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LIMPIEZA HEPÁTICA Y DE VESÍCULA

La limpieza del hígado y de la vesícula, así como la eliminación de los cálculos biliares, es uno de los
más importantes y convincente tratamientos para mejorar la salud. Esta limpieza requiere de seis días
de preparación y luego de veinte horas más, aproximadamente, para expulsar los cálculos.

Para el tratamiento se requiere de lo siguiente:

-Seis litros de extracto de jugo natural de manzana (un litro diario por seis días) o, en su defecto,
jugo bien concentrado sin preservantes.
- Cuatro cucharas soperas (60 mg) de Sales de Epson (sulfato de magnesio), disueltas en cuatro
vasos de 250ml de agua (un litro), para la parte final del tratamiento.
- Un vaso de 250ml de jugo natural de toronja para el sexto día.
- Un medio vaso de aceite de oliva extravirgen para el sexto día.
Preparación:

Hay que tomar un litro diario de extracto de jugo de manzana natural, recién preparado, durante seis
días seguidos (ejemplo de lunes a sábado).

De lunes a viernes tomaremos el litro de extracto de manzana de la manera siguiente (como referencia):

- ¼ de litro (250 ml), 30 minutos antes del desayuno

- ¼ de litro (250 ml), aproximadamente a las 11h00
- ¼ de litro (250 ml), aproximadamente a las 16h00
- ¼ de litro (250 ml), aproximadamente a las 18h00
El sexto día, sábado, tomaremos el litro de extracto de manzana de la manera siguiente (como
referencia):

- ¼ de litro (250 ml), 30 minutos antes del desayuno

- ¼ de litro (250 ml), aproximadamente a las 10h30
- ¼ de litro (250 ml), aproximadamente a las 11h00
- ¼ de litro (250 ml), aproximadamente a las 11h30
- Posteriormente seguiremos las indicaciones detalladas más adelante para el sexto día.

El jugo de manzana tiene un gran efecto depurativo pero además por su contenido de ácido málico
ablanda los cálculos y facilita su paso por los conductos biliares. Algunas personas sensibles pueden
experimentar inflamación y, en algunas ocasiones, diarrea durante los primeros días. Gran parte de la
diarrea es en realidad bilis estancada que se libera del hígado y la vesícula como resultado de la

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fermentación del jugo de manzana que dilata los conductos biliares y facilita la expulsión. El jugo de
manzana debe tomarse separado de comidas: mínimo una media hora antes o una hora después de las
mismas y se recomienda acabarlo hasta las 18h30 y no tomarlo por la noche. Además durante la
limpieza se tomara diariamente suficiente agua (de 6 a 8 vasos)

Dieta recomendada:

Durante la semana de preparación y limpieza no se deben tomar alimentos ni bebidas frías o heladas ya
que contraen los conductos biliares y restan eficacia al tratamiento. También se debe evitar todo
alimento de origen animal como son los embutidos, carnes en general, leche, huevos (seguir una dieta
vegetariana). No consumir frituras, café, colas, ni platos muy condimentados, por lo demás se puede
seguir la dieta normal pero sin comer en exceso.

Momento idóneo para realizar la parte final de la limpieza:

Es aconsejable realizar el final de la limpieza del hígado un fin de semana, cuando no se está
presionado por el horario laboral y se tiene suficiente tiempo para descansar (sábado y domingo).

Si se están tomando medicamentos:

Durante el proceso de limpieza hepática no deben tomarse medicamentos, vitaminas o suplementos que
no sean absolutamente necesarios. Es importante no sobrecargar al hígado con esfuerzos adicionales
que interfieran con el proceso de limpieza.

Limpieza de Colon y Riñones:

Si nunca se ha realizado una limpieza de colon y de riñones es importante hacerlo, previo la primera
limpieza hepática, durante 4 días seguidos (por ejemplo de lunes a jueves). Para el colon lo hacemos
con sales de Epson (sulfato de magnesio): tomamos diariamente un vaso de agua tibia con dos
cucharitas cafeteras (10 ml) de sulfato de magnesio. Teniendo en cuenta que luego de tomar el
preparado evacuaremos varias veces en el lapso de una hora y media, escogeremos el horario que más
nos convenga para su ingesta: ya sea por la mañana apenas nos levantamos o bien al final de la tarde
retornando del trabajo. Durante estos cuatro días también limpiamos los riñones tomando diariamente,
por pequeñas cantidades, un litro de aguas diuréticas ej.: Chancapiedra + Cola de Caballo + Taraxaco, o
podemos comprar en los almacenes de productos naturales el paquete de “hierbas rompe cálculos” por
sus propiedades diuréticas. Luego de haber limpiado el colon y los riñones, entonces si podemos luego
proceder a la semana de la primera limpieza hepática. Un día después de la misma haremos una jornada
adicional de limpieza de colon y riñones.

Para las posteriores limpiezas hepáticas se limpiará previo el colon y los riñones 2 días antes y 1 día
después de las mismas.

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La limpieza del colon 2 días antes de una limpieza hepática contribuirá a evitar o minimizar toda
molestia o náusea que pueda surgir durante el tratamiento: evita el reflujo de la mezcla de aceite con
jugo de toronja (que se toma el sexto día) o de productos residuales del tracto intestinal al estómago, a
la vez que ayuda al cuerpo a eliminar “sin obstáculos” los cálculos biliares que se expulsan por vía
colónica.

La limpieza de colon un día después del tratamiento permite eliminar pequeños cálculos residuales que
hubiesen podido quedar en el intestino grueso luego de la limpieza hepática.

La limpieza renal dos días antes y un día después de la limpieza hepática ayuda a excretar algunos
residuos microscópicos que se expulsan por orina.

Otros métodos de limpieza colónica son los enemas “caseros” a base de café y/o manzanilla o la
irrigación del colon realizada por un profesional (hidroterapia de colon), este último siendo el método
más rápido y fácil de prepararse para la limpieza hepática.

El sexto día (ejemplo el sábado):

Este día hay que tomar el litro de jugo de manzana en el transcurso de la mañana, como indicado al
inicio del documento. Es importante tomar un desayuno ligero evitando azúcar, edulcorantes,
mermeladas y pastelería. El almuerzo se lo debe tomar a las 12h30 o 13h00 a más tardar y se
recomienda comer menú vegetariano ligero. Insistimos, no deben tomarse alimentos proteicos de
origen animal, evitar frituras, mantequilla y grasas. Después del almuerzo, hasta el domingo a
mediodía, no hay que comer nada, solamente tomaremos agua y ningún otro tipo de bebida.

● A las 18h00: Preparar una jarra con cuatro vasos de agua de 250 ml (un litro en total) más
cuatro cucharas soperas (60 mg en total) de Sales de Epson. Mezclar bien y tomar el primer
vaso inmediatamente. Acto seguido se puede tomar un poco de agua normal para neutralizar el
sabor amargo. Una de las principales acciones de las Sales de Epson consiste en dilatar los
conductos biliares, lo que facilita, posteriormente, el paso de los cálculos biliares. Lógicamente
también depurará el colon y por ello tendrá, tiempo más tarde, deposiciones líquidas
● A las 20h00: Tomar el segundo vaso de agua con Sales de Epson y seguido un poco de agua
normal.
● A las 21h45: Estamos listos para ir a la cama (con el pijama o con lo que usted acostumbra
llevar para dormir). Preparamos un vaso de jugo de toronja (250 ml) bien cernido, es decir sin
su pulpa, y lo mezclamos con medio vaso de aceite de oliva extravirgen en un recipiente
hermético que quepa todo. Agitar fuertemente unas veinte veces y tomar de una sola vez todo el
contenido.
● A las 22h00: Nos acostamos inmediatamente con dos almohadas de tal manera que la cabeza
esté más alta que el abdomen. Apagamos luz, televisión, radio, celulares, no conversamos con
persona alguna, en fin nada debe perturbarnos, es el momento reservado para nuestra salud.

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Posteriormente debemos dejarnos llevar por el sueño y dormir. Sólo nos levantaremos si en
algún momento de la noche se siente la necesidad urgente de evacuar y por ningún otro motivo.
Es posible que por la noche o a primera hora de la mañana se sientan náuseas; esto se debe la
mayoría de las veces a la salida masiva y repentina de cálculos biliares y toxinas del hígado y la
vesícula, lo que hace que la combinación de jugo de toronja y aceite de oliva refluya al
estómago. Las náuseas remitirán poco tiempo después.
A la mañana siguiente (ejemplo domingo):

● A las 06h00: Tomar el tercer vaso de agua con Sales de Epson y seguido un poco de agua
normal. Luego hay que descansar, leer o meditar. Si se tiene sueño puede meterse nuevamente
en la cama, aunque es mejor permanecer erguido.
● A las 08h00: Tomar el cuarto y último vaso de agua con Sales de Epson y seguido un poco de
agua normal.
● De 09h00 a 11h00: Seguimos tomando un poco de agua
● A las 12h00: Ya podemos comer un almuerzo ligero.
● La tarde o a la mañana siguiente, se debería sentir los primeros síntomas de mejoría. Conviene
seguir tomando comidas ligeras ya no forzosamente vegetarianas el domingo y lunes. Hay que
recordar que el hígado y la vesícula biliar han pasado por una “operación” biológica importante,
aunque sin los efectos secundarios perjudiciales o los gastos que conlleva una intervención
quirúrgica.
Nota: conviene beber agua siempre que se tenga sed, excepto justo después de beber la mezcla de jugo
de toronja con aceita de oliva.

Qué resultados esperar:

El domingo final de la limpieza hepática, después de las seis de la mañana, hasta incluso la tarde, se
tendrán deposiciones líquidas con cálculos biliares. La mayoría de éstos son de color verde guisante y
flotan en el inodoro. No se sufrirán espasmos ni dolor alguno al expulsarlos, pues gracias al magnesio
de las Sales de Epson, las válvulas del conducto biliar quedan muy abiertas y relajadas, y la bilis que
sale, removiendo las piedras, mantiene los conductos biliares bien lubricados.

Los cálculos biliares pueden tener varios tamaños, colores y formas. Las piedras de color claro son las
más recientes, y las de color verde oscuro son las más antiguas; otras tienen un color pardo o blanco y
se trata de cálculos de colesterol calcificados, que tienden a irse al fondo del inodoro. Algunas son del
tamaño de una arveja o más pequeñas, y otras miden hasta 2,5 cm de diámetro. Pueden salir de una sola
vez docenas y, a veces, incluso cientos de piedras.

A fin de recuperarnos de las diversas dolencias de salud, alergias, dolores de espalda, estreñimiento,
etc… y para prevenir enfermedades, es preciso eliminar todos los cálculos biliares. Para ello, se puede
necesitar de 6 a 8, o más, limpiezas hepáticas que se realizaran en intervalos de tres semanas.

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Es importante recordar que, una vez iniciada la limpieza hepática, es preciso seguir con ella hasta que,
en dos limpiezas consecutivas, no se expulse más piedras. Si nos quedamos “a medio camino” puede
llegar a sentirse más molestias que si no se hubiera hecho nada.

Imágenes de Cálculos expulsados durante la limpieza hepato-vesicular

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