0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos)
49 vistas11 páginas
El documento resume cuatro tipos de terrenos donde se siembra la palabra de Dios: 1) Junto al camino, donde la palabra no penetra el corazón y es arrebatada por el maligno. 2) Tierra pedregosa, donde se recibe con alegría pero no se arraiga y se aparta ante problemas. 3) Entre espinos, donde las preocupaciones de este mundo ahogan la palabra. 4) Buen terreno, donde se oye y entiende la palabra y produce fruto. La clave es no solo oír sino profundizar, obedecer
El documento resume cuatro tipos de terrenos donde se siembra la palabra de Dios: 1) Junto al camino, donde la palabra no penetra el corazón y es arrebatada por el maligno. 2) Tierra pedregosa, donde se recibe con alegría pero no se arraiga y se aparta ante problemas. 3) Entre espinos, donde las preocupaciones de este mundo ahogan la palabra. 4) Buen terreno, donde se oye y entiende la palabra y produce fruto. La clave es no solo oír sino profundizar, obedecer
El documento resume cuatro tipos de terrenos donde se siembra la palabra de Dios: 1) Junto al camino, donde la palabra no penetra el corazón y es arrebatada por el maligno. 2) Tierra pedregosa, donde se recibe con alegría pero no se arraiga y se aparta ante problemas. 3) Entre espinos, donde las preocupaciones de este mundo ahogan la palabra. 4) Buen terreno, donde se oye y entiende la palabra y produce fruto. La clave es no solo oír sino profundizar, obedecer
4 clases de terrenos/corazones donde es sembrada la
palabra.
1.- JUNTO AL CAMINO
Mateo 13:19 NVI
19 Cuando alguien oye la palabra acerca del reino y no la
entiende, viene el maligno y arrebata lo que se sembró en su corazón. Ésta es la semilla sembrada junto al camino.
Marcos 4:15 RV60
15Y éstos son los de junto al camino: en quienes se
siembra la palabra, pero después que la oyen, en seguida viene Satanás, y quita la palabra que se sembró en sus corazones.
A un lado del camino duro que estaba en medio del
campo, donde la tierra no había sido labrada
No sólo no pudo la simiente penetrar bajo la superficie de
la tierra, sino que “fué hollada”
La gran verdad enseñada aquí es, que los corazones
duros y no quebrantados no son terreno apto para recibir la verdad salvadora.
No la toman como el medio usado por Dios para
restaurarlos a él mismo. La verdad no penetra, mas queda suelta sobre la superficie del corazón, hasta que el maligno, temeroso de perder una víctima, o como dice
Lucas 8:12 (RVR60): 12Y los de junto al camino son los
que oyen, y luego viene el diablo y quita de su corazón la palabra, para que no crean y se salven.
halla algún tema frívolo (Que no concede a las cosas la
importancia que merecen, no las hace con la seriedad, el sentimiento o el interés requeridos y solo piensa en el aspecto divertido o lúdico de la vida.) por cuyo poder más activo quita la atención de la persona, y la verdad del evangelio desaparece. ¡Cuántos oidores de la Palabra pueden ser descritos en esta forma tan dolorosa!
CUANDO ALGUIEN OYE LA PALABRA PERO NO LA
ENTIENDE. VIENE EL MALIGNO Y ARREBATA LO QUE SE SEMBRO EN SU CORAZON. SEMILLA SEMBRADA JUNTO AL CAMINO.
2.-TIERRA ROCOSA
Mateo 13: 20-21 NVI
20 El que recibió la semilla que cayó en terreno
pedregoso es el que oye la palabra e inmediatamente la recibe con alegría; 21 pero como no tiene raíz, dura poco tiempo. Cuando surgen problemas o persecución a causa de la palabra, en seguida se aparta de ella.
Marcos 4:16-17 RV60
16Estos son asimismo los que fueron sembrados en
pedregales: los que cuando han oído la palabra, al momento la reciben con gozo; 17pero no tienen raíz en sí, sino que son de corta duración, porque cuando viene la tribulación o la persecución por causa de la palabra, luego tropiezan.
El problema no es la tierra pedregosa, sino un terreno
donde una capa delgada de tierra.
La simiente brota inmediatamente debido a la poca
profundidad del suelo. Los rayos del sol pronto la marchitan y queman, “porque no tiene raíz” y “porque no tenía humedad”.
La verdad enseñada aquí es que los corazones
impresionados superficialmente son propensos a recibir la verdad con prontitud, y aun con gozo
Lucas 8:13 (RVR60): 13Los de sobre la piedra son los que
habiendo oído, reciben la palabra con gozo; pero éstos no tienen raíces; creen por algún tiempo, y en el tiempo de la prueba se apartan.
pero el calor quemante de las tribulaciones o
persecuciones a causa de la Palabra, o las pruebas que su nueva profesión trae sobre ellos, pronto secan su apetito por la verdad, y marchitan la promesa apresurada de fruto que ellos mostraron. ¡Cuán frecuentes son semejantes desengaños de un ministerio fiel y despertador!
EL QUE RECIBIÓ LA SEMILLA QUE CAYÓ EN TERRENO
PEDREGOSO, ES EL QUE OYE LA PALABRA E INMEDIATAMENTE LA RECIBE CON ALEGRIA.
PERO COMO NO TIENE RAÍZ DURA POCO TIEMPO.
CUANDO SURGEN PROBLEMAS, PERSECUCIÓN A CAUSA DE LA PALABRA EN SEGUIDA SE APARTA DE ELLA.
3.- ENTRE ESPINOS
Mateo 13:22 NVI
22 El que recibió la semilla que cayó entre espinos es el
que oye la palabra, pero las preocupaciones de esta vida y el engaño de las riquezas la ahogan, de modo que ésta no llega a dar fruto.
Marcos 4:18-19 RV60
18Estos son los que fueron sembrados entre espinos: los
que oyen la palabra, 19pero los afanes de este siglo, y el engaño de las riquezas, y las codicias de otras cosas, entran y ahogan la palabra, y se hace infructuosa.
Este es el caso del terreno que no ha sido completamente
limpiado de abrojos y espinas, los cuales, levantándose por encima de la simiente buena, la “ahogaron”, excluyendo la luz y el aire, y absorbiendo toda la humedad y fertilidad del suelo. Por esto “ se hace infructuosa”, crece, sí, pero su crecimiento es retardado, y nunca madura. El mal aquí no consiste en un terreno duro ni poco profundo, pues hay bastante blandura y bastante profundidad, sino la existencia de algo que quita toda la humedad y fertilidad y así hace morir de inanición a la planta buena. ¿Qué son estos abrojos y espinas?
Primero se mencionan “los cuidados de este siglo”, o sea
la atención ansiosa e inflexible a los negocios de la vida presente; en segundo lugar, “el engaño de las riquezas”, refiriéndose a aquellas riquezas que son el fruto de los “cuidados” terrenales; en tercer lugar, “los pasatiempos” o “anhelos de esta vida”, los cuales podrán ser en sí inocentes, y la prosperidad terrenal permite que sean disfrutados. Pero éstos “ahogan”, o “estrangulan” la palabra: atrayendo tanto la atención de uno, absorbiendo tanto su interés, y consumiendo tanto su tiempo, que sólo las heces o desperdicios de éstos quedan para las cosas espirituales, y al fin toda la religión de tales personas consiste de un formalismo desfallecido, apresurado y frío.
OYE LA PALABRA PERO LAS PREOCUPACIONES DE
ESTA VIDA Y EL ENGAÑO DE LAS RIQUEZAS LA AHOGAN DE MODO QUE ESTA NO LLEGA A DAR FRUTO.
4.- BUEN TERRENO
Mateo 13:23 NVI
23 Pero el que recibió la semilla que cayó en buen terreno
es el que oye la palabra y la entiende. Éste sí produce una cosecha al treinta, al sesenta y hasta al ciento por uno.
Marcos 4:20 RV60
20Y éstos son los que fueron sembrados en buena tierra:
los que oyen la palabra y la reciben, y dan fruto a treinta, a sesenta, y a ciento por uno.
Lo bueno de esta tierra consiste en que sus cualidades
son precisamente todo to contrario a las poseídas por las otras tres clases de suelo. Ellas son: su blandura y suavidad en recibir y alimentar la simiente; su profundidad, que permitía que echara raíces y no perdiese la humedad pronto; su limpieza, que daba todo su vigor y savia a la planta buena. En semejante terreno la simiente “produce fruto” en diferentes grados de profusión, según la medida en que el suelo posee esas cualidades. De modo que
El corazón suave y tierno, conmovido a fondo por las
grandes verdades eternas, y celosamente guardado de absorciones mundanas, es como el “corazón bueno y recto” que “retiene”, es decir, “guarda” la simiente de la palabra, y da su fruto según el grado de ternura o rectitud de dicho corazón. Tales “llevan fruto en paciencia” (Lucas 8:15), o de continue, “soportando hasta el fin”, en contraste con aquellos en quienes la palabra es “ahogada”, y no da fruto a la perfección. Los “de a treinta” se mencionan para señalar el grado más bajo de fecundidad; los “de a ciento” el grado más alto, y los “de a sesenta” los grados medianos. Así como la cosecha “de a ciento”, aunque no es algo imposible (Génesis 26:12), es un rendimiento raro en la agricultura natural, así como los más altos grados de fecundidad espiritual rara vez se ven. Las palabras finales de esta parábola introductoria parecen propuestas para llamar la atención al carácter fundamental y universal de la misma. 9. Entonces les dijo: El que tiene oídos para oir, oiga.
OYE LA PALABRA Y LA ENTIENDE, ESTE PRODUCE
UNA COSECHA AL TREINTA, SETENTA, Y CIENTO POR UNO….
Como podemos ver, no es suficiente con OÍR. TENEMOS
QUE ABRAZAR, ATESORAR, PROFUNDIZAR, PERMANECER EN LA PALABRA…
Oseas 4:6 (RVR60): 6Mi pueblo fue destruido, porque le
faltó conocimiento. Por cuanto desechaste el conocimiento, yo te echaré del sacerdocio; y porque olvidaste la ley de tu Dios, también yo me olvidaré de tus hijos.
Su pueblo oyó… pero no profundizó, obedeció, vivió la
palabra.
Deuteronomio 30:14–20 (RVR60): 14Porque muy cerca
de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón, para que la cumplas. 15Mira, yo he puesto delante de ti hoy la vida y el bien, la muerte y el mal; 16porque yo te mando hoy que ames a Jehová tu Dios, que andes en sus caminos, y guardes sus mandamientos, sus estatutos y sus decretos, para que vivas y seas multiplicado, y Jehová tu Dios te bendiga en la tierra a la cual entras para tomar posesión de ella. 17Mas si tu corazón se apartare y no oyeres, y te dejares extraviar, y te inclinares a dioses ajenos y les sirvieres, 18yo os protesto hoy que de cierto pereceréis; no prolongaréis vuestros días sobre la tierra adonde vais, pasando el Jordán, para entrar en posesión de ella. 19A los cielos y a la tierra llamo por testigos hoy contra vosotros, que os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la maldición; escoge, pues, la vida, para que vivas tú y tu descendencia; 20amando a Jehová tu Dios, atendiendo a su voz, y siguiéndole a él; porque él es vida para ti, y prolongación de tus días; a fin de que habites sobre la tierra que juró Jehová a tus padres, Abraham, Isaac y Jacob, que les había de dar.
No sirve de nada que tengamos la palabra en la boca y
en el corazón sino la cumplimos.
Amando a Jehová tu Dios, atendiendo a Su voz,
siguiéndole a El, porque El es vida para ti.
Deuteronomio 6:4–9 (RVR60): 4Oye, Israel: Jehová
nuestro Dios, Jehová uno es. 5Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas. 6Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; 7y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes. 8Y las atarás como una señal en tu mano, y estarán como frontales entre tus ojos; 9y las escribirás en los postes de tu casa, y en tus puertas.
Deuteronomio 29:29 (RVR60): 29Las cosas secretas
pertenecen a Jehová nuestro Dios; mas las reveladas son para nosotros y para nuestros hijos para siempre, para que cumplamos todas las palabras de esta ley.
Josué 1:7–8 (RVR60): 7Solamente esfuérzate y sé muy
valiente, para cuidar de hacer conforme a toda la ley que mi siervo Moisés te mandó; no te apartes de ella ni a diestra ni a siniestra, para que seas prosperado en todas las cosas que emprendas. 8Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.
1º Reyes 2:2–4 (RVR60): esfuérzate, y sé hombre.
3Guarda los preceptos de Jehová tu Dios, andando en sus caminos, y observando sus estatutos y mandamientos, sus decretos y sus testimonios, de la manera que está escrito en la ley de Moisés, para que prosperes en todo lo que hagas y en todo aquello que emprendas; 4para que confirme Jehová la palabra que me habló, diciendo: Si tus hijos guardaren mi camino, andando delante de mí con verdad, de todo su corazón y de toda su alma, jamás, dice, faltará a ti varón en el trono de Israel.
Salmo 1:2–3 (RVR60): 2 Sino que en la ley de Jehová
está su delicia,
Y en su ley medita de día y de noche.
3 Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas,
Que da su fruto en su tiempo,
Y su hoja no cae;
Y todo lo que hace, prosperará.
Santiago 1:22–25 (RVR60): 22Pero sed hacedores de la
palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos. 23Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. 24Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. 25Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace.
Santiago 2:17–18 (RVR60): 17Así también la fe, si no tiene
obras, es muerta en sí misma.
18Pero alguno dirá: Tú tienes fe, y yo tengo obras.
Muéstrame tu fe sin tus obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras.
Santiago 2:19 (RVR60): 19Tú crees que Dios es uno; bien