Bienvenida a la sociedad

Mujer, bienvenida a la sociedad, aquí, más allá de tu inteligencia e independencia,

eficiencia, ciencia, nos interesa tu apariencia. Te explico los requisitos. Te mentiría si

te dijera que no son estrictos. Que se te marquen los pómulos y tengas los labios

carnosos. Tus cejas deben estar bien pobladas. Tu nariz bien respingada. ¿Acné en

tu cara? Es que, se tiene que ver como piel de porcelana, pero no te preocupes, un

filtro de Instagram y ya estas como si nada. Pestañas siempre largas y si no las tienes,

así como unas postizas, no hay nada. ¿Arrugas o líneas finas? Un lifting y te vas a

ver divina. Si no quieres parecer enferma, siempre maquillada. Pintalabios, base,

rímel, corrector, pero mídete, tampoco tan cargada. Y regla de oro: siempre cúbrete

esas ojeras y siempre prueba distintos colores, porque no te va bien cualquiera.

Tranquila que eso solo es de la cara, que con el cuerpo ponte cómoda, que no acaba.

Quiero alcanzar a ver los huesos de tu piel, pero tampoco tan chupada, que si no te

vas a parecer ridícula. Que tengas al menos la línea del abdomen marcada: cintura

estrecha, cadera ancha, ¿no la tienes? Dieta, ejercicio, operación. ¿Kilos de más?

Eso es demasiado. ¿Kilos de menos? Tampoco es aceptado.

Piernas largas, marcadas y delgadas, pero no tan delgadas, puede que te llamen

patas de gallina. Tampoco te marcadas que luego no pareces tan femenina.

Abdomen siempre plano. Pero son solo el abdomen. Que, si algo más por ahí es

plano, todo lo demás será en vano. Que allá de donde agarrar, pero solo en ciertas

partes. Y si estas plana, no hay nada que no arregle unos implantes, pompis

redondas, bonitas y paradas sin falta.

Celulitis. No vuelvas a decir eso en voz alta.

Piernas, axila, bikini, brazos. No quiero ver un solo vello en tu piel. Depilación láser,

solo mentalizarte: te va a costar y te va a doler.

Claro, no olvides el “thigh gap”, el hueco que en tu entrepierna siempre debe haber.

Esto tatúatelo en la mente, ante todo delgada y como comodín agregarle un extra si

estás bronceada.

Yo entre más tiempo pase, más debes estar preocupada. Y antes de acabar, que

sepas que nada de esto es obligatorio. Es una elección personal. Si no lo cumples,

solo te enfrentarás a críticas, miradas despectivas y linchamiento social. Nadie te lo

impondrá.

Verás esto desde chiquita, todo el tiempo y en todas partes, los medios, redes

sociales, publicidad y conversaciones casuales. Pero a final de cuentas, serás tú la

que decide bajo tus propios ideales.

Y, por último, es mi deber decirte que esta lista de requisitos está en constante

transformación, así que te pediría que el siguiente año vuelvas a venir, por favor. Y

listo. Sigue esta lista de sencillos, costosos y dolorosos requisitos y te lo juro, todos

te querrán ver.

Bienvenida, a ser mujer.

Sta. Lágrimas Encubiertas