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TEMA 2: LAS REVOLUCIONES LIBERALES.

1. INTRODUCCIÓN.

El Antiguo Régimen se desmoronó por un conjunto de revoluciones iniciadas en el


siglo XVIII y que se prolongaron hasta mediados del siglo XIX. El cambio de modelo
comenzó en América del Norte, que se independizó de Gran Bretaña, siguió en Francia y
de ahí se expandió al resto de Europa, suponiendo el final de la Monarquía Absoluta, la
sociedad estamental y la formas de propiedad feudales, en definitiva, del Antiguo
Régimen.

De forma paralela aparecieron los nacionalismos en Europa que en sus diferentes


tipos culminaron con el desarrollo de los Estados nacionales del siglo XIX.

2. LA REVOLUCIÓN AMERICANA.

El Reino Unido tenía trece colonias en América del Norte, cuyos habitantes
proclamaron su independencia el 4 de julio de 1776 dando lugar a los Estados Unidos de
América.

El origen de la rebelión se remonta a la guerra de los siete años (1756-1763) entre


británicos y franceses. Los británicos quisieron imponer el pago de los gastos de la guerra
a los colonos que se negaron a pagar aludiendo que los impuestos deben aprobarse en el
parlamento y que como ellos no tenían representantes en dicho parlamento no tenían por
qué pagarlos.

A todo esto se sumó la concesión del monopolio del comercio del té a la Compañía
de las Indias Orientales, lo que perjudicaba a los colonos y desató la protesta que tuvo
como punto culminante el Motín del Té de Boston en 1773, en el que un grupo de colonos
disfrazados de indios asaltaron los barcos de la Compañía británica y arrojaron el té al
agua.

En septiembre de 1774, las colonias se reunieron para elaborar una lista de


agravios, al año siguiente comenzaron los enfrentamientos y el 4 de julio de 1776 se
proclamaba la Independencia en una declaración redactada por Jefferson.

La guerra de la independencia (1775-1782) se desarrolló en suelo estadounidense


y los colonos contaron con apoyo francés y español, venciendo claramente a los
británicos en las batallas de Saratoga (1777) y Yorktown (1781).

En 1783 se firmaba la paz de Versalles, por la que el Reino Unido reconocía a los
recién nacidos Estados Unidos de América.

Al terminar la guerra cada colonia era un Estado independiente, por lo que


Hamilton propuso la creación de un Congreso que redactara una Constitución común para
todos, que entraría en vigor en marzo de 1789. En dicha constitución se reconoce la
separación de poderes.
3. LA REVOLUCIÓN FRANCESA.

CAUSAS

Las causas de un proceso tan complejo han sido objeto de debate permanente
entre los historiadores. En la actualidad existe unanimidad en la consideración de que
existen múltiples causas (económicas, políticas, sociales e ideológicas), pero las
discrepancias surgen a la hora de determinar la importancia de unas u otras. En cualquier
caso las principales causas serían:

● Las ideas de la Ilustración, que al someter al juicio de la razón la naturaleza


y el funcionamiento del Antiguo Régimen, habían despejado el camino para
la posterior aparición de planteamientos cada vez más críticos e, incluso,
revolucionarios.

● El creciente poder económico de la burguesía que aspiraba a un


protagonismo político y social en correspondencia con su papel económico.

● La crisis financiera y política de la monarquía,que, tras el esfuerzo fiscal de


la participación en la guerra de la independencia americana, en apoyo de los
colonos rebeldes, se encontraba al borde de la bancarrota y era incapaz de
hacer contribuir a los estamentos privilegiados.

● La fase de recesión económica que atravesaba Francia, agudizada por una


serie de malas cosechas que había disparado el precio de los alimentos
básicos, provocando el descontento y la desesperación de las masas
populares.

ORÍGENES

Francia atravesaba una importante crisis económica que afectaba a la hacienda


real y limitaba las posibilidades de gobierno de Luis XVI, por lo que algunos ministros
(Turgot) plantearon que los privilegiados comenzaran a pagar impuestos, lo que fue
rechazado por la nobleza que forzó la dimisión de varios ministros y exigió la reunión de
los Estados Generales que no se convocaban desde 1614.

El monarca aceptó la convocatoria de los Estados Generales para mayo de 1789,


en mitad de una crisis de subsistencia que había triplicado el precio del pan lo que
motivaba que la mayoría de los ingresos se destinasen a la compra de productos
alimenticios, provocando el cierre de muchos talleres.

Antes de la reunión se podían redactar cuadernos de quejas. Los privilegiados lo


hicieron defendiendo sus privilegios, mientras el tercer estado presentaba una serie de
quejas y reclamaciones entre las que destacaban la petición de libertades, el final del
régimen feudal y de los privilegios y la igualdad de todos los estamentos.

Por influencias de las ideas ilustradas parte de la nobleza y del clero comenzó a
apoyar las reclamaciones del tercer estado ante la gravedad de la crisis, al considerar que
sólo con reformas profundas se saldría de la situación.

LA ASAMBLEA NACIONAL (1789-1792)

El 5 de mayo de 1789 se reunieron en Versalles los Estados Generales presididos


por el rey. Tradicionalmente cada estamento tenía un voto, por eso los privilegiados
siempre ganaban. La disputa por la forma en que debía votarse supuso el
desencadenante de la revolución, ya que el tercer estado propuso el voto por cabeza, lo
que fue rechazado.

Ante este rechazo el tercer estado se autoproclamó Asamblea Nacional depositaria


de la soberanía, arrogándose la exclusividad en la capacidad de tomar decisiones
políticas y votar impuestos, por lo que el rey anuló todas sus decisiones y los expulsó de
las sesiones.

Tras la expulsión los diputados del tercer estado se reunieron el 20 de junio en la


Sala del Juego de la Pelota, jurando no disolverse hasta tener una constitución. Por eso la
Asamblea pasó a llamarse Asamblea Nacional Constituyente.

Ante esta situación Luis XVI concentró tropas en Versalles y destituyó a Necker,
ministro reformista, la respuesta popular fue la toma de la Bastilla el 14 de julio de 1789,
lugar en el que estaban encerrados los prisioneros políticos.

Los revolucionarios evitaron la vuelta al Antiguo Régimen obligando al rey a


reconocer a la Asamblea y formando una Guardia Nacional encargada de imponer el
orden.

En el verano de 1789 se propagó el rumor de que los nobles estaban organizando


partidas de bandidos para castigar a sus vasallos, por lo que los campesinos dejaron de
pagar impuestos y asaltaron los castillos señoriales destruyendo los títulos de propiedad y
exigiendo la abolición de los derechos feudales.

ASAMBLEA NACIONAL CONSTITUYENTE

Ante esta situación la Asamblea decretó la abolición del sistema feudal, se


suprimieron privilegios y se proclamó la igualdad para pagar impuestos.

Otra medida fue la Declaración de Derechos del Hombre y del Ciudadano del 26 de
agosto, que reconocía las libertades, igualdad jurídica, proclamaba la soberanía de la
nación y la presunción de inocencia.

También destacaron medidas como la constitución civil del clero, la disolución de


las órdenes monásticas y la expropiación de bienes de la Iglesia, lo que suponía que los
clérigos dependían del Estado y no de Roma.

Por último se realizó una constitución, aprobada en 1791, que establecía la


soberanía nacional, encarnada en la Asamblea, elegida por sufragio censitario y la
división de poderes.

ASAMBLEA LEGISLATIVA (septiembre 1791-agosto 1792)


El rey intentó fugarse en junio de 1791 para reunirse en el extranjero con los
aristócratas exiliados y formar un ejército para poner fin a la revolución. Sin embargo, fue
detenido en Varennes y se le obligó a volver a París.

Una vez aprobada la constitución se disolvió la Asamblea Nacional Constituyente


celebrándose elecciones y estableciéndose la Asamblea Legislativa dominada por los
sectores moderados y monárquicos. Fue un periodo turbulento, ya que a la escasez de
alimentos se unió la amenaza del exterior ya que las monarquías europeas apoyaban la
contrarrevolución. Así, la Asamblea terminó declarando la guerra a Austria en abril de
1792, es la época en que apareció La Marsellesa, Francia fue derrotada por Austria e
invadida en parte de su territorio por Prusia.

LA CONVENCIÓN (1792-1794).

Ante la amenaza prusiana las masas populares, encabezadas por los sans
culottes, asaltaron el palacio de las Tullerías el 10 de agosto de 1792. Tras el asalto al
palacio la revolución se radicalizó, suprimiéndose la monarquía y eligiéndose una nueva
asamblea por sufragio universal masculino, que recibió el nombre de Convención y
redactaría una nueva Constitución.

GIRONDINOS

El 20 septiembre de 1792 las tropas francesas derrotaron a las prusianas, ese


mismo día la Convención inició sus sesiones, al día siguiente abolió la monarquía y el 22
proclamó la República. En esta Asamblea destacaron:

• Girondinos, liderados por Brissot, eran revolucionarios moderados.

• Jacobinos o montañeses (Robespierre, Marat y Dantón), partidarios de una


república democrática y de la alianza con los sans-culottes.
• La llanura, burgueses defensores del derecho de propiedad.

Las disputas entre girondinos y jacobinos marcó la etapa de la Convención y la


ejecución de Luis XVI el 21 de enero de 1793 supuso la ruptura definitiva con la
monarquía y la alarma en las otras casas reinantes europeas que declararon la guerra a
Francia.

La situación interna fue empeorando por la sublevación de la región de La Vendée,


la adopción de medidas represivas contra los enemigos de la revolución, creándose el
Comité de Seguridad General, órgano policial; los comités de vigilancia, tribunal de
excepción y el Comité de Salvación Pública, verdadero poder ejecutivo y las exigencias
de un control de los precios de los alimentos por los sans-culottes.

Las masas populares lideradas por Robespierre rodearon la Convención que


aceptó el arresto de 29 diputados, dando paso a la Convención montañesa.

CONVENCIÓN MONTAÑESA

La victoria de Robespierre supuso la aparición de una nueva constitución que, no


entró en vigor por la guerra, contaba con una declaración de derechos más amplia que la
de 1789, la proclamación de la soberanía popular y el derecho de insurrección contra un
gobierno que violara los derechos del pueblo.

Otras medidas fueron la ley de máximos (precios y salarios), la abolición total del
sistema feudal, supresión del culto y un nuevo calendario.

Pero en esta época debido a la amenaza del exterior y de los


contrarrevolucionarios en el interior se instauró el terror, por el que se ordenaron
detenciones y ejecuciones en masa, lo que acarrearía fuertes críticas sobre Robespierre
que respondió con la ejecución de algunos de sus adversarios (Dantón y Herbert), por lo
que sus enemigos decidieron unirse y dieron un golpe de Estado el 27 de julio de 1794,
por el que Robespierre y sus partidarios fueron ejecutados.

LA REPÚBLICA CONSERVADORA (1794-1799).

LA CONVENCIÓN TERMIDORIANA (julio 1794-octubre 1795)

La reacción termidoriana daba paso a una república conservadora dirigida por la


burguesía, que cerró clubes políticos, persiguió a los jacobinos e hizo desaparecer de la
escena política a los sans-culottes, derogó la ley de máximos y liberalizó la economía.

En septiembre de 1795 se volvió a decretar una nueva constitución de carácter


conservador, en la que se establecían dos cámaras, el sufragio era censitario y el poder
ejecutivo recaía en un directorio de cinco miembros.

EL DIRECTORIO (octubre 1795-noviembre 1799)

Con la proclamación de la nueva constitución se disolvía la convención y se daba


paso al directorio, que recurrió constantemente a la fuerza para imponer sus decisiones lo
que finalmente supuso el golpe de Estado del 18 de brumario(9 de noviembre de 1799)
que supuso el fin de la revolución y la llegada al poder de tres cónsules provisionales
(Sieyés, Ducós y Napoleón).

4. LA ETAPA DE NAPOLEÓN (1800-1815)

Napoleón inició una política pacificadora, firmando la paz con Austria y con Reino
Unido, normalizó las relaciones con la Santa Sede mediante la firma de un Concordato y
rápidamente alcanzó una gran popularidad lo que le permitió proclamarse cónsul único y
vitalicio en 1802 y en 1804 el consulado nombró a Napoleón emperador hereditario para
lo cual convocó un referéndum y modificó la constitución.

Las ambiciones territoriales de Napoleón sembraron la inquietud en el resto de


países que formaron una coalición antifrancesa formada por Reino Unido, Rusia y Austria.
Sobre Austria Napoleón obtuvo la victoria de Austerlitz, mientras fue derrotado por los
británicos en la batalla naval de Trafalgar. Por su parte, consiguió otra importante victoria
sobre Rusia en Friedland.

A partir de ese momento decidió la invasión de Portugal, España e Italia


completando su imperio hasta que en 1812 decidió la invasión de Rusia, por romper el
bloqueo comercial contra Inglaterra, que terminó resultando un desastre al perder más de
500.000 soldados en esta campaña y tuvo que retirar soldados de otras zonas como
España. Las fuerzas napoleónicas también fueron derrotadas por las distintas coaliciones
que formaron los británicos en Vitoria (España) y Leipzig (Alemania).

Las tropas aliadas entraron en París en marzo de 1814 y Napoleón se retiró a la


isla de Elba, colocando en el trono a Luis XVIII, que presentó una carta otorgada para
favorecer a los privilegiados del Antiguo Régimen.

Napoleón escapó de Elba y regresó a Francia instaurando entre marzo y junio de


1815 el “imperio de los cien días”, terminó con la derrota final de Napoleón en Waterloo y
su posterior destierro a la isla de Santa Elena.

A pesar de su derrota, Napoleón supuso a medio plazo el final del Antiguo


Régimen, ya que quienes habían participado en las guerras napoleónicas no estaban
dispuestos a ceder nuevamente la soberanía a un monarca absoluto, dejó como herencia
la proliferación de códigos legislativos como el código civil, código penal, mercantil, etc. y
que han sido referencia para otros países.

5. LA EUROPA DE LA RESTAURACIÓN.

Tras la derrota de Napoleón se volvió a restaurar las antiguas monarquías, es un


intento de volver al Antiguo Régimen. Este sistema se diseñó en el Congreso de Viena
(1814-1815) para volver al equilibrio entre las potencias europeas, situándose como figura
clave el canciller austriaco Metternich quien diseñó un nuevo mapa de Europa, por el que
se creó la Confederación Germánica, Prusia, Austria y Rusia aumentaron sus territorios,
apareció el reino de los Países Bajos que unían Holanda y Bélgica y Suecia se
anexionaba Noruega y Finlandia.

También se formó la Cuádruple Alianza (1815) entre Austria, Prusia, Rusia y Gran
Bretaña cuyo fin último era defender el orden creado por el Congreso de Viena, al que se
acabó uniendo Francia.

Otra organización similar fue la Santa Alianza, formada por Rusia, Austria y Prusia,
que tenía como objetivo principal la defensa del absolutismo y podía intervenir en
cualquier lugar de Europa. Su principal intervención se produjo en España en 1823 para
devolver a Fernando VII el poder absoluto.

6. LA INDEPENDENCIA DE LAS COLONIAS AMERICANAS.

La situación que se dio en España durante la Guerra de la Independencia de vacío


de poder, el precedente de la independencia de las colonias americanas, la influencia de
las ideas ilustradas, la Revolución Francesa y el Liberalismo, dieron el último impulso a la
emancipación de las colonias americanas.

El crecimiento económico que había experimentado América durante el siglo XVIII,


propició el desarrollo de un poderoso grupo de criollos, blancos descendientes de
españoles nacidos en las colonias que protagonizarán los movimientos independentistas.
Estos criollos recibían un trato discriminatorio: no podían acceder a los cargos
administrativos y tenían que pagar grandes impuestos por el control que ejercía España
sobre la economía y sobre todo, en el comercio.

El proceso de independencia se inició desde 1808. Esta burguesía criolla no aceptó


la autoridad de José Bonaparte y se formaron Juntas como en España. Tampoco
aceptaron la autoridad de la Junta Suprema y muchas de las colonias se declararon
independientes .

La emancipación surge tras una larga guerra entre españoles y americanos


(también entre americanos pues una minoría permaneció fiel a la metrópoli).

Los focos separatistas más destacados fueron:

♣ El virreinato de la Plata, donde José San Martín proclamó la independencia de la


república Argentina en la ciudad de Buenos Aires.
♣ El virreinato de Nueva Granada y Venezuela a cuyo frente estaba el otro gran líder
independentista, Simón Bolívar.
♣ México.

Las Cortes de Cádiz consideraron territorio español a las colonias y pretendieron


reconocer los derechos de los criollos, pero ya era tarde. La vuelta de Fernando VII
supuso el envío de 10.000 soldados y su intransigencia, la ruptura de las posibles
negociaciones. Aunque pacificó algunas zonas.

♣ Paraguay se había independizado en 1811.


♣ Argentina lo hizo en 1816.
♣ En 1817. San Martín atravesó los Andes, derrotó a los españoles en Chacabuco y
propició la independencia de Chile en 1818.
♣ Bolívar desde el norte derrotó al ejército español en Boyacá (1819) y Carabobo (1821)
y puso las bases para la formación de la Gran Colombia que posteriormente dio origen a
las repúblicas de Venezuela, Colombia, Ecuador y Panamá.
♣ En México, Iturbide lideró el proceso que consiguió su independencia en 1822.
♣ Tras la derrota de Ayacucho en 1824 y la independencia de Perú (el principal reducto
español) y de Bolivia, se acabó la presencia española en la América continental. Sólo
Cubo, Puerto Rico, y las islas Filipinas permanecieron en posesión de la Corona.

Analizando las consecuencias de este proceso podemos hacer la siguiente


valoración:

♣ La creación de repúblicas independientes no solucionó sus problemas.


♣ El sueño de Bolívar de crear una América unida, “Los Estados Unidos de América del
Sur” fue imposible. El poder de los “caudillos militares”, el peso del ejército en la vida
política y el constante recurso a las armas se enquistaron en la sociedad
hispanoamericana.
♣ Los criollos consiguieron la independencia política, el régimen republicano y la libertad
de comercio, pero se olvidaron de los intereses de la población india, negra o pobre,
dando lugar a grandes convulsiones sociales.
♣ El dominio español fue sustituido por el de Gran Bretaña y Estados Unidos, haciendo
efectiva la doctrina Monroe: “América para los americanos”.

7. LAS OLEADAS REVOLUCIONARIAS

En la primera mitad del siglo XIX se produjeron tres oleadas revolucionarias que en
líneas generales se saldaron a favor de los sistemas liberales y nacionales en detrimento
de los sistemas absolutistas.

OLEADA REVOLUCIONARIA DE 1820

Esta primera oleada revolucionaria comenzó en España con el pronunciamiento de


Riego, que dio lugar al Trienio Liberal (1820-1823) y se extendió a Portugal, Grecia y la
América española, que se independizó casi en su totalidad.

Un caso especial fue Grecia, que se encontraba bajo dominio turco y que supuso la
independencia helena, bajo un sistema de monarquía autoritaria.

En líneas generales, esta oleada tuvo una serie de características comunes:

• Antiabsolutismo.
• Nacionalismo.
• Aparición de sociedades secretas (masones, carbonarios, comuneros).
• Importancia del ejército como apoyo revolucionario o como elemento represivo.
• Intervención de la Santa Alianza.

OLEADA REVOLUCIONARIA DE 1830

Comenzó en Francia, con el objetivo de cambiar a los absolutistas borbones, tras


la supresión de la libertad de prensa, redujo la base electoral, disolvió las cámaras y
gobernó mediante decretos, por lo que se produjeron barricadas y el desarrollo de tres
jornadas revolucionarias los días 28, 29 y 30 de julio, obligando a Carlos X a exiliarse.

El proceso revolucionario terminó con la entronización de Luis Felipe de Orleans,


que tenía principios liberales de los que se alejó una vez que llegó al trono

En Bélgica, donde la revolución tenía principios liberales y nacionalistas, supuso la


independencia de Holanda.

En Polonia también se produjo un movimiento revolucionario que pretendía la


independencia de Rusia pero terminó fracasando.

Otros movimientos revolucionarios se produjeron en los Estados alemanes y suizos


con diferentes resultados, en unos casos fracasando y en otros con la aparición de
constituciones liberales.

OLEADA REVOLUCIONARIA DE 1848

Las oleadas revolucionarias de 1848 se debieron a causas económicas (crisis


agrícola y financiera), ruptura de alianzas internacionales y el avance del movimiento
obrero.

La revolución comenzó en Francia, la presión popular en París obligó a abdicar a


Luis Felipe de Orleans y el 24 de febrero se proclamó la Segunda República. El nuevo
gobierno convocó elecciones mediante sufragio universal masculino, abolió la esclavitud,
creó los Talleres Nacionales para dar trabajo a obreros en paro, reconoció el derecho a
huelga y redujo la jornada laboral a 10 horas.

El triunfo moderado en las elecciones de abril paró la revolución, lo que produjo


motines, que determinaron el apoyo de los propietarios a Luis Napoleón como presidente
de la República, cargo que obtuvo en 1849 y en 1851 da un golpe de Estado, se
autoproclama emperador como Napoleón III y asume plenos poderes.

En la península italiana se produjeron peticiones de constituciones, sufragio


universal y el fin de la ocupación austriaca, mientras el papado mantuvo su apoyo al
absolutismo en los Estados italianos.

En los Estados alemanes las revueltas sociales se extendieron a varios territorios


obligando a convocar un parlamento alemán que se reunió en Frankfurt, se proclamó
soberano, elaboró una constitución y discutió los territorios que formarían la futura
Alemania. Pero el rey de Prusia quería realizar su propia unificación y combatió al
parlamento hasta que se disolvió.

En el Imperio austriaco se produjeron movimientos nacionalistas de húngaros y


checos que fueron duramente reprimidos.

Como balance podemos indicar:

• A los movimientos liberales se unieron las ideologías obreristas.


• A partir de este momento y después del fracaso de las revoluciones liberales, se
produjo la división entre movimiento obrero (izquierda) y movimiento nacionalista
(derecha).
• A pesar del fracaso se consiguieron una serie de logros como el sufragio universal
masculino, la abolición de la servidumbre en Austria y el fortalecimiento del
nacionalismo en Italia y Alemania.

8. NACIÓN Y NACIONALISMO.

La nación, en sentido político, aparece durante las guerras napoleónicas al


rechazarse la presencia extranjera en su territorio. La madurez del nacionalismo se
desarrolló en la primera mitad del siglo XIX y desde los distintos grupos nacionalistas
rechazaron el Congreso de Viena que pretendía que naciones y culturas quedaran
sometidas a Estados e imperios.

Una parte de los nacionalismos tuvieron un carácter desintegrador, pretendían


separarse de una unidad política más grande y formar su propio Estado. Aparecieron en
los imperios austrohúngaro, ruso o turco.

A lo largo del siglo XIX sólo tuvieron éxito en Bélgica, que se separó de los Países
Bajos, en Grecia, que se separó del imperio turco y algunos territorios balcánicos.
Otro tipo es el de los nacionalismos unificadores que pretendían unificar en un
Estado-nación (Estado que se identifica con una nación, sin reconocer la existencia de
otras naciones en su interior), diversos territorios independientes o bajo dominio de otro
Estado.

También podemos hablar de nacionalismo de carácter étnico o cultural que


considera una nación cuando existe una cultura, lengua, costumbres e historia comunes y
nacionalismo liberal que aparece por la voluntad de los individuos que se dotan de
constituciones e instituciones para convivir juntos.

UNIFICACIÓN ITALIANA

El proceso de unificación italiana fue planteado en las distintas revoluciones entre


1820 y 1848, a partir de entonces se desarrolló en tres fases:

1ª Fase (1849-1860). Víctor Manuel II de Saboya, rey de Piamonte-Cerdeña dirigió


el proceso de unificación con la ayuda de Cavour, su primer ministro. Se alió con Francia
para luchar contra Austria, que dominaba casi todo el norte de Italia. Piamonte incorporó
la Lombardía.

En 1860 y tras referéndum previo se incorporaron Parma, Módena y Romaña, se


creó un parlamento para todos los territorios unificados denominado Parlamento italiano.

2ª Fase (1860-1865). Se centró en la incorporación de Sicilia tras la actuación de


Garibaldi, además se unieron Las Marcas en el centro y Umbría en el norte de Italia.

3ª Fase (1865-1870). Sólo quedaban por unir el Véneto y los Estados Pontificios.
La guerra entre Austria y Prusia fue aprovechada por Italia para incorporar Venecia. Algo
parecido sucedió con la guerra franco-prusiana, aprovechada para incorporar Roma en
1870.

UNIFICACIÓN ALEMANA

El Parlamento de Frankfurt de 1848 propuso unificar Alemania, pero fue rechazado


por Prusia por su carácter democrático, con lo que buscó crear su propia unificación de
carácter conservador y autoritario.

El proceso de unificación pasó por tres fases:

1ª Fase(1859-1865). En 1834 los Estados alemanes crearon la unión aduanera


(Zollverein), excepto Austria. Prusia, principal Estado alemán, inició un rápido proceso de
industrialización, reforzamiento del ejército y reformas políticas.

En 1862, Bismarck fue nombrado canciller de Prusia, era partidario del aumento de
la autoridad del monarca frente a las tendencias democráticas. En 1864 mantuvo un
conflicto con Dinamarca que terminó con la incorporación de los ducados de Schleswig y
Lauenburg a Prusia.
2ª Fase (1866-1869). Se produce una guerra con Austria que termina con la
incorporación de Holstein tras la batalla de Sadowa en 1866 y la creación de la
Confederación de Alemania del Norte.

3ª Fase (1870-1871). Bismarck firmó una alianza con los Estados alemanes del
sur. Napoleón III se opuso a esta alianza y a la posible unificación posterior, por lo que
Bismarck provocó una guerra con Francia, derrotada en Sedán(1870) y se anexionó
Alsacia y Lorena. Nacía así el Segundo Imperio Alemán (II Reich), cuyo rey sería
Guillermo I y su canciller Bismarck.

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