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Los cuatro elementos más abundantes en el cuerpo humano son el carbono, hidrógeno, oxígeno y nitrógeno, que comprenden aproximadamente el 99% del peso corporal. Estos elementos, llamados bioelementos primarios, cumplen funciones vitales como suministrar energía, participar en procesos digestivos y de lubricación, y proporcionar materiales para la construcción de órganos y tejidos. Los metales pesados como el plomo, cadmio, arsénico y cromo son necesarios en pequeñas cantidades pero pueden
Los cuatro elementos más abundantes en el cuerpo humano son el carbono, hidrógeno, oxígeno y nitrógeno, que comprenden aproximadamente el 99% del peso corporal. Estos elementos, llamados bioelementos primarios, cumplen funciones vitales como suministrar energía, participar en procesos digestivos y de lubricación, y proporcionar materiales para la construcción de órganos y tejidos. Los metales pesados como el plomo, cadmio, arsénico y cromo son necesarios en pequeñas cantidades pero pueden
Los cuatro elementos más abundantes en el cuerpo humano son el carbono, hidrógeno, oxígeno y nitrógeno, que comprenden aproximadamente el 99% del peso corporal. Estos elementos, llamados bioelementos primarios, cumplen funciones vitales como suministrar energía, participar en procesos digestivos y de lubricación, y proporcionar materiales para la construcción de órganos y tejidos. Los metales pesados como el plomo, cadmio, arsénico y cromo son necesarios en pequeñas cantidades pero pueden
La importancia de los elementos en el cuerpo humano
La importancia de los elementos químicos en el cuerpo humano reside en que
el organismo precisa del aporte de estos por medio de los alimentos. Son llamados nutrientes esenciales, ya que serán absorbidos y utilizados por distintos órganos y sistemas para realizar diferentes funciones. Cerca del 99% nuestro cuerpo esta hecho de 4 elementos: carbono, hidrogeno, oxígeno y nitrógeno. El oxígeno es el más abundante con un 65%. A estos elementos se les conoce como bioelementos primarios. Una de sus funciones principales es: Carbono: su función principal es suministrar energía a todas las células del organismo, también es necesario para formar moléculas complejas como proteínas y ADN. Hidrogeno: participa en muchos de los procesos del organismo, como en mantener las articulaciones lubricas o en la digestión de los alimentos en el estómago. Oxigeno: es un gas que el cuerpo necesita para funcionar bien, las células necesitan oxígeno para producir energía. Nitrógeno: proporciona materiales para la construcción y para el mantenimiento de todos los órganos y tejidos. Si alguno de estos elementos se encuentra en una cantidad inferior se produce una deficiencia, lo que conlleva la aparición de efectos patológicos o incluso la muerte del organismo. En el caso de los siguientes elementos: Carbono: puede provocar que el cuerpo descomponga las grasas en cetonas para obtener energía a esto se le denomina cetosis, puede causar mal aliento, dolor de cabeza, fatiga y debilidad. Hidrogeno: causaría el desequilibrio o desbalance en el PH corporal y en los electrolitos. Oxigeno: dificultad para respirar y falta de aire. Nitrógeno: reacciones con la hemoglobina en la sangre, causando una disminución en la capacidad de trasporte de oxigeno por la sangre. Metales pesados Un metal pesado es un miembro de un grupo de elementos químicos no muy bien definido que exhibe propiedades metálicas. Los metales pesados se han agrupado en oligoelementos o micronu-trientes también denominados elementos traza, los cuales son necesarios en pequeñas cantidades para el organismo. Entre ellos están: arsénico (As), boro(B), cobalto (Co), cromo (Cr), cobre (Cu), molibdeno (Mo), manganeso (Mn), níquel (Ni), Zinc (Zn), entre muchos más. todos estos elementos se extraen de la tierra. Son esenciales para mantener el metabolismo del cuerpo humano. Aunque no siempre nos benefician, los metales mas dañinos para el medio ambiente son: plomo, cadmio, arsénico y cromo, esto puede provocar contaminación en el suelo y se acumulan en las plantas y los tejidos orgánicos, lo que puede provocar la muerte de la flora y fauna. La peligrosidad de los metales pesados es mayor al no ser química ni biológicamente degradables. El metal más dañino para el cuerpo humano es el plomo, este puede provenir del agua o el suelo. Ataca el cerebro y el sistema nervioso central, lo que puede provocar coma, convulsiones o incluso la muerte. Los metales pesados pueden causar retrasos en el desarrollo, varios tipos de cáncer, daños en el riñón, e incluso la muerte. En caso de ingerir algún metal pesado existen algunos tratamientos uno de ellos es: terapia de quitación, para esta terapia, necesita tomar un medicamento oral o una inyección de medicamento que ayuda a remover los metales de su cuerpo por la orina.