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La unidad didáctica
Introducción
Esquemas de Unidades Didácticas
Datos de identificación de la unidad
Contextualización - diagnóstico - justificación
U.D. y Currículo
Metodología
Temporalización
Evaluación
Actividades
Bibliografía
Anexos
Los libros de texto Organizadores de una Unidad Didáctica
Análisis fenomenológico
Representaciones y modelos
Errores y dificultades
Materiales y recursos
Historia - epistemología
Una Unidad didáctica: La proporcionalidad
Una nueva U.D. sobre la proporcionalidad
Otras Unidades Didácticas

 Introducción

  Las distintas planificaciones curriculares tienen un último nivel de concreción: las Unidades Didácticas
(U.D.). Como ya se ha señalado en la introducción de este tema, el conjunto de las U.D. conforman las programaciones de
aula, y constituyen los documentos en los que el profesor concreta, principalmente, los contenidos, objetivos, actividades,
recursos, metodología, evaluación y temporalización para un período determinado de enseñanza y para una serie de
conceptos.

No puede entenderse esta colección de U.D. como elementos aislados. Cada U.D. tiene relación con el resto de las U.D. y
tiene su ubicación concreta dentro de la programación de aula. Toda programación de las actividades ha de realizarse
partiendo:

 De las ideas pedagógicas del Proyecto Educativo, que es el marco donde se sitúan las líneas generales del trabajo
pedagógico del centro.
 De la secuenciación de contenidos, la opción metodológica, los criterios de evaluación, el material, entre otros
aspectos, definidos en el Proyecto Curricular de Área, de Ciclo y de Centro.

(Antúnez y otros, 1995)

Por lo tanto, antes de que los profesores se centren en la elaboración de las U.D. han tenido que realizar un trabajo en otro
nivel de concreción, en cuanto a la secuenciación de los contenidos, determinación de los objetivos y de la metodología
general y sobre las intenciones educativas, recogidos todos ellos en el Proyecto Curricular de Área, que forma parte del
P.C.C. De manera que las U.D. deben responder a lo que ya se ha determinado sobre estos aspectos.

En resumen, la U.D. es un conjunto articulado de actividades que constituye un proceso completo de enseñanza-aprendizaje
susceptible de ser evaluado globalmente (Puigdellívol, 1993), que tiene como elementos básicos:
o contenidos,
o objetivos,
o estrategias metodológicas,
o recursos,
o actividades de enseñanza y aprendizaje,
o actividades para la evaluación.

Las aportaciones del Departamento  al Proyecto Curricular de Centro deben haber señalado las directrices generales que
marcarán la enseñanza de un curso o un ciclo en esta área. Se trata ahora, de diseñar las U.D., es decir, de ser aún más
concretos, y desglosar el trabajo diario en clase, en definitiva, de responder a la pregunta diaria del profesor: "¿qué voy a
tratar hoy en clase?". Elaborar U.D. es quizás, una de las tareas más importantes e interesantes que deben realizar los
docentes, ya que en ellas se plasman sus ideas, enfoques y valores con respecto a su materia. Además, es una labor que está
siempre abierta, ya que toda U.D. es susceptible de mejora o cambio, con lo cual se llega a la constante reflexión e
investigación de los profesores sobre su labor educativa.

La elaboración de unidades didácticas puede convertirse en un pretexto o estrategia


para el desarrollo profesional basado en la investigación realizada por los propios
profesores en torno a su propio trabajo.

Area, 1993

3.2. Esquemas de Unidades Didácticas

Aunque anteriormente se han nombrado algunos elementos básicos que debe contener una U.D., no existe acuerdo unánime
sobre los mismos y el modelo que se escoja depende de los profesores encargados de elaborarlos. En este apartado
recogemos algunas ideas generales y un esquema que pueden servir como guía a la hora de diseñar las U.D. Sólo pretende
ser eso, una guía, y no debe entenderse como algo cerrado o de cumplimiento estricto. Hemos intentado unificar los
esquemas de propuestas de U.D. de distintos trabajos, en concreto de los trabajos de Antúnez y otros (1995), Area (1993) y
del Grupo Aleph (1995). Evidentemente, dicho esquema puede ser ampliado o modificado, desglosando o eliminando
algunos de los epígrafes.

3.2.1. Datos de identificación de la unidad


 Título de la Unidad.
 Autores. Características del grupo de elaboración.
 Área o materia.
 Nivel educativo y ciclo.
 Centros y localidades en la que se va a desarrollar o se ha desarrollado la U.D.

3.2.2. Contextualización - diagnóstico - justificación

o Justificar por qué se ha seleccionado esta Unidad Didáctica.


o Exponer lo que se pretende avanzar.
o Relación de la U.D. con el resto de la programación.

En este apartado se realiza una introducción a la U.D., explicando por qué se ha elegido un determinado contenido como
núcleo para elaborar la unidad.

Se pueden recoger también los aspectos históricos, psicopedagógicos, epistemológicos y sociológicos del tema a tratar.

Por otra parte, es aquí donde situamos la U.D. en un ciclo y curso concreto.
Asimismo, se describen las características sociales y evolutivas de los alumnos y los conocimientos previos que se les
suponen y el interés de la unidad con respecto al conocimiento que en un futuro deben adquirir, ya que una unidad debe
tener en cuenta las anteriores y las futuras U.D.

3.2.3. U.D. y Currículo

o Relación de la U.D. con el currículo.


 Relación de la U.D. con el Proyecto Educativo de Centro.
o Relación de la U.D. con el Proyecto Curricular de Centro.
o Organización, secuenciación y estructura de los contenidos.
o Objetivos a conseguir con la U.D.
o Criterios de evaluación.

Se sitúa la U.D. dentro de la legislación editada por el MEC y las correspondientes Consejerías de Educación autonómicas,
en el Proyecto Educativo de Centro y en el Proyecto Curricular de Centro. Además, en este apartado se detalla la relación
de la U.D. con el currículo, en cuanto a objetivos y contenidos. Evidentemente, no tiene por qué señalarse sólo objetivos
que aparezcan en los currículos oficiales, el profesor puede añadir tanto los objetivos como contenidos que crea necesarios
tratar con la unidad.

Entre otros aspectos debe señalar:

o Los objetivos de la U.D., detallando los objetivos de etapa, de área y de ciclo que se pretenden conseguir.
o Selección, análisis y organización de los contenidos de la U.D., de carácter conceptual, procedimental y
actitudinal. Los contenidos pueden pertenecer a distintos bloques de contenido.

3.2.4. Metodología

o Características más relevantes de la metodología de enseñanza que se va a seguir en el aula.


o Medios y materiales que se prevee utilizar.
o Cómo trabajarán los alumnos en clase.
o Tipos de actividades propuestas.

Debemos describir la planificación de la metodología de trabajo en el aula, por ejemplo, las estrategias de enseñanza que se
van a desarrollar: por descubrimiento o exposición del profesor.

Se detallará en este apartado cómo se va a organizar el aprendizaje: trabajo en grupos o individual, en el aula o en algún
momento fuera de ella, etc.

Los tipos de actividades que se plantearán: cerradaso o de respuesta única o bien abiertas, proyectos de investigación, etc.

Además, se indicarán los medios y recursos didácticos que se van a utilizar: libros, materiales concretos y así como la
organización del entorno de aprendizaje: aula, laboratorio, etc.
3.2.5. Temporalización

 Previsión temporal del desarrollo de la U.D.

Es importante hacer una previsión del tiempo que llevará el desarrollo de cada una de las partes de la U.D., no sólo de las
actividades, sino de la evaluación. Evidentemente, esta previsión puede no responder a la realidad una vez llevada a la
práctica.

3.2.6. Evaluación 

Evaluación de los alumnos

o Cómo se va a evaluar a los alumnos.


o Instrumentos o técnicas que se utilizarán para realizar la evaluación.
o Momentos del desarrollo de la unidad en que se realizará la evaluación.
o Evaluación de la propia U.D.

Evaluación de los alumnos

Este apartado debe recoger básicamente el cómo, cuándo y qué se va a evaluar. De forma detallada se debe exponer el plan
de evaluación.

Se necesita, en primer lugar, tener unos criterios claros de lo que se quiere evaluar de los alumnos. Estos criterios, algunos
de los cuales aparecen propuestos en los documentos oficiales, determinan, en parte, la manera en que se realizará la
evaluación. Es por ello por lo que es útil detallar los criterios de evaluación del área, de ciclo y de curso. Estos criterios
pueden haber sido detallados en el apartado de U.D. y currículo.

Entre otras aspectos se debe detallar:

o cómo va a realizarse la recogida de la información,


o en qué momento del desarrollo de la U.D. se llevará a cabo la evaluación,
o los instrumentos de evaluación: observación en clase, cuaderno del alumno, autoevaluación, encuesta,
prueba diagnóstica, trabajos de investigación, diario del profesor, informes de los grupos, etc.
o desarrollo de la evaluación:

inicial-diagnóstica, continuo-formativa, final-sumativa.

Es importante considerar también la autoevaluación y la coevaluación. Estas modalidades permiten al alumno participar en
la evaluación y desarrolla una capacidad a la que se hace referencia en esta etapa, que es la autonomía del alumno y su
implicación responsable.

Evaluación de la U.D.

La U.D. no queda completa si no se expone el método de evaluación de la misma.

Evaluar la U.D. supone analizar en qué medida lo desarrollado en el aula se ha ajustado a la planificación realizada y cuáles
fueron lo problemas más destacables que se encontró cada profesor en su clase y cómo los solucionó.
Como todos los aspectos relacionados con la evaluación, puede resultar una labor compleja. Algunas ideas para evaluar la
U.D. son:

o realizar encuestas a toda la clase, entrevistas con los alumnos o discusión con toda la clase sobre lo que
les ha parecido la U.D.,
o llevar un diario donde se recojan las incidencias en clase durante el desarrollo de la U.D.: motivación,
incidencias concretas en clase, dificultades de los alumnos frente a determinados conceptos o actividades,
o esperar un determinado nivel de éxito en la evaluación de los alumnos.

3.2.7. Actividades

 Actividades deben realizar los alumnos.

Es quizás, la parte más importante de la U.D., ya que aquí aparecen detalladas las actividades que debe realizar diariamente
el alumno en clase. Es adecuado incluir también las explicaciones que debe dar el profesor.

Es conveniente señalar en este apartado las actividades que se proponen para atender a la diversidad del alumnado. En
general, puede tratarse a la diversidad proponiendo actividades en una variedad de contextos no matemáticos que puedan
ser motivadores para los alumnos de distintos niveles, y también secuenciando adecuadamente las actividades, proponiendo
además, actividades básicas y de refuerzo, o bien de ampliación y profundización.

La Sociedad Madrileña de Profesores de Matemáticas "Enma Castelnouvo" (1998) propone como métodos para atender a la
diversidad en las clases de matemáticas el uso de materiales y recursos variados, los agrupamientos flexibles de los
alumnos, seguir un enfoque práctico de la enseñanza, diversificar también los métodos de evaluación y por supuesto,
realizar adaptaciones curriculares.

Para atender a la diversidad se pueden proponer actividades variadas, que persigan diferentes objetivos y que cambien en
función del momento del desarrollo de la unidad en las que se planteen.

o Actividades de introducción y motivadoras.


o Actividades iniciales y de diagnóstico.
o Actividades de aprendizaje: representan el núcleo de la U.D. Se integran contenidos
conceptuales, procedimentales y actitudinales.
o Actividades destinadas a la comprensión de conceptos.
o Actividades destinadas a que los alumnos vean la utilidad de los contenidos de la U.D.
o Ejercicios de adquisición o mejora de destrezas.
o Trabajos prácticos.
o Proyectos de trabajo.
o Actividades de ampliación.
o Actividades de evaluación.
o Actividades de entretenimientos matemáticos.

3.2.8. Bibliografía

Listado de aquellos documentos, libros y artículos que se han utilizado como fuentes de referencia y de consulta, o que se
propone utilizar por los alumnos.
3.2.9. Anexos

Aquí se incluirá todo lo que se considere oportuno: actividades, materiales utilizados, elaborados, actas, plantillas de
observación para la evaluación, medios, etc.

3.3. Unidades Didácticas de la materia elegida

En este apartado nos centramos en analizar la bibliografía sobre U.D. en el área de la materia elegida. Lo que pretendemos
es mostrar parte de la información que puede encontrarse publicada sobre U.D. de esa materia, de forma que sirva como
recurso y modelos para otras U.D. y de contraste sobre distintos enfoques en los contenidos .

2.3.1. Los libros de texto

El punto de partida al elaborar U.D. por parte de muchos profesores, aparte del propios conocimientos, y de los materiales
curriculares y recursos que posea sobre el tema, suele ser el análisis de los Proyectos Curriculares y las U.D. propuestas en
los libros de texto de las distintas editoriales. En ocasiones, los profesores encuentran adecuadas estas propuestas para el
desarrollo de los contenidos, y centran su trabajo de aula estos libros. Pensamos que no es esta la tónica que debe
predominar y que los libros de texto deben ser un elemento bibliográfico más para la obtención de las U.D. adecuadas para
nuestros alumnos. En esta línea indica Puigdellívol (1996, pág. 52) y coincidimos con él:

Tradicionalmente, los libros de texto han sido referencia obligada para la mayoría de
escuelas y en muchos casos la programación de aula se supeditaba a ellos por
completo. Este segundo elemento, la supeditación de la programación, convierte al
libro de texto en un instrumento poco aconsejable. Pero cuando el libro de texto es
utilizado como una herramienta de trabajo a partir de la coincidencia entre su
estructura y la hipótesis de aprendizaje del maestro, y éste completa o sustituye los
aspectos que no se ajustan, entonces tiene una utilidad indudable.

Si observamos solamente los libros de texto de los alumnos nos podemos preguntar qué es lo que ha cambiado en los libros
de texto del anterior sistema educativo al actual. Otra pregunta que nos puede surgir es: ¿dónde están las U.D. en los libros
de texto?. Una lectura rápida puede llevar a concluir que se nos presentan los temas como se hacía en el anterior sistema.
Sin embargo, sí hay cambios. Podemos observar un nuevo enfoque curricular. En mayor o menor medida, en los libros de
texto encontramos algunos elementos e ideas didácticas promulgadas en la reforma actual en cuanto a contenidos, enfoques
en la enseñanza, tratamiento a la diversidad y uso de temas transversales. En este último aspecto, es importante señalar que
el uso de temas transversales en matemáticas permite dar un nuevo enfoque a las mismas, ya que son una nueva y rica
fuente de contextos para las actividades.

Por otro lado, llama especialmente la atención en los libros del actual sistema, aunque no en todos, el importante esfuerzo
de adaptación a las nuevas tendencias en la enseñanza de las matemáticas y de las orientaciones didácticas indicadas en los
currículos oficiales. Entre estos cambios destacamos: el dedicar apartados en cada U.D. al uso de la calculadora, a la
resolución de problemas, a intentar conectar cada tema con sus aspectos históricos y con la realidad, propuestas de
actividades utilizando distintos materiales didácticos concretos: papel punteado, geoplanos, fotografías, etc.

Las preguntas anteriores también encuentran parte de sus respuestas en cuanto nos acercamos a los libros y materiales para
el profesor que facilitan las distintas editoriales. En ellos, ya no sólo se indican las orientaciones didácticas y los objetivos
de los distintos temas, sino que la propia editorial, o más bien, el equipo profesional encargado de elaborar el currículo del
área de Matemáticas, presenta su programación de aula para la Secundaria. En definitiva, las editoriales han tenido que
tomar sus propias decisiones en cuanto a secuenciación de contenidos, metodología, o en el énfasis en determinados
aspectos curriculares que les interesen.

Centrándonos en el tema que nos ocupa sobre las programaciones de aula, es en los materiales del profesor donde
encontramos la concreción que ha realizado cada editorial y la toma de decisiones en cuanto a la selección y secuencia de
objetivos y contenidos, la metodología educativa, la evaluación, el cómo tratar a la diversidad, entre otros aspectos, en
definitiva, todos los elementos que deben contener las U.D. y que ya han sido suficientemente desglosados a lo largo de
este tema. Tomando como ejemplo alguna editorial, se establecen los criterios metodológicos en cuanto a las actividades
que se presentan a los alumnos en las distintas U.D., donde vemos reflejados los aspectos comentados en cuanto al cambio
en la orientación de los libros de texto. Así, establecen en su Proyecto Curricular de Área que sus U.D. están elaboradas
siguiendo una serie de puntos:

 Se plantea una situación problemática de la vida cotidiana cercana a los estudiantes, que pretenden conectar con
ellos y promover actitudes positivas hacia el aprendizaje.
 Se actualizan los conocimientos previos directamente relacionados con los contenidos de la unidad
 En el desarrollo de cada contenido, se parte del entorno del alumno y se promueve la observación de situaciones
concretas para obtener conclusiones matemáticas o preparatorias de conceptos matemáticos.
 Atendiendo al carácter marcadamente procedimental de las matemáticas, en el que inciden con tanto énfasis los
currículos, se desarrollan técnicas y estrategias de resolución de problemas y se promueve la utilización y
aplicación de las mismas.
 Además de las conexiones interdisciplinares que se establecen con otras áreas, a través de una rica variedad de
contextos, se aporta una visión cultural de las matemáticas. Para ello se transcriben apuntes biográficos de
grandes matemáticos, aplicación de los contenidos matemáticos a la ciencia y a la técnica, origen histórico de los
símbolos, etc.

Proyecto Educativo S.M.

Encontramos diversidad de enfoques en las editoriales. Así, por ejemplo, hay editoriales que plantean dos alternativas de
Proyecto Curricular de Área e, para que los profesores elijan la que consideren más adecuada a sus alumnos.

3.3.2. Organizadores de una Unidad Didáctica

Cuando elaboramos las U.D. seleccionamos los contenidos a trabajar en cada una de ellas. Sin embargo, al seleccionar los
objetivos, la metodología y la evaluación, puede que no distingamos entre las distintas unidades. Eso lleva a que las U.D. se
limiten a una secuenciación de los conceptos, procedimientos y actitudes, y a una serie de generalidades sobre los
objetivos, metodología y evaluación. Es decir, que se puede llegar a que las U.D. se distingan sólo por su contenido y no
por los otras tres componentes.

Es por ello por lo que se plantea la necesidad de que los profesores puedan utilizar otras herramientas curriculares, distintas
de la simple secuenciación de contenidos, para elaborar las unidades. Y a esta nueva herramienta la denominan
organizadores del currículo, que son los conocimientos que utilizamos para secuenciar los contenidos, diseñar las
actividades, preparar la evaluación, etc. Los organizadores son una serie de conocimiento que sirven de base para la toma
de decisiones de las U.D. y el enfoque de enseñanza de los distintos tópicos matemáticos. Los organizadores que se
proponen para analizar los conceptos matemáticos son los siguientes:

o Análisis fenomenológico de los conocimientos implicados.


o Evolución histórica y epistemológica de cada concepto.
o Representaciones, aspectos visuales y simbólicos.
o Errores, dificultades y obstáculos de los alumnos en los distintos tópicos
o Materiales y recursos que se pueden utilizar.
o Bibliografía básica para cada tema.

3.3.2.1. Análisis fenomenológico 

La fenomenología didáctica de los conocimientos estudia aquellos fenómenos para cuya comprensión y dominio se
elaboraron los correspondientes conocimientos matemáticos. Por ello, conviene conocer cuáles son los fenómenos que
están en la base de los contenidos tratados en cada una de las unidades. Las situaciones en las que se presentan y emplean
los diferentes conceptos y procedimientos y las funciones que en cada caso se destacan, constituyen una dimensión
importante para el análisis y tratamiento didáctico del conocimiento matemático.
Conexiones de las matemáticas con las ciencias experimentales, con el arte, la economía y otras ramas del conocimiento,
las diferentes utilizaciones que se hacen de los conocimientos matemáticos, son otros tantos fenómenos que conviene
considerar en el momento de seleccionar y organizar los contenidos y de diseñar las secuencias metodológicas, ejemplos,
motivaciones y materiales para su transmisión.

3.3.2.2. Representaciones y modelos

Se refiere a los aspectos visuales y simbólicos del conocimiento matemático y de su aprendizaje, representaciones
utilizadas para cada sistema conceptual, junto con algunas de las modelizaciones.

Mediante las representaciones las personas organizan su información sobre un concepto para poder pensar sobre ellos,
expresar su comprensión, y utilizarla en situaciones y problemas prácticos o en situaciones escolares convencionales. Los
modelos sirven para la presentación y desarrollo de un determinado concepto; también las representaciones matemáticas se
utilizan para modelizar fenómenos naturales o sociales.

3.3.2.3. Errores y dificultades 

Es importante que el profesor conozca los resultados de las investigaciones realizadas en torno a las dificultades de
comprensión durante la enseñanza y aprendizaje de los contenidos matemáticos correspondientes. Uno de los datos que
surgen en estos estudios son los errores de los alumnos, tanto en los aspectos conceptuales como en los procedimentales,
así como los problemas u obstáculos de aprendizaje que se detectan o plantean para cada concepto.

Hay determinados conocimientos que lleva más tiempo comprender o en los que hay un mayor número de alumnos que no
comprenden correctamente; estos conocimientos son los que consideramos difíciles o de mayor dificultad. Al realizar la
programación de un tema el profesor debe disponer de información sobre cuáles son aquellos puntos que van a tener una
dificultad especial, así como aquellos errores o conocimientos insuficientes que sus alumnos pueden encontrar. No sólo es
necesaria esa información sino que también el profesor debe saber cómo diagnosticar los errores de sus alumnos y qué
tratamiento debe seguir con ellos para remediar sus deficiencias. Aunque no es mucho lo que se sabe sobre técnicas
correctivas, sí es conveniente disponer de información ya contrastada.

3.3.2.4. Materiales y recursos

Los materiales son concreciones de modelos realizadas por casas comerciales o por el profesor. Los recursos proporcionan
situaciones, o ayudas para trabajar en una situación, en las que el concepto estudiado se emplea significativamente y
permite desarrollar algunos procedimientos. La noción de recurso es más amplia e imprecisa, ayuda a evocar el concepto y
a trabajar sobre él empleándolo en situaciones prácticas. Dentro de los recursos actuales encontramos los materiales
derivados de las nuevas tecnologías de los que conviene hacer mención explícita cada vez que resulte adecuado.

3.3.2.5. Historia - epistemología 

Tiene por finalidad señalar algunos momentos a lo largo de la historia de la matemática en los que el conocimiento
matemático considerado tuvo un desarrollo especial o desempeñó algún papel de interés.

La información histórica puede servir en la programación para motivaciones, ejemplos y también para proponer algún
ejercicio curioso. Los alumnos se sienten especialmente interesados cuando se les proporciona información adecuada sobre
historia de las matemáticas y los antecedentes de un contenido. Se trata de poner el énfasis en la dimensión cultural e
histórica del conocimiento matemático, pero no se pretende hacer un estudio exhaustivo y completo de la evolución
histórica de cada uno de los tópicos. La revisión de algunas dificultades históricas en la construcción de un determinado
concepto puede servir de aliciente a los estudiantes para superar ellos mismos tales limitaciones.

Una vez analizada la información de los distintos organizadores se pueden establecer los criterios precisos para estructurar
y organizar las U.D. y para establecer los objetivos, contenidos, metodología y evaluación previa, ubicación y de los
tópicos en los currículos oficiales.

3.3.3. Una Unidad didáctica: La proporcionalidad


El MEC presenta una U.D. que puede servir como modelo a los profesores. Ahora se muestra un esquema de la misma.
Obsérvese que el enfoque que sigue es similar al expuesto en el apartado anterior.

Esquema de la Unidad Didáctica: La proporcionalidad

Esta unidad está desarrollada para alumnos de 3.º de la ESO y trata de introducir los ideas de proporcionalidad numérica y
geométrica. Las actividades tienen distintas fases.

1.ª fase: revisar lo que se conoce.

2.ª fase: se avanza sobre dos contextos, el geométrico (semejanza) y el aritmético y gráfico.

3.ª fase: fase de cierre, pone a prueba los conocimientos adquiridos.

4.ª fase: actividades de extensión para los alumnos que lleven un ritmo de aprendizaje más rápido.

Parte 1. Diseño de la Unidad Didáctica

 Introducción

 Situación de la U.D. en un curso. Resumen de lo que el alumno ya conoce del tema.


 Explicación de las fases de la U.D.: revisión de lo que se conoce, actividades de avance, actividades de extensión.

 La U.D. en el marco del Proyecto Educativo de Centro

 Tipo de centro donde se desarrolla la U.D., características de los profesores y de los alumnos.
 Recursos didácticos que se poseen en el centro.
 Normas del PEC que inciden en la forma de trabajo de la U.D.

 La U.D. en el marco del Proyecto Curricular de Centro

 Momento del ciclo en el que se va a desarrollar la U.D.


 Conocimientos previos que tienen los alumnos sobre el tema
 Lo que se pretende avanzar con el desarrollo de la U.D.
 Pautas para organizar el trabajo en el aula.
 Estructura y organización de las actividades.
 Tratamiento de la diversidad en el aula
 Lo que queda para después.

Vinculación de la U.D. con el Currículo

 Objetivos generales del área que inciden en la U.D.


 Contenidos de la U.D.: hechos y conceptos; procedimientos; actitudes, valores y normas.
 Objetivos didácticos: enumera lo que se pretende avanzar en la U.D. (no tienen por qué estar enumerados en el
currículo.

Parte 2. Desarrollo de la Unidad Didáctica

 Actividades de enseñanza y aprendizaje.

 Descripción de las actividades.


 Primera fase: diagnóstico inicial y puesta en situación

– Introducción
– Actividades

 Segunda fase: líneas de avance

– Introducción

– Actividades

Todas las actividades constan de una orientación para el profesor y la propuesta para el alumno.

 Evaluación de la U.D.

 Esquema del proceso de evaluación

Evaluación del alumno

Evaluación del funcionamiento de la U.D.

 Evaluación del alumno

 Evaluación inicial: observación del profesor


 Evaluación formativa: del proceso de aprendizaje: recogida de información en un diario de clase, charlas con el
alumno.
 Evaluación sumativa: al final del desarrollo de la U.D., utilizar las actividades de la última fase como actividades
de evaluación. Se presenta una escala de valoración de aprendizajes para facilitar las observaciones.
 Autoevaluación del alumno: informe sobre la opinión del alumno de aspectos de la U.D.
 Evaluación del trabajo en equipo: informes de los grupos de trabajo sobre el trabajo en la U.D.

 Evaluación del funcionamiento de la U.D.

 Aspectos relativos al diseño de la U.D.


 Interacción profesor-alumno

Parte 3. Anexos

 Actividades de extensión

3.3.4. Una nueva U.D. sobre la proporcionalidad

En el capítulo 3 del libro La Educación Matemática en la Enseñanza Secundaria, Marín dedica un capítulo a exponer su
enfoque de cómo elaborar una U.D. El tópico elegido es la proporcionalidad. Marín ejemplifica sus ideas sobre la
programación de U.D. utilizando el ejemplo de la proporcionalidad.

La primera cuestión que se plantea en este trabajo es que normalmente para seleccionar y organizar los contenidos
matemáticos se suele optar por la organización matemática de los contenidos. Por ejemplo, la proporcionalidad se
enmarcaría en la enseñanza numérica y la proporcionalidad geométrica con las lecciones de triángulos o la semejanza de
polígonos.

Marín propone como criterios de selección: la información obtenida por las corrientes actuales de la Educación
Matemática. Por ejemplo, aquellas que indican que:

 las matemáticas deben ser útiles para desenvolverse en la realidad,


 las matemáticas son un medio de comunicación,
 las matemáticas presentan un contenido capaz de desarrollar capacidades cognitivas.
La secuenciación de los contenidos estará en función de aquellos que permitan desarrollar las capacidades anteriores.

3.3.5. Otras Unidades Didácticas

Otras U.D. elaboradas en el área de matemáticas y que pueden ser tomadas como referencia son:

o Hacia La Probabilidad (Bello, Marrero y Trujillo, 1994).


o Atención: bip, bip... Las gráficas hablan. (Grupo ALEPH, 1995)
o Unidad Didáctica: Astronomía (Aguiar, y Martín, 1993).
o Perímetros y áreas. (Sánchez y Calviño, 1993).
o Múltiplos y divisores (León, 1996)
o Estudio de dos números irracionales relevantes:  y el número áureo (Velázquez, 1996).
o Generalizaciones numéricas (Velázquez, 1996).

Todas ellas siguen esquemas de elaboración que se engloban en los ya comentados.

 Hacia La Probabilidad (Bello, Marrero y Trujillo, 1994).

Esta U.D. es útil para la introducción de la probabilidad. Está enfocada para alumnos de 3.º y 4.º de la ESO. El
planteamiento de la unidad es llegar a la noción de probabilidad a través de una metodología en primer lugar, lúdica y
manipulativa, sigue una fase de cuantificación y termina con la expresión formal de las probabilidades.

Las actividades están secuenciadas de la siguiente forma:

1.ª fase: Puesta en situación. Precisión del vocabulario.

2.ª fase: Manipulación y comparación de resultados de distintos juegos.

3.ª fase: Medida de la probabilidad. La probabilidad es un número.

4.ª fase: La simulación.

5.ª fase: Introducción a la probabilidad mediante la regla de Laplace.

6.ª fase: Extensión.

 Atención: bip, bip...Las gráficas hablan (Grupo ALEPH, 1995)

La U.D. está pensada para alumnos de 3.º y 4.º de la ESO e introduce el concepto de función. De nuevo, el enfoque inicial
es intuitivo, trata sobre la introducción del concepto de función, dominio y recorrido, máximos, mínimos y puntos de
inflexión de una gráfica, concavidad y convexidad, gráficas periódicas. Las actividades están orientadas a que los alumnos
realicen traducciones entre distintas representaciones: situación real, tabla y gráfica.

 Unidad Didáctica: Astronomía (Aguiar y Martín, 1993)

U.D. pensada para 4.º de la ESO que aporta interesantes actividades sobre Astronomía, campo sobre el cual no existen
demasiadas actividades ya elaboradas y preparadas para llevar al aula directamente. Esta unidad, utilizando como elemento
motivador la astronomía y conectando con el área de Ciencias de la Naturaleza, trata muchos aspectos matemáticos de
Secundaria, entre ellos: el uso de la notación científica, las medidas astronómicas, el sistema sexagesimal, el trabajo con
escalas y trigonometría.
 

 Perímetros y áreas (Sánchez y Calviño, 1993)

Esta es quizás la más escueta en cuanto a desarrollo de las unidades que comentamos. La U.D. está dirigida a alumnos de
2.º de la ESO y trata los conceptos de área y perímetro de figuras básicas: triángulo, trapecio, polígono regular,
circunferencia y círculo. Las actividades propuestas parten de materiales concretos: cuerdas figuras para teselar, geoplanos,
etc., con el fin de conseguir que los alumnos descubran o comprueben las fórmulas de las distintas figuras.

 Múltiplos y divisores (León, 1996)

La U.D., no desarrollada en su totalidad, presenta el estudio de múltiplos y divisores para el primer año de la ESO. Además
se abordan: los criterios de divisibilidad, números primos y compuestos, máximo común divisor, mínimo común múltiplo y
situaciones problemáticas.

 Estudio de dos números irracionales relevantes:  y el número áureo (Velázquez, 1996)

La U.D. está diseñada para 3.º de la ESO y en ella se estudian los números irracionales, centrándo las actividades en el
número  y en el número áureo. Las razones para dedicar una U.D. al estudio de estos dos números, con palabras de la
autora, son:

...dada su relevante significación, tanto en el cálculo geométrico básico ( ) como en numerosos


aspectos de la naturaleza, culturales y artísticos ( el número áureo)...

Se incluyen actividades manipulativas, con uso de calculadora, visión de vídeos y de diapositivas y comentarios de textos
que hacen referencias a dichos números

 Generalizaciones numéricas (Velázquez, 1996)

U.D. para 3.º o 4.º de la ESO, que muestra una secuencia de actividades para trata con los alumnos las generalizaciones
numéricas. Las actividades, en su mayoría, parten de una información visual (real, gráfico, dibujo concreto) susceptibles de
ser generalizadas, y se realizan las preguntas oportunas para que los alumnos encuentren las generalizaciones numéricas.

 Lectura e interpretación de gráficas cartesianas y estadísticas (Socas y otros, 1996)

En este libro se aborda el estudio del bloque de contenido "Organización de la información" para Educación Primaria, y
pueden encontrase tres ejemplificaciones de U.D. para los ciclos 6-8, 8-10 y 10-12 referentes a Lectura e interpretación de
gráficas cartesianas y estadísticas. Aunque se trata de tres U.D., las actividades propuestas para los alumnos tienen un
enfoque común: primero se ofrece una información mediante lenguaje: gráfico, numérico o verbal, y a continuación se
realizan cuestiones adecuadas para que los alumnos hagan una lectura e interpretación de la información que están
recibiendo.

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