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Reporte de lectura narrativa

Quiroz Garcia Alan Ivan


22/septiembre/2022
Análisis de Textos Literarios
Grupo:0551
1-Antecedentes biográficos
Horacio Silvestre Quiroga Forteza nació el 31 de diciembre de 1878, en la
ciudad Salto, Uruguay, en el noroeste del país, sobre el río Uruguay. Fue el cuarto hijo del
matrimonio de Prudencio Quiroga y Pastora Forteza. Por parte paterna descendía del caudillo
riojano Facundo Quiroga. Su padre falleció cuando él contaba con tan solo dos meses,
cuando, tras una jornada de caza, al bajar de una embarcación se le disparó accidentalmente
la escopeta. En 1891, Pastora Forteza se casó con Mario Barcos, quien fue el padrastro de
Quiroga. Pero sufrió un derrame cerebral en 1896 que lo dejó semiparalizado y mudo. Se
suicidó disparándose en la boca con una escopeta manejada con el pie justo cuando Quiroga,
de 18 años, entraba en la habitación.

Hizo sus estudios en Montevideo, capital de Uruguay hasta terminar el colegio secundario.


Estos estudios incluyeron formación técnica (Instituto Politécnico de Montevideo) y general
(Colegio Nacional) y ya desde muy joven demostró interés por la literatura, la química,
la fotografía, la mecánica, el ciclismo y la vida de campo. A esa temprana edad fundó la
Sociedad de Ciclismo de Salto y viajó en bicicleta desde Salto hasta Paysandú (120 km). En
esa época pasaba larguísimas horas en un taller de reparación de maquinarias y
herramientas. Por influencia del hijo del dueño empezó a interesarse por la filosofía. Se
autodefiniría como «franco y vehemente soldado del materialismo filosófico».
Simultáneamente también trabajaba, estudiaba y colaboraba con las publicaciones La
Revista y La Reforma. Aún se conserva su primer cuaderno de poesías, que contiene
veintidós poemas de distintos estilos, escritos entre 1894 y 1897.
Durante el carnaval de 1898, conoció a su primer amor, María Esther Jurkovski, quien le
inspiraría dos de sus obras más importantes: Las sacrificadas (1920) y Una estación de
amor (1917). Pero los desencuentros provocados por los padres de la joven —que reprobaban
la relación, debido al origen no judío de Quiroga— los llevó a separarse.
Su enfermedad
En 1935 Quiroga comenzó a experimentar molestos síntomas, aparentemente vinculados con
una prostatitis u otra enfermedad prostática. Las gestiones de sus amigos dieron frutos al año
siguiente, concediéndosele una jubilación. Al intensificarse los dolores y dificultades para
orinar, su esposa logró convencerle de trasladarse a Posadas, ciudad en la cual los médicos
le diagnosticaron hipertrofia de próstata. Pero los problemas familiares de Quiroga
continuarían: su esposa e hija lo abandonaron definitivamente, dejándole —solo y enfermo—
en la selva de Misiones.
2-Antecedentes literarios.

 Historia de un amor turbio (1908)


 Cuentos de amor locura y muerte (1917)
 Cuentos de la selva (1918)

Resumen.
Situación inicial
Se empieza a contar la historia de como unos investigadores terminaron
recogiendo a una anaconda que vivía en una selva la cual no era su hábitat.
Se supone que las víboras vivían su vida normal en aquella selva, las víboras
venenosas que organizaban en un congreso especial para ellas, entre ellas:
terrorífica, Neuwied, Cruzada, Atroz, Urutu Dorado, Drimobia las cuales
compartían hábitat con las culebras con las cuales tenían cierta rivalidad aunque
eran muy parecidas, dicha rivalidad consistía en qué tipo de víboras eran más
dignas de admiración a la hora de cazar y en apariencia, si las elegantes
venenosas, que con sus patrones bellos y su forma tan sutil de matar se
consideraban mejores o por otra parte las culebras, hábiles cazadoras que se
valían de su fuerza, tamaño y agilidad para matar, lo cual hacia que consideraran
indigno el asesinar por medio del veneno ya que consideran que es una cualidad
que no se gana ni desarrolla, si no que solo naces con esa ventaja. Aunque cabe
recalcar que aun siendo del mismo bando aun hay rivalidad entre las venenosas.
Ruptura de equilibrio
Una noche calurosa en la espesa selva, ya hacia Lanceolada de casería, cuando
en su ir y venir se percata de actividad inusual en un viejo edificio abandonado en
medio de la selva que había permanecido así por mucho tiempo. Esto le pareció
extraño, así que fue a echar un vistazo, ahí se percato de la presencia del hombre,
ya era bien conocido por ella misma y sus hermanas que l hombre y el desastre
venían juntos, y en lo particular para las víboras venia en dos amenazas, los
despiadados machetes y el abrazador fuego que lo arrasa todo.

Clímax
Lanceolada al ver la amenaza del hombre convoca a una reunión con el congreso
de víboras, en el cual se discutía la forma de afrontar el problema y además se
formaba una pequeña diatriba en contra de las culebras, llamándolas “Gusanos
que se arrastran”. Una víbora llamada cruzada toma la iniciativa y propone que
primero debiesen ir a investigar a los hombres, y para eso propone pedirles ayuda
a sus primas, las cazadoras, las demás de mala gana aceptan y cruzada va en
busca de una buena amiga suya, la Ñacaniná.
En un principio la ñacanina no estaba convencida de ayudar a sus primas, pues le
parecía irónico que consideraran al humano su muerte cuando ellas mismas se
pavoneaban de serlo. Al final acepto y como diría Juan Carlos Bodoque “El asunto
me tenía realmente intrigado, así que salí a investigar”. Una vez en la cabaña
Ñacaniná se entero de que los hombres tenían planeado cazar serpientes para
extraerles el veneno y así crear antídotos para inmunizar a quien se le aplique,
como por ejemplo al perro entrenado para rastrear serpientes que tenían los
investigadores de aquella cabaña.
Ñacanina llega con las noticias al congreso de víboras, que entran en pánico
porque el hombre pretende arrebatarles aquello que la naturaleza les dio y su
mayor orgullo, el matar con su veneno y esto traería como consecuencia que
estas murieran de hambre. A falta de un plan en concreto, Cruzada decide
aventurarse a la cabaña de los científicos para así poder idear un plan mejor, no
sin antes de ser advertida por la Ñacaniná sobre el perro inmunizado rastreador de
serpientes.
Cruzada es capturada y encerrada en un serpentario, donde conoce a Hamadrias,
otra víbora venenosa, específicamente una cobra capelo real de la india, quien le
propone un plan para escapar de ahí. El plan de Hamadrias tiene éxito, las dos
escapan juntas y se dirigen a la cueva del congreso.
Una vez en la cueva cruzada procede a contar toda su aventura y a presentar a
Hamadrias al grupo, una vez esto hecho Hamadrias pretende tomar el liderazgo
de las serpientes con un discurso sobre como ellas tenían derecho a defender su
vida y su hogar de los hombres, aunque eso signifique la muerte, pero, en ese
momento, una enorme serpiente hace su entrada, era la anaconda que venia a
poner en duda la propuesta de Hamadrias de ir directamente a atacar a los
humanos porque a su parecer los humanos son seres violentos los cuales podrían
acabar con ellas, así que le parecía mala idea, la mayoría de serpientes hicieron
caso omiso a las advertencias de la anaconda y procedieron con el plan de ataque
que era hacer un ataque directo a los humanos, caballos y al perro, confiando así
en su mayor cualidad, el veneno.
Desenlace.
La batalla contra los hombres empieza, Hamadrias lidera una ofensiva directa y
los hombres confundidos y asustados salen a defenderse como pueden. En un
principio parecía que las víboras estaban ganando, ya que por sus números y su
ataque sorpresa agobiaron a los hombres, pero los caballos no caían muertos, el
perro tampoco y los hombres rebanaban a diestra y siniestra a cuanta víbora
tuvieran en la mira. A ver su inminente derrota, las serpientes huyeron hacia la
cueva del congreso, a lo cual Anaconda advirtió que era como ir directo a la
muerte, pero otra vez fue ignorada. Viendo que Hamadrias una de las mayores
culpables de esta masacre venia hacia ella, Anaconda se mostró satisfecha y
empezó a combate.
El primer movimiento fue favorable para Hamadrias, ya que encajo sus colmillos
en el cuello de la anaconda, la anaconda respondió como solo las cazadoras
pueden hacer, con un agarre mortal, así envolviendo a Hamadrias, anaconda
concentro toda su vida en aquel brazo que cerraba progresivamente sus anillos de
acero, hasta que finalmente Hamadrias murió.
El espectáculo había durado lo suficiente como para que los hombres con ayuda
del perro lograsen localizar a las víboras, las cuales fueron masacradas quedando
como única sobreviviente la anaconda, los hombres habían dejado vivir a la
anaconda al percatarse que había terminado con la Cobra real y al ver esto como
el haberlos vengado de alguna manera, decidieron llevárselas, y así concluye la
historia de como la anaconda termino viajando con estos hombres.
COMENTARIO
Me parece divertida la disputa que hay entre serpientes venenosas y las culebras,
ambas con sus razones por las cuales se creen dignas de ser superiores a sus
semejantes, unas por la elegancia y belleza que creen que es matar por medio del
veneno y las otras por el orgullo de su rapidez, poder y tamaño que hace que el
veneno no se necesario para matar.
También se me hizo interesante lo que se ve en la lectura sobre la naturaleza y su
relación con el hombre, la naturaleza es cruel pero justa, el ataque hacia los
hombres por parte de las víboras es por la perturbación de su hábitat y de su estilo
de vida, desde el punto de vista de las serpientes el hombre vino a arrancarles el
medio por el que se alimentan y su mayor orgullo, que es el veneno, se deja un
poco claro que toda relación entre naturaleza y hombre causa un conflicto porque
el hombre quita recursos y lo que da es muerte.

Bibliografía:
La locura de Horacio Quiroga | Crow | Revista Iberoamericana (pitt.edu)

10 Libros de Horacio Quiroga | Las mejores obras del autor uruguayo (frasesdelavida.com)

Biografia de Horacio Quiroga (biografiasyvidas.com)

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