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Sindrome del Edificio Enfermo

Carlos Alberto Echeverri Londoño


Ingeniero Químico
MSc en Ingeniería Ambiental
PhD en Ingeniería Ambiental
Introducción
Un gran porcentaje de nuestro tiempo transcurre en
ambientes cerrados contaminados en mayor o
menor medida. Este ambiente cerrado puede ser
domestico y laboral. Dentro de estos últimos
podemos encontrar el ambiente laboral industrial y
el de los trabajadores de servicios (oficinas, bancos,
centros comerciales, etc.).
Introducción
En las últimas décadas se han presentado cambios
sustanciales en los edificios modernos:
⚫ Oficinas donde trabaja gran número de personas.

⚫ Consecuencia de diversos factores


socioeconómicos:
− En diseño.
− En técnicas constructivas.
− En generación de nuevos entornos de trabajo.
Introducción
El síndrome de edificio enfermo ha sido definido
por la Organización Mundial de la Salud (OMS)
como “un conjunto de enfermedades originadas o
estimuladas por la contaminación del aire en estos
espacios cerrados”.
Introducción
La Organización Mundial de la Salud estima que
hasta el 30% de los edificios de oficina pueden
tener problemas significativos, y que entre el 10 y
30% de los ocupantes de los edificios sufren
efectos de salud que están, o se perciben que
están, relacionados con una calidad de aire interior
deficiente.
Síndrome del Edificio Enfermo
El Síndrome del Edificio Enfermo es el término
adoptado por la Organización Mundial de la Salud
(OMS), en el que se define aquel en el que sus
ocupantes exponen quejas en cuanto a la salud en
más de un 20%, que no suelen ir acompañadas de
lesiones físicas u orgánicas, y cuyas causas son
difíciles de identificar.
Síndrome del Edificio Enfermo
Los ocupantes del edificio muestran síntomas como
estrés, depresión, eritemas, jaquecas, problemas
respiratorios, inflamación de la garganta o irritación
de los ojos, provocados por diversos factores
relacionados con el estado y las condiciones del
edificio en el que desarrollan su enfermedad.
Síndrome del Edificio Enfermo
Este síndrome se caracteriza por una serie de
síntomas que son comunes a otras enfermedades.
Lo que lo distingue de las demás es que los
síntomas desaparecen cuando se abandona el
edificio y lo normal es que afecte a varios de sus
ocupantes.
Síndrome del Edificio Enfermo
La Organización Mundial de la Salud
(OMS) diferencia entre dos tipos distintos de
edificio enfermo, los temporales y los permanentes.
Los edificios temporalmente enfermos incluyen
edificios nuevos o de recién remodelados y en ellos
los síntomas disminuyen y desaparecen con el
tiempo, aproximadamente medio año.
Síndrome del Edificio Enfermo
Los edificios permanentemente enfermos son
aquellos en los cuales los síntomas persisten, a
menudo durante años, a pesar de haberse tomado
medidas para solucionar los problemas.
Síndrome del Edificio Enfermo
Según la OMS, estos edificios tienen una serie de
características comunes:
− Casi siempre tienen un sistema de ventilación
forzada que generalmente es común a todo el
edificio o a amplios sectores y existe recirculación
parcial del aire.
− Con frecuencia son de construcción ligera y poco
costosa.
Síndrome del Edificio Enfermo
− Las superficies interiores están en gran parte
recubiertas con material textil o papel, incluyendo
paredes, suelos y otros elementos de diseño
interior, lo cual favorece una elevada relación
entre superficie interior y volumen.
− Se mantienen relativamente calientes con un
ambiente térmico homogéneo.
− Se caracterizan por ser edificios herméticos en los
que las ventanas no pueden abrirse.
Síndrome del Edificio Enfermo
− Algunos edificios tienen las entradas para la
renovación del aire en lugares inadecuados.
Otros usan intercambiadores de calor que
transfieren los contaminantes desde el aire de
retorno al aire de suministro.
Síndrome del Edificio Enfermo
Entre las causas de este síndrome, encontramos
causas de origen físico, químico y biológicas. Se
estima en un 37% las bajas laborales derivadas del
síndrome del edificio enfermo.
Síndrome del Edificio Enfermo
Son señales del síndrome del edificio enfermo:
− La presencia de síntomas agudos, como irritación
de ojos, nariz y garganta, sequedad de piel, tos,
ronquera y respiración sibilante, náuseas y
mareos, dificultad de concentración, cansancio y
sensibilidad a los olores.
− El hecho de que la mayor parte de las molestias
desaparezcan poco después de abandonar el
edificio.
Síndrome del Edificio Enfermo
− El desconocimiento de la causa: los síntomas no
pueden ser atribuidos a una enfermedad
contraída fuera del edificio, ni a ningún tipo de
hipersensibilidad o alergia, ni a estrés o
insatisfacción relacionados con el trabajo, ni a
otros factores psicosociales. Aun así, se ha
comprobado que los síntomas se relacionan con
la calidad del aire interior.
Efectos en la Salud
La queja más común tiene que ver con la
temperatura, el aire está demasiado caliente o
demasiado frío. La segunda queja más común
tiene que ver con el movimiento de aire, el aire
tiene corrientes o está demasiado quieto.
Otras quejas comunes relacionadas con la
comodidad tienen que ver con la humedad, el aire
está demasiado seco o demasiado húmedo.
Efectos en la Salud
El síntoma más común de este síndrome es el
cansancio que empieza a las pocas horas de iniciar
a trabajar y desaparece a los pocos minutos de
dejar el edificio.
El dolor de cabeza es no migrañoso, generalizado y
con pesadez. La nariz se tapa, la rinitis y el flujo
nasal son menos frecuentes, también se presenta
sequedad de la garganta y los ojos secos.
Efectos en la Salud
En general, los síntomas más comunes son:
− Irritaciones de ojos, nariz y garganta.
− Sensación de sequedad en membranas, mucosas
y piel.
− Ronquera.
− Respiración dificultosa.
− Eritemas.
− Comezón.
− Hipersensibilidades inespecíficas.
Efectos en la Salud
− Náuseas, mareos y vértigos.
− Dolor de cabeza.
− Fatiga mental.
− Elevada incidencia de infecciones respiratorias y
resfriados.
Efectos en la Salud
Los factores asociados con una mayor probabilidad
de quejas incluyen muebles nuevos, actividades de
remodelación no controladas, una mala circulación
de aire y la humedad persistente.
Factores de Riesgo
La propia respiración y transpiración humana, el
polvo, los materiales de construcción, bacterias,
hongos, el polen, el humo de tabaco, olores
provocados por gases y vapores, sustancias
químicas, los muebles, los pesticidas, una mala
iluminación o un alto nivel de ruido, radiación
electromagnética, la temperatura, la humedad, las
vibraciones de las máquinas instaladas en el
edificio o problemas de ventilación entre otros.
Factores de Riesgo
El agua estancada y la humedad potencian el
crecimiento de hongos y bacterias. El ruido y las
vibraciones constituyen dos de los contaminantes
físicos que más afectan a los ocupantes de estas
construcciones.
Factores de Riesgo
El sistema de aire acondicionado, además de su
capacidad de reciclar los contaminantes por todo el
ambiente en su función de retorno, constituye un
hábitat adecuado por razones de humedad,
oscuridad y temperatura para la proliferación de
hongos, virus, bacterias y ácaros que pudieran ser
incorporados al sistema por algún portador
contaminado.
Factores de Riesgo
Las luces fluorescentes suelen permanecer
encendidas de forma continua. Las lámparas
destellan a una velocidad que no percibe el ojo
pero que hace que estar bajo ellas durante varias
horas de lugar a dolores de cabeza.
Factores de Riesgo
Es fácilmente detectar un único factor responsable
del malestar, pero si actúan varios y sobre todo si
lo hacen de forma intermitente, se hace más difícil
su detección.
Factores de Riesgo
Los factores de riesgo para desarrollar el síndrome
del edificio enfermo relacionados con el edificio
son:
− Problemas de mantenimiento y limpieza.
− Equipos de oficina modernos.
− Grandes áreas de archivos (papel) próximas al
personal.
− Ventilación artificial.
− Edificios grandes.
− Controles ambientales centralizados, no locales.
Factores de Riesgo
− Edificios viejos o recientemente remodelados.
− Amplias zonas de alfombras y/o revestimientos.
− Paredes en drywall y durapanel.
Modo de Prevención
Hay tres medidas que reducen la probabilidad de
problemas con la calidad de aire interior, un buen
diseño del edificio, un mantenimiento efectivo del
sistema de ventilación (climatización) y una
remodelación inteligentemente.
Modo de Prevención
Se recomienda que se inspeccionen las distintas
áreas del edificio en busca de puntos de mal
funcionamiento de la ventilación, un diseño
defectuoso o una contaminación obvia; y que se
determine el caudal de aire, la temperatura, la
humedad, las concentraciones de dióxido de
carbono, y las diferencias de presión en diferentes
áreas del edificio.
Modo de Prevención
La información recopilada, puede revelar
problemas locales de funcionamiento del sistema
de ventilación que pueden ser corregidas con poco
esfuerzo. Aparte, el sistema de ventilación debe ser
sometido a un programa de inspección y
mantenimiento regular. También se requiere una
cuidadosa limpieza y control de insectos de todo el
edificio.
Modo de Prevención
Antes de iniciar una remodelación, se debe exigir
que los materiales y procedimientos utilizados
minimicen los contaminantes llevados por el aire.
Cuando sea factible se debe minimizar el impacto,
por ejemplo pintar en vacaciones o hacer cambios
para que el sistema de ventilación del área
remodelada quede aislada del resto del edificio.
Modo de Prevención
Si se cambian de sitio las paredes, o el número de
ocupantes cambiada en gran medida, se debe
adaptar el sistema de ventilación para los nuevos
requisitos.
Modo de Prevención
La limpieza y desinfección de los conductos de aire
acondicionado del polvo y las partículas nocivas
que se acumulan en ellos es fundamental para
mantener un sistema de aire acondicionado en
buen estado y evitar el síndrome del edificio
enfermo.
Modo de Prevención
La resolución del síndrome del edificio enfermo
conlleva habitualmente varias medidas que pueden
resumirse en:
− Eliminación o modificación de la fuente
contaminante (restricción de fumar, limpieza
periódica de filtros, cambios de pinturas y
alfombras, almacenamiento de potenciales
tóxicos sólo en salas ventiladas, empleo de ellos
cuando el edificio esté más vacío…).
Modo de Prevención
− Mejorar la ventilación. Las concentraciones de
dióxido de carbono elevadas en un edificio
indican que no se está intercambio suficiente aire
exterior “fresco” con el aire interior “utilizado”,
permitiendo de esa manera la acumulación de
otros contaminantes. Se debe garantizar una
ventilación mínima por persona de 0.42 m3/min
(0.56 m3/min en oficinas). Es preferible hacer la
ventilación de forma natural.
Modo de Prevención
− Se debe corregir una pobre, inapropiada o
excesiva iluminación. Un nivel de iluminación
bajo, un contraste insuficiente, los brillos
excesivos y los destellos pueden causar estrés
visual generador de irritación de ojos y dolores
de cabeza. El uso prolongado de computadores
requiere una iluminación particularmente bien
diseñada.
Modo de Prevención
− La luz natural es vital. La excesiva iluminación
genera reflejos en las pantallas de trabajo,
afectando la visión y provocando dolores de
cabeza. Se debe mejorar la iluminación interior
usando luz natural difusa.
− Se debe evitar la contaminación
electromagnética.
− Se deben evitar diferencias térmicas entre las
distintas oficinas.
Modo de Prevención
− La exposición al ruido debe ser controlada. Para
una jornada de ocho horas diarias ningún
trabajador puede tener un nivel de presión
sonora equivalente a 85 dB(A). Si el ruido es
superior, se debe limitar la exposición y el
empleador debe tomar medidas de seguridad.
Modo de Prevención
− Conviene mantener los niveles de presión sonora
por debajo de 50 dB(A), valor recomendado
como confortable ya que valores superiores
pueden producir fatiga. Sin embargo la
naturaleza del ruido es un factor importante. Así,
los infrasonidos, los ruidos de baja frecuencia y
los tonos puros pueden causar irritabilidad y
molestias.
Modo de Prevención
− Las edificaciones deben prever la protección
acústica ante el impacto del ruido provocado por
los medios de transporte (tráfico vehicular,
ferroviario y aéreo).
− Las vibraciones producidas en las cercanías de un
edificio o debidas a máquinas instaladas en el
mismo también pueden afectar.
Modo de Prevención
− Los procesos de humidificación causan serios
problemas y han de ser vigilados
cuidadosamente. No existe acuerdo sobre cuál es
el intervalo ideal de humedad relativa aunque el
más generalizado se fija entre el 20 y el 60%
(preferiblemente del 30 al 50%). Niveles muy
altos de humedad (por ejemplo >70%) favorecen
el incremento de hongos y otros contaminantes
microbiológicos mientras que niveles inferiores al
30% ocasionan sequedad en las membranas
mucosas.
Conclusiones
Un “edificio enfermo” puede incluir gran cantidad
de empleados enfermos, ausentismo, baja
productividad, baja satisfacción laboral y alta
rotación de empleados.
Conclusiones
Por esto, es importante tratar el problema a tiempo
y como primer paso enfocarse en el tratamiento y
solución del problema realizando una evaluación de
los mecanismos de ventilación del lugar, limpiar los
ductos de aire, proteger muebles y equipos, y
realizar el aseo en un horario en que no estén los
trabajadores.

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