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INSTITUTO MEXIQUENSE CONTRA LAS ADICCIONES

AUTORES

Guía de padres
para el manejo de
la conducta del
adolescente
Silvia Morales Chainé
Alicia Chaparro Caso López
María José Martínez Ruíz

ILUSTRACIÓN
Trini Chaparro
El aumento en el consumo de tabaco,
alcohol y otras drogas es un problema social
que implica un alto costo humano y
económico. El consumo de drogas en
nuestros adolescentes puede iniciar a
edades tempranas y generalmente está
acompañado por conductas de agresión o
rebeldía durante la infancia. Además, hay
cosas que provocan que el consumo de
drogas se vuelva una costumbre.

Cuando los jóvenes consumen drogas se pueden sentir bien en un inicio, pero después
pierden muchas cosas y afectan su vida de distintas formas. Dañan su salud, abandonan la
escuela y pueden llegar a cometer delitos. Aprender a comunicarse y a solucionar problemas
ayuda a que los niños y jóvenes no se comporten de forma agresiva, eviten consumir drogas
y sepan controlar sus emociones.

Por ello, el propósito de esta guía es mostrarle herramientas útiles para comprender
por qué los adolescentes se comportan como lo hacen. Al mismo tiempo usted aprenderá a
tomar decisiones respecto a cualquier situación que pueda poner en riesgo el buen
desarrollo de sus hijos.
¿QUÉ VA A ENCONTRAR EN ESTA GUÍA?

La guía está formada por siete partes que le muestran información para entender la
conducta de sus hijos adolescentes y la forma cómo usted puede ayudar a evitar que
presenten problemas de conducta. En cada sección usted encontrará ejemplos de
situaciones que comúnmente viven los padres de hijos adolescentes, así como reflexiones
que le ayudarán a analizar las situaciones que vive con sus hijos. Usted también encontrará
actividades que les serán de utilidad para comprender de una mejor manera la información
que se le brinda.

Parte 1. Desarrollo de problemas de conducta

Aprenderá cómo se desarrollan algunos problemas de conducta como la agresión y el


consumo de drogas.

Parte 2. Situaciones que pueden causar problemas de conducta en los adolescentes

Identificará las situaciones que pueden provocar o empeorar los problemas de conducta en
los adolescentes. También entenderá, cómo manejar estas situaciones.

Parte 3. Cómo dialogar

Aprenderá a utilizar el diálogo como una forma de manejar los problemas con sus hijos.
Parte 4. Formas de comunicación

Identificará qué cosas debe hacer para comunicarse con sus hijos y entenderse mejor con
ellos.

Parte 5. Solución de problemas para evitar el consumo

Aprenderá cómo pueden usted y su hijo manejar las situaciones de riesgo en las que existe
la posibilidad de iniciar el consumo.

Parte 6. Control de enojo

Como padres en muchas ocasiones los problemas con nuestros hijos nos provocan enojo y
una persona enojada no es capaz de encontrar soluciones. Por ello en esta sección usted
aprenderá diferentes formas de controlar el enojo.

Parte 7. Cómo detectar si nuestro hijo consume drogas y cómo manejarlo

Se le brindan algunas conductas clave que le permitirán identificar si su hijo consume


drogas. Al mismo tiempo se le mostrará cómo manejar la situación si usted confirma que su
hijo consume drogas.
Parte 1.
Desarrollo
de problemas
de conducta
Antes de que los adolescentes decidan consumir drogas, pueden llegar a portarse de
forma agresiva o rebelde durante la infancia. Cuando son niños, nuestros hijos pueden
aprender a relacionarse con nosotros a través de los berrinches, los insultos o los golpes.

Cuando estos comportamientos no se manejan adecuadamente pueden empeorar con la


edad hasta llegar a convertirse en conductas más difíciles de manejar como el robo, las
peleas o el consumo de tabaco, alcohol y otras drogas. Cuando nuestros hijos son muy
pequeños es común que hagan berrinches o se enojen. Estas conductas les sirven para
comunicarse y son fáciles de observar. Si cuando eran niños ellos aprendieron que haciendo
berrinche o enojándose conseguían lo que querían, lo más probable es que continúen
haciéndolo conforme van creciendo.

REFLEXIÓN
Recuerde cuando su hijo era pequeño y
se enojaba, pegaba o lloraba y piense…

¿Qué hacía usted?, ¿Cómo corregía


estas conductas? ¿Hablaba con él, lo
castigaba o le pegaba?
El problema es que en la adolescencia ellos ya
no sólo hacen berrinche o se enojan sino que caen en
conductas más difíciles de manejar como por ejemplo,
hablan con insultos a los adultos, se portan agresivos
con sus hermanos o compañeros de la escuela, rompen
las reglas de la casa, se salen de clases y pueden
iniciar el consumo de drogas.

Cuando los adolescentes llegan a consumir drogas


o a agredir a otros, se sienten bien en un inicio y esto
hace que sigan haciéndolo ¿Sabía que consumir drogas
o comportarse agresivamente hace que el cerebro
mande señales a nuestro cuerpo que nos hace sentir
bien?
REFLEXIÓN
Piense…
Además de la sensación placentera que produce la ¿Por qué se comportan de esa
agresión y el consumo de drogas, estas conductas manera nuestros hijos?, ¿Qué
hacen que nuestros hijos descuiden sus quehaceres ganan con este comportamiento?,
¿Qué tratan de decirnos?
como hacer la tarea o cumplir con las labores del
hogar y prefieran estar con los amigos, escuchar
música o conectarse al internet.
Cuando una persona usa
cualquier tipo de droga, hace
que su cuerpo se acostumbre;
lo que, con el paso del tiempo,
provoca que el día que no la
consume, se siente mal y por
tanto sigue drogándose para
evitar esas sensaciones de
malestar. Por ejemplo, un
adolescente puede volver a
fumar para aliviar la sensación
desagradable que siente por no
haber fumado.
Aunque muchos adolescentes saben que el consumo
de tabaco, alcohol u otras drogas puede provocarles
problemas con su familia, problemas en la escuela e
incluso daños a su salud, continúan consumiendo porque
estos problemas ocurren a largo plazo y lo inmediato es
que, una vez que su cuerpo se acostumbra a la sustancia y
si no la consumen se sienten mal, consumirla alivia el
malestar.
Esto, es más común de lo
esperado y se conoce como falta de
autocontrol. Cuando suena el
despertador, preferimos dormir cinco
minutos más aunque después se nos
haga tarde. En ocasiones, cuando
estamos contentos con los amigos,
elegimos fumar un cigarro, aún cuando
ello, a largo plazo, pueda enfermar
nuestro cuerpo. Otra satisfacción que
los adolescentes tienen cuando se
portan o consumen drogas es
convertirse en los líderes de sus ACTIVIDAD
grupos de amigos. Los adolescentes Piense en dos situaciones donde usted
comúnmente tienden a admirar a prefiere hacer algo que lo hace sentir bien
quienes se atreven a hacer cosas que de momento aunque a la larga pueda
no están permitidas. Portarse rebelde perjudicarlo. Anote sus respuestas.
o drogarse puede generar admiración
1._____________________________________
en su grupo de compañeros. Por eso
muchos jóvenes se portan de manera 2._____________________________________
agresiva o consumen drogas.
Desafortunadamente los jóvenes
parecen no dar importancia a los
problemas que a la larga pueden llegar
a tener si continúan siendo agresivos o
consumiendo drogas. Siendo adultos,
pueden tener problemas en sus
relaciones con otras personas, perder
su trabajo, sufrir depresión, pero
sobre todo problemas de salud tanto
física como mental que en ocasiones
puede llevarlos hasta la muerte.
Entonces, ¿por qué si es tan perjudicial
la conducta agresiva y de consumo de
drogas, los adolescentes prefieren
seguir siendo así?

La clave está en las satisfacciones que obtienen por estos comportamientos casi luego
de haberlos hecho. Si un adolescente obtiene cosas buenas luego de haber hecho una
conducta, y las malas tardan más en aparecer, lo más probable es que prefiera seguir
portándose así ya que se siente bien en ese momento.
ACTIVIDAD
1. Identifique alguna conducta que su hijo haya hecho durante la última semana y que
le preocupe (por ejemplo, se queja o se niega a obedecer).
2. Identifique las cosas agradables y desagradables que su hijo consiguió con esa
conducta.
Conducta Cosas agradables Cosas desagradables
Parte 2.
Situaciones
que pueden
causar
problemas de
conducta en
los
adolescentes
Existen varias situaciones que hacen que la agresión o el consumo de drogas se
conviertan en hábitos. Algunas tienen que ver con la familia y con la forma en cómo
reaccionamos como padres. Otras con la forma de ser de nuestros hijos. Y otras con el
lugar en el que vivimos. Imagine ¿qué pasa si se combinan las tres?

¿Qué papel tiene la familia en la agresión y el consumo de drogas?

En muchas ocasiones, la relación entre los miembros de la familia es negativa. Es decir,


los adultos y los adolescentes hacen cosas para controlar todo lo que pasa dentro de casa.

Los adultos llegan a utilizar los golpes o las amenazas para lograr que los hijos los
obedezcan y, a su vez, los hijos se portan agresivos o consumen drogas con tal de no hacer
lo que los padres les piden o exigen.

REFLEXIÓN
Piense…
¿Es sana una relación entre padres e hijos que esté basada en la agresión y la amenaza?
¿Refleja la falta de habilidades sociales y de trabajo en equipo? ¿Por qué?
Es común que los jóvenes que se
comportan de forma agresiva o que
consumen alguna droga vivan en un
ambiente de constante agresión familiar
o con poca comunicación. Sentir que la
familia vive pelando o discutiendo
constantemente puede provocar el
consumo de drogas o comportamiento
agresivo en los adolescentes. Puede
producir sentimientos de soledad y un
deseo de estar fuera de casa. Los
adolescentes pueden preferir estar con
amigos, quienes los hacen sentir bien
aunque estos consuman drogas o
cometan delitos.

Otro aspecto que puede provocar que un REFLEXIÓN


adolescente se comporte agresivamente o Piense…
¿Por qué los adolescentes podrían
comience a usar drogas depende de qué tan buena
preferir estar con grupos de amigos
o mala considera su vida familiar. No es necesario que consumen drogas o cometen
que los adolescentes lo expresen directamente. delitos antes que con su familia?
¿Qué características de los adolescentes pueden provocar agresión y/o consumo de
drogas?

Además de los problemas dentro de la familia, también el carácter de nuestros hijos


puede hacer que se porten agresivos o inicien el consumo de drogas. Tener un carácter
difícil y no saber controlar sus emociones son situaciones que pueden causar agresión o
consumo de drogas.

A muchos adolescentes les puede costar trabajo


reconocer y expresar su enojo o tristeza y tienen
problemas para controlar este tipo de emociones
cuando viven situaciones difíciles como por ejemplo
reprobar en la escuela, terminar con la novia, etc.

REFLEXIÓN
Imagine un adolescente que está pasando por una
situación difícil que lo hace sentir triste y no es
capaz de expresar su tristeza. Ahora imagine que
los papás utilizan con él una disciplina basada en los
golpes. ¿Cómo cree que se sentirá este
adolescente?, ¿Sentirá apoyo o rechazo de sus
padres?
Otro aspecto que hace
que los adolescentes se
comporten de manera
agresiva o consuman drogas
es la falta de habilidades
para poner atención y
resolver problemas. Cuando
un joven no es capaz de
resolver los problemas que
se le presentan, se siente
mal, lo que ocasiona que se
porte agresivo o consuma
alguna droga, pues de esa
manera, como vimos
anteriormente, el muchacho
se siente mejor pues logra
REFLEXIÓN
Analice… escapar de algo que lo hace
¿A su hijo le cuesta trabajo concentrarse y poner sentir incomodo.
atención?, ¿Cuántos problemas resuelve y cuántos se le
complican?
¿Qué atención damos los padres a la agresión y consumo de drogas de nuestros hijos?

Otra situación que puede


hacer que los adolescentes se
comporten agresivamente o
consuman drogas es la
necesidad de sentir que sus
papás les hacen caso. Los
padres que están poco tiempo
al pendiente de sus hijos, que
sólo ponen atención a ellos
cuando se portan mal, que son
agresivos o consumen drogas,
pueden provocar, sin quererlo,
que sus hijos sigan portándose
así pues sólo así consiguen
llamar la atención de sus
padres.

En ocasiones también cuando llamamos la atención a nuestros hijos podemos caer en


comparaciones que, lejos de hacer que ellos dejen de portarse mal, los alienta a que su mal
comportamiento sea digno de admirarse.
Una madre que cuando observa a su
hijo bebiendo le dice que es igual a su
padre puede estar creando en el
adolescente un sentimiento de orgullo
por parecerse a su papá y lejos de
dejar de fumar continuará haciéndolo
pues se da cuenta que eso además de
que lo hace notar ante su mamá, lo
acerca a parecerse a una persona a
quien admira. De la misma manera que
un comentario negativo puede hacer
que el muchacho se sienta orgulloso y
continúe portándose mal, un
comentario negativo puede hacerlo
sentir incomprendido, solo y
rechazado, lo que puede provocar que
se porte agresivo o consuma drogas
para defenderse de estos
sentimientos y sentirse mejor.
Un padre que
reacciona
agresivamente cuando
su hija saca bajas
calificaciones no logará
que ésta mejore su
rendimiento escolar.
Lejos de eso puede
provocar que ella se
sienta atacada e
incomprendida y
busque en el alcohol
apoyo para remediar
estas sensaciones
desagradables que le
produce el sentirse
atacada por su padre.
ACTIVIDAD
Escriba tres comentarios que haya dicho a su hijo después de que él se ha comportado de
manera negativa.

1.__________________________________________________________________

2.__________________________________________________________________

3._________________________________________________________________

Una vez escritos analice…


¿Estos comentarios han corregido el comportamiento de su hijo?, ¿Han resultado
contraproducentes o le han funcionado?, ¿Por qué?

El lugar donde vive el adolescente también puede influir en su forma de comportarse.


Es probable que en la colonia donde vivimos se reúnan grupos de jóvenes que cometen
delitos o faltas graves. Si no mantenemos una comunicación con nuestros hijos es probable
que ellos se junten con este grupo de jóvenes. Por ello, es importante mantener una
comunicación que resalte las cosas positivas de nuestros hijos, así como las conductas y
actitudes que nos gustan de ellos, haciéndolos sentir bien para que mantengan
comportamientos apropiados y prefieran estar en casa que con amigos que cometen delitos
o faltas graves.
Es muy importante que evitemos criticar a los amigos de nuestros hijos,
principalmente cuando consideramos que son mala influencia para ellos. Cuando criticamos a
sus amigos, nuestros hijos se sienten también criticados. Una opción que podemos poner en
práctica es que en lugar de señalar lo negativo de sus amigos, señalemos lo positivo que
tienen nuestros hijos. Podemos ayudarlos a que se den cuenta de que ellos están en mejor
posición que sus amigos, ya que están sanos y que en lugar de dejarse llevar por sus amigos,
eviten ser agresivos o drogarse.

ACTIVIDAD
En este cuadro encontrará una serie de sugerencias que pueden ayudarlo a crear un
ambiente familiar positivo que evite la agresión y el consumo de drogas en sus hijos.
Analice cada sugerencia e identifique ¿Necesita realizar este cambio en su familia?,
¿Estaría dispuesto a cambiar?, ¿Cómo iniciaría este cambio? Anote sus respuestas.

Cosas que podría ¿Está dispuesto a ¿Cómo iniciaría este cambio?


cambiar en su familia cambiar?
Reconocer y valorar la
buena conducta de mi
hijo.
Cosas que podría ¿Está dispuesto a ¿Cómo iniciaría este cambio?
cambiar en su familia cambiar?
Corregir la conducta de
mi hijo con el ejemplo y
con firmeza.
Estar al tanto de las
cosas que hace mi hijo.
Ser más cariñosos en mi
familia (sin limitarnos en
las muestras de cariño)
Controlar las emociones.

Solucionar problemas.

Estar al tanto del


ambiente en el que se
relaciona mi hijo.
¿Qué otro cambio puede
realizar en su familia?
Parte 3.
Cómo
dialogar
Durante la adolescencia
aumenta el número de problemas
en la familia. Aprender a
resolverlos adecuadamente, es
importante. Uno de los problemas
más comunes es la búsqueda del
adolescente por su independencia.
Cuando los padres tenemos
dificultades para dialogar con
nuestros adolescentes y se nos
dificulta mantenernos al tanto de
lo que hacen, es probable que
tengamos problemas
continuamente.
REFLEXIÓN
Para resolver los problemas
con nuestros hijos necesitamos Analice…

dialogar y llegar a acuerdos que ¿Qué pasa cuando tiene un problema con su hijo? ¿Coopera
beneficien a todos. con él o compite con él?
Con el deseo de cooperación se llega
a acuerdos y a una convivencia familiar
positiva. Sin embargo, puede pasar que los
padres tengan intereses muy distintos a
los del adolescente. Cuando esto sucede,
es probable que los adolescentes se
porten agresivos o decidan consumir
drogas.

REFLEXIÓN
Piense…

Cuando ha tenido algún problema


con su hijo… ¿qué hace?, ¿conversa
con él?, ¿discute y pelea, llegando
hasta los golpes?, ¿ha necesitado
del apoyo de un profesional?, ¿ha
sido necesario que una autoridad
se meta entre ustedes para
resolver un problema?
Cuando tenga que hablar con su hijo

En ocasiones es necesario
contar con el apoyo de un
profesional para dialogar y llegar a
acuerdos. Aunque al final, los padres
e hijos pueden aprender a dialogar y
resolver los problemas por si
mismos.

Para poder platicar con su hijo,


debe tomar en cuenta que no se
trata de una competencia en la que
debe imponer su interés. Si una
plática se vuelve una discusión
probablemente nadie ganará y
pueden incluso llegar hasta los
golpes. Es importante recordar que
cuando platica con su hijo su
objetivo es encontrar una solución.
Cuando es necesaria la intervención de una autoridad, como un juez, se puede llegar a
una solución, pero no se asegura que se cumpla. La mejor forma de asegurar que una
solución se cumpla es que, tanto padres como hijos, dialoguen y lleguen a un acuerdo.

Un acuerdo se logra cuando las dos partes platican sus ideas. Cuando llegamos a
acuerdos, la relación entre padres e hijos se vuelve positiva. Cuando se llega a un acuerdo a
través de la conversación es muy probable que todos lo respeten y todos ganen.

Sin embargo, hay que tener cuidado porque hay ocasiones en que el acuerdo sólo
favorece a una de las partes. O incluso se acepta por compromiso obteniendo sólo ganancias
a medias. Para llegar a acuerdos exitosos, tanto padres como hijos deben participar en la
solución. Es importante que muestren interés en llegar a una solución y que los dos
platiquen las soluciones que creen que pueden funcionar.

Algunas veces, solicitar el apoyo de un profesional puede evitar que lleguemos a


discutir o a golpear a nuestros hijos. Con el profesional se puede aprender a escuchar,
entender bien lo que el otro dice y a tener confianza en nuestras capacidades y en las de
nuestros hijos. Es importante que los padres e hijos conversen sobre las drogas y sus
efectos. Dependiendo de la forma en cómo platiquen es como se puede llegar a acuerdos
exitosos. Cuando se toque este tema es importante que se tenga en cuenta que los
adolescentes probablemente no quieran hablar sobre eso. Es necesario mostrar
comprensión y evitar presionar. Los padres deben recordar que no se trata de ganar una
discusión, sino de llegar a acuerdos, hacerlo de una manera tranquila ayudará a que el
adolescente se abra a la conversación.

Si nosotros como padres no estamos acostumbrados a dialogar con nuestros hijos, no


se recomienda que el primer tema a tratar sea su gusto por las drogas, ya que quizás haya
resistencia por parte de ellos. Por eso es importante empezar a dialogar y llegar a acuerdos
sobre temas que son más fáciles de platicar como puede ser los quehaceres de la casa, el
horario para llegar a casa, etc.
REFLEXIÓN
¿Sabe usted dialogar con su hijo?.... Analice y respóndase a si mismo las siguientes
preguntas….

Cuando platica con su hijo, ¿es generoso? Es decir, ¿hace a un lado sus intereses para que él
salga ganando?

¿Piensa que usted debe salirse con la suya? ¿Logra que su hijo deje a un lado sus intereses
para que solo usted salga ganando?

¿Se muestra usted cooperativo? ¿Lo que importa son los intereses de ambos? ¿Los dos
deben ganar?

¿No importan los intereses, sólo importa quien gane la partida?

¿Se muestra cooperativo? ¿Le importan los intereses de ambos? ¿Piensa que los dos deben
ganar?

La forma en cómo conversamos depende de los intereses que cada uno tenga en el
tema. Para que ambos ganen ninguno debe imponer su punto de vista, pero tampoco debe
aceptar una solución que no le convenza. Es importante que padres e hijos expresen lo que
piensan y escuchen lo que el otro piensa. Busquen entre ambos soluciones que convenzan a
los dos. Ninguno debe ceder sólo para evitar una discusión o para no hacer enojar al otro.
Ambos deben quedar convencidos de la solución que entre los dos propongan.
Si padres e hijos no están interesados en llegar a una solución, no habrá plática ni
acuerdos. Si los padres tienen menos interés y los hijos más, es muy probable que hagan lo
que los hijos quieren con tal de evitar problemas. Cuando los padres tienen más interés que
los hijos, es muy probable que les impongan sus soluciones.

Pero cuando a los dos les interesa llegar a un acuerdo, la opción es dialogar
solucionando problemas. De esta forma ambos saldrán ganando con las soluciones que
tomen.

REFLEXIÓN
Piense…

¿Cómo se puede lograr que padres e hijos se interesen en un tema?

¿Será más fácil dialogar si padres e hijos sienten lazos de unión entre ellos?

¿Es importante estar tranquilos y relajados para poder llegar a soluciones?

Definitivamente para llegar a tener un verdadero diálogo con su hijo es importante que
ambos se controlen si están molestos. En la última parte de esta guía usted encontrará
sugerencias que le ayudarán a controlar su enojo. Consúltela si nota que se siente tan
molesto que no puede platicar con su hijo y cae en una discusión en la que sólo quiere ganar.
Piense que si su hijo obtiene beneficios por dialogar, usted también puede salir ganando.
Parte 4.
Formas de
comunicación
Para facilitar la conversación y llegar a la solución de problemas se requiere conocer
las formas como nos comunicamos. No solamente nos comunicamos con lo que decimos, a
veces decimos muchas cosas sin necesidad de hablar. Nuestra mirada, la posición de
nuestro cuerpo, el nivel de la voz dicen más que mil palabras. Por ello, para que los padres y
los adolescentes se comuniquen exitosamente se requiere:

Mirar a los ojos

Si miramos a los ojos


es más fácil transmitir
nuestras emociones.
Además cuando miramos a
los ojos nuestros hijos
sienten que es importante
lo que les estamos diciendo
y lo que ellos nos están
diciendo. Procure siempre
mirar a su hijo a los ojos
cuando platique con él.
La posición de la cara y el cuerpo.

Cuando platique con su hijo, colóquese frente a él completamente. Es más fácil mirarlo
a los ojos si nos colocamos frente a él y le podemos mostrar que cuenta con toda nuestra
atención.
Averiguar más sobre lo que le están platicando

Cuando su hijo dice algo


que a usted no le gusta,
¿cómo reacciona usted? ¿Lo
escucha y trata de saber
más? Siempre que su hijo le
dice algo está
comunicándose con usted.
De las reacciones que usted
tenga dependerá que la
comunicación continúe o se
rompa. Escuche atentamente
siempre que su hijo le
platique algo, es importante
que él se de cuenta de que a
usted le importa lo que él
tiene que decirle. Muestre
atención haciéndole
preguntas sobre lo que le
platique.
Pedir más información cuando no haya quedado claro el mensaje recibido

Cuando su hijo dice algo que


a usted le preocupa, ¿Cómo
reacciona usted? ¿Se tranquiliza
y trata de cambiar su forma de
pensar haciéndole preguntas? Si
su hijo le comenta algo que lo
hace sentir inquieto, no trate de
hacerlo cambiar de opinión
criticando lo que él le dice. Esto
sólo provocará que el rechace sus
comentarios y que evite volver a
comunicarse con usted. En vez de
atacarlo intente hacerle ver que
su idea es equivocada, para ello
puede hacerle preguntas que lo
hagan reflexionar y cambiar de
opinión.
Repetir el mensaje con otras palabras

El que está escuchando puede repetir la idea con otras palabras para comprobar si es
correcto lo que entendió. Cuando repetimos lo que nuestro hijo nos está diciendo, él puede
darse cuenta de cómo estamos entendiendo lo que él nos dice. Y nosotros nos aseguramos
que lo que entendemos es lo correcto.
Resumir y expresar en forma clara y breve lo que se quiere decir

Cuando hable con su hijo debe dar una sola idea a la


vez, sin tocar varios temas en un solo mensaje. Enviar
REFLEXIÓN
varios mensajes puede confundir a su hijo y hacer que no Recuerde…
capte ninguno de ellos.
Otros aspectos que debe
tomar en cuenta para tener
una buena comunicación con
su hijo, son:

Permitir que su hijo termine


de hablar. No interrumpirlo.

Evitar hablar sobre cosas


desagradables del pasado.

Eliminar de la conversación
groserías o insultos.

Evitar usar calificativos


para referirse a su hijo.

Mantener un tono de voz


moderado.
ACTIVIDAD
1. Elija una situación que usted considere importante hablar con su hijo.
2. Platique con su hijo sobre la situación poniendo en práctica las estrategias aprendidas.
3. Escriba un ejemplo de cómo se comunicaron para cada una de las estrategias.
ESTRATEGIA Ejemplo del padre Ejemplo del hijo
Mirar a los ojos

Posición de la cara y el cuerpo

Averiguar más sobre lo que le están platicando

Pedir más información cuando no haya quedado claro el


mensaje recibido
Repetir el mensaje con otras palabras

Resumir y expresar en forma clara y breve lo que se


quiere decir
Permitirle hablar

Evitar hablar sobre cosas desagradables del pasado

Evitar groserías, insultos y calificativos

Mantener un tono de voz moderado


Parte 5.
Solución
de
problemas
para
evitar el
consumo
de drogas
Cuando los padres y los adolescentes aprendemos a resolver problemas, nos sentimos
mejor, reducimos la tensión, podemos evitar que nuestros hijos prueben drogas o, si ya lo
han hecho evitar que lo vuelvan a hacer. La solución de problemas le permite al adolescente
expresar sus emociones, encontrar su independencia y tener una vida más saludable. Un
problema es cuando sentimos que no sabemos cómo cambiar algo que nos está pasando y que
nos preocupa.

Esa sensación de no saber cómo


cambiar las cosas puede desaparecer
cuando el padre o el adolescente o
incluso ambos, empiezan a hacer algo
para cambiar la situación que les
preocupa. Por lo tanto, una solución
consiste en tomar una decisión y
ponerla en práctica. Saber solucionar
problemas y comunicarse
adecuadamente son estrategias que
ayudan a que nuestros hijos no
consuman drogas y no se comporten
agresivos.
¿Qué hacer para solucionar un problema?

1. Reconocer que existe un


problema

2. Definir el problema

3. Dar alternativas para


solucionar el problema

4. Tomar decisiones

5. Revisar la solución

Lo primero que se necesita es prestar atención a la situación que está provocando un


problema. Es normal tener problemas, pero también podemos aprender a enfrentarlos y
resolverlos.
Una vez que le ponemos atención a la situación que nos preocupa, los adolescentes y los
padres deben pensar en cómo esa situación puede dañar su bienestar y qué pueden hacer
para cambiarla.

Busquen juntos toda la


información posible y
compártanla unos con otros de
forma clara y sin rodeos.
Escuche la información que su
hijo le proporciona y hable
sobre la que usted haya leído o
investigado. La información la
pueden consultar en periódicos,
revistas, internet, programas de
radio y televisión. O mejor aún
pueden acudir a alguno de los
centros de atención para las
adicciones del estado.
A partir de la información que hayan encontrado pueden identificar la situación difícil
y decidir juntos qué hacer.
Una vez identificada la situación problema, deberán analizar juntos qué es lo que
quieren lograr o alcanzar al solucionar el problema.
Para lograr el objetivo de cuidar nuestra salud y evitar consumir drogas, padres e
hijos necesitamos darnos cuenta de las situaciones que pueden orillarnos a consumir drogas.
Cuando nosotros sabemos en qué situaciones es más probable que caigamos en las drogas,
podemos planear cómo manejar esas situaciones.
El siguiente paso es dar alternativas para solucionar el problema, que consiste en
pensar en tantas soluciones como sea posible, para encontrar la mejor. Para proponer
alternativas existen tres reglas generales:

1. Piensen en el mayor número de soluciones posibles. Entre más soluciones se nos


ocurran, más posibilidades tenemos de elegir una solución que sea buena para todos.
2. No critiquen las opciones de solución. Algo que debemos tener siempre presente es
evitar juzgar o criticar las opciones que cada quien dé. Aunque parezcan absurdas
todas son válidas y todas merecen ser escuchadas y evaluadas. Cuando tomamos una
decisión, padres e hijos debemos evaluar y comparar las propuestas para solucionar el
problema, seleccionar la mejor y realizarla. Para ello es necesario identificar las
ventajas y desventajas de cada opción.
3. La propuesta que se escoja será la que tenga más ventajas y menos desventajas.
Debemos recordar que es importante que decidamos juntos cual es la opción con la que
todos ganamos y estamos de acuerdo. Cuando todos decidimos y todos estamos de
acuerdo, todos nos comprometemos. Cuando alguien no está de acuerdo y siente que le
están imponiendo algo terminará rechazándolo y no se comprometerá.
Finalmente, debemos probar la propuesta que elegimos y revisar si funcionó. Cada uno
debemos hacer lo que nos corresponda y después reunirnos para platicar cómo nos fue con
la propuesta elegida ¿Funcionó?, si no funcionó ¿qué otras opciones de solución tenemos?

REFLEXIÓN
Analice…

Si los padres aprenden a resolver problemas ¿aprenderán a hacerlo más rápido sus hijos?

Recuerde…

Los padres son el mejor modelo para aprender a resolver problemas.

ACTIVIDAD
1. Piense en una situación que su hijo y usted tengan que solucionar.

2. Junto con su hijo intente encontrar una solución a la situación que haya pensado
siguiendo los pasos que acabamos de aprender.

3. Anote en cada cuadro lo que su hijo y usted hayan dicho para lograr la solución de
acuerdo con cada paso.
PASOS PADRE HIJO

Prestar atención

Pensar como la situación daña su bienestar y


que pueden hacer al respecto
Identificar la situación difícil

Establecer objetivos y metas

Identificar qué provoca la situación difícil

Dar alternativas para solucionar el problema

Identificar ventajas y desventajas de cada


propuesta
Probar la propuesta elegida

Revisar si funcionó la propuesta elegida.

Realice esta actividad con dos situaciones más. Revise lo que usted y su hijo escribieron.
Fíjese como cada uno aprendió a solucionar problemas aplicando cada paso aprendido.
Parte 6.
Control
del enojo
Cuando los padres y los adolescentes viven una situación que consideran difícil, es
común que reaccionen de diversas maneras, y experimenten estrés. El estrés provoca
reacciones físicas, emocionales, motoras, del pensamiento y de conducta, que se deben
saber manejar. Para poder manejar estas reacciones, primero debemos aprender a
identificarlas.

Reacciones físicas

Cuando tiene un problema ¿ha notado


que su cuerpo suda, sus músculos se tensan,
respira más rápido, su corazón late más
fuerte, su estomago se entume? Estas
reacciones son naturales y preparan a
nuestro cuerpo para reaccionar ante
situaciones de amenaza o peligro. Pero si no
las manejamos adecuadamente pueden
provocar enfermedades como gastritis,
úlceras, parálisis, presión elevada, hasta
cáncer y diabetes.
Reacciones emocionales

Cuando se encuentra en una situación


difícil ¿qué siente? ¿enojo?, ¿tristeza?,
¿desesperación?, ¿preocupación constante?,
¿ansiedad?, ¿depresión?. Todas estas son
reacciones emocionales que a nadie le gusta
sentir pues son incomodas y en ocasiones
dolorosas, pero que puede aprender a
manejar.

Reacciones motoras

¿Le tiembla alguno de los músculos del


cuerpo?, ¿le brinca el ojo?, ¿alguna de sus
piernas se acalambra? Todas estas son
reacciones de nuestro cuerpo cuando
estamos en una situación que nos estresa.
Reacciones del pensamiento

¿Se le olvidan las cosas o está


tan preocupado que no se le ocurre
como resolver los problemas? Cuando
estamos muy tensos se confunden las
ideas. No logramos aclarar nuestro
pensamiento y podemos olvidar las
cosas.

Reacciones en nuestro comportamiento

Cuando se encuentra en dificultades: ¿golpea o


insulta a otros?, ¿tiene ganas de llorar?, ¿prefiere
estar solo?, ¿falta a su trabajo o no cumple con sus
obligaciones?, ¿tiene ganas de fumar, tomar o
incluso consumir alguna otra droga? Todas estas y
muchas otras son reacciones que podemos tener en
nuestro comportamiento y que pueden afectarnos
en nuestro trabajo, en la casa o en cualquier lugar
donde nos encontremos.
¿QUÉ PODEMOS HACER PARA MANEJAR ESTAS REACCIONES?

Existen varias técnicas que podemos usar para controlar las diferentes reacciones
provocadas por el estrés. A continuación revisaremos algunas de ellas. Póngalas en práctica
siempre que sienta alguna de las reacciones que acabos de revisar.

Técnica 1. Controlar y manejar nuestro pensamiento

Esta técnica consiste en darnos cuenta de los


pensamientos pesimistas que vienen a nuestra mente
cuando tenemos algún problema, detenerlos y
cambiarlos por pensamientos realistas y positivos.

Podemos tener un pensamiento como el


anterior. Cuando venga este pensamiento a la mente
debemos detenerlo, dejar de pensar en eso y
decirnos a nosotros mismos…

1. “¿Qué estoy pensando?: que soy un fracaso


como padre. No debo dejar que este
pensamiento siga”

2. Cambiarlo por pensamientos realistas no


pesimistas: “Estoy teniendo problemas como
padre pero los puedo resolver”.
ACTIVIDAD
Identifique tres pensamientos pesimistas que haya tenido últimamente y piense cómo
cambiarlos por pensamientos realistas. Escriba sus respuestas.

PENSAMIENTO PESIMISTA PENSAMIENTO REALISTA


Técnica 2. Actividades recreativas

¿Trata de hacer actividades que le gustan? ¿Hace cuánto que no hace cosas que lo
hagan sentir contento? ¿Qué cosas disfruta y hace mucho que no las hace? Las actividades
recreativas nos permiten distraernos de los problemas de la vida diaria, distrayendo
nuestro pensamiento y ayudándonos a relajarnos.

Programe estas actividades y hágalas lo más seguido que puedan ¿Qué actividades
familiares hace para sentirse contento?, ¿Hace cuánto que no las realiza?
También es importante que las programemos como rutina, por ejemplo todas las tardes
salga a caminar con sus hijos o contemplen el anochecer mientras platican lo que hicieron
durante el día. Tener actividades recreativas disminuye el estrés y nos prepara física y
emocionalmente para resolver problemas.
ACTIVIDAD
Piense en tres actividades recreativas que podría hacer usted solo y tres actividades
recreativas que podría hacer con su familia. Recuerde que las actividades recreativas son
divertidas y lo hacen sentir contento.

ACTIVIDADES RECREATIVAS SOLO ACTIVIDADES RECREATIVAS EN FAMILIA


Técnica 3. Relajación

La relajación es una técnica que hace que nuestro cuerpo se sienta bien para poder
resolver problemas de forma tranquila. Existen varias técnicas de relajación. Aquí
revisaremos la relajación muscular, la relajación por respiración profunda, la relajación por
imágenes agradables y la relajación por posturas.

Relajación Muscular

Puede llevarse a cabo recostado y consiste


en apretar por 5 segundos las siguientes
partes del cuerpo, una a una, y relajarlas por
otros 10 segundos.

1. Apriete las manos (cerrando los puños)


durante 5 segundos y después abra
lentamente sus manos hasta dejarlas
abiertas en su posición natural sin
forzarlas, durante diez segundos.
2. Ahora, apriete los brazos
(doblando los codos y llevando las
manos hacia los hombros) y
después baje lentamente los
brazos al lado del cuerpo.

3. Apriete los hombros (elevándolos hacia


sus orejas) y después bájelos poco a poco,
sintiendo como cambia la tensión en
relajación.
4. Ahora, apriete los ojos fuertemente,
relájelos sin abrirlos pero permitiendo
que los párpados descansen sobre sus
ojos.

5. Ahora apriete fuertemente los


labios cerrando su boca. Permita
que descanse su barba abriendo
ligeramente los labios, dejando que
sus músculos de la mandíbula
descansen.

6. Apriete fuertemente sus piernas, jalando la punta de los pies hacia su cuerpo y
después permita que sus músculos descansen y se relajen.
7. Finalmente apriete todos los
músculos del cuerpo al mismo
tiempo: manos, brazos, hombros,
ojos, mandíbula y piernas, como si
fuera una enorme piedra. En seguida
permita que todos sus músculos
cambien la tensión en relajación,
sintiendo como todo su cuerpo pesa
mientras descansa y se relaja.
La técnica de relajación muscular, permite aprender a identificar la tensión de
nuestros músculos cuando estamos en situaciones difíciles, pero mejor aún ayuda a
cambiar, sin pensarlo, la tensión por relajación, sí se practica regularmente.

ACTIVIDAD
Practique la técnica de relajación muscular. ¿Cómo se sintió después de practicarla?,
¿Pudo sentir como se relajaban sus músculos? Practíquela junto con su hijo.

Respiración profunda
Esta técnica consiste en jalar aire profundamente por la nariz, llevándolo a través
de los pulmones y hasta el estómago. Ahí se contiene la respiración por dos segundos y
en seguida se saca el aire muy lentamente por la boca. Se puede realizar varias veces e
incluso acostados.
Se inicia sintiendo como los pies están pesados por la relajación muscular, se
inhala aire, se retiene y se saca. En seguida concéntrese en las piernas y mientras saca
el aire sienta como se relajan esos músculos. A continuación concéntrese en sus
hombros, brazos y manos, que mientras van pesando cada vez más, inhala, retiene y
saca el aire. Usted puede sentir como cada vez que el aire sale por su boca el estrés se
va y su cuerpo se relaja. Finalmente, mientras respira profundamente, relaje sus ojos y
su mandíbula con los labios ligeramente entreabiertos.
Con este tipo de relajación se reduce el ritmo de
los latidos del corazón y se calma la respiración
cuando estamos en situaciones difíciles.

ACTIVIDAD
Practique la técnica de respiración
profunda. ¿Cómo se sintió después de
practicarla?, ¿Pudo sentirse más
relajado? Practíquela junto con su hijo.

Relajación por imágenes agradables


Esta técnica consiste en imaginar situaciones que son agradables para nosotros y
en las que nos sentimos cómodos. En esta técnica usted debe imaginar situaciones o
lugares agradables que a usted le hacen sentir mucha paz y tranquilidad.
Recuéstese y cierre los ojos. Elija un lugar en el que probablemente ya ha estado
o en el que le gustaría estar. Ya que lo eligió, imagine que puede ver lo que hay en ese
lugar. Imagine los colores y las figuras que siempre hay en ese lugar. Respire
profundamente mientras se concentra en ese lugar. Ahora imagine los sonidos que se
escuchan ahí, son sonidos suaves que le producen mucha paz, mientras los escucha
puede sentir como se relaja y como esos sonidos acompañan a los latidos de su
corazón, el cual late despacio. Respire profundamente y ahora imagine que con sus
manos pudiera tocar suavemente las cosas que hay en el lugar al ritmo que respira
lenta y profundamente.
Finalmente, imagine que puede oler los aromas de ese lugar y, son aromas
agradables y suaves que al olerlos lo hacen sentir relajado. Concéntrese en esas
sensaciones por un rato. Finalmente y cuando se encuentre relajado abra sus ojos muy
lentamente.
La relajación por imágenes agradables permite aprender a controlar nuestros
pensamientos. Cuando la practicamos constantemente nos ayuda a resolver problemas.

ACTIVIDAD
Practique la técnica de relajación por imágenes agradables. ¿Cómo se sintió después
de practicarla?, ¿Pudo sentir cómo se relajaba? Practíquela junto con su hijo.

Los padres y los adolescentes pueden combinar las técnicas de relajación. Puede
iniciar recostado con la relajación muscular, continuar con respiración profunda y
terminar con imágenes agradables. Combinar las técnicas permite una relajación
intensiva, lo que le puede ayudar a relajarse en otros lugares aún cuando no se
encuentre recostado. Puede relajarse sentado e inclusive mientras camina, sobre todo
si practica las técnicas constantemente.

Relajación por posturas

También podemos relajarnos simplemente cambiando la postura de nuestro


cuerpo. Si se encuentra sentado, baje sus hombros, los brazos, abra sus manos, deje
caer sus piernas y mientras respira profundamente, sienta como se relaja todo su
cuerpo inmediatamente.
La relajación por posturas
le permitirá relajarse en
momentos en donde no
puede practicar alguna de
las técnicas anteriores.
Por ejemplo cuando va en
el transporte público o
cuando está en su trabajo.
ACTIVIDAD
1. Piense en alguna situación que le produzca estrés. Escríbala.
2. Recuerde qué reacciones ha tenido ante esa situación. Escríbalas.
3. Piense en las estrategias que puede poner en práctica para manejar sus reacciones.
4. ¿Qué resultados cree obtener o ha obtenido?
Situación Reacciones Estrategias Resultados
Físicas: ( ) detener el pensamiento
negativo:
( ) cambiarlo el pensamiento:
Emocionales:
( ) actividades recreativas
individuales:
Motoras: ( ) actividades recreativas
familiares:
( ) relajación muscular
Del pensamiento:
( ) relajación por respiración
profunda
Del ( ) relajación por imágenes
comportamiento: agradables
( ) relajación por combinación
( ) relajación por posturas
Cuando los padres y los adolescentes aprendemos a dialogar, comunicarnos y solucionar
problemas, disminuyen los problemas familiares, aumenta la unión de la familia, mejora la
forma de expresarse y es más probable que se practiquen actividades agradables en
conjunto.
La solución de problemas permite encontrar soluciones a problemas de tal forma que
todas las partes involucradas salgan ganando. Se apoya la cooperación en lugar de la
competencia.
Es importante estar atentos a las dificultades que como padres o adolescentes
podemos tener para dialogar, comunicarse o resolver problemas. Algunas personas tardan
más en aprender, mientras que otras lo hacen muy rápido. Pero todos podemos aprender.
Aprender a controlar el enojo permite dialogar, comunicarse y solucionar problemas de
forma efectiva.
Parte 7.
Cómo
detectar si
nuestro hijo
consume
drogas y cómo
manejarlo
Muchos padres nos preocupamos por saber si nuestros hijos consumen drogas. Es
importante que tome en cuenta antes que nada que podemos prevenir que nuestros hijos se
droguen si creamos un ambiente familiar positivo basado en la comunicación, el diálogo y la
confianza. También es importante que no perdamos de vista que muchos adolescentes llegan
a consumir drogas cuando se sienten solos y poco atendidos por sus padres. Por eso siempre
debemos estar al pendiente de ellos, haciéndoles ver que nos damos cuenta de sus
problemas y que pueden contar con nosotros. Mostremos comprensión hacia ellos.

Señales que debemos tomar en cuenta

Si a pesar de que hemos buscado crear un buen ambiente familiar tenemos la sospecha
de que nuestro hijo consume alguna droga y deseamos confirmarlo, existen algunas señales
que pueden ayudarnos a detectarlo.

Cambios físicos o de salud

Tiene fallas en la memoria, olvida las cosas con facilidad, no se acuerda de cosas
importantes.
Habla de manera extraña, dice cosas que salen de lo normal

Le cuesta trabajo concentrarse en tareas escolares o actividades de la casa.

Tiene ojos rojos.

Tiene la nariz congestionada


Ha bajado de peso

Se mueve como si le costara caminar, sus movimientos son toscos.

Tiene poca claridad al hablar, no se le entiende lo que dice o habla como tuviera la lengua
hinchada.

Cambios en su conducta

Sale mucho en la noche, a veces no llega a dormir

Miente con frecuencia

Se porta como si escondiera algo

Falta a clases o a trabajar

Ha bajado en sus calificaciones

Se porta rebelde, no obedece o pasa por alto sus órdenes

No respeta las reglas en la casa


Cambios emocionales

Su carácter ha cambiado, se enoja con facilidad, llora o se deprime más que antes

Se ha vuelto desconfiado hacia todos los que lo rodean

Ha dicho frases relacionadas con su muerte como “me quiero morir, ya no quiero vivir,
quisiera estar muerto”.

Se enoja cuando usan o revisan sus cosas o cuando alguien entra a su cuarto

Cambios en su forma de ser

Ha cambiado su forma de vestir

No se arregla o incluso no se baña

Pide más dinero de lo normal o incluso trae más dinero inexplicablemente

Usa inciensos y desodorantes en su recamara.

Tiene nuevos amigos y evita que la familia los conozca


Si notamos varias de estas señales en nuestros hijos, existen varias sugerencias que
podemos tomar en cuenta para manejar la situación. Teniendo en cuenta lo siguiente:

Mantener la calma

El primer punto que debemos


recordar es mantener la calma.
Aunque darnos cuenta de que
nuestro hijo está consumiendo
drogas es una situación que
causa mucha preocupación y
angustia, es muy importante
mantener la calma. Debemos
evitar reacciones violentas o
exageradas, estas sólo
provocarán conflictos con
nuestro hijo. Podemos poner en
práctica los ejercicios de
relajación que aprendimos en la
sección 6.
Expresar amor y comprensión

Debemos decir y mostrar a


nuestro hijo que lo queremos
y que él es muy importante
para nosotros. En lugar de
mostrarnos enojados
debemos mostrar
preocupación por la situación
que nuestro hijo está
viviendo. Expresar a su hijo
que usted lo quiere y lo
aprecia y por ello desea
buscar una solución junto con
él.
Escucharlo

Nuestro hijo tiene


muchas cosas que
decirnos. Debemos
escuchar
atentamente lo que
él nos diga. Como
revisamos
anteriormente un
muchacho que llega a
drogarse es un
muchacho que ha
vivido situaciones
difíciles que no ha
aprendido a manejar.
Por eso es
importante que
permitamos que él
nos diga todo lo que
siente. Mostremos
interés.
Fortalecer la relación

Aunque darnos cuenta que nuestro hijo consume drogas puede crear sentimientos de
enojo y decepción, es importante que estos sentimientos no provoquen un distanciamiento
entre nosotros. Nuestro hijo no consume drogas para hacernos enojar o para mostrarnos
que es más fuerte, lo hace porque no ha encontrado otra manera de manejar sus problemas.
Dejar que nuestra relación se enfríe puede hacer que el problema del consumo empeore.
Tomar una actitud solidaria y comprensiva

Sabemos que nuestro hijo consume drogas por situaciones difíciles que no ha podido
manejar. Por lo tanto resulta muy útil mostrar una actitud de comprensión hacia ellos.
Debemos mostrarles que pueden contar con nosotros, y que estamos dispuestos a apoyarlos
para que encuentren la solución a sus problemas.
Lograr su confianza

Para que logremos que nuestro hijo nos tenga confianza, debemos también mostrar que
confiamos en él. Debemos creer en él y darle la oportunidad para iniciar el cambio en su
consumo.
Aprender sobre las drogas

Debemos aprender sobre las drogas. La forma como los jóvenes las consumen. Los
problemas que causan en el cuerpo y la salud de nuestros hijos. Podemos investigar esta
información junto con nuestros hijos. También debemos aprender sobre cómo pueden
afectar distintas áreas de la vida.
Evitar culparse

No debemos culparnos sobre lo que está pasando. Puede haber muchas razones por las
que nuestro hijo consume drogas. Tampoco debemos hacernos las victimas enfrente de él ni
tratar de hacerlo sentir culpable del dolor que nos produce saber que consume drogas. En
lugar de esto, debemos centrar toda nuestra atención en buscar dialogar con nuestros hijos
y buscar junto con ellos la forma de solucionar los problemas por los que pueden atravesar
nuestros hijos.
Fortalecer la comunicación
No perdamos la comunicación con nuestro hijo ni centremos todas nuestras pláticas
con nuestros hijos en el tema de las drogas. Aunque es importante solucionar el consumo de
nuestro hijo, es también importante no perder la comunicación con él.
Evitar hacer juicios moralistas

Nuestro hijo no deja de ser un buen hijo por haber caído en las drogas. Evitemos
juzgarlo. Los juicios moralistas pueden crear molestia en él, haciendo que se sienta atacado
y puede hacer que se aleje de nosotros aumentando su consumo de drogas.
Tener confianza

Debemos tener la confianza de que podemos ayudar a nuestro hijo. No debemos pensar
en que hemos fallado como padres. Debemos estar conscientes de que podemos manejar su
consumo. Podemos encontrar la solución a este problema.
No cargar solos con el problema.

Debemos recordar que no tenemos porque manejar el problema, solos. No somos


expertos, probablemente nunca imaginamos enfrentarnos a esta situación. Por lo tanto es
importante que contemos con el apoyo de otras personas. Podemos acudir a los centros de
salud para que nos brinden orientación sobre cómo manejar el problema de una mejor
manera para conseguir que nuestro hijo deje de consumir drogas.
Teniendo en cuenta todas estas sugerencias podremos afrontar el consumo de drogas
de nuestro hijo de una manera más fácil con mejores resultados.

ACTIVIDAD
¿Se sintió identificado con alguna de las sugerencias? Imagine la situación de sorprender a
su hijo consumiendo drogas. Piense en la forma cómo reaccionaría. Anote en el espacio
siguiente todo lo que le diría y todo lo que haría.

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Ahora revise lo que escribió y vea si esto coincide con las sugerencias que acabamos de
revisar ¿qué le falto?, ¿qué cosas hizo diferente?, ¿qué cosas necesita practicar?
REFERENCIAS

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York: The Guilford Press.
Barragán, T. L., Morales, S., Barreto, M. E, Barragán, T. N. & Ayala, V. H. (1998) Modelo de consejo
marital basado en la solución de conflictos y reforzamiento recíproco. México: Grupo Miguel Angel
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relajación y gratificantes para padres que presentan maltrato infantil. Tesis de Licenciatura.
UNAM.
Fulgencio, J. M. (2002). Entrenamiento en habilidades de comunicación y negociación para padres y
adolescentes que presentan comportamiento agresivo. Tesis de Maestría. UNAM.
Morales, S. (1996). Evaluación de un Programa para padres que maltratan a sus hijos basado en el
entrenamiento en planificación de actividades en el hogar y en la comunidad: adquisición de
habilidades de enseñanza incidental. Tesis de Licenciatura. UNAM.
Morales, S., Flores R.C., Barragán, T. N. & Ayala, V. H. (1998) Manual de Entrenamiento en actividades
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