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0. INTRODUCCIÓN.
1. LA PALABRA Y EL CONCEPTO DE CALLE.
2. LOS NOMBRES DE LAS CALLES. INTENTO DE CLASIFICACIÓN.
3. DE LÁZARO Y DE OTROS PÍCAROS.
4. DE SANTOS.
5. DE ESTUDIANTES Y PROFESORES.
Dos itinerarios: Vitoria vs. Fray Luis.
BIBLIOGRAFÍA.
En este trabajo, voy a seguir las huellas etimológicas de los nombres de esas calles.
Intentaré unir este ejercicio de toponimia urbana con su contextualización en la vida y en la
ficción del siglo XVI: cómo eran y quiénes las patearon.
¿Cuál era el marco físico de esta ciudad, llamada Roma la chica o la Atenas
hispana?
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Desde el punto de vista orográfico, Salamanca es una plataforma arenisca con una
elevación de 800 metros sobre el nivel del mar. La parte sur ha sido tajada por el río
Tormes y tiene un resalte de unos veinte metros. La escorrentía del resalte arenisco
discurría por dos ramblas en dirección sur: la vaguada de la Palma (arroyo o valle de los
Milagros, también arroyo –seco- de San Francisco) a occidente y la de San Pablo (en la que
confluían, a su vez, la de la calle Palomino y el arroyo de Santo Domingo) a oriente. Estas
dos ramblas separan tres tesos: el de San Vicente (llamado así por el Monasterio de
Benedictinos y parece que asentamiento primitivo de la población; también la Aldehuela) al
oeste, el del Alcázar (o de San Isidoro o de las Catedrales o Peña Celestina) en el centro y
el de San Cristóbal (por su iglesia) al este.
“Cada grupo repoblador levantó su iglesia y sus viviendas en corro, esto es, en torno
a un ’corral’ o espacio abierto. Las calles partían de cada uno de éstos hacia las puertas de
la muralla o hacia el recinto primero, pero más aún hacia la Plaza de San Martín en que se
hacía el mercado. Vino a formarse así una red viaria anárquica, pero con cierta
organización central polarizada en dicha Plaza”
Como es bien sabido, la palabra calle procede del latín callis que significaba
‘sendero’ en general y, más concretamente, el ‘sendero pisado por los rebaños’. ‘El camino
hondo y estrecho’ en traducción de Nebrija, que daba también los siguientes equivalentes:
la “calle en lugar poblado” era via, la “calle sin salida” era fundula, la calle angosta o
calleja era angiportus”.
“Latine callis; quasi via callo perdurata. El veneciano la llama cale, via pública; el
italiano la llama ruga y el portugués rua; y en muchas partes le coran la postrera sílaba, y
dizen cal, como cal de Francos. El catalán la llama carrer, como carrer ampla, calle ancha
en Toledo… La calle dezinos ser del rey, y assí a ninguno se le puede vedar el passar por
ella, salvo quando es con perjuicio de los vecinos”.
Rúa. El lat. ruga, como ‘camino’, está documentado en latín vulgar en el VIII. En
castellano está ya en el XII, aunque su uso no va más allá del XVI (excepto en la expresión
referida al vestido). Covarrubias la define como “la calle ancha y principal en una ciudad,
como la rúa de Salamanca, a ruendo, por los que van y vienen por ella, o porque son
espaciosas y corre por ellas libremente el viento; de ruah nombre hebreo o caldero que vale
viento”.
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Ronda. Según el DRAE en su 6ª acepción es ‘cada uno de los paseos o calles cuyo
conjunto circunda una ciudad o la parte antigua de ella’. Efectivamente, veremos la del
Arzobispo, la de S. Cristóbal (hoy aún existe la Ronda de Santi Espíritus).
Corral. En la zona norte de Salamanca hay áun dos calles que recuerdan la forma
de levantar las casas en torno a una iglesia como hemos comentado más arriba: Corrales de
Monroy y Corrales de Villaverde.
Los nombres son huellas del pasado, de los personajes que la pisaron (Pedro
Ciruelo, el maestro Ciruelo, matemático muy conocido en su época; los Portales de
Camiñas en la Plaza de San Julián recuerdan a un vendedor de sanguijuelas con ese
nombre; César Real de la Riva y Antonio Llorente Maldonado fueron dos profesores míos).
Hoy existe una calle denominada Lunes de Aguas, en el barrio de Tejares: tras la
cuaresma, el lunes siguiente los estudiantes cruzaban en barcas el Tormes para recoger a las
prostitutas que habían sido retiradas por el Ayuntamiento a la Mancebía –en la otra orilla-
durante los días de abstinencia; hoy aún ese día todos los salmantinos salimos a tomar el
hornazo a cualquier lugar de los alrededores).
RELIGIÓN.
Ave María (La Latina), Cáliz, Canóniga (Horno de la C.), Cruz, Cruces, Jesús,
Obispo, Rosario.
ESTABLECIMIENTOS CIVILES.
Concejo de Arriba (antes, de Susana o Iusana; Zamora), Concejo de Abajo
(Concejo). Hospital de los Escuderos.
Colegio Mayor: Ronda del Arzobispo (Fonseca).
Colegios menores: Arco de la Magdalena, Ronda de la Magdalena, Cañizares,
Monte Olivete, Placentinos…
ANTROPÓNIMOS.
Nobleza salmantina: Corrales de Antón Paz, Corrales de Monroy, Corrales de
Villaverde, Godino (los Godínez), Sorias, Varillas. Figueroa (¿).
Religiosos: Escoto, Cisneros. Juan del Rey (1250, canónigo Catedral).
Desconocidos: Peripacho (Pelay Facha, 1276), Pero Cozo (Pedro Cojos), Sordo (de
San Martín)
¿: Palomino, Palomo, Pinto, Sordolodo (Menéndez Valdés).
OFICIOS
Albarderos (San Pablo), Bermejeros, Bofordadores, Caldereros (1380), Caleros,
Canteros, Carniceros, Escuderos (1310), Herreros, 1260, Toro), Iugueros, Olleros,
Palilleras, Triperas (Rector Lucena), Valdresería2 (1409, desaparecida).
FITÓNIMOS.
Abrojal, Acipreses, Almendro, Nogal, Parral, Pinilla, Romero, Ravanal, Valflorido
(1490), Viña.
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Aquí nació Francisco Montejo, conquistador de Yucatán.
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baldrés.(De or. inc.; cf. fr. ant. baldret). 1. m. desus. baldés.. baldés. (De baldrés).1. m.
Piel de oveja curtida, suave y endeble, empleada especialmente para guantes. Cerca de esta
calle y paralela al río está hoy la Ribera de Curtidores y las Tenerías.
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Serranos (repoblación)
Plaza del Azogue Viejo (Zoco Viejo). El mercado nuevo está a finales de la Edad Media en
la Plaza de San Martín.
Iglesia: Santi Espíritus, Santo Tomás, San Polo, San Juan del Alcázar, San Lorenzo.
Nueva, Falsa.
PUERTAS ANTIGUAS:
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allén.1. adv. l. p. us. allende (? de la parte de allá).
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CALLE ESCOTO.
CALLE SERRANOS.
“Entiende: de buenos i malos. En todo ai engaño, sino es en la kalle de Serranos. Es
rropería de Salamanka; dicho por ironía“
“Ella está llena de roperos o mercaderes de hatos y axuares de estudiantes con que
están muy ricos. Destos compran los estudiantes, quando entran en Salamanca,
todas quantas cosas han menester y quantas quieren de todas las suertes de las que
suele aver, camas, colchones, fraçadas, lana, sillas, mesas, atriles, esteras, tinajas,
candados, candeleros, caxones, ropas, toda suerte de vestidos, y todas las demás
cosas que quieren, porque de todo tienen en gran abundancia; y quando los
estudiantes se van, estos mismos roperos les compran los axuares por precios
baratos, con la qual grangería ganan mucha hazienda”. De Medina, Grandezas y
cosas notables de España, Alcalá, 1595, fol 22.
VARILLAS.
“Y, por evitar peligro y quitarse de malas lenguas, se fue a servir a los que al
presente vivían en el mesón de la Solana; y allí, padeciendo mil importunidades, se
acabó de criar mi hermanico hasta que supo andar, y a mí hasta ser buen mozuelo,
que iba a los huéspedes por vino y candelas y por lo demás que me mandaban.”
“… y en el toro querían sinificar ser el dicho río caudaloso y de los famosos, a los
quales los antiguos davan forma de toros, pintándolos con cuernos por hazer sus riberas
muchas inflexiones y bueltas, a modo de cuernos…”.
“Y como en esta edad los alientos de la mocedad están tan dispuestos para el
mantenimiento, nunca se ve un hombre harto. Acuérdome, que después de haber comido la
ración del pupilaje de Gálvez, me comí seis pasteles de a ocho en una pastelería
excelentísima, que había en el Desafiadero”:
“No paró aquí la mala ventura de aquella noche, porque estando a la puerta de la
calle, por no poder sufrir el pestilencial olor del leño mular, pasó rondando el Corregidor
(que al presente era D. Enrique de Bolaños, muy gran caballero, cortés, y de muy buen
gusto), y nos dijo: ¿Qué gente? Yo me quité el sombrero, y descubrí el rostro, y haciendo
una gran reverencia, respondí: Estudiantes somos, que nuestra misma casa nos ha echado
en la calle. Mis compañeros se estuvieron con sus sombreros y cebaderas, sin hacer cortesía
a la justicia. Indignóse el Corregidor, y dijo: Llevad presos a esos desvergonzados. Ellos,
como ignorantes, dijeron: Si nos llevaren presos, nos soltarán un pie a la francesa; y
asiéronlos, y lleváronlos por la calle de Santa Ana abajo…”.
Consigue plaza en el colegio de San Pelayo, “estando entonces allí el Sr. D. Juan de
Llanos de Valdés, que cuando esto se escribe es del Consejo Supremo de la Inquisición, en
compañía de sus hermanos, tan grandes estudiantes como caballeros, y el señor Vigil de
Quiñones, que a fuerza de virtud y merecimientos es ahora Obispo de Valladolid…”.
“... que enhechiza la voluntad de volver a ella a todo los que de la apacibilidad de
su vivienda han gustado”.
4. DE SANTOS.
Santa Teresa.
“Llegamos la víspera de Todos Santos, habiendo andado harto del camino la noche
antes con harto frío, y dormido en un lugar, estando yo bien mala… No pongo en estas
fundaciones los grandes trabajos de los caminos con fríos, con soles, con nieves, que venía
vez no cesarnos en todo el día de nevar, otras perder el camino, otras con hartos males y
calenturas; porque gloria a Dios, de ordinario es tener yo poca salud, sino que veía claro
que Nuestro Señor me da esfuerzo….”.
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“Ya con la noche entramos en ella… La casa era muy grande y desbaratada y con
muchos desvanes… Dos mantas que les dan las monjas de Santa Isabel… nos hicieron
harto buenas obras “
5. DE ESTUDIANTES Y PROFESORES.
Arrabal: parece que vive en el A. (8-6-04, Festa en el Arrabal et stettte in mia casa molta
gente a vederla”.
Feria en el “teso” (San Nicolás).
“El Rationero Gil González fui a mi casa di notte a leggere la Historia che ha scritto di
Salamanca” (VIII, 30,122). Es el texto que tomamos como corpus para los nombres de
calles.
“… siempre yo dije y requerí a mi padre que no quería estudiar, y que si lo hize fue
porque no me quería sustentar en otra parte, ni tenerme en su casa, y por no morir de
hambre vine a el estudio…” (p.31).
La calle Traviesa tenía 16 casas: tres calceteros (Pedro Hernández, Pedro de Burgos,
Juan de la Cruz), tres encuadernadores (Miguel Sánchez, Villanueva, Dionisio Ramos),
librero (octaviano Parente), biolero (Roque de Ávila), sastre (Juan de Tamayo), zapatero
(Alvaro Díez , Pedro Falcón), ropero (Blas del Valle), Estudiante (Jerónimo González),
jubetero (Manuel Álvarez)…
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BIBLIOGRAFÍA
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