook salió de la ducha, dejando que todo el vapor saliese y se


esparciese por todo el baño y empañase el espejo. Luego, fue fue secarse
con la toalla que le había dado Taehyung para posteriomente, vestirse.

En el armario de Taehyung solo había camisa a a rayas y lunares y la


religión de Jungkook lo impedía ponerse algo como eso.
Por suerte, encontró un jersey negro.97

Taehyung solía llevar ropa más grande que su talla correcta, por eso, a
Jungkook lograba cubrirle más de la mitad de los muslos, ropa interior y
pantalones chándal que le llegaban por las rodillas.1

Cuando iba a salir, posó la vista en el pintalabios que había dejado en el


tocador del lavabo, y decidió que, tomar un dulce antes de ir a cenar no
vendría mal.32

Se puso delante del espejo con una sonrisa, retiró la tapa del pintalabios,
dejando ver la brillante barra de caramelo rojo que había en su interior y,
mientras tarareaba una canción, paso la punta de la barra por sus labios
meticulosamente, dejandolos rojizos. Después de tanto esfuerzo, pasó la
lengua por sus belfos y todo su trabajo se fue a su estomago.77

P á g i n a 314 | 329
- Mi dulce favorito...- comentó alegre y luego pasó suavemente la lengua por
el pintalabios.3

Después de casi acabarse su caramelo por completo, lo cerró de nuevo y lo


dejo en el baño para irse a cenar.17

[...]

- Jungkookie, ¿te ocurre algo?- preguntó Taehyung antes de llevarse la


comida a la boca al ver al mayor removerse en su silla.99

El nombrado soltó un sobresalto por la pregunta y luego negó con la cabeza


nerviosamente. Taehyung frunció el ceño poco convencido de ello.77

La cara de Jungkook estaba tan roja como un tomate, estaba empezando a


sudar y a morderse los labios por las repentinas olas de calor que
empezaban a darle. Sus dedos de los pies se contraían por inercia y no
podía evitar removerse en la silla ante la sensación de incomodidad.147

- E-ese pin-pintalabios...- El menor dio completa atención al contrario.-


¿Dón-Dónde lo c-compraste..?58

Taehyung alzó una ceja por aquella pregunta.- Yoongi hyung me llevó a una
tienda y dijo que cogiese algo que me gustase y vi una sección de dulces y
compre el pintalabios.52

La cabeza de Jungkook daba vueltas.- ¿Y-Yoongi? Mierda, ¿có-como era la


tienda?28

- No vi el nombre, era oscuro y estaba lleno de cosas extrañas. ¡Pero


Yoongi hyung me dijo que era una tienda de regalos para parejas!- explicó
contento.- ¿Por qué lo preguntas, Kookie?159

Jungkook se levantó de la mesa a toda velocidad.- V-vuelvo en seguida.

P á g i n a 315 | 329
Taehyung asintió con una expresión de preocupación y el mayor fue casi
corriendo a encerrarse en el baño.
Ahí, se sentó en la tapa del váter y marcó el número del pequeño diablo que
tenía de mejor amigo.

- Yoongi al habla, ¿qué quieres? Estoy cagando.223

- ¡Yoongi! ¡¿Se puede saber por qué has llevado a Taehyung a una tienda
de esas?!

- Mmmmmm...
¡Ah! Fue divertido, era como llevar a un niño de seisaños. De todas formas,
¿por qué lo preguntas? ¿Te lo ha dicho?2

- Compró un pintalabios de caramelo y me lo dio y yo lo tome como un


caramelo normal y ahora.... Y ahora...

- ¿Y ahora?...

- ...Estoy caliente...- susurró.24

Yoongi soltó una carcajada y Jungkook rodó los ojos.

- Ese pintalabios tiene un caramelo con muchos afrodisiacos, por esote sient
es así. Solo pontelo y dale un buen beso a Taehyung, ya
veráscomo le pasará lo mismo.110

- ¡No pienso hacer eso! ¡Sería como drogarlo!

- Bueno, si lo miras así...

Jungkook se mantuvo en silencio pensativo.

- En fin, llevo tres días estreñido y me estás quitando la inspiración,así que a


diós.315

Yoongi colgó y Jungkook miró la pantalla de su teléfono con desagrado.

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El pelinegro llevó la vista al pintalabios, y poco convencido lo cogió y miró la
barra de caramelo subir.

- Ah. Jungkook, eres un mal novio...- se regañó a sí mismo y luego, se pasó


el caramelo por los labios de forma repetida, hasta crear una capa roja y
consistente.55

Se miró al espejo con un poco de remordimiento, pero se le pasó


rápidamente cuando sintió otro de esos calores pasando por todo su cuerpo
ya que los había lamido sin querer y su cuerpo parecía estar más sensible
que nunca.

Salió del baño y asomó su cabeza tímidamente en la puerta de la cocina.


Taehyung se encontraba recogiendo los platos de la mesa.

- T-Tae...

El llamado se dio la vuelta y sonrió al verlo.- Ah, Jungkookie, ¿ya te sientes


mejor? Oh, tienes los labios muy rojos.

- Es caramelo.

Taehyung abrió la boca levemente en señal de sorpresa y asintió alzando el


dedo pulgar en aprobación. Jungkook frunció el ceño al ver como el castaño
se volvió a dar la vuelta.87

El pelinegro se acercó a grandes pasos, no sabía de donde había sacado


tanta determinación de repente pero no quería que su menor lo ignorara. Así
que cuando estuvo detrás de él, puso los manos en sus brazos y le dio la
vuelta, dejando a Taehyung con una mueca sorprendida.

- ¿Paso algo, Ko-?1

Y antes de qué el más alto pudiese terminar su oración, los labios de


Jungkook estamparon contra los suyos, el mayor se separó rápidamente y

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miró la gran marca roja que había dejado en medio de los belfos de su
pareja.9

- Lamelo.50

Taehyung asintió frenéticamente, aún anodadado por lo que acababa de


pasar e hizo caso a lo que el mayor pidió y en pocos segundos, su lengua
desgustó el sabor a caramelo.

- Buen chico... Ahora los míos.95

Las mejillas del castaño empezaron a tornarse rojas ante la esa petición, y
fue aumentando cuando vio a Jungkook cerrar los ojos y levantar el mentón.

Taehyung puso las manos en los antebrazos del contrario y lo atrajo hacia
él, se acercó temblorosamente a su rostro, Jungkook estaba empezando a
temblar porque su novio estaba tardando demasiado y las puntas de sus
pies estaban a punto de desplomarse.42

Cuando se acercaron lo suficiente, Taehyung paso lentamente la punta de


su lengua por los labios acaramelados de Jungkook, que tembló al primer
instante del contacto.

El menor continuo pasando su lengua por toda la superficie rojiza de los


labios de Jungkook hasta que ya no quedó más rastro de dulce en sus
labios.2

Se separaron tras esa escena subida de tono y se miraron a los ojos con las
respiración agitada a causa de los nervios, que ambos trataban de calmar.2

- M-Me siento ex-extraño...- comentó Taehyung de repente, mientras se


estriraba el cuello de su camisa para airarse, ya que estaba empezando a
tener calor.- Iré a du-ducharme...21

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Taehyung se zafó del arrinconamiento de Jungkook y fue casi corriendo a su
habitación para sacar ropa de su armario. Cuando estuvo a punto de entrar
al baño, Jungkook se interpuso entre él y el baño.

- Jun-Jungkookie, ne-necesito...

- Yo te necesito a ti.88

Taehyung no supo qué decir en ese momento y tampoco supo cómo


reaccionar cuando su pareja lo empujó, cayendo hacia atrás en su mullida
cama blanca.57

Se quedó sin aliento cuando Jungkook se puso encima de él, con las manos
apoyadas en cada costado de su cabeza y sus rodillas a cada lado de sus
caderas.

Se quedaron mirando mutuamente durante unos segundos hasta que


Taehyung tomó aire y se irguió en su sitio, haciendo que Jungkook
terminase sentado en sus piernas.

- Jungkookie, si si-sigues así no tendré la fuerza su-suficiente como para


parar...83

El nombrado asintió y el castaño suspiró, haciendo fuerza hacia atrás para


arrastrarse hasta el centro de la cama y poder apoyarse en el cabezal de la
cama con Jungkook aún a horcajadas.

Sin previo aviso, Jungkook tomó la cara de Taehyung entre sus dos manos
y junto sus labios en un fogoso beso. Ambos ya habían "practicado" lo
suficiente como para no chocarse los dientes de nuevo.67

La respiración entrecortada de Jungkook a causa de los nervios hacia que


sus movimientos fuesen más torpes que lo iniciales.
Taehyung siempre era tan intenso y rápido en los besos.1

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Sus lenguas se chocaron y aprovecharon ese momento para entrlazarlas,
causando un efecto de sonido viscoso.10

Ambos estaban tan absortos en el beso que a penas se dieron cuenta


cuando sus manos empezaron a moverse por propia inercia.

Las manos de Taehyung se adentaron hasta el interior del jersey negro con
el que estaba vestido Jungkook, deleitándose con la piel suave del pelinegro
y de sus bien formados abdominales y fueron deslizándose por toda su
cintura y pecho.54

Las manos de Jungkook fueron hacia los primeros botones de la camisa


pijama de Taehyung y empezó a desabotonarlo de forma patosa ya que sus
manos temblaban hasta el cúmulo de nuevas y fuertes experiencias.

Taehyung se separó lentamente de la boca de Jungkook, dejando rastros de


saliva cayendo por los labios del pelinegro. Y cortos segundos después, su
boca lamía y mordía el cuello del contrario, que ladeó la cabeza para darle
mayor acceso. El mayor cerró los ojos debido al placer y empezó a morder
sus labios para no soltar sonidos extraños.57

A pesar de que estaba en un momento de debilidad porque Taehyung


parecía haber descubierto que lo que más le gustaba era mordisquear el
cuello de Jungkook, éste aprovechó que la camisa del menor estaba suelta
para deslizarla por sus hombros y de esta forma, su pecho y hombros
estuvieron totalmente expuestos.37

Taehyung se separó sutilmente antes de dejar el último chupetón en el


cuello del pelinegro para observar la cara rojiza de su novio y apreciar su
respiración irregular, aunque él estaba en las mismas condiciones.

Jungkook estaba empezando a jadear porque las manos del castaño se


movían inquietamente debajo de su jersey, tocando cualquier parte de su
tronco, como sus pezones.

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- ¿S-sabes? Se-Sería más fácil si me quitases el jersey.

- A-ah, sí...- Taehyung cayó en cuenta de que él ya no tenía puesta su


camisa por lo que, subió los extremos del jersey, y en poco segundos,
Jungkook ya no tenía nada en su parte superior.4

Taehyung no quería ser apresurado, porque sabía que a pesar de ser un


novato, Jungkook también debía disfrutarlo, así que debía ser paciente y
disfrutar del juego previo.42

Así que, volvió a llevar las boca hacia el cuello del mayor, pero esta vez
centrándose en sus hombros, que aún estaban limpios y libre de marcas.

Jungkook apretó los hombros más morenos de Taehyung y sus dientes a la


vez que cerraba los ojos nuevamente.

Su menor estaba centrado en aquello y él solo estaba recibiendo, era hora


de que él también le diese algo de placer al contrario. Empezó a mover sus
caderas, de forma lenta al principio, encima de la dura entrepierna de
Taehyung.77

El castaño paró todo movimiento en los hombros de Jungkook, para


empezar a jadear e instintivamente sujetó con firmeza las caderas del
pelinegro pero sin ejercer fuerza, por lo que Jungkook podía seguir
estimulando su cubierto pene.

Los jadeos bajos por parte de Taehyung siguieron, y Jungkook pudo


deleitarse con eso ya que la boca del menor estaba casi pegada a su oreja.

Cuando el pelinegro comenzó a hacer movimientos más seguros y rápidos,


en un inesperado momento, el menor levantó la pelvis con un poco de
brusquedad y Jungkook no pudo evitar soltar un sonoro gemido, y sus
orejad comenzaron a ponerse rojas de la vergüenza por eso.47

- Pe-perdón, fue ines-inesperado.

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- No te di-disculpes... Fue bonito...- susurró con la voz más ronca de lo
normal.11

Jungkook frunció el ceño. ¿Su gemido le había parecido bonito?144

Los pensamientos del mayor fueron interrumpidos cuando empezó a sentir


una mano muy cálida, adentrarse por la cintura de su pantalón y
progresivamente, por dentro de su boxer mientras que la otra, acariciaba
sus muslos, ya que Taehyung había metido las manos en los espacios para
las piernas.

Taehyung, inesperadamente para Jungkook, empezó a levantarse más


hasta que dio la vuelta a Jungkook, quedando ahora él encima del mayor y
dejando inmóvil al pelinegro.53

El castaño retiró la mano izquierda del muslo de Jungkook para ayudar a la


otra a bajar los pantalones chándal del pelinegro, delizandola por sus largas
piernas-que estaba medianamete levantadas- hasta quitarlo y tirarlo por
cualquier lado al igual que su ropa interior.6

Al ver su gran logro, Taehyung esbozó una sonrisa y observó desde arriba
el desnudo cuerpo de Jungkook, que estaba somrojado por ello.5

- ¡Tae, no te embobes!- exclamó Jungkook avergonzado mientras se


abrazaba a sí mismo para cubrirse lo que podía de pecho.69

- No me pidas imposibles...- comentó pasando las dedos por su marcado


abdomen y finalmente, hasta la punta de su miembro erecto.27

Jungkook se estremeció cuando los largos dedos de Taehyung rodearon


cálidamente su pene y comenzó a sobarlo con lentitud, torturándolo.

Aunque ese contacto duró poco ya que el castaño se le quedó mirando,


perplejo, y el pelinegro no pudo evitar sentirse inseguro.

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- ¿Q-qué pasa? ¿Por-Por qué paras?

- Yo... Te parecerá estupido, pero...- Jungkook esperaba desesperadamente


la respuesta de su novio, temiendo lo peor.- N-No sé qué más te-tengo que
h-hacer...179

Jungkook se quedó estático durante un momento y luego soltó una


carcajada, ganándose una mirada de fastidio de Taehyung.2

- Está bien... Yo te guio... ¿Por casualidad no tendrás lu-lubticante?9

Taehyung desvió la mirada pensativo y luego recordó que Yoongi había


metido una bolsa de compra en su mochila.
5

Quizás...
1

El castaño tanteó el suelo hasta toparse con su mochila rosa y de ahí, sacó
la bolsa de compra, que tenía un bote rosa y una caja de...

- Condones...- comentó Jungkook sorprendido, se le había pasado ese


detalle.- ¡Un momento! ¡¿Por qué tienes eso?! Tae, ¿me estabas mintiendo?
¿Todo este plan era tuyo?3

- ¿Q-qué?- el castaño miró confuso a su novio y luego a los productos que


acaba de sacar y negó con la cabeza.- ¡N-no! ¡No lo sabía! ¡Ju-
Jungkookie...!

- ¡Olvídalo! ¡Sigamos antes de que te meta un puñetazo!96

Taehyung asintió, respirando con alivio por no haberlo arruinado del todo.

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- Tienes que derramar el lubricante en tus dedos.- explicó Jungkook y el
menor asintió, haciendo caso a las indicaciones de su pareja. Pronto, ese
espeso líquido estaba chorreando por su mano derecha.- Y luego...27

El pelinegro tomó cuidadosamente la muñeca del castaño y lo guió hasta su


trasero. Taehyung empezó a ponerse nervioso de nuevo.
Jungkook acercó los dedos extendidos hacia su entrada y soltó un gran
suspiro cuando el dedo del medio del castaño lo rozó.- Me-Metelo... Pero
con cuidado, o tú serás el pró-proximo en no poder caminar.210

Taehyung asintió frenéticamente. Observó sus manos, y procurando tener


extremo cuidado y delicadeza, su dedo medio empezó a introducirse
lentamente en el interior de Jungkook.

El pelinegro arqueó su espalda y a medida que los falanges de Taehyung se


adentraban en él, su gemidos y quejas empezaban a aparecer con más
frecuencia.

- Lentamente... Lent- ¡Ah!~ ¡LENTAMENTE TE DIJ-... Mmh!- Jungkook


empezó a gemir, sin poder detenerse debido a que Taehyung estaba
absorto moviendo su dedo, hacia dentro y hacia afuera.- ¡T-Tae! A-ah..140

Jungkook empezaba a herirse los labios debido a la fuerza con la que la


mordía para callar sus obscenos sonidos, a la vez que apretaba con fuerza
sus puños. Taehyung empezaba a moverse por su cuenta y ya había
introducido por completo el segundo dedo, y empezaba a ser incluso más
rápido con la penetración.

Con dificultad, terminó metiendo por completo los tres dedos y Jungkook ya
había olvidado lo de callarse, gemía a la par que los dedos de Taehyung
daban una estocada, por lol que era un completo desorden.277

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La erección del castaño dolía, y sobretodo cuando estaba metiéndole los
dedos a su pareja y necesitaba tener autocontrol. Era duro, pero oír los
gemidos ruidosos de Jungkook era como el paraíso.1

- Ah~ ¡Ya, T-Tae! Mm... Ya puedes sacar...los...- dijo Jungkook entre


gemidos y el nombrado asintió, retirando lentamente sus dedos del interior
del pelinegro. La sensación en sus dedos era viscosa pero muy
satisfactoria.- Ahora, puedes metermelo.

Llegó la hora de la verdad y Taehyung asintió, aunque un poco nervioso


porque no quería hacer daño a su novio, procuraría ser muy cuidadoso.18

Mientras Jungkook jadeaba y trataba de calmar su agitada respiración,


Taehyung se levantó, apoyando las rodillas en la cama, para bajarse el
pantalón y junto con ello, la ropa interior hasta sus rodillas.
El pelinegro se lamió el labio cuando vio el húmedo y duro miembro de su
pareja, que ya incluso goteaba.6

De la caja que tenía en su mesilla, tomó un pequeño sobre y


cuidadosamente la abrió para sacar el condón y deslizarlo por todo su
pene.30

Taehyung le dedicó una mirada cariñosa al tembloroso Jungkook antes de


posicionarse bien entre sus dos piernas. Llevó la mano a su miembro y lo
alineó perfectamente con la entrada de su novio.

El castaño tomó aire y empezó a introducir el glande. Jungkook arqueó la


espalda nuevamente y empezó a tomar aire rápidamente en un intento de
relajarse. Con algo de dificultad y con extrema paciencia para no hacer daño
a su mayor, Taehyung pudo introducir por completo su miembro.

Respiró entrecortadamente cuando estuvo por completo y se apoyo con sus


codos en la cama, temblando porque tenía la extrema necesitada de

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moverse en el caliente conducto pero no podía hacerlo hasta que Jungkook
lo avisase.34

- D-duele, a-ah... Tae... du-duele mu...cho.- Taehyung empezó a alarmarse


cuando las lágrimas empezaron a deslizarse por las mejillas de Jungkook
sin poder detenerse.48

Así que, para distraer a su pareja, rodeó otra vez el pene de Jungkook y
empezó a masturbarlo topermente pero con delicadeza para no hacerle
daño. Jungkook recibió este gesto gustosamente, y empezó a jadear de
forma más placentera.4

Taehyung empezó a moverse de una forma extremedamente lenta y


Jungkook comenzó a gemir, con una mezcla entre placer y dolor.21

El castaño se mordía el labio y el pelinegro apretaba la tela de la sábana de


la cama.

A medida que pasaba el tiempo, los movimientos pelvicos de Taehyung


comenzaron a ser más rápidos y los gemidos de Jungkook más agudos y
desordenados. El menor gemía por lo bajó, escondiéndose en el hombro del
mayor y procurando que sus estocadas fuesen profundas y rápidas.

En poco minutos, la cama en la que estaban tumbados, comenzó a rechinar


y la espalda de la cama a golpear la pared debido a la velocidad y fuerza
con la que estaban yendo.153

La brillante saliva de Jungkook caía por todo su mentón y sus pies estaban
estirados, los gemidos eran tan fuertes y seguidos que opacaban los graves
y roncos de Taehyung, no había otro sonido que no fuese la cama, ellos dos
gimiendo y los testículos de Taehyung chocando contra el trasero se
Jungkook.164

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El pelinegro se aferraba al cuello del menor y clavaba sus uñas en la ancha
espalda del castaño cuando alguna estocada tocaba un punto sensible en
su interior. Taehyung masturbaba a su pareja a la vez que sujetaba la
cadera de Jungkook para que sus movimientos fuesen más preciosos.

- A-Ah~ Taehy-Mh~... m-me vo- oh...- antes de que el mayor pudiese


finalizar, Jungkook se había corrido, manchando su abdomen y parte de la
mano de su pareja.47

Las paredes anales del pelinegro comenzaron a estrecharse por ello, y ante
esa deliciosa sensación, Taehyung eyaculó dentro del condón tras tres
estocadas duras y rápidas más.58

Taehyung se desplomó encima del cuerpo de Jungkook, y ambos trataron


de relajar su respiración. El menor podía sentir los espasmos que sufría el
pelinegro debido al orgasmo. Tras unos minutos de relajación, el castaño
salió del interior de su pareja y se tumbó al lado de él.

- Feliz cumpleaños, Jungkookie.119

El nombrado soltó una risilla ante el primer comentario de Taehyung


después de hacer el amor.19

- Ha sido el mejor regalo de cumpleaños.


51

- No esperaba que tuviese hambre a esta hora.- comentó Taehyung


sonriente, viendo como su novio comía apresuradamente.

- Es que... Me fui sin terminar la cena y me levante a la cuatro con hambre,


pero no podía le-le-levantarme...50

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Taehyung soltó una carcajada.

- ¡N-no te rías!

- De acuerdo, de acuerdo.- dijo el castaño dejando de reírse.- Por cierto...


Creo que pasare por esa tienda más a menudo.80

Jungkook se atragantó con su sándwich y su cara se volvió roja.- ¿Q-Qué?


¡Tae! ¡Ahora te has vuelto un pervertido como Yoongi!42

Taehyung ladeó la cabeza.- ¿T-tú crees? Pues la verdad es que yo no le


veo el problema.2

En ese momento, Jungkook sintió el verdadero terror.


270

[EXTRA DEL EXTRA]125

Yoongi 2.0

Chat con Yoongi hyung.

Taehyung.

Yoongi.

Yoongi hyung.

k kieres
50

Taehyung.

¿Cuál de estos dos le quedaría mejor a Jungkookie?

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Taehyung ha mandado dos imágenes.

79

Yoongi hyung.

Oh Dios...

He creado a un monstruo...291

Y, los dos por cierto, a Jungkook todo le queda bien, que pregunta más
estúpida.
75

Taehyung.

Exactamente eso es lo que estaba pensando.

Gracias hyung, comprare los dos.


31

Yoongi hyung5
De nada, buen aprendiz.

P á g i n a 329 | 329

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