SESIÓN 10

Al ingresar al consultorio, me dio su pago e hizo mención de que ya había pagado la siguiente sesión,
para evitar gastar el dinero destinado a las sesiones en comida, porque es muy tragón y le da mucha
hambre. Le dije que se notaba más tranquilo, y contestó que sí, que así se sentía. Mencioné que me
gustaría retomar la sesión pasada, así que le hice el comentario de que consideraba que se necesita
mucho valor y capacidad para poder aceptar lo que lo ha traído aquí y que me daba la impresión
que, el haber hecho los pagos, así como el adelanto de la próxima sesión, reflejaban un deseo
genuino por querer asistir. Hugo asintió con la cabeza y dijo que no me podía decir que ya se acepta
en este momento, pero que eso de la resistencia que le mencione la sesión pasada, lo pensó durante
la semana y se dio cuenta que si lo hacía porque no quería venir. Comentó que él sabía que la gente
no cambiaría y tendría que vivir con eso de ser agredido y que lo hagan sentir mal porque así son
los demás. Le pregunté si pensaba que las personas heterosexuales no son juzgadas o rechazadas
por los demás, a lo que contestó que sí, pero en menor grado porque a ellos no se les señala o algo.

Le dije que, normalmente, las personas juzgan y critican a los demás por cualquier cosa, es decir, si
una persona es blanca, que por qué es blanca, que si es morena, que por qué es morena, que si es
chaparro o alto, gordo o flaco, las personas encuentran de qué hablar sobre los demás. Le dije que
le hacia la pregunta porque me daba la impresión que él había tomado la decisión de ser juzgado
por su preferencia sexual, le dije que lo que había vivido era difícil, que comprendía lo doloroso que
pudo ser por las situaciones que me ha venido mencionando, pero que parecía que el decidió que,
por ser homosexual tenía que ser juzgado.

Menciona que su familia siempre fue así y que, en la semana, estaba platicando con su mamá porque
su hermana los había visto a él y a su pareja besándose, pero como su papá estaba presente,
trataban de hablar en código para que no le hiciera algún comentario. Refiere que sabía su mamá
que saldría el fin de semana y su hermano le preguntó que si saldría con su amigo o con su novio y
Hugo quiso que se callara para que no lo escuchara su papá. Le pregunté qué porqué quería callar a
su hermano y contesto que era porque tenía miedo a cómo reaccionaría su papá, le pregunté que
cómo imaginaba la reacción de su papá, y dijo que con algún comentario que fuese agresivo pero
que le sorprendió que no lo hiciera.

Mencioné que las personas tienen prejuicios sobre ciertos temas, pero que ellos podían cambiar de
opinión sobre ellos cuando conocen más sobre el tema, como fue el caso de su mamá y su hermano
que lo han tomado con mayor naturalidad por lo que ha venido contando, ya que antes se dejaban
de hablar, su mamá lo trataba de correr de la casa o su papá lo hacía sentir mal con sus comentarios,
enviándole mensajes de texto pidiendo que cambie su foto, pero que ahora están reaccionando de
una manera distinta, le pregunté que cómo lo hacía sentir esto, a lo que contestó que si se sentía
mejor porque ya no era algo de lo que no se tenía que hablar o no corría el riesgo de que le dijeran
maricón y que le dijeran que era seguramente porque de niño solamente estaba con su hermana y
con sus primas, que seguramente había sido eso que se volvió así. Le dije que las personas tienden
a tener prejuicios acerca de las preferencias sexuales de los otros, pero que cada quién elegía si eso
que le juzgan impactara en su vida. Le di ejemplos sobre una persona que tiene sobrepeso y que las
personas pensarían que es porque come muchas golosinas o comida, pero no se ponían a pensar
que podría ser a causa de alguna enfermedad relacionada, como la tiroides, sin embargo ella es
quien decide si será juzgada por tener sobre peso o por otra cosa, le dije también sobre un paciente
que tenía problemas con su pareja, él es heterosexual y que él se sentía juzgado por su familia o la
gente que lo llegaba a conocer, porque el desempeñaba un rol femenino, que era ser amo de casa
y eso propiciaba a que le afectaran los comentarios que le hacían sobre que él tenía que ser el que
llevara el dinero a su casa, que él tenía que ser el hombre que procurara a su familia, burlas
referentes a la limpieza y, era juzgado frecuentemente por sus hermanos. Y existen otras personas
que por más que los juzgan, pareciera que se les resbala y le dije sobre estas personas que no son
tan agraciadas pero que ellos creen que lo son y no les genera algún impacto los comentarios de
otros, porque para ellos, son hermosos. Mencioné que la pregunta que le había hecho al principio
sobre si pensaba que a los heterosexuales se les juzgaba, era porque daba la impresión que él ha
decidido ser merecedor de ser juzgado por el hecho de ser homosexual y que por eso, se le va hacer
difícil enfrentarlo o que se tendrá que acostumbrar a las críticas. Le dije que, seguramente de
personas que no son cercanas o que no lo conocen, se tomar personal los comentarios o acciones,
como cuando lo ven feo en el transporte y el piensa que es porque cree que es notorio para los
demás su homosexualidad. (Se empezó a reír, asentía y cuando le estaba diciendo esto, apretaba
mucho los ojos, como cuando uno tiene sueño y trata de despertarse). Me dijo que jamás había
considerado que uno pudiera elegir por cual cosa seria uno juzgado por los otros, pero que tenía
sentido lo que le estaba diciendo. Le pregunté si tenía algo porque estaba apretando mucho sus
ojos y dijo que no, que seguramente era la gorra y se la quitó. Comentó que él nota cambios porque,
el fin de semana, intentó tener relaciones con Javier y que no pudieron porque se le olvidaron los
condones (menciona que los vio antes de salir, pero no los agarró). Hugo mencionó que se dejó
llevar y que cuando se acordaba de lo que estaba haciendo, la erección se iba, pero cuando
regresaba, no se percataba en qué momento sucedía. Le pregunté algo relacionado a que, si el que
no se aceptara, podría repercutir en esta situación y me dijo que tal vez que no acepte su
homosexualidad sea por qué tampoco puede tener relaciones. Luego me preguntó que entonces,
cómo le haría para poder aceptarse, que la verdad no sabía, después se empezó a reír porque una
de sus amigas ya había venido a atención, antes de que él viniera a llenar su papeleta, y le preguntó
que qué tal estaba el servicio y ella le decía que no servía para nada porque solamente daban
platicas motivacionales y ya, pero que a él posiblemente le serviría y entonces ya vino. Se seguía
riendo y le pregunté que eso cómo lo relacionaba, que si percibía que eran platicas motivacionales
y dijo que no, que realmente no lo eran, después empezó a decir otra cosa que ya no recuerdo, pero
ya no le estaba entendiendo, entonces le pregunté si se sentía confundido, porque me estaba
hablando de temas diferentes, que los cambiaba repentinamente y que así me estaba haciendo
sentir, confundida. Me dijo que si y se apretó su cabeza con sus manos, dijo que ya no sabía lo que
estaba diciendo y luego terminé la sesión.

• Saliendo de cubículo dijo que le dolía su cabeza y se sentía muy cansado.

• Hugo hablo muy lento a comparación de las sesiones pasadas.

SESIÓN 11
Hugo llegó 10min tarde a sesión. Al momento de ingresar a cubículo, Hugo menciono
que se sentía bien, pero que lo que habíamos hablado la sesión pasada, que había sido
algo que no esperaba. Menciona que, durante la semana, realizó un experimento y se
volvió más observador, lo que hizo que se diera cuenta que ese tema que hablamos en
específico, si lo hacía sentir mal.
Comentó que, durante la secundaria, él era el “matadito” del salón y que los comentarios
de sus compañeros le lastimaban, hasta que una maestra le dijo que mejor se enfocara
en aprender y no solo en entregar todo, que ignorara los comentarios de los demás, lo
que provocó que Hugo dejara de hacerles caso a sus compañeros y los comentarios
que antes le hacían, dejaran de afectaran, por lo tanto el cree que es un ejemplo claro
donde se puede ver que el eligió que esos comentarios no le hicieran daño. Comento
que él pensaba que no se podía elegir qué comentarios tomar en cuenta, pero notó que
sí. Refiere que la sesión pasada, cuando le mencione sobre que él elegía sentirse mal,
provocó que se sintiera muy enojado porque era un sentimiento “como cuando te dicen
tus verdades” pero que considera que era cierto. Después, relató algo referente a que
él pensaba que le daba mayor importancia lo que las personas cercanas le decían y lo
que los otros le decían, le valía. Guardamos silencio y él mencionó que no era cierto,
que también le daba importancia a personas que no conocía. Hugo comentó que con
Mo (el amigo del gimnasio) tuvo varias situaciones en la semana que no le fueron gratas,
menciona que habían salido en una ocasión y que estaban bebiendo, pero que Mo
comenzó a gastarse mucho dinero y aunque Hugo le había dicho que ya no quería
tomar, Mo le dijo que pediría más y que se irían a michas, que después se lo pagaba y
desde ese momento, Hugo le debe dinero. Refiere que Mo le está empezando a
desagradar porque le ha dicho que es feo y que, como no ha dormido bien, Mo se ha
ofrecido a prestarle sus cremas para los ojos, pero cuando comenzó a decirle el costo
de cada una de las cremas, Hugo ya no quiso usarlas. Durante la semana Mo le propuso
ir a tomar, pero Hugo no quería y fue tanta la insistencia que hizo que Hugo le dijera
que no quería ir a beber porque Mo siempre gastaba dinero de más cosa que él no tenía
y ya le había explicado que el dinero que tenía lo utilizaba para gastos de la escuela y
no para beber cuando se le diera la gana. Le mencioné que parecía que su amigo le
era molesto, a lo que contestó que no era su amigo, que de hecho ha estado ignorándolo
durante la semana o le da la espalda cuando está cerca y le habla.
Le dije que, daba la impresión que, como lo había herido con su comentario referente a
que era feo, Hugo ya no quiere que Mo este cerca de él y por ello lo desplazó al lado
malo (le recordé que el solamente se maneja por blanco, negro y no gris) porque Mo
antes era su amigo, lo quería, lo apoyaba y ahora dejo de ser su amigo porque lo lastimó
y le recordé que él había mencionado que la forma que tenía para vengarse con los
otros era ignorándoles, hablándoles mal y dándoles la espalda, cosa que parecía que
estaba haciendo con Mo. Hugo sonrió y dijo que era verdad. Después, le mencioné que
era bueno que hubiera podido ver otra situación en la que él pudo decidir que
comentarios tomaría en cuenta y cuáles no. Mencionó que ya íbamos a terminar y que
él estaba considerando en tomar de nuevo terapia, si se acomodaba en sus horarios o
si no, podía poner en práctica lo que estuvo trabajando, sin embargo, le gustaría que yo
continuara dándole sesiones y le explique que era algo que no podía hacer porque,
como el sabia, era mi último semestre en la escuela.
Di el cierre de sesión y, antes de salir, se empezó a reír y mencionó que se había
acordado de un chiste donde un chico decía que todos sus terapeutas lo abandonaban,
le pregunté si el sentía que lo estaba abandonando y dijo que no, que solamente era un
chiste, se rio y salimos del cubículo.