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ACTIVIDAD:

Hacer un informe sobre el rechazo a la Nueva Constitución en Chile y hacer una comparativa
sobre la posibilidad de convocar a un Referéndum en Perú sobre el cambio o modificación de
la Carta Magna de 1993.

Los chilenos rechazaron el texto de una nueva Constitución por más del 61% de los votos. Una
victoria aplastante frente la alternativa del 'Apruebo' que no había sido contemplada por las
encuestas y analistas. Los resultados de este domingo plantean una serie de retos al país, que
deberá iniciar un nuevo proceso constituyente.

El contundente triunfo del rechazo en el plebiscito de "salida" chileno, que sumó más del 60%
de los votos, cierra el itinerario diseñado en el Congreso en noviembre del 2019 como
respuesta al estallido social de octubre de ese año, pero no implica el fin del proceso
constituyente chileno. A la luz del 80% que votó a favor de cambiar la Constitución de 1980 en
el plebiscito de "entrada" del proceso, en 2020, el presidente Gabriel Boric reiteró la noche del
referéndum su compromiso a trabajar con el Congreso y la sociedad civil en un nuevo
itinerario constituyente para hacer eso posible, el primer mandatario enfrentará ahora el
desafío de coordinar las negociaciones entre el gobierno, el Congreso, y los partidos que
impulsaron el rechazo.

El mandatario deberá impulsar el diálogo tanto al interior de la coalición de izquierda que lo


sustenta -formada por el Frente Amplio, el Partido Comunista y el Socialismo Democrático-,
como con las colectividades que impulsaron el rechazo.

El resultado del proceso electoral, que tuvo niveles récord de participación electoral, no deja
lugar a dudas sobre la mirada crítica que primó en la mayoría del electorado frente a la
propuesta que redactó la Convención Constitucional así mismo el órgano fue integrado
principalmente por independientes, y contempló la paridad entre hombres y mujeres además
de escaños reservados. La decisión de formar una nueva Convención, las reglas para su
conformación y desarrollo es una de las interrogantes que se deberán resolver en las
conversaciones de los próximos días.

La victoria del "rechazo" y la amplitud de la diferencia supone una derrota para el gobierno a
seis meses del inicio de la presidencia, en un momento en el que Boric ha ido perdiendo
popularidad en un clima marcado por la inseguridad y la inflación.

El proceso constituyente en Chile no ha acabado. Lo cual los expertos señalan que es muy
probable que se dé inicio a un nuevo intento por adoptar otra Carta Magna. Sin embargo, este
debería tener varias diferencias. Para Beytía, lo más seguro es que este contemple varias
figuras expertas y que genere más inclusión de los partidos políticos. Dos puntos claves para
encaminar el proceso y que distan de la Convención pasada que tenía una gran presencia de
voces independientes.

Mientras que Sagüés añade que Boric jugará un rol decisivo: “El camino debe proponerlo el
presidente de la República, habiendo llegado a acuerdos con las distintas fuerzas políticas del
país, y en los partidos recaerá una tarea importante para definir la hoja de ruta que permitirá
dar continuidad al proceso constituyente”. Por otro lado, Campos-Herrera nos dice que el
papel de los partidos contempla a los representantes de todas las ideologías. Por ejemplo,
asegura, “algunos actores de la derecha y la centro derecha, que salieron beneficiados de esta
derrota, han coincidido en que deben reunirse para gestar una nueva propuesta que sea aún
más concreta. La derecha se comprometió como bloque político para así presentar una
propuesta que representará no solo a ese sector político sino a una vasta parte de la población
chilena”.

La expectativa también se abría sobre si las propuestas contempladas en el proyecto


constitucional rechazado quedarían totalmente marginadas o si por el contrario, estas tendrían
cabida en una nueva propuesta.

Propuestas en la nueva Constitución rechazada por los chilenos:

 De "República Democrática" a "Democracia Paritaria", en la que las mujeres ocuparían


al menos el 50% de todos los órganos del Estado.
 De la omisión indígena a definir a Chile como un "Estado plurinacional e intercultural",
reconociendo 11 pueblos y naciones.
 De "La ley protege la vida del que está por nacer" a "Asegurar condiciones para
embarazo, interrupción voluntaria del embarazo, parto y maternidad voluntarios y
protegidos".
 De prescindir del Estado siempre que el privado pueda a un "Estado social y
democrático de derecho" que debe proveer bienes y servicios para asegurar los
derechos de las personas.
 Establecía el agua como bien "inapropiable".
 Eliminaba el Senado y creaba dos Cámaras de poder "asimétrico": un Congreso de
Diputados y Diputadas para la formación de leyes (con al menos 155 integrantes), y
una Cámara de las Regiones acotada a las leyes "de acuerdo regional".

Por el contrario, en la Constitución de 1993 ha sido objeto de 20 reformas constitucionales, en


temas tan disímiles en trascendencia como el capítulo completo de la descentralización y el
cambio de denominación de la Superintendencia de Banca, Seguros y Administradoras
Privadas de Fondos de Pensiones (AFPS). Algunas de ellas han seguido la vía de la doble
votación calificada del Congreso de la República y otras la del referéndum.

Con la caída del régimen de Alberto Fujimori a finales de 2000, varios cambios estructurales
fueron puestos en marcha por el gobierno de transición encabezado por Valentín Paniagua. El
objetivo era desmontar las redes de corrupción de las instituciones claves del Estado para así
poder garantizar la transparencia de nuevas elecciones generales. Entre los temas que se
revisaron estuvo el de la Constitución aprobada después del autogolpe de Fujimori. Tanto el
Poder Ejecutivo como el Parlamento impulsaron grupos de trabajo para proponer una reforma
total de la Constitución y ambos llegaron a la misma fórmula: volver a la Carta Magna de 1979
y, con esta vigente, impulsar una nueva. A pesar de ello, entre debates y aplazamientos, el
asunto quedó paralizado en abril de 2003. Para diversos grupos políticos, la eliminación de la
firma del exmandatario en la Carta Magna lograda mediante una norma constituyó un triunfo
democrático. Y esto provocó que los sectores de izquierda, que además de cuestionar la
legitimidad de nacimiento de la Constitución de 1993 tenían discrepancias de fondo en materia
económica y laboral, se quedaran solos en la exigencia de un nuevo pacto social.

En conclusión, es conveniente tener presente que la Constitución de 1993 fue elaborada por
un Congreso Constituyente Democrático elegido por el pueblo luego del auto golpe de 1992, y
la Constitución de 1979 por una Asamblea Constituyente elegida en el marco de un gobierno
militar de facto al mando del país desde el golpe militar de 1968. En la actualidad, el rechazo a
la Constitución Política aprobada en 1993 y la demanda de una nueva son banderas de
sectores radicales de izquierda. Sin embargo, revisando la historia, vemos que años atrás fue
un pedido de todos los sectores políticos.

INTEGRANTES:

- Aldana Madrid Dayhana Nicole

-Carbajal Armas Milagros Harumy

- Fernández Fernández Fernando Jesús

- Cumpen Palacios María del Carmen

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