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Unidad 1.
Actividad 2
El anemómetro o anemógrafo es un aparato meteorológico utilizado para medir la velocidad del viento y así
ayudar en la predicción del tiempo. Es también uno de los instrumentos básicos en el vuelo de aeronaves más
pesadas que el aire.
Alcance
Este proyecto comprende el diseño e instalación de una torre de medición eólica de 80m de altura, detallando
los principales componentes que forman parte de ella. Analizaremos los tipos de estructuras y sensores que
existen en el mercado par poder medir diferentes variables meteorológicas, a diferentes alturas, necesarias
para realizar una auditoría de recurso eólico y valorar si es viable o no construir un parque eólico.
Antecedentes
El viento resulta de la expansión y convección del aire provocadas por las diferentes absorciones de la energía
solar de la Tierra. A escala global, estos efectos térmicos se combinan con efectos dinámicos debidos a la
rotación terrestre dando lugar a la circulación general atmosférica. Además de esta situación a gran escala, se
dan importantes variaciones locales y temporales causadas por factores geográficos y climatológicos. Así pues,
el viento, al considerarlo como recurso energético y desde el punto de vista de su disponibilidad como
suministro, tiene sus características específicas: es una fuente con sustanciales variaciones temporales, a
pequeña y gran escala de tiempo, y espaciales, tanto en superficie como en altura, contando además con una
componente aleatoria que afecta en gran parte a su variación total. Al mismo tiempo, hay que considerar que
la energía eólica disponible por unidad de área expuesta al viento es proporcional al cubo de la velocidad, por
lo que pequeñas variaciones en la velocidad del viento conllevan sensibles variaciones en la energía
suministrada. Las características del viento influyen de forma importante en varias áreas de trabajo
relacionadas con los sistemas de aprovechamiento de la energía eólica: - En la selección del emplazamiento
más favorable para la instalación de los sistemas eólicos, dadas las acusadas diferencias locales del viento. -
En la estimación o previsión de la producción energética y del funcionamiento global del sistema eólico, donde
se consideran valores medios de viento y distribuciones - En el diseño del sistema, donde se tienen en cuenta
las condiciones medias representativas y condiciones extremas de viento.
- En la operación y regulación del sistema eólico, donde intervienen aspectos como la predicción del viento
para planificar el funcionamiento en tiempo real, así como características del viento que influyen en la
estrategia de operación (arranque, parada, orientación, etc.) y factores que afectan al mantenimiento o vida
útil del sistema (ráfagas, turbulencias, etc.).
Estas propiedades hacen que la evaluación y caracterización del viento como fuente de energía sea un área de
trabajo de especial importancia en el aprovechamiento de la energía eólica, de tal modo que el conocer el
régimen de vientos al que va a estar sometido un sistema eólico, es necesario tanto para optimizar las
aplicaciones energéticas como para predecir las condiciones de operación y funcionamiento. Para conocer con
la máxima fiabilidad el recurso eólico de un emplazamiento es imprescindible tener medidas de velocidad del
viento, dirección, temperatura y otras variables, in situ, a lo largo de un periodo mínimo de 12 meses. Debido
a los recortes de las primas a las renovables anunciadas recientemente, las rentabilidades de los parques
eólicos se han visto reducidas drásticamente. La facturación de este tipo de instalaciones es proporcional a la
energía producida, la cual depende directamente de la potencia del viento. Es pues de gran importancia
estimar correctamente el recurso eólico para analizar la viabilidad de un nuevo parque eólico. En la actualidad
para poder financiar un parque eólico, entre varios requisitos, se exige que la campaña de medición debe ser
acorde la norma IEC 61400-12-1
Los componentes que forman parte de la torre de medición y que iremos definiendo a
lo largo del proyecto los podemos diferenciar en cuatro bloques.
Instrumentación Alimentación
Sensores Generador
Cableado de datos Regulador
Batería
Sistema Adquisición de Datos
Sistema de telemetría
Protecciones Estructura
𝐸 = 1 · ρ · 𝑣2
2
La energía que fluye por unidad de tiempo, o potencia eólica disponible en una
sección de área A perpendicular a la corriente de aire con velocidad v será el flujo de
energía cinética, es decir,
1 1
𝑃𝑑 = · 𝜌 · 𝐴 · 𝑣2
2 ·𝑉 = · 𝜌 · 𝐴 · 𝑣3
2
En resumen, la potencia disponible en las masas de aire en
movimiento es directamente proporcional a la densidad, al área
perpendicular enfrentada al viento y alcubo de la velocidad. En unidades del
S.I, dicha potencia vendrá expresada en W.
Por ejemplo, tomando una densidad estándar del aire al nivel del mar =1.225
kg/m3
, tenemos:
v (m/s) Pd (W/m2)
5 76
6 132
7 210
de potencia disponible en función de la velocidad
Una estación meteorológica es una instalación destinada a medir y registrar regularmente diversas
variables meteorológicas. Estos datos se utilizan tanto para la elaboración de predicciones
meteorológicas a partir de modelos numéricos como para estudios climáticos.
Una veleta es un dispositivo giratorio que consta de una placa que gira libremente, un señalador
que indica la dirección del viento y una cruz horizontal.
Los servicios de recogida almacenan los datos de cada recogida en un solo objeto de recogida, a
partir del que se puede crear la cantidad que se necesite de conjuntos diferentes de archivos de
base de datos.
¿QUE SON?
Los anemómetros miden la velocidad instantánea del viento, pero las ráfagas de viento desvirtúan
la medida, de manera que la medida más acertada es el valor medio de medidas que se tomen a
intervalos de 10 minutos. Por otro lado, el anemómetro nos permite medir inmediatamente la
velocidad pico de una ráfaga de viento. Por lo que en actividades deportivas a vela es muy indicado.
Existe gran diversidad de anemómetros:
Los de empuje están formados por una esfera hueca y ligera (Daloz) o una pala (Wild), cuya posición
respecto a un punto de suspensión varía con la fuerza del viento, lo cual se mide en un cuadrante.
El anemómetro de rotación está dotado de cazoletas (Robinson) o hélices unidas a un eje central
cuyo giro, proporcional a la velocidad del viento, es registrado convenientemente; en los
anemómetros magnéticos, dicho giro activa un diminuto generador eléctrico que facilita una
medida precisa.
El anemómetro de compresión se basa en el tubo de Pitot y está formado por dos pequeños tubos,
uno de ellos con orificio frontal (que mide la presión dinámica) y lateral (que mide la presión
estática), y el otro sólo con un orificio lateral. La diferencia entre las presiones medidas permite
determinar la velocidad del viento.
Sin embargo, los anemómetros económicos no resultan de utilidad en las mediciones de la velocidad
de viento que se llevan a cabo en la industria eólica, dado que pueden ser muy imprecisos y estar
pobremente calibrados, con errores en la medición de quizás el 5 por ciento, e incluso del 10 por
ciento.
¿COMO SON?
El anemómetro, por la forma de su modelo más conocido, puede ser confundido con una veleta,
pero esto es un error, ya que la veleta solo determina la dirección del viento y no la velocidad en
que se desplaza.
¿DONDE SE ENCUENTRAN?
Las referidas veletas, cuyo origen se remonta a la época clásica, sólo permiten conocer de dónde
sopla el viento: su dirección de procedencia o rumbo, pero no su intensidad (el módulo). El
instrumento que permite medirla es el anemómetro. A mediados del siglo XV, el arquitecto y
matemático italiano León Battista Alberti (1404-1472) inventó el primero de ellos, aunque tuvieron
que transcurrir cuatro siglos más para disponer del clásico anemómetro de cazoletas, que es el más
utilizado en el mundo. Existen anemómetros de otros tipos, más sofisticados y basados en distintos
principios físicos, que son igualmente fiables y precisos.
Como el anemómetro mide la velocidad del viento, su empleo es de mucha utilidad para un sin fin
de tareas, como la pesca; el vuelo de aeronaves, desde los más grandes aviones y helicópteros, hasta
los drones más pequeños; la meteorología; la agricultura; entre otras.
Toda actividad que precise el uso del viento o que sea necesario un rango específico de velocidad
del mismo, se verá beneficiada y facilitada con el uso de un anemómetro para conocer
específicamente la fuerza del viento.
COMO FUNCIONAN
El tipo de anemómetro más utilizado se podría decir que es el de cazoletas, el cual hace el cálculo
de la velocidad del viento contando el número de vueltas que se registran, expresándolos en metros
por segundo (m/s).
Otro tipo de anemómetro es el de filamento caliente, que se usa principalmente ante cambios de
velocidad muy repentinos. Este tipo de anemómetro consiste en el calentado de un hilo de níquel o
de platino de manera eléctrica, que cuando recibe ráfagas de viento genera cambios en la
temperatura del filamento aportando así los datos requeridos.
De esta forma tendremos una lectura, pero si queremos que lo datos sean de un promedio será
necesario exponer el aparato durante unos recomendados 10 minutos, para tener un buen margen
de cálculo, ya que si pruebas la velocidad del viento unos pocos segundos puede que midas solo una
ráfaga de aire y no la corriente constante que es lo importante.
PARTES DE UN ANEMÓMETRO
Una hélice que rota sobre una “b” y se enlaza en la parte superior del equipo por un cableado largo.
La otra parte del anemómetro es un dispositivo analógico que se encarga de recoger y procesar los
datos registrados en un período de tiempo determinado.
Dichos anemómetros son equipos fabricados con materiales resistentes, ya que estarán expuestos
a situaciones meteorológicas de fuertes rachas de viento, por lo que debe garantizar su óptimo
funcionamiento.
|conclusiones
Conclusiones
En conclusión, puedo decir que el anemómetro es muy útil en la vida diaria, así como en casos más
complejos y de mayor importancia, nos ayuda a tener una vida más segura y estar informados y es
muy fácil de realizar en casa, aprendimos cosas que antes no sabíamos y nuestras dudas fueron
resueltas.
Bibliografía