Por lo que vimos en el episodio de la serie skins, la protagonista sufre de
problemas alimenticios que la impulsaron a introducirse en un hospital clínico que la ayuden con ese problema, sin embargo a lo largo del episodio vemos que, cada que la protagonista es recordada por un “mensaje” que debe de comer algo de mayor “importancia” la detiene, podemos considerar esto como una forma de la adolescente de “ignorar” sus problemas, estos mensajes siendo periódicos, los cuales podemos considerar una alucinación recurrente ya que no había un mensajero como tal. Estas alucinaciones se verían apoyadas por la necesidad de atención que muestra a lo largo del episodio, tomando un comentario de un chico como un signo de amor. Además, durante este periodo de su adolescencia se le ven impuestas obligaciones que, para su edad, no es compatible, como tener que cuidar de su hermano menor, limpiarlo, vestirlo y jugar con él. La rebeldía siendo un concepto presente tanto en la chica rubia como en los diferentes chicos que vemos a lo largo del episodio, que buscan tomar sus propias decisiones y posteriormente tratar de ignorar las consecuencias, esta rebeldía es parte de la dependencia infantil como proceso de duelo. Hay separación progresiva de los padres, esto lo observamos en la forma en que la relación entre Cassie y sus padres esta formada, donde ellos parecen ignorar hasta cierto grado sus necesidades y se concentran en las propias, empujándola a iniciar el proceso de maduración para cuidar de si misma aun cuando no se encuentra preparada. Dentro de la adolescencia los padres deben de otorgar cierto grado de libertad para que el hijo logre su independencia, pero, como en el caso de Cassie, el exceso de libertad se convierte en abandono y los padres son parte fundamental para su nueva identidad, empujando a Cassie a buscar figuras que le den “atención”. Existe un grado de simbolismo que la protagonista proyecta en diferentes situaciones de su vida, desde la forma que los padres le brindan mínima atención a ella mientras el bebe es el foco de atención, empujándola a utilizar la comida como un símbolo que puede brindarle atención, pero a su vez uno que, si ignora, podría también brindarle atención,