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Modulo 1

1. ¿Qué se entiende por “historia”?

En breves palabras, se define a la historia como “…un proceso continuo de


interacción entre el historiador y sus hechos, un diálogo sin fin entre el presente y el
pasado.” (Carr E.H., 1961, p.40).

Cabe agregar que, en el transcurso del texto, se menciona que los historiadores se
encargan de la recopilación de hechos, considerados por ellos como “hechos
históricos”, para luego de ser analizados y procesados, disponiéndose de una
manera conveniente para el mismo. Para el autor, es un proceso considerado como
selectivo por el historiador, por lo que se entiende que no siempre se ofrece una
transparencia total a la hora de investigar sobre la historia.

La redacción de la historia, aclara, se ve fuertemente influenciada por el contexto


de la época en la que fue documentada.

“Los que conocemos como hechos de la historia medieval han sido casi todos
seleccionados para nosotros por generaciones de cronistas que por su profesión se
ocupaban de la teoría y la práctica de la religión y que por lo tanto la consideraban
como algo de suprema importancia…”. (Carr E.H., 1961, p.18).

2. ¿Existe la verdad histórica?

No exactamente, si bien siempre se prioriza la necesidad de utilizar datos


irrefutables a la hora de recaudar información histórica para su posterior
documentación y registro, el historiador tiene el poder de seleccionar y filtrar lo que
más le parezca relevante con libertad de juicio propio. Esto quiere decir que,
quienes investiguen o lean fragmentos y documentos recopilados por distintos
historiadores, estarán observando la interpretación de los hechos propia de cada
uno, por lo que la información podría verse parcializada por este tipo de filtraje
previo.
“La historia consiste en un cuerpo de hechos verificados. Los hechos los encuentra
el historiador en los documentos, en las inscripciones, etcétera (…) El historiador
los reúne, se los lleva a casa, donde los guisa y los sirve como a él más le apetece.”
(Carr E.H., 1961, p.12).

3. ¿Hay un solo modo de estudiar la historia? ¿Cuáles son las diferentes


formas de enfrentar el hecho histórico?

A grandes rasgos, hay 2 maneras de estudiar la historia. Sencillamente, el primero


se avoca al uso exclusivo de datos fuertes y verosímiles, dándoles total importancia
y relevancia, sin poner nada en tela de juicio ni cuestionarse posibilidades, siempre
y cuando ciertos datos sean reales y puedan ser comprobados.

Otra manera de estudiar la historia es ocuparse de crear una interpretación propia


de los hechos, una vez estos hayan sido analizados previamente. De esta manera,
se inclina hacia una apreciación un tanto artística, asimilándose con novelas,
poemas u obras teatrales, pero reforzadas con un trasfondo de documentos o
información de carácter histórico.

“La escritura de la historia, entonces, inevitablemente expresa una perspectiva en


parte predeterminada por las mismas preguntas que se hacen. Una serie distinta de
preguntas bien puede producir una concepción distinta del pasado. Dada
semejante variabilidad, es desmesurado, según los filósofos analíticos de la
historia, dar una interpretación definitiva al pasado.” (Jeff Browitt, 2004, p. 2).

4. El trabajo del historiador comienza con la búsqueda de datos para su


análisis. ¿Cuáles debe considerar como hecho histórico?

El historiador, dentro del filtraje de datos que mencionamos anteriormente, debe


clasificar los hechos de una manera tal que su relevancia tenga, en principio,
sentido común a la hora de ser registrado. El historiador es quien decide finalmente
lo que al lector le interesa saber.
“Nuestra imagen de Grecia en el siglo V antes de nuestra era es deficiente, y no
sobre todo por haberse perdido tantos fragmentos de ella accidentalmente, sino
por ser, en líneas generales, la imagen que plasmó un reducido grupo de personas
de la ciudad de Atenas. Nosotros sabemos bastante bien qué opinión tenía de la
Grecia del siglo V un ciudadano ateniense; pero ignoramos qué le parecía a un
espartano, a un corintio, o a un tebano, por no decir a un persa, a un esclavo o a
otro residente en Atenas que no fuese ciudadano.” (Carr E.H., 1961, p.18).

5. ¿Cuál es la utilidad de la Historia en la práctica del Diseño? Vincule su


respuesta con otras materias y ejemplifique.

Aprender sobre la historia en el ámbito del Diseño contribuye en gran medida al


analizar los eventos que tuvieron lugar previamente a nuestro tiempo.

Desde la historia de la humanidad, podemos ver las huellas que fue dejando el ser
humano a través del tiempo, en relación a cualquier aspecto que nos resulte
conveniente estudiar.

Puntualizando, por ejemplo, en la historia del arte, podemos aprender qué motivó a
los grandes artistas de épocas pasadas a promulgar ciertos movimientos artísticos,
a utilizar ciertas técnicas, y si estas cuestiones dieron éxito a sus proyectos. Entre
otras cosas, son claras pruebas de que estas aplicaciones funcionan y siguen
funcionando, o han quedado varadas en el tiempo sin reconocimiento o
despreciadas por la sociedad dedicada al arte.

Podemos mencionar, por otra parte, el área de la historia de la comunicación,


donde, al utilizar de referencia piezas gráficas registradas en la historia, estudiarlas
y analizarlas, nos ayudará a comprender por qué dichas piezas cumplían su
función, cómo nacieron y qué adquirieron o lograron para ser de relevancia
histórica, siendo la escuela Bauhaus, por ejemplo, una de las fuentes usualmente
más concurridas para múltiples escenarios educacionales.
Materias como Teoría del diseño, Medios expresivos y Espacio tipográfico, por no
nombrar la gran mayoría (o todas en algún aspecto), son algunos de los espacios
académicos en donde la aparición del análisis histórico resalta notablemente.

Los usos de determinadas tipografías ideales para bloques de texto no son un caso
subjetivo de cada profesor, sino que, gracias al análisis, puesta a prueba y
demostraciones documentadas previas a nuestros días, llevados a cabo por
profesionales, estudiosos y eruditos del rubro tipográfico, son guías que se utilizan
continuamente para la trayectoria de nuestros estudios. Esta documentación forma
parte del camino de la historia de la tipografía desde sus inicios hasta el día de hoy,
y seguirá complementando el estudio sobre la tipografía y sus múltiples usos el día
de mañana.

Historia social de la literatura y el arte - A. Hauser

El texto siguiente (un fragmento de una tesis de En la Universidad de


Valladolid, España en 2013) nos habla de cierta necesidad humana del
hombre de comunicación.

- Homo Loquens versus Homo Pictor reflexión y teoría sobre la


capacidad lingüística y comunicativa de la expresión gráfica en un
nuevo mundo visual. Autor: Víctor A. Lafuente Sánchez

¿Comparte Ud. esta opinión sobre “la necesidad (del hombre primitivo)
de expresarse a través de gráficos, más o menos artísticos, por lo que
trataba de comunicarse con sus semejantes plasmando ideas y
objetos”?

Justifique su respuesta y compare con la posición de A Hauser.

En efecto, a lo largo de la historia, el hombre ha buscado y perfeccionado la


manera de poder comunicarse con sus semejantes a través de diferentes maneras
expresionistas. Desde los dibujos pictóricos de las cavernas, hasta las múltiples
formas de escrituras de hoy en día, el hombre utiliza la expresión gráfica como
herramienta de comunicación constantemente.

Hauser hace énfasis en que las primeras pinturas rupestres no poseían un dote
artístico decorativo, sino más bien expresivo y con cierto grado de comunicación.
Relata que, al no encontrarse en superficies a simple vista (usualmente escondidas
dentro de las paredes de las cuevas) no hay manera de considerar el arte paleolítica
como un objeto decorativo. Se considera que los cazadores de aquella etapa
buscaban la manera de expresar su deseo, o su meta a alcanzar, a través de la
representación de su éxito en la cacería.

Con el transcurso del tiempo, estos modos de expresión artística encontraran un


cambio morfológico, tornándose más geométricos y simplificados, inclinándose
hacia la abstracción, gracias a la aparición de un modelo de cultura económica en
la sociedad neolítica, aportándole un valor de seriedad y versatilidad, dando
indicios a que, posteriormente en la historia, comenzará a evolucionar y tender aún
más hacia la simplificación y abstracción, llegando a las primeras civilizaciones.

Luego responda:

1. ¿Cuál es la actitud que tenía el hombre primitivo hacia sus


representaciones?

En la era paleolítica, el hombre buscaba la manera de reproducir la naturaleza con


una fidelidad racional. No buscaban ilustrar atributos de interés visual, sino que sus
representaciones artísticas estaban, para ellos, rellenas de una cualidad mágica.
Sus pinturas estaban basadas en imágenes sintéticas, libres de añadidos o
restricciones intelectuales, de una forma directa y pura. No percibían la necesidad
de ornamentaciones, ya que se considera que se empleaban a modo de rituales
previos a la caza de animales para su supervivencia. Se cree que se convencían de
que, al representar la caza en las superficies de las cavernas, trasladaban el deseo
hacia la realidad. “El pintor y cazador paleolítico pensaba que con la pintura poseía
ya la cosa misma, pensaba que con el retrato del objeto había adquirido el poder
sobre el objeto; creía que el animal de la realidad sufría la misma muerte que se
ejecutaba sobre el animal retratado.” (Hauser A, 1964, p. 16).

2. Explique la importancia del cambio de representación desde la


naturalista hacia la geométrica.

Este cambio hacia la geometrización del arte rupestre marca un punto histórico en
que la sociedad paleolítica, nombrada como “parasitaria, cazadora y recolectora”,
pasa a un estado de buscar una vida más organizada y formal, apoyada por el
avance intelectual de la especie humana y el nuevo tipo de economía. Sucede la
transformación de pictografías un tanto detalladas y más avocadas a la realidad,
hacia la síntesis y abstracción de estos, llevando así a la generación de símbolos y
signos. En este punto, históricamente, se reconoce el avance del período
Paleolítico al Neolítico.

3. Vea el documental sobre las representaciones en la cueva de


Lascaux y relaciones con el siguiente texto sintetizado del libro la
Rama Dorada de Frazer J.G y el Hauser.

A través de las evidencias paleolíticas mostradas en la expedición a la cueva de


Lascaux, junto con el desarrollo explicativo de los expertos en el documental, se
llega a la conclusión de que el hombre primitivo utilizaba su expresión artística para
propiciarse de la magia que, posiblemente según sus ideales en ese entonces,
creían generaba el grabado de las imágenes en las paredes de las cavernas, siendo
estas encontradas en regiones que denotan cierto poder místico, gracias a su
riqueza y morfología natural. Esto conlleva, suponiendo que sea real, al posible
desarrollo de cierta forma de creencia religiosa, la cual impulsaba a los individuos
arcaicos a continuar con esta clase de rituales, donde ellos percibían, de alguna
manera, una sensación de ser beneficiados en su correr de vida.
Puntualizando en el concepto de la magia y la ciencia, las historias interpretadas a
través de las pinturas rupestres demostraban el gran interés y, en cierto modo,
arduo estudio de los hombres primitivos hacia la naturaleza. Lo proyectado en las
paredes de las cavernas era una imagen de la realidad, de lo que se tenía
conciencia en ese momento, lo empírico. No se mostraban supersticiones ni
creencias que no podían ser demostradas, sino el simple manifiesto del orden
natural. Tomemos las imágenes de los leones, por ejemplo: ilustraciones en las que
se puede analizar un hecho que, hasta hoy en día, podemos apreciar nosotros
mismos en el mundo animal, el cortejo de un león macho hacia una hembra.

Es algo que ocurre, constantemente, y, según Frazer, aquello que ocurre por orden
natural, sin la intervención de ninguna fuerza espiritual ni personal, para ese
momento era lo que podría considerarse como arte de magia (lo que hoy
conocemos como la ciencia moderna). De esta manera, junto con el análisis sobre
el concepto de magia realizado por dicho autor, podemos asociar las imágenes
pictóricas, luego de lo mencionado, con las nombradas “Ley de semejanza” y “Ley
de contacto”.

Siendo que estas manifestaciones artísticas eran una proyección de la realidad, los
magos (cazadores, artistas de las cavernas) se encargaban de presentar sus
deseos hacia la magia de la naturaleza. Ejemplificando, una imagen en la cual se
lograba la interpretación de la muerte de una presa, tenía la ilusión de lograr
transmitir ese hecho a un plano real. No era una alegoría al control, sino a
representar el orden natural que ellos conocían. Saber que podían cazar o dañar a
su presa, y plasmarlo en la pared de sus “santuarios” con una ilustración semejante
al deseo, lograría trasladar el hecho a su realidad. Si ellos poseían una parte de su
objetivo, podrían interactuar con él a la distancia.

De animales a dioses – Yuval Noah Harari

1. Mediante algún recurso grafico represente “la línea temporal de la


historia” que realiza el autor al inicio del libro.
2. ¿El Sapiens pudo desarrollarse gracias a ser el único animal con un
lenguaje?

En efecto, tanto el ser humano, como las distintas especies de animales que
habitan el planeta, somos capaces de comunicarnos entre nuestros semejantes.
Dentro de nuestra trayectoria evolutiva, hemos sido capaces de desarrollar nuevas
tecnologías y herramientas, capaces de asistirnos a sobrellevar y adaptarnos a la
vida en cada punto histórico.

El hecho de poseer un cerebro, en escala, de superior tamaño en relación a muchas


especies, no es el principal condicionante a la supervivencia a través del tiempo,
posicionándonos como seres ampliamente superiores en relación al resto del
mundo animal. Nuestra capacidad de comunicación, responsable de la creación de
fuertes lazos sociales entre una amplia cantidad de individuos, usualmente superior
a las que vemos en la naturaleza, fue unas de las causas por las que adquirimos
una forma de adaptabilidad hacia el entorno, una capacidad de aprendizaje
superior al resto de las especies, y el desarrollo de una memoria superior. En
comparación a los animales, que poseen cualidades y habilidades innatas desde el
nacimiento, su capacidad de aprendizaje se refleja en menor proporción a la de un
ser humano, que es capaz de asimilar y reconocer múltiples fuentes de información,
adhiriéndolas a su desarrollo intelectual.

Entre otras cosas, el avance intelectual, propiciado por el complejo estilo


comunicativo que fue desarrollando el hombre en la historia, fue complementado
con el uso de utensilios y la domesticación del fuego como herramienta y arma.
Habiendo maneras complejas de comunicarse en el reino animal, el ser humano
logra producir un lenguaje vocal sumamente flexible.

“Podemos combinar un número limitado de sonidos y señales para producir un


número infinito de frases, cada una con un significado distinto. Por ello podemos
absorber, almacenar y comunicar una cantidad de información prodigiosa acerca
del mundo que nos rodea. Un mono verde puede gritar a sus camaradas:
«¡Cuidado! ¡Un león!». Pero una humana moderna puede decirles a sus compañeras
que esta mañana, cerca del recodo del río, ha visto un león que seguía a un rebaño
de bisontes.” (Harari Y N, 2014, p. 26).

3. ¿Qué es la teoría del “Chismorreo” que plantea el autor? Cuál es su


vínculo con los sistemas sociales. Ejemplifique de un modo distinto
al autor.

La teoría del “Chismorreo” hace referencia a lo que hoy en día mejor conocemos
como chisme o cotilleo, aquella “información social” que se expande dentro del
grupo a través del interés colectivo.

Dentro de las comunidades, era sumamente necesario poder reconocer en quiénes


se podía confiar y así concebir una buena cooperación entre un gran número de
individuos.

“La información fiable acerca de en quién se podía confiar significaba que las
cuadrillas pequeñas podían expandirse en cuadrillas mayores, y los sapiens
pudieron desarrollar tipos de cooperación más estrecha y refinada.” (Harari Y N,
2014, p. 27).

Supongamos que somos parte de una comunidad que vive en un pequeño pueblo,
medianamente aislado de las grandes ciudades, donde la mayoría de los
habitantes, al ser tan pocos y comprimidos en un pequeño territorio, nos
reconocemos fácilmente al transitar por las calles. Por cada cuadra existe un pozo
de agua del que los habitantes de la manzana podemos retirar en el momento en
que nos sea necesario solamente, pero, por la confianza colectiva en la que se
recae, no se lleva registro. Aclarando esto, imaginemos que uno de los habitantes
de la cuadra, por la noche, se acerca, sin previo aviso, con un par de baldes de
agua. El hombre es visto por un vecino que, casualmente, se dispuso a mirar por la
ventana de su casa hacia el pozo, y el rumor de que este sujeto no cumple con las
normas comunitarias comienza a gestarse a la mañana siguiente. Así, el pueblo
reconoce, gracias al chismerío de los propios habitantes, que este hombre no es
digno de confiar, y deciden qué clase de juicio caerá sobre su actuar.
4. ¿Qué entiende Harari por “revolución Cognitiva”?

La revolución cognitiva es ese aspecto del lenguaje que llevó al hombre a tener la
capacidad de promulgar su imaginación entre sus pares, mediante creencias y
mitos, logrando así una alianza cooperativista mayor frente a un número incontable
de extraños, reforzando y flexibilizando sus lazos sociales entre ellos para su
beneficio colectivo.

“Las hormigas y las abejas también pueden trabajar juntas en gran número, pero lo
hacen de una manera muy rígida y solo con parientes muy cercanos. Los lobos y
los chimpancés cooperan de manera mucho más flexible que las hormigas, pero
solo pueden hacerlo con un pequeño número de individuos que conocen
íntimamente. Los sapiens pueden cooperar de maneras extremadamente flexibles
con un número incontable de extraños. Esta es la razón por la que los sapiens
dominan el mundo...” (Harari Y N, 2014, p. 28).

MÓDULO 2

ONG, Walter J., Oralidad y escritura – Guía de preguntas

1) ¿Qué es un grafolecto?

Un grafolecto (código de signos visuales) “es una lengua transdialectal formada por
una profunda dedicación a la escritura. Esta otorga a un grafolecto un poder muy
por encima del de cualquier dialecto meramente oral.” (Ong, W.J., 2016, p. 4)

“La riqueza léxica- de los grafolectos comienza con la escritura, pero su


abundancia se debe a la impresión, ya que los recursos de un grafolecto moderno
se encuentran principalmente en los diccionarios. (…) Los diccionarios de este tipo
se encuentran a años luz de distancia del mundo de las culturas orales. Nada ilustra
de manera más impresionante cómo la escritura y lo impreso alteran los estados de
la conciencia.” (Ong, W.J., 2016, p. 23)
2) ¿Qué entiende Ong por literatura oral y oralidad primaria?

La oralidad primaria es la oralidad que carece de un desarrollo escrito o impreso.


Según el autor, hoy en día, prácticamente no existen culturas que carezcan de un
sistema escrito de su lenguaje oral, aunque sí hay casos en los que hay cierto límite
entre una amplia oralidad y una acotada escritura en algunos sistemas de
lenguajes, quizás no tan frecuentados.

La literatura oral, por otro lado, pueden denominarse como “escritos que no están
escritos”. En cierta forma, son herencias orales de las literaturas (cuerpos escritos
de texto). Este método crea cierto dilema, ya que, sin recurrir al empleo de la
escritura, no hay manera de conservar su forma, al no poseer carácter de
permanencia.

“Aunque las palabras están fundadas en el habla oral, la escritura las encierra
tiránicamente para siempre en un campo visual.” (Ong, W.J., 2016, p. 6)

3) ¿Cuál es la relación entre la escritura y la conciencia?

El habla es inseparable de la conciencia, pero sin la escritura, la conciencia humana


no puede alcanzar su potencial más pleno. El nexo entre la escritura y la conciencia
ayuda a crear nuevas representaciones verbales dentro del lenguaje.

Además, la escritura nos brinda la posibilidad de asentar la conciencia, los


pensamientos, anteriores, actuales y futuros, para un mejor registro y empleo en el
desarrollo de estudios, como la ciencia o la historia, tanto, así como para las artes
de todo tipo.

“Es posible emplear el conocimiento de la escritura con el objeto de reconstituir


para nosotros mismos la conciencia humana prístina (...) Esta reconstrucción puede
resultar en una mejor comprensión de la importancia del mismo conocimiento de la
escritura para la formación de la conciencia humana y hasta llegar a las culturas
altamente tecnológicas.” (Ong, W.J., 2016, p. 8)

4) Al pasar de lo oral a lo escrito ¿sucede una deformación?


En efecto, al articular las palabras orales en forma escrita, se les provee de una
“forma física”, representadas a través de signos o glifos. Pasan de un estado de
articulación puramente sonora, del cual sólo existe registrado en la memoria del ser
humano, a un estado de inmovilización visual, una llamada -lista de datos-, siendo
esta la representación visual, o espacial, de dicha forma vocal.

“La presentación visual del material articulado de manera verbal en el espacio


posee su propia economía particular, sus propias leyes de movimiento y
estructura.” (Ong, W.J., 2016, p. 19)

5) Oído y vista ¿siempre han mantenido la misma relación en cuanto a la


posibilidad de reconocer el mundo?

Los seres humanos somos dependientes de todos los sentidos, tanto para la
comunicación, como para la vida misma. Con la invención de la escritura, se logró
trasladar aquello que solo podíamos oír, a un formato donde se puede reconocer a
través de la vista.

Históricamente, donde quiera que existan seres humanos, tendrán un lenguaje


tanto verbal, como visual o escrito. Pero siempre, en un principio, debió predominar
el habla, ya que el oído, justo con la voz, son nuestros principales instrumentos de
comunicación al comienzo de nuestra vida. La escritura surge como una
herramienta necesaria posterior al desarrollo del lenguaje verbal, lo que nos
proporciona un sistema de reconocimiento visual, y apoya al desarrollo de la
conciencia y el pensamiento.

6) ¿Qué objeciones hacia Platón en Fredo a la escritura? ¿Cuál es la


importancia que le dan los griegos a las formas del habla?

Según Platón, la escritura “es inhumana al pretender establecer fuera del


pensamiento lo que en realidad sólo puede existir dentro de él. Es un objeto, un
producto manufacturado.” (Ong, W.J., 2016, p. 8)

Platón enuncia que la escritura:


● Destruye la memoria, por depender de un recurso exterior por falta de
recursos internos.
● Debilita el pensamiento, porque le quitan el trabajo que lo mantiene en
forma.
● No produce respuestas, porque el texto no puede proporcionar una
explicación, más allá de lo que está escrito, por carecer de vida. A una
persona se le podría pedir una explicación de sus palabras.
● No puede defenderse, por su estado pasivo. No existe una devolución
entre el lector y el texto, como lo existe entre personas en un diálogo.

Los griegos, a través del desarrollo de la retórica (principios del “arte de hablar”)
intensificaron la oralidad a través de la escritura, “posibilitando la organización de
los "principios" o componentes de la oratoria en un arte científico, un cuerpo de
explicación ordenado en forma consecutiva que mostraba cómo y por qué la
oratoria lograba y podía ser dirigida a obtener sus diversos efectos específicos.”
(Ong, W.J., 2016, p. 5)

7) ¿Por qué la escritura es una tecnología?

La escritura es, sin lugar a dudas, una tecnología. Para poder llevar a cabo la
escritura, se precisa, además de su aprendizaje, de ciertos instrumentos y
herramientas externas al ser humano (lápices, pinceles, plumas, papeles, pintura,
tintas, etc.) No sólo eso, la escritura también se adapta al paso del tiempo, como
toda tecnología, como las imprentas tipográficas evolucionaron a las máquinas de
escribir, y, posteriormente, a las impresoras láser, por ejemplo. Para continuar
reforzando esta idea, es notable que el habla es un elemento natural, parte de la
voz humana, pero la escritura es un medio artificial, con ciertas reglas rígidas y
previamente constituidas, aunque esta no se contempla como una herramienta que
pueda degradar la vida humana, sino lo contrario, surge para mejorarla.

“Sin la escritura, el pensamiento escolarizado no pensaría ni podría pensar cómo lo


hace, no sólo cuando está ocupado en escribir, sino incluso normalmente cuando
articula sus pensamientos de manera oral. Más que cualquier otra invención
particular, la escritura ha transformado la conciencia humana.” (Ong, W.J., 2016, p.
8)

8) ¿Cómo define Ong a las grafías?

Las grafías consisten en la representación de un enunciado de palabras que alguien


dice o que se supone que dice, lo que se considera como la “verdadera escritura”,
un sistema complementado de marcas codificadas visibles que forman estructuras
y referencias, con cierto criterio preestablecido y reconocido por los grupos
culturales, a las palabras y fonemas de manera visual.

“…una grafía es algo más que un simple recurso para ayudar a la memoria. Incluso
cuando es pictográfica, una grafía es algo más que dibujos. Los dibujos
representan objetos. Un dibujo de un hombre, una casa y un árbol en sí mismo no
expresa nada.” (Ong, W.J., 2016, p. 11)

9) ¿Qué quiere decir con que el alfabeto se inventó una sola vez?

La cultura que creó el alfabeto (Los pueblos semíticos alrededor del año 1.500 a.C.)
desarrollaron un sistema gráfico donde cada símbolo hacía referencia a cada
sonido articulado por el habla de su idioma. Las culturas posteriores a este hecho,
dedicaron su adaptación de la oralidad en base al alfabeto ya establecido, según
las necesidades que poseían o veían de suma importancia atender. Por ejemplo, los
hebreos idearon un formato conocido como “silabario”, no posee vocales, pero las
grafías derivan de la construcción semítica previamente mencionada. Los griegos
vieron la necesidad de añadir luego las vocales, para lograr la democratización de
la escritura a través de un modo más abstracto de analizar el sonido de las
palabras, lo que los llevó a impulsar su cultura a una intelectualidad superior. Esto
logra generar un sistema más fácil de aprender, que luego, los romanos toman
como referencia para desarrollar el formato alfabético que utilizamos hoy en día,
por medio de una simplificación del mismo. Todo este desarrollo parte del previo
formato semita, sólo que, de un modo u otro, la adaptación al lenguaje y al avance
tecnológico de la escritura terminan por ser los pilares que la llevan hacia este tipo
de actualizaciones.
10)¿Cuál es el lugar de la memoria para Ong?

Para Ong, la memoria es aquello que se encuentra innatamente en el ser humano.


Si no posee la capacidad de hablar, o de escribir, no hay dudas de que posee la
capacidad de recordar. Quienes poseían la capacidad de memorizar, tenían cierto
poder por sobre los que no gozaban de esta cualidad. Por esta cuestión, el autor
remarca la memoria como “la protagonista principal”. Con la aparición de la
escritura, esta cualidad pierde fuerza, ya que la capacidad de documentar las
palabras o el pensamiento y congelarlas en el tiempo, da mayor poder al texto, al
ser una cuestión imposible de cuestionar, siendo este considerado como un hecho
indudable e irrefutable.

“El orden de la memoria” Le Goff, Jacques P.

1) Realice una síntesis del capítulo y saque conclusiones teniendo


presente los siguientes puntos:
● ¿Por qué es importante la memoria para el ser humano?
● ¿Hay una función social de la memoria?
● ¿Este concepto como se ve influenciado por las distintas
civilizaciones (griega, cristiana etc.)?

Síntesis: El orden de la memoria [Transcripción y observaciones]

La importancia en la memoria y su rol social

El concepto de memoria es un concepto crucial. La memoria como capacidad de


conservar determinadas informaciones, remite ante todo a un complejo de
funciones psíquicas, con el auxilio de las cuales el hombre está en condiciones de
actualizar impresiones o informaciones pasadas, que él se imagina como pasadas.
El proceso de la memoria en el hombre hace intervenir no sólo la preparación de
recorridos, sino también la relectura de tales recorridos», y los procesos de
relectura pueden hacer intervenir centros nerviosos complicadísimos y gran parte
de la corteza cerebral, con la condición de que exista un cierto número de centros
cerebrales especializados en fijar el recorrido mnésico.
Los fenómenos de las memorias no son más que los resultados de sistemas
dinámicos de organización, y existen sólo en cuanto la organización los conserva o
los reconstruye. Los lazos entre las diversas formas de memoria pueden, por lo
demás, presentar caracteres no metafóricos, sino reales. En todas las sociedades,
los individuos retienen un gran número de informaciones en su patrimonio genético,
en la memoria a largo alcance y, al mismo tiempo, en la memoria activa.

No es una propiedad de la inteligencia, sino la base, cualquiera que sea, sobre la


que se registran las concatenaciones de los actos.

Se distinguen tres tipos de memorias: específica, étnica y artificial.

- La memoria específica se define como la fijación de los comportamientos de


las especies animales.
- La memoria étnica hace referencia a la reproducción de los
comportamientos de las sociedades humanas.
- La memoria artificial, procura, sin deber recurrir al instinto o a la reflexión, la
reproducción de actos mecánicos concatenados.

La esfera principal en la que se cristaliza la memoria colectiva de los pueblos sin


escritura es la que da un fundamento —aparentemente histórico— a la existencia
de etnias o de familias, es decir, los mitos de origen.

Se distinguen dos tipos de historias: la historia objetiva, y la ideológica.

Como sus nombres lo representa, la historia objetiva es la serie de hechos que


buscamos, describimos y establecemos sobre la base de ciertos criterios
"objetivos" universales que observan sus vínculos y su sucesión. Por otra parte, la
historia ideológica describe y ordena tales hechos sobre la base de ciertas
tradiciones consolidadas. Esta segunda historia es la memoria colectiva, que tiende
a confundir la historia con el mito. Y tal historia ideológica se dirige preferentemente
a los principios del reino.
Se menciona a los “hombres-memoria”, especialistas en la memoria, también
nombrados como “la memoria de la sociedad”, depositarios de la historia objetiva y
de la historia ideológica, que poseen la tarea fundamental de la cohesión del grupo.

La memoria transmitida por aprendizaje en las sociedades sin escritura no es una


memoria “palabra por palabra”. Nótese las numerosas variantes y versiones de un
mismo mito. Los hombres-memoria, narradores en caso de necesidad, no
desarrollan la misma función que los maestros de escuela. En torno a éstos no se
desarrolla un aprendizaje mecánico automático. Raras veces se encuentra en las
sociedades la existencia de procedimientos mnemotécnicos. La memoria colectiva,
parece entonces, funcionar basada en una reconstrucción generativa, y no en una
memorización mecánica. La sociedad sin escritura concede mayor libertad y más
posibilidad creativa a la memoria.

Observaciones: el ser humano constantemente se ve obligado a depender de la


existencia de la memoria. Aporta la capacidad de retención de información que
podemos considerar de una determinada importancia, pero también, con una
memoria bien desarrollada, podemos volver a consultar y/o analizar esta
información almacenada. La memoria resulta en un elemento, o propiedad, que,
finalmente, forma y amplía la capacidad intelectual, nos hace comenzar a ser
quienes somos, y nos crea un camino por el cual llegaremos a un final que
establecerá aquello en lo que nos vamos a “transformar”. En sociedad, el ser
humano busca alternativas para mejorar su capacidad de memorización, o se ve en
la necesidad de recurrir a expertos en el tema, como los “hombres-memoria”, si se
encuentra en un ámbito en donde no posee la facilidad de la escritura. Deja a
merced de los intelectuales, estos hombres-memoria, la confianza y libertad de una
capacidad mnemotécnica que luego, serán los forjadores de la historia, objetiva e
ideológica.

Civilizaciones en torno a la memoria


La aparición de la escritura está ligada a una transformación profunda de la
memoria colectiva. A comienzos del medievo paleolítico aparecen figuras en las
cuales se han querido ver mitogramas, paralelos a la mitología que se desarrolla, en
cambio, en el orden verbal. La escritura permite a la memoria colectiva un doble
progreso, el desenvolverse en dos formas de memoria. La primera es la
conmemoración, la celebración de un evento memorable por obra de un
monumento celebratorio. La memoria asume entonces la forma de la inscripción, y
ha llevado, en época moderna, al nacimiento de una ciencia auxiliar de la historia, la
epigrafía.

En el antiguo Oriente, las inscripciones conmemorativas han conducido a la


multiplicación de monumentos tales como las estelas o los obeliscos. En la
Mesopotamia han predominado las estelas, sobre las cuales los reyes quisieron
inmortalizar sus propias empresas por medio de representaciones figuradas
acompañadas de una inscripción.

Pero la gran época de las inscripciones fue la de Grecia y de Roma antiguas; se


podría hablar, respecto de los países griegos y romanos, de una "civilización de la
epigrafía". En los templos, en los cementerios, sobre las plazas y avenidas de la
ciudad, a lo largo de las calles incluso en el corazón de la montaña, en la gran
soledad, las inscripciones se acumulaban llenando el mundo grecorromano de un
extraordinario esfuerzo de conmemoración y perpetuación del recuerdo. La piedra,
y más frecuentemente el mármol, servía de soporte a un exceso de memoria. Estos
«archivos de piedra» añadían a la función de los archivos propiamente dichos un
carácter de publicidad que insistía, que apuntaba a la ostentación y a la durabilidad
de esa memoria lapidaria y marmórea. La otra forma de memoria ligada a la
escritura es el documento escrito sobre un soporte específicamente destinado a la
escritura.

Pero conviene observar que, como se ha intentado hacerlo ver en otro sitio, todo
documento tiene en sí un carácter de monumento y no existe una memoria
colectiva bruta. En este tipo de documento la escritura tiene dos funciones
principales: Una es el golpe imprevisto de la información, que consiste en
comunicar a través del tiempo y del espacio, y que procura al hombre un sistema
de marcación, de memorización y de registro, mientras la otra, asegurando el
pasaje de la esfera auditiva a la visual, consiste en permitir reexaminar, disponer de
otro modo, rectificar las frases incluso hasta las palabras aisladas.

Las grandes civilizaciones, en Mesopotamia, Egipto, China o en la América


precolombina, civilizaron en primer lugar la memoria escrita para el calendario y las
distancias. El conjunto de los hechos destinados a sobrepasar las generaciones
siguientes, se reduce a la religión, a la historia y a la geografía. El triple problema
del tiempo, del espacio y del hombre constituye la materia de la memorización.

Los reyes crean para sí instituciones-memoria: archivos, bibliotecas, museos.


Memoria real, puesto que los reyes hacen componer y a veces inscribir en la piedra
de los anales (o al menos fragmentos de éstos) donde están narradas
especialmente sus gestas y que conducen a la frontera donde la memoria se hace
historia. Los soberanos hacen redactar a sus escribas narraciones más detalladas
de sus reinos, en las cuales sobresalen victorias militares, ventajas de su justicia y
progreso del derecho: los tres dominios dignos de ofrecer ejemplos memorables a
los hombres del futuro.

En China los antiguos anales reales sobre bambú contenían especialmente las
consultas y las respuestas de los oráculos, que formaron un amplio repertorio de
recetas de gobierno, y la función de archivistas perteneció poco a poco a los
adivinos; éstos eran los custodios de los acontecimientos memorables de cada
reino.

Con el pasaje de lo oral a lo escrito, la memoria colectiva, y más en particular la


memoria artificial, sufre una profunda transformación. Surge la aparición de
procedimientos mnemotécnicos, que permiten la memorización palabra por palabra
está ligado a la escritura. la existencia de la escritura comporta, además,
modificaciones dentro de la misma psiquis, y que no se trata simplemente de una
nueva habilidad técnica, de una cosa asimilable, por ejemplo, a un procedimiento
mnemotécnico, sino de una nueva actitud intelectual.

En efecto, ocurre preguntarse a qué cosa está ligada, a su vez, esta transformación
de la actividad intelectual revelada por la memoria artificial escrita. Se ha pensado
en la necesidad de memorización de valores numéricos y en un vínculo con el
desarrollo del comercio. La memorización por medio del inventario, la lista
jerarquizada no es sólo una actividad dirigida a una nueva organización del saber,
sino un aspecto de la organización de un poder nuevo.

Con los griegos se percibe, de modo clarísimo, la evolución hacia una historia de la
memoria colectiva. La memoria, en la medida en que se distingue de la rutina,
representa una difícil invención, la conquista progresiva, por parte del hombre, de
su pasado individual, así como la historia constituye para el grupo social la
conquista de su pasado colectivo. Pero entre los griegos, así como la memoria
escrita viene a agregarse a la memoria oral, transformándola, así análogamente la
historia viene a ampliar la memoria colectiva, modificándola, pero sin destruirla. No
se puede sino estudiar las funciones y la evolución de esta última.

Con el desarrollo de la escritura, surgen los archivistas, provenientes de las


mencionadas “memorias vivientes”.

La cosa más notable es, indudablemente, la divinización de la memoria y la


elaboración de una amplia mitología del recuerdo en la Grecia arcaica. En las
diversas épocas y en las diversas culturas existe solidaridad entre las técnicas de
rememoración practicadas, la organización interna de las funciones, su puesto en el
sistema del yo y la imagen que los hombres se hacen de la memoria.

En Grecia, surgen nuevas técnicas de memoria: la mnemotécnica. Los poetas de


ese entonces manifestaban esta forma poética a través de cantos de alabanzas a
los héroes victoriosos y cantos fúnebres, transformándolas en leyendas religiosas.

A partir de este punto, se posicionan dos principios para la memoria artificial:


el recuerdo de las imágenes, necesario para la memoria; y el apoyo sobre una
organización, un orden, esencial para una buena memoria.
Otra gran distinción de la mnemotécnica tradicional, aquella entre memoria por las
cosas y memoria por las palabras. precisan el carácter activo de tales imágenes en
el proceso de rememorización, y formalizan la división entre memoria de las cosas y
memoria de las palabras.

La memoria colectiva formada por los estratos dirigentes de la sociedad


experimenta, en el curso del medievo, profundas transformaciones: la difusión del
cristianismo como religión y como ideología dominante, y el cuasi monopolio
conquistado por la Iglesia en el campo intelectual.

Cristianización de la memoria y de la mnemotécnica, subdivisión de la memoria


colectiva en una memoria litúrgica que se mueve en círculo y en una memoria laica
de débil penetración cronológica; desarrollo de la memoria de los muertos y ante
todo de los muertos santos; rol de la memoria en la enseñanza fundada sobre lo
oral y sobre lo escrito al mismo tiempo; aparición, en fin, de tratados de memoria;
he aquí los lineamientos más característicos de la metamorfosis operada por la
memoria durante el medievo.

El judeo-cristiano ocasiona alguna cosa de más y de diverso en la relación entre la


memoria y la religión, entre el hombre y Dios. Algunos han podido definir el
judaísmo y el cristianismo, religiones ancladas ambas histórica y teológicamente en
la historia, como religiones del recuerdo.

Actos divinos de salvación situados en el pasado forman el contenido de la fe y el


objeto del culto, pero también porque el libro santo, por un lado, la tradición
histórica por el otro insiste, en algunos puntos esenciales, en la necesidad del
recuerdo como momento religioso fundamental. Así como entre los griegos, la
memoria puede terminar en escatología, negar la experiencia temporal y la historia.
Será uno de los caminos de la memoria cristiana. Más históricamente, la enseñanza
cristiana se presenta como la memoria de Jesús transmitida por medio de los
apóstoles y de sus sucesores.
Estas imágenes cristianas de la memoria se han armonizado con las grandes
iglesias góticas, en las cuales es preciso tal vez ver un nexo simbólico de memoria.
Los mártires eran los testigos. Después de su muerte, cristalizaron en torno a sus
recuerdos la memoria de los cristianos. Sus tumbas constituyeron el centro de
iglesias, y el lugar donde eran ubicadas tuvo, además de los nombres de confessio
o de martyrium, aquel significativo de memoria.

La conmemoración de los santos en general tenía lugar en el día conocido o


presunto de su martirio o de su muerte. La asociación de la muerte con la memoria
asume en efecto rápidamente una extensión enorme en el cristianismo, que la
extrajo del culto pagano de los antepasados y de los muertos, y la desarrolló. Muy
pronto surgió en la Iglesia la usanza de recitar plegarias por los muertos. Aceptaron
tener libri memoriales: se registraban las personas, las vivas y sobre todo las
muertas, y las más de las veces benefactores de la comunidad de quienes ésta
pretendía conservar memoria y por las cuales se empeñaba en rogar.

Con el santo, la devoción se cristalizaba en torno al milagro. Con todo, la memoria


cumplía un rol considerable en el mundo social, en el mundo cultural, en el mundo
escolástico y, no hay necesidad de decirlo, en las formas rudimentarias de la
historiografía. El medioevo veneraba a los ancianos sobre todo porque veía en ellos
a los hombres-memoria, prestigiosos y útiles. No obstante, en estos tiempos en los
que lo escrito se está desarrollando al lado de lo oral, y en los que, al menos entre
el grupo de los litterati, existe equilibrio entre memoria oral y memoria escrita, se
intensifica el recurso a lo escrito como soporte de la memoria.

La memoria urbana para estas instituciones nacientes y amenazantes es aquí en


efecto identidad colectiva, comunitaria. En el campo literario la oralidad se mantiene
muy próxima a la escritura, y la memoria es uno de los elementos constitutivos de
la literatura medieval.

Observaciones: La escritura aparece como un pilar fundamental para la


transformación de la memoria colectiva. Las pinturas paleolíticas se consideran
fuertemente ligadas a la construcción mitológica que pretendía, mediante el análisis
posterior de las mismas, apoyar al progreso de la conmemoración y la inscripción,
mediante la epigrafía. En el antiguo Oriente, las inscripciones conmemorativas
aparecen en forma de monumentos, también en la Mesopotamia, en figuras
representacionales acompañadas de una inscripción.

La Grecia y Roma antiguas se consideran una "civilización de la epigrafía". En todo


lugar de amplio público, se acumulaban inscripciones y ornamentaciones con fines
conmemorativos y de perpetuo recuerdo, con el fin de llevar un soporte a la
memoria. Analizando, en síntesis, estos métodos imponían la inmortalización de la
memoria para el futuro ser humano, capaz de poder interpretarla, y así perdurar en
la historia, a modo de registro de calidad selectivo y metódicamente seleccionado,
tales como hazañas heroicas, victorias bélicas, y géneros que consideraban de
índole memorable para el futuro.

En la antigua China, algo similar en relación a sus tradiciones místicas en base a los
oráculos, empleaban el registro conmemorativo de sus adivinanzas.

Con el pasaje de lo oral a lo escrito, la memoria colectiva, particularmente la


artificial, sufre una profunda transformación. Surge la mnemotecnia, permitiendo
memorizar palabra por palabra "una escritura mental" o una "organización del
saber". Surgen los archivistas, "memorias vivientes". Se diviniza la memoria y la
elaboración de una amplia mitología del recuerdo en la Grecia arcaica. La poesía se
emplea como uso mnemotécnico para alabanzas a los héroes victoriosos y cantos
fúnebres, pasados al estado de leyenda religiosa.

Acá, se crea un punto donde se enumeran los principios de la memoria artificial,


empleada por los griegos: el recuerdo de las imágenes (necesario para la memoria)
y el apoyo sobre una organización (esencial para una buena memoria). Se le suma la
formalización entre la memoria por las cosas y por las palabras.

Nota: se puede reconocer la importancia hacia el claro empleo de la memoria eficaz


en la época grecorromana para la inmortalización de su cultura e historia. Siempre
buscando la manera de poder complementar, o reforzar, a partir de métodos que,
por más sencillo que suenen, o que hoy en día estemos acostumbrados, no eran
tan fáciles de reconocer en ese entonces, dado que no se criaban en un entorno de
avances de grandes pasos en su cultura tecnológica.

Posteriormente, el uso de la memoria en el cristianismo y judaísmo juega un rol


notorio de dogma religioso. Gran impulsividad por establecer un régimen de
penetración cultural y dominio intelectual. Generar una imagen de Dios
todopoderoso y su hijo Jesucristo a través del relato de sus apóstoles, o
seguidores, documentando su memoria. Religiones ancladas a la historia y al
recuerdo. Formulación de relatos que determinan el círculo de la fe que desarrollan
para generar el monopolio cultural religioso. Generan simbolismo que referencia a la
fe (iglesias, templos, veneración y recuerdo hacia los muertos, sobre todo muertos
santos - conmemoraciones). El santo redondeaba la devoción hacia el milagro, el
anciano era venerado, eran sus "hombres-memoria", sus sabios, sus eruditos.
Crean una identidad colectiva, una comunidad, a través de la religión procesada por
las memorias de otro/s.

En el siglo XIII los dos grandes dominicos, Alberto Magno y Tomás de Aquino,
conceden un puesto importante a la memoria. Alberto Magno activa la distinción
aristotélica de memoria y reminiscencia. Está en la línea del cristianismo del hombre
interior, incluyendo la intención en la imagen de memoria; él intuye el rol de la
memoria en lo imaginario concediendo que la fábula, lo maravilloso, las emociones
que conducen a la metáfora ayudan a la memoria, pero, ya que la memoria es un
subsidio indispensable de la prudencia.

Alberto insiste sobre la importancia del aprendizaje de la memoria, sobre las


técnicas mnemónicas. Pone la memoria en relación con los temperamentos. El
temperamento más favorable a una buena memoria es la melancolía seco-cálida, la
melancolía intelectual.
Prescindiendo de toda otra disposición, Tomás de Aquino era particularmente apto
para tratar de la memoria: su memoria natural era, según parece, fenomenal, y su
memoria artificial había sido ejercitada por la enseñanza de Alberto Magno en
Colonia.

Formuló cuatro reglas mnemónicas:

1- Sucede encontrar adecuados simulacros de las cosas que deseamos


recordar, y es necesario, según este método, inventar simulacros e imágenes
para que intenciones simples y espirituales salgan fácilmente del alma, a
menos que no estén, por así decir, encadenadas a algún símbolo corpóreo,
porque el conocimiento humano es más fuerte en relación con los sensibilia;
por esto el poder mnemónico está puesto en la parte sensitiva del alma. La
memoria está ligada al cuerpo.
2- Sucede también disponer en un orden calculado las cosas que se desean
recordar, de modo que, al recordar un punto, se facilite el pasaje al punto
sucesivo. La memoria es razón.
3- Sucede adherirse con vivo interés a las cosas que se desean recordar. La
memoria está ligada a la atención y a la intención.
4- Sucede meditar con frecuencia lo que se desea recordar. He aquí por qué
Aristóteles dice que la meditación preserva la memoria.

La imprenta revoluciona la memoria occidental, pero lentamente. Aún más


lentamente la revoluciona en China. No se conocían los caracteres móviles, la
tipografía, y se contentaron con la xilografía. La imprenta no pudo operar
sólidamente en China, pero sus efectos sobre la memoria (al menos entre las clases
cultas) fueron importantes, puesto que se imprimieron sobre todo tratados
científicos y técnicos que aceleraron y extendieron la memorización del saber.

Pero los efectos de la imprenta no se harán sentir plenamente sino en el siglo XVIII,
cuando el progreso de la ciencia y de la filosofía haya transformado el contenido y
los mecanismos de la memoria colectiva. El siglo XVIII marca en Europa el fin del
mundo antiguo sea tanto en la imprenta cuando en las técnicas, la memoria social
engulle en los libros toda la antigüedad, la historia de los grandes pueblos, la
geografía y la etnografía de un mundo convertido definitivamente en esférico, la
filosofía, el derecho, las ciencias, las artes, las técnicas y una literatura traducida de
veinte lenguas diversas.

Observaciones: para ser breves, Alberto Magno aclara que la memoria puede ser
reforzada por las emociones y el efecto mágico. También afirma que la memoria
puede ser influenciada por el temperamento, y que debe ser estudiada, junto con
las mnemotécnicas. Tomas de Aquino (reconocido poseedor de una gran memoria)
postula las 4 reglas mnemotécnicas. Analizar mediante un simulacro qué
precisamos recordar y crear las imágenes simples y necesarias que nos ayuden a
proseguir con la mnemotecnia; ordenar lo que debemos recordar con precisión;
tener verdadera intención y sincero deseo de recordar lo que queremos recordar; y
meditar con frecuencia lo que debemos recordar.

A partir de este punto, el autor se dedica a avanzar en la historia de la memoria


hasta los días más actuales, donde resalta la evolución de la memoria, comenzando
desde la implementación de la imprenta para la rápida masificación del
conocimiento, que, aparentemente, es el camino que las técnicas para la mejora
memorial, la amplitud del conocimiento y la escolástica.

Nota: no debemos dejar de lado que, tanto las religiones como la política, siguen
siendo fuertes usuarios de la imperiosa necesidad de cautivar la memoria de
quienes quieran considerar o generar como público seguidor, sumergiéndose
constantemente en modelos de conmemoración, modelo que no se perdió en la
historia.

Gombrich, E. “Historia del arte” Cap. 1+2


1) Relacione el capítulo “Extraños comienzos” con el texto de Hauser de
la semana anterior. ¿Qué similitudes y diferencias encuentra?

Claramente se reconoce que el autor Gombrich comparte las ideas de Hauser en


torno al análisis práctico de las pinturas rupestres del paleolítico en las cavernas.
Sostiene la misma postura, en referencia a que dichas obras otorgaban la
sensación de poder y control sobre esos seres ilustrados en la pared, que ese
empleo del arte no poseía un carácter decorativo (sino, ¿por qué estarían
escondidas de la vista?). Pintaban lo que ellos conocían, no lo que ellos creían
conocer, o imaginaban. Buscaban traer su deseo a la realidad.

Afirma que hoy en día, incluso, las culturas aborígenes comparten mucho de esas
experiencias encontradas en las cavernas, tanto en torno a las pinturas mágicas,
como a los ritos que se practicaban.

Por otra parte, Gombrich difiere en que considera estos métodos artísticos como la
primera forma de escritura, ya que los paleolíticos, según su análisis, se dedicaban
a ilustrar lo que ellos proponían como necesario para que pueda ser interpretado
fácilmente. En este aspecto, Hauser anuncia que las pinturas eran el reflejo de la
necesidad de comunicarse, pero por carecer de un sistema de escritura que
conectase el pensamiento y las ideas de todos los individuos entre ellos.

“Si consideramos la extraña mentalidad que creó esos terribles ídolos, podemos
llegar a comprender cómo la realización de imágenes en esas civilizaciones
primitivas no se hallaba relacionada sólo con la magia y la religión, sino que
también era la primera forma de escritura.” (Gombrich, E.H., 1993, p. 53)

2) ¿Cómo se estructura la vida social en el antiguo Egipto?

La composición jerárquica en el antiguo Egipto se disponía de la siguiente manera:

1- Faraón (considerado el hijo del dios Ra) y su familia


2- Nobles, sacerdotes y altos funcionarios (los eruditos, formaban un grupo
social privilegiado)
3- Soldados (protectores del imperio)
4- Escribas (eruditos de mejor categoría social)
5- Comerciantes y mercaderes (grupo trabajador encargados del comercio,
pagaban tributo al Estado)
6- Artesanos (trabajadores de las materias primas, pagaban tributo al Estado)
7- Campesinos (la población libre, grupo trabajador encargado del cultivo y
tareas esenciales, pagaban tributo al Estado)
8- Esclavos (prisioneros de guerra o personas compradas, destinados por la fuerza
a los trabajos más precarios donde la fuerza física era requerida, no poseían
libertades)

3) ¿Es posible que los egipcios percibieran el mundo tal como lo


representan?

El método de representación empleado por los artistas egipcios consistía en la


representación real de lo que ellos conocían como real. Buscaban mostrar la
perfección, no la ornamentación ni el decoro o belleza. Esa metodología -
comparada con el dibujo de niños hoy- fue perfeccionada para crear un sistema en
donde los artistas egipcios podrían representar la realidad perfecta conocida, como
ellos la recordaban a la hora de ilustrar sus obras.

4) A qué características ideológicas responde su sistema de


representación

En su arte poseían un sistema jerárquico basado en la escala. Aquello que era de


rango superior o mayor importancia, debía ser representado con mayor tamaño
(como la relación de escala entre los dioses, los faraones, sus familiares, y
sacerdotes en una misma obra -respectivamente, de mayor a menor tamaño).

5) Qué valor tenían las imágenes para los egipcios. Ejemplifique.


Las obras, para los egipcios, poseían el poder de “mantener con vida” a quienes
disponían en sus pinturas o esculturas. La perfección era la manera más efectiva
para preservar la imagen en la inmortalidad. No era arte para ser degustada.

Previo al uso del arte para estos fines, en el sepulcro del faraón, se colocaban los
cuerpos sacrificados de sus esclavos, puesto que ellos (los faraones o altos
miembros de la sociedad) creían que debían ir acompañados por la eternidad hacia
el más allá. Al considerarse, más adelante, estos actos como crueles y costosos, en
los sepulcros o tumbas comenzó a aparecer el uso de la pintura y la confección de
estatuillas y relieves, mostrando así que quienes figuraban en ese estado,
acompañarían al difunto hasta la otra vida.

Satue, E. El DG en la antigüedad.

Realice una síntesis del fragmento de texto (Cap. N°1) del libro se Satue,
E. “El diseño gráfico. Desde los orígenes hasta nuestros días” de no
más de 500 palabras. Vuelque en ella su opinión sobre el mismo.

Una de las diferencias más grandes entre el diseño antiguo y el actual radica en la
forma en la que se transmite determinada información con el fin de persuadir a la
sociedad.

Gracias a los medios (procedimientos por el cual se efectuaba el arte de diseñar)


utilizado en la antigüedad, permitieron la supervivencia de estas piezas de diseño,
convirtiendo al medio en una obra de arte. El diseño gráfico siempre se verá
limitado (o pautado) por el desarrollo tecnológico de su época, el cual dispondrá a
la vista las herramientas necesarias para fabricar o crear determinado mensaje que
podrá ser replicado para llegar así a la mayor cantidad de receptores posibles, o a
los necesarios, si es que se dispone de esa manera.

Previo a la aparición de la impresión, “…cada etapa histórico-cultural logró una


propia forma sistémica para informar, persuadir o convencer adecuadamente a sus
propósitos, sirviéndose para ello de distintos medios, de acuerdo al dominio
tecnológico.” (Satué, E. 2004, p. 10). A mediados del siglo XV, la industria de la
información toma conciencia del diseñador como “agente embellecedor” de la
persuasión. A partir de este entonces, los individuos con habilidades gráficas se
harán más presentes en la historia.

El diseño gráfico, siendo dominador de la imagen y la escritura, debate su posición


entre los espacios del arte y la escritura histórica. Posee una doble metodología,
por un lado, puede dividirse al diseño en 3 factores: la edición, la publicidad, y la
identidad. Por otro lado, tiene una posibilidad legítima de ser abordado por un
flanco anecdótico y testimonial.

Grecia y Roma

Surge una hipótesis donde se recita que, tanto la arquitectura como la escultura en
la época griega (y romana), podrían ser parte de un sistema de simbología visual
con fines comunicativos intencionados. Existía una identidad en sus piezas, con
una clara voluntad hacia el dominio ideológico, se gestaban como herramientas
para la implantación de modelos con función emblemática que establecieron, entre
otras cosas, los cánones de belleza de ese entonces (la figura humana).

Fuera de la iglesia y la política, el uso de información visual “embellecida” se


traslada al uso comercial, complementando el uso de la voz (vehículo comercial
más utilizado hasta el siglo XIX), ya que en ese entonces el uso de la escritura
estaba reservado a grupos elitistas, convirtiéndolo en un sistema altamente
selectivo.

En Roma, la epigrafía (escritura lapidaria – antecedente histórico del diseño


tipográfico moderno) comienza a otorgarle a la escritura una cierta cantidad de
pautas, criterios compositivos y cánones que llevaran al desarrollo de nuevas
familias tipográficas (romanas antiguas) partiendo de la conocida Columna de
Trajano. La frialdad de los romanos beneficia el tratamiento de signos de
comunicación convencionales frente al de los griegos.

Aparecen, también, las señalizaciones, sellos, timbres, contratos, marcas


personales, etc. Se introduce la cursiva (primera versión de letra minúscula). “Todo
lo cual constituye un cierto genero de diseño gráfico, una representación gráfica
singular, sintética y con la mayor capacidad de reconocimiento posible…” (Satué,
E. 2004, p. 17).

Gombrich, E. “Historia del arte”.

1. ¿Por qué motivo Gombrich dice que poco antes del 500 ac los artistas
se aventuraron a pintar un pie de visto de frente? (como indicio;
relacione su respuesta con el código de representación egipcio)

A diferencia de los egipcios, que buscaban representar en sus piezas artísticas lo


que ellos conocían, los griegos se dedicaron a desarrollar un sistema artístico en el
que ilustraban lo que ellos podían ver. Comenzaron a confiar en sus ojos y tener en
cuenta los ángulos de sus lienzos. Aún en ese entonces las figuras seguían
mostrando características del modo egipcio (ojos vistos de frente, pocos detalles
en el rostro, entre otros) pero donde comienza el desarrollo del cambio es en las
formas de ilustrar los cuerpos. Los artistas griegos se dedicaron a observar la
realidad, tomando nota de los detalles que los llevarían a poder representar el
aspecto real de las cosas.

“Los artistas griegos trataron de siluetear sus figuras tan claramente como les fuese
posible, y de incluir en la representación tunta parte de su conocimiento del cuerpo
humano como pudieran, sin violentar su apariencia. Continuaban gustándoles los
perfiles sólidos y el dibujo equilibrado. Se hallaban lejos de intentar la copia de la
naturaleza tal como la veían en una ojeada.” (Gombrich, E.H. 1993, p. 81-82).

2. ¿Cuál considera Gombrich es la gran revolución del arte griego?

Según el autor, el mayor descubrimiento del arte griego fueron la representación


natural de las formas y la implementación del “escorzo”, un recurso que otorga al
dibujo o pintura una sensación de profundidad y volumen. Sería entonces, la
aparición de una nueva perspectiva, la tercera dimensión, en las figuras planas.
3. ¿Quién fue Fidias?

Fidias (Atenas, 490≈ a.C., 430≈ a.C.) fue uno de los escultores más famosos y reconocidos de
la Antigua Grecia en la época de Pericles (político y orador ateniense), creador de las
esculturas Palas Atenea (Atenea Partenos), antiguamente situada en el Partenón de la
acrópolis de Atenas, y el Zeus Olímpico, situado en el templo de Olimpia.

4. ¿Las estatuas y representaciones griegas eran tomadas de modelos


naturales (personas concretas a las que se copiaba) o idealizados?

Al comienzo, los artistas griegos se dedicaron a representar la naturaleza de una


manera idealizada, utilizando sus conocimientos y estudios en relación a la
anatomía humana (como ejemplo en las esculturas). Buscaban “hermosear” lo que
ellos consideraban como un aspecto no deseado o irregular, estableciendo
cánones de belleza e idealidades en el camino. No pretendían copiar la realidad,
sino mejorarla en algún sentido. Este método artístico les quitaba vitalidad a las
obras, pero les otorgaban, de alguna manera, una percepción más equilibrada.

“No existe ningún cuerpo vivo tan simétrico, tan bien construido y bello como los
de las estatuas griegas.” (Gombrich, E.H. 1993, p. 103).

Próximamente, terminando el siglo IV a.C., los artistas griegos comenzaron a


remover ciertas restricciones paulatinamente. Descubrieron maneras de animar
facciones sin destruir la belleza, sin perder equilibrio. Comenzaron a practicar el
retrato y el dinamismo.

5. Las esculturas y representaciones griegas van de una forma estática y


esquemática a una muy dinámica y expresiva. ¿Cuál es el motivo de
esta transición según Gombrich?
Según Gombrich, en esa época de transición del período clásico al helenístico es
donde el arte comienza a perder su conexión con la religión y la magia, tornándose
hacia una necesidad de mercado artístico. El hecho de que los artistas pudieran
dominar y demostrar sus habilidades a través de la expresión y el dinamismo en
sus obras, los ponían a prueba como profesionales. En su opinión, buscaban
maneras de poder llamar la atención del público. Ahí es cuando surge el interés por
coleccionar el arte helenístico, siendo los más acaudalados los principales clientes
de estas piezas, y al artista se le otorga mayor presencia en la época, los escritores
comienzan a visibilizarlos en mayor medida que previo a esta transición. De ahí es
que se conserva mayor información sobre este período que el del clásico y el
arcaico.

Eco, Umberto - Historia De La Belleza - Antigüedad y proporción.

Relacione el texto de Eco con el de Gombrich y Rodríguez López en una


síntesis de no más de 600 palabras. Vuelque en ella su opinión sobre el
mismo.

En breves palabras, Eco detalla un trayecto histórico redondeando el concepto de


belleza, o “lo bello” y sus apreciaciones a través de las distintas etapas (sobre todo
enfatizando en las etapas griegas). A modo de aclaración, destaca que el concepto
de la belleza siempre estará sujeto a la morfología social de la época en la que nos
estemos situando, y su apreciación podrá variar de ser un concepto que avoque a
lo bueno, puro, o quizás todo lo contrario, dependiendo del contexto histórico.

En relación a los textos de Gombrich y Rodríguez López, en donde en el primero,


Gombrich narra los cambios técnicos que sufre el concepto artístico griego entre
los períodos arcaico, clásico y helenístico; y en el segundo, Rodríguez nos cuenta
las diferentes variantes y aproximaciones artísticas del mismo mito del Rapto de
Helena de Troya entre diferentes fechas históricas; se puede analizar cómo y por
qué el concepto de lo bello sufre deformaciones, necesarias o no, a medida que el
arte avanza. Si particularizamos en los períodos clásico y helenístico, notamos una
transición de una búsqueda de perfección estática y balanceada (consideradas
esas cualidades como la perfección o el canon de belleza del período) hacia una
imagen o escena donde el dinamismo y la alta afinación de detalles domina
completamente la vista. Una escultura como el Laocoonte, por ejemplo, no hubiese
sido contemplada con una pieza perfecta ni bella, más en el período helenístico,
gracias al enfoque de atención de la sociedad en la búsqueda y deseo de esas
obras, fue considerada como una de las obras más grandes producidas en la
Antigua Grecia. Esto puede ser un ejemplo de que no existe un ideal estético
general, sino que la idea de lo bello es subjetiva a quien se le cuestione.

Gran cantidad de sabios, eruditos y filósofos a lo largo de la historia, han intentado


dar con el significado correcto de la belleza, remarcando conceptos como
proporción, simetría, armonía, entre otros. Buscaron maneras de clasificar
distintas aproximaciones o categorías de belleza, como Sócrates dividiéndola en
belleza ideal, espiritual y útil. O Platón yendo más a fondo, afirmando que el arte no
puede ser considerado como una auténtica belleza, por no poseer la proporción
perfecta (en cambio, si apoyaba la “belleza de las formas geométricas”).

Conclusión: Todas estas ideas pueden adosarse a la palabra “belleza”, más no


podrían redondear un concepto, puesto que gracias a los ejemplos propiciados por
Rodríguez en su texto, esas múltiples facetas artísticas (desde una disposición
estática, sobria y tranquila, hasta una pintura que, a la vista común, se aprecia como
un total absurdo) crean el pilar que refuerza la teoría de que lo hermoso es hermoso
para quien lo mira con gusto y deseo y quiere poseerlo (Como Paris desea a Helena
de Troya, quien se considera maldecida por su belleza, siendo esta la causante de
múltiples desgracias) y no puede atribuírsele un concepto crónico.

Rodríguez López, R. I. - Helena de Troya - Iconografía griega e


intertextos.

(FRAGMENTO DEL PROGRAMA DE LA MATERIA)


Hablar del Diseño significa hablar de un Palimpsesto.

Cada decisión del alumno compromete un juicio histórico. El mismo puede


justificar las operaciones actuales o llevar implícita una crítica hacia el
devenir histórico. Esta intertextualidad (Kristeva; 1965) o architextualidad
(Genette; 1989) en un sentido amplio; tienen su germen en Bajtin, como se
desprende de los tópicos y planteamiento del escritor de dialogismo y
pluralidad de voces. Estos conceptos atraviesan toda la actividad del
Diseñador. En efecto la carrera supone un Saber Histórico desde los
aspectos formales y estéticos. Un Saber Histórico desde las tecnologías y su
evolución y un Saber de las prácticas proyectuales comunicativas en tanto
estas están insertadas en un determinado tiempo socio-cultural.

Dicho de otro modo, entenderemos el acto del diseño como “un cruce
de superficies textuales, un dialogo de varios autores: del ´Diseñador´,
del destinatario, del contexto cultural actual o anterior”. (Kristeva;
1981:188). Un dialogo Histórico.

1. Explique en un breve comentario que relación encuentra entre el


ensayo y la materia Historia de la Comunicación Visual.

El hecho de precisar estudiar la historia de la comunicación visual se justifica


porque un diseñador debe tener cubiertas todas las áreas del saber
comunicacional. La posibilidad de conocer el trayecto, adaptación y evolución de la
comunicación a través de la historia y poder analizarla, nos dará, tarde o temprano,
la facilidad de poder razonar y clasificar nuestros saberes y habilidades prácticas a
la hora de hacer frente al ámbito profesional, porque a falta de una experiencia
práctica propia, nos nutrimos de la experiencia previa del ser humano histórico,
pudiendo reconocer metodologías y, en este caso, los cánones o reglas artísticas y
comunicativas para lograr un mejor trabajo. En el texto de Rodríguez, vemos como
los artistas adaptan sus técnicas o “mensajes” a lo que su contexto socio-histórico
demanda. La idea es la misma, ya nadie puede inventarla, pero la interpretación del
mito del rapto de Helena de Troya será una elección totalmente subjetiva a la
época, teniendo como referencia los registros previos.

Módulo 4

Iconoclastas e iconódulos

El tema de la destrucción o de la adoración de las imágenes es un punto


fundamental para quienes trabajamos con ellas. En este punto vamos a
analizar tres artículos sobre el mismo:

Iconoclasia y «aniconismo»: correspondencias entre el mundo islámico y el


mundo cristiano de Alessandra Caputo Jaffe. Publicado en el JOURNAL OF
WORLD HISTORY Universitat Pompeu Fabra | Barcelona Número 2 (noviembre 2011)
www.upf.edu/entremons

Iconoclasmo e iconodulia entre Oriente y Occidente (siglos viii-ix) de Alfonso


Hernández Rodríguez publicado en Byzantion Nea Hellás 30, 2011: 75 – 84.

¡Oh, Las Imágenes! El Conflicto Iconoclasta bizantino Ziegler Delgado, María


Magdalena (2009): Nº 18. Marzo. Año XIII. Páginas: 31- 78.

1. Analice los puntos de coincidencia y divergencia entre ambos.


Escriba una síntesis de no más de 800 palabras citando, para
argumentar a los artículos.

En el transcurso de la historia religiosa y política, tanto la iglesia como los


emperadores o gobernadores han mostrado su opinión al respecto sobre el uso de
imágenes religiosas. Ambas posturas, la iconoclasta y la iconodulia, son conceptos
contrarios uno de otro, siendo la primera representando a aquellas personas que
buscaban (o, mejor dicho, apoyaban) la destrucción de las imágenes religiosas por
convicciones tanto religiosas, como políticas -o ambas- en relación a la simbología
de dichas piezas artísticas; por el contrario, la iconodulia apoya el uso de las
imágenes como símbolos de devoción, dignos de ser adorados.

Teniendo ambas definiciones a mano, a priori, no se lograría encontrar


coincidencias tan fácilmente, como encontraríamos divergencias. Sintéticamente,
en donde mayormente se enfrentan estas dos “ideologías” es en el resultado de la
utilización de las imágenes, puesto que, para los iconoclastas, la religión debía ser
practicada de manera mental y espiritual, sin otorgarle un sentido supremo a lo
material, por la razón de que la Verdad no podía ser representada por las personas
comunes y, de alguna manera, se estaría corrompiendo la idea sagrada. Agregando
un eje más político, la destrucción de los iconos denotaba en los pueblos
conquistados la superioridad de los emperadores, y cómo los subvertían sin un
total uso de la fuerza, demostrando su superioridad frente a figuras de gran
importancia para la sociedad.

“El objetivo de los emperadores iconoclastas era calmar la ira de Dios.” (Hernandez
Rodríguez, A., 2011, p. 76)

Para los iconódulos, por otra parte, las imágenes debían ser resguardadas y
utilizadas a modo educativo para quienes deseaban acercarse a la religión (o
imponerla), para ser veneradas en representación a la grandeza divina. Las
imágenes eran un vehículo de la realidad, no la realidad en sí misma, y por eso, no
desmerecían la sacralidad de su creencia ni de su dios, siendo este nombrado por
las escrituras divinas como el Primer Creador, que, sumado a lo anterior, daba
argumento a disponer la posibilidad en las personas creyentes a poder crear
semejanzas posteriores a las creadas por Cristo.

Como argumento interesante, dentro de otros, “San Juan Damasceno exclamaba


que “Tal vez ustedes sean sublimes y capaces de trascender lo que es material…
pero yo, que sólo soy un ser humano y cargo con un cuerpo material, deseo
relacionarme con cosas santas y contemplarlas de una manera corporal””. (Ziegler
Delgado, M.M., 2009, p. 58).
Conociendo un poco más este enfrentamiento ideológico, podemos asumir una
similitud en torno a que, tanto la iconoclastia como la iconodulia están fuertemente
ligadas a convicciones político-religiosas, por ser las iconografías las responsables
de establecer una imagen presencial del poder imperialista y eclesiástico. Quien
lograba controlar la imagen de poder, lograba implantar un estandarte de
superioridad, ya se por medio de la implementación del uso de los iconos, como
también la destrucción (o apropiación) de los mismos ya presentes.

2. ¿Cuál fue la influencia de la tradición Judaica e islámica en la visión


de los Iconoclastas?

En torno al judaísmo, en el texto de Hernández podemos leer el siguiente


fragmento:

“La religión iconoclasta es de difícil reconstrucción por el carácter fragmentario e


iconódulo de las fuentes que nos quedan. En principio, se puede decir que tenía
dos ejes centrales: la insistencia en el culto a la Santísima Trinidad y al espíritu
santo, con una insistencia menor en la persona de Cristo, cuya encarnación
justificaba para los iconódulos las representaciones. Por otra parte, el iconoclasmo
privilegiaba a la iglesia y al clero antes que el culto de los santos y los monjes.

… Esta característica es interesante puesto que acercaba el iconoclasmo a la


religiosidad carolingia. Pero además implicaba la concentración de lo sagrado en el
edificio eclesial y en la institución eclesiástica, mucho más fácilmente controlable
por el emperador.” (Hernandez Rodriguez, A. 2011, p. 77).

Por el lado de los islámicos, en el texto de Caputo observamos lo siguiente:

“La reticencia hacia la representación dependía en parte de contingencias


filosóficas, así como de los intereses políticos de los califas en particular. Era un
tema controversial, sobre todo cuando se trataba de la representación de seres
sagrados o de importantes imágenes religiosas y políticas.

…durante las guerras e invasiones se atacaba el símbolo de poder terrenal que


estos objetos representaban.
…Si bien ha habido momentos en los que, efectivamente, se aplicado una actitud
iconoclasta que arremete contra el patrimonio (cultural, artístico, etc.), debemos
tener en cuenta que se trata generalmente de campañas políticas expansionistas o
de sobreposición de un nuevo califato sobre uno antiguo. Entonces, la destrucción
del patrimonio del reino anterior, o del enemigo, se convierte más en una necesidad
política que en una religiosa. La religión, al estar intrínsecamente unida con el poder
político, se convierte generalmente en el estandarte que valida y justifica las
acciones imperiales y guerreras.” (Caputo Jaffe, A. 2011, p. 7, 8, 11).

Entre estos fragmentos se demuestra que, aunque la iconoclastia cumplía su rol de


dominio ideológico-religioso, no se puede negar que la destrucción de estos
símbolos tenía un carácter político y con fines subversivos sobre la sociedad,
dándoles, por decirlo de alguna manera, una excusa válida a los iconoclastas para
llevar a cabo sus estrategias de control social.

3. Trace un paralelismo con el actual estatuto de las imágenes; que


valor le damos hoy y aquí a las mismas. ¿existen Iconoclastas e
Iconódulos actualmente?

Hoy en día podemos encontrar iconoclastas e iconódulos en varias culturas y


sociedades. Gracias al desarrollo de las redes sociales, fundamentalmente, se nos
hacen presentes muchos más casos de los que podríamos haber detectado en la
etapa previa a la aparición de estas. Pero para entrar en detalle, vamos a situarnos
de dos ejemplos, uno previo al desarrollo de las redes sociales (del internet incluso)
y otro más contemporáneo.

1) Tanto en la primera como en la segunda guerra mundial, si uno se sienta a


estudiar las estrategias políticas de aquellas épocas, verá que hay un fuerte lazo
en ambas facetas, siendo iconoclastia, o iconodulia. La Propaganda política
podría situarse en cierta manera en el método iconódulo, utilizando a los medios
de comunicación, entre los que resaltaría la imprenta como vehículo de
divulgación de piezas visuales, utilizando obras de arte moderna para hacer
burla de su estética mostrando rostros reales de personas deformadas, por
ejemplo, a través del movimiento llamado “arte degenerado” (teniendo como
contrapropuesta el “realismo socialista” por parte de los rusos, ya más
aproximado a los años de la Guerra Fría, por otra parte). En lo que respecta a la
iconoclastia, y situándonos más en términos religiosos, una de las más
conocidas piezas arquitectónicas de Francia, la Catedral de Reims, fue víctima
de un atentado por parte del ataque de los alemanes en la Gran Guerra,
justificándose por ser, según ellos, un blanco inevitable por la altura de sus
torres. El gobierno de Francia, en ese entonces, defendió mediáticamente el
ataque por medio de una campaña conocida como “arte asesinada”.

2) Si nos queremos situar en un ejemplo más actual, podemos recurrir a los


movimientos sociales que involucran la separación de la iglesia y el estado, sin ir
más lejos. Se han visto “incidentes” o manifestaciones en donde, fuera de ser
un acto violento/agresivo o no, utilizan la destrucción o adulteración de
símbolos religiosos de baja o gran envergadura para manifestar el repudio frente
a este nexo político-religioso. Gracias al avance de la tecnología, en mi opinión,
podemos también tomar en cuenta las intervenciones a través del uso de
herramientas de diseño digitales, collages o ejemplos similares para tomar como
referencias de eventos iconoclásticos, aunque sean quizás un simbolismo más
inocente a la intervención de objetos tangibles. Por otra parte, es muy probable
que cualquier persona en general pueda ser o conozca a alguien cercano que,
en su espacio personal, en su casa, o donde fuere que le parezca, conserve
iconografía referente a su religión, ya sean estampillas, estatuillas o alguna
imagen enmarcada de Cristo (por nombrar alguno). Hasta la navidad y el
armado del pesebre, gran tradición en muchas familias, es un icono de la
religión cristiana que muchos practican, sin necesariamente ser seguidores o
creyentes, mucho menos ortodoxos.

Los ejemplos podrían ser interminables, ya que hoy en día la libertad de expresión,
por lo menos en líneas generales, abunda en nuestra sociedad. Esto siempre traerá
buenas y malas posturas, y la sensación de libertad de algunos corromperá la de
otros.

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